.-2-. El mundo se enreda y Ed deshace el nudo...

Los pasillos estaban deserticos, no habia ni dios, pues todo el mundo estaba en clases, cosa rara...pensó, se dirigió al exterior a ver si le daba un poco el aire, no es que pudiera ir muy lejos, pues el patio estaba bayado pero al menos no estaban en medio de la ciudad, sino que eran justo las afueras, tocando a los campos, veía una extensión bastante grande de hierba color amarillo, suave, que se movia al viento, y como era su costumbre se subió a un gran arbol, su preferido, donde siempre se había acostumbrado a separarse de todo lo que le rodeaba por un rato, y a uir de sus atacantes o enemigos dandoles esquinazo o saltandoles encima desde las tupidas ramas, apolló la espalda junto al tronco y se relajó dejando caer una de sus piernas, silbó de forma larga y distendida, casi era un susurro, y pocos segundos después Dark, su gato trapaba agilmente por el arbol, sujetando un pajarillo que había cazado en la boca, se tumbó junto a la pierna de su dueño, empezando a deborar el emplumado manjar, mientras ronroneaba complacido:

- Tú si te lo montas bien – suspiró, cerró los ojos, cuando sin quererlo se quedó profundamente dormido.

- Bueno, esto ya está, puedo levantarte un poco la camiseta? – Mike asintió, entonces el otro retiró un poco la tela, descubriendo el amoratado adomen del chico, quien reprimió un gesto de dolor cuando notó que las adultas manos presionaban sus heridas – ahora te apretaré un poco aqui vale – posició sus dedos encima de las costillas del lado izquierdo del chico – puede que te duela un poco – apretó notando al instante como el cuerpo temblada bajo sus dedos, y un grito de dolor salido de la boca del chico. – mierda, tienes un par de costillas rotas, y me temo que para eso vamos a tener que llevarte a algun sitio, ni siquiera aqui pueden hacer nada.

- Pero...

- No te preocupes,ya se que es tu primer día aqui, y que no conoces más que a Ed y a los matones de Roy y su panda, pero...eres un tio cojonudo, y puedes salir de esta y de las que haga falta, asi que como soy profe y te puedo acompañar vamos, mejor aviso a Edward, antes de que no nos vea y se pregunte por nuestra existencia, es muy cabezota ya lo conocerás. – se asomó a la ventana y frunciendo los labios, hizo sonar el mismo silvido casi insonoro que antes habia echo Ed, pronto vió al gato corriendo hacia él, era un silbido francamente dificil de aprender pero muy útil – Dark, trae a Eddie, tengo que hablar con el – el gato lo miró largo rato con sus grandes ojos ambar y corrió el camino de vuelta, dejando una pequeña nuvecilla de polvo tras de sí se subió de nuevo al albol, despertó al moreno y lo condujo hasta Matt.

- ¿Que pasa? – preguntó el recien llegado jadeando

- Me llevo a Mike a que le hagan unas radiografías

- ¿No puedo ir con vosotros?

- Me temo que no, no puedes salir de aquí a no ser que estés con algo roto, o alguna cosa peor, ¡y no vale autolesionarse!

- Puff...está bien, ¿tardareis mucho?

- No, bueno lo antes que nos dejen volver, tendrás que quedarte, tranqui lo cuidaré como a cualquiera de los de tu panda, Eddie...

- ¡No me llames así!

- Por cierto, hablé antes con Ryo, creo que vuelve a tener problemas con el grupo de tu "gran amigo" Anthony, y Lina y Julian se han vuelto a pelear, Lina está con un humor de perros y ha amenazado a Jul de echarlo del cuarto y por su parte anda histérico.

- ¿No está prohibido que chicos y chicas compartan habitación? – preguntó Mike

- Eso representa, pero ningún profe se atreve a decirle nada a los skins, ni a estos - dijo señalando al moreno – así que hacen lo que les viene en gana.

- Guai...

- Bueno entonces iré a hablar con ellos, si ves a Julian dile que puede quedarse en mi cuarto hasta que hable con él..., Mike cuídate colega ¿ok? Luego nos vemos – le levantó el pulgar y salió por la puerta cuando el otro le devolvió el gesto.

- Bueno, nos vamos chaval.

Caminaba por el pasillo, subió a la segunda planta y siguió andado todo el pasillo recto pues la habitación de su joven amigo gótico estaba al final, sonrió, ahora debía estar dándose el lote para no romper la costumbre.

