Pido una disculpa por el largo periodo, pero estuve enfermo y pasé por una cirugia,
lo que me impidió concentrarme en la historia, espero que les guste este capitulo.

Elnauhual


La orden de los Caballeros Mortales

Por Javier Delgado aka Elnauhual

Fan fiction, inspirado en "Oh mi diosa" de Kōsuke Fujishima.

Capitulo XXXIII

En el corazón de Yggdrasil

La noche en este lugar semidesértico era un magnifico espectáculo. Sin las luces ni los humos de la civilización las estrellas brillaban con un esplendor sobrecogedor, bajo ese espectáculo y apoyado en unas rocas había un hombre solitario que intentaba concentrarse en la brillante pantalla de su laptop. Sin embargo esta no lograba capturar su atención. Intentaba escribir, pero borraba y corregía sin poder plasmar sus ideas. Finalmente se dio por vencido y con resignación cerro la maquina, cerró los ojos para intentar recuperar la visión perdida por el brillo de la pantalla y meditar un poco para organizar sus ideas. Después de un rato los abrió y miro al cielo estrellado. No era el cielo familiar de donde había nacido, pero tampoco le era desconocido. En sus viajes a distintas partes del mundo había tenido oportunidad de familiarizase con las estrellas de otras latitudes. Después de largos minutos su visión nocturna regresaba y comenzó a percibir mas y mas estrellas y con ellas sintió que recobraba la paz interior.

Con cierta resignación se recostó en el suelo para mirar cómodamente al magnifico cielo estrellado y saludó mentalmente a las constelaciones conforme las comenzaba distinguir. Embelesado pronunció algunos de sus antiguos y variados nombres. Grecia, Japón, Roma, Sumeria, mesoamerica, cada cultura le había dados nombres distintos, no pudo dejar de pensar que los nombres mas antiguos se habían perdido, y sin embargo las constelaciones seguían iguales y sin cambio aparente. Sonrió y pensó que había sido un necio en intentar sentarse a escribir sobre lo sucedido. Cómo científico su costumbre de intentar documentar todo era muy fuerte pero ahora reconocía que eso tendría que esperar. No podía negar sus sentimientos.

En ese momento se sentía pequeño y minúsculo en medio del universo, pero sabia qué lo que había hecho podía cambiar el destino de los seres humanos, sintió un escalofrió al reconocerlo. El era un mortal que había intervenido en los asuntos de los dioses, y sintió una especie de premonición. Tal ves sus actos podrían afectar incluso las mismas estrellas y ese pensamiento era terriblemente perturbador. Eso es algo que solo los dioses debían hacer y entonces pensó en una diosa en particular y con un suave susurro una frase escapó involuntariamente de sus labios:

- Urth, mi diosa, ¿en dónde estás?

Pero el cielo estrellado no parecía dispuesto a responderle. Sabía que ella estaba emprendiendo una lucha en contra de un enemigo desconocido. Necesitaba alejar su miedo pues la razón le decía que su diosa era poderosa, pero su corazón humano sentía la necesidad de protegerla. Era extraño, esa idea: proteger a una diosa, lo había llevado más lejos de lo que alguna vez hubiera imaginado y por caminos insospechados que finalmente lo traído a este lugar solitario.

Entonces el Dr Shugahara Kenji se enderezó y se quedo sentado un momento en la tierra, y en la obscuridad busco las débiles luces del pueblo donde algo maravilloso había sucedido. Al menos durante una noche, enemigos, amigos, extraños, extranjeros, hombre, mujeres, jóvenes, niños y ancianos se habían unido en uno solo para compartir su humanidad y de alguna manera, el era el responsable de todo eso. Se estremeció ante la idea de haber tenido el poder de hacerlo. Eso era algo que no deseaba, el solo era un hombre, un mortal, incluso cuando los dioses le habían dicho que era algo más. ¿Un juez de demonios y dioses? Al principio lo había como un titulo meramente ceremonial, pero lo qué había pasado con Galileo le había mostrado que era mucho más que un titulo.

Entonces recordó cuando había tenido su primer encuentro con lo sobrenatural, la Lagrima de Hild que lo había intentado seducir con el poder. De alguna manera había pasado esa prueba, pero en el fondo sabía que no era completamente inmune al llamado del poder. Tendría que estar en guardia contra sus propios pensamientos. Lanzo una maldición ante esa idea, que resonó en el silencio de la noche y luego se quedo sorprendido de su acción. Finalmente estalló en una risa franca y contagiosa al pensar lo que habrían dicho sus alumnos de escucharlo expresarse así. Si, el humor era una gran medicina, tal vez la más poderosa, especialmente contra ese tipo de pensamientos.

Finalmente suspiro y se dio cuenta de que se había alejado demasiado del pueblo en su afán de tener un poco de soledad, sabia que mas adelante aun había minas y no debería alejarse mucho de la zona segura. Levanto nuevamente la mirada al cielo estrellado y agradeció mentalmente a esas constelaciones que eran como viejos amigos y que de momento también serian sus guías para no perderse. Entonces emprendió el camino de regreso al pueblo.

Llego a las afueras y bajo la macilento luz amarilla de un viejo foco vio a dos figuras conocidas. Sentaro y el Sargento Valois intentaban comunicarse, con muy poco éxito. El incomprensible japonés del niño desconcertaba al sargento, y el inglés con fuerte acento del sargento, estaba mucho más allá de lo que el niño había aprendido en la escuela. Kenji se detuvo un momento para disfrutar de la escena, al menos entre esos dos seres tan distintos había un intento de comunicarse. Finalmente se acercó a hacerla de intérprete.

El niño lo miro con alegría.

- Sensei Shugahara, lo estuve buscando, ahora que Ghadril termino su canto, ya no le entiendo a nadie.

Kenji le contestó sonriente:

- Solo quería caminar un poco e intentar escribir lo que paso aquí, pero creo qué también estoy demasiado emocionado para concentrarme. Me alegra que trates de hablar con el sargento, es una excelente persona. Espero que tengas tiempo de conocerlo mejor.

- Pero no le entiendo. Le pedí que me explicara cómo es que había podido simular su muerte, y solo entiendo algo de... De... - el niño se detuvo, luego se sonrojo un poco y continuo- creo que dice algo de un condón.

Kenji sonrió divertido, eso había sido una sugerencia de Valois. Era indispensable que los terroristas confiaran en Hervieux y al mismo tiempo necesitaba introducir a Ghadril entre los terroristas para que ella pudiera proteger a los rehenes en caso de que ocurriera lo peor. Al principio él plan de Valois había parecido descabellado, pero había sido un éxito. Había sido un milagro que Valois hubiera confiado en el sin haber comprobado las habilidades de Ghadril, pero al parecer su deseo de proteger a la joven científica que estaba a su cuidado era muy fuerte.

Kenji hablo brevemente con Valois para asegurarse de lo que había intentado decirle al niño y entonces comenzó a explicarle a Sentaro.

