Capitulo 2
Negociaciones
Me di cuenta de que me había pasado y Aoshi miró por encima de mi a su asistente con reproche.
-Lo siento - me excuse
Aoshi hizo una seña con la cabeza y el hombre se dio cuenta de lo que le ordenaba su jefe y salió del despacho cerrando la puerta.
-Por qué te estás humillando de esta forma? —l preguntó Aoshi entonces-, no has rebajado suficiente el honor de tu familia?
-No lo he hecho.
-No? Si no fuera por el respeto que le tengo a tu abuelo, habría hecho que te echaran el primer día.
-Tengo una proposición para ti.
-No voy a escuchar ninguna proposición. ¿Cómo me puedes mirar a la cara?
-Es fácil, teniendo la conciencia limpia -respondi desafiante, sabia que al menos en eso, tenia superiridad, el no podia decir lo mismo, no sinceramente
-Eres una zorra.
Sin dejarme afectar por esa acusación, tan lejos de la verdad, me sorprendió de que él siguiera necesitando castigarme tanto tiempo después de los hechos. E irónico el que al parecer hubiera causado más impresión en él con su aparente infidelidad que cuando se hicieron novios.
Rei secamente.
-Llámame lo que quieras, pero de verdad que he venido aquí para ofrecerte un trato de negocios.
-Akito Makimashi no te utilizará a ti como mensajera.
-Bueno... En este caso en particular, de los tres, parece que solo yo tengo el arrojo necesario para hacer esta aproximación tan directa. ¿Es que no puedes dejar de pensar en lo que supuestamente pasó hace cuatro años para escucharme?
-No.
Que insufrible .
-Por qué no? - pregunte manteniendo la calma
Aoshi se limitó a mirarme fijamente.
-Mi abuelo sigue deseando que tu algun dia lideres el clan-prosegui- Afrontémoslo... es lo que siempre ha querido él, lo mismo que tu padre. Yo solo era el nexo de unión. Yo no era nada importante, salvo como una especie de garantía.
-A qué viene todo esto ahora?
-Estoy dejando las cosas claras¿de acuerdo?
-No, no estoy de acuerdo. Sal de aquí.
-No me voy a marchar! —dije apretando los puños—. Tú ya has tenido tu venganza.
-De qué me estás hablando?
-Si te casas conmigo, yo te lo cederé todo a ti.
Eso logró que él me mirara con atención.
-No me estoy refiriendo a un matrimonio normal -continue-. Solo a uno que pueda satisfacer a mi abuelo. Yo no le importo tampoco lo más mínimo a él, así que no esperará mucho de ese matrimonio. Yo me ire de aquí... lo único que necesito es algo con lo que vivir. A cambio, el clan Makimashi será todo tuyo, sin tener siquiera que soportar que yo esté cerca.
Aoshi murmuró algo en tono ininteligible.
-Aoshi, trata de entender que estoy desesperada, si no, no te estaría sugiriendo esto. Sé que tú crees...
-Cómo te atreves a venirme con semejante oferta?
-Yo...
Aoshi se acercó y me agarró por los brazos.
-Estás loca? Debes de estarlo para venirme con esto. ¿Cómo puedes pensar por un momento que yo me casaría con una zorra avariciosa como tú?
-Tómatelo como un contrato de negocios, no como un matrimonio.
-Por parte de una mujer que .. hizo lo que hizo?
-No es que eso tenga importancia ahora, pero eso no sucedió, Aoshi...
Me apartó con cara de asqueado, lo hubiese abofeteado al grandisimo hipocrita.
-Te vieron. Me ofendes con esta oferta...
-Por qué? Si pudieras darle la espalda al pasado, te darías cuenta de que era esto lo que querías hace años, y más... ya que yo no voy a pretender ser tu esposa, vivir contigo o molestarte de alguna manera.
-Tu abuelo te matará si sigues con esto...
Eso era risible.
