Bueno... mehe mudado por primera vez en mi vidú (q lio dios santo!), hace como 2 semanas y media q no entraba a internet pero finalmente hoy vinieron los técnicos a ponernoslo - Asi q les doy este fic q sax me había mandado hace uffff, y ad+ he visto en mi correo que me ha enviado más (aun no lo chequeo pero espero que sea muuuuucho) hace que si logro organizar mi tiempo entre lo q tengo q estudiar, las cosas q tengo q revisar, los libros q quiero terminar d leer, las cosas q tengo que revisar, el documento q tengo qir a sakr, las vacunas q me tengoq ir a poner, las cosas q nuevamente tengo q revisar, la family q tengo q visitar,la maleta q tengo q terminar d hacer, y nuevamente revisarlo TODO...y todo esto antes d q viaje, pues espero ponerles sin demorarme demasiado (no se fien de mi... aunq eso ya lo saben x experienia U.U) ¡y dsd luego! no se olviden q tenemos ya forito webono oficial (y ahi tb tengo q revisar un monton d cosas¡ouch! ), y q si quieren en el link lo pueden sakr del foro q hice aqui en ffnet :)
Ahora sí ¡PROVECHO CON LA LECTURA!
Capítulo 21:
¡Uy! El mal está tan cerca, que no puedes verlo ¿Kureme está eligiendo quién será su esposa? Mientras que el guardián sigue siendo acosado ¿Cuál es el poder de un beso?
-Esto no pinta bien – pensaba Ilona en el horizonte, con las manos juntas en una oración – las niñas están rodeadas de constantes peligros y no puedo meterme tanto… debo dejar que resuelvan sus problemas o esos problemas los tendré yo con Azura ¡Las niñas tiene que ser fuertes y luchar contra sus hermanas y contra sí mismas!
Kureme, ahora con el nombre de Demian, estaba junto con Diana y Elan en el despacho del director, fingiendo ser más buenos que el pan y pidiendo asilo, los tres con un cuento más viejo que matusalén.
-Entonces Elan y Diana en realidad huyeron de Beauxbutton y yo salí a buscarlas, llegué hoy, un poco antes de que esas criaturas raras y feas atacaran el pueblo…
-Creo que el haberle hecho una broma pesada a sus profesores, si merece ese castigo – dijo Dumbledore.
-Sí, nos iban a expulsar, nuestros padres se iban a enfurecernos y a torturarnos, por ello nos escapamos y llegamos aquí… como teníamos dinero ahorrado…
-Pero se nos terminó y Diana consiguió un trabajo…
-Por el momento no me he podido comunicar con Beauxbutton, hay una extraña interferencia, si no puedo hacerlo aquí, iré personalmente a su colegio hasta Francia, por el momento, se quedarán y asistirán a clases.
-Gracias…
-Aunque…
-¿Qué?
-No tienen acento francés…
-Hablamos perfecto nuestro idioma y el suyo señor director…
-Ya veo… bueno, ahora salgan a recorrer las aulas, en tanto que termino de arreglar unos problemas, luego les diré cuales serán sus dormitorios.
-¡Gracias de nuevo!
Los tres angelitos negros salieron, afuera esperaban Bastian y Fred, muy preocupados, aunque Diana sintió que la ira la invadía al recordar que Fred tenía una novia y que estaba prometido.
-"Tranquila" – se escuchó una voz
-Sí…
-¡Diana, que bueno que estás bien! – corrió Fred a abrazarla
-¿Estás bien? – También le preguntaba Bastian a Elan, mientras le daba un beso en los labios.
-Sí, estamos bien, solo un poco asustados…
-¿No me presentan? – Interrumpió Demian
-Sí claro… Fred, él es Demian… compañero de colegio
-¿Colegio?
-Eh… sí, bueno… es que hay algo que no les hemos contado – Respondió Diana – Mejor busquemos donde hablar tranquilamente y se los comentamos ¿vale?
-Bien – y los cinco comenzaron a avanzar hasta un lugar adecuado, pero Demian (antes Kureme) provocaba que las miradas de las chicas se dirigieran a él, por lo atractivo y guapetón que se veía.
Mientras tanto, Elektra estaba sentada al lado de Jon, el chico estaba curando sus heridas satisfactoriamente, y ella le daba de comer… ¿en la boca? Si, bueno, medio exagerada la chica ¡el hecho de que Jonathan Lupín tuviera lastimado un hombro, no quiere decir que no pueda comer con una mano! Claro que Mariana le miraba con una mueca en la cara.
