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Mi sombra
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11: Lolita
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-Debo admitir que no esperaba que hicieras esto-
Danny abrió los ojos, confundido. Era una de las últimas voces que esperaba oír en...
No estaba en la cama de Vlad.
Estaba solo.
Y vestido.
-¿Clockwork?-
-Vengo a darte una noticia muy importante- dijo el fantasma del tiempo –Dan ha dejado de existir-
Danny no podía creerlo.
-Tus acciones han cambiado el futuro. Ya no hay forma que él exista-
-¡Eso es grandioso!- dijo el chico, feliz.
- Aún falta que encuentres a Allen, y lo que harás entonces. Pero el futuro ya ha cambiado, y sé lo que sucederá- se acercó a Danny y le puso una mano en el hombro –Eres mucho más valiente de lo que pensaba-
Y eso fue lo último que escuchó antes de despertar.
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Danny sentía la cabeza pesada. Estaba cansado, dolorido, y no se sentía bien. Alguien le estaba acariciando el pelo con lentitud, y por un momento loco, pensó que Allen había vuelto y lo había rescatado, como aquélla otra vez. Pero esa débil esperanza se desvaneció cuando vio a Vlad, y cuando tomó conciencia que sus pieles estaban en contacto directo.
-Te ves lindo durmiendo- le dijo el mayor, tranquilo.
Danny cerró los ojos y respiró hondo.
-¿En... dónde...?- pero no pudo seguir. Sus ojos estaban empecinados en cerrarse. Y volvió a dormirse.
Se despertó al sentir que entraba en contacto con un líquido tibio que envolvía su cuerpo. Ya no sentía el cansancio, pero seguía débil. Abrió los ojos y se encontró con el rostro preocupado de Vlad quien, al parecer, estaba por darle un baño de inmersión. Danny levantó las manos y se frotó los ojos, intentando sacarse los últimos vestigios de sueño que le quedaban. Se sentó en la bañera y trató de recordar qué era lo último que había pasado. Un dolor en el trasero se lo recordó.
-Danny, dormiste mucho- le dijo el mayor, preocupado.
-No me sorprende- respondió el otro, sin muchas ganas. Se sentía... desgarrado, y no sólo en su cuerpo.
-Pasaron más de treinta horas desde que te dormiste-
Danny apoyó la cabeza contra la pared opuesta a Vlad.
-Sam y Tucker tendrán muchas cosas que inventar... – pareció volver a dormirse, pero abrió los ojos después de un rato -¿Es que nunca trabajás? Siempre que te veo estás haciendo cualquier otra cosa-
Vlad no le prestó atención a lo último.
-Debes comer algo o te debilitarás más-
-¿Y por qué ahora de golpe y porrazo te portás bien?-
-No debí haber hecho... lo que hice-
Silencio.
-Es un poco tarde para arrepentirse- dijo el chico, volviendo a cerrar los ojos -¿Eso sólo comprende lo último que me hiciste o también entra la paliza?-
Silencio.
Danny tomó el jabón y empezó a pasárselo por el brazo.
-¿No pedirás que me vaya?-
-Es tu casa- dijo el chico, sin mirarlo a los ojos.
Vlad tomó otro jabón y empezó a pasárselo por la espalda. Danny lo dejó hacer, y dejó que le sacara el jabón con la duche de mano. En todo ése tiempo, se quedó con la vista fija al frente, meditando. El pelo mojado le tapaba los ojos.
-El resto puedo hacerlo yo- dijo, después de un rato, y Vlad salió del baño. Sólo entonces Danny notó que el mayor llevaba puesta una bata.
Después de un rato, Danny se levantó y empezó a revisar su cuerpo. Dolía menos, pero la sensación sorda en su trasero le recordaba que ya no era el mismo de ayer. Y que no volvería a serlo. Terminó de bañarse con lentitud, dejando que el agua de la ducha se llevara toda su tristeza, y miró a su alrededor. Sobre un banquito había una toalla y algo de su ropa. Estaba limpia y planchada, y Danny supuso que era la misma que había llevado la última noche en que había sido virgen.
Oh, eso dolió.