Cuando al fin llegó a la puerta, golpeó la oscura madera con sus nudillos, y Ryo salió a abrirle, se asomó junto al marco, era un chico moreno, con el pelo corto y engominado hacia arriba, formándole unos pinchitos, llevaba un piercing en su labio inferior al lado derecho, era un pequeño arito que acababa también en dos pinchos negros, sus ojos se veían color azul cielo, un color blanquecino, casi albino, iba vestido con ropa muy ajustada, toda negra y de su cuello colgaba un colgante plateado, en forma de cruz invertida:

- Vaya, buenas Edwy, te estaba esperando tio.

- Pues aquí estoy, me dijo Matthew que...

- Mejor pasa – dijo abriéndole la puerta – este no es buen sitio.

Si una cosa escapaba del entendimiento de Edward Shine, era como podía se posible que alguien tuviera tal habitación en un correccional, estaba totalmente decorada, perfectamente adaptada a Ryo, bueno de echo...era la habitación de Ryo, Sarah y Rose, pues las chicas se pasaban el día allí por mucho que estuviese prohibido que adolescentes de los mismos sexos compartieran cuarto.

La estancia estaba poco iluminada, por las ventanas entraba la luz solar, bueno, tapada en gran parte por las cortinas de color rojo, diseñadas por las chicas, las sabanas de la cama (que por cierto eran las dos camas individuales juntas) eran complejamente negras, y el suelo que la rodeaba estaba cubierto por grandes alfombras peludas de color gris fúnebre, junto a todo esto 2 butacas de cuero marrón oscuro:

- Buenas Edward! – saludaron ambas chicas, Sarah, tenía 14 años, era morena, tenía el pelo liso y fino, que le llegaba hasta su bien formado trasero, sus ojos eran verde claro y junto a ella jacía Rose, mirándole con sus ojos, negros, su pelo castaño oscuro y ondulado que le cubría media espalda y sus 16 años casi 17, las dos estaban arrodilladas sobre la alfombra.

- Buenas chicas – les sonrió – ¿ocupando el cuarto para no variar?

- Es que Ryo-chan no sabe vivir sin nosotras – bromeó forzando una sonrisa, que preocupó a Edward.

- Eh! Si se…¿vale? – hizo un exagerado puchero y Rose sonrió levemente- pero…puestos a elegir…¡¿porque vivir solo?!, bueno a lo que íbamos Siéntate por ahí…- le señaló una de las dos butacas y él se sentó en la otra, al instante ambas chicas se sentaron sobre sus rodillas.

- Si es que no me las quito de encima, son mas monas 0 - besó la mejilla de cada una de sus niñas y prosiguió – a lo que iba. Me he enganchado hoy con Anthony, que hijo de puta.

- ¿Pero que ha pasado?

- Bueno, verás, volvía de clase, cuando vi que esos degenerados, tenían acorralada a mi Sarah, haciéndole yo no se que atrocidades – la chica se agarró al cuello del joven gótico y tembló levemente – cuando yo llegué le había roto el corsé y le levantaban la falda, me entró una rábia impresionante y les metí la del pulpo, no los he matado de puro milagro, porque llegó Rose y me hizo parar de patearles, sino…

- ¡Son una basura! – gritó Ed – ¡este se entera! ¡Hace ya que me la tiene jurada!

Ryo, abrazaba más a la chica, mientras besaba tiernamente su pelo, no consentía que nadie tocara a ninguna de sus niñas, y menos a Sarah, su pequeña, su protegida y amada Sarah, intocable y frágil.

- Tranquila amor, ya pasó todo, ya verás que se van a llevar lo que merecen.

- Pero Ryo, mi vida… no te das cuenta… que pasa si vienen los encargados… - comentó con voz sabie y preocupada Rose

- No pasa nada, total ¿que pueden hacerme?

- Si te pillan te pondrán en un sitio aislado, y no irás a clase ni nada durante el tiempo que dure la sanción – te lo digo por experiencia explico Ed.

- ¡No! – gritó ahora Sarah, escondiendo su carita en el hombro de su amante – no puedes dejar que se te lleven, no puedes dejarnos solas…por favor Ryo…no dejes que te pillen, no te arriesgues, esto es agua pasada.

- No podría vivir…si dejo a quien a intentado tocaros…impune…¡debe ser castigado! Como dice Saito de Rurouni Kenshin, delito- castigo expeditivo. Además, que no me van a meter en el talego tampoco.

- Yo no se que es peor...

- Además, me queda poco aquí, en 6 meses soy libre, a los 18 me sueltan...

- A mi también... – dijo Ed, y empezó a petar sus nudillos – Bueno, creo que ya es hora de poner a ese en su sitio, ya me está tocando la moral.

- Oye Ed, no te vayas a meter en un marrón por mi culpa.

