La orden de los Caballeros Mortales
Por Javier Delgado R.
Fan fiction, inspirado en "Oh mi diosa" de Kōsuke Fujishima.
Capítulo IX
Core War rev 1
Keiichi se encontraba sentado frente su escritorio revisando el plano con toda atención. Este ultimo cliente de Whirlwind había sido particularmente exigente y eso le encantaba. Sus requerimientos le habían exigido mayor dedicación que otros proyectos con el fin de obtener el balance perfecto entre potencia, peso y distribución de masa. La colocación del motor en esta motocicleta había sido especialmente critica. Al aumentar de tal manera la potencia del motor y colocarla en un chasis convencional, todo el balance de la motocicleta se había alterado, un reacomodo de los demás componentes era inevitable, pero era complicado dada la falta de espacio. Ademas la exigencia de que ademas fuera fácil de maniobrar, indicaba que el centro de gravedad debería ser lo más bajo posible.
Y sin embargo, lo había resuelto rápidamente, con la experiencia adquirida en Whirlwind había aprendido a visualizar los problemas y a desarrollar una gran intuición como ingeniero. Chihiro, la fundadora del motor club, hacia tiempo había reconocido en el ese talento innato y esperaba que el fuera capaz de sobrepasarla. Ella había adquirido fama como diseñadora de vehículos de carreras y sabia reconocer el talento cuando lo encontraba. Keiichi tenia la pasión de crear, unida a un amor por esas maquinas, solo necesitaba experiencia, y la estaba adquiriendo rápidamente. Algún día tendría fama propia como diseñador.
Pero el no pensaba en todo es eso. Solo sabia que disfrutaba del proceso creativo. En este momento solo deseaba sentir el balance de los componentes, imaginarlos, y al final ver a su creación en acción. Ahora solo faltaba una ultima revisión de seguridad. Revisar que las lineas de combustible y electricidad no estuvieran cerca no estuvieran en riesgo de calentarse, verificar el sistema de frenado, y que prever que pasaría si alguno de los componentes fallara.
Finalmente quedo satisfecho con su examen. Se enderezo y se estiro disfrutando la sensación de un trabajo bien hecho. Aun faltaba construir, pero ya tenia visualizado todo el proceso. Miro el reloj y se dio cuenta que había terminado en la mitad de tiempo que había estimado. Eso significaba que tenia aun varias horas libres. Belldandy había salido. Urd parecía estar durmiendo aun, y Skuld había salido con Sentaro kun a comprar helados. ¿que podría hacer?.
Vio la computadora y pensó que podría navegar un rato. Le habían proporcionado un par de direcciones de Internet prometedoras. Desde que tenia la conexión a Internet ya se había desecho de las revistas que guardaba en el cajón de su escritorio. Siembre había temido que Belldandy las descubriera, aunque estaba seguro que ella no objetaría, a el no le gustaba la idea.
Encendió la maquina, y espero a que cargara el sistema operativo, pero al terminar lanzo una exclamación indignada.
-¡Urd!
Ahí en el monitor, como fondo de pantalla, estaba una muy sugestiva imagen de Urd, en una pose incitadora y en lugar de ropa solo tenia dos letreros estratégicamente colocados que decían "Goddess power".
¡Así que de nuevo Urd había estado usando la maquina!. Ella no perdía una sola oportunidad para estimular su libido, como parte de una presión constante de que se acercara mas a Belldandy.
Pero el juego a veces llegaba demasiado lejos. Realmente Keiichi no tenia ningún problema con su libido y no había ninguna necesidad de estimularlo más. Así que inmediatamente procedió a reemplazar el fondo de pantalla con una fotografía de Belldandy.
Pronto tuvo a una sonriente Belldandy mirandolo desde la pantalla, y con eso se pudo tranquilizar. Ahora ya ni hablar de pensar en esas direcciones. Su libido estaba aun muy estimulada. Entonces decidió buscar algo que lo distrajera. Reviso los bookmarks, que había en el navegador, y encontró muchos nuevos, seguramente eran de Urd.
