Dia de metz

Acababa de ducharme y estaba sentado en el sofá, con una taza de café llameante en una mano y el periódico del día en la otra. Una mañana tranquila, tenía mi teléfono celular lo suficientemente cerca como para tenerlo al alcance. Esperaba que las cosas fueran mejor para Dante hoy, pero siempre existe la posibilidad de que necesite ayuda o algún consejo de sus padres.

La taza de café, ahora vacía, descansaba sobre la mesa. Estaba concentrada en el periódico haciendo el crucigrama cuando sonó el celular, decidí ser cruel y dejar que sonara un poco, Dante estaría un poco abrumado.

Cogí el teléfono sin mirar quién llamaba, era obvio que solo me llamaría Dante, ya que el resto de la Fundación sabía que estaba de vacaciones, por lo que no se atreverían a llamarme.

-¿Sí?

-Metz, soy Zhalia...

Vale, eso..., no me lo esperaba. A pesar de mi sorpresa, actué tan normal como pude. No perdió el tiempo diciéndome que necesitaban ayuda con Lok. Zhalia no estaba en casa, se había escapado, así que decidí que nos encontraríamos en un café cerca de la casa donde me hospedaba, le di una hora y fui a arreglarme tranquilamente, estaba convencido de que nada tan horrible podría haberlo hecho. sucedió que ella tuvo que correr.

Mientras me acercaba a la cafetería, vi a Zhalia sentada en una de las mesas de la terraza. Podía decir que estaba nerviosa, pero lo disimuló muy bien. La postura de su cuerpo cambió de ella cuando me vio, la sentí un poco más segura. Sé que Zhalia no se siente muy cómoda conmigo, por lo que trataría de hacerle esta situación lo más fácil posible.

-Metz, gracias por venir.

-Gracias por llamarme- Me senté con una gran sonrisa, tenía que disimular mi nerviosismo, esta conversación solo podía salir de dos maneras, o muy buena y divertida o muy mala y trágica.

-Espero no haberte molestado, se que regresabas a Nueva York.

-Nah, eso es mentira le dije a Dante. En realidad, estoy trabajando en una casa de seguridad de la Fundación no muy lejos de aquí.

No me importaba decirle la verdad a Zhalia, sabía que no se lo diría a Dante, ella era su As bajo la manga, o si lo prefieres, un apoyo para los momentos difíciles que mini-Lok y Dante le iban a dar. Hablando de tiempos difíciles, era obvio que ella no estaba aquí solo por un café.

-¿Cuál es el problema esta vez? ¿Dante es incapaz de calmar a Lok de nuevo?

-En realidad, es Sophie quien no puede.- Wow, eso era nuevo, me costaba creer que Dante no corriera cada vez que Lok lloraba- Dante se puso a trabajar y la dejó a cargo de Lok- Otra sorpresa, Dante había sido capaz de alejarse más de dos metros de Lok sin morir. Y por el tono de Zhalia, diría que no tiene miedo de que lo maten. Lok no se tomó muy bien que ella se fuera sin él.

-Es normal, Dante pasa 24 horas con Lok en sus brazos. Y tú, ¿cómo te tomaste su partida? Sin decírtelo, supongo.- Lo de Lok no tenía remedio, pero era evidente que Zhalia estaba equivocada y eso solo significaba que Dante había dañado aún más su relación.

-No te he llamado para terapia, sino para ayuda con Lok.

Al ver que Zhalia seguía nerviosa, y encima de ella, dolida por culpa de Dante, pensé que cambiar de tema podría ayudarla a relajarse. Cuando la noté más tranquila, me concentré un poco en un problema que impedía a Zhalia disfrutar de la situación actual y que podría ayudarla a unirse nuevamente a Dante, su pánico por cuidar a un bebé. También hablamos de Dante, del daño que le hizo al equipo al marcharse sin decir nada.

Le di varios consejos a Zhalia para solucionar el problema que tenía en casa en este momento, lamentablemente Lok se iba a quedar así por un tiempo y tenían que aprender a lidiar con situaciones así constantemente, y más si Dante sigue mimando y sobreprotegiendo a Lok como lo hace, y yo no iba a estar siempre presente para salvarlos. Además, no hay nada mejor que pelear algo juntos, eso une mucho a la gente, como dicen, "el enemigo de mi enemigo es mi amigo". La desesperación de Zhalia por mi ayuda nos obligó a entrar en una negociación un tanto inútil en mi opinión. Claramente mi posición estaba a favor de Lok, tenía que lograr que Zhalia dejara de verlo como algo negativo y lograr que se involucrara más. Al final acabamos comiendo en la cafetería y divagando un poco. Le conté lo que viví en Alemania con Lok y Dante, desde que llegué hasta el embarque. Pensé que Zhalia disfrutaba mucho.

-Claro que Lok habla, dice frases cortas y monosílabos, también sabe el nombre de Dante.

-Lo que quiero decir es que Lok habla más de lo que entendemos.- Zhalia estaba completamente perdida con mi declaración.

-No te entiendo.

-Lok es mitad inglés y mitad irlandés. Entonces, creo que mezcla ambos idiomas, y mucho de su balbuceo no es balbuceo, son palabras irlandesas.

-Genial, aparte de un diccionario para bebés ahora necesito uno de irlandés.