- El Sargento Valois alguna vez fue llamado para entrenara a algunos actores para una película y en el transcurso aprendió algo de efectos especiales. Básicamente, se coloca una placa metálica de protección en el pecho, luego una pequeña carga explosiva que se acciona con electricidad, encima del la carga se coloca un condón lleno de sangre artificial y se adhiere con cuidad. Además en la ropa se hace un corte superficial para que se rompa fácilmente con la explosión. Cuando Hervieux disparo con balas de salva, Valois activo la carga explosiva que rompió el condón y la tela. La apariencia de una bala penetrando en el cuerpo y luego la herida llena de sangre artificial resulta muy convincente. Es un truco muy viejo de cine, pero aun muy efectivo.

El niño miro con admiración al fornido sargento y le agradeció la explicación, el sargento rio con una risa cómplice y pronto los tres estaba riendo. Era una risa liberadora ante los acontecimientos que habían vivido.

En eso el doctor sintió una presencia y miro hacia atrás. Era una niña, tendría unos diez años y lo miraba con asombro. La niña se asustó al ver que el Dr Shugahara la miraba y entonces dijo algo casi incomprensible, se acercó temblando y les dejo a sus pies una bandeja con comida. Luego se postró ante ellos ocultando su rostro.

Kenji se quedo atónito, intento levantar a la niña, pero esta comenzó a temblar así que se alejó de ella aun poco, la niña dijo algo pero él no podía entender. Kenji intento confortarla, luego tuvo una idea, y le pidió a Sentarō que se acercara a la niña. Sentaro asintió, la niña levanto el rostro y también mostró temor al niño extranjero, pero la sonrisa del niño lo hizo desaparecer rápidamente. Sentaro con mucha suavidad la obligo a levantarse, pero aun había temor en su rostro. Ella sabia que era un niño como ella, pero también era un niño que hablaba con una diosa.

Sin embargo ante el contacto de la manos del niño ella dejo de temblar, y su miedo poco a poco se fue convirtiendo en maravilla. Estos seres que hablaban con los dioses parecían ser muy amables, entonces escucharon una voz y vieron un hombre que se acercaba saliendo de la penumbra, era Hervieux, este se detuvo a unos pasos de ellos y hablo con una vez que reflejaba reverencia.

- No debería asombrarse de eso, Dr Shugahara, a decir verdad, incluso yo me siento tentado a postrarme ante alguien a quien los dioses lo obedecen. ¿Qué va a pasar ahora? Aun ahora no puede razonar lo que pasó. Yo nunca pensé poder perdonar a ese hombre, y sé qué debería dudar de que vaya a cambiar, pero la razón me dice una cosa y el corazón me dice otra. No lo entiendo. ¿Esto mismo pasará en todo el mundo?

Kenji trago saliva nervioso, el mismo no estaba seguro, lo que había pasado había rebasado todas sus expectativas. Él había esperado que Ghadril pudiera alterar la memoria de los presentes para poder disminuir sus odios, pero de alguna manera incomprensible la valquiria había penetrado en el corazón de cada de los seres humanos presentes, tocando lo mas profundo y sacando los sentimientos más íntimos y terribles de una manera tal que la comunión llevo a cada uno de ellos a cambiar profundamente sus sentimientos. ¿Cómo había logrado la diosa guerrera ese conocimiento?, después de unos segundos de reflexión, Kenji dijo:

- El mundo aun no está preparado para entender todo lo que paso, pero creo qué esto es como una semilla que va a crecer poco a poco, y como una semilla, necesitamos cuidarla y alimentarla. Además tenemos que sembrar otras ideas, no todo puede depender de la magia. Ese terrible hombre que intento llenar al mundo de terror, ahora intentara convencer a sus seguidores que el camino no es el odio, pero también está consciente de que posiblemente no sobreviva a ello. El camino será largo y creo que aun se derramara sangre y debemos hacer todo lo posible para que eso no ocurra, por eso necesitare a hombres con sueños y dispuestos a confiar en lo que estamos haciendo. Quiero que se me unan y les mostrare a otros soñadores, entre todos podemos guiar a la humanidad por caminos nunca antes soñados.

Hervieux y Valois se miraron uno al otro, las palabras de Kenji les daba una nueva meta a sus vidas a un nivel que podría trascender mas allá de lo imaginable. Hervieux contestó primero.

- No sé qué planes tenga, pero no pienso regresar al LHC, esa joven maestra murió por mi culpa y pienso tomar su lugar. Provoqué mucho sufrimiento. Tengo grandes deudas que pagar aquí.

Kenji sonrió, de alguna manera esperaba algo así:

- Entonces aquí también nos puede ayudar. Este es tan buen lugar como cualquier otro... Y usted Valois, tiene una joven que proteger y me temo que no será la única ocasión en que tenga que actuar. Nos quedaremos unos días aquí, aun hay muchos planes que hacer y minas de desactivar, y no me refiero solo a la minas que explotan, sino también a las acciones humanas que a largo plazo puede ser mas aun mas destructivas. ¿Están de acuerdo conmigo?.

Hervieux y Valois asintieron con entusiasmo. Entonces Kenji comento.

- Ahora, hablando de desactivar minas, debemos decidir qué hacemos con nuestro periodista. El mundo exterior debió haber recibido muchas de las imágenes que tomó y necesitara una buena explicación de los acontecimientos.

Valois comento:

- Creo que eso fue un error, debió dejarme que requisara todas sus fotos y videos. Lo vi hace unos momentos, sigue fotografiando todo, sin entender que pasa, pero no por eso deja de documentar todo lo que ve, para mañana el mundo sabrá que algo extraordinario ocurrió aquí, todos nos reconocerán y entonces.

- No se preocupe, en ese sentido, hemos ejercido un poco de censura en lo que él envió. Tengo a alguien supervisando eso, fue así como obtuve las imágenes del campo minado y las zonas limpias de minas. Ademas ya hablé con el y está de acuerdo en que debe haber cierta censura.

- Debo reconocer que la información que nos dio fue muy útil, pero ¿es suficiente para confiar en el?, ademas ¿ha pensado qué historia será la que el mundo sepa?

Kenji miró a Sentaro que intentaba hablar con la niña y añadió pensativo.

– Una historia que no nos vaya a convertir en mesías o algo similar, la humanidad debe creer en si misma, y no depositar su fe ni un hombre o ni la magia. La humanidad sabrá que algo ocurrió aquí... Y después encontrarán una explicación completa en mi próximo libro- no pudo evitar reír ante la idea – Todos ustedes serán participes de la más grande de las conspiraciones...


Keiichi no pudo evitar una exclamación de asombro ante el saludo del dios. Ya había escuchado algo acerca de Gaia cuando Othala le había explicado la forma en que se haba recuperado después del ataque al templo Tarikihongan, pero en aquel momento estaba tan preocupado por Belldandy que le había prestado atención, solo recordaba que tenia que ver algo con un extraño poder de la tierra.