-Oh, seguro que no le gustan mis métodos, pero hace tres días que él mismo me dijo que solo ganaría su perdón casándome contigo, palabras mas o menos... Así que no me parece que tenga muchas más opciones¿verdad?
-Tú ya elegiste hace años.
-No me hables así —murmure hasta mi paciencia tiene limites, me esforce en recordar lo que queria lograr.
-A ti te hablo como quiero - retruco Aoshi- ¿O es que te crees que tienes la exclusiva de hacerlo directamente?
-No, pero...
-Crees que puedes venir aquí a pedirme que me case contigo y conseguir que te respete?
-Pensé que respetarías lo que valgo para ti económicamente.
-Estás jugando con fuego y no lo sabes. ¿Cómo estás de desesperada?
Las rodillas me estaban empezando a fallar, podia ser que el no aceptara?
-Mi madre no está bien - intente explicar
-Oh, no me vengas ahora con una historia triste, por favor. ¿Por qué clase de idiota me tomas?
-Puede que ya me haya cansado de ser pobre - respondi molesta y frustrada-¿qué te importa eso a ti?
-No me importa -respondió él-, aun así, admito una cosa. Tienes más valor que cualquier otra mujer que haya conocido. Y debes estar realmente desesperada para venirme con esta proposición. Me lo pensaré.
La esperanza que senti casi hizo marearme.
-Pensabas que era imposible que rechazara tu proposición si me venía envuelta en la idea del mando del clan Makimashi? -añadió él.
-Tú eres un hombre como mi abuelo. No tienes nada que perder y mucho que ganar.
-Mucho... -dijo él con una vehemencia que me impacto y su inensa mirada me perturbo.
Pero me di cuenta de que, realmente, no me estaba viendo, sino al poder que estaba a punto de conseguir.
-Cómo me puedo poner en contacto contigo? —me preguntó Aoshi.
Me tense y lo que me quedaba de orgullo reacciono.
-Te daré una direccion, pero no es la mía. Me puedes dejar allí cualquier mensaje.
-A qué viene ese secretismo?
Ignore esa pregunta y le escribi la direccion de una amiga.
-Me marcho -dijo sabiendo que no le quedaba nada más que decir.
Aoshi me dio la espalda.
Cuando sali del despacho, me cruzó con el asistente.
-No me ha comido viva -le dije sonriendo débilmente, ya que ese hombre siempre le había caído bien
-Lo hará. Pero eso no es asunto mío, señorita.
Antes de entrar en casa, me pase por la de mi amiga para decirle que me iban a dejar un mensaje.
Pero tres días más tarde, él no había contestado.
Una semana más tarde, estaba de vuelta de la tienda donde trabajaba, cuando vi que mi amiga me llamaba desde el otro lado de la calle.
Sonrei y cruce la calle.
-Ha llegado esta mañana – me entrego un sobre.
-Qué?
-Me han dicho que vayas esta noche, a las ocho.
Trague saliva, y me aferre al sobre como mi tabla de salvacion.
-Gracias.
-Una entrevista de trabajo?
-Algo parecido.
-Bueno, yo me quedaré con tu madre. Sé que no le gusta estar sola después de anochecer.
Mientras me preparaba para la cita, me pregunte si el repararía en su aspecto. Desde la ultima vez que nos vimos habian transcurrido cuatro años, ya no era la feita que mas parecia chico de 16 años, ahora - y valga la jactancia-, tenia mis atributos, noque fuera una gran belleza, pero no podia decirme fea
Creci, mi cuerpo se desarollo un tanto mas y mi aspecto era mas femenino, nada que ver on la chica de hace cuatro años a la que su novio ni miraba
Un novio que, cuando lo había sido, ni siquiera había tratado de propasarse con ella!
Lo cierto era que, después de ese desastroso incidente, había perdido toda su confianza en mí misma y me costo recupèrarla.
Si no hubiese ido a ese viaje, tal vez ...