-Mj… Elektra… creo que Lupín puede comer solo – Le interrumpió la chica – Nosotras tenemos una reunión con Chris y Nicole en diez minutos…
-¿En serio? – preguntaba mientras le daba la gelatina en la boca y el chico… ¡pues ni protestaba el cínico comodino!
-¡Mariana vamos! – Llegó Japi y le jaló por el brazo - ¡Alky está muy mal y¿Y que está haciendo Elektra con Jon?
-¿No lo estás viendo? Le está dando de comer a su perro… digo, lobo… ¿Qué le pasa a Alkyon?
-Lo mismo de siempre… Peleó con Draco y se volvió a lastimar.
-¡Por todos los cielos¡Vamos chica, deja que el coma solito, como que ya está grandecito! – La jaló Mariana a la mala y Jon solo alcanzó a decirle adiós a la chica.
En tanto, en el baño de mujeres, Hermione, Ginny, Alison y el otro grupo de chicas, les sacaban la verdad de lo que habían hecho durante ese tiempo que habían pasado a solas con Chris, ninguna de ellas dejaría que le llevaran ventaja.
-¡Tuvieron su oportunidad! – Decía Alison – Ahora nos toca a nosotras.
-¡Es verdad! – dijeron las demás.
-¡Pero estuvimos muy ocupadas, además el pasa más tiempo con Nicole buscando el modo de sacar a las dizque diosas de la tierra!
-No nos interesa eso… además ya una de nosotras, está buscándolo para tener su chanza.
-¿Qué¿Quién?
-Eleonor…
-¡Ella es una sátira!
-Es una de nosotras y merece su oportunidad – gruñeron – No tengas celos solo porque tiene mas pechonalidad que tú, Granger.
-¡Yo estoy muy a gusto con lo que tengo! – protestó
-¿Por qué se pelean? Según he oído ha llegado un chico de Beauxbutton muy guapo…
-¡Está bien, lo he visto, pero resulta que ese muchacho no es ningún ser celestial, pero Chris sí!
-Me siento un poco rara – intervino Natasha – me siento como un demonio tentando a un santo…
-Esas religiones no van con nosotros – Dijo Alison – Somos brujas, nuestra única religión es la magia… Escucha Naty, si ya no quieres seguir, dilo, así seremos menos.
-¡Claro que seguiré! – Se indignó Natasha – Sólo externaba una opinión… No te aceleres Alison. Me gusta ese chico y quiero intentar llegar a el.
En tanto, Eleanor, encontraba a Chris en su camino, y le cerraba el paso, un poco más agresivamente, cada chica utilizaría sus propias armas para conquistarlo.
-Hola Chris – saludó coquetamente
-Hola…
-¿A dónde vas con tanta prisa?
-Tengo una reunión con las aprendices de diosas…
-¿Y no tendrás unos minutos? – se acercó y se irguió un poquito más, para mostrar que de todo ese grupito inquisitorio que se quería echar a Chris, era la más pechugona.
-¿Para qué?
-¡Sólo cinco minutos y te dejo libre, quiero que me ayudes con algo, y creo que solo una persona… digo, un ángel con tus talentos, me puede ayudar!
-De acuerdo… sólo unos minutos…
Chris entró casi inocentemente al salón que Eleonor le indicaba, pero al entrar, éste yacía muy oscuro, solo iluminado por una débil antorcha que estaba al fondo, cuando el guardián se volvió para solicitar información, la chica cerró la puerta.
-¿Qué sucede?
-Nada – se acercó a el y de pronto lo empujó a la puerta, Eleonor era de las altas – Solo quería estar a solas contigo…
-¿Para qué? – pregunto el guardián sintiendo que ella lo estaba apretujando demasiado.
-Para enseñarte un par de cositas que hacemos muy bien las chicas aquí en la tierra… aunque creo, si no me equivoco que Granger o Weasley ya se han encargado de darte algunos adelantos.
-¿Lo dices por los besos?
-AAAAAAAAAAH – gimió Eleonor con los ojos brillantes, Chris en ese aspecto era como un libro abierto – Si Chris, hablo de besos y de otras cositas más – y puso la rodilla donde no debía.