Entonces se sintió observado, el dios lo miraba con intensa curiosidad, y veía sus reacciones, luego muy lentamente separo su mano de la de Keiichi, como temiendo romper algo, después examino su mano con mucho cuidado, como esperando ver algún cambio y dijo:

- Interesante, nunca imagine que un humano pudiera contente tanto poder y no darse cuenta. Tienes un poder que es capaz de alterar de alguna manera a todo dios que entre en contacto contigo. - Cerro lo ojos un momento y luego los abrió con un aire de comprensión- Ahora comienzo a entender las memorias que extraje de Skuld. Has estado en contacto con varios dioses y has alterado su existencia, incluso... - Titubeo un poco y luego dijo suavemente- la de mi hija. Mi hija destinada a ser la mas grande entre los dioses... Las has - no termino de hablar se estremeció como intentando luchar con algo- Mis planes, mi intenciones. ¿Qué se ha hecho de ellos? ¿Qué me has hecho?

Keiichi se estremeció, temió que el dios recuperada su actitud anterior, sintió la necesidad dé explicarle

- No deseo causarle ningún daño, amo a...- titubeo antes de atreverse a decirlo- amo su hija Belldandy jamas la dañaría, ni tampoco a aquellos a quienes ella quiere.

- ¿Quereme? - el dios contesto en voz baja y miro directamente a los ojos cafés de ese mortal- ¿Me querría mi hija si sabe lo que tenia planeado para ella?. La consideré como un peón, como una herramienta, como un títere que solo serviría para tener el control.- El dios súbitamente pareció envejecer, su aspecto joven se perdía momento a momento, como si los años pasados fueran revelándose, Keiichi exclamo alarmado.

- ¿Esta bien? Necesita descansar, tal ves debamos pedir ayudar.

El dios lo miro y sonrió con algo de sorpresa reflejada en su rostro, la genuina preocupación de Keiichi-san pro su bienestar le parecía sorprendente.

- Extraordinario, hace solo unos instantes intente destruirte, y ahora te preocupas por mí. Creo que no me queda alternativa que aceptar que tienes algo de los antiguos jueces dentro de ti, aunque me cueste trabajo aceptarlo. Pero no entiendo, ¿qué hace un humano aquí en la memoria de Yggdrasil?, las memorias de Skuld son confusas, pero veo qué son tiempos extraños, Un humano juez y Hild aliada del cielo. Creo que ha pasado demasiado tiempo, comienzo a sentirme viejo.

Y al decir eso el dios realmente envejecía rápidamente, al principio había aparentado tener la edad de Keiichi, pero ahora parecía un humano de 50 o sesenta años. Keiichi comenzó a comprender, la apariencia de un dios no tiene que ver son su edad sino con su estado mental, el dios debería estar pasando por una crisis. Keiichi entonces dejo de ver en el a un poderoso dios, y en su lugar vio solo a una persona confundida. El joven mortal sintió tristeza y le puso la mano sobre el hombro y le hablo, intentando comprenderlo:

- Creo que ahora entiendo, tal ves sea algo parecido a cuando las diosas se dividen en avatares, usted debe ser un fragmento del padre de Belldandy y por eso aun vive, pero el padre de Belldandy era muy poderoso, y aun debe poseer mucho poder. Ese poder puede ser necesario para proteger a Belldandy y su mundo.

- ¿Proteger a mi mundo? - agito la cabeza – Algo muy extraño esta pasando, pero los recuerdos que le arrebaté a Skuld son confusos, tengo que averiguar que esta pasando.

Keiichi miro a los ojos al dios, sentía una verdadera preocupación por sus palabras y le dijo:

- ¡Entonces tome mis recuerdos!.

- ¿Me los ofreces libremente?- pregunto el dios asombrado- ¿A pesar de todo lo que hice?

Keiichi asintió con una sonrisa, entonces el dios estiro su mano para tocar el rostro de Keiichi, dudo un poco, pero entonces Keiichi tomo su mano y la acerco a su propio rostro.

El dios comenzó a extraer los recuerdos del mortal quien no intento ocultar o retener nada. Él dio vio el primer encuentro del mortal y su hija, vio lo que habían pasado juntos. Vio la batalla del templo, y las acciones de Keiichi para ayudar a su diosa. Vio a Belldandy convirtiéndose en Kamisama, y el mismo en juez.

Asi el padre de Belldandy sintió el profundo amor del joven, y se estremeció ante las imágenes de la destrucción del salón del consejo que Keiichi había presenciado en una grabación, y con ello vio la destrucción que había traído a su mundo. El dios entonces interrumpió su tarea horrorizado por lo que había visto, entonces extendió su otra mano en dirección al gran archivo que los rodeaba y comenzó a llamar información de los archivo para extraer ver mas.

El dios hábilmente comenzó a recolectar los fragmentos de información y en esos fragmentos también Keiichi pudo ver con lujo de detalles lo que había estado pasando. El horror de las escenas los unió.

Vieron como Belldandy se había intoxicado con la energía que había absorbido, y fueron testigos de su transformación en un ser dominado por el ansia de poder. Vio los efectos de la infección en su pueblo, y el peligro que corría, incluso con un estremecimiento final supo que incluso los mortales estaban trabajando para ayudar a su pueblo.

Entonces el dios miró a Keiichi y busco una vez mas entre los archivos del sistema, Keiichi vio cómo se materializaba un nuevo archivo, su propio archivo. Pero observo algo extraño, Keiichi había aprendido a percibir los sistemas de datos como como olores y sabores personales. Ese archivo era distinto, debía estar codificado una muy alta prioridad... ¿por qué? Belldandy le había dicho que el era especial para el sistema, por eso habían enviado a una diosa de primera clase, a la mejor de todas, a protegerlo. Keiichi lo había olvidado, pero ahí estaba la prueba.

El dios frunció el entrecejo, y cerro los ojos murmurando un hechizo y la protección del archivo estallo en pedazos. Pronto comenzó a examinarlo, pero era demasiado complejo para la comprensión de Keiichi, quien solo podía entender que el sistema daba a su vida una prioridad mas alta que la de Belldandy... Entonces el dios se separó bruscamente de Keiichi, quien siento dolor ante la súbita desconexión, pero se recuperó rápidamente. El mortal vio el horror y la desesperación en el rostro del dios que se daba cuenta de que él había contribuido al estado de las cosas.

- Hijo de Gaia, intenté destruirte y con ello he puesto en peligro a mi mundo, he interferido con mis hijas, y Belldandy fue presa de una entidad extraña, creo que todo lo que he hecho solo ha puesto a mi mundo en peligro.

El dios cayo sobre sus rodillas, gimiendo, pero entonces Keiichi tomo por los hombres y le dijo.

- No es momento de dejarse llevar por la confusión. Creo que aun tiene mucho poder y lo puede usar para ayudarnos. Creemos que en la memoria de Yggdrasil esta el enemigo, el verdadero culpable de las desgracia que han ocurrido en el Cielo y en Hell. Un enemigo que sospecho tiene mucho tiempo oculto, por eso necesito recuperar la memoria de Galileo.