-Por cierto…, volviendo al tema de antes…

Zhalia volvió a intentar convencerme de ir a la casa de Dante con ella y controlar la situación, pero no era algo que tuviera en mente. Ya había criado bastante a Dante y criado a Ethan, ahora me tocaba a mí disfrutar de mi medio nieto, lo que significaba que el que tenía que mimarlo y mimarlo y mimarlo era yo, y Dante y Zhalia lo educaban. Entonces, si tuviera que ordenar a menudo, estaría trastornando el orden natural de las familias. Como buena negociadora que era, Zhalia recurrió al chantaje emocional que, aunque me cuesta admitirlo, me estaba afectando bastante. Lo más aterrador no eran las situaciones peligrosas que yo mismo me planteaba, sino las posibles reacciones de Dante ante esas situaciones, como, por ejemplo, que Lok se quedara ronco de tanto llorar, algo completamente ridículo o enfermarse bajo el cuidado de Sophie y Den, completamente imposible. Ambos sabíamos que era muy poco probable, pero sabíamos que la reacción exagerada del padre sobreprotector de Dante habría tenido un ataque al corazón cuando algo le sucedió al Lok adolescente, por lo que su reacción con un mini-Lok sería extravagante. Sabía que Dante nunca me perdonaría cuando se enterara de que no se iba y dejé que le pasara algo a Lok, así que eso fue suficiente para aceptar ir con Zhalia y asegurarme de que Lok todavía estaba vivo. Aunque solo lo hice con una condición, si todo estaba bien, me iría, no era mi turno de cuidar niños y no les iba a hacer ese favor, Dante les había dejado la responsabilidad a ellos, tenían que hacer es por su propio bien. Zhalia hizo algunos comentarios que no creí, Sophie era una chica muy responsable y aplicada, y Den era un chico testarudo y luchador, seguramente ambos, con la guía de Cherit, eran más que capaces de cuidar a Lok. A pesar de mi negativa, Zhalia nos hizo parar en una pizzería para comprar el almuerzo del niño.

Cuando estábamos llegando, vi a Zhalia tensa, estaba feliz, no había llanto, lo que significaba que los chicos habían hecho un buen trabajo con Lok, por lo que mi visita sería breve. Nos paramos en la puerta y aun no habia ruido, por mi experiencia con Dante, cuando hay un niño en casa siempre hay algun tipo de ruido, quizas cuando le di la bienvenida a Dante, no era un bebe, pero creo que esa regla puede aplicarse a ambos casos. Traté de convencernos a ambos de que era la hora de la siesta de Lok y por lo tanto no había ruido, pero algo me dijo que Zhalia iba a tener razón y yo estaba equivocado.

Al entrar vimos la televisión encendida y Den y Sophie durmiendo en el sofá, disimuladamente respiré aliviado, tenía razón, era la hora de la siesta, para todos, al parecer.

-Te dije que era hora de la siesta de Lok. Están todos durmiendo.- susurré, sabía por la expresión de Zhalia que estaba alterada, mientras miraba la escena.

-Solo hay un defecto en tu teoría. ¿Dónde está Lok?

Entré en modo de alerta de inmediato, Zhalia tenía razón, Lok no estaba por ningún lado y era imposible que Lok decidiera de un día para otro que quería dormir la siesta en la cuna, así que la única explicación fue que los niños se cayeron. dormido, y Lok aprovechó la oportunidad para escapar. No pude evitar pensar en Lok saliendo solo a la calle por una puerta o alguien entrando y llevándoselo, que Dante viniendo a casa y llevándoselo no era algo posible ¿no?

Ambos estábamos en alerta máxima, y aunque mi corazón quería dejar de latir, pudimos mantener la calma. Nos organizamos para buscar a Lok, yo me quedé en la sala buscando en todos los rincones que se me ocurrían y Zhalia fue a dejar la pizza en la cocina y a buscarlo en la cocina. Den y Sophie durmieron todo el tiempo sobre lo que ella estaba buscando. Cuando me quedó claro que Lok no podía estar en el pasillo, fue a la biblioteca y a la sala de entrenamiento, por suerte para mi corazón y el de todos, la cerca de las escaleras está cerrada y Lok no puede abrirla, así que no es posible que subiera al segundo piso. Le aconsejé a Zhalia que buscara alguna travesura o desastre, ya que Lok había pintado todas las paredes de la casa que tenía en Alemania, y, por cierto, todavía no le he dicho a Dante lo que tiene que repintar, pero yo'

No pude encontrar a Lok por ningún lado, ni una pista de su paradero, solo esperaba que Zhalia tuviera mejor suerte. Estaba buscando en una sala, que si mal no recuerdo era para pequeñas reuniones, y que ahora era un área de videojuegos. Por suerte Zhalia entró con Lok en brazos y envuelta en la gabardina de Dante.

-Lo encontré. Se ve que se aburrió de Peter Pan y prefirió jugar con una olla.

-¿Quieres cuidar de Lok mientras estoy limpiando?

-No.

Zhalia me entregó a Lok y antes de que me diera cuenta, se había ido, bueno, tenía que intentarlo, tenía que admitir que quería ver cómo le iba a Dante con todos los lazos que le había pedido poner en el casa. Bañé a Lok rápida y eficientemente, a Lok le gusta mucho el agua y no le importó, luego lo llevé a su habitación y lo puse en el cambiador para secarlo y ponerle un pañal. Juntos elegimos qué ropa tenía que ponerse ahora que la que llevaba puesta estaba completamente arruinada. Cuando estuvo listo, bajamos a la cocina, o lo que quedaba de ella, la cocina estaba un completo desastre, algo me dice que Lok no comió nada, como un frasco vacío sobre la mesa, supuse que nada. había tratado de alimentarlo había entrado en su boca. Empecé a buscar en los armarios,

-¿Qué estás haciendo?

-Lok tiene hambre, y por ese frasco que está sobre la mesa creo que no ha comido.

-Genial, los chicos han resultado ser unos inútiles.

-Vamos, no digas eso, por lo que veo le han quitado todos los lazos rojos- Saqué un bote de puré de calabaza y lo metí en el microondas, era hora de que alguien le diera de comer a este pobre bebé.- ¿Puedes llegar? un babero de ese cajón?