-¿Por qué haces eso? – Gimió el guardián – Me incomoda un poco…
-No sabes… lo que voy a hacerte – alcanzó a decir Eleonor, antes de atrapar al chico entre sus brazos y comenzar a manosearlo, hasta por donde ya saben, y sin que él pudiera defenderse… y es que ante "eso" parecía más débil que un humano cualquiera… las tentaciones y la curiosidad lo desviaban de su camino.
En tanto, las chicas esperaban a Chris en el salón en donde tendrían su reunión, Nicole ya había acabado con todas las golosinas que había en las bolsas de todas, y nada que el guardián llegaba, algunas comenzaban a impacientarse.
-¡Vamos¿En donde está Chris? Necesito ver como está mi lobito…
-MMMMMMMMMMMMMM – gruñeron todas
-¿Qué?
-¡Eso me huele a que Jon Lupín, te está empezando a gustar! Ten cuidado porque al chico le fascina Chang!
-¡Sólo me preocupa que esté bien y que no le pase nada! Saben que eso podría perjudicarnos ¿no lo creen?
-Sí claro, por supuesto, cómo no, ahora resulta…
-¡Envidiosas!
-Cierto – Dijo Alkyon tristemente – Por lo menos yo si te tengo envidia… De todas soy la única que siempre se la pasa mal con Draco y no lo entiendo…
-El es malo de naturaleza, por eso choca contigo…
-Bueno, a mi no me va mejor con Harry.
-Pero Harry es un chico con talentos… y Draco lo único que tiene es…
-¿Qué cosa?
-Olvídenlo – murmuró, no mencionaría al dragón ángel.
-¡Arriba esos ánimos! – Sonrió Japi – cuando volvamos al cielo, ya no tendrás que lidiar con el…
-Tal vez por mí no haya problema, pero resulta que algunas de ustedes se están adentrando mucho con ellos… Japi y Elektra… de Neny no digo nada, porque sé que en cuando vengan por nosotros, romperán ese absurdo compromiso…
-¡Ya no estés triste! – Le dio un abrazo Nicole – Que haces que me sienta muy mal y… ¡me dé más hambre!
-¡Nicole!
-Lo siento mucho…
-Chris está tardando mucho ¿se habrá topado con algún problema?
-¡Vamos a buscarle!
-¡Chicas! – de repente se abrió la puerta y apareció Chris… y apareció con un aspecto francamente, que dejó a todas boquiabierta, el joven guardián tenía el pelo revuelto, estaba cubierto de lápiz labial su rostro, y parte de la camisa blanca de punto que llevaba y desabotonada, la capa abierta y rota, con los pantalones sin cinturón y la cremallera abajo (Ejem, que pena ajena)
-¿Qué te pasó?
-¡Una chica me atacó!
-¿Y no te defendiste? – señaló Mariana
-¡No puedo lastimar a los humanos! – gruñó mientras se componía los pantalones y se abotonaba la camisa.
-¿Y que te hizo, te golpeó?
-¡Me comenzó a besar, me empezó a meter la mano en todas partes e hizo que yo la tocara en sus cosas! – protestó indignado
-¿Qué te tocó?
-¡Aquí! – señaló y las chicas como que enrojecieron… y como que se aguantaron las ganas de reírse ¿Por qué querrían tocarle ahí a un chico?
-¿en serio te tocó "ahí"?
-¡Y no dejaba de tocarme el trasero¡Todos tenemos lo mismo! Y luego me estaba besando por todas partes… y no había luz, y sentí que si gritaba o algo, sería un poco estúpido.
-¿y como te soltaste de ella?
-¡Escuchamos que el conserje iba revisando todos los salones y la chica esa, me sacó por otra puerta y todavía me dijo que teníamos que terminar lo que habíamos empezado!
-¿Terminar en qué?
-Me dijo unos términos que no me sonaron bonitos… necesito investigar, no me gustan los ataques ni las sorpresas…
-Pero ¿estás bien?
-¿Bromean? Por un momento pensé que esa muchacha quería reproducirse conmigo…
-¿Reproducirse?
-Sí, como lo hacen los humanos para tener descendencia… ya saben cuando tienen las llamadas "relaciones íntimas"… ¡Yo no podría hacer eso, soy un guardián!
-Pero si los propios ángeles han buscado reproducirse con humanos que tú no lo hagas…
-O que ustedes no lo hagan – se las reviró un poco molesto.