El dios se sobresalto. - ¿Galileo? ¡ Es la conciencia artificial que vi en tu mente! ¿Y el esta en Yggdrasil?

Keiichi asintió.

- Las conciencias artificiales esta prohibidas en Yggdrasil, si el sistema lo detecta, lo destruirá inmediatamente, si no es que lo hace primero esa amenaza oculta que dices que hay en el sistema.

- Pero Galileo es ahora un ciudadano de la tierra...

- Eso no le importara al sistema. - El dios se quedo en silencio un momento meditando y luego dijo.- Ahora comienzo a entender. Estoy seguro de que ese intruso oculto que buscan es la causa de la locura, no entiendo como pudo penetrar en lo mas profundo del sistema, pero no puedo tolerar su existencia. No se si sea posible destruirlo o si eso si eso podrá detener la infección, pero debo acabar con él. Tal ves con eso repare lo que he hecho.

El dios parecía recuperar su juventud rápidamente, como respuesta a su nueva resolución, en eso apareció algo completamente fuera de lugar.

Enfrente de ellos apareció algo que parecía una anticuada pantalla plana y en la imagen de una hermosa diosa que Keiichi reconoció fácilmente, la imagen del rostro familiar lo lleno de alegría.

- ¿Peorth? ¿Como nos localizaste?, ¿como es que puedes comunicarte conmigo?.

La diosa lo miro asombrada, y tardo unos segundos en reaccionar, pero le costaba trabajo creer lo que veía, contesto llena de dudas.

- ¿Keiichi? ¿Realmente eres tú? ¿y el realmente el Concejal Tyr? Eso es imposible, él debería estar muerto junto con su esposa. El cayó en una emboscada en los últimos días antes de la tregua.

Keiichi sintió un escalofrió, eso parecía explicar muchas cosas.

- Es largo de explicar como llegue aquí, Y si, es el padre de Belldandy o tal ves debería decir, uno de sus avatares, creo que él estuvo oculto dentro de Skuld todo este tiempo, y sospecho que debe haber otra parte de el en Belldandy y otra en Urd.

El dios lo miro, entrecerró los ojos y luego simplemente asintió lentamente. Keiichi intentó hablar, pero fue interrumpido por Peorth

- No tenemos mucho tiempo, Keiichi, estoy seguro de que tu historia sera interesante, pero lo qué quiero saber en este momento es esto. No llegaste solo, tu entrada al sistema fue en la forma de un software muy importante para nosotros, la serie ADX, ese software es parte de los sistemas básicos de protección de Yggdrasil, y sin embargo hemos podido encontrar ninguna copia activa de el, solo fragmentos de código dispersos en la memoria y lo que queda parece estar dañado. ¿Cómo se posible que tú tengas acceso a una copia? Tengo a muchos dioses nerviosos por eso. Podría ser un espiá o algo peor, ademas de que es imposible que un humano haya podido penetrar al sistema.

Keiichi escucho con molestia la sugerencia de que fuera algo dañino, entonces hablo con un aplomo y decisión que sorprendieron a Peorth

- Esa copia tiene un nombre: se llama Galileo, el huyo de Yggdrasil para refugiarse en la tierra. Le dimos asilo y ahora lo hemos reconocido como un ser pensante. – Keiichi alcanzo a escuchar exclamaciones de asombro y temor que provenían de la pantalla, al parecer sus palabras no habían sido bien recibidas, pero no él importaba, así que hablo también para los demás escuchas- Con nuestra autoridad de jueces lo hemos aceptado como ciudadano de la tierra, ustedes ya no tiene jurisdicción sobre él. Pero la memoria de Galileo fue dañada al intentar refugiarse en la tierra, en mi computadora. No recuerda su existencia aquí ni quien o que destruyo a sus proceso padre. Por eso estamos aquí, buscando la información que falta, creemos que lo dañó tiene que ver con la infección que esta afectando a los dioses. – Keiichi sonrió con un toque de amargura al escuchar murmullos provenientes de la pantalla - Ahora se que por alguna razón las conciencias artificiales están prohibidas en el cielo, por eso intentamos hacerlo de manera oculta, pero parece qué ustedes finalmente nos descubrieron.

Peorth se había quedado sin palabras, era una historia increíble, Keiichi ya lo esperaba, entonces el padre de Belldandy intervino y hablo con autoridad, pero la tensión en su voz era evidente.

- Peorth, diosa de primera clase. Soy el concejal Tyr, y le ordeno que ponga en contacto con Belldandy y Urd, tengo que prevenirlas. Titubeo antes de continuar, y toda su autoridad desapareció, su voz aprecia a punto de quebrarse- No puedo contactar con mis otros avatares que residen en ellas. Creo que al menos uno de ellos fue destruido y y algo muy extraño paso con el otro. A pesar de que solo soy un fragmento del concejal Tyr, aun tenemos mucho poder, y si se sale de control eso puede ser peligroso, debo contactarlos e informarles de la nueva situación...

Peorth palideció ante las palabras de Tyr y con dolor dijo lentamente dijo:

- Hace unos instantes se reportó que el protocolo Ragna fue invocado. – y añadió en tono acusador – Pronto Lind sera ejecutada. El resto de los miembros del alto consejo de la hermandad de las valquirias seguramente ya debieron haber sido ejecutadas.

El padre de Belldandy dejo de escapar una exclamación de horror, y se dejo caer de rodillas. Se llevó las manos a la cabeza en horror y dijo.

- ¿Qué he hecho?- luego añadió lentamente – En el momento en que Belldandy fue nombrada Kamisama, mi otro avatar debía tomar control de ella, para poder cumplir con mis sueños de unir a los multiversos en uno solo. Belldandy necesitaría mi guía y mi poder. Pero acabo de revisar los registros y vi que Belldandy no estaba actuando según lo que to esperaba, algo debió haber salido mal, muy mal.

Otra figura apareció en pantalla junto con Peorth, era el concejal Myr, pero esta vez no era el dios amable, sino una severa figura que representaba toda la autoridad de su cargo, dijo en tono acusador.

- ¿Controlar a Belldandy? ¿A Kamisama? Eso es alta traición concejal Tyr. Siempre supe que eras ambicioso y que podías hacer lo que fuera para obtener lo que deseabas, pero nunca pensé que llegaras a manipular a tus hijas. Desde que se te aprobó tener tres hijas debí sospechar algo extraño. Si concejal Tyr. Te recuerdo bien, y aunque solo seas un fantasma de la ambición del verdadero Tyr sigues siendo responsable. Por tus palabras sospecho que Lind descubrió lo que estaba pasando y decidió actuar para liberar a Belldandy. A consecuencia de eso Lind y el alto consejo de la hermandad de las valquirias se ha sacrificado para corregir tus actos. ¿Sabes la pena por hacer algo así?