Había muchas direcciones de sitios de medicina tradicional y no tan tradicional, ademas de herbolaria, medicina aryuvedica y sitios aun más extraños. También observo un par de sitios de lencería femenina, que decidió tendría que visitar en alguna ocasión cuando estuviera menos excitado. Entonces vio una simple dirección de Internet que le llamo la atención. "www_Yggdrasil_hvn"
Era imposible vivir con tres diosas durante cuatro años y no saber que Yggdrasil era el sistema de computo divino y en parte el responsable de mantenerse a la tierra en una pieza, pero la extensión ".hvn" lo intrigo. Busco en la tabla de nombres de dominio que le había regalado con la computadora y no estaba asignado a ningún país. Haití era .ht y Hong Kong, .hk, pero ningún .hvn.
Se rasco la cabeza, se le había ocurrido una idea fantástica. ¿Podría ser un sito web del cielo?. ".hvn" podía corresponder a Heaven. La idea parecía muy ridícula, pero ya había vivido algunas experiencias realmente fantásticas, como hablar con Kamisama el numero uno del cielo, a través del teléfono.
Tal vez entre las modificaciones de Urd a su computadora, había incluido un enlace directo al cielo.. Decido que si no intentaba nunca lo sabría, así que selecciono el link.
Casi de manera instantánea, una sobria y elegante pagina llena de símbolos, apareció en la pantalla. Tenia una suave y delicada música de fondo. Los símbolos, los reconoció inmediatamente, era runas. Muchas veces los había visto relacionados con la magia de las diosas. Y en el centro de la pantalla algo inesperado. Dos campos vacíos. Sin importar el idioma, esos campos siempre pedían lo mismo: nombre y password.
El corazón le latió de manera acelerada, pues se le acababa de ocurrió otra idea mas fantástica. Cuidadosamente tecleo en pantalla usuario :"Belldandy" y luego sonrió ante su atrevimiento... Password: "Keiichi" y oprimió enter.
La pantalla parpadeo, aparecieron unos símbolos nuevos... y los campos volvieron a aparece vacíos. Bueno, penso para si, que esperaba, no debería ser tan fácil. Miro las runas nuevas que seguramente ahora decían algo así como Usuario o Password Invalido.
¿Usuario?. Entonces recordó algo que le había comentado el Dr Shugahara. El nombre correcto no era Belldandy sino "Verthandy". Así que con el pulso un poco tembloroso escribió el nombre, volvió a escribir su nombre como password y volvió a oprimir enter.
Su denominación oficial era Programa de Defensa Predictiva adx-654 v2.03.05. Incluso para los estandares de Yggdrasil, era una maravillosa pieza de software.
Diseñado como una de las linea de defensas del cielo, tenia milenios cumpliendo su trabajo de manera tan silenciosa que pocos se acordaban de el. Su misión: detectar e incluso predecir, posibles amenazas antes de que estas se materializaran y tener preparadas posibles lineas de defensa.
Pero hacia más que eso. Sus diseñadores habían pensado que al trabajar intentando predecir posibles amenazas, estas no siempre se materializaran, lo que haría que se dejara de prestar atención a su predicciones. Por lo tanto debería actuar de manera que sus acciones no fuera evidentes. Si había indicios de una invasión, pero no datos concretos, manipulaba para que se los dirigentes desearan hacer más ejercicios de combate.
Si había indicios de una conspiración en la tierra, manipulaba al sistema para que hubiera dioses en alguna misión de reconocimiento. Así, en la obscuridad, estimulaba ciertas investigaciones, o desarrollos de armas, o que gente con capacidades especiales recibiera cierto tipo de entrenamiento, o que los humanos especiales que nacían de vez en cuando tuvieran contacto con dioses para aprovechar sus capacidades. Si no pasaba nada, nadie sabría del error, solo el software tendría información de sus errores para no repetirlos .
Normalmente existía una docena de programas de este tipo corriendo como un "daemon", es decir un programa que funciona sin supervisión directa dentro de Yggdrassil. Recopilando información de todas las fuentes, analizándola y buscando patrones, tendencias, sutilezas e incluso recurriendo a algoritmos de premonición, para intentar averiguar el futuro, Todo con el fin de detectar posibles amenazas al cielo, antes de que estas se materializaran.