Su madre nunca detuvo la correspondencia con su abuelo aunque este nunca le respondiera, incluyendo una foto de Misao que Kaori se obstino en tomarle cuando recien cumplia los catorce años.
Cuando Misao cumplió los dieciséis, llegaron noticias de Akito.
Una carta seca de tres líneas invitando a Misao para que conociera a su abuelo.
Había aceptado aunque la invitación no incluía a su madre, ya que ambas habían creído que lo haría en su momento y Kaori le ordeno ir
Misao no se había dado cuenta realmente de lo rico que era su abuelo hasta que llego a la enorme mansión en el mejor barrio de Tokio
Nada más conocerse, Misao se dio cuenta del desagrado de su abuelo al encontrarse con una nieta hija de un matrimonio no preparado por el. Y, a pesar del lazo sanguineo en comun, había sido un extraño para ella, un extraño seco y desagradable que le había dicho que no mencionara a su madre en su presencia. Pocas horas después de su llegada, Misao estaba ansiosa por volverse a marchar.
Al día siguiente, Akito la había mandado de compras con la esposa de uno de sus colegas de negocios.
A ella le dio la impresión de que su abuelo se avergonzaba de su aspecto, pero la compra de una gran cantidad de ropa nueva y cara le había resultado muy excitante
Después de eso, le dijo que había invitado a casa a algunos jóvenes por la tarde, para que pudiera hacer amigos de su edad.
Mientras ella se preparaba en su habitación, llamaron a la puerta y una preciosa morena con enormes ojos castaños y expresión amigable asomó la cabeza.
-Soy Mirai Sugawara. Mi tía te llevó de compras ayer -le dijo.
Pronto Misao se hizo amiga de ella y le agradeció los consejos sobre cómo comportarse.
Recordar esos primeros días y lo inocente que había sido la hizo estremecerse. Se había visto rodeada de lobos sonrientes. Cuando le ofrecieron su amistad, ella creyó que era de verdad. Entonces no había sabido que Akito había planeado hacerla su heredera ni que la posibilidad de que se casara con Aoshi Shinomori había sido hablada mucho antes siquiera de que lo conociera.., o de que los demás vieran en ello una amenaza y una fuente de celos.
Un hombre de seguridad me introdujo en el edificio justo antes de las ocho esa tarde.
Todo estaba muy vacío y estaba muy nerviosa.
Llamó a la puerta del despacho de Aoshi y abrió con mano temblorosa.
Solo estaba encendida la lámpara de la mesa y por los ventanales se veían las luces de la Calle por la noche. Aoshi salió entonces de la oscuridad, vestido muy elegantemente con un traje gris al estilo occidental.
-Ya veo que esta noche eres puntual y educada -dijo él.
No pude evitarlo, me ruborice, gracias al cielo las luces eran bajas. Pero estaba consciente e que el equilibrio de poder había cambiado. Hacía una semana, yo había tenido la sorpresa de su lado y estaba suficientemente desesperada para hacerme oír. Pero ahora eso era el pasado. Estaba allí esa noche para oír la respuesta de Aoshi.
-Quieres tomar algo? —me preguntó
-Un te.
Me sirvio una taza.
-Bueno... -añadió él-, solo tengo una pregunta que hacerte antes de que nos dediquemos a los negocios. Y tiene truco.
-Entonces, no la quiero oír.
-Pero la tienes que responder con completa, sinceridad. No te interesa mentir. Así que no me des la respuesta que crees que yo quiero oir porque puede que termines arrepintiéndote de ello.
Le di un trago al te, tenía la boca muy seca.
-Esa noche, la de nuestro compromiso, puede que me vieras en una actitud comprometedora con otra chica...Tefuiste con Jin molesta por lo que pensabas haber visto y él se aprovechó entonces de tu estado¿O...?
