Capitulo IX : " Un beso y una sorpresa completamente inesperada."

- Kikio supongo que te quedaras aqui con tu prometido - Kikio asintió sonriente - Muy bien. Mirku y Sango vinieron a verme pero necesitan ir al pueblo para ver como estan por alla, ya que solo se quedaran unos dias. Houyo me cuidara estas 2 noches en que tu te quedes en el hospital. - continuó, sonriendo levemente.-

Eso le cayó como un balde de agua fria.

Kagome

y...

Houyo...

En la misma enorme casa...

mansión..

con Kaede..

que no escucha absolutamente nada...

Eso si que era una mala noticia.

- Oh. - Es lo único que salio de la boca de Inuyasha.Un seco, malhumorado y sorpresivamente celoso "Oh".-

Kagome noto su tono. Un celoso Inuyasha estaba saliendo a flote. Y, aunque estaba completamente acostumbrada a sus escenitas cuando se le salia un "Oh", no era de suponer nada bueno. Digo, si simplemente hubiese gritado, armado un escandalo o, incluso, llamado "pervertido" a Houyo, por más que este no hubiese hecho nada, no era de temer. Lo que si era de temer es que se quedara callado. Misteriosa y asombrosamente callado. Cuando esto pasaba era que ya estaba al tope. Al tope de los celos, al tope de lo aguantable.

- Nos vamos - informó Houyo, quien estaba tras de ella. Él la tomo del codo y la llevo hasta la puerta.- Adiós, Inuyasha. Descansa. - le dijo, y un extraño brillo en sus ojos se hizo presente.

- Eh?...si. Nos vamos - respaldo Kagome, saliendo de su pequeño trance.- Kikio, Inuyasha... - se despidió dando una pequeña reverencia. No pudo evitar notar que Inuyasha ni siquiera la miró cuando se iba. Un brillo latente, entre furioso y triste tambien se hizo presente en sus orbes doradas.

- Nos vemos. - dijo Kikio, entre dientes, mordiendo cada palabra. Lo que menos queria ella era verle la cara. - Cuidate- le aconsejo a Kagome, con la intención de llamarle la atención, ya que esta se encontraba mirando a Inuyasha.-

- Adiós - Fue lo único que hizo antes de que Houyo la tomara del hombro y la llevara fuera de la habitación.- ¿Por que tanta prisa, Houyo? - le preguntó curiosa Kagome-

- Nada de importancia... solo, creo que no deberiamos tardarnos en irnos, ya se hace de noche.-

Kagome miro su reloj. Eran las 7:43 p.m . Era verdad. Ya comenzaba a anochecer.-Vamos - dijo mientras se dirigian a su auto.

- Tu novio estaba bastante celoso... - musito Houyo, hablando despacio pero lento para que Kagome entendiese cada palabra. Doble intención.

Kagome paro en seco. No se molesto en mirarle y siguio adelante. Cuando llegaron al auto, Houyo se apresuro en abrir la puerta del copiloto, pero fue en vano. Kagome le hizo un ademáncon la cabeza informandole que ella manejaria.

- Estas segura de que quieres manejar? - pregunto inquisitivo Houyo.-

Kagome asintió con un leve movimiento de cabeza. Se subio al auto, puso la llave y echo a andar su deportivo azul electrico. Se puso el cinturon y miro a Houyo, para que este tambien se lo pusiera. Y el, obediente, lo hizo.

Kagome miro hacia atras, apoyando el brazo en el borde de la portezuela del auto y retrocedio. Cuando ya hubo salido del estacionamiento, entro a una calle de doble vía y paró en el semaforo. Cuando este se puso en cafe, anunciando que cambiaria de color, Kagome echo a andar el auo nuevamente, no antes de ponerse unos lentes oscuros que habia cerca del asiento del conductor. Miró hacia los dos lados y antes de comenzar a andar le dijo, en completa serenidad.

- Una cosa... él no es mi novio. - Y siguio con su camino a casa.

El camino a casa fue bastante tenso. Houyo no se atrevia a rticular palabra porque conocia a Kagome y sabia que en esos casos era mejor callar.

