Hikari: holasssssssssssssssssss

Pues también me tarde mucho con este fic, pero este es un nuevo capitulo, al cual le hice algunos cambios espero que les guste.

Besos a todos y disculpen la tardanza….jijiji

CAPITULO OCHO

"El designio de los Dioses"

Aquello bajó del cielo envuelto en neblina y en blanca nieve.

Descendió con suavidad, posando sus blancas patas sobre el suelo fértil de la tierra, lo miro todo, el verde césped que se cubría lentamente con la nieve helada que emanaba de sus blancas patas, los árboles, los pájaros... ¿pájaros? tambien volaban pensó, volaban como él, pero no eran como él.

Notó un campamento galopo graciosamente hacia el, había fuego aun en una improvisada fogata y unas cuantas tiendas de campaña se encontraban a su alrededor.

Una extraña luz encendía sus crines plateadas, su larga cola, sus excepcionales ojos plateados y su cuerno en espiral que brillaba con un fulgor dorado, era sin duda la más hermosa criatura que tocara el suelo de la tierra. Miro fijamente el lugar por espacio de unos segundos. Levantó del suelo entonces, graciosamente sus patas, aun analizando lo que Dios le había querido decir en sus sueños y voló nuevamente sobre el campamento.

Era de noche y Anna caminaba inmersa en sus pensamientos por la espesura del bosque de los alrededores de la aldea. Su tienda no estaba muy lejos y el suelo verdoso del bosque estaba lleno de polvo de nieve.

-Los bosques por la noche despiertan la curiosidad de muchos, será por la magia escondida entre los árboles o por la infinita sabiduría de la naturaleza que se puede apreciar… he pasado estos últimos días preguntándome lo mismo… ¿Por qué me atrae tanto?

-Es por la clara conexión con el mundo… yo le enseñe eso ¿no? Señorita Anna-dijo de pronto una vocecita detrás de la muchacha. Volteo sin sorpresa para encontrarse con una bolita negra de grandes ojos dorados.

-Lo sé, Eterna, pero es difícil recordarlo cuando tienes tantas cosas en la cabeza…

-¿Qué es lo que le preocupa ahora señorita?

-Todo… la vida, la muerte, el destino del mundo, de este mundo…

-Me temo que ya no tiene el mismo valor de hace 500 años, el miedo se esta apoderando de usted, el miedo a perder su hogar, a perder lo que ama ¿no?

-Es cierto… he pensado que no sirvo para ser shaman… por lo menos sabia lo que era ser itako.

-Yo estoy con usted ¿no?... es una buena shaman y tambien una buena itako.

-Sí… lo siento Eterna, pero me siento triste por todo, por lo que ha resultado de mí después de todo lo que a pasado…-la muchacha entristeció notablemente.

-Pero usted así lo quiso… ¿se arrepiente?

-No… no me arrepiento, es verdad que yo quise que esto sucediera… fue la única manera de sentir que si con Hao me quedaba, él regresaría de una u otra manera, pero tome una decisión errada-le dijo a su espíritu pantera y luego suspiro un nombre-Yoh….

-Los grandes espíritus han dicho cual es nuestro destino-dejó de levitar al encontrarse frente a un lago, volvió a su forma original la de una hermosa pantera negra alada-báñese señorita Anna, deje que la pureza del agua limpie sus heridas… deje que su corazón se de cuenta de que a pesar de todo, usted sigue siendo solo Anna.

Anna se quito el vestido azul que andaba trayendo dejando al descubierto su blanca piel, sus perfectos y ovalados pechos.

El agua pareció calmarse cuando la muchacha entraba en ella y se dejaba acariciar por las suaves olas.

-¿Cómo esta?-pregunto inocentemente su guardián.

-Oh muy bien Eterna…ya me siento mejor.

-ya veo…pero creo que usted quería respuestas ¿no es así? Acerca de su misión…

-Sí…

-Entonces deje que el que no se ha dejado ver se las conteste.

-El que deja las huellas sagradas.

-Sí, el agua de la vida, la nieve es pura….-se escucho una vocecilla, al instante un extraño espíritu apareció ante ella.

-Eres…eres…-la criatura batió sus crines y sus ojitos plateados brillaron como dos luceros, galopo por sobre el agua y se dejo caer mojándose y limpiando su cuerpo, extendiendo su alas cuan anchas eran-un unicornio…un unicornio macho.

