Ranma, el cerebrito
Dicen los que saben (y de esto saben mucho) que en un lujar llamado "Japén" o "Japón" (no están muy seguros del nombre exacto) no hace tanto que un tal Ranma Saotome estuvo a punto de ganar las olimpiadas matemáticas. Incluso, aseguran (y habrá que creerles porque saben mucho) que los hechos ocurrieron en algún momento del siglo pasado (tampoco les agobiemos indagando sobre el año exacto; que son sabios, no historiadores). Lo que sí podemos saber con certeza (incluso sin pertenecer a aquel selecto grupo de ilustrados) es que todo comenzó en Nerima y por culpa de la versión japonesa de la revista "Muy interesante", la célebre "Muy kawaii" (porque, como todo el mundo sabe, a los japoneses solo les interesan las cosas bonitas). Precisamente, la prometida del susodicho Ranma Saotome se encontraba leyendo el número 39 de esta revista en algún momento del siglo pasado (sería pretencioso por mi parte intentar precisar más que los que saben) junto a su hermana Nabiki y a su prometido en el salón de su casa.
-Miren, qué interesante…digo…qué kawaii, Nabiki, Ranma. Según esto, no existe la inteligencia. Solo piensa mejor la gente que más utiliza el cerebro. Como si se tratara de un músculo más.
-Vaya tontería –resopló Nabiki-. ¿De qué me sirve saber eso para ganar dinero?
Akane se encogió de hombros.
-De nada. Por eso sale en la "Muy kawaii". Según parece –siguió leyendo en voz alta-, los tímidos hacen mejores cálculos que los demás porque como no se animan a hablar, se pasan más horas al día utilizando las neuronas silenciosamente. Y cita ejemplos de grandes sabios con terribles secretos que temían confesar. Por ejemplo, Einstein descubrió la teoría de la relatividad porque no quería decirle a sus padres que se había comido él solito la tarta de cumpleaños de su hermanita Maja Einstein y había acusado a perro. A la semana de ocurrir aquel episodio, Albert-chan, de tan solo siete años, ya podía decir cuánto era 537 por 13,8, aunque luego le fuera mal en clases de historia.
-Jajaja –rió con ganas Nabiki-. Si no animarse a confesar cosas proporcionara inteligencia, -se dirigió al muchacho-, tú, Ranma, serías el hombre más inteligente del mundo. Sin embargo, eres un asno comprobado, incapaz de decirme cuánto es nueve por nueve. ¿Cómo vas a saber cuánto es 537 por 13,8?
-7065,6 –respondieron los dos prometidos casi al unísono.
Nabiki pestañeó tres veces. Durante el primer pestañeo imaginó que 537 personas le daban 13,8 yens e intuyó que la respuesta era correcta, durante el segundo pestañeo sacó su calculadora de pe-chan de su bolsito y lo comprobó. Luego, durante el tercer pestañeo, urdió un plan malévolo para hacerse millonaria. El destino le había entregado en bandeja de plata, no solo uno, si no dos cerebritos por amor, pues Akane, su tímida hermanita, incluso había respondido una décima de segundo antes que el mayor necio de Nerima.
-Os veo mañana a las 5 de la mañana, en clase de mates.
-¿¡Qué!? ¿Para qué? –farfulló Ranma que poco se había enterado de qué iba la charla.
-¿Cómo que para qué? Para prepararnos para la olimpiada de matemáticas. El primer premio nacional es muy jugoso.
-¿Y por qué iba a ayudarte a ganar dinero haciendo algo que no me interesa?
-Porque Akane respondió antes que tú y los dos sabemos que no vas a permitir que ella te gane a nada.
-¿Y yo por qué tendría que ir? –se encogió de hombros Akane.
-Porque regalan una suscripción anual de "Muy kawaii" a todos los participantes.