Para esto manipulaba a dioses y mortales a través de la varias funciones de software que le daban un sutil control pero real control sobre el mundo. No necesitaban más. Una mariposa, manipulada a tiempo podía genera un huracán. Era realmente una maravilla de software, diseñado para ser autónomo, sus sistema de AI (inteligencia Artificial) tenia una serie de puntajes que modificaban su comportamiento, para estimularlo a que realizara mejor sus funciones. Estos puntajes no eran realmente equivalentes a las emociones, pero era inevitable buscarles ciertas equivalencias.
Por ejemplo adx-654 en este momento presentaba un nivel 2 en la escala cognoscitiva estandard de Turing. Eso traducido en términos humanos seria algo así como: Estaba petrificado por el miedo"...
En ese momento, Adx-654 se encontraba refugiado en un nodo auxiliar de uno de los sistemas de mantenimiento auxiliar. El extraño lo había percibido y su ataque había sido inmediato. Había lanzado una serie de bombas lógicas e instrucciones invalidas para corromper su código. Afortunadamente el extraño solo había detectado una de sus subrutinas menores que había tenido que dejar atrás, como esas lagartijas que dejan su cola para distraer al enemigo. Desgraciadamente parte de su código había sido dañado antes de poderlo mover a otra locación de memoria, pero intentaría regenerarlo con sus rutinas de integridad para reparar los daños.
Adx-654 no había sido diseñado para esto, se suponía que Yggdrasil era un lugar completamente seguro e inexpugnable. Pero había tenido que aprender para sobrevivir. Aun así, en ese momento era ya la única copia del software de la serie predictiva que se encontraba en operación. Todos los demás habían sido destruidos.
Oculta a los ojos de sus operadores, dentro de lo núcleos de memoria de Yggdrasil se llevaba a cabo una verdadera guerra. Códigos invasores se habían introducido al sistema y estaban acabando poco a poco con sus defensas, ya sea introduciendo códigos troyanos, o como ocurrió con los programas predictivos, corrompiéndolos hasta hacerlos inoperativos.
Lo único que percibían los operadores, era una serie de errores o "bugs" del sistema que cada día parecían ser mas frecuentes. Estos eran los mensajes de los códigos que dejaban de operar y dejaban sus cadáveres cibernéticos en la memoria de la gran supercomputadora, como los muertos en un campo de combate, hasta que algún programa de limpieza recuperaba la memoria que ocupaban.
Una de las grandes bajas había sido la "fuerza definitiva", que era responsable de asegurarse que los contratos entre humanos y dioses se cumplieran. Pero su código había sido dañado a tal grado, que los operadores no lo habían podido volver a implementar.
En ocasiones esos bugs, incluso llegaban a infectar la tierra. Esa era una de las razones por las que Skuld nunca dejaba lejos su mazo de "debugging", pero nunca había investigado a fondo la razón de ese súbito incremento de errores del sistema.
A lo largo de estas silenciosas batallas ciberneticas, Adx-654 había estado perdiendo sus funciones poco a poco. La baja mas importante habían sido sus rutinas I/O (entrada /salida) por lo que ahora era ciego y sordo a lo que pudiera ocurrir en el cielo. Ya no tenia capacidad de comunicarse con los operadores del sistema y avisarles del peligro.
Al ocurrir esto, Adx-654 había pasado de un nivel diez, a nivel cinco en al escala cognoscitiva de Turing, es decir, en términos humanos, entro al borde del pánico y activo una vieja e inestable pieza de software, el CDF-456 v2.45.78, conocido coloquialmente entre los operadores de Yggdrasil como "destino", por su forma de operar. Este era capaz de ejercer pequeños cambios de conducta, o pequeñas acciones que forzaban a que ocurrieran coincidencias. El resultado era el equivalente a los que los mortales llamaban "destino". Pero solo podía actuar de manera indirecta, y no había seguridad de que eso ocurriera. El software era inestable y por eso había sido desactivado. Sin embargo a través de el, había logrado que algunos mortales de los escogidos, entraran en contracto con dioses, pero no tenia forma de informales de lo que se esperaba de ellos.
