Capítulo 18:

¡Oh! ¿Qué Kureme tiene un secretísimo pasado angelical? El inicio de la Batalla Celestial está a punto de comenzar… Por eso ¡Cuidado, no deben enamorarse!

Elan y Diana observaban todo, desde que Japi jaloneaba a Kieran para que se apurara, que Alky y Draco no tenían ni idea que hacer, que el guardián y las chicas estaban a punto de llegar a donde Harry y Ron estaban a punto de congelarse, y que el Behemoth libraba una loca carrera con Jon, convertido en lobo y los demás corrían apresurados tras él.

-¿Cómo ves todo?

-Mal…

-Contacta a Ana…

-Bien… - Diana se puso en contacto con la mente de Ana, la cual pudo hacer un desdoblamiento de su alma, para poder aparecerse ante los ángeles negros.

-"¿Qué pasa?"- Apareció Ana

-"No todo está saliendo bien Ana, para empezar, traicionaste a los Krolos, sabemos que debes ayudar para fingir, pero tu parte positiva está demasiado presente"

-"Lo sé"

-"Aparte que alguien nos está echando a perder nuestra diversión, hay una presencia espiritual muy grande, alguien del cielo ha bajado"

-"Lo he percibido"

-"Sin duda, estoy segura que esa presencia celestial estará entre nosotros"

-"Debemos averiguar quién es, para que no se meta en lo que no le interesa"

-"Ana, anda suelto un krolo, recuerda eso, el no perdonará tu traición y en cuanto pueda, te atacará a muerte, y ellos son muy poderosos, son peligrosos incluso para ti"

-"Lo tengo bien presente"

Ana desapareció, mientras que todas volvían a concentrarse en el behemoth que habían soltado y en que Icegirl, estaba congelando a los héroes.

Kureme se encontraba en medio de una reunión con el señor oscuro, el mago más poderoso de la tierra y que se quería echar a todos los magos que se oponían a el. Entre mortífagos, enanos, hombres lobo, vampiros, gigantes y algunos otros, escuchando atento lo que se hablaba en la reunión…

Más de repente, todo se iluminó para el, se mantuvo quieto por un momento, sentado en donde se encontraba, parecía que todo mundo desaparecía, y que quedaba solo él, en medio de la nada, observó a su alrededor, solo era la luz que le quemaba… y de pronto…

-Kureme…

-¿Tú?

-El hijo desobediente… el que imitó los pasos del ser supremo maligno… el que una vez también, estuvo en el cielo…

-¿Viniste por las diosas?

-No…

-¿No?

-Bajé por curiosidad…

-¡Eso significa que estás interviniendo! – se puso en pie cuando Ilona sobrevoló hacia el – No deberías meterte, lo que sucede en la tierra no te incumbe, ellas bajaron por propia voluntad, ahora son nuestras presas…

-Kureme – se acercó Ilona aún más y le sonrió con ternura - ¡Mi niño bonito! ¿Qué pudo haber tenido este lugar para que dejaras el cielo? Eres el segundo, el segundo ángel que abandona el cielo tentado por las fuerzas oscuras…

-Nunca me gustó el cielo…

-Pero ahora quieres a alguien del cielo para que viva contigo en tu infierno…

-No puedes intervenir en eso – Dijo el ángel oscuro entre dientes y al ver que Ilona no respondió, los ojos de Kureme se llenaron de ira - ¡Estás interviniendo Ilona!

-No puedo evitarlo…

-¿Comprendes lo que eso significa? ¡Tuve que mentir a mis propios ángeles oscuros al decirles que tenía limitaciones con mi magia cuando no es cierto! Sabes perfectamente que soy muy poderoso, por eso es que me tenían tan limitado en el cielo.

-Nunca entendí porque tú saliste así, Kureme, eras el más hermoso ángel, con mucho poder, cierto, y desde el principio quisiste ser mas grande y poderoso que los dioses… nunca te entendí, no eres mestizo...eres puro… ¿Por qué tus sentimientos cambiaron? Arriba no había tentaciones…

-El cielo es aburrido…

-¿Y porque quieres una diosa? ¡Abajo hay muchos demonios que podrían…!