Pero no iba a llorar. Lo hecho, hecho estaba, y ahora tenía que ser fuerte para salvar a Allen. Porque sabía que estaba en problemas, y no se lo decía para no dañarlo. Sonrió sin humor. Había deseado perder la virginidad con Allen, pero terminó haciéndolo con Vlad. Y lo peor de todo era que sí era bueno, aún desde su inexperto punto de vista.
Cuando salió del baño, se dio cuenta que era el baño privado de Vlad. Y la cabeza estaba empezando a dejar de dolerle. Podía caminar mejor, aunque seguía sintiendo dolor. Tenía que encontrar a Vlad y exigirle que cumpliera su parte del trato.
...si encontraba a Vlad.
Más que casa era castillo, y había muchos corredores. El olor a tostadas lo hizo tambalearse. Hacía más de treinta horas que no comía (y eso sin contar las horas anteriores a su llegada a la residencia de Vlad) y tenía que tener energía para rescatar a Allen. Siguió el olor hasta el comedor, en donde Vlad lo esperaba con un buen desayuno.
-Pasa, Danny, el desayuno está servido- dijo el mayor, invitándolo a sentarse a su lado.
De Daniel a Danny. Realmente estaba arrepentido.
Le hizo caso. Se sentó al lado, con cuidado para que no le doliera, y agarró una taza de té. Tomó despacio, sabiendo que no debía comer rápido si no quería vomitar. Su estómago recordó que tenía que recibir alimentos y, después de la primera taza, comenzó a comer sólidos. Estaba hambriento, y Vlad lo miraba comer, serio. No había olvidado su parte del trato, pero sabía que lo siguiente sería más duro todavía.
-Danny, tengo que decirte algunas cosas- dijo Vlad, cuando el chico terminó de comer –Nunca imaginé que llegaras tan lejos por alguien-
Danny lo miró, confundido. Eso era demasiado extraño.
-Yo.. No sé si haría lo mismo por... alguien que me importara como... a ti te importa Allen- corto silencio –Lo llamabas en sueños después que te dormiste por segunda vez-
Así que por ahí iba la cosa.
-Y lo que viene... tampoco va a ser fácil- no lo miraba a los ojos. DEMASIADO extraño.
-¿Por qué lo hiciste?- ¿por qué no se enfurecía? Ese hombre había abusado de su inocencia, y debería golpearlo, pero le hablaba casi como si intentara consolarlo.
-Quizás porque... tenía algunos... sentimientos confusos hacia ti-
Silencio.
Silencio.
MÁS silencio.
-No soy una Lolita- dijo Danny al fin.
-Lo sé. Supongo que ésta fue la forma equivocada de llegar a ti-
-Darme una paliza, ciertamente, no-
-Estaba convencido que no eras tú, sino Allen. Y por él no siento ningún afecto-
-Pero yo siento más que afecto por él. Y me dista tu palabra-
Vlad suspiró y se levantó.
-Te llevaré con él, entonces-
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Lo que no me terminaba de cerrar era qué título ponerle a este capítulo. La frase de Danny diciendo "no soy una Lolita" fue clave. Creo que resume con bastante claridad lo que Vlad quiere decirle. En el próximo capítulo Allen va a aparecer, pero no exactamente de la forma que se esperan.
La aparición de Clcokwork era el detalle que faltaba para finalizar el Fanfic. El próximo capítulo será el último, y les sugiero que se vayan preparando, porque van a leer cosas fuertes.
MUY fuertes.
Shady10: Danny estaba desesperado, y lo que viene va a ser aún peor. Danny tomó vida propia, y juro que lo que va a pasar en el siguiente capítulo lo escribió él. Más que masoquista, diría suicida. Vlad es buenito al lado del personaje con el cual se va a encontrar Danny en el siguiente capítulo. Me bajé los mangas de Ayaoi, y bien que dan ideas.
dannyphantomgirllove: tengo un excelente estado de salud, tanto física como mental. Y no soy niña, tengo 20 años y medio y ya avisé que venían cosas fuertes. Y si esto te pareció malo, no leas el próximo, porque vas a odiarme en serio. Nadie te obliga a leer este fanfic si no te gusta, no leas. Y si Vad es un demonio, en el próximo capítulo Danny conocerá al mismísimo Satanás en persona.
M.G.: humillante es una palabra suave para lo que pasó. Y creo que no habrá palabras lindas cuando leas lo que va a venir.
Nos leemos
Nakokun