En este momento, Adx-654 se encontraba acorralado, ahora la mayor parte de los núcleos de memoria de Yggdrasil estaban supervisados y ya no quedaba lugar para ocultar y proteger su código.
Repentinamente uno de las rutinas "snippers" que había instalado recientemente, y que se encargaban de espiar la comunicaciones con la tierra se activó. Había descubierto que esas comunicaciones de bajo nivel no eran monitoreadas por el extraño, posiblemente que no las pudiera reconocer, puesto que estaban codificadas en el primitivo protocolo tcp/ip de los mortales.
El programa "snipper" comenzó a reportar una sesión de autenticación en curso. Inmediatamente detecto una de las palabras claves que debió supervisar: "Verthandy". Ese era uno de los posibles contactos. Súbitamente Adx-654 se elevo a nivel 9 en la escala cognoscitiva de Turing. La situación era prometedora, tal ves podría entablar comunicación con una deidad por este medio. Luego recibió la segunda palabra de autenticación "Keiichi", la coincidencia era demasiada, tenia que actuar.
Esos eran dos seres que podían serle útiles. Entonces tuvo que hacer una pausa para elaborar un curso de acción, para un código de computo, la decisión le llevo una eternidad, cientos de miles de ciclos de computación, pero para un humano pasaron solo milisegundos. Finalmente decidió tomar un curso de acción. Yggdrasil ya no era un lugar seguro. Necesitaba protegerse, arriesgándose a ser detectado, decidió intervenir la comunicación.
Keiichi acababa de terminar de oprimir Enter, y pudo ver esta vez, como el sitio aceptaba su contraseña, dirigiéndolo a otra pagina distinta. La pantalla destello con una intensa luz, Keiichi no lo sabia, pero el estaba siendo escaneado.
En ese momento el navegador envió un letrero, tan cotidiano, que parecía completamente fuera de lugar ahí.
-Para su correcta visualización, este sitio requiere que se instale software especial ¿Desea hacerlo? Si/no.
Keiichi bufo de frustración, ya había aprendido a desconfiar de los sitios web que requieren software especial, pero pensó que si era un sitio web del cielo debería ser seguro, así que pico en la opción "si".
Se inicio una descarga d e software, al parecer era algo grande pues tomo varios minutos. Finalmente el software se bajo y comenzó a instalarse automáticamente. Hubo unos segundos de inactividad y entonces... Keiichi grito.
Keiichi no tenia forma de saberlo, pero su conexión había sido interceptada. Adx-654 había decidido moverse a un lugar más seguro fuera del peligro de Yggdrasil. El obligar a un navegador de Internet a instalar software no requerido fué trivial. Pero compactar una copia operativa de si mismo, no lo fue. Tuvo que comprimir y desactivar muchas de sus rutinas AI para poder ser ejecutado en la maquina host. En términos humanos, la copia en la maquina de Keiichi era un genio idiota.
El software enviado por Adx-654 configuro la maquina y comenzó a hacer pruebas de comunicación. Pero al examinar al receptor encontró que no contaba con los sistemas adecuados de recepción de información.
El software tomo una decisión transcendental. El receptor no tenia capacidad de procesar la información para una comunicación correcta, así que procedió a actualizarle el software. Del monitor salio una luz que comenzó a escanear el cuerpo de Keiichi. Tomo solo una fracción de segundo, y comenzó su trabajo. Keiichi quedo petrificado, conforme el nuevo software era instalado en su cerebro.
Afortunadamente el procedimiento no fue desagradable por lo que Keiichi no fue consciente de lo que había pasado. Lo único que se dio cuenta es que podía entender las instrucciones en la pagina web, simplemente asumió que esta había reconfigurado su lenguaje, el no era consciente de haber cambiado.
En la pantalla de a computadora apareció una solicitud, preguntado si deseaba activar la consola virtual. Keiichi leyó el aviso, sin darse cuenta de que estaba escrito en runas. Lo pensó un momento y decidió activar la consola.
Estuvo a punto de gritar por la sorpresa, pero estaba tan maravillado que se quedo sin habla. Su cuarto se lleno de pantallas de información de luz pura. Decenas de displays extraños mostrando abundancia de información. Pronto descubrió que podía mover los elementos con solo señalarlos. Eran bloques de información, instrucciones y representaciones de procesos lógicos. Eran incompresibles para cualquier ser humano, pero Keiichi no era consciente de eso.