-Quiero a una diosa y la tendré, Ilona, y no podrás detenerme… si intervienes una vez más, desplegaré todo mi poder y no tendré piedad, no seré un Dios, pero soy muy poderoso…

-No puedo intervenir en todo, pero yo…

-Te haré la guerra si lo haces Ilona… y ten presente que no estoy solo, las fuerzas oscuras están de mi lado… Aparte del ser supremo oscuro, tengo a los ángeles negros… Elan y Diana, sabes que ellas no han querido desplegar todo su poder… ¿quieres que lo hagan, que se salgan de control? No sabes lo que es, que el lado oscuro se apodere de ti…

-Conozco a esas niñas…

-Ya no son unas niñas Ilona, deja de verlas así…

-Si despliegan todo su poder, podrían hacer un daño terrible a los humanos, pero ellas también podrían auto destruirse…

-También está Ana… Es la más peligrosa, la más temible, su lado positivo la confunde, pero ella está más de la oscuridad… Ya lo sabes Ilona, sigue interviniendo y te haremos la guerra, comenzando con las diosas y sus humanos…

-Kureme… aún es tiempo que rectifiques, tu corazón era puro ¡no puede estar completamente ennegrecido! Reacciona Kureme, vuelve con nosotros y serás purificado.

-No existe en este mundo, algo, lo suficientemente poderoso, como para que yo decida cambiar de parecer… Ilona, no la hay…

-¿Y si la hubiera?

-No la hay – sonrió Kureme – Ahora déjame en paz – alzó la mano y la oscuridad comenzó a envolver a Ilona, quien negó con la cabeza.

-sabes que con eso no puedes detenerme, la oscuridad no puede dañarme… pero por hoy ya no insisto y respeto tu decisión Kureme… porque se, que tampoco puedo meterme en todo – y con los ojos tristes, desapareció… Kureme murmuró una palabra, una palabra que le dolía, pero su mismo lado oscuro le servía para negar ese sentimiento.

Jon Lupín, convertido en lobo y el behemoth, luchaban en medio de un claro del bosque, no les importaba el frío, ni la aguanieve que caía, ambos lanzaban mordidas, y golpes con sus patas y hocicos, el problema era que Jon ya estaba herido, y el behemoth tan intacto, y parecía que gozaba.

-¡Jon, ten cuidado! – Gritaba Elektra al llegar con los otros.

-¡Evita sus cuernos!

-GRRRRR – gruñía el lobo mientras brincaba al cuello del behemoth, pero éste de pronto se volvió y le enterró uno de sus cuernos retorcidos al lobo, y al sacudirse, lo aventó lejos.

-¡JON! – Gritó Elektra corriendo hacia el

-¡Cuidado Ele!

-¡Muro Protector! – Gritó la chica levantando un enorme muro de energía para evitar que el behemoth pasara sobre ellos, después llegó a donde Jon, el chico ya se había transformado en humano y estaba seriamente herido del costado.

-OUCH – se quejó el chico al tocarse la herida, llevaba muchos rasguños en el rostro y en la ropa.

-¿estás bien?

-D-deberíamos unirnos…

-No podemos hacerlo si estás herido

-Maldición, eché todo a perder… - Observó su sangre roja que había manchado sus manos.

-Sí… pero ya es tarde… - se volvió a ver el Behemoth que golpeaba el campo de energía, mientras que Nenyeina formaba otro y Ana que se había retrasado, los alcanzaba.

-¡Ana! ¿Dónde te habías metido?

-Me retrasé, lo siento…

-¿Alguna idea de cómo detener al behemoth?

-Pues – Ana dudó, claro que sabía como deshacerse de el, pero al behemoth lo habían liberado Diana y Elan, y demasiadas cosas buenas había echo como para ahora seguir en esa línea… ella tenía una parte de luz, que debía mantenerse dormida.

-¿Puedes o no?

-Hay algo de mí que lo impide – mintió la chica, ya no quería ayudar más, no en ese momento… ellas debían resolver sus problemas.

-Debe ser tu parte oscura – Mascullo Nenyeina.

-Eso creo…

-¡Hayden!

-¿Qué?

-Nos uniremos…

-¿Qué?

-¡Vamos ya, levanta tu varita!