-¿Tener esas relaciones de procreación con los humanos? – Espetó Mariana, pero luego le entraron las dudas.
-Pues yo se que esas relaciones a veces lo hacen no solo para procrear, si no como señal de que son pareja…
-¿EN SERIO? – Preguntaron todas y como que las dudas le quedaron.
-¡Chicas, no estamos aquí para discutir eso! – Protestó Chris incómodo – mejor hablemos de lo que pasó hoy – y comenzaron a discutir el tema, sin embargo, pese a todo, la duda también quedó en Chris y por su mente sólo pasaba lo que ella le había hecho… y lo que según ella, le faltaba por hacer.
Sin embargo en la noche, cuando todos dormían, Alkyon no podía conciliar el sueño, mirando a Draco, frente a ella, que dormía profundamente, y aún no entendía cómo un tipo como él, podría tener en su interior al legendario Dragón Ángel.
Alkyon se acercó lentamente a la cama del rubio y se recostó a su lado, por un momento admirándolo en silencio, se pegó a el, y le acarició el cabello rubio, y le pasó las manos en su pecho, aspirando su aroma, pegando su rostro al de Draco, cerrando los ojos y hablándole al oído.
-¡Por favor Dragón Ángel, tienes que salir, tienes que volver distinto a Draco, no quiero que sea malo, quiero que sea como tú!
Y así permaneció, abrazada a Draco, acurrucada junto a él, quedando dormida profundamente… se sentía tan bien, estando al lado del rubio cuando dormía, porque parecía inofensivo y un halo de paz y tranquilidad los envolvió que en esa noche, los polvos pesadillas que Hiromi esparcía no le hacía daño.
Claro que cuando el rubio abrió los ojos por la mañana, él era el que tenía abrazado a Alkyon, y la bata que ella portaba era demasiado reveladora, y por un segundo (bueno como por cinco minutos) se quedó quieto, casi sin respirar, sus brazos estaban alrededor de la cintura de ella, y el escote de la bata de dormir, estaba mostrando ciertas partes privadas… y plana no estaba.
De repente ella se dio vuelta y lo abrazó mientras seguía soñando con ángeles y dragones, Draco entonces comenzó a sentir un no se qué y un no se cuando, y sintió que debía apartarla o ahí ocurriría una tragedia.
-¡Alkyon! – gritó apartándose
-¿Eh? – ella abrió los ojos
-¿Qué haces en mi cama?
-¿Dónde? – se limpió los ojos y se incorporó, haciendo que Draco enrojeciera aún más, pues prácticamente, la bata transparentaba todo lo que se podía ver.
-¡Cúbrete! – Le aventó Draco una sábana - ¡Que me estás enseñando todo y salte de mi cama!
-¿Qué? – seguía adormilada
-¡Dios mío! – chilló el rubio y se metió al baño (y yo no sé a que, tal vez a desahogar sus penas)
-¡Ah! – Reaccionó Alkyon - ¡Me quedé dormida en su cama! – pensó y se quitó de ahí, buscando su ropa para cambiarse, sin imaginar lo que provocaba en Draco (y en los chicos) ver a una chica con una lencería tentadora.
Un par de horas más tarde, cuando Elan pudo deshacerse de Bastian por un momento, y Diana satisfecha que Fred se quedara en el colegio unos días, a consentimiento de Dumbledore, y Ana que permanecía a su lado, ya que con ellos estaba más a gusto… Kureme estaba observando con ellos, cuando las diosas pasaban, sin que ellas se percataran de su presencia.
-¿Quién elegirás para llevártela al inframundo?
-Estoy valorando a todas…
-Elektra…
-Muy joven y le gustan los perros… (¡Que es un lobo, no un perro!)
-Alkyon
-Considerable
-Nenyeina
-Ya tiene ese compromiso y así no la puedo tocar… por el momento.
-Japiera
-Demasiado dulce para mí gusto…
-Tanya…
-Muy frágil
-Nicole
-¿Con una diosa licenciada? Olvídenlo…
-Mariana…
-También considerable… digo, Tanya, Elektra, Japiera y Nenyeina tampoco están descartadas del todo.
-Pero debes decidirte por una e ir directamente por ella, no puedes estar indeciso en el último momento, porque puede ser peligroso.
