Lo que no puedo evitar

Ron y Hermione no lo habían podido acompañar todavía, era una lástima, pero Harry no podía evitar sentirse un poco aliviado, desde la muerte de Dumbledore no había podido llorar como lo pedía su alma, y cuando que llegó a Privet Drive, hacía dos días, era casi lo único que hacía.

Sus tíos y primo no se metieron con el, ni siquiera le mantenían la mirada, algo tenía Harry ahora en los ojos, un nuevo brillo que intimidaba a esos mugles, talvez era solo la furia y la sed de venganza lo que prevalecía en sus perlas esmeralda, pero también tenía dolor, montañas de dolor.

Su figura tirada en la cama sin tender lo hacía parecer un perro con frío, el fantasma de las lágrimas le dejaban un camino pegajoso en su mejilla. Estaba durmiendo, en esos lapsos de sueño "reparador" en donde su mente volaba cerca de Ginny, los sueños, cuando al fin los conseguía siempre iban a parar con la chica pelirroja, la de las pecas, la niña que se enamoró de Harry, la joven que lo sigue amando. Esta vez estaban en la madriguera, hechos un colocho en una alfombra frente a una chimenea encendida, y ella le decía cosas cálidas al oído y Harry sentía que no había preocupaciones en el mundo, solo Ginny y él en la calma que les brindaba ese hogar tan acogedor. Podía saborear el aliento en su oreja, sentir el rojo de su pelo con los ojos cerrados, frotar sus pies con los de ella, todo siendo bello, estando los dos felices, satisfechos…pero de repente…no, no, no, la mente de Harry, recordando, o más bien, percatándose que también había alguien, que no debe vivir si él está vivo, o que él no puede vivir si…"Vol"…"Vol"… …"está aquí"…luego Ginny le preguntaba "quién Harry, quién ha venido?", sus ojitos cafés lo miraban con miedo al ver la expresión de angustia de su novio, entre toses y convulsiones de su garganta logró escupir: "Voldemort está aquí, Ginny, Voldemort está aquí!". Ahora la cara de ella adquiría un tono sombrío y con una voz chillona que no le pertenecía gritaba: "estúpido, no deberías de estar conmigo, estúpido inconciente!.ESTUPIDO!

Harry se despertó sobresaltado, su corazón latía violentamente como queriendo salírsele por la boca, en su mente las imágenes del sueño volvían a aparecerse, "una maldita pesadilla, ahora no puedo ni dormir tranquilo…"

Se incorporó en la cama y como por costumbre se tocó la cicatriz, luego recordó que ya no le dolía cuando tenía pesadillas, se sintió algo tonto. Después tomó su propia cabeza entre las manos como sosteniendo las palabras que Ginny le había dicho:"estúpido, estúpido". Sabía que no era real, pero de igual manera le hería…

"No, llanto otra vez no…no puedo pasarme todo el día llorando como un niño, ahora soy un hombre, un hombre que debe luchar por el futuro de la comunidad mágica, y talvez por el del mundo también. Ginny, Ginny, mi pequeña gigante, sé que sería estúpido estar contigo ahora, pero es lo único que quiero hacer, tenerte en mis brazos por todo ese tiempo que por ciego no lo hice, es estúpido hacerlo, pero es lo que necesito…necesito un abrazo tuyo…mi pelirroja…Si tan sólo las cosas hubieran sido distintas…si Tom Riddle no hubiese nacido, o si al menos no hubiese matado a mis padres, sería un muchacho normal, feliz, y sin ésta carga de mierda en mis hombros, en mi alma. Ya, Harry, no seas estúpido, la responsabilidad está, y no por odiarla va a desaparecer instantáneamente, no por quererlo con todo tu ser…debo pelear, por la memoria de mis padres, por la de Dumbledore, por Hermione, por Ron, por los Weasley, por Ginny…por nosotros…, no puedo evitar esta batalla, sólo puedo encararla como un Griffindor, no hay forma de evitarlo"

Tras la pausa en sus pensamientos, oyó a Hedwig picotear la ventana, volteó a verla y no estaba sola, venía con Pigwidgeon, Harry sintió bocanadas de esperanza al verlas, Ron no había podido venir por algunos asuntos pendientes, pero si le escribía significaba que pronto lo sacaría de Privet Drive. Abrió la ventana, dejó a las lechuzas entrar al mismo tiempo que el aire helado que los dementores y la misma noche provocaban.

-hola Hedwig, hola Pigwidgeon- las acarició fugazmente y después les ofreció galletas de lechuza a ambas. Hedwig la rechazó, al parecer venía de su propia cena.

-malagradecida…- Harry tomó la pata de Pigwidgeon y soltó el pergamino, a continuación lo desenvolvió y leyó la carta que Ron le enviaba.

Harry:

Hola, si, si, ya sé que dije que volvería contigo a Privet Drive a penas se acabaran las clases en el colegio, pero a mi madre no le parecía buena idea ir a la casa de esos mugles indeseables, ya sabes como es ella, súper madre protectora, pero bueno, resulta que tras día y medio de necia persuasión ha decidido dejarnos a Hermione y a mi ir a tu casa mañana, así que te aviso para no encontrarte todo añejo y horrible!

Bueno amigo, hasta entonces.

Pd: llegaremos como al medio día..

Tras leer aquellas líneas Harry se sintió bien, Ron y Hermione vendrían después de todo…Sonrió, estaría bien unos cuantos días con sus amigos.

Hola! Hola! Bueno, este es el primer fic que va a tener más capítulos, de todas maneras casi no he escrito fics…bueh! Tengo planeado seis capítulos, espero que todo salga bien…no se, espero no estropearlo todo! Si no les cayó la peseta, la historia se encuentra justo después del sexto libro…pero claro, eso es súper obvio…

Si todavía siguen leyendo…acuérdense de dejar un review (si allá abajo donde dice GO) porque muero de soledad si no lo hacen, nada les cuesta porfa, porque una historia no es nada sin reviews, solo un montón de palabras escritas al viento…

Me encantaría que me criticaran lo más honestamente posible, lo apreciaría mares! chaolas, bailen siempre que puedan y recuerden a Hamstrubi que los mira desde adentro!