- La pena por traición, si la conozco. - Sonrió con cierta amargura- Cuando planee todo esto, no parecía serlo, solo quería actuar en contra de esos estúpidos del consejo que no querían ver al futuro. Pero ahora este joven mortal, este juez antiguo me ha hecho darme cuenta de lo que hice.

Keiichi estaba intentando comprender las noticias, finalmente se dio cuenta de lo que implicaban y exclamo alarmado:.

- ¿Lind? ¿Por qué esta en peligro? Ella nunca dañaría a Belldandy, si el concejal Myr dice que él es el culpable debería haber forma de evitarlo. Debo hablar con Belldandy, ella debe saber lo que esta pasando para que pueda salvar la vida de Lind.

Peorth miró con tristeza a Keiichi.

- Lo siento Keiichi, ya no se trata se que sea culpable o no. Lind debió haber intentando detener a Belldandy al darse cuenta de que algo estaba mal y para ello invoco el protocolo Ragna que llama en su ayuda al alto consejo de las Valquiria. Desde el momento la sentencia de muerte del consejo fue invocada por medios que no podemos detener. No hay manera de salvar a Lind., tenga razón o no en haber actuado así. Es una traición suprema actuar contra Kamisama sin importar la razón.

- Pero el concejal Tyr es el culpable- Miro al dios con desesperación- Debe haber forma de evitarlo, tienes que decirles toda la verdad, busca a Belldandy.

- De nada servirá, la ejecución de Lind ya esta programada dentro de su propio código de diosa. No hay manera de evitarla.

Keiichi insistió:

- Debe haber una manera, Belldandy no lo permitirá.

El concejal Tyr observo al mortal, y sintió su dolor, no imaginaba que alguien pudiera sentir sentimientos tan fuertes por la fría Lind, entonces le dijo con tristeza.

- Ni siquiera Kamisama puede evitarlo, pero hay algo incluso mas urgente y en lo que si podemos actuar. Estamos usando funciones no documentadas del Yggdrasil para poder observarlos y detectamos que ademas de ustedes hay otro proceso desconocido. En este momento ese proceso esta en movimiento, y se dirige hacia, hacia la entidad que llamas Galileo. Tengo sospechas de que es el mismo proceso que acabó con todas las defensas de Yggdrasil. Si el proceso detecta que Galileo que es de la Serie ADX seguramente intentara destruirlo. La serie ADX fue diseñada para manipular el sistema contra amenazas externas, no internas, así que no tiene ningún sistema de defensa contra un ataque.

Keiichi miro hacia la pantalla, su rostro mostraba determinación, entonces nuevamente empuño el arma de los primero nacidos y luego le hablo al dios que tenia enfrente, que aun tenia las manos en la cabeza como no queriendo escuchar nada.

- No se porque intentó controlar a Belldandy, quisiera creer que sus intenciones no fueron malas por muy equivocada que estuvieran. Si realmente quiere ayudar a su mundo, debemos proteger al sistema y a Galileo.

El dios miro a Keiichi con una humildad que conmovió a Keiichi, y luego su rostro se endureció, y murmuro un hechizo que le sonó familiar a Keiichi. Un destello envolvió al dios y su apariencia cambio, inmediatamente Keiichi reconoció el nuevo atuendo, era el uniforme de batalla de los dioses. Entonces hablo con voz de mando.

- Peorth, diosa de primera clase, transfierame en la posición de memoria mas cercana al intruso. Yo me enfrentare a el, este mortal ya ha arriesgado demasiado su vida y es demasiado valioso ...

Pero el dios fue interrumpido bruscamente:

- Espera un momento Tyr, tu arrogancia sigue igual. Tu estas muerto y ya no tienes autoridad para dar ordenes. Joven Keiichi. ¿Qué es lo que busca Galileo en esa zona de memoria?.

La tensión entre los dos dioses podía sentirse como algo solido, pero Keiichi comenzaba a acostumbrarse a la tensión y contestó con seguridad.

- Detectamos fragmentos de código semejantes al de Galileo, creemos que en esa zona hay fragmentos del software que ustedes llaman ADX, su código padre, tal ves aun podamos recuperar los datos de su memoria para comprender a su atacante y conocer al enemigo responsable de todo.

Tyr miro complacido al joven mortal y después de meditarlo unos instantes contestó:

- Entonces debemos ayudarlos a recuperar esa memoria. Correré un algoritmo para intentar recuperarla del pool de memoria y reparar los posibles daños. Pero necesitamos tiempo para poder recuperar la información dañada. Tyr, ¿me escuchas? Si atacas al proceso intruso corromperá esa zona de memoria y no podremos extraerla.

- Entonces lo atraeré hacia mi y lo alejare de ahí, pero entonces deben buscar una zona de memoria segura y lo destruiré.

Myr lo miro con un aire burlón:

- Y exactamente como lo piensas distraer. Por el movimiento en la memoria, parece que ya ha escogido a su presa.- Keiichi grito ante las implicaciones, pero fue ignorado, el padre de Belldandy contesto bruscamente:

- Myr, tú siempre fuiste el genio del sistema, dímelo tú.

- Esta bien, se me ocurre este plan. Te rehubicaré, pero lo haré intercambiando tu posición de memoria con la posición de Galileo, además cambiare tu identificación del sistema para que siga siendo Adx; Peorth ya esta separando una sección de memoria en un equipo auxiliar que podemos darnos el lujo de que se dañe. Pero al hacerlo así, no tendrás todo tu poder, le pondré un sello para que sea similar al de ADX, de lo contrario parecerá sospechoso y no caerá en la trampa. En cuando la información esté recuperada, romperé el sello y deber aprovechar para destruirlo.

Keiichi interrumpió.

- Y yo también debo participar, esa es la razón de venir aquí.

El dios lo miro directamente a los ojos y le puso las manos sobre los hombros y dijo suavemente.

- Eres un mortal, tu vida es corta y limitada, tal ves por eso es mas rica de lo que podemos imaginar. Ahora se que Belldandy te ama, y ademas he encontrado información sobre ti. Eres demasiado valioso para arriesgar tu vida. En cambio te dejare algo, que espero lo compartas con Belldandy

Si darle tiempo de reaccionar, el dios tomo entre sus manos las sienes de Keiichi y comenzó a cantar.

Keiichi sintió que se quedaba sin aliento, pero luego vio cosas maravillosas pero también trágicas, era parte del mente del dios que buscaba compartirlas con Keiichi, pero eran demasiado. Le estaba compartiendo parte de sus memorias, memorias antiguas que no se encontraban en los archivos, recuerdos personales, historia y magia. Pero era demasiada información y en muy poco tiempo. Finalmente Keiichi no soporto mas el flujo de información y cayó sin sentido.

- Que le has hecho al mortal.- Escucho que le decía una voz severa.

- Oh, quedara sin sentido por unos momentos, no le deseo mal, pero no quiero que intente ir detrás de mí. ¡Estoy listo!.