Y entonces encontró que podía solicitar todo tipo de información, conocimientos maravillosos que cualquier humano no hubiera dudado en pagar lo que sea o incluso llegar a matar con tal de obtenerlos: La solución al teorema de Fermat, el origen del Big Bang, los conceptos avanzados de la matemática transfinita, los parámetros correctos para la transmutación nuclear.
Pero había algo que para Keiichi valía mas que su vida y que cualquier otro conocimiento: Belldandy.
Desgraciadamente, Adx-654 había cometido un error. Al refugiarse en esa zona de memoria, había tenido que borrar el código de funcionamiento que residía ahí y la unidad había dejado de funcionar. Esto había generado un alerta del sistema y el extraño lo descubrió.
Conforme enseña a ese lento ser sobre como operar la interfase, se encontraba enviando un paquete de información sobre todo lo ocurrido y sobre ataque de los extraños, para ser reportado a los dioses. Al terminar ese paquete y establecería una conversación directa con el mortal.
Pero repentinamente todas sus funciones quedaron congeladas. Una serie de ordenes invalidas acaba de ser superimpuesta en su código. El resultado es que ese maravilloso software quedo inutilizado.
En alguna parte, un operador de Yggdrasil recibió un reporte. Un reporte de terminación de software debido a ordenes invalidas de código. Tomo nota del nombre del proceso, pero no le pareció conocido. No lo sabia, pero la ultima linea de defensa de Yggdrasil acababa de ser destruida.
Keiichi no sabia nada de esto, y la copia residente en su maquina no era suficientemente inteligente para actuar sola.
Alguna vez Keiichi se había preguntado que hacia Belldandy en el cielo, pero siempre su timidez normal, había impedido hacerle esa pregunta. Había aprendido que ella era algo especial, no era una diosa común, y eso solo aumentaba su timidez. Ahora no podía desperdiciar esta ocasión, asi que solicito toda la información sobre su amada.
En ese momento no lo recordaba, pero estaba usando la clave personal de la diosa de primera clase, lo que le abría las puertas a mucha información de alto nivel.
La cara de Keiichi se lleno de asombro conforme la información comenzó a desplegarse.
La diosa Belldandy se encontraba caminado por un sendero en el bosque que rodeaba al templo. El contacto con la naturaleza era para ella una experiencia maravillosa. Pero ella no veía al mundo con los limitados sentidos de los mortales. Escuchaba las lentas conversaciones de arboles a través de su lenguaje de aromas, el extraño lenguaje químico de los insectos, los murmullos ultrasónicos de las pequeñas especies, sentía las emanaciones de energía de la tierra y podía ver a los kamis del bosque impulsando la vida, y estos la reconocían y la saludaban como diosa celeste.
La vida la rodeaba por doquier, creciendo, modificándose, transformando y produciendo energía vital.
Se acerco a un viejo árbol, el árbol estaba muriendo, pero ya nueva vida crecía en el: Insectos, bacterias, hongos, que comenzaban a invadirlo, vida a cambio de vida. Ella percibió todo eso, sabia que no existía nada mas maravilloso en el universo que la vida y su tenacidad. Toco el árbol, y sintió que en su núcleo aun quedaba algo de su vida original. El árbol respondió a su toque, y se estableció una empatia entre la diosa y el.
Ella percibió que en el aun había fuerzas para un poco mas, sonrió, le gustaba esa tenacidad. Asi que comienzo a cantar tanto por ayudarlo, como por el puro placer de cantar, mientras su ángel emergía de ella, era una presencia etérea que sin embargo era una expresión de su poder de diosa.
Acaricio el viejo tronco y al sentirlo, comenzó a buscar en el, sus manos sentían algo y quito un poco de corteza podrida, y ahí, emergiendo tímidamente, vio un pequeño retoño. Lo rodeo con las manos e invoco un poco de protección, para que esa ramita, pudiera crecer y que el árbol pudiera florecer una ultima vez. Y sintió el agradecimiento.