-B-bueno – murmuró el chico…

Nenyeina levantó la mano, y una gema apareció en su mano, como la que tenía Hayden en su mano, ésta comenzó a brillar, igual que las de su rostro, el bijou de su frente era incesante, mientras elevaba su canto y desplegaba esas hermosas alas que tanto gustaban a Hayden y que lo volvían loco… y medio baboso, porque quedaba como petrificado ante la visión.

-"Si es con este niño que ha nacido de la tierra, ahora alinea su afinidad hacia mí, déjalo dentro de mí, despliega y expándelo, mientras construyo mi canto de invitación, nublado de ilusiones, déjanos arrastrar al camino de ilusiones y envuelve la parte ardiente abrazante corazón en la niebla ardiente y forja el contrato"

El cuerpo de la chica salió una luminiscente luz, que le envolvió por completo y de inmediato, le tomó la mano a Hayden, en donde tenía la gema, uniendo las gemas de sus manos.

Invoco a mi ángel Protector Imamiah! – gritó muy alto, y enseguida, de su espalda, salió la imagen de un bellísimo ángel blanco, que dejó caer en sus manos, una lanza dorada, de tres picos y con muchas piedras y luego, Hayden sintió como algo entraba en él, tan cálido y tan poderoso a la vez, que cuando se percató, tenía la espada de tres picos en sus manos…

-"Ahora luchemos" – Dijo Nenyeina dentro de la mente a Hayden – "Utiliza los hechizos que te dicte"

-Lo que digas angelito…

-"Vamos entonces, a acabar con el Behemoth"

Y Hayden se adelantó sosteniendo la espada de Imamiah, a lo que Ana suspiró de alivio, ya no deseaba ayudarlos en ese momento, pues era riesgoso que Ana de luz se apoderara de ella.

Notus Chord! – Atacó Hayden al Behemoth, la bestia sintió el viento azotando en su cuerpo y dio una voltereta, pero en seguida, se puso en pié y regresó corriendo hacia el chico, chocando sus cuernos con la espada, Hayden miraba horrorizado a la enorme criatura y hacía todo lo posible para que no la atacara.

-"Vamos Hayden, atácalo de nuevo"

-¡Tajo Sempiterno! – Gritó el chico asestando un golpe a uno de los cuernos de la bestia, la cual voló de su cabeza y el tercer ojo hasta se volteó del dolor emitiendo un chillido espeluznante.

-"Vuelve a atacar Hayden"

-¡Lo que tu digas amorcito! – Dijo Hayden y desde donde Neny estaba, la chica hizo un puchero… ¿amorcito, amorcito? ¿Quién se creía ese para llamarle amorcito? ¡Ella rompería ese absurdo compromiso en cuanto pudiera!

-"Ciégalo"

-¡Isolathing Luminous! – dijo Hayden de nuevo, y una luz inmensa salió de la punta de la espada y la bestia retrocedió unos minutos, pues si lo cegaba, pero de pronto lanzó un bufido y una nube negra salió de sus fauces, haciendo que la luz terminara.

-"Atácalo de nuevo"

-GRRRRRRRRWWWWWWWWWW – rugió la bestia, arrastrando sus garras en la tierra, y de pronto el cuerno que le había volado le volvió a crecer incesantemente, hasta obtener su tamaño.

-¡Eliminación Celestial! – Azuzó de nuevo la espada, asestando un golpe en el cuerpo del Behemoth, partiéndolo en dos, pero de nuevo, pese a quedar los dos trozos de cuerpo separados, con un salto, ambos volvieron a unirse.

-"No lo puedo creer"

-¡Será mejor que usemos nuestras energías juntas! – Gritó Elektra - ¡Ana, por favor, trata de curar a Jon!

-¿Eh?

Y Nenyeina tuvo que separarse de Hayden, quien al sentir el desprendimiento, sintió entonces que había gastado muchas energías y cayó desfallecido. Elektra empujó a Ana hacia Jon, mientras ella comenzaba su formación de ataque con Nenyeina.

Mientras que Ana, conteniendo las ganas de negarse, examinó la herida y para su suerte, pese a que sangraba mucho, no era tan profunda, así que usó poco poder.

-"Das ende" – murmuró y acto seguido la herida se cerró.

-¡Guau! – exclamó Jon.

-No te emociones, ya no sangras, pero perdiste sangre, estás débil y te marearás si te pones de pié.