Podría decirse que lo que sucedió después fue parte de los días más felices de Akane. Nabiki había descubierto un insospechado punto de unión entre ellos, mejor incluso que las artes marciales o el compromiso, porque era algo que compartían en total exclusividad. Sin que Shampoes, Ukyos o Kodachis pudieran hacerles sombra. El esfuerzo de negar sus sentimientos en voz alta era tan intenso que generaba una poderosa alquimia interna. Su resultado: hacer cálculos complejos a la velocidad de la luz. Verdad era que cada vez que se salían de los cálculos, volvían a pelear como niños pequeños, pero…insisto en el tema: seguían a solas. Y ¡qué dulces que le parecían a Akane los "tienes los pechos tan planos como un ángulo llano o como plano geometral" entonces! ¡Y qué dulces que le parecían a Ranma las parábolas con que su amada le hacía volar! ¡Qué hermosas funciones cuadráticas era capaz de calcular detrás de esos golpes! ¡Y esa felicidad repentina se sumaba a que Nabiki por puro interés, no solo no les molestaba sino que además se aseguraba de que nadie más lo hiciera! Aquella idílica situación, similar a un noviazgo juvenil recatado, duró exactamente trece días, cuatro horas, dos minutos, siete segundos y dos plims. Las que cayeron de la cara de Ranma cuando quiso regalarle a Akane un ejemplar de "Muy kawaii" y adquirió por error uno de "No tan kawaii". Ironías de anticlímax aparte, allí salía otra vez Maja Einstein, solo que en calidad de protagonista y con un gran artículo sobre su vida que se completaba con una pormenorizada descripción de su triste final. Mujer de origen judío, tuvo que huir de Florencia en 1939 y lo hizo a Estados Unidos donde vivía el resto de su familia. Lamentablemente, su marido, persona con la que había compartido los últimos diecisiete años en una casa paradisíaca, no pudo ingresar en el país de las oportunidades por razones de salud. Vetada esa solución, el matrimonio escogió vivir por separado hasta que terminara la seguramente "corta" guerra. Sin embargo, varios años después, un poco antes de 1945, Maja tuvo un ataque cardiovascular que la dejó en cama hasta el fin de sus días en 1951 y le impidió viajar a reunirse con su marido quien seguía sin permiso para ingresar a Estados Unidos. Una historia difícil de entender en nuestros días y más teniendo en cuenta que la familia tenía suficientes medios económicos pero perfectamente lógica a mediados del siglo XX. Estas cosas simplemente pasaban y mucho más a menudo de lo que Ranma podía creer.
La rutina siguió (a pesar de la incipiente tristeza ramnesca) más o menos igual durante unos días. Primero entraba Nabiki al aula de matemáticas a las cinco de la mañana, luego les preguntaba dos o tres cálculos difíciles, 4532 por 93,2 por ejemplo, y finalmente dejaba a los tortolitos estudiando juntos. Cada tanto, llegaban a un mismo resultado correcto por caminos distintos y resolvían la disyuntiva sobre cuál era más conveniente a patada limpia. Por lo demás, una vez terminado el entrenamiento de cerebritos, el resto del día se desarrollaba con cierta normalidad: peleas verbales, estudios furinkanescos, objetos mágicos shampoenses, interrupciones Kunescas y Ryoguencianas y también, enemigos poderosenses…digo…poderosos.
Si un detalle cambiaba, sin embargo, era que Ranma hacía todo con más desgano. Desde que había descubierto que el amor no era necesariamente para siempre, lo de guardar el secreto se le daba francamente peor y con ello, sus capacidades matemáticas se reducían un 20%.
-Jajaja, Ranma –rió esa mañana Akane-. Te he vuelto a ganar.
-Vale –suspiró el chico de la coleta mirando para otro lado.
La chica del pelo azul enarcó una ceja.
-¿Cómo que vale? ¿El gran Ranma Saotome se rinde ante ésta marimacho que apenas si sabe cocinar? ¿Y lo hace sin ofrecer resistencia? Al final va a tener razón Nabiki. El cerebro de las mujeres es más agudo que el de los hombres.
Buen punto. Mucho mejor insinuar algo así que atreverse a confesar que ella tenía un secreto más grande o mejor guardado que su rival. ¡Eso jamás!
Y sin embargo, ¡qué poco que le duró la seguridad a Akane! Bastó que Ranma se pusiera frente a ella con el gesto melancólico, para que le empezaran a temblar las rodillas. Un tono colorado a si mismo, amenazaba con subirle hasta las sienes aunque se quedaba atorado en las mejillas sin lograr ascender más.
-¿Eso crees?
-S-sí –dudó Akane, sabiendo que en aquel estado de excitación prohibida era capaz de vencer a Ranma en cualquier campo del intelecto humano.
-Pues bien. Comprobemos tu teoría –dijo el chico y se echó un vaso de agua fría a la cara.
Fin de la primera parte
Historia bonus
Encuesta de fanatismo Sensei.