Un pequeño calorcito se sintió en el corazón de la hermosa diosa, pero la sonrisa de descubrir un poco de vida en ese viejo árbol no duro. La fragilidad de la vida le recordó a Keiichi. Un hombre mortal, aun joven, pero su vida estaba limitada. Había visto pasar la vida de tantos mortales, pero ninguno le hacia sentir lo que este joven. Ella había asumido la responsabilidad de protegerlo, de hacer que cumpliera sus sueños, y su misión. Quería que fuera feliz, pero sabia que su amor le causaría sufrimiento y la muerte. El darle su amor lo mataría pero tal ves lo que mas le dolió es que ella sabia que el daría su vida libremente por ella, sin ninguna clase se cuestionamiento.
En eso, sintió unos brazos que la rodeaban, giro y vio a su hermana mayor flotando atrás de ella.
-¿Urd? ¿Que haces aquí?
-Percibí que mi hermana me necesitaba y aquí estoy. También estoy aquí para darte las gracias por ayudarme a encontrar me a mi misma de nuevo, pero también para recordarte que es hora de que te encuentres con el tuyo.
Belldandy lloro al escuchar a su hermana. ¿Como se le podría explicar algo que ella misma no entendía?
- No creo que puedas ayudarme, esto es algo muy distinto. Pero no sabes cuanto me alegra por ti. Siento como tus ilusiones han vuelto.
- Si, descubrí que Kenji tiene planes fantásticos e ingenuos para ayudar al mundo.
- ¿Como los de cierta diosa joven e inexperta?
- Y que ahora ya no es tan inexperta. Puedo ayudar a que sean realidad, pero tendré que intervenir un poco para hacerlos realidad.
- Sensei Shugahara confía plenamente en ti. Hará todo lo que tu desees, pero debes respetarlo.
- Lo haré, el me ha devuelto tantas cosas que creía perdidas, pero no vine por eso.
Urd levanto su mano para tocar el rostro de Belldandy, extendió su indice y con delicadeza toco una de las lagrimas que aun se encontraba en su rostro. La lagrima brillo al contacto de esos dedos divinos. Poco a poco se convirtieron en luz. Urd extendió la palma de su mano y la luz fue absorbida por ella. Respiro profundamente al sentirlas dentro de ella.
- Se por quien son estas lagrimas, pero no se porque... He estado ciega. Durante estos años he tratando de obligar a Keiichi a darte su amor, y también te presione a ti. Pero me doy cuenta de era innecesario. Es solo que tu no deseas dar un paso mas. ¿porque?
- No estoy lista aun.
- Belldandy, ¿Porque no estas lista? He intentado obligar a Keiichi y me doy cuenta que tu eres quien lo ha detenido.
- Keiichi-san me conoce mejor que tu, el lo desea tanto, pero en el fondo sabe que yo aun no estoy lista. Se que lo estoy haciendo sufrir, y también sé que el esperara, incluso cuando ya no existan esperanzas.
- Belldandy, estas hablando con acertijos. Sabes algo que yo no se. Tu no puedes mentir, por eso prefieres callar. Ahora es momento de que hables.
Belldandy se estremeció, quería hablar pero sabia que pronunciar esas palabras le dolería. Entonces levanto su mano, extendió un dedo y toco una piedra de la que colgaba de unos de sus aretes. Cada una de esas piedras tenia alguna propiedad mágica, no eran solo adornos. Pero una de ellas era muy especial para ella. Esta se separo sola del arete y salio volando para colocarse suavemente en la mano de Urd.
- Eso es el expediente de Keiichi. Lo substraje del sistema central, estaba encriptado con una clave de nivel que se supone yo no tengo acceso y me encargue de romper.
- ¿Belldandy? ¿Tu substrayendo datos secretos? Sera posible que finalmente hayas aprendido algo de mi.
Belldandy sonrió tímidamente, le había costado mucho trabajo decidirse a hacer eso.