-¡Pero me siento bien! – se puso en pié y le dio un mareo que lo hizo sentarse de nuevo - ¡maldición!

-Te lo dije…

-¿Qué va hacer Nenyeina con Elektra?

-Supongo que la unión de poder… El behemoth podrá parecer poca cosa, pero es una criatura oscura poderosa… ni siquiera la unión de Nenyeina con Hayden le detuvo…

-Si no me hubiera herido…

-Hubiese pasado lo mismo… no te emociones.

-"Contraigo un pacto fraternal contigo, hermana de luz, y como la respiración, el viento nos envuelve, tu y yo, juntas estaremos a donde quiera que vayamos, de rojo el corazón, de luz el espíritu, de todo corazón, envuelto será el viento y nos proporcionará el poder"

Ambas juntaron sus manos y una luz las envolvió y claramente se vieron como sus ángeles se cruzaron, Pahaliah e Imamiah juntaron sus espadas formando la X de unión y fue cuando las chicas hicieron el ataque a dúo como lo hiciera Chris con Nicole.

-¡Cataclismo de Roshán, el ángel destructivo de las fuerzas oscuras – dijeron las chicas al unísono, invocando al ángel destructivo, al ángel oscuro que podía ayudarlas y el cual se formaba por la unión de sus ángeles guardianes.

El potente rayo de luz que salió invadió al Behemoth, haciendo que la bestia saliera disparando a muchos metros de ellos, hacia el mullido bosque.

-¿Lo destruimos?

-Lo ignoro… no lo percibo…

El behemoth solo fue lanzado y aturdido por el hechizo, ya que ellas no eran tan poderosas como Chris y Nicole para usar a Roshán… la bestia sacudió su cabeza con cuernos y se preparó para regresar y continuar dándoles batalla… pero…

-No continuarás – dijo una voz y enseguida, Ilona salió de un árbol – No continuarás

-GGGRRRRRWWWW

-"Desaparece" – fue lo único que dijo y levantó la mano y la bestia, simplemente comenzó a deshacerse, a disolverse en un halo de luz, y no quedó rastro de ella.

-NO – Gritó Diana molesta, levantándose de su asiento - ¿Quién está desapareciendo a nuestras bestias?

-Es demasiado…

-¡Kureme debe saber de esto! ¡Si no se comunica en seguida, yo misma buscaré a ese ángel y lo combatiré!

-Lo combatiremos – aseveró Elan, tratando de localizar al intruso, pero sin éxito, ese ángel tenía tanto poder que los otros ángeles no lo podían detectar.

Mientras tanto, en la montaña, Chris y Nicole por fin daban con los chicos, quienes ya estaban prácticamente congelados y las Ice Dancer, seguían bailando lanzándoles estacas de hielo ante la vista complaciente de Icegirl.

-¡Tan pequeña y tan molesta! – Gruñó Chris - ¡Sabía que la reina del hielo no podría hacer esto! Icegirl… tu madre teniendo un corazón tan puro y tú…

-Un ángel – espetó la niña del hielo

-¿La conoces Chris? – se acercó Nicole

-Es una de las hijas de la reina del hielo… la princesa Escarcha…

-¡No soy escarcha, soy Icegirl, la poderosa niña del hielo! – gimoteó la pequeña.

-Pero la princesa salio rebelde… su madre la tenía presa por querer destruir parte de América del norte con una helada… pero alguien la liberó y ahora, por lo visto, esta del lado oscuro…

-¿Quién es ella? – gimieron las chicas cuando llegaron

-¡Que frío!

-¡Ayúdennos! – Gritaron Harry y Ron con la poca fuerza que les quedaban.

-¡Harry, Ron!

-¡Vamos Nicole, tenemos que destruir las Ice Dancer y atrapar a Escarcha para entregarla a su madre!

-¡Está bien!

-¡NO van a poder conmigo! – Gritó Icegirl - ¡Ataquen Ice Dancer!

Y las bailarinas de hielo, comenzaron a danzar, enviando una lluvia de estacas de hielo directo a ellos, lanzando chillidos espantosos, pero Chris no se amedrentaba con ellas.

Ignis Divine! – Gritó el guardián sacando dos enormes lenguas de fuego de las palmas de sus manos, derritiendo la lluvia de estacas gélidas.