Mire fijamente la lámpara de mesa, llena de rabia y resentimiento Desee tirarle el te a la cara .. porque la maldita bebida no estaba hirviendo, asi le arderia mas... y luego golpearlo lo más fuertemente que pudiera por años de castigo por un pecado que no había cometido Porqué iba a admitir las agonías por las que él me había hecho pasar esa noche¿Por qué humillarme más a sí misma con esa sinceridad¿Qué sacaba él haciéndome esas preguntas?. ¡Cuándo no me las había hecho en su momento¡. Ni había habido ninguna referencia a que yo lo pudiera haber visto con otra Chica ... cinico descarado
-O qué? —dije en voz baja.
-O... ¿Te fuiste con el en porque pensaste que no te iban a ver o porque...?
-Me fui con el en tu coche porque me volvía loca! -exclame desafiante
Me fríamente
-Estás jugando conmigo para divertirte!-continue, ya sbia lo que vendria pero no me quedaria con esa-. Me vas a decir que no, por supuesto. ¡Realmente no sé por qué me he molestado en venir hoy aquí!
-Porque estabas desesperada -me recordó.
-Bueno, entonces ¿por qué no te has limitado a decirme que no? -afirme perdiendo la paciencia y levantándose
Aoshi se levantó también.
-No es necesario ponerse así. ¿Por que no te vuelves a sentar? - dijo conciliador
Bien, tratari a de calmarme.
Aoshi se rió, cosa que que encontre más enervante todavía, ya estaba a punto de preparar las uñas y desgarrarle su linda carita.
-Qué te parece tan divertido?- le pregunte molesta
-Siempre parecías tan tranquila, Pero ahora estoy viendo a la verdadera Misao … Airada, terca y dura .. y fiera
-Estas no son unas circunstancias normales No presumas de saber nada de mi! ..porque no sabes nada!
-Pero si no aceptas la carta que te ha tocado jugar, yo voy a romper la baraja -dijo él suavemente.
Me di cuenta entonces yo tampoco conocía a Aoshi Shinomori.
-Te gusta poner las cartas sobre la mesa¿no? Debería haber recordado eso – le espete
-Ahora siéntate para que puedas oír mis condiciones para ese matrimonio – propuso Aoshi
Quede helada y con los ojos muy abiertos .. el habia aceptado!
-Sí - afrirmo de frente-, lo que quieres está a tu alcance, pero puede que no quieras pagar el precio que te pido.
-E1 precio?
-Todo lo bueno tiene un precio¿o es que todavía no lo sabes?
Anonadada por el hecho de que él fuera a aceptar, No conteste enseguida.
-Estás extrañada... me sorprendes —admitió él—. La semana pasada parecías muy confiada en poder conseguir que yo accediera
-Pues tú no me animaste mucho.
-Me he pensado mucho tu proposición Creo que he de advertirte que soy implacable Cuando negocio.
-Dime algo que no sepa.
-Tengo ciertas condiciones a las que vas a tener que acceder. Yaquí no hay posibilidad para ninguna negociación.
-Dimelo que quieres
-Firmarás un contrato prenupcial
-Por supuesto.
-Me pasarás todo a mí el día de la boda.
-Aparte de una pequeña...
-Todo. Yo te daré un sueldo.
-Pero eso no es lo que...
-Vas a tener que confiar en mí.
-Quiero comprarle una casa a mi madre.
-Naturalmente, yo no permtiré que tu madre sufra de ninguna manera. Si te casas conmigo, te prometo que vivirá con toda comodidad el resto de su vida. Yo la trataré como trataría a un miembro de mi propia familia.
Aquella era una oferta más que generosa, lo que sea de cada quien, reconoci. Ofrecia algo que ni su propi familia habia siquiere intentado hacer
-Tu abuelo nació en otra epoca - continuó Aoshi como si supiera lo que ella estaba pensando- Es de una generación muy diferente.Un matrimonio interracial fue una vergüenza enorme para él.
-Ya lo sé, pero...
-No, no lo sabes. Ni siquiera puedes empezar a entenderlo. Tu madre te trajo aquí pero no te empapaste de la verdadera cultura Japonesa, te educaste en colegios de extranjeros. No la estoy juzgando por eso, pero no me digas que entiendes nuestra cultura porque no es así. Los hombres Japoneses siempre han dado mucho valor a la virtud y sumisión de la mujer...
-Nos estamos saliendo del tema -lo interrumpi-¿Qué decías acerca de que yo tengo que pasártelo todo a ti?
-Eso no es negociación. Lo tomas o lo dejas.
Respire profundamente, no habia otra opcion
-No me importa el dinero - le dije, senti que necesitaba que el me creyera al menos en eso
-Si no te importa¿por qué estás discutiendo¿Crees que mantendría a mi esposa en la penuria?
-No.
Él miró su reloj y luego a mi
-Esto está progresando muy despacio,. ¿Puedo continuar?
Asintio callada
-Tu creencia de que podemos casarnos y separamos inmediatamente después de la ceremonia es ridícula. Tu abuelo no aceptará una pantomima de esa naturaleza. Ni yo esto dispuesto a engañarlo así, ademas, tengo un deber como lider de mi familia que realizar
Todo mi cuerpo se tenso, no me gustaba el rumb que esto tomaba
-Yqué me sugieres? - pregunte temerosa
-Tú vas a tener que vivir en una de mis casas... Por lo menos durante un tiempo.
Pense en mama y asinti de nuevo.
-Y me darás un hijo y heredero.
-Que! - grite para mis adentros, esto era surrealista, casi Kafkiano, no podia estar hablando en serio
-Sí, ya lo has oído -insistió él-. Yo necesito un hijo, heredero a mi puesto en el clan y si tengo que casarme contigo, bien puedo aprovechar la oportunidad
-Estás de broma! - solo podia ser eso, dije brincando como resorte cuando mi cerebro se reconecto con mi cuerpo
Aoshi enarcó una ceja.
-El hijo y heredero es también algo no negociable Y, a no ser que yo cambie de opinión en el futuro, una hija no será aceptable como sustituta. Una mujer no puede ser cabeza de familia.
Me sente en un sillón y lo mire como si fuera un bicho raro.
-Tu me odias - dije despacio como explicabndo a un chiquillo el A,B,C-, así que no es posible que quieras...
-No te equivoques Misao soy un hombre muy práctico. Un hijo que tambien lleve tu sangre garanizaria definitivamente la alianza de los dos clanes
Me levantó del sillón furiosa, al diablo, que bueno que tengo las uñas largas.
-Me has hecho venir para humillarme.
-Siéntate, porque todavía no he terminado
-Vete a...! - no lo digo porque soy una dama, pero bien que lo pienso
-Si yo fuera tú, no presionaría así -dijo él en voz baja- Te tengo donde quiero.
-De eso nada!
-Cuanto mas crees que aguantara tu madre sin su tratamiento?
Mama...
Palida y helada me volvi y me sente sumisa en el sillon.
-Lección primera, Misao. Cuando yo te digo que te tengo donde quiero¡escucha y obedece!
N/A: Ya viene el tercero y cuarto capitulo, mañana mismo .. si Satsuki actualiza ...
hice un trato con ella
ds capitulos por cada uno que ella publique
y despues del capitulo final el de ella, continuare el ritmo, la historia la tengo lista y tipeada y terminada ( un recrord fue un maraton de una noche desde las 7 de la noche hasta las ocho y pico de la mañana), solo la distribuyo en dos capitulos diarios, antes del jueves publico el capitulo final, si por tabajo falo algun dia, al siguiente pulico lo de ese dia mas el atraso, es decir, cuatro capitulos o los que sean
Hay que ver en que berenjenales ponemos a los personajes verdad?
Nos Vemos
Chaup
Randa1