- El amor te obliga a hacer cosas que nunca soñaste hacer. Ábrelo y ve la clasificación de Keiichi. ¿Te has preguntado como es que el sistema aceptó que una diosa de primera categoría se quedada con el? Antes de bajar a la tierra yo sabia que el era especial. Me memorice su expediente, estudie lo que le gustaba y que no, y sobre todo quería averiguar lo que necesitaba para ser feliz. Sabia que me necesitaba, pero aun así me sorprendió mucho cuando el sistema autorizo que me quedara con el. Yo estaba dispuesta a hacer el mejor trabajo posible, pero no contaba con algo.
Urd había tomado el cristal y lo estaba abriendo. Este destelló y de su interior se proyectaron varias pantallas con información. Mientras se desplegaban, Urd comento un poco distraída...
- ¿No contabas con enamorarte de el..? Eso lo entiendo. Tiene una hermosa aura que te envuelve y te hace sentir bien. Su corazón es capas de dar todo por ayudar a otros, incluso dará su vida si es necesario. Hasta antes de conocer a Kenji, pensé que Keiichi era el único ser humano así. Confieso que llegue a sentirme celosa... Pero... - Urd se interrupio sorprendida - ¿Que es esto? ¿Nivel de Protección de prioridad máxima? ¡Belldandy!.. si estos datos son correctos, ¡El sistema valúa la vida de Keiichi mas que la de un dios!, me sorprende que no enviaran a una Valquiria en tu lugar.
- Y sin embargo, yo seré la responsable de acabar con su vida
- Explicate, de eso no veo anda aquí. Excepto que según las predicciones del sistema, el cielo e Yggdrasil pueden llegar a depender de el y por eso su vida debe ser protegida. Pero no hay más información.
- Ese informe es obra de los sistemas de predicción, no se asientan los detalles, pues siempre existe la posibilidad de que eso no suceda. Pero yo tengo información de otra fuente.
Urd miro con sorpresa a Belldandy. Y luego pareció comprender, no en balde ellas tres eran las Nornas, Las supervisoras de pasado, presente y futuro, eso era ya un titulo honorario reemplazado por las funciones de Yggdrasil, pero aun conservaban sus poderes.
- ¿Has tenido sueños? ¿Sueños proféticos? - Belldandy asintió, sin atreverse a hablar. - ¿Que es lo que has soñado?
- No quiero recordarlo, pero te diré, que cuando los dos nos hagamos uno sera el comienzo de su misión, de algo que el sistema oculta, pero que acabar matándolo en medio de grandes sufrimientos. Incluso despierta, - Belldandy se estremecido - la imagen de su cuerpo destrozado es demasiado para mi, y en sueños es como estar realmente ahí. No lo puedo soportar.
- ¿Y crees que tu puedes evitar ese momento?
- Cada vez es mas difícil posponerlo. A veces quisiera alejarme, pero se que debo cuidar de el, protegerlo para ... no se.. no quiero que cumpla su misión. Quiero estar a su lado, y verlo envejecer cumpliendo sus sueños, pero tal ves debería alejarme de el y dejar mi lugar a alguien que si lo pueda proteger.
- Pero tu eres parte de esos sueños.
- Y el de los mios. Daría todo lo que tengo, todo lo que soy por evitarle ese destino.
- Belldandy, si ese es realmente su destino, el debe cumplirlo, y tu estar a su lado. Pero en tu miedo estas olvidando algo muy importante: "El principio de incertidumbre", ¿lo recuerdas?
- ¿Que el futuro no esta escrito?, ¿Que todas nuestras predicciones no son sino altas probabilidades, pero nunca certidumbres?. Si, lo recuerdo muy bien. Pero incluso las probabilidades me asustan. Yo podría enfrentar el peligro sin temor, pero no puedo afrontar el que la vida de Keiichi este en peligro.
- Pero si evitas que cumpla su destino, su vida no tendría propósito. ¿No deseas que lo cumpla?
- Por favor, no me hagas pensar en eso ahora. He meditado, he estudiado, he puesto en empeño todas mis habilidades para evitar que eso suceda.
- Excepto, dejarlo decidir.
- ¿Como?¿Pedirle que el decida sobre su muerte?
- Y es que en el fondo de ti, ya sabes la respuesta. El te dirá que la acepta si ese es el precio del amor a ti.
- Si al menos pudiera darle lo que el corazón de un hombre ansia sobre todas las cosas.
- ¿Descendencia? ¿Tanto lo amas? ¿Sabes lo que implicaría?