-Bueno… mis dos mayores opciones son Alkyon y Mariana…
-Haces bien – agregó Ana – A ninguna la quiere muy bien su respectivo humano así que, no dudo, no se interpondrán mucho…
-Tengo mis dudas – subrayó Elan – Draco tiene al dragón ángel en su interior y Harry el toque del ángel, ambos son peligrosos ¿y si de repente deciden defenderlas?
-Por lo menos yo estoy trabajando con la mente de Draco… lavándole el cerebro para que el ángel no despierte, si sigo así, seguramente no volverá.
-Ana – de pronto le llamó Chris y por un momento, él y Kureme se vieron, pero éste solo sonrió en señal de saludo y desvió la vista, aunque Chris tampoco le quitó la vista a Diana y Elan.
-¿Qué pasa Chris?
-Ayer no acudiste a la reunión…
-Lo siento… Estaba haciendo amigos…
-Bien, tengo que hablar contigo…
-¡Nos vemos! – se despidió de sus "amigos" y siguió al guardián.
-¿Qué te pasa Chris?
-Esos chicos son extraños…
-son agradables, ayer que llegaron me preguntaron cosas y ahora somos amigos, al menos mientras permanecen aquí, porque tienen que regresar a su colegio…
-No lo sé, ese chico…
-¿Demian?
-Se me hizo conocido de algún lugar…
-Podría ser ¿de que querías hablar?
-Del ataque de los Niños de Absalón y los demonios, no estabas ayudando a las diosas, me preocupé por ti.
-Debido a tanta oscuridad, tenía que resguardarme, ya sabes, si mi parte mala se apodera de la buena, no estaría equilibrada y la podría perder para siempre, por ello no podía pelear, había demasiada oscuridad y eso debilita mis poderes – Mintió.
-Claro, pero ahora ¿estás bien?
-Eso creo… Bueno, ahora si no te importa, me voy a cuidar a Joe…
-Con respecto a eso…
-¿SI?
-Creo que ya fue suficiente devoción, te seré sincero, siento que cuando estás junto a Joe, él no está a gusto, es como si te odiara, no lo dice, no lo expresa, pero siento vibraciones negativas de su parte, tal vez deberías no atosigarlo demasiado…
-Aja…
-No te molestes con él o conmigo, pero estoy seguro que lograremos quitarle el mal que tiene con un poco más de tiempo… Lo que pasa es que no quiero que te acostumbres, recuerda que en cuanto podamos, volveremos al cielo.
-Te olvidas Chris, que soy mestizo, no tengo cabida ni en el cielo ni en el infierno, mi sitio no está definido… para los que son como yo, deben rondar la tierra, para siempre…
-No seas tan trágica, ya veremos que dicen arriba…
Ana no respondió y subió a ver a Joe, Sibil su madre, le acomodaba su manta y le masajeaba las piernas, el chico al verla, sintió que se incomodaba y deseaba gritarle que se fuera, pero no podía hacerlo, la profesora al verla le sonrió y al pasar, le hizo un gesto cariñoso en la cabeza.
-Cuida bien a mi Joe, tengo clases…
-Claro…
El ángel mestizo sacó a Joe al jardín solitario, el chico no mencionó palabra alguna, ella se sentó a sus pies y apoyó su cabeza sobre las rodillas, mientras cerraba los ojos y le decía todo lo que llevaba dentro, al parecer, Ana de luz no estaba dormida del todo.
-Mis amigos están aquí – le dijo – Van a provocar un pequeño caos dentro del colegio, y entonces participaré, tal vez entonces se descubra que no he estado de parte de la luz – abrazó más sus piernas y Joe sintió que ella pasaba por una contradicción de sentimientos, algo común que le ocurría a los ángeles mestizos.
-Entonces no lo hagas…
-No quiero ser buena, me gusta ser mala, me gusta ser agresiva, tener el control, no quiero ser como esas aprendices de diosas perdiendo el tiempo cuando pueden hacer cosas provechosas…
-Desatar el caos no es nada provechoso ¿Por qué quieres dañarnos Ana¿Qué te hemos hecho?
-Tengo que vivir entre ustedes, porque el cielo me rechaza y el infierno también, nunca puedo quedarme para siempre en ninguno de los dos, y tengo que deambular en la tierra, como una vagabunda, como una don nadie… ¿acaso esa no es razón suficiente para odiar y para tener algo de utilidad¡De que me sirve ser la más buena del mundo si de todas maneras el cielo no me acepta!
-¿Entonces no quieres servir a uno solo?