-¡Ignis Divine! – también atacó Nicole, a las ice dancer, destruyéndolas, derritiéndolas.

-¡Malditos! – Chilló Icegirl

-Que boquita – negó Chris

-¡Ignis! – se adelantó Mariana, disolviendo el hielo para avanzar hacia Harry.

-¡Salgan Ice Dancer! – volvió a atacar la niña y nuevas bailarinas gélidas surgieron de la tierra, aventando estacas de hielo, bolas de nieve y viento gélido para congelarlos.

-Eso no nos detendrá – Sonrió Chris y siguió atacando junto con Nicole, mientras que Ginny y Hermione, buscaban cubrirse del intenso frío mientras trataban de hacer fuego con sus varitas.

-¡Harry! – Llegó Mariana junto al chico, el cual estaba escarchado, y helado, con la ropa húmeda y tembloroso.

-Llegaron – dijo castañeando sus dientes

-¿Cómo estás?

-Ya no siento los dedos de las manos – murmuró estornudando – creo que he pescado un resfrío.

Mariana tomó las manos de Harry y en efecto, parecían hielo, su rostro estaba azul y respiraba con dificultad, de primera instancia pensó en hacer que todo a su alrededor se incendiara, pero Harry podría quemarse, entonces se le ocurrió otra idea…

-¡Ya se, yo te daré calor!

-¿Eh?

Y sin pensarlo mas, ella introdujo las manos del chico bajo su ropa, haciendo que él se ruborizara en extremo al sentir la espalda de la chica y sobre todo al descubrir que no llevaba nada que cubriera lo que tu y yo sabemos y que ellos también ¿acaso las diosas no usaban sostenes? Pero más rojo se puso cuando aparte ella lo pegó a su cuerpo e hizo un hechizo para que su cuerpo aumentara de temperatura y así, transmitírselo a Harry.

El rostro de Harry estaba más que enrojecido, tenía su rostro casi apoyado en el pecho de la chica, las manos tocando su piel y sabiendo que no había nada que cubriera sus cosas arribas, algunos pensamientos pecaminosos pasaban por su mente…

-¡También tienes los labios fríos y azules! – Murmuró Mariana al posar un dedo sobre ellos - ¡Pero ya se con qué se quita!

-¿C-como?

Y Mariana juntó sus labios a los de Harry, para darle aún más calor, al principio, ella se lo dio solo con los labios cerrados, y no se como, pero de repente, Harry usando sus artimañas y sus malas mañas, hizo que ella entreabriera los labios y el beso ya no fue tan tierno.

-¿¡? – Pero ella se dejó, aquello era agradable, además, era para que el chico se recuperara ¿O no?

Aunque gracias a eso, los dedos de Harry se descongelaron y pudo moverlos mejor, así como su cuerpo, sentía como una tibieza lo recorría y volvía a poner en circulación su sangre… y otras cosas…

Aunque cuando el chico, comenzó a acariciar la espalda de Mariana y como que ella sintió un no se qué y un no se cuando con los dedos del chico, lo alejó de inmediato y sintió un poco de incomodidad ¿Qué había sido eso? Ella también se ruborizó y como que sintió que había algo raro en la mirada de Harry cuando lo apartó con brusquedad.

-¿Qué te pasa?

-¡Nada! – se apresuró a responder…

-Pues si ya estás bien, ponte de pie y vamos a rescatar a Ron…

-Eh… es que no puedo…

-¿Por qué no?

-Dame… dame cinco minutos y vamos… - Respiró agitadamente.

-¿Acaso tienes fiebre?

-No – murmuró el chico… enrojeciendo, ya que el sabía que clase de fiebre le había dado ¡malvadas hormonas de los 17! – Solo cinco minutos Mariana…

-Bueno…

Mariana estaba un poco contrariada, pero en lo que Nicole y Chris destruían a las dancer, ella esperó esos cinco minutos, mientras que Harry murmuraba "Piensa en algo feo, piensa en algo feo" y procuraba imaginarse a su tía petunia en traje de baño o a su primo con un tutú rosa o algo parecido.

-Estoy harta – Espetó Nicole – será mejor que acabemos con Escarcha.

-Si, ella quiere debilitarnos al estar lanzando a las Ice Dancer… ¿la atacamos?

