Empezó a llover. Maaya maldijo su suerte y la tardanza de su amigo, miró su reloj un cuarto para las cuatro. Esta vez se había tardado de más; suspiró. Hacía tanto tiempo que no sentía la lluvía y la disfrutaba tanto, con pasos calmados llegó hasta el vestidor para encontrarse con Atobe, Kabaji y Jiroh.
"¡Eh!" oresama caminó hacia ella con la arrogancia de siempre, o tal vez más.
"¿Qué sucede AHORA, oresama?" Su expresión cambió de alegre a arrogante como la del rey mono (x3 jijiji).
"Que Oshitari y Gakuto ya se fueron"
Abrió sus ojos.
"¡SÍ!"
"¿Eh?" la miró extrañado... no se suponía que debía decir '¡maldita sea, mataré a Oshitari!' ó '¡pequeño enano, me las pagará!' (refiriéndose a Gakuto). Atobe sabía muy bien el genio de la chica y trataba de evitarlo pero eran tantas las veces que le gustaba hacerla sufrir.
"Oh, nada... oresama" rió, "¿Y Jiroh-kun?"
"Dormido" se apartó para que la capitana del otro equipo a un Jiroh dormido (como siempre) mientras que Kabaji acomodaba unas cosas. "Nee... Gakuto le dijo a Oshitari que ya te habías ido así que se fueron los dos hace unos quince minutos"
"Mmmm..." esa mirada hizo que Atobe sospechara algo, "¡Hasta mañana!" salió corriendo de allí. Cualquier persona que la hubiese visto de esa manera pensaría que Maaya se estaba volviendo loca... Atobe suspiró '¿qué tan extrañas pueden ser las chicas?' pensó.
Al día siguiente Gakuto iba alegre, tan alegre que su sonría no podía ser borrada al menos por Maaya... bueno, quien sabe porque fue la primera persona que se encontró al cruzar su salón en busca de Oshitari.
"Buenos días, Gakuto" estaba acomodando unas cosas en su lugar.
"¿GAKUTO?" Abrió sus ojos, "¿Nada de humillacionos, ridiculizaciones y satirizaciones?"
"Hmmm... no hoy no, hoy me siento humilde como para atormentarte" Rió. Gakuto suspiró, sabía que no sería tan fácil cambiar a esa chica. Al principio le gustaba su componía pero desde que estaba con Oshitari ella había cambiado mucho.
Las clases pasaron muy rápido, el pelicereza salió corriendo una vez hubo terminado la clase. Estaba tan feliz ¿por qué estaba feliz? Simple... porque hoy era su cumpleaños. Varios de su compañeros y personas que no conocía o sólo saludaba de vista lo habían felicitado pero realmente él sólo necesitaba escuchar "feliz cumpleaños" de la boca de Oshitari ¿por qué? Porque era su mejor amigo... o al menos eso creía.
"¡Oshitari!" Sonrió como siempre mas el genio simplemente agachó la cabeza en tono de saludo eso hizo que el chico se sintiera menos preciado, "¿sucede algo?"
"Nada" respondió secamente.
"A mi no me parece que nada" replicó.
"No es nada" cerró sus ojos.
"Anda dime..."
Abrió sus ojos, casi sin creerlo. Su mirada se había vuelto severa "¿Por qué lo quieres saber?"
"¡Hm, porque soy tu amigo!" levantó la voz, "¡PORQUE ME PREOCUPAS!"
"No deberías... ocúpate de tus asuntos y de las prácticas..."
"Oshi... Oshitari..." eso era, quería llorar ¿en frente de Oshitari? ¿Qué podía hacer? De seguro él le reprocharía que llorar era sólo pérdida de tiempo. ¿¡Genios, qué saben ellos aparte de lo que no entendemos!?
"¿Llego en mal momento?" Maaya caminó hacia donde estaba el pelicereza, "toma... terminaré temprano las prácticas" besó su mejilla, "feliz cumpleaños Gakuto-chan" salió lo más rápido que pudo.
"Gakuto yo-"
"¡No importa! ¡Me ocuparé de mis asuntos!" corrió con su regalo en manos lejos de su 'mejor amigo' quien le había gritado, quien no había confiado en él, quien había olvidado su cumpleaños...
El acróbata faltó a las prácticas cosa que hizo que Atobe sospechara más de lo que hacía.
"¿Y Gakuto?"
"No lo sé" lo miró, estaba siendo franco "¿por qué debería saberlo?"
"Porque es tú pareja... en dobles, por eso. Porque es tu amigo, por eso"
"Debió sentirse enfermo"
"Bueno, dile que los estaremos esperando en mi casa" le sonrió después caminó hacia donde estaba Kabaji (cargando sus cosas como siempre) caminando hacia su limousine.
"Genial..."
Gakuto llegó a un parque, todo estaba tranquilo. Se sentó en una banca llorando, ¿cómo era posible que Oshitari olvidara su cumpleaños? Se lo pasaría a Jiroh pero no a él. No al genio... no a su amigo... Suspiró. Incluso Maaya le había dado un regalo y se había acordado de él.
"¿Puedo sentarme?" Preguntó una voz fememina a su lado.
"Como quieras..."
"Oshitari... está algo confundido" miró al cielo, hacía calor el día de hoy lo que le recordaba aquella vez que había llegado a Hyotei tras una terrible humillación en Seigaku.
"No importa"
"No sé que le pasa. Hoy falló en una prueba de química"
"¿Encerio?" sus grandes y brillante ojos miraron a la chica aún con lágrimas en ellos.
"Sí..." contestó seria, "anda... deberías hablar con él" le dijo al momento de levantarse, "uno se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde" rió. Sonrió de nuevo dándole la espalda emepzó a alejarse.
"¡Espera!"
Se detuvo, sin mirarle.
"¿Por qué me ayudas?"
Lo miró, sus ojos, su mirada... su expresión estaba más madura, la determinación dibujaba sus facciones "porque es verdad todo lo que te he dicho... uno se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde" dejó al chico con sus pensamientos.
"Maaya..." salió corriendo hacia la casa de cierto genio pero lo encontró a mitad de camino.
"Oshitari..." sniff.
"Perdón..."
"¡AH!" lo abrazó. ¿Cómo no podía resistirse a él? Tan pronto se acordó de su riña se alejó de él rápidamente sólo para que el genio lo pegara hacia él.
"Aún tenemos tiempo antes de tu fiesta" le sonrió.
"¿En-Encerio?" Sus ojos se abrieron aún más, esa pícara y traviesa sonrisa era lo que más le gustaba al peliazul quien asintió. Los dos caminaron hasta la casa del mayor quien le daría su regalo, un regalo que sólo podía darles el tiempo de conocerse y el amor que uno sentía hacia el otro.
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Whaaaaaaaa T.T polos opuestos se atraen! x3 jijijiji Maaya no era tan mala, el tercer y último episodio pondré porque se comportaba así, y por qué llegó de Seigaku... 3 bueno si esque quieren jijijiji aunque sino... este sería el último episodio.