-A veces los intereses del cielo y del infierno no son tan distintos, solo hay que acostumbrarse a ellos y elegir la mejor opción… no hay lo blanco y lo negro… yo solo quiero ser lo negro.
-Tú también eres hija de Dios…
-A veces los hijos de Dios tienen que luchar contra su propio padre y entonces la ira del creador desatará el terror absoluto a través de sus ejércitos de ángeles, las valquirias, que pueden ser mucho más crueles y despiadadas que los demonios.
-das miedo cuando hablas así…
-Yo también tengo miedo – se puso de pie Ana y se sentó en las piernas de Joe, abrazándolo, y hundiendo su rostro en el pecho del joven, el cual se descontroló, ella cerró los ojos aspirando el perfume de Joe, mientras pensaba que estar a su lado, le provocaba mucha paz.
-¿Qué haces?
-Te necesito – murmuró Ana y al alzar su rostro, volvió a besar a Joe, largamente, en un beso profundo, lento, apasionado e impulsivo… el chico pudo sentir a través de ese beso, como sin querer, las cadenas con las que ella lo tenía atado, se aflojaban, aunque sentía que la negrura de su alma, en el fondo, aún brillaba esa luz… y llevado por la curiosidad, Joe dejó que ella le besara todo lo que quisiera.
-¿Qué le hiciste qué? – Gritaba el grupito de chicas a Eleonor, de nuevo en la sala de juntas, o sea, el baño de chicas, Ginny rechinaba los dientes y Hermione jamás hubiera creído lo lejos que querían llegar todas ¿o es que ella era una cobarde santurrona?
-Le di un ultra-mega-re-contra-jodido faje al guardiancito – sonrió Eleanor, en una actitud coqueta y desinhibida – Casi, casi, lo hago mío… de no ser por Filch ¡que nos interrumpió justo cuando todo se ponía candente!
-¡Que descarada eres Eleanor! – Chilló Hermione
-¿Descarada? Que tú seas una mustia que se conformó con besarlo, no quiere decir que el resto debamos desperdiciar la oportunidad de hacer cositas más interesantes con él – Espetó Alison
-Yo también pienso en llegar hasta el límite con él – Intervino Danielle – Así que la siguiente en llegarle seré yo…
-¡Pero yo no he terminado! – Protestó Eleonor
-Lo siento chica, pero me toca comerme a ese angelito – sonrió la rubia – y eso va para las que ya pasaron por el, si no aprovecharon más con el, es su problema, su turno terminó.
Ginny le envió una mirada maliciosa ¡Si esa chica pensaba que ella se daría por vencida, estaba equivocada! No dejaría de seguir al guardián, y si alguien le iba a enseñar muchas cosas sobre el amor carnal y la pasión y lo demás, no sería ninguna de ellas…
Y hablando de esas cosas, por la tarde, las estudiantes de diosas, tenían los ojos bien abiertos, mientras miraban algunos libros que habían conseguido, que hablaba sobre sexualidad, amor y otras perversiones... bueno, eso sonó exagerado, pero las chicas leían libros de educación sexual y por eso, lanzaban exclamaciones cada que leían sobre las conductas humanas.
-¿A poco se puede hacer eso?
-¡Pero dicen que duele la primera!
-Pero que te gusta la segunda…
-Y te acostumbras a la tercera…
-Jamás lo haré – protestaba una
-¡AAAAAAAAAAAAAH! – Gimió Mariana de repente - ¡Ahora ya se lo que le pasó a Harry en las montañas!
-¿Qué le pasó?
-Pues creo que lo de esta foto
-OOOOOOOOOOOH ¿y se lo viste?
-¿Están locas¿Cómo se lo voy a ver? – Gritó Mariana sonrojada – Aquí dice que solo una pareja íntimamente relacionada puede ver y tocar y todo lo demás… ¡Harry y yo, no somos nada!
-Solo es tu amo – Dijo Alkyon recordando las palabras de Ana, aunque cuando leyó algo más - ¡Oigan, así que tampoco podemos mostrar abiertamente nuestro cuerpo a los chicos o eso les provoca!
-si, es peligroso andar con poca ropa o transparente delante de un chico… ya que sus hormonas se alborotan y es muy peligroso, porque… ¡Porque sucede lo mismo de esta foto!