Llegaron a la mansión, Kagome estaciono el auto y se fue directo a darse un baño, caminando hacia este, le grito a Houyo - Estas en tu casa! - seguido de un portazo.

- Lo sé...- se limito a decir. " De cualquier forma sera mia muy pronto, quieras o no." -

Kagome se dio un baño de espuma y se relajo completamente. Cuando hubo terminado se puso un top blanco corto y unos bluejeans negros sueltos. Se puso unos calcetines cortos y bajo.

Encontro todo oscuro. Se acerco al comedor, que era lo más cerca de la escalera y prendio la luz.

Sorpresa.

Era Houyo, sonriente, vestido con un traje rojo y camisa negra, si corbata. Peinado hacia atras, elegantemente, con un brillo especial y con la colonia que siempre habia usado. Se habia puesto bastante ya que ella podia olerlo desde donde estaba. Y, frente a él, la mesa puesta para una cena de alta alcurnia. Cubiertos de los mejores, que ella y su padre solo guardaban para ocasiones especiales, un plato de cerdo , vino del mejor, acompañado de velas.

Era una cena a la luz de las velas.

Kagome alzó las cejas con incredulidad - Y esto? - preguntó con asombro.-

- Una disculpa... - Houyo se acerco hasta ella y le estiro el brazo - Me acompaña, mi hermosa damicela? - le preguntó con una gran sonrisa en el rostro.-

"Mi hermosa damicela" pensó Kagome. Asi le solia llamar Houyo cuando eran "amigos" o quiza algo más sin siquiera darse cuenta.-

- Claro ... - susurró, asomandosele una tierna sonrisa.- Aunque...- se miró - No deberia ir a ponerme un vestido como las damiselas de los cuentos? - le preguntó, con un poco de sarcasmo, sin enfado, solo broma.

- No hay tiempo - le musito, cuando se hubo inclinado hacia su oido.-

-Bien...-

Durante la cena Houyo y Kagome se la pasaron de maravillas; hablaron de los viejos tiempos, de lo que habia pasado durante esos años, etc. Houyo le contó a Kagome que era dueño de muy pronto seria dueño de una larga cadena de millonaria empresas en el país, dijo que un negocio le estaba saliendo de maravillas y que pontro tendria resultados.

- Negocios millonarios, eh?... - Kagome miró su plato y con tristeza y melancolia añadio - Como mi padre... -

A Houyo se le borró la sonrisa del rostro.- Seguramente esta bien... me dijo que vendria en unos días más... muy pronto - agrego, guiñandole un ojo.-

A la muchacha se le iluminó el rostro - En serio? - pregunto -

- En serio.- Afirmo Houyo con serenidad.-

La cena siguio en calma hasta que sono el reloj del comedor dando las 1 de la mañana. Kagome se disculpo y se fue a dormir.

Ese habia sido un dia muy largo y no le quedaban ni siquiera rastros de sueño. Asi que se sento en el balcón de su alcoba.

- Como... los vie...jos tie..mpo..s, a..h...? -

Se escucho la voz entrecortada de Houyo subiendo por la enredadera que subia al balcón. Kagome miró hacia abajo y es como si de un momento a otro hubiera vuelto a su adolescencia; Houyo subiendo a su habitación en la noche, cuando ella no podia dormir.

- Que haces...? - pregunto riendo con ganas.-

- Solo... - consiguio subirse y se logro sentar a un lado de Kagome - ... Trataba d subir a tu habitación -le guiño el ojo..-

- Estaba la escalera...-

- Pues...debo admitirlo - levanto la mano como haciendo un juramento - No estoy acostumbrado a usar las escaleras de esta casa para llegar a tu habitación...-

- Jajja... - rió Kagome.- Pues bien... - miró hacia el frente, donde daba a la vista una hermosa escena: Parte del bosque tapando parcialmente la costa. Se escuchaba el ruido del impacto de las olas con las rocas de la orilla de la playa.

Houyo la siguió mirando los proximos minutos. Como si estuviese hipnotizado.

