Apresurarse

-Yolei, no puedes echarte atrás ahora!- gritó Mimí. Miyako la miró molesta.

-Creo que ya hicimos mucho. Si ella no coopera más con nosotras...!- respondió, cruzándose de hombros.

-Eso es una tontería!- Tachikawa estaba perdiendo la paciencia. No era como que costara demasiado que lo hiciera, de todas formas...- Yolei, iniciamos esto juntas. No podés abandonarme!

-Por qué no puedo?- la pregunta descolocó a la castaña. Sin embargo, Inoue no la dejó contestar. –Creo que ya la ayudamos suficiente. Y tal vez ya decidió por Yamato!

-No!

-Bueno, entonces estás en posesión de más información que yo. Puedes hacerlo sola.- Luego de decir esto, Miyako le cerró la puerta en la cara.

-YOLEI!

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Yamato bostezó y giró en su cama. Entreabrió los ojos, y al sentir que la luz lo chocaba, volvió a cerrarlos.

-RIIIIIIIING!- el timbre volvió a sonar. Quién molestaba a estas horas? Bueno, seguro que ya se iría. – RIIIIIIING!- No, al parecer no se contentaba con haberlo despertado... abrió los ojos antes de tener que escuchar el cuarto timbre. 8:36 de la mañana... a quién se le ocurría!- RIIIIIING!- Se levantó y a tropezones llegó hasta el teléfono del timbre.

-Quién es?

-Maaaaaaaaaaaaaaattie!- Ishida tuvo que alejar el auricular de su oído. Esa voz tan aguda, y a esas horas de la mañana...!

-Qué necesitas Mimí?- preguntó, molesto.

-Oye! Por qué me tratas así? A MÍ, que con tanto amor vengo a visitarte...! Por que realmente, de ti no podré esperar nunca eso!

-Una vez más, que necesitas?- ella siempre lograba que perdiera la paciencia, y si encima era madrugada...

-Mira Ishida, que mi amiga Sora no quiera estar con vos no es razón para

-Mimí, se te va a engrasar el pelo si permaneces mucho tiempo afuera, con el smog que hay hoy. Y a estas horas, no quiero imaginarme como estarán tus ojeras... así que mejor que me digas que necesitas YA y terminamos con esto- espetó, interrumpiéndola. Del otro lado, Tachikawa hizo silencio.

-Está bien. Es sobre Sora... me dejas pasar?- Yamato suspiró y apretó el botón para abrir la puerta.

Mientras esperaba que la joven subiera, volvió hasta su cuarto y se puso sus pantalones. 'Es sobre Sora'. Que querría...? El haber sido rechazado por ella era una herida que aún no había cerrado, que necesidad tenía Tachikawa de venir a revolver en ella...? Se calzó las zapatillas, y antes de ir hasta el baño a lavarse la cara, a ver si así lograba despejarse un poco, le abrió la puerta. Al salir, ella lo esperaba sentada en un sillón.

-Mmh... te está haciendo bien el gimnasio, eh?- comentó, observándolo pícaramente.

-Izzy va a enterarse de todo esto- dijo, cruzando sus brazos sobre su musculoso pecho.

-Ah! Te hace mal la mañana!- exclamó, molesta. – En fin, mientras terminas de cambiarte, voy a prepararte un café, ya que veo que aún no has desayunado- canturreando fue a encerrarse en la cocina de Ishida. El rubio por su parte, hizo como ella le había indicado y volvió a su cuarto. Desde ahí escuchaba el tintineo de las tazas y cucharas, y los golpes de las puertas de las alacenas mientras la castaña buscaba lo que necesitaba.

Cuando terminó de vestirse y se sentó en el living, su amiga llegó con una bandeja con las tazas y la depositó sobre la mesita ratona.

-Hacía mucho que no venía por acá... me gusta como lo arreglaste... – comentó, observando el gran ventanal y los monumentales amplificadores que había amontonado en una esquina de la espaciosa estancia. – Es bastante...

-Takenouchesco- terminaron al mismo tiempo. Mimí sonrió, pero el rubio comenzó a revolver su taza, melancólico.

-Y... cómo estás llevando ese tema?- preguntó, preocupada.