- Esta bien, debo advertirle, el extraño se mueve muy rápido en nuestro sistema, ha vivido en el durante grandes eras y lo conoce mejor que nosotros. Estoy revisando la zona que nos comento el mortal, efectivamente hay restos de que estuvo ahí un proceso de la serie ADX267, pero esta muy dañado, es una destrucción deliberada, y veo que usó bombas lógicas NOP. No se si pueda recuperar la información, esta demasiado dañada pero lo intentare. La locura aun sigue atacando a los dioses, y no hemos encontrado forma de detenerla.

- ¿No han encontrado la causa?

El canciller Myr suspiro y levanto una mano, llevaba un brazalete.

- Los mortales nos han dado esto. Al principio no lo creí, pero el ultimo reporte que el consejo recibió de Lind parecía categórico. Al parece la infección proviene de Yggdrasil y de ahí pasa a los dioses cuando les distribuye su energía. Este brazalete posee energía proveniente del mundo mortal. Es muy pura, y ninguno de los que ha usado este brazalete se ha contagiado. Lind nos envió algunos para los miembros de mas alto nivel del consejo. Algunos de ellos se rehusaron a usarlo, pero ahora han caído victimas de la locura.

- ¡Ese brazalete es obra de los mortales!- Y miro a Keiichi con respeto.- En que extraño mundo he despertado, en donde los mortales nos pueden ayudar.

Myr asintió solemnemente, y se escucharon murmullos detrás de el, la revelación de Myr había tomado a los demás dioses por sorpresa. Myr continuo:

- Estamos listos, debes tener cuidado, en este momento también eres código y puede atacarte igual.

- Entiendo los peligros, ahora transfieranme.

Entonces el cuerpo del dios se congeló un momento y comenzó a disolverse. En su lugar apareció una forma geométrica cambiante. Era Galileo. En la pantalla se escuchó un murmullo y la imagen de Peorth substituyo a la del concejal, con voz entrecortada por la emoción murmuro:

- Bienvenido Galileo, hemos estado buscándote, pero no espere comunicarme así.

Galileo no tenia forma humana, pero su código aparecía representado como una hermosa y compleja forma geométrica cambiante y con colores pulsando en una forma que parecía comunicar algo. Peorth observo y adivino correctamente su significad. ¡Eran emociones!, ¡ese software era capaz de tener emociones!, y un escalofrió recorrió su cuerpo. Duramente miles de años se le había enseñado que ningún software con conciencia y emociones debería existir o las consecuencias podían ser terribles. Entonces Galileo hablo y Peorth se quedo congelada con esa voz amable e inteligente.

- ¿Qué le ha pasado a Keiichi-San? ¿ha sufrido daños?

Al mismo tiempo que hablaba, su forma envolvió a la de Keiichi, examinándolo con cuidado, mientras colores pulsantes lo recorrían. Atónita, Peorth mirá al canciller Myr, quien solo asintió con una sonrisa. El era un dios antiguo de épocas anteriores a la prohibición. Coloco su mano en el hombre de la diosa para tranquilizarla, sabia que la joven diosa había experimentado demasiadas cosas nuevas pero era fuerte y solo necesitaba un poco de apoyo. Peorth no decepciono al canciller. Después de una breve pausa se recuperó y le dijo intentando no mostrar la emoción en su voz.:

- Keiichi-san acaba de recibir una transferencia masiva de datos, no ha recibido ningún daño, pero tardara un poco en procesar y organizar la información. Nosotros tenemos muchas preguntas qué hacerte. ¿Nos darás la información?. Eres parte de Yggdrasil...

La forma de Galileo se apartó del cuerpo de Keiichi, al parecer estaba satisfecha con su examen y contesto con voz tranquila y firme.

- Soy una conciencia libre, ya no formo parte de la jerarquía de Yggdrasil, he sido aceptado como ser consciente en el mundo mortal. Pero ustedes no son mis enemigos, les daré la información que me pidan.

De la pantalla se escucharon varios gritos de horror, Galileo era realmente una conciencia artificial libre. El concejal Myr tuvo que hacer un gesto enérgico para silenciar a los dioses. Peorth nerviosamente habló.

- Identificate, ¿Qué eres?

- Los mortales me han dado el nombre de Galileo, pero mi anterior designación dentro del sistema de Yggdrasil seria Programa de Defensa Predictiva adx-654 v2.03.05 por ser un Subproceso derivado de ese software, sin embargo debido a que sufrí daños a mi código, varias rutinas dañadas fueron substituidas por rutinas nuevas tomadas de otras librerías de código, por ello mi nueva designación en Yggdrasil es adx-654 v3.00. Esas funciones me han dado capacidad cognitiva que no poseía mi proceso padre.

Peorth contesto, la curiosidad comenzaba a ayudarla a dominar su miedo.

- Keiichi nos dice que huiste al mundo mortal ¿por qué?

- Mi existencia como ser independiente inicio en el mundo mortal, parte de la información que mi proceso padre me dejó fue dañada y ha sido imposible recuperarla, tengo muchas lagunas y aparte de que mi proceso padre fue destruido recuerdo poco eventos anteriores. Esperábamos poder recuperarse esa memoria, por eso entramos en Yggdrasil, incluso si esta dañada tal ves la pueda combinar con la que poseo y recuperarla. Keiichi piensa que con ello podemos identificar a la amenaza que esta actuando en contra de Yggdrasil. Por eso debo regresar a la zona de memoria de donde me extrajeron.

Pero al decir esas palabras un violento cambio de colores ocurrió en la imagen del software, Peorth observo con curiosidad y pregunto.

- ¿Qué es esa emoción? ¿Por qué el decir que debe regresar te provoca una emoción tan fuerte?

- Keiichi me informa que se llama: "miedo", pero qué debo aprender a controlarla, y no la debo ignorar.

- ¿Miedo? ¿ A qué le tienes miedo?

- Sentí una presencia extraña acercándose, tal ves sea una memoria residual, pero podría afirmar que es lo mismo que destruyo a mi proceso padre. Debo regresar, aun no había logrado recupera los fragmentos de información que quedaban residentes en el sistema.

El canciller Myr habló con un tono acorde a su posición de canciller.

- Galileo, Soy el canciller Myr, y uno de los diseñadores del sistema. No hará falta que regreses a esa zona, es demasiado peligroso, efectivamente hay un proceso extraño que sospechamos fue la causa de la destrucción de todo el software de defensa de Yggdrasil, incluyendo tu proceso padre. ES toda una sorpresa saber que pudo sobrevivir una copia, aunque sea una copia alterada. TE repito, no es necesario que recuperes la información, nosotros estamos haciendo eso, es cierto que la información esta demasiado dañada, pero si la puedes contrastar con la información que posees, tienes posibilidades de reconstruirla. En cuanto tenga el ultimo scan completo y verificado, te enviare esa información., pero debo advertirte, Yggdrasil no es un lugar seguro para ti. Deben abandonar el sistema lo mas pronto posible.

- ¿Qué harán con el código extraño?