- Te ves muy linda a la luz de la luna...-

Kagome ruborizó. Eso se lo habia dicho unas noches antes de que él se fuese. - Gracias... - susurró.-

- No te pongas nerviosa - Houyo se acerco un poco más . Le tomo una mano y la puso, junto con las suyas, en su regazo. - Recuerdas cuando... eramos adolescentes...? -Le pregunto timidamente..-

- Sí... la pasamos muy bien.. - sonrió levemente.. - ¿Cuál es el punto, ah? - pregunto curiosa.-

- Nosotros nos... queriamos mucho, recuerdas? -

- Yo te sigo queriendo, Houyo... - le dijo, mirandolo a los ojos - Para mi fue muy dificil cuando tu te fuiste... no sabia que hacer, no sabia porque... se escuchaban rumores de que tu padre habia muerto y me senti realmente culpable de no apoyarte y solo contrte mis problemas mientras tu tenias los tuyos propios... - le dijo, sinceramente, aun manteniendo la vista fija en sus ojos marrones.-

- No podía quedarme... mi padre me habia dejado un... legado. - respondió - Para mi tambien fue muy dificil... pero tenia que irme.. Yo te seguia... amando... y no me queria alejar de ti...-

Tanta sinceridad estaban haciendo corto circuito en el cerebro de Kagome. Asi que él la amaba. - " Esto es demasiado para mi..." - pensó, reprochandose el no haber aprovechado la oportunidad de estar con él cuando podia.

- Y aun te amo... - culminó su frase.-

" Aun me ama..." - pensó - "Aun me ama.." ... " Aun me ama! .." - Pero que era lo que sentia. Alegria, o quiza.. descepcion?...-

Era dificil pensarlo. Y saberlo en ese instante aún más.

- Yo ... pues...- estaba balbuceando. Habian pasado años desde que no habia balbuceado. Debiea estar muy nerviosa o quizas... incomoda. Claro, se sentia incomoda con la declaración de amor de Houyo tan repentina.

- No espero una respuesta... - Dijo, despues de unos tensos segundos de espera. - Quiza ese InuYasha ya me robo tu corazón...además, despues de todo han pasado varios años...unos 4, no?.. Quizas ya no sientes lo mismo hacia mi que cuando eramos unos adolescentes. Los sentimientos cambian, Kagome. -

" Y las personas tambien ..." - quizo decir Kagome. Houyo hablaba con una madurez de la cual Kagome jamas pensó que seria dueño. - Pues... - pasó de mirar el paisaje a mirar a los intensos ojos de Houyo, que brillaban con un dejo de nostalgia y uno de... astucia?.. - Yo tambien te quiero... - logro decirle Kagome. " Como amigo.. Porque no le dijiste eso tambien!..."- se recrimino-.

Luego de unos minutos en que mantuvieron la mirada, a Kagome le comenzó a doler el estomago. Y no era de mariposillas. No. Esto era un verdadero dolor de estomago. Y, mas que de estomago, de cabeza. Fruncio el ceño. Por alguna extraña razón Kagome no podia dejar de mirarlo. Es más, ni siquiera podia moverse. Quizas por el nervio... o por el alcohol. Su padre jamas la dejo tomar mucho y eso le estaba dando muchas complicaciones.

De pronto, como si del aire se tratara, sintio algo cálido posarse en la comisura de sus labios. Miró al frente.

Houyo. Por supuesto.

Kagome se resistio, cobro el movimiento del cuerpo, por decirlo de alguna manera , y se resistió un poco. Pero luego el beso paso a otro nivel. Kagome recordo cuanto lo queria en aquellos tiempos y cuanto lo queria ahora. Sintió unas leves ganas de corresponderle el beso para ver que era lo que sentia ahora. Esa fue la primera causa de porque lo hizo.

Con Inuyasha.

En el hospital solo se escuchaban los leves gritos de los bebes en la salacuna y una que otro monologo en los pacientes anestesiados.

Kikio estaba sentada en un sillón al lado de la cama de Inuyasha.

Se habia pasado la tarde sirviendolo.

Inuyasha no se podia sentir más furioso. Ahora, era una mezcla de melancolia, nostalgia, dolor, furia, pero por sobretodo celos.