-Vea el agua ama Anna-le dijo acicalando las plumas de su alas con el agua limpia.

-¿Ama?...ya veo, eres mi guardián junto a Eterna…

-Sí…mi nombre es koori…

-Hielo…-murmuró Anna.

-Soy un guardián…su primer guardián, la he seguido durante mucho.

-Eterna dijo que tu sabia a que se referían los dioses…eso quiere decir que él tambien lo sabe.

-Así es…pero él no puede decirlo…a usted le han dado algo a proteger…una prenda venida de otra fuente, se le entrego para que la protegiera.

-¿Qué? ¿Qué es?

-piense… ¿Qué perdió?

-no…lo se, no se…

-piense… ¿Qué es?

-Yoh…

-No, pero esta cerca…algo más…algo que quisiera tanto como el recuerdo del shaman, del de su hijo… ¿Qué?

-Mi…algo que quiera asi…algo que perdí…-pensaba cuando la respuesta vino cargada de un sentimiento de terror-Shize…

-sé restaura lo que no debió ser…con la llegada de la llave, se restaurara todo y volverá a ser como antes.

-su error…

-Y ¿ahora ama Anna?...

-Yo…yo no se que decir-la criatura relincho-pero, esto…ella correrá peligro, según dicen las escrituras, todos pensaban que se trataba de un niño.

-Creo que ya es hora de regresar al campamento…-cortó Koori.

-Aun no quiero ir…

-¿Ama Anna?...yo hace tiempo que quería preguntarle algo… ¿Qué pasara una vez que se encuentre con Hao?

-No lo se…Koori es mejor irnos ya, tienes razón…

-Como lo ordene Ama Anna.

Lo recuerdo como si hubiera sido ayer, un día estaba con mis amigos y al otro día no. Él se enojó tanto cuando le comunique lo de mi embarazo, pero en el fondo no era así…no lo entiendo ¿Por qué?… ¿Por qué lo mato? Era su hijo aunque fuera de Yoh… nunca se lo perdonare.

La verdad es que me asombre cuando se me presento Eterna y más con la llegara de Koori diciéndome que nuestro destino era este y que algún día todo cambiaria, todo seria como debía ser, ahora comprendo lo que me querían decir…Shize…ella es la llave.

Desde que nos separamos hemos estado solos, y me pregunto si ella estará bien, fue sensata al no buscarme ¿pero porque? Quizás sea así, tal como él lo dijo y según para que yo misma encontrara el valor de aceptar mi verdad…shize esta por ahí, perdida al igual que yo, pero nos reuniremos aquí en la aldea Apache, eso es seguro, la encontrare y no permitiré que dañen a mi amiga.

Pero no puedo, no puedo porque tengo miedo….

-Hemos llegado Ama Anna… ¿Ama Anna?

-No puede ser…

-¿Ocurre algo?

-Está aquí… Hao esta aquí, puedo sentirlo.

-No tardara en sentir su presencia señorita, ¿aun seguirá queriendo tenerla para si?…

-No lo conoces… él es muy testarudo y cuando se le mete algo en la cabeza no hay quien se lo saque, ahora siento su presencia cada ves más cerca… ¡debe haberme localizado!

-Entonces será mejor entrar a la aldea, estará más protegida…

-Sí, pero creo que de una vez por todas debo enfrentar mis miedos…

-¿A costa de su vida?

-Es uno de todos los riesgos que deberé correr.

Mientras que no muy lejos de ahí, Yoh y sus amigos conversaban animadamente a la luz de unas velas en el improvisado campamento en aquel bosquecillo en la aldea, recordando los eventos de sus nuevas vidas.

Manta se estaba jugando cartas shamaniticas junto a Fausto y Liserg.

Horo Horo y Ren estaban como siempre peleando, pero fueron interrumpidos por Yosen y uno de sus chistes sin gracia que les recordaba profundamente a Chocolove, él pobre salio volando por un golpe de la posesión de Ren al que le tiritaba un ojo.

Pero no sabían si la fuerte explosión que habían escuchado era por la mini batalla de Ren y Horo Horo o por algo más, por lo que salieron del lugar.

A lo lejos se podía apreciar un gran poder espiritual atacando y otro más débil defendiéndose. Yoh se quedó estático pensando que una de esas esencias era muy parecida a la de Hao, demasiado fuerte, demasiado diabólica.