Myr observo atención hacia una de las pantallas de información frente a el, y lentamente contesto.

-. En este momento, el avatar del canciller Tyr se esta haciendo cargo del código extraño, lo esta atrayendo a una zona de memoria en donde espero que no pueda causar daño, y después se enfrentara a él.

- El canciller sera destruido- Dijo Galileo como si fuera un hecho – He estado reconociendo el sistema y recordando su funcionamiento. Logre recordar que Yggdrasil poseía defensas muy poderosas, mas poderosas que cualquier dios, y todas fueron destruidas. Pude sentir la presencia por la que me substituyeron, no es un dios completo, solo es un fragmento de el, un avatar, no tiene ninguna oportunidad contra el extraño.

Myr palideció ante las palabras de Galileo y se daba cuenta de que tenia razón, ordeno con voz urgente

- Rápido, liberen todos los sellos de poder del canciller Tyr y sáquenlo de ahí, preparen una zona segura en donde colocarlo, es una orden...

Sin embargo nadie pareció reaccionar, Myr miro a su alrededor y solo vio miradas incrédulas, finalmente vio a Peorth que le dijo lentamente.

- El proceso del canciller Tyr ha sido terminado, el sistema marca error en ejecución por código dañado. Fue demasiado rápido, no pudimos reaccionar a tiempo.

Myr cerro los ojos y respiro lentamente buscando tranquilidad, pero no pudo evitar crispar los puños delatando su impotencia. Nadie se atrevía a decir una sola palabra y un silencio sepulcral invadió el recinto, interrumpido solo por algunos sonidos del sistema.

Finalmente abrió los ojos y miro a Peorth-

- Tyr, el canciller Tyr habría sido juzgado y condenado por alta traición incluso aunque fuera solo un fragmento de la conciencia original. Tal ves fue mejor así, al menos su muerte definitiva no sera registrada como traición.

Esta vez Peorth tomo la mano del dios, se daba cuenta de que debía haber existido un lazo entre esos dos dioses. Myr sonrió ante el gesto, y la estrecho con calidez.

- No pensé tener que volver a pasar duelo por el, pero tendrá qué esperar. Tenemos varios problemas aquí, el extraño es mucho mas poderoso que lo que poda imaginar. Galileo, debes marcharte y llevarte al joven mortal, es demasiado valioso para arriesgar su vida. Te estoy enviando los fragmentos de memoria que pudimos recuperar. Sin otro software de tu tipo son inútiles para nosotros. No intenten regresar, el sistema es demasiado peligroso para ustedes, y creo que no podemos protegerlos.

- Gracias canciller Myr, hemos aprendido mucho, pero evalúo qué una mayor permanecía implica mas riesgos que beneficios.

Ante la sorpresa de Myr, Galileo envolvió a Keiichi y se fundió con él. Ahora era una sola pieza de software, Myr nunca había pensado que eso fuera posible, quería saber mas, pero los viejos prejuicios contra las inteligencias artificiales seguían presentes, luego en un breve instante, desaparecieron.

En la sala de control, el canciller apago las pantallas y miro a todos los dioses con los que había estado trabajando. Han escuchado, Yggdrasil ya no es seguro. Debemos intentar contenerlo pues de ahí viene la infección que nos esta acabando. Tenemos que dejar de extraer energía del sistema. Cancelen todas las funciones que proporcionan energía a los dioses. No podemos arriesgarnos a tener mas infectados.

- ¡Pero nos quedaremos sin energía y sin poderes!- Dijo una voz de protesta, que solo provoco una sonría en el canciller, este levando la mano para enseñar su brazalete.

- Estuvo a punto de considerar como una broma los que nos dijo Lind cuando nos pidió usar estos brazaletes. Pero se qué Lind no podría mentir. Veo que tenia razón, por lo tanto la otra parte debe ser cierta por increíble que sea.

- ¿Qué otra parte? - Pregunto Peorth.

- Que los mortales están fabricando millones de estos para ayudarnos. No entiendo como hemos llegado a eso, pero aun tenemos esperanzas, por muy extrañas que sean.


Una mujer de unos cuarenta años y con la impecable bata blanca que usaban los científicos teóricos de alto nivel, se encontraba examinado una pulsera que parecía de cerámica. Con un microscopio de bajo nivel examinó su superficie con ojo critico, su rostro era demasiado severo para considerase atractiva, pero al terminar el análisis fue inundado por una sonrisa de satisfacción y sus ojos brillaron con una intensidad que parecía quitarle años de encima. Escucho una voz detrás de ella.

Era un joven de jeans y una camiseta que celebraba el tour algún grupo de rock , era uno de los estudiantes de posgrado de la Dra. Yukiko Ohta, profesor asociado, especialista en física de la materia condensada de la Universidad de Chiba.

- Dra. Ohta ya hemos terminado la verificación estadística del lote. Las variaciones en las especificaciones son minúsculas y sobrepasan con mucho las tolerancias que nosotros mismos definimos. Quien diseño el proceso de fabricación es un genio. Podría asegurar que todo el lote es perfecto. Cuando diseñamos estas piezas de Reolito Sintético Concentrador de Energía, nunca pensé que realmente alguien las podría fabricar y menos en ese volumen.

La Dora Ohta miro a su alrededor, se acercó a una de la cajas, en donde un empaque de poliestireno contenia cientos de brazaletes y se notaba que faltaba uno. Con cuidado colocó el brazalete que tenia en sus manos y miró a si alrededor.

Estaban en gran almacén temporal hecho de lona, en donde había cajas y mas cajas llenando todo el lugar. Cada caja contenía 1000 piezas cuidadosamente ordenadas, en total en todo el lugar debería haber 16 millones de brazaletes. Fabricados en un tiempo récord, luego dirigió su atención a su estudiante.

- Bien hecho, pero te recuerdo que el nombre oficial de este "Reolito Sintético Concentrador de Energía" es "brazalete", puesto que así serán usados.

- Pero profesora, eso no suena muy elegante...

La Dra. Ohta sonrió ante la protesta de su estudiante, a pesar de la aparente severidad de su aspecto, perlo corto, nada de maquillaje y un conservador traje sastre debajo de su bata, sus ojos brillaban con la intensidad de un joven.

- ¿Quieres un nombre elegante? Que te parece "brazalete de poder para dioses y demonios"

La doctora rio ante el estupor de su estudiante quien tartamudeando alcanzo a decir...

- Qu... qu... ¿quiere decir que los rumores son ciertos? ¿Realmente van a venir dioses a recoger eso? Pensé que era una broma interna para ocultar el propósito del proyecto.

- A veces la verdad puede ser una mejor forma de ocultar algo. Pronto ellos estarán aquí. Yo los he visto.

- ¿Realmente los ha visto ? ¿los dioses son reales?

- He visto lo que pueden hacer. Vi una joven que nos salvo la vida en el incidente que destruyo el laboratorio de materiales. Esa joven tuvo el poder de contener plasma de alta energía que habría vaporizado a un ser humano, para mi basta para llamarle un dios.