-SI…

-¡Tormenta de Fuego! – Atacó Chris a Icegirl, haciendo que de las zonas secas, se levantaran remolinos ardientes, que lanzaban lenguas de fuego y desplegando sus alas, se elevó haciendo que el tornado de fuego se elevara directo a Icegirl, derritiendo a las Ice Dancer, y enfureciendo a la niña.

-NOOOOOOOOOO ERES UN MALDITO

-Eso lo eres tú, yo estoy bendecido – Dijo el guardián.

-Ríndete o Desaparece – Exclamó Nicole, desplegando las alas, dirigiendo una luz hacia Ron, derritiendo el hielo que lo rodeaba, dejándolo libre.

El chico no pensó en nada más y pese a sus dedos helados, continuó escalando la montaña para llegar por fin a la cima, dejando que los ángeles se encargaran de la niña de hielo. Ron Weasley llegó de inmediato, y sin dudarlo más, pese a que aún continuaba el frío, porque Icegirl aún prestaba resistencia, sacó la red echa con pelo de unicornio que Neny había tejido.

-¡Por favor, viento, dame tus cristales! – Rezaba Ron, mientras sentía como azotaba el viento con fuerza, el pelirrojo alzó la red, decidido a capturarlos, procurando sostenerse en pié…

Y al parecer, daba resultado, porque claramente veía como los cristales de viento se quedaban atrapados entre los brillantes pelos de unicornio, el chico sonrió al ver que su esfuerzo había dado frutos, aunque no contaba con algo más.

-¡No obtendrás los cristales! – Gimió Elan y dirigiendo su mano hacia la dirección del chico - ¡Aeros Loop Darkness! – Gritó y una potente bocanada de aire, como tifón se dirigió hacia el chico… el cual quedó mudo cuando observó como le era arrancado la red de sus manos.

-NOOOOO – gritó al minuto que reaccionó - ¡NO ES JUSTO NO!

-JAJAJA – Soltó la carcajada Elan, sobre todo cuando el tifón le llevó la red, llena de cristales de viento - ¡Fuego Infernal! – dijo nuevamente y toda la red se quemó instantáneamente.

-Por lo menos lo fastidiamos – Dijo Diana – Así, su picnic no sirvió de nada.

-NOOOOOOOOO – seguía llorando Ron en la cima, mientras que las nubes poco a poco se disipaban, Icergir era obvio que perdía la batalla en contra de Chris y Nicole.

-"No llores más" – de pronto escuchó una voz celestial

-¿Qué?

-"No llores más" – repitió

Ron alzó la vista y vio primero una luz, después esta adquirió una forma, y la vio, vio al ángel mas hermoso que podría imaginarse, esa deidad de ojos y cabellos rizados oscuros, con esa sonrisa angelical, que jamás existiese.

-¡Eres bellísima! – suspiró Ron (como ya sabemos, le encantan, no, le fascinan, se muere por las guapas)

-"Tus sentimientos por Tanya me quedan claro ahora, por ello te ayudaré pelirrojo"

-¿Qué?

-"Te daré el antídoto para ella"

-¿Quién eres, eres un ángel?

-"Me llamo Ilona" – y la bella ángel, alzó sus manos en la cual se formó una botellita de cristal, con algo brilloso adentro y se lo lanzó, cayendo en las manos del chico.

-"El corazón de cristal, que lo beba apenas lleguen, eso la despertará"

-¡Gracias! – Sostuvo fuerte el pequeño frasco en forma de lágrima de cristal.

-"Buena suerte, Ronald Weasley"

-¿Cómo sabes mi nom…? – quiso preguntar, pero ella había desaparecido. Entonces tras quedarse asombrado unos segundos, el grito de Icegirl lo hizo reaccionar, la niña del hielo había sido atrapada por el guardián y sería trasladada de inmediato al palacio de hielo, para que su madre la pusiera bajo custodia.

En tanto que Elan y Diana se mordían los labios hasta hacerlos sangrar… si es que la cosa viscosa oscura que les resbalaba era sangre. Pero ellas estaban más furiosas que nunca, a punto de comenzar a atacarlos personalmente cuando…

-¡Le dije que no interviniera! – Apareció Kureme furioso.

-¿sabes quién es?