-Bien- respondió, cortante y taciturno como siempre.- Ahora sí vas a decirme a qué viniste?- Tachikawa asintió, tomando un sorbo de café.

-Realmente no quería hacer esto... peeero... – hizo silencio. Yamato la instó con la mirada a que siguiera.- Necesito que me ayudes con Sora...

-Otra vez?... la primera vez no terminó muy bien para ninguno- dijo, aunque sin expresar ninguna opinión en su tono. Frío, seco, como de costumbre...

-Lo sé... y lo siento!... pero ahora Yolei decidió que no va a meterse más, y hay que darles un empujoncito!- exclamó, angustiada. Yamato cerró los ojos, respiró y dio un sorbo a su café.

-MIELLLL!- gritó, escupiendo sobre el tapizado negro de cuero de su nuevo sillón... donde se encontraba sentada la culpable.

-Matt!- gritó, levantándose molesta. – Mi tapado nuevo!

-Mimí, le echaste una botella de miel!

-No seas exagerado! Solamente 7 cucharas!

-¿SIETE CUCHARAS!

-Y HASTA LE PUSE POCO! LO NORMAL SERÍAN DIEZ!

-Por Dios, Mimí!- Yamato se sentó, apesadumbrado. Luego de unos minutos de molesto silencio, resolvió volver a hablar.- Tal vez... ellos no desean ser ayudados...

-A qué te refieres?- preguntó ella, desconcertada. Ya había limpiado su tapado y se afanaba en arreglar aunque sea un poco la apariencia del sillón de Ishida. Yamato suspiró antes de continuar. Por qué tenía que pasarle todo esto a él...

-Creo que si Sora estuviera realmente decidida a volver con Ken, ya hubiera hecho algo al respecto. No sé bien que sucedió la última vez que hablaron, pero de eso, cuánto hace? Dos semanas? Yo hablé con ella hace una semana y media. Y si hasta ahora ella no se movilizó... tal vez tenemos que dejarla que se juegue... que se preocupe ella- corrigió. – Sora ya nos habría pedido ayuda...

-Sora es autosuficiente!- protestó Mimí. – Y piensa que estuvo mal ella, se compadece de sí misma, o mejor dicho se hecha la culpa. Nunca va a pedirnos ayuda!

-Precisamente, por que es autosuficiente! Y siempre lo fue! Ella va a encontrar la manera de salir de esto!

Mimí lo miró con odio y cruzó los brazos. Luego de soltar un suspiro de reproche, se metió en una guerra de miradas enojadas con Yamato, causando que éste estallara en carcajadas.

-Mimí, lo lamento pero no vas a lograrlo así. Tus miradas no me intimidan.- Tachikawa resopló.

-¿Por qué eres tan complicado?- él no contestó, y la joven se vio en el derecho de continuar con su charla.- No podés abandonarme! Yolei ya lo ha hecho! Ese rol está ocupado!

Nuevamente Yamato estalló en carcajadas. Que ésta chica pensara que algo tan simple como una opinión era representar un rol en una obra de teatro... escrita por el destino, tal vez...

-Ya te dije lo que pienso. Si Sora quiere mi ayuda, sabe que puede pedírmela. Si en una semana y media ella no hizo nada es por que, o tiene un plan en mente que no necesita de nuestra colaboración, o simplemente decidió que no puede volver con él.

-... o se rindió y no se anima a pedir ayuda.

Yamato hizo silencio y enterró la cabeza entre sus manos. Por qué tenía que ser todo esto tan difícil? Era realmente tan complicado de entender?

-Mimí... por favor. No quiero intervenir. Ella puede sola!

-Eso es por que sos un rencoroso! No querés ayudarla por que ella te dejó!- exclamó, enojada. Luego de haber dicho esas palabras, cayó en la seriedad de la ofensa que acababa de lanzar.- Matt, lo siento, yo...

-Está bien. Creo que... con eso ya dijiste todo... ahora, si me perdonas, voy a... limpiar este desastre y... hacerme un desayuno aceptable... – murmuró, mientras se levantaba y comenzaba a juntar las tazas. Se notaba abatido, cansado, triste? Mimí miró hacia el suelo compungida, retándose interiormente por su error.