-Puedo preguntar para qué eran las cintas rojas- Senté a Lok en la silla alta con una sonrisa.

-Para enloquecer a Dante- Sonó el microondas, y fui a buscar la lata de puré de calabaza y una cuchara, Zhalia terminó de abrochar a Lok en la trona y atarle el babero.

-Objetivo logrado.

¿Soy una mala persona por sentir completa satisfacción? Se me ocurrió en Alemania, mantendría a Dante ocupado y tendría algo más en qué pensar. Me senté frente a Lok para darle de comer, Zhalia se sentó junto a Lok y observó cómo Lok comía felizmente. Obviamente tenía hambre, y yo estaba feliz de darle de comer.

-¿No se supone que debe comer solo?

-Claro, ¿tú lo limpias? -Tenía que admitir que no quería empeorar la situación en la cocina, y Lok acababa de tomar un baño- Además, si Lok no ha comido para cuando Dante regrese, no estará nada feliz. y decidirá no volver a salir a trabajar.

Hacer que Dante volviera al trabajo fue un gran paso para que volviera a encarrilarse, además ayudaría a eliminar parte de la dependencia que Lok y Dante tenían el uno del otro, y si lo entrenaba para cuando me diera un nieto, sería un beneficio adicional. Cuando el frasco estuvo casi vacío, Zhalia se levantó y calentó el frasco de albóndigas que estaba en el mostrador y lo metió en el microondas.

-¡Sophie! Sofía, ¡despierta!

Los chicos finalmente se habían despertado. Decidí ignorarlos a favor de Lok, tenía una misión más importante que escuchar a dos adolescentes completamente independientes, ellos serían capaces de calmarse y resolver la situación como adultos. Los chicos seguían histéricos y Lok se estaba poniendo nervioso, Zhalia se levantó y fue a solucionar el problema. Estaba terminando de darle a Lok el puré de calabaza y estaba muy feliz. Zhalia volvió en el momento justo, sonó el microondas y fue directo a buscar el plato de albóndigas, a mí solo me quedaba una cucharada, así que Lok no tendría que esperar. Den y Sophie entraron poco después, se quedaron en la puerta atónitos, parecía como si nunca hubieran visto comer a un bebé. Zhalia puso el plato de albóndigas en la bandeja de la trona y me entregó el tenedor, luego volvió a sentarse.

-Pero…? Cómo…? Está comiendo.- Quise centrar mi atención en ellos durante dos segundos, pero no pude apartar la mirada, Lok no se lo había puesto fácil.

-Eso importa. Es tranquilo y no llora.

-¿Por qué no te odia?

-Lok no odia a nadie, solo tiene preferencia por Dante. Y no te preocupes, la primera vez que conseguí que Dante se fuera y me quedé a solas con Lok, también me torturó.- Algo que no le había dicho a Dante y que no pensaba decirle- ¿Has comido?

-Eh no. – Den se rascó un poco el brazo- No hemos tenido tiempo.

- Más bien diría que lo hemos olvidado.

-Eso suponíamos.- Zhalia me miró muy satisfecha- Mezt y yo te hemos traído pizza. Y algo para la cena.

Lok gimió con la boca abierta, estaba tan concentrada en los chicos que me había olvidado de mi tarea principal.

-Lo siento, amigo.

Le di el trozo de albóndiga que había dejado a la mitad y Lok golpeó la bandeja de la trona felizmente, era tan adorable. A los niños les tomó un tiempo procesar la situación, pero cuando se sentaron y comenzaron a comer la pizza directamente de la caja, Zhalia se levantó molesta para conseguir servilletas para ambos.

-Cuando termines de comer, saca esas bolsas- Zhalia señaló algo que tenía detrás de mí

-¿Has logrado dormir una siesta?-

- Por favor, Mezt. ¿Que pregunta es esa? Los encontramos durmiendo en el sofá mientras Lok deambulaba por la casa.

-Dante no va a estar feliz por eso.- Y no creo que Lok nos lo ponga fácil si no duerme.

-¿Esta mañana es fácil?- preguntó Den.

A pesar de haber comido a Lok estaba bastante llorona, les expliqué a los niños ya Zhalia antes de que se escapara a esconderse, que esto es lo que pasa cuando un bebé se salta la siesta, también tuve la amabilidad de recordarles la posible reacción de Dante. Cuidé a Lok mientras Den y Sophie sacaban la basura, luego jugaron con Lok mientras yo vigilaba. Den tenía muchas ganas de jugar con Lok, Sophie tenía que calmarlo, aunque no le vi nada malo a su entusiasmo, pero bueno, esa era la dinámica del equipo de Dante, yo solo era un observador comprobando que el bebé no no te lastimes Cuando Lok comenzó a bostezar y frotarse los ojos, le sugerí a Sophie, ya que ella era su niñera oficial, que lo pusiera a dormir y a Den que guardara los juguetes.

Aproveché para recorrer un poco la casa de mi protegido, la última vez que estuve aquí fue después de la derrota de Saimon, en la fiesta que teníamos para celebrarlo y para celebrar mi recuperación. Cuando estaba aquí, asegurándome de que los repartidores devolvieran todo, estaba demasiado ocupado para apreciar cuánto había cambiado la casa. En la sala pude ver muchas películas bien cuidadas, de varios géneros diferentes, así como las revistas del revistero. Regresé a la sala de entrenamiento, ya que antes, mientras buscaba a Lok, pensé que noté más equipo, y efectivamente tenía razón. Mientras estudiaba algunos de los nuevos materiales en la habitación, escuché a Lok llorando arriba, se calmó de inmediato, así que no me preocupé y seguí cotilleando. Los gritos de Lok seguían sonando de vez en cuando, cada vez que Lok lloraba y se calmaba, y al cabo de unos momentos volvía a llorar, y cada vez parecía más irritado. Mientras recorría el resto del piso, vi que había una lavadora encendida y al parecer llevaba mucho tiempo terminada, decidí ayudarme un poco y puse las toallas en la secadora para no estropearlas. Escuché los pasos de alguien que se acercaba bastante irritado, no necesitaba ser adivino para saber que solo podían ser los de Zhalia.