La doctora miro a su alrededor, sus demás alumnos se habían quedado callados en inmóviles, para no perder una sola de sus palabras. La doctora suspiro y los llamo.

- Acerquence, necesito explicarles algo. - Poco a poco los jóvenes se acercado y la rodearon entonces ella les hablo con voz serena- Todos ustedes habrán escuchado algunos rumores de sucesos extraordinarios en la universidad de Chiba. Debo decirles que todos los rumores son ciertos – escucho una exclamación de sorpresa de los jóvenes, pero ninguno dijo nada, intuían que faltaba mucho mas.- Hoy verán cosas extraordinarias y sabrán porque no les hemos dicho todo, pero regresando a la universidad les enseñare toda la verdad de lo que ha pasado recientemente en la universidad. Esto ya lo conocen científicos de todo el mundo, con la coordinación de CERN. No deseamos tener que ocultarlo mucho, pero pronto entenderán todo.

Una voz entrecortada hablo detrás de ella.

- ¿Pero si es tan grande, lo podrán seguir ocultando?

- No para siempre. Todo esto sera conocido por el mundo, pero debemos tener cuidado, Si se hace de manera inapropiada podría causar pánico y descontrol...

- ¿Entonces si existen dioses? Eso es...

- Dioses y demonios - Corrigio la cientifica - Y vamos a ayudar a ambos. Los verdaderos dioses y demonios tiene poco parecido con los de las religiones, pero si le decimos a la gente que vamos a ayudar a demonios, no lo podrán entender...

Una de las jóvenes, una pequeña rubia, habló con marcado acento extranjero.

- ¿Ayudar a demonios?. Pero … Son malos, no debemos hacerlo y...

- Silencio.- Miró son severidad a la joven. - Eso es justamente lo que debemos evitar. No juzgues antes de tener los hechos completos.

La joven se estremeció y puso la mano sobre su pecho donde colgaba un pequeño crucifijo.

Eso es todo por ahora, pero les prometo que ponto se les borrará cualquier temor que puedan tener. En este momento quiero que se aseguren que todas las cajas están bien cerradas e identificadas. La mitad ira al cielo y la otra mitad a Hell, el infierno.

- Algún problema doctora- dijo una voz desde la entrada de la bodega. Era un hombre con turbante y venia acompañado de un joven. Se acercó a la doctora con paso firme y la saludo con una inclinación de cabeza, el joven que los acompañaba lo imito.

- Profesor Sripathi, me alegra verlo. Todo esta bien, solo intento convencer a estos jóvenes que pronto verán que los rumores mas fantásticos que han escuchado en su vida son reales. . . No los culpo por reaccionar con un poco de escepticismo y extrañeza, de no haber vivido los sucesos del centro de materiales yo estaría igual.

- Me alegra que usted esté aquí. Afuera vi al profesor Nakayama. Se que ustedes dos perfeccionaron el material y el diseño de los brazaletes. Lograron aumentar su concentración de poder en varias magnitudes. Muchas vidas se salvaran gracias a ustedes.

- Gracias pero no fuimos solo nosotros, ese joven, Keiichi, debe ser un ingeniero muy brillante, no esperaba realmente que alguien las podría fabricar en esta escala- mientras señalaba a las filas de cajas que los rodeaban- Pero necesito que me confirme lo que esta pasando, aun lo encuentro increibe. Dioses y demonios están enfermando y estos brazaletes evitaran que se extienda la infección.

- Así es, no se lo habíamos explicado completamente porque cuando iniciamos solo era un hipótesis, pero finalmente lo hemos confirmado. También siento mucho que no le informamos todo. El Dr Shugahara organizo un grupo de especialistas en enfermedades, y junto con sabios de Hell finalmente lograron determinar con exactitud el origen de la infección.

- ¿Quiere decir que hay científicos trabajando directamente en contacto con los demonios? Profesor Sripathi, ¡Eso me parece indignamente!

El profesor Sripathi se quedo sin palabras ante las palabras de la doctora, pero entonces le vio a los ojos... Y entendió.

- Lo siento mucho- dijo sonriendo-, pero después de hoy no podrá tener ninguna queja al respecto. Tendremos que estarles proporcionando brazaletes de manera periódica, podrá tener todo el contacto que quiera con ellos.

Súbitamente se sintió algo en el aire, era una sensación sofocante, como si les faltara el aire, y luego un a poderosa luz comenzó a envolverlos...

- ¿Qué es esto? ¿que está pasando?

- Son seres que viven en un universo de 11 dimensiones de espacio. Abrir un portal entre universos requiere mucha energía y un control extraordinario para evitar que colapse.

Los ojos de la doctora se entrecerraron y miraron con intensa curiosidad a la luz que se estaba formando. ¿ multiversos? ¿ espacios transdimensionales? Estaba a punto de ver algo con lo que había soñado. Entonces un grito se escuchó a lo lejos y un hombre entro corriendo.

- Espérenme, también quiero ver eso

Era el Dr Shigeru, que corría como un joven ignorando completamente su dignidad de investigador asociado...

Se estaban formado dos portales, la visión era magnifica y aterradora. Sabian que estaban mirando a los abismos adimensionales que separan los multiversos, y flotando sobre esos abismos se movían rápidamente símbolos extraños, que parecían contenerlos.

Estaba tan absorto intentando observar las paredes del portal, que no se dio cuenta de que estaba penetrando uno de los círculos cuando de pronto, choco con algo solido... O no tan solido.

Aturdido y sin pensarlo elevo las manos para sentir con lo que había cocado y sintió una suavidad reconfortante que...

El Dr Shigeru grito y dio un paso atrás cayendo torpemente en el suelo. Entonces la vio. Era una mujer... Pero eso era decir poco. Era una voluptuosa mujer, piel morena y una espectacular cabellera rubia que caía en cascadas sobre su espalda, vestía un ajustado y elaborado traje que acentuaba la voluptuosidad de su cuerpo y al mismo tiempo sugería de era alguien de muy alto nivel, ademas el traje al frente apenas cubría sus...

El Dr Shigeru sintió que las manos le quemaban al darse cuenta de lo que había tocado... Entonces subió la vista y se quedo petrificado. Unos fieros ojos rojizos lo miraban con furia, y su boca sonrió dejando al descubierto unos pequeños colmillos. La mujer levanto su mano apuntando hacia el mientras un brillo rojizo se forma en su mano. El Dr Shigeru cerro los ojos esperando lo peor.

Fin de capitulo XXXIII


notas:

Canciller Myr: Uno de los antiguos programadores de Yggdrassil, no le gustan muchos las reglas y ni las responsabilidades, a menos que se necesario

Canciller Tyr: El padre de las Nornas y arqutecto de una gran conspiración.

Recientemente en el manga se revelo que este era su nombre y decidi usarlo, pero tal ves pueda ocurrir cierta confusión con el otro personaje de nombre similar, espero que no les cause molestias.