Si. Le daba celosq ue Kagome estuviera con él esa noche y que, si a Houyo se le ocurria hacer algo indecente con SU Kagome, no estuviera ahi para detenerlo.

De todas formas, y a su más grande pesar, se veia que Houyo la queria mucho. Quiza demasiado.

o...

Quiza...

Obsesivamente.

A Kagome y a su... dinero.

Pero, si a él le habia costado millares y millares que ella se fijara en el.

¿Por que le costaria a Houyo?

...Yo ya se que la amas que no puedes perderla,
que por ella respiras,
que darias la vida solo por retenerla,
pero voy a contar aunque no es nada nuevo,
que el amor es un juego que tu no sabes jugar...

Con Houyo y Kagome

Le correspondio el beso y sus alientos se fundieron. Ciertamente, Kagome podia sentir el sabor del vino en su boca y Houyo tambien, supuso ella.

El beso comenzaba a hacerse más apasionado y de repente se vio acostada en el suelo. Con Houyo besandola y acariciandola, sin ser libidinoso.

Con Inuyasha

...No la llames,
no la busques,
no le digas nada,
solo espera a que te llame veras que te extrana,
Solo a veces tu la haras sentir como una reina,
y otras veces dale celos, se va a enamorar de ti...

El le habia dado toda su atencion.

Y Houyo solo se fue.

...Y si te enamoraste, que jamas se de cuenta,
las mujeres no aman a quien muere por ellas,
y si solo te importa mucho mas de la cuenta,
no me escuches a mi en el juego del amor yo siempre perdi...

Siempre le habia demostrado que la queria, pero que obtuvo a cambio?.

Un rechazo.

Una y otra vez; un rechazo.

Con Houyo y Kagome

De repente, sucedio.

Kagome se dio cuenta de que no sentia nada más que amistad, que ese beso solo estaba robandole tiempo y saliva.

Pero...¿Por que de repente le habia venido la imagen de Inuyasha, sinitendose culpable?

Lo paro.

Puso sus manos en los duros hombros de Houyo. Intento pararlo. Movio la cabeza a un lado, cotando el beso y la inspiración.

Con Inuyasha

...Tu ya no tengas miedo,
tu no vas a perderla,
y es que a veces amar no es con el corazon si no con la cabeza,
te lo voy a decir, auque no es un secreto,
que el amor es un juego que tu no sabes jugar...

Quiza solo era porque jamas iba a amarlo.

Pero no se daria por vencido.

Eso Jamas!.

Si Kagome supiera... Lo que era Houyo en realidad.

Con Kagome y Houyo

- Lo siento... no puedo. - Logro decir, con Houyo aún sobre ella.

Houyo se aparto y susurró una maldición. - Yo tambien lo siento - le respondió.

Houyo se paró y ayudo a parase a Kagome tambien. Esta tmo su mano y cuando estuvo a su lado lo abrazo con ternura.

- Te quiero mucho pero... creo que solo como amigo. - susurro a su oido, sonriendo.-

Siempre le haban confundido sus sentimientos. Jamás sabria que sentia con Houyo ya que este estaba lejos. Pero este no la hizo sentir especial. Ahora estaba aqui y habia aclarado sus sentimientos. El fanntasma de Houyo la hbia perseguido durante años.

Confundiendose entre el y... Inuyasha.

Quizas queria a Houyo, pero... amaba a INuyasha?

Houyo susurro un pequeño " Lo siento por eso..." como respuesta, paro el abrazo aparto a Kagome y le dio una mueca disfrazada de sonrisa.

Se dirigio a la puerta y se fue dando un ligero "Buenas noches".

Kagome se recosto en la cama de doble plaza.

Ciertamente, quizas mañana tendria tiempo de aclararlo todo.

Mejor dicho, pasado mañana cuando Inuyasha volviera. Ella le preguntaria que era lo que él sentia por ella.

Quizas se llavaria una descepcion.

Quiza no.

Una sonrisa se dibujo en sus carnosos labios al pensar eso. Al pensar que INuyasha la queria tanto como pensaba que ella lo queria.