-Eh…, gracias- Zhalia se paró en la puerta con un poco de vergüenza, le sonreí para tranquilizarla.

-No importa. ¿Saliste de tu escondite solo para agradecerme?

-No… No sé qué está haciendo Sophie, pero Lok no parece feliz.

-Me di cuenta, creo que olvidó que a Lok le gusta dormir la siesta en el regazo de Dante. Si vuelve a suceder, me encargaré de la situación.

-¿Si vuelve a pasar? ¿No has tenido suficiente?

-Sophie es inteligente, seguro que se dará cuenta si le damos tiempo.

-Por esa regla de 3, tendríamos que dejarlo todo el día.

-Sí, pero eso no sería bueno para Lok y Dante no estará feliz.

-Hablando de Dante, ¿crees que no le importará que estés aquí?

-Estará furioso.- No se suponía que yo estuviera en tierra firme y mucho menos en su casa.-Así que creo que es mejor que no sepa que vine, pero no sé cómo disimular. de él.

-Desde la oficina de Dante puedes ver la puerta de entrada, te puedo decir que salgas por la puerta trasera antes de que entre a la casa.

Vaya, Zhalia tenía que estar desesperada, estaba en connivencia conmigo para ocultarle información a Dante, aunque se lo merecía, por ocultar que Lok estaba vivo y por ocultarle a Zhalia que volvería a trabajar. Volvimos a la sala de estar para terminar de dibujar el plan, pero una vez que estuvo hecho, Zhalia volvió a subir para seguir escondiéndose de Lok y vigilar a Dante. En el momento en que puso un pie en las escaleras, Lok volvió a llorar y Zhalia me miró esperando que obedeciera. Suspiré derrotado y subí las escaleras con ella, Zhalia esperando en el rellano hasta que entré en la habitación de Lok. Sophie parecía completamente desconcertada y agotada por el comportamiento de Lok, le recordé que a Lok le gustaba dormir sentado en el regazo de Dante y apoyado en su pecho, pero no quería arriesgarme a que Lok no tomara una siesta, además,

Me senté en la mecedora y mecí a Lok, no parecía muy dispuesto a volver a dormir, parecía bastante enojado con todo el mundo, y yo podía entenderlo, hoy había sido horrible para él y estaba lejos de terminar . Primero Dante lo dejó con dos latas, y no había regresado a pesar de sus súplicas, sus canguros habían dejado mucho que desear, aunque Lok no se lo había puesto fácil. No le había gustado la comida y no había comido nada; su hora de la siesta se retrasó dos horas y cuando finalmente llegó, no lo dejaron dormir cómodamente. Lo arrullé para que durmiera un poco y no tardó mucho en quedarse dormido, Lok era un luchador incluso cuando era un bebé, pero el sueño era un oponente demasiado poderoso para él.

Después de su siesta y un pañal limpio, Lok quería caminar, o más bien correr. Lo bajé divertido por su insistencia en que lo bajara, y salió corriendo, inmediatamente me levanté y corrí detrás de él, no tenía idea si la valla de seguridad en las escaleras estaría cerrada, por suerte lo estaba. Era. Lok se agarró de los barrotes molesto, me miró con el ceño fruncido, pero con el pacefer puesto y arrastrando su peluche no pude tomar en serio su enfado.

-¿Quieres ir a ver a Zhalia?

No estaba seguro si Lok me había entendido, lo que sí sabía era que los bebés respondían a su tono de voz, así que hacerle una pregunta con voz tonta lo animó. Lo tomé de la mano hasta la puerta de la oficina de Dante y la abrí. Lok corrió hacia Zhalia, pero cambió su dirección hacia Cherit que estaba en el respaldo de la silla para que Lok no pudiera alcanzarlo, Lok trató de subirse a la silla, pero Zhalia lo detuvo y lo tomó en sus brazos y se giró para mirar. a mi. Me había dado cuenta de que a Lok le gustaba que Zhalia lo sostuviera casi tanto como Dante, y a Zhalia no parecía desagradarle tanto, así que lo iba a usar como una herramienta para ayudar al equipo. Le pedí que ayudara a entretener a Lok para que los muchachos limpiaran la cocina y ellos mismos, tuvimos que ocultarle a Dante la evidencia del pésimo día.

Puede que tuviera la intención de que Zhalia pasara el rato con Lok, pero me lo estaba pasando tan bien jugando con Lok y teniendo la atención de mi nieto adoptivo, pero mi nieto, era imposible quitarme la sonrisa de la cara. Zhalia se sentó en el sofá todo el tiempo mirándome jugar con Lok. Después de estar un rato sentada en el suelo, me empezó a doler la espalda, a pesar de haberme curado de la maldición que la edad no perdona. Le pedí a Zhalia que me sustituyera en el juego para poder descansar. Ahora era mi momento de sentarme y verlos jugar. Lok optó por el auto, lo movió de adelante hacia atrás mientras hacía "brum brum" con la boca, Lok le mostró el auto a Zhalia, la vi bastante perdida, pero ella no iba a intervenir, Zhalia era más que capaz de resolver el rompecabezas que es un bebé.

-Brum brum

-Sí, es un coche.