-Lo sabemos todos… ella es… - y al pasarles mentalmente la imagen, las chicas protestaron.

-¡NO, NO ES JUSTO ES COMO SI NOSOTROS PIDIERAMOS AYUDA A…!

-Le dije que no se metiera, pero no me hizo caso, ahora no me queda más remedio que pasar al plan dos que tenía dispuesto…

-¿Qué plan es ese Kureme?

-Fastidiar a las diosas directamente… nos infiltraremos en Hogwarts, causaremos un caos y me llevaré a una diosa al inframundo… y "ella" no podrá impedirlo… porque atraparé al colegio en una cápsula poderosísima, atraparé a todos y dejaremos fuera a los profesores.

-¿Cómo nos infiltraremos?

-Atacaremos Hogsmeade… será el pretexto perfecto…

-¿Cuándo iniciamos?

-Les daré la señal… Inclusive Ana nos ayudará, no podrá resistirse, sabemos que su lado oscuro se anda debilitando, pero por ello, debe volver al buen camino… del mal… pero ante todo, deben estar preparados porque, eh amenazado con iniciar la guerra y por lo visto, me ha desafiado…

-Te ayudaremos en todo Kureme, estos humanos son tan patéticos…

-Les daré una protección a ustedes, porque es obvio que yo me pienso descubrir, pero quiero que permanezcan lejos del olfato de los números uno, por si las necesito…

-¡De acuerdo!

-Si "Ilona" quiere guerra celestial, pues guerra tendrá… y siendo así, no les quedará otro remedio, más que destruir todo, incluso a los humanos, comenzando con todos los que estén en esta área…

-¿Entonces por ahora dejamos todo como está?

-Sí, deja que se regocijen… dejen que respiren el triunfo, porque aún no saben lo que les espera – Y desapareció, las chicas comunicaron algo brevemente a Ana, quien prometió hablar mejor con ellas una vez lejos de las diosas.

Mientras tanto, Ron ya había bajo feliz, porque tenía el antídoto, así que minutos más tarde, todos se reunían, pues ya tenían lo que habían deseado, claro que cuando comenzaron a contarse sus historias, sobre todo de Kieran, pues hablaba demasiado de la señorita que le había salvado la vida y Draco que decía que a él también… y Ron que no se quedaba atrás.

Claro que la reacción de Japi y de Alkyon no pasó desapercibida por sus otras compañeras, aunque si estaban intrigados de quién era ese ángel que les ayudaba y que no dejaba que las diosas o los número uno le vieran.

-Siento una presencia, muy poderosa – decía Chris mientras se trasladaban hacia los Sleipner y la moto, que habían aparecido de nuevo – Pero no la localizo nunca, solo la siento.

-Me pasa lo mismo, pareciera como si la conozco – aclaró Nicole – pero tampoco le puedo localizar…

-Mientras sea positiva no importa, el problema es que también ya comencé a sentir una entidad negativa, más poderosa que la que nos ha estado fastidiando.

-¿Qué piensas hacer Chris?

-Seguir buscando, por lo menos ya tenemos el antídoto para Tanya ¡Y de paso les digo a todos, no quiero que lo que sucedió con el joven Ronald y Tanya suceda con alguna otra! Bastante tuvimos, poner sus vidas en peligro…

-Ese no es problema de nosotras – Masculló Mariana entre dientes y le lanzó una cruenta mirada a Harry, quien al acordarse de lo que le había pasado con ella en la montaña, prefirió desviar la vista.

-Bueno entonces los que venían en escobas tendrán que montar a los sleipner, porque sus escobas se destruyeron ¿no les dará miedo?

-Hemos montado caballos antes – Dijo Ron y todos asintieron.

-Pues vamos, que Tanya espera la poción.

-¡Pero a mi no me gustan! – de pronto Ginny empujó a Hermione, montándose en la parte de atrás de la moto del guardián – Así que si no les importa, me voy con Chris.

-¡Pero! – iba a protestar Hermione, cuando Harry le alcanzó un sleipner.

-¡Vamos Hermy, hay que darnos prisa!

Hermione le lanzó una mirada furiosa a Ginny, quien le sonrió descaradamente y se agarró de la cintura del guardián, ni modos, había perdido por esa ocasión, la oportunidad de manosearlo.