-UUUUUUUUUUUUUUUUH
-Bueno, pero con los besos no pasa nada – Señaló Elektra
-Pues si… no pasa nada… Oye Nenyeina, tu como estás prometida con Hayden, si pueden hacer todo esto
-O lo que está aquí – Levantó el kamasutra y Neny enrojeció, aventándole un libro.
-¡No digas esas cosas tan feas!
-Pues aquí dice lo contrario…
-Ya he besado a Harry – dijo Mariana mirando la foto en donde una pareja se besaba apasionadamente – Pensé que eso solo se usaba para darse calor…
-Pues de eso se trata precisamente, aunque aquí dice que se los dan los enamorados y… ¿Y ya besaste a Harry?
-¡Eso les estoy diciendo desde hace rato y parece que no me prestan atención!
-Bueno… mj… también me he besado con Draco… a decir verdad, él siempre me besa a la fuerza – aclaró la garganta Alkyon.
-Y Elektra a Jon…
-¡Pero yo no me acuerdo de eso!
-Pues bésalo de nuevo…
-Tal vez deba besar a Kieran, aunque como a él dizque le gusta la señorita Granja… puede que me rechace… - suspiró Japiera
-¿Pero eso te detendrá¿Acaso no queríamos bajar para saber las costumbres de los terrenales, como viven y que maravillas hay?
-Puede que yo se lo pida a Hayden – se rascó Neny la cabeza – Digo, siempre me mira de un modo…
-¿Cómo si te quisiera comer?
-Pues si…
-Aquí dice que cuando un hombre te mira demasiado es porque algo quiere contigo…
-Te apuesto a que no te negará un beso…
-Tengo una pregunta… ¿Por qué cuando las chicas besan a los hombres cierran los ojos?
-Tal vez para no ver la cara de idiota que ponen los hombres – dijo Alkyon y todas soltaron una carcajada, que al término, las dejó mudas un rato… Un beso… ¿Cuál era el maravilloso poder de un beso? Las que ya se los habían dado o lo habían dado, pensaban en volver a probar y las que no… ¿Por qué no pedir uno?
Y hablando de besos, detrás de un árbol, Bastian se comía a Elan, el chico mostraba demasiada efusividad, sobre todo después de que ella se entregara a él, y como era su primera novia con la que tenía todo, él se sentía el chico más feliz del mundo… pobrecito…
-Te amo Elan…
-¿Amor? – pensaba Elan mientras él le abrazaba cariñosamente
-¡Ay tanta magia cuando te abrazo, cuando te tengo a mi lado, cuando pienso en ti y escucho tu nombre!
-Eres muy tierno Bastian
-Te estoy entregando mi corazón en este momento, eres para mí, seré siempre tuyo… te amo… sin más palabras
Elan por un momento se sintió incómoda, por las palabras del chico, pero el prácticamente le adoraba, era toda su vida, y eso la descontrolaba mucho, el chico irradiaba tanta luz, que a veces sentía que bajaba la guardia y que estaba mejor dentro de él, porque con cada palabra de amor, era como un disparo que le debilitaba.
-Bastian, sabes que algún día me tendré que regresar a Beauxbutton, soy una prófuga del colegio…
-¡Eres una fugitiva, eso me hace admirarte más! No quiero que regreses a tu colegio… quédate junto a mí, Elan – Y Bastian se aferraba a ella, él siempre había estado solo y rechazado, y ahora se enamoraba, pero para su colmo, equivocadamente…
-Creo que exageras…
-¿Me amas?
-
-Yo se que sí, si no, no te hubieras entregado a mí, con tu luz iluminas mi vida, tienes todo lo que necesito, junto a ti, descubro mi camino… te quiero conmigo para siempre…
-"Pero yo no puedo querer" – pensaba Elan – "Soy un ángel negro, sin sentimientos, yo no puedo llegar a tener esos absurdos pensamientos, no puedo"
Pero así abrazando a Bastian, sentía que era tan frágil como una flor, eso no lo sentía al principio con el ¿Por qué ahora si le afectaba de ese modo¿Acaso había sido porque había entregado su cuerpo?
-¿Sabes? Los besos son baratos, y me da mucho gusto que no seas interesada, porque como sabes… no tengo un quinto… así que lo único que puedo darte son esos, los besos y mi corazón.
-Ofreces mucho Bastian, no creo que debas ofrecer todo a una sola persona… No me conoces bien
-el amor verdadero es solo el primero… y tú has sido la primera y la única… cuando Nicole bajó y me concedