Fueron momentos muy tensos los que se vivieron en aquella sala, Syaoran miraba tan penetrante y fríamente a aquel anciano, que su madre se quedo en cierta medida sorprendida, puesto que él jamás había actuado de una manera tan agresiva.

- Responde anciano ¿por que la dejaste tomar mi lugar? – los ojos del castaño no se apartaron un solo instante de la figura del viejo, que parecía ciertamente dudoso de contestar a la pregunta.

- Tus poderes son más sorprendentes de lo que imagine… – aunque evadiéndolo, le respondió al fin, sonriéndole con cierto desazón – veo que ya adquiriste la habilidad de leer las mentes de los demás.

- Si, y yo veo que tu muy astutamente has bloqueado la tuya… – respondió sarcástico, definitivamente su madre estaba anonadada por las revelaciones, pero mas que eso por la conducta despectiva de su hijo – mas sin embargo eh podido ver lo suficiente a través de tus ojos como para darme cuenta de todo lo que esta pasando en este mundo.

- Si lo sabes, comprenderás nuestra situación… – el anciano trataba de recuperarse y recobrar la compostura perdida – y entenderás que debíamos tomar medidas emergentes para la catástrofe que se avecinaba.

- No, de hecho no lo entiendo… – su semblante de seriedad absoluta no vario un solo ápice – ustedes engañaron a Sakura haciéndole creer que era alguien que en realidad no es, y le han obligado a cumplir una tarea que no era suya y por lo tanto no debía cumplir.

- Lo que hicimos fue por el bien de toda la dimensión mágica… – respondió enérgicamente el anciano – por mas que buscamos al elegido, el oráculo jamás nos pudo mostrar su localización, ni siquiera sabíamos si este realmente existía, la cuenta regresiva seguía su marcha y nuestra única salvación era esa niña, era la única con un poder mágico similar al tuyo.

- ¡Ya basta de misterios! – grito exasperada Nadeshico, pues al igual que Yelan, cada vez entendía menos lo que estaba ocurriendo ahí – exijo una explicación en este mismo momento…

- Si Syaoran¿explícanos que es lo que esta pasando? – consecuentó la madre del castaño, quien empleo algo de severidad en sus palabras para dirigirse a él.

- Yo les explicare lo que sucede… – de entre una de las paredes de cristal que recubrían aquel salón circular, surgió una figura conocida, era una elegante mujer de largos cabellos castaños rojizos, la cual se encamino con pasos calmos hasta el centro del salón, para posteriormente dirigirse a todos los importantes personajes que se habían reunido en aquel lugar .

Capitulo 19

Venciendo al destino

- Kaho... – pronuncio mas que sorprendida la hermosa mujer de cabellos grisáceos – n-no entiendo... ¿tú que tienes que ver en todo esto?

- Mas de lo que imagina su majestad – confeso la profesora – pues durante todo este tiempo yo eh sido la encargada de resguardar la seguridad de la princesa, el consejo de ancianos me pidió que me hiciera cargo de ella cuando nos enteramos que los cazadores estaban tras su pista, fue por esa razón que entre a trabajar como profesora en su colegio.

- A través la señorita Mizuki, persuadimos a la directora de la academia Read para que Sakura fuese a vivir al mundo humano y esta a su vez los convenció al rey y a usted majestad... – corroboro la cabeza del consejo de ancianos – necesitábamos asilarla, ya que durante años los hechiceros malignos han estado a la caza de las presencias mas fuertes del mundo de la magia, despojándolos de sus poderes e intentando con ello traer de vuelta a la bestia que hasta ahora permanecía sellada, para que el Caos reine nuevamente...

- ¿Puedo saber por que no se me informo de esto cuanto antes? – dijo la peliplateada ligeramente exaltada – ¡por piedad, era la seguridad de mi hija el que estaba en juego, Fujitaka y yo debimos haber sido informados inmediatamente de lo que estaba ocurriendo!