1) ¿Qué lees primero?
a) Las historias bonus, por supuesto. Hoy mismo si me encontrara por la calle con Ranma y Bulmita, le daría un empujón al primero para que no estorbe y correría a pedirle un autógrafo a mi ídola indiscutible.
b) Los comentarios, por supuesto. Tengo que saber ya si contestó el Sensei mi review y luego cuento cuantas palabras utilizó para responderme a mi y para los demás y deduzco aproximadamente si mi puesto de fan ha subido o bajado en el ranking de su cabeza.
c) Todo. Lo leo todo al mismo tiempo en tres ordenadores que tengo preparados para la ocasión. A veces los vecinos se quejan por mis chillidos de emoción cuando veo que habló de mi tema favorito en la historia bonus, me contestó lo que yo quería leer o consiguió que Ranma y Akane se casen de forma creíble.
d) Nada. Entré aquí por error. Puse en google la siguiente búsqueda y me mandó a esta página: "genios de la escritura, perfectos y sublimes".
2) ¿Recuerdas lo que es una plimp, un plafui, una verdad irrefutable y demás tonterías repetitivas?
a) Por supuesto. De hecho, las utilizo en mi vida a diario. El otro día le dije a mi jefe que si seguía así le iba a arrancar una plimp de un plafui y no me echó de mi trabajo. Irónico, ¿verdad?
b) No solo las conozco y las uso en mi vida diaria, también llevo una cuidadosa cuenta de todas. Sé por qué verdad irrefutable vamos y cuantas plimp ha dejado caer cada personaje. Incluso puedo recitar de memoria en qué capítulo nació cada concepto "literario" Sensei.
c) Esas cosas me suenan. ¿Son los nombres de las hamburguesas que vende Bob Esponja? Jajaja. Es broma. He congelado todas mis lágrimas en el congelador y a cada una le tallé la palabra plimp con un alfiler. Tengo un matamoscas que hace plafui al utilizarlo y vendo en los autobuses y camiones de la ciudad un catálogo de verdades irrefutables que elaboré yo misma. Los fondos por supuesto, serán donados en su momento, para pagar la universidad de Bulmita.
d) No tengo ni idea. Entré aquí por error. Puse en google la siguiente búsqueda y me mandó a esta página: "genios de la escritura, perfectos y sublimes".
3) ¿Cuántas ironías-verdad te ocurren al día?
a) Depende. A veces tres o cuatro. Otras, ninguna. La ironía no se caracteriza por su regularidad. Aún así, siempre que aparece una digo "Irónico, ¿verdad?" y luego, por las dudas, me santiguo.
b) Exactamente catorce. Si me ocurren menos, no me voy a dormir hasta que no logro provocar las restantes.
c) A cada instante. De hecho, a veces me visto de novia y me imagino que me caso con Anticlímax. Mis amigas me dicen que estoy loca pero yo les contesto: "¿Así que les parezco loca? Irónico, ¿verdad?".
d) Ninguna. Entré aquí por error. Puse en google la siguiente búsqueda y me mandó a esta página: "genios de la escritura, perfectos y sublimes". Aunque ahora que lo pienso, esto de seguir aquí podría catalogarse como algo irónico.
4) Antes cuando veías a una parejita diciéndose cursiladas, decías: ¡Ayyy, qué dulces! Ahora dices…
a) Ohhhhh, míralos. Igualitos que Minefine7 y el Sensei.
b) Esos de ahí no le llegan ni al tobillo a mis CursiSensei y Cursiwoman7. Aún así, buen intento. Van por el buen camino.
c) Cuando me case con Anticlímax le voy a poner a mi primer hijo Gohan y a la segunda, Bulmita. Por cierto, antes me encantaba pero ahora odio el queso.
d) Entré aquí por error. Puse en google la siguiente búsqueda y me mandó a esta página: "genios de la escritura, perfectos y sublimes".
5) Comento con la siguiente periodicidad…
a) En general, cada siete o diez capítulos. A veces siento culpa por no comentar todo pero es que me emociono demasiado leyendo y quiero pasar rápido al siguiente capítulo.
b) Soy un fan de la primera hora. Lo comento todo. Si no puedo de inmediato, durante la primera o segunda semana de publicación. Y si por exámenes o tener que salvar el mundo me retraso más, empiezo a tener problemas de sueño, tics nerviosos, gota, sonambulismo (a pesar de los problemas de sueño) y también, un cosquilleo permanente en la punta de la nariz.
c) Mi madre me tiene que atar para que no comente por triplicado. Además, me pienso mi review durante horas. Lo redacto, lo borro, lo vuelvo a redactar. Más de una vez me ha quedado más largo que el capítulo y al final, no me animé a publicarlo.
d) Nunca. Entré aquí por error. Puse en google la siguiente búsqueda y me mandó a este página: "genios de la escritura, perfectos y sublimes". A lo mejor debería comentar…más que nada para no hacerle un feo a nadie. ¿Alguien sabe quién es Ranma?