-Matt...- murmuró, pensando en como disculparse debidamente. A veces se iba de boca... muy seguido, se iba de boca... y hacia tiempo que decía que tenía que trabajar en eso, tratar de mejorarse, pero... entre una cosa y otra... las compras, el último cambio de look, el tiempo con su amorcito, y ahora todo este problema con su mejor amiga... cómo era tan difícil ser ella!

-No es necesario... yo... en todo caso, te aviso- luego de esto Tachikawa no tuvo más opción que abandonar el lugar. Ya había causado demasiado daño ahí...

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-Toc toc

-Está abierto!- gritó Sora, desde su cómodo lugar en su sillón. Su compañera de facultad acababa de llamar para avisar que estaba subiendo.

-Hola Sora- dijo una joven de su edad, de cabellos marrones oscuros y rasgados ojos negros. Vestía una falda larga en tonos de marrón y chocolate y una blusa blanca, adornada con collares de madera. En su rostro se adivinaba una sonrisa y una felicidad que de todas formas no ocultaban ese brillo de inteligencia que resaltaba en sus ojos.

-Hola Kayra. Cómo estás?- preguntó Sora, sentándose en su asiento.

-Yo bien... acá te traje lo que te dije- apoyó dos carpetas llenas sobre la mesa ratona, que Sora miró con los ojos como platos.

-Tanto!- exclamó, asombrada.

-Te das cuenta de todo el tiempo que faltaste? Es una suerte que nuestra facultad no sea con faltas, por que si no... te quiero ver empezando el año de vuelta!

Sora suspiró y comenzó a hojear los apuntes de su compañera. Conocía a Kayra desde hacía unos meses, era una joven amigable que había llegado de la India con una beca, y casi inmediatamente se habían hecho buenas amigas. Es que detrás de su aparente ingenuidad, había una chica muy despierta e inteligente, que a veces lograba unos planteos que sorprendían a Sora. Siempre había pensado que le iría mejor en algo así como filosofía, pero ella había elegido otro rumbo. Tal vez de ahí esa moda tan rara que usaba, que no se veía en Japón.

-Bueno... si... voy a ponerme con esto y... espero terminar a tiempo...- Sora suspiró desganada.

Después de su última charla con Yamato había decidido regresar a la universidad y también tratar de arreglar definitivamente las cosas con Ken, aparte de continuar en su decisión de dejar de fumar, pero... a una semana y media de eso, lo único que había logrado había sido no volver a fumar... a la universidad había ido un día, solo a una clase, y con Ken... bueno, en eso era mejor no pensar ahora que estaba Kayra con ella...

-Si, yo también lo espero, por que tenemos un parcial dentro de... 7 días?

-QUÉ?- exclamó Sora, parándose en su asiento. – Un parcial de que!

-Diseño aplicado... Sora... crees que vas a lograrlo?- preguntó, preocupada.

-Yo... sí... para mañana te devuelvo todo esto y... – Sora interrumpió sus palabras.

-Sora... no vas a contarme que pasó?- preguntó la joven, sentándose junto a ella. Luego de unos momentos de silencio, Sora comenzó con su historia.

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-No puedo creerlo... Sorita... cómo es que no sabía nada de esto! Ni siquiera me habías dicho alguna vez que tuvieras novio!

-Lo siento, Kayra... yo... no lo sé, es que... es tan chico, que...! No sé si quería que mucha gente se enterara... por su bien más que nada!- Se disculpó Sora, secándose algunas lágrimas rebeldes que habían insistido en salir.

-Y Sora, ahora... que estás esperando?- preguntó, acariciando sus cabellos para tranquilizarla un poco.

-Por el momento quiero... ponerme al día con la universidad, estudiar para este examen y... no lo sé... pienso que si dejo pasar el tiempo, voy a olvidarme de él...

-Pero Sora! Eso no tiene sentido! Si lo amas, andá a buscarlo! Qué te lo impide?- A pesar de todo, había evitado contarle sobre Yamato, por que realmente... no quería embarrarlo más. Ya bastante complicada era su historia, como para que encima...

-No lo sé, es que... no creo que él esté interesado. Después de todo... por algo se marchó esa vez!- contestó, dudando. En realidad no estaba muy segura de creer sus propias palabras...