- Si no se les informo fue porque el consejo no lo creyó prudente – respondió con la misma quietud el anciano – si lo sabían seguramente no hubiesen permitido que ella viajara al mundo humano...

- ¡Por supuesto que no lo hubiésemos permitido, de haberlo sabido nosotros mismos nos habríamos encargado de protegerla, incluso con nuestra propia vida de ser necesario...! – dijo rígidamente la de plateados cabellos, dejando algo sorprendida a Yelan, quien en todos los años de conocerla jamás había visto tan furiosa a su amiga.

- Y fue exactamente por esa razón que el consejo tomo la decisión, la princesa corría un peligro mucho mayor si se quedaba aquí, no solo por el asecho de los cazadores, sino también porque en ese entonces ella difícilmente dominaba su carácter impulsivo, si la hubiesen encerrado en palacio, como imagino pretendían hacer, lo único que habrían conseguido seria que esta escapara, haciéndola un blanco mas fácil de atrapar...

- Pero... – intento objetar, mas no pudo hacerlo, puesto que fue interrumpida por la persona menos esperada.

- El primer pilar ha caído... – la voz del castaño resonó por todo el salón, haciendo que inmediatamente las partes en discusión se callaran y todos los ancianos regresaran su vista a la pilastra de cristal frente a ellos, en donde el liquido plateado reposaba, dicha pilastra mostraba a cada anciano visiones de lo que ocurría en el exterior – los cuatro pilares restantes no van a poder resistir por mucho tiempo mas – el chico se dirigió expresamente al anciano – si no quieres que este mundo se destruya, dime como puedo llegar hasta la sala de los pilares.

- Te lo diré... – sonrió con pesado cansancio el anciano – después de todo estaba en tu destino que fueras a ese lugar... – con un golpe de su báculo sobre el piso, la pared que antes se había dividido para que la castaña entrara en ella, se abrió nuevamente para dejar pasar al castaño – solo debes completar la prueba que se te imponga y llegar al otro extremo de ese túnel, después de eso podrás ver la sala, aunque si lo que pretendes es llegar al guardián del viento, te advierto que eso no va a servir de mucho, pues en cuanto la prueba haya concluido todos tus recuerdos serán automáticamente borrados de tu memoria y tu única misión será la de proteger a Clow...

- Esta bien... – el chico se puso decididamente en marcha, había visto lo suficiente en la mente de ese anciano como para saber lo que seguiría después.

- ¡Syaoran espera! – le detuvo su madre antes de que entrara en la abertura, la pelinegra estaba notoriamente afectada por todo lo que estaba ocurriendo, así que el castaño se apresuro a serenarla.

- Tranquila mamá, voy a estar bien... – le sonrió con apacibilidad, acariciando tiernamente una de sus mejillas y viendo a través de sus ojos negros todos los temores que su madre ocultaba en lo mas profundo de su ser – te prometo que regresare, no dudes de ello...

- Syaoran... – la mujer se afianzo fuertemente a su hijo en un abrazo, mientras las lagrimas empezaban a brotar de sus ojos – n-no puedo permitir que vallas… - murmuro angustiada.

- Mamá, te juro que todo estará bien…

- Pe-pero… pero ni siquiera sabes como utilizar tu magia... – dijo con desesperación, al recordar justo en ese momento todo lo que alguna vez le había comentado Sakura sobre el destino de los guardianes que se enfrentaban al Caos, ella mejor que nadie sabía el terrible desenlace que le aguardaba a su hijo si es que este llegase a cruzar el umbral de esa cueva, por lo que no estaba dispuesta a perderlo así como así.

- No te preocupes, ya vi lo necesario... – se aparto lentamente de su madre, sonriendo con la misma calma, antes de depositar un sutil beso en su mejilla que la dejo paralizada por unos segundos, pues en ese segundo tuvo el mal presentimiento de que esa seria la última vez que lo vería.