Lok estaba complacido con la respuesta de Zhalia, y Zhalia estaba orgullosa de haber hecho feliz a Lok. No iba a ser yo quien le dijera que Lok estaría satisfecho con la respuesta que le hubiera dado Zhalia. Mostrar el juguete a Zhalia fue una estrategia utilizada por los bebés para asegurarse de que tenían la atención de su cuidadora. Zhalia me miró como si Lok fuera un extraterrestre, yo solo sonreí y le di la excusa que siempre funciona, así eran los niños. Cuando Den y Sophie terminaron de limpiar, regresaron para cuidar de Lok, Zhalia regresó a la oficina de Dante para vigilar.

Den y Sophie definitivamente tenían que mejorar en el cuidado de los niños, pero tenía que tener en cuenta que Den venía de un orfanato y no importaba la edad que quisiera tener, todavía era un niño y Sophie podía ser muy madura, pero le faltaba socializar con gente en general. Lok no quería tener nada que ver con Den o Sophie, después de que Den destruyera su montaña de cubos, y Sophie escondió su osito y no pudo encontrarlo. Se acercaba la hora del regreso de Dante, Zhalia sacó la ropa de los chicos de la secadora para que se cambiaran. Después de cambiarme, los mandé a ordenar la casa, tenía que hacer que pareciera que todo estaba bien y eliminar evidencias de mi presencia, cuidé a Lok y traté de hacerlo lo más feliz posible, aunque no creo. tengo mucho Me concentré en la revista que había estado leyendo mientras vigilaba a los chicos.

-Dante acaba de entrar al patio.

Justo cuando bajaba, Zhalia volvió a subir. Esa fue mi señal para ser el que desapareciera. Cerré la revista y la enrollé para llevármela, Dante era un gran detective, cualquier cosa fuera de lugar podría decirle que estaba aquí.

-Tengo que ir. Ni una palabra a Dante sobre mi presencia en la casa.

Sophie y Den asintieron, le di a Lok una caricia en el cabello y salí por la puerta trasera. Escuché a Dante entrar a la casa y salí algo feliz, había podido pasar un día con el que habría sido mi nieto, y con quien esperaba tener una mejor relación, aunque no logré mucho antes de su supuesta muerte, Esperaba lograr algo cuando todo volviera a la normalidad.

día de la guarida

Me puse manos a la obra con mi misión, quitar las cintas rojas de toda la casa. Cherit parecía entusiasmado con la tarea, dijo que era fácil y sin complicaciones. Solo quería terminar rápido para poder jugar con Lok, él era un bebé ahora, así que yo era mayor, y aunque no podía contar con Harrison para que me ayudara, tenía la intención de divertirme con Lok, o mejor dicho, a costa de Lok. . Dante y Sophie estaban montando una escena, si Dante no se quería ir, que se quedara, ¿dónde estaba el problema? Aunque pensándolo bien, si Dante se quedaba, no podría jugar mucho con Lok.

Tan pronto como Dante se fue, lo lamenté, tenía que quedarse para que Lok dejara de llorar, era imposible concentrarse o pensar tan alto. Y Sophie no podía hacerla callar, ¿no se suponía que ella era la que sabía sobre bebés? ¿O es ella la responsable? Debido a su discapacidad, se dedicó a caminar por la casa con un bebé llorando a todo pulmón. Cuando Sophie me pidió ayuda, me negué y le pedí que me fuera a otro lugar, tenía un trabajo que hacer y no podía soportar los gritos de Lok, además Cherit comenzó a disminuir la velocidad después de que se metió en el gabinete de especias, hubo un momento en que Pensé que iba a vomitar o desmayarme.

Cuando Zhalia comenzó a gritar, también fui a mi habitación a buscar unos auriculares con cancelación de ruido y hacer mi tarea con música. No quería terminar como Cherit, con dolor de cabeza. Estos auriculares eran de Lok, me los presté para hacer mi tarea ya que eran aislantes de ruido, gracias a ellos pude concentrarme para estudiar un examen. Aprobé el examen el día que secuestraron a Lok. Cuando Dante empezó a guardar las cosas de Lok escondí los auriculares, los guardé y no quería que Dante me los quitara.

Regresé a mi tarea ahora acompañado de música, que apaciguaba los gritos de Lok que aún se escuchaban. En algún momento Sophie volvió, pero sin Lok, no le presté mucha atención y como no podía escucharla, la ignoré. En algún momento, Sophie se fue y Cherit trató de llamar mi atención. Tuve que quitarme los auriculares para hablar con él.

-¿Por qué no vas a ayudar a Sophie con Lok?

-Cherit, estoy ocupada y no quiero lidiar con un bebé que llora.

-Sabes, los hermanos mayores a veces tienen que cuidar a sus hermanos pequeños.

-Lo sé, siempre lo he hecho con Harrison.

-Podrías darle algún consejo a Sophie, tal vez así, Dante confiaba más en ti para cuidar a Lok.

-Está bien, tu deseo, iré a ver si puedo ayudarla. Pero no dejes de quitar lazos, hay demasiados.

Encontrar a Sophie fue lo más fácil que he hecho, solo tenía que seguir los gritos hasta la sala de entrenamiento. Entre los dos tratábamos de que dejara de llorar y se calmara, pero nada funcionaba, los baldes, nos los tiraba, su auto lo abofeteaba, leíamos uno de sus libros, lloraba más fuerte. No tenía opciones, Harrison era más fácil de cuidar, o eso recuerdo. Cherit había vuelto a intentar meterse en otro armario para quitarse las corbatas, lo cual fue una mala idea. Llegó volando con la mirada desenfocada y haciendo una "S", se dejó caer en la canasta de juguetes que estaba casi vacía y comenzó a leer un libro para padres. Mi última opción fue darle a Lok lo que quería, y él quería a Dante de regreso, pero Sophie se puso como una bruja cuando lo sugerí, a veces parece tan normal que olvido que es una fanática del control.

-Aquí dice que es normal que los bebés sientan pánico cuando se separan de su cuidador principal, y que lo demuestren con un llanto desconsolado.