- Que va...ya hablé con el, teníamos un trato, el no tocaba a mi panda y nosotros dejábamos en paz a los suyos...pero veo que no ha cumplido con su parte del trato, así que tendré que saldar cuentas.

- Cuando vayas a partirles la cara avísame, esto me afecta directamente, tengo ganas de partirle la cara al verdadero culpable.

- Echo Ryo-Sama – sonrió – aclarado el tema, me piro, nos vemos chicas – dio un par de besos a cada una y acercándose al oído de Sarah añadió – ya verás como esto se soluciona, no dejaré que le pase nada a Ryo – la chica le sonrió, y recuperó un poco la compostura, aún sin soltarse de su protector, allí estaba segura, esos brazos le hacia olvidar levemente los desagradables sucesos pasados.

Ed se marchó de vuelta a su habitación "ahora solo me falta ayudar a Julian...si parezco una asistente social..."

Abrió la puerta y efectivamente sobre la cama, sentado, estaba su amigo "esto de entrar en mi habitación se esta convirtiendo en costumbre", tenía los ojos rojos y la cara húmeda, y su mirada estaba enfocada únicamente al suelo. Se acercó y se sentó junto a él:

- Eh...July ¿Qué ha pasado?

- Nada, Lina me ha echado de la habitación...bueno...es que...verás...había quedado con Chris, no me preguntes como consiguió engatusarme para que le explicara el tema nuevo de mates, no se que rollo se llevaba que no se enteró en clase – explicó con voz entrecortada - yo veía que me miraba raro, pero nunca sospeché, ¿una pija enamorada de mi la persona más anti-marcas del mundo? Y cuando llevaba 10 minutos a su lado, se me abalanzó y me pegó un morreo de aupa; me cabreé, muchísimo, y me levanté del escritorio, y cuando ella hizo también lo hizo, se me tiró encima de nuevo, la aparté de un empujón sin contemplaciones, con tan mala suerte para mí que cayó encima de la cama y justo en ese instante, cuando me giré ví a Lina, estaba en la puerta, acababa de entrar y lo malinterpretó todo.

- Joder, pero que llebas 4 años saliendo con ella...debería conocerte, yo se que nunca le harías eso.

- ¡Claro que no joder! Yo...por mi Lina...lo que sea..., es que como no me perdone ¡me muero! ¡La quiero más que a mi vida! ¿Qué hago Ed? No quiere ni verme...

Picaron a la puerta, el moreno se levantó a abrir, era una chica rubía y alta, bastante delgada y esbelta, novia de Bikky y amiga de pandilla de Ed (y del resto de los chicos):

- ¿Está aquí Jul? – preguntó dando dos besos a Edward.

- Sips – instantáneamente fue arrastrado por su amiga que entró como un huracán a la habitación.

- Tio, ya hable con Christine, que tia más subnormal, pero de que va esta pava...me pone de los nervios, no se que hace aquí ¿Porqué la habrán traído aquí? ¿Por robar un pintauñas?

- A saber.

- Eh...July, voy a ir ha hablar con Lina, ¿vale? Tu no te ralles – posó sus labios en la mejilla del de pelo anaranjado – ya sabes como es, un poco terca, después de todo es una Punk ¿no? ¿Qué esperabas?

- Tienes razón...- sonrió – pero como no vuelva con ella pronto me voy a volver loco...

Julian y Lina eran los dos Punkys de la pandilla, entraron juntos y salían desde hacía ya 4 años, eran inseparables, aunque no empalagosos, solían ir siempre juntos a todas partes, pero no estaban el uno encima del otro.

Así que Carol, así se llamaba la rúbia, marchó hacia la habitación de Lina.

- Venga Julian, vamos a hablar con tu chica – indicó el dueño de la habitación levantándose – no podemos dejar que Carol lo deslíe todo ella sola, es tu chica, tu debes luchar por ella.

- Tienes razón – se sonó un poco la nariz – vamos – forzó una sonrisa y se levantó abandonando la estancia junto a Edward.

Llegaron frente a la puerta de la habitación, al parecer los ocupantes llevaban una conversación bastante acalorada, abrieron la puerta sin llamar, pero aun así nada más entrar Lina giró la mirada hasta ellos.

- Ya ha llegado "el hombre fiel" -ironizó

- Lina, te juro que yo no-

- Si claro, mira Jul, no tienes porque mentirme si no quieres estar conmigo solo dilo, dímelo pero no me hagas esto, no…¡TE ODIO! – Julian la estrechó en un desesperado abrazo, negándose a perderla - ¡SUÉLTAME! No me toques, ¡Lárgate de aquí! Ya no somos nada, te dejo Julian.