El chico se aparto definitivamente, entrando sin titubear al interior de la cueva, su madre ya no tuvo tiempo de detenerle, pues justo en el momento que este entró, la pared se cristalizo nuevamente.

- ¡Syaoran no...! – dijo en ultimo intento desesperado, chocando sus puños contra la sólida pared de cristal, sin poder contener las lagrimas que bañaban su rostro por la impotencia de no poder haber hecho absolutamente nada para detenerlo – ¿por qué...? – murmuro apretando fuertemente los puños – ¿por que permitieron que él fuera...! – se giro violentamente hasta donde se encontraban todos, dirigiéndose especialmente al anciano del centro.

- Lo lamento mucho en verdad Yelan... – respondió después de unos segundos la mujer de cabellos castaños rojizos – pero aunque quisiéramos, no podíamos hacerlo, Syaoran es el quinto pilar.

- ¿C-cómo? – a penas y pudo articular la pelinegra, pues creyó haber escuchado mal lo dicho por la castaña.

- Él es el legitimo guardián supremo de los pilares... – reitero la mujer, mas esta vez no fue la pelinegra quien la interrumpió.

- ¿Pe-pero y Sakura? – cuestiono notoriamente desconcertada la de cabellos grisáceos – ¿entonces quien es ella?

- Como Syaoran lo dijo, Sakura es... – titubeo un poco al ver la aflicción de su rostro – Sakura es en realidad el guardián del viento...

- No, eso no puede ser... – murmuro con horror la peliplateada – ¡entonces ¿por qué demonios todos estos años nos hicieron creer que ella era el quinto guardián, cuando en realidad ese lugar le correspondía a otra persona!

- Fue por que ella era la única que poseía un poder similar al del pilar perdido... – intervino finalmente la cabeza del consejo – hace dieciséis años el oráculo predijo el nacimiento de dos nuevos guardianes... – empezó a relatar con cierta calma el anciano – estaba predicho que ellos serían quienes sustituirían al guardián del viento y al guardián del equilibrio respectivamente, puesto que su ciclo como pilares estaba a punto a finalizar... no obstante, ese mismo día el oráculo también predijo otro importante evento que tendría lugar en nuestro mundo... este predijo que muy pronto los dos milenios de cautiverio de la bestia llegarían a su fin, alzándose nuevamente y con mayor fuerza que antes, para causar la devastación y destrucción final de todo el mundo mágico...

- Pero si se suponía que Syaoran era el quinto pilar¿cómo es que posible que hasta ahora se hayan dado cuenta de su existencia? – no tardo en cuestionarles la pelinegra, quien simplemente no acababa de dar crédito a todo lo que estaba ocurriendo.

- Durante años buscamos su presencia mágica, mas nos resulto imposible encontrarlo... – respondió con un dejo de ironía el viejo maestro – hasta ahora entendemos que todo este tiempo estuvimos buscándolo en el lugar equivocado, jamás contemplamos la posibilidad de que él estaría viviendo en el mundo humano... pero, cuando sellaron sus poderes, también sellaron su verdadera presencia mágica y con ello la oportunidad de encontrarlo... la cuenta regresiva estaba en marcha, así que tuvimos que tomar una decisión, en la que concluimos que antes del bienestar de una sola persona, nuestra máxima prioridad era la de resguardar la de todo un mundo...

- Así que tomaron a Sakura como si se tratase de un simple peón de ajedrez... – la voz de Nadeshico se escuchaba bastante trémula y dolida – ¿y ahora que es lo que ocurrirá con mi hija?

- Ella al igual que el guardián del equilibrio tomaran el lugar que les corresponde...

- Lo que aun no me queda claro... – le interrumpió Yelan, mientras trataba por todos los medios de recobrar la compostura – mas bien dicho, lo que aun no entiendo ¿es cómo Syaoran pudo controlar todo su poder en tan poco tiempo?