-Gracias, Cherit. Eso es muy útil.

Cherit se encogió de hombros y dejó el libro. Dijo que iba a descansar porque le dolía la cabeza. Cuando Cherit comenzó a volar, como un milagro, se hizo el silencio, Lok miró a Cherit con los ojos muy abiertos y llenos de asombro. Observó a Cherit mientras esta volaba por la habitación tratando de llegar a la puerta, debido al mareo que le habían causado las ataduras combinado con los gritos de Lok, chocó contra la pared, cayendo al suelo. Sophie y yo hicimos una mueca, pero Lok se echó a reír, ambos lo miramos desconcertados, quién sabía que Lok era un poco sádico.

-Den, se está riendo.

-Sí. Es lindo.-Sophie me miro como si tuviera dos cabezas. -¿Qué?

-Nada, es raro que digas que un bebé es lindo.

-No estoy ciego, puedo ver perfectamente que Lok se ha reído y ha sido lindo. Y lo reconozco como todo hombre que soy.

Sophie comenzó a reírse de mí, le di un golpe en el hombro para que se detuviera, no fue divertido. Lok se puso de pie y corrió hacia Cherit, que se estaba recuperando del golpe. Lok podría haberse reído de Cherit, pero ni Sophie ni yo fuimos a ver cómo estaba. Aunque Cherit volaba fuera del alcance de Lok, seguía sonriendo y tratando de alcanzarlo. Sophie miró a Cherit con ojos de cachorrito para que se quedara con ella. Con Lok entretenido volví a la cocina para seguir rompiendo lazos con mi música e ignorar a todos. Tenía una misión, pasar el día jugando con Lok.

Después de un rato volvió Cherit, me dijo que su dolor de cabeza había mejorado y que venía a ayudarme nuevamente, ya que me había dado su palabra. Creo que fue una muy mala excusa para dejar de jugar a la niñera y huir de Lok, ya que él yacía en la mesa de la cocina como un hombre muerto después de quitar dos ataduras más. Ya casi había terminado con los gabinetes de la cocina, solo necesitaba un gabinete superior… y el resto de la casa. Cuando me levante del piso y cerré la puerta del closet que acababa de vaciar vi a Lok entrar corriendo riéndose, no pregunté, ni iba a preguntar, entretuve a Lok con la montaña de moños que tenía se formó en el suelo y me quitó los auriculares. Sophie no llegó como pensé que lo haría, y como yo era el único adulto responsable en la habitación, era mi deber vigilar a Lok, así que tenía que mantener mis oídos y mis ojos en él. Me subí al mostrador y continué con el último armario que me faltaba, solo esperaba que Sophie no se hubiera escondido y me hubiera dejado al cuidado de Lok, no quería que Dante se enojara cuando llegara a casa y viera que yo no había cumplido mi misión. Aunque por otro lado… si él demostraba ser un buen niñero, Dante me llamaría para cuidar de Lok, sin embargo, no quería tener que cambiar pañales. Estaba en un dilema.

Sophie resolvió el dilema, y lo hizo de su manera favorita, poniéndose histérica y gritando, no pude evitar poner los ojos en blanco, por lo que Lok y Zhalia me habían dicho ese método que amaba desde que la conocieron. Cuando empezó a gritar que había perdido a Lok, la miré extrañado.

-Sophie, quieres calmarte. Lok ha estado sentado allí por un tiempo.

Señalé la montaña de arcos donde Lok había estado sentado en el suelo con las piernas cubiertas por ellos desde que llegó, aunque ahora tenía un arco en la cabeza y en sus manos tenía otro que miraba como un tesoro, para se lo metió en la boca y empezó a chuparlo y morderlo. No entendí que eso podría haber motivado a Lok a hacer eso, y él tan poco quería saber.

-¡Ahí tienes! ¿Puedo saber lo que tienes contra mí? Ayer nos llevamos muy bien. -No pude evitar reírme cuando escuché a Sophie disgustarse, aunque por suerte, creo que no me escuchó. -Chicos, necesito ayuda. No puedo con Lok por mi cuenta.

-Esa es tu misión, la mía y la de Cherit es quitar ataduras, aunque como ves mi pareja me ha abandonado.

-¡Enfriar! para que puedas ayudarme.

-No lo creo, creo que está muerto o algo así.

-No me importa, solo necesito su cuerpo, esté vivo o no.

-No sé si eso es cruel o desesperado, pero sea lo que sea, no creo que Cherit te vaya a ayudar. Deberías encontrar otra solución. - Sophie era realmente espeluznante

-¿Cómo qué?

-No sé, ¿llamar a Dante?- Sophie me miró fijamente, pero esa era la solución más obvia y la que nos sacaría a todos de este calvario. -Se supone que eres tú quien sabe y quien debe cuidar al bebé.- Eres tú, solo vine a acompañarte, porque pensé que tenía la oportunidad de divertirme un poco a costa de Lok, ahora yo' m quitando lazos. ¡¿Por qué hay tanto arco?! ¡esto está mal! Ahora entiendo por qué Dante se escapó.

Sophie volvió a llevarse a Lok, me volví a poner los auriculares, ya no tenía que mirar a Lok y, para mi satisfacción, había logrado romper los lazos en la cocina. Di un pequeño recorrido por la planta baja, eso sí, evitando a toda costa la sala de entrenamiento, para buscar más lazos, por suerte no encontré muchos más. Cuando la planta baja quedó libre de ataduras llegó el momento de subir. Antes de continuar con la peor misión de la historia, revisa las habitaciones para ver dónde había lazos y dónde no. En mi expedición descubrí que Zhalia se había ido, probablemente después de gritar, así que se me ocurrió que podía descansar un poco detrás de Sophie. Estaba cansada y me dolían un poco los músculos, y si le decía a Sophie que iba a descansar, me obligaría a cuidar de Lok con ella, y yo no quería.

Descansé media hora en mi cuarto, no hice mucho, solo jugué al móvil, pero me ayudó a seguir. La mayoría de las corbatas estaban en el baño y en la habitación de Lok, aunque la cantidad de corbatas en la habitación de Lok valía el piso entero. Cada prenda de vestir tenía un lazo, incluidos los calcetines, era horrible. Esto me había enseñado dos cosas, la primera Mezt, a pesar de su apariencia, es un genio malvado que no debe enfadarse, y la segunda, estaba en muy mal estado, hacía siete meses que no entrenaba y se notaba.

Cuando todos los arcos estuvieron en una maravillosa montaña en el suelo me sentí muy orgullosa, hasta que me di cuenta que tenía que bajarlos para tirarlos. Suspiré derrotado cuando logré bajar los lazos en un solo viaje. Antes de bajar me quité los auriculares y los escondí en mi habitación. Tan pronto como me los quité, lo siento, Lok estaba teniendo otra rabieta en la cocina. Bajé a la cocina justo a tiempo para ver a Lok tirar puré de papas en la cara de Sophie, fue gracioso.

-Dante ha comenzado a usar varias de las cosas sin haber quitado los lazos.

-¿Y puedes culparlo? te ves horrible

-No te ves mejor- Dejé caer las corbatas al piso- Está bien, ahora tengo que poner estas corbatas en bolsas de basura y terminar con el resto- Estaba completamente agotada, ese no era mi plan para el día.

-¡Te lo cambio!

-¿Qué?-¿Sophie había perdido la cabeza?

-Tú cuidas de Lok y yo de las corbatas.- Miré a Sophie de arriba abajo y miré hacia la cocina, todo estaba hecho un desastre.

-Ni muerta, te ves peor que yo, y la cocina también.

Me di la vuelta tratando de recordar dónde estaban las bolsas de basura. Sophie se dejó caer en su silla y se volvió para mirarme.

-¿Qué estás haciendo?- Me arrodillé frente a un gabinete, sin saber si este era el correcto.

-Tengo que poner estos lazos en bolsas para tirarlos cuando termine- Yo estaba muy feliz, las bolsas de basura estaban en este armario.

-Por qué no preparaste antes la bolsa, y las estabas tirando adentro- Esa fue una buena idea que me podría haber ahorrado trabajo.

-No se me había ocurrido- Miré a Sophie por unos momentos sin decir nada. Yo sostenía una bolsa abierta y Sophie la cuchara con la que estaba alimentando a Lok- Mantenga los lazos, traté de hacer que comiera.

El día no podía empeorar, estábamos sentados en el sofá con Lok en el medio. Los tres estábamos cubiertos de puré de calabacín. Ninguno de los dos había conseguido que comiera nada. Las corbatas estaban en dos bolsas hasta arriba esperando ser tiradas, pero ninguna tenía fuerza. Nos habíamos quitado los zapatos y descansamos los pies sobre la mesa. Como ninguno de ellos hizo ningún progreso con Lok, nos dimos por vencidos y optamos por ponerle una película, con la esperanza de que se durmiera. El Lok normal lo hizo, no debería haber mucha diferencia. Nos decidimos por un clásico de Disney, Peter Pan.

Me desperté con una tensión en el cuello, dormir en un sofá sentado fue algo horrible. Me estiré para quitarme el cansancio y relajar un poco los músculos. Sophie seguía durmiendo a mi lado, pero Lok se había ido. Inmediatamente entré en pánico.

-¡Sophie! Sofía, ¡despierta!

-¿Qué? ¿Qué pasa?- Sophie se frotó los ojos antes de mirarme.

- ¡Mira que no lo eres!

-¿Cómo?-Y toda la somnolencia que pudiera tener se fue de repente.

-Nos quedamos dormidos.

-¡Tenemos que encontrarlo!-Ambos nos pusimos de pie.

-¡Ay!- Algo se me clavó en el pie, cuando miré para ver qué era vi uno de los cubos Lok- ¿Qué hace un cubo Lok aquí?

-Lo puse cuando te dormiste.

-¿Qué? ¿Por qué lo hiciste?

-Por tirarme de la cocina en lugar de ayudarme cuando te pedí ayuda.

-Eres cruel.

-¡Nos estamos saliendo del tema! ¡Lok debe ser encontrado!

- ¿Puedo saber que te pasa ahora?

Sophie y yo volteamos a mirar a Zhalia extrañados, ella venía de la cocina y estaba enojada, no es bueno que Zhalia se enoje, por lo general Lok o yo terminamos castigados, la mayoría de las veces, los dos.

-¿Y bueno? quien me lo explica

-Lok ha desaparecido- Sophie y yo hablamos al mismo tiempo, y era raro.

-Lok está en la cocina con Mezt, le está dando de comer.

Zhalia se dio la vuelta y entró en la cocina, Sophie y yo la seguimos. ¿Tenía que ver eso, Lok comiendo? No se lo iba a perder por nada del mundo. Zhalia no mentía, Lok estaba sentado en su silla alta con un babero en ropa limpia y las mejillas hinchadas llenas de puré de papas. Mezt se sentó frente a él con un bote de puré de calabaza vacío en una mano y una cuchara en la otra. Zhalia sacó el plato de albóndigas del microondas y lo puso frente a Lok, le entregó el tenedor a Mezt y se sentó a su lado. Lok comió felizmente todo lo que Mezt le ofreció, no tenía nada que ver con la situación que vivimos Sophie y yo antes, abrió la boca de buena gana, esperando que Mezt siguiera alimentándolo.

-Pero…? Cómo…? Está comiendo.-Sophie estaba completamente desanimada, no me importaba, todo estaba bien y Lok ya no era nuestro problema.

-Eso importa. Es tranquilo y no llora.

¿Por qué no te odia?

-Lok no odia a nadie, solo tiene preferencia por Dante. Y no te preocupes, la primera vez que conseguí que Dante se fuera y me quedé solo con Lok, también me torturó. ¿has comido?

-Eh no. –Se nos había olvidado, pero no quería decir eso y quedar en ridículo delante de Mezt- - No hemos tenido tiempo.

-Preferiría decir que lo hemos olvidado.- Estúpida de Sophie.

-Eso pensamos. Mezt y yo te hemos traído pizza. Y algo para la cena.

Lok gimió con la boca abierta, Mezt se había detenido mientras le daba de comer. Lok quería ese trozo de albóndiga que Mezt le estaba ofreciendo, pero no se lo dio.

-Lo siento, amigo.

Mezt se metió el trozo de albóndiga en la boca y Lok golpeó la bandeja de la feliz trona. Sophie y yo nos sentamos y comenzamos a comer la pizza directamente de la caja, no me había dado cuenta hasta ahora, pero me moría de hambre. Zhalia nos trajo unas servilletas.

-Cuando termines de comer, saca esas bolsas- No pude evitar gemir de disgusto, no quería moverme, y Sophie tan pequeña.

-¿Has logrado dormir una siesta?

-Por favor, Mezt. ¿Que pregunta es esa? Los encontramos durmiendo en el sofá mientras Lok deambulaba por la casa.

-Dante no va a estar feliz por eso. Y no creo que Lok nos lo ponga fácil si no duerme.

-¿Es que esta mañana fue fácil?

Por suerte nadie respondió a mi pregunta, así que no quería saber si podría ser más difícil. Después de comer, Zhalia se fue y Mezt nos vio cuidar de Lok. Lok estaba menos lloroso, pero igual de llorón. Después de tirar las bolsas de basura con las corbatas, finalmente tuve la oportunidad de jugar con Lok. Tenía muchas ganas, pero Sophie me cortó el rollo. Después de apilar bloques y jugar con el auto, Lok comenzó a bostezar y frotarse los ojos, Mezt sugirió que Sophie lo pusiera a dormir y me pidió que guardara los juguetes.

Cuando terminé, me senté en el sofá a ver la televisión. Mezt dio la vuelta a la casa. De vez en cuando escuchaba llorar a Lok. Aburrida de todo me fui a la cocina, recordé haber visto un paquete de galletas y tenía la intención de comerme unas cuantas. Mientras estaba en la cocina, vi a Mezt ir al lavadero. Poco después de que Zhalia se enojara, y como no quería que se desquitara conmigo, le dije dónde estaba Mezt. Tan pronto como Zhalia me dio la espalda, salí de la cocina y volví a la sala de estar, nunca era bueno estar cerca de una Zhalia enojada.

Los dos regresaron al salón para escuchar llorar a Lok, Mezt suspiró y subió las escaleras con Zhalia. Seguí navegando por los canales queriendo encontrar algo que me interesara, Sophie bajó y se derrumbó a mi lado. Quería hacer un comentario sobre sus habilidades como niñera, pero a favor de vivir, me lo guardé para mí. La hora de la siesta de Lok la pasamos tirados en el sofá viendo la tele y desconectando de todo.

Después de la siesta de Lok, Mezt nos dio tiempo y nos ordenó a Sophie ya mí que nos laváramos, laváramos la ropa, nos pusiéramos cualquier cosa y limpiáramos el desorden en la cocina, mientras él y Zhalia entretenían a Lok. Mezt y Zhalia no lo dijeron, pero estaban tramando algo, como ocultarle a Dante el desastre del día que tuvimos a Lok.

Lok no quería tener nada que ver conmigo, no después de destruir su montaña de cubos, y se enojó con Sophie cuando ella escondió su peluche con un cojín en el sofá y no pudo encontrarlo, a pesar de que ella se lo dio después. 10 segundos, no, fue suficiente para él. No hemos tenido noticias de Cherit desde la 1:00 p. m., pero Zhalia nos dijo que Cherit estaba en la oficina de Dante con una migraña horrible. Me sentí un poco mal, no hemos sabido nada de Cherit desde la 1:00 pm, pero tan poco habíamos querido. Sabía que se acercaba la hora del regreso de Dante, porque Zhalia sacó nuestra ropa de la secadora para que pudiéramos cambiarnos. Luego desapareció de nuevo, al parecer, estaba haciendo guardia en la ventana de la oficina de Dante para avisarnos si vendría. Después de cambiarnos, ordenamos la casa mientras Mezt se ocupaba de Lok.

Mezt, Sophie, Lok y yo estábamos en la sala de estar. Mezt estaba sentado en uno de los sofás hojeando una revista de juguetes para niños con un bolígrafo en la mano, Sophie y yo estábamos sentados en el suelo con un par de juguetes esparcidos por el suelo, y Lok estaba de pie, apoyado contra la mesa auxiliar frente a él. Mezt con su dragón. Zhalia miró escaleras abajo.

-Dante acaba de entrar al patio.

Desapareció de nuevo en la oficina de Dante. Mezt cerró la revista y la enrolló, poniéndose de pie mientras guardaba el bolígrafo.

-Tengo que ir. Ni una palabra a Dante sobre mi presencia en la casa.

Sophie y yo asentimos con la cabeza, y Mezt se despidió cariñosamente de Lok y se fue por la puerta trasera. Dante entró y saludó a todos.

Lista de la compra

-Aspiradora

Reglas Mini Lok

1.- Nunca lo separes de su dragón de peluche.

2.- No grites en su presencia, no le gusta la gente que grita.

3.- Debe dormir la siesta encima de alguien, preferiblemente Dante.