-Bueno, de todas maneras, no vas a saberlo hasta que vuelvas a hablar con él!- Sora no contestó.- VAMOS YA!- exclamó, sorprendiendo a la pelirroja al vislumbrar en ella una energía que no le había visto antes.

-Cómo que YA?- preguntó, nerviosa.

-Si, decime en donde es, te llevo, hablan, después te traigo y estudias!- Sora sonrió ante lo fácil que lo hacía sonar ella. Si tan solo supiera toda la verdad... pero no quería contarlo ahora. No tenía por que.

El timbre sonó y Sora se apresuró a levantar el teléfono.

-Sí? Mimí? Te abro. Subí- dijo por el auricular.- Está por subir una amiga...

-Y ella también sabe de todo esto?

-Sí, Mimí es mi mejor amiga.

-Oh, la famosa Mimí! Si, me hablaste de ella- Sora sonrió y fue a abrir la puerta antes de que la castaña llegara.

-Sora, tengo GRANDES noticias para vos!- exclamó Mimí mientras llegaba, revoleando bolsas y bolsas de shopping.- Ah, visitas! Soy Mimí, mucho gusto- dijo, estrechándole la mano.- Bien, como te decía. Hablé hoy con Ken, y me dijo que está libre ahora, y que le gustaría que fueras ya a verlo.

-Ves? TE LO DIJE!- exclamó Kayra, y Tachikawa le sonrió al notar que ella estaba de su lado. Sora sin embargo, miró de reojo a su mejor amiga.

-Mmh... Mimí... estás segura de que hablaste con Ken?- la hermosa joven no contestó. – Mimí?- preguntó otra vez.

-Ok, ok... no hablé con él, pero... tiene que estar! Y ya es hora de terminar con esto! VAMOS!

-Yo opino igual!- gritó Kayra, uniéndose a la aparente orden de Mimí.

-Ves? DOS CONTRA UNO! VAMOS A VER A KEN!- exclamó, comenzando un baile extraño que Kayra se limitó a mirar y al que no se unió.

-Mimí, esto no es así de fácil!- protestó. No podía dejar que esta vez la convenciera de esa manera.

-CLARO QUE LO ES!- gritaron las dos, sonriéndose.- Sora, no busques que sea difícil. Aceptalo como es, y si puede ser fácil, QUE SEA! No hay una manera en que esté bien o mal hacer estas cosas, simplemente... hay que hacerlas!- dijo Mimí, sentándose junto a ella y comenzando a peinarla. – Así que VAMOS!

-Todavía no sé como dejo que me convenzas- comentó Sora, cerrando la puerta de su edificio.

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-Es que soy tan... ahhh!- sonrió Mimí.- Kayra, tu vienes con nosotros cierto?

-Me gustaría, pero yo también tengo auto... y no puedo dejarlo acá.

-Ah entonces... ya sé!- gritó, sintiendo como una lamparita se encendía en su mente.- Enseguida te consigo a alguien que haga el viaje contigo!

Continuará...

NOTAS: Ok, no voy a gastarme en unas disculpas y explicaciones sin razón, por que realmente... ya estamos cansadas de eso, no?... me demoré y listo. No pude hacerlo antes. Realmente lo siento, pienso que no cumplo con el respeto que les debo por sus tan preciados reviews. Realmente no puedo hacerlo mejor. Lo siento.

Encima este capítulo fue corto y... de escasa calidad. Acepto críticas, sé que las merezco... pero es que con esto, estoy tan estancada! No sé que ideas tenía en un principio, como quería terminarla, por alguna razón de borró de mi memoria...! Igual ya se me va a ocurrir algo... este capítulo fue relleno más que nada, para recordarles que esta historia está y que no voy a abandonarla. Y no sé dentro de cuantos caps terminará... jeje...

Gracias mil a Angel Némesis, Atori-Chan, Alexeigirl, Chikage-Sp, Sora Takenouchi Ishida y a todos los demás! Gracias por el aguante!

Creo que pasaron seis meses desde la última vez... bueno, eso no es normal en mí?

REVIEWS POR FAVOR!

SkuAg

15-09-06