- Cuando Nadeshico activo los símbolos mágicos en las ruinas que conectan la entrada del exterior a este lugar, Syaoran empezó su transición como guardián... – el anciano no tardo en responder su pregunta – obteniendo todas aquellas capacidades que hasta ahora habían permanecido dormidas en su interior... según se adentraban en el laberinto de ciudad Baja, sus sentidos se agudizaban, recibiendo información y asimilándola tan rápidamente que al final adquirió la habilidad de poder leer las mentes de otros, de esa forma fue como se dio cuenta de quien era en realidad y a su vez aprendió todo lo que necesitaba saber sobre magia al ver a través de mi mente.

- Entonces cuando él me miro a los ojos... – dijo incrédulamente la pelinegra.

- Así es, estaba leyendo tus pensamientos... – el anciano termino la oración – es chico posee poderes mucho mas sorprendentes de los que poseía su antecesor o cualquier otro hechicero que se haya visto en mucho tiempo, quizás, después de todo, él pueda completar exitosamente su misión...

- - -

Aquel lugar era tal y como en aquella visión que había tenido horas atrás, no podía ver absolutamente nada a su alrededor, puesto que todo estaba completamente oscuro, y sin embargo, podía sentir las múltiples presencias que se encontraban a su alrededor asechándolo.

No les dio mucha importancia, ya que su única prioridad en esos momentos era llegar cuanto antes al lado de esa persona por la que había emprendido aquel accidentado viaje y por la que ahora se encontraba en ese lugar, sus pensamientos estaban exclusivamente enfocados en la imagen de esa dulce joven de hipnotizantes ojos esmeralda, de hecho, la idea de volver a verla era lo que le impulsaba a seguir adelante.

Corría a toda la velocidad que sus piernas podían darle, sabía que estaba sufriendo en esos momentos, lo sentía como si él mismo lo estuviese viviendo en carne propia, entre los dos se había formado una conexión tan estrecha, que aun para él era difícil de explicar, tenia que apresurarse y llegar cuanto antes a ella, mas sin embargo, en ese momento las presencias que hasta ahora habían estado ocultas tras las sobras, aparecieron finalmente frente a él.

Sin pensarlo dos veces, de la valija negra que llevaba consigo saco el amuleto redondo y un pergamino del fajo que también viajaba en el interior, concentró todo su poder en aquel amuleto, mientras un circulo dorado aparecía bajo sus pies, solo segundos después el amuleto se transformo en una espada, el chico empuño la espada contra el pergamino, exclamando fuertemente un conjuro.

- ¡Dios del rayo ve! – un destello de luz dorada se materializo en ese momento, adoptando paulatinamente la forma de una bestia cuadrúpeda que se dirigió hasta donde las criaturas que lo amenazaban se encontraban, desmembrándolas a todas en cuestión de segundos.

El chico siguió corriendo con todas las fuerzas que podían brindarle sus piernas, ciertamente su desesperación hizo que muy pronto sus pies se fueran alejando involuntariamente del piso, empezando a levitar en el aire, volando a toda velocidad hacia el frente, mientras una potente luz blanca irradiada por su cuerpo, eliminaba a todos los entes de la oscuridad que su resplandor tocaba.

- Sakura, resiste por favor... – pronuncio esperanzadoramente, manteniendo únicamente la imagen de la chica en su mente, abriéndose paso sin dejar que nada se interpusiera en su camino.

- - -

El cuarto pilar había desaparecido, ahora solo quedaba ella sosteniendo la ultima barrera que protegía la ciudad, múltiples heridas se podían apreciar por todo su cuerpo, cada embestida de la bestia sobre el escudo, era una nueva flagelación que la joven tenia que soportar, por lo que su lastimado cuerpo estaba a punto de ceder.

Pero no por eso iba a rendirse, su voluntad y determinación eran mucho más fuertes, no podía darse el lujo de caer ella también, era su misión y como tal, protegería el bienestar del mundo mágico hasta el final, cuando su cuerpo se desangrara y su vida llegara a su fin.

Si embargo, había otra cosa que no la dejaba rendirse, era esa voz que desde hacia un buen rato se había instaurado insistentemente en su cabeza, el solo escuchar esa voz la hacia querer permanecer de pie y no flaquear, a pesar de que ese alguien solo repetía un nombre, (que si bien era desconocido para ella), creía conocer a la persona a la que él se refería.

- "Sakura, resiste por favor..." – y ahí estaba de nueva cuenta esa voz, como deseaba saber de quien se trataba, él se escuchaba tan angustiado por esa persona a quien llamaba "Sakura", que a ella no podía mas que partírsele el alma y dolerle agudamente ese hueco vacío que tenia en el corazón, sintiendo vivamente en su interior el sufrimiento de aquel ser.

Pero a pesar de la fortaleza de su voluntad, las fuerzas estaban a punto de abandonarle, cuando sus rodillas se doblegaron finalmente, supo que muy pronto le seguiría su cuerpo entero, justo en ese momento alzo la vista al cielo, viendo atentamente con sus ojos vacíos y carentes de vida un punto lejano, donde pudo distinguir un brillante luz blanca que se iba haciendo mas y mas resplandeciente.

Su mirada se nublaba, pero aun así pudo entrever como esa luz se acercaba hasta donde ella se encontraba, entre el resplandor de esa luz pudo ver claramente el perfil de alguien, este le extendía una mano para que la tomara, y aunque de veras quiso hacer un ultimo intento por tomarla y afianzarse a ella, su cuerpo ya no le respondió, se sentía adormecida , estaba tan cansada, que estaba segura que si cerraba en ese momento los ojos todo su sufrimiento cesaría para siempre, y así lo hizo, se dejo vencer por el sueño y el cansancio, sin que ya nada mas le importara.

- - -

Luego de pasar exitosamente la prueba de iniciación en la caverna, el ambarino activo el ultimo de sus poderes dormidos, su circulo mágico apareció nuevamente bajo sus pies, y aquella luz que emanaba de él se incremento con mayor intensidad, envolviéndolo completamente y cambiando sus ropajes por una túnica blanca con pantalones holgados, dos alas blancas salieron de su espalda y automáticamente después fue transportado a otro lugar, viajando por medio de la misma magia que estaba utilizando.

Cuando pudo reaccionar se encontraba en las alturas, desde ahí podía ver perfectamente cinco plataformas, todas ellas apagadas, excepto la del centro, en la cual una débil luz aun se mantenía en pie.

Él sabia perfectamente a quien pertenecía esa luz, por lo que sin dudarlo se dirigió hasta donde esta se encontraba, planeando entre las nubes y las fuertes corrientes de aire para poder llegar a ella, ya estaba a punto de alcanzarla cuando esta se extinguió totalmente, mientras la silueta de la joven que permanecía en el centro de aquella columna caía de rodillas, antes de desplomarse inertemente hacia el frente.

Su corazón dio un doloroso vuelco en ese instante, abriendo desmesuradamente sus ojos ambarinos al ver como no pudo contradecir una vez mas, aquella visión que le mostrara el futuro, que en esta ocasión no era un hecho ficticio producto de su cerebro, sino la realidad que lo había alcanzado finalmente.

Un grito ensordecedor hizo eco por todo el lugar, su alma se desgarraba al solo pronunciar aquel nombre, pues en su interior se sentía culpable y no podía más que reprocharse el hecho de no haber podido llegar a tiempo para salvarla.

Con delicadeza tomo entre sus brazos aquel cuerpo sin vida, cargándolo hasta ponerse de pie, mientras una solitaria lagrima recorría su mejilla hasta caer y mezclarse con la sangre aun fresca en el rostro de la joven, quien al estar completamente bañada por ella, manchaba de carmesí el pulcro traje que portaba ahora el chico.