- ¡No! Por favor Lina…, piénsalo, ¿Porqué no me crees? ¿Cuantas veces te he engañado en estos 4 años?

- Ahora ya dudo…

- Yo no soy tan cabrón, nunca te haría eso, te quiero más que a nada en este mundo, y lo sabes, si tanto me odias…¡Pégame!, vamos, ¡Hazlo Lina maldita sea! Hasta que no me pegues no creeré realmente que me detestas.

"¡PLAS!" – fue lo único que sonó en la habitación, todos estaban callados y el silencio fué roto únicamente por los sollozos del Joven Punk, quien entró en el baño y se encerró.

Lina se quedó petrificada, pensando en lo que acababa de hacer.

- Como…¿Cómo has podido? Joder, Lina – se enfadó Edward – sabes como es Jul, sabes que nunca te engañaría, que antes se pone un cinturón de castidad, sabes que te ama por encima de todas las cosas…

- ¡Lina! Vamos piensalo, tu amas a Julian, le amas y lo sabes, estás perdidamente enamorada de Julian Lewerd y te estás arrepintiendo de haberle pegado…¿cierto?

La punk asintió

- Dios mio…¿Qué he hecho? Julian…

- Entra ahí y… rescátalo – aconsejó el moreno.

Esta no se hizo derrogar, inmediatamente la puerta del Lavabo se abrió, se encontró a su novio, sentado en el suelo, recostado contra la pared, llorando silenciosamente, gemía bajito y a Lina se le rompió el corazón, lágrimas caian tambien por sus mejillas. Corriendo se abrazó a él, y este enterró la cara en su cuello, gimoteando:

- Julie, mi pequeño, lo siento, lo siento mucho

- Yo no fui… Lina mi vida te lo juro – sollozó – fue Christine, ella…

- Shhh…ya lo se, lo se cariño, shh…, ya está no llores – lo meció entre sus brazos.

- Edward, creo que ya no hacemos nada aqui – le dijo Carol al ver que la pareja se apañaba bien sola

- Si…sobramos un poco… - salieron y dejaron a la pareja terminar su discusión. Anduvieron un buen trozo juntos pero Carol se paró:

- Lo siento Ed, no puedo quedarme contigo, debo irme he quedado con Bikky y si me retraso, nos matará a los dos.

- Tienes razón…además no quiero cargar con más muertes en mi consciencia – dijo en tono lúgubre agachando la cabeza

Carol lo miró enternecida:

- Va Ed, no te deprimas ahora tio, eso no va contigo, ¿tu eres el lider fuerte e inquebrantable de la panda no? – sonrió- Que vaya bien – y dicho esto se despidió y marchó.

- Puede que si sea el lider… - murmuró y en un tono aun más bajo añadió- pero no soy inquebrantable…

Se dirigió a su cuarto, estaba vacío, Matt y Mike, no iban a volver hasta la noche… siempre pasaba igual, todos estaban con sus parejas y el se quedaba solo, pero no sabia porque, hoy la soledad le angustiaba más que nunca, y su vista no se despegaba de la desecha cama de su ahora compañero de habitación.

En el cuarto de baño, el ambiente estaba "algo" caldeado, Julian se dejaba mecer por Lina, pero pronto, cuando se calmó su corazón, un instinto primario que tienen todos los adolescentes y es más fuerte que la pena, la tristeza y todos los demas sentiminetos juntos afloró en él. SEXO era la única palabra que ahora zumbaba por los oidos de ambos, Jul, levantó la cabeza, alejando lentamente su rostro del pecho de su chica, y lentamente, más lentamente de lo que deseaba, sus labios se encontraron con los de la pelirroja y se fundieron en un descomunal y fugaz beso, sus lenguas se peleaban furiosas, la de Jul resentida llevaba la delantera y la de Lina se dejaba domar, sumisa, arrepentida.

Pronto la ropa de ambos estaba desperdigada por el suelo, y las manos, rápidas, e insaciables recorrian cada milímetro de piel que se les ponia en frente.

Gruñian. Aullaban. Gemian.

Y todo en el mismo lavabo, pronto, todo se nubló y los cuerpos se frotaron entre ellos, se caldeaban y todo olia al futuro orgasmo, embriagandolos, emborrachando sus sentidos y desembocando finalmente en más SEXO. Pronto, pronto quedarian tendidos y sudorosos, pronto los recorrerian los temblores del orgasmo a ambos.

Si es muy corto lo se... pero bueno si os gusta pedir más leche xD

No tengo nada más que aportar.

DEJAD REVIEW!!! TT

Lametazos de GríM