- ¿Y no lo harías tu?
- No lo se. Kenji es distinto, para el de alguna manera toda la humanidad es su descendencia, el no siente la necesidad personal, pero Keiichi... Y ademas un hijo de diosa y mortal. No se siquiera si eso sea posible. Podemos sentir igual, pero nuestros cuerpos son tan distintos. Seria necesario recodificar completamente a uno de ustedes.
- Con mayor razón no deseo acortar su vida.
Urd se aproximo a Belldandy y la abrazo con cariño.
- Belldandy, tu eres una diosa de primera categoría. Tu mas que nadie sabe que no es la inacción la que nos lleva a lograr lo que queremos. Yo acostumbro a actuar sin pensar, y he cometido grandes errores, pero he tenido también mis aciertos. Tu estas pensando demasiado. Asi eres, siempre la mejor en todo, la que sabe que cualquiera, y puede lograr más que cualquiera, y sin embargo, te rehúsas a actuar. Tu corazón y el de Keiichi están unidos de una manera que yo no había comprendido. Es ahí donde yace la respuesta. Ahora eres tu la que debes escucharlo. Y si el dolor llega, entonces ambos deben afrontarlo y luchar juntos.
- Urd-san, esa es la respuesta que no deseaba escuchar, pero se que es la correcta.
La dos diosas se separaron y se miraron a los ojos. Luego Urd cerro la piedra con el archivo y se lo devolvió a Belldandy. Esta se estremeció a tocar la piedra donde estaba grabada la información de su amado, pero que no contenía las respuestas que buscaba.
- Urd, no puede actuar aun, pero pronto lo estaré. Por favor. Dame tiempo, no me presiones.
Urd volvió a abrazar a su hermana.
- No lo haré más Finalmente entiendo muchas cosas, y se que los he hecho sufrir a ambos. Ahora vamos casa, algo que he aprendido recientemente, es que los mortales deben alimentarse de manera regular... y Keiichi a diferencia del Dr Shugahara no creo que llegue a aprender a cocinar...
Belldandy rió ante la ocurrencia de Urd, su corazón aun se sentía triste, pero comenzaba a sentir un poco de paz. Se despidió del viejo árbol, y su ángel regreso a ella. Comenzaron a caminar por el sendero de regreso al templo. Entonces Belldandy vio a Keiichi que se dirigía hacia ellas. Urd también lo vio y decidió que era mejor dejarlos solos, así que simplemente floto y se dirigió a sus habitaciones.
Keiichi tenia una mirada extraña, era una mezcla de admiración y profundo amor. Sin decir una sola palabra, se acerco a Belldandy y tomo sus manos entre las suyas, pero sin atreverse a hablar. Belldandy se estremeció con el contacto inusitado. Keiichi nunca era tan espontaneo para atreverse a tocarla y ahora la estaba tocando de una manera distinta. Ahora sentía la fuerza de sus sentimientos mas fuerte que nunca. Finalmente, Keiichi se atrevió a hablar y Belldandy se estremeció con su pregunta:
- Belldandy ¿Quien eres en realidad?
Fin del capitulo 9
notas:
Core War. A veces llamado, el mas inhumano de los juegos. Fue muy popular entre los 80,s después de su publicación en la revista Scientific American. En este juego, se colocan dos programas en el núcleo de memoria de una computadora con el fin de que se intenten exterminar uno al otro. Del concepto de este juego es donde nació la idea de los virus de computadora ademas del concepto de la película "Tron".
www_Yggdrasil_hvn. : Pensé que era una idea original, pero en otro fanfiction "scream by divine right", encontré que alguien ya publico el correo de Urd en esta dirección.. urd(arroba)yggdrasil_hvn., al menos ahí no hablo del sitio web.
Turing, Alan: Es uno de los grandes dioses del panteón cibernético. Incluirlo entre los dioses creadores de Yggdrasil me pareció un homenaje adecuado.
Genio idiota: A veces, debido a algún daño en el cerebro, algunos individuos parece concentrar toda su capacidad en una sola actividad. Puedes calcular y multiplicar mentalmente cifras de decenas de números, y no saber escribir.
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