6) Si el Sensei tarda en publicar, entonces…
a) Pues leo otra cosa. De hecho, he de confesar que leo otras cosas aunque el Sensei publique seguido.
b) Fácil, releo fics anteriores del Sensei y río melancólicamente recordando las cosas que estaba haciendo cuando los leía por primera vez.
c) Lo paso fatal. ¿Y si le ocurrió algo malo a mi autor favorito del mundo mundial? Me la paso marcando con una cruz en mi pared cada segundo que tarda en publicar el capítulo siguiente. Mis amigas dicen que estoy loca. HAHAHAHA. ¿Loca yo? Loca de angustia en todo caso. Y de preocupación. ¿Y si el refrigerador le volvió a atacar?
d) Entonces…como soy tan, pero tan, pero tan fanático del Sensei que no puedo con mi mismo, incluso más fanático que la loca de la pregunta c, me la paso buscando en google la siguiente frase: "genios de la escritura, perfectos y sublimes" y me alegro al ver que google me redirecciona aquí.
Mayoría de respuestas A: No está nada mal. Aunque podrías mejorar un poquito. Ya mismo vete a comentar los capítulos 27, 32, 85 y 123.
Mayoría de respuestas B: No está nada mal. Aunque podrías mejorar un poquito. Ya mismo vete a comentar los capítulos 41, 16, 5, 134, 150 y 93.
Mayoría de respuestas C: No está nada mal. Aunque podrías mejorar un poquito. Ya mismo vete a comentar los capítulos 2, 36, 67, 75, 111 y 125 y 138.
Mayoría de respuestas D: No está nada mal. Aunque podrías mejorar un poquito. Ya mismo vete a comentar los capítulos 6, 12, 19, 61, 102 y 117, 122, 123, 124, 125, 126, 127, 128, 129, etc.
Comentarios
Estimada blackpanterkjes. Para aprobar materias, no necesitas saber de filosofía. Para vivir, suele ser útil. Por cierto, ¿has tenido mayoría de respuestas…A, B, C o D?
Estimada sslove. Mmmm, carcajada en cada capítulo. A mi me late que eres del tipo B o C. Seguramente, B.
Estimada Desco. Feliz cumpleaños. Tú eres la gemela buena. Lo sé porque la mala jamás se definiría a sí misma como mala.
Mmmmm. "Tich" suena bien. A lo mejor me lo robo para alguna historia.
Estimada Desco. Se lo diré. Le hará bien para su autoestima saber que hay gente que le tiene aprecio aún sin conocerla. Claro que me interesa tu historia. Las cosas que cuestan se disfrutan el doble cuando se consiguen y sobre todo, se aprecian más.
El tutorial sobre cómo ser perfecto ya está escrito pero lo tiene el Señor Cangrejo en su caja fuerte con la fórmula de la Cangreburguer. No creo que nunca salga a la luz.
Estimados Momo chan y Liche. ¡El filósofo de los pitufos! Casualmente siempre le pegan con un martillo como a Ranma. Y Akane tiene el pelo azul. A lo mejor, Rumiko se inspiró en los pitufos para crear a Ranma y Akane. Jaja.
¿Así que lo de los gemelos es verdad? ¡Lo sabía! Gracias por confirmármelo.
Las calificaciones son simplemente orientativas. Lo que realmente cuenta es si entendiste el tema e hiciste tu mayor esfuerzo por incorporar el conocimiento que te enseñaban. Los primeros evaluadores de nuestro desempeño escolar somos nosotros mismos. Los únicos que realmente conocemos las circunstancias que nos hacen rendir más o menos en un momento dado.
Claro que le agradas a Minefine7. Siempre y cuando no pretendas compartir tu queso con ella, os llevaréis muy bien.
Estimada Rubd. Sí, es en serio. Tantas historias. Y hasta los 1001 capítulos no paro. Gracias por leer y sobre todo, por apreciar mi humor. Aunque no te lo creas, hay gente que considera que tengo un sentido del humor muy simple. Cof cofff Minefine7 cofff cof Gotenshka cof coff.
Estimada Minefine7. Ups. Me olvidé de poner una categoría para ti en la encuesta. E) Leo esto porque lo escribe mi maridito bonito. Si no, seguro que estaría leyendo fics de Naruto.
Estimada Dai. No lo sé. ¿Eres A, B o C?
Estimada Ai. Yo creo que C.
Estimada Akyfin02. Entre B y C.