Una furia indescriptible se apodero completamente de él, no supo en que momento activo el quinto pilar, y no le importo realmente que las marcas doradas tatuaran su cuerpo, pues su único objetivo era destruir a aquella bestia que le había arrebatado a su ser mas preciado.

Una columna de luz mucho mas poderosa que las cuatro anteriores juntas se elevo al cielo, mientras el joven contemplaba detenidamente, con el rostro ensombrecido a la joven que sostenía entre sus brazos, sonriendo melancólicamente mientras depositaba un tierno beso en su frente.

- Lamento no haberte dicho antes lo mucho que te amo Sakura... – le dijo bajamente mientras se separaba de ella – aunque no importa, ya que los dos estaremos muy pronto juntos – por un momento creyó que todo aquello era producto de su imaginación, pero al mirar con mayor detenimiento el rostro de la joven, se dio cuenta como una pequeña sonrisa se delineaba débilmente en sus labios.

Una gran sonrisa se curvo paulatinamente el la comisura de sus labios al saber que no se trataba de su imaginación, pues aparte de esa prueba tuvo otra mucho mas contundente, al sentir en ese instante la casi inapreciable presencia de la joven, lo que le hizo sonreír mas ampliamente.

- Ya veo... – le susurro bajamente, para posteriormente dirigir su vista al frente, liberando sin mayor preámbulo todo su poder, el que fue canalizado por medio de aquella columna de luz que surco los cielos, expandiéndose de tal manera que produjo una reacción en cadena, por algunos segundos el cielo quedo por completo iluminado con su blanquecino resplandor.

Su poder fue tal, que desintegro lentamente a la bestia, quien intento retroceder, mas no pudo ir muy lejos, pues el tremendo brillo termino cubriéndola por completo, hasta que no quedo nada de su existencia.

Aquella perturbadora luz lo cubrió absolutamente todo, cegando por algunos instantes a los habitantes de la ciudad, los cuales se refugiaron luego de que el Caos traspasara la barrera que los resguardaba y comenzara a causar estragos por todos lados, dejando algunos edificios prácticamente hechos ruinas.

El chico mantuvo su sonrisa al ver como la joven que sostenía entre sus brazos lentamente empezaba a reaccionar, irradiando un brillo dorado que el chico supuso era su poder vital que regresaba nuevamente a ella, no pudo evitar el impulso de abrazarla mas fuerte, ya que al final todo lo que había hecho de alguna manera fue en vano, al menos para ellos, pues los últimos vestigios de su poder los consumía a ambos junto con aquella sala que desaparecía ante sus ojos.

Al final la resplandeciente luz blanca desapareció en el horizonte sin dejar huella, y junto con esa luz, la sala de los pilares y los guardianes que la mantenían activa, absolutamente todo fue tragado por aquel poder, incluso los seis seres que sacrificaron su esencia para proteger a su mundo.

Continuara...

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Bueno pues aquí yo de nuevo (n.n), ya había pasado algo de tiempo desde la ultima vez que actualice, pero es que por una u otra cosa no podía acabar de escribir este capitulo, yo hubiese querido hacerlo mas largo, pero al final eso fue todo lo que mi imaginación pudo dar (u.uU), espero y les haya gustado, (y no me vallan a dar de jitomatazos por como se quedo (XD) porque como algunos ya se lo han de sospechar, pues si, esta historia ya llego al final (XD), no se si en el capitulo que viene se termine o si me lleve otro todavía, pero ya no puedo alargarla mas (bueno, si puedo, por que mi cabecilla nunca deja de imaginar situaciones para esta pareja, pero creo que seria demasiado para mis pobres neuronas (x.x), ya por otro lado, enserio gracias por sus comentarios y por todos los ánimos que me dieron para que actualizara, por el momento me despido, nos vemos el próximo capitulo, que quizás y ya sea el final.