Al otro dia, Kagome decidio que era mejor olvidarse de todo lo que habia pasado la noche anterior.

Hacer como que nada paso.

Y eso hizo, fue a la habitación de Houyo y le invito a hacer unos panqueques para el desayuno.

Houyo acepto.

Kagome bajo y puso todos los ingredientes - pocos, por cierto - para hacer los panqueques.Houyo bajo unos minutos despues de darse un baño.

Era como los viejos tiempos. Cocinando juntos. Riendose de todo.

Pero... lo que menos sabia Kagome era que , por más que esto se pareciera a lo pasado, el pasado jamas es igual. Y las personas, mucho menos.

Comenzaron a jugar y Houyo no paraba de molestarla, recordandole cuando jugaban basquetball ella siempre se caia, o cuando la pelota le llego a medio rostro, o cuando estaba a punto de darle al aro, pero la iro tan despacio que cayo solo un metr mas alla de ella.

Kagome se enfado un poco, y en esos arranques que le dan a uno al sentirse humillado, le tiro harina en todo el rostro, camisa negra y pantalon caqui que llevaba puesto.

Houyo se desquito y le tiro tambien la mitad, es decir, toda la harina que habia en el recipiente. Y un poco de la pasta de harina y huevo qe habian hecho. Eso se lo tiro en el cuello y le cayo un poco a la boca. Kagome riendose se paso la mano por la boca corriendo el lapiz labial rosa que se habia puesto. Luego comenzaron a pelear y se cayeron al suelo.

Kaede, quien estaba sola, porque las sirvientas tenian esos 4 dias de vacaciones,por ordenes de Kagome, solo estaba a su lado, un poco amargada porque despues tendria que limpiar todo pero muy divertida con la escena.

Ding-dong.

Se escucho el timbre.

Kagome corrio a abrir pero se resbalo en la cocina con la pasta de huevo que habia caido en el suelo. Houyo fue más rapido y, no se devolvio ya que no escucho cuando Kagome cayo y abrio.

Kagome se levanto, se sobo los muslos y las nalgas, ya que cayo sentada, y se dirigio a la puerta.

Ahi estaba; Inuyasha con Kikio tras de el, Houyo frente a Inuyasha, quien al escuchar pásos miro hacia ella. Le dirigio una sonrisa y vio que los ojos de Inuyasha levemente se desviaron a su boca.

Luego Inuyasha vio a Houyo. Sus ojos miel parecian llamas de fuego.

Ahora si que estaba furioso.

Kagome ni se entero porque y Houyo ya estaba tirado en el piso con un hilillo de sangre bajando de su boca.

Luego entendio.

Ella Y houyo estaban completamente sucios, con los mismos "ingredientes" sobre ellos, Kagome con el lapiz labial corrido ya que se habia limpiad solo con la mano y, seguramente cuando le tiro algo en la mejilla, parte de ese color rosado del labial mancho su camisa y levemente su mejilla.

Era como si ellos dos, se hubiesen... Como si ellos fueran una pareja de enamorados que, anteriormente, se habian estado besando.

Corrio a Houyo y le pregunto si estaba bien.

Este asintio.

Miro a Inuyasha, que solo miraba conf rialdad al recien golpeado, luego a Kikio que miraba espectante a Inuyasha y la escena que armó.

- Pense que saldria mañana del Hospital - le dijo, como tratando de calmar el ambiente.Mirando fijamente a Inuyasha.-

- Me recupere más rapido de lo que pensaban los doctores. - dijo, con severidad - No me esperaban, no? - le pregunto, amargamente y con una sonrisa arrogante.-

- No.. - susurro Kagome. Volteo a ver a Houyo quiens e sobaba la mejilla, dirigio una mirada confundida por ese asunto, a Inuyasha y luego, vio a Kikio, quien ahora más que sorprendida parecia un poquitin celosa.

Dirigio su mirada a la puerta y vio a quien de seguro jamas penso que veria.

¡Era su padre!

¡En el umbral de la puerta!

¡Su padre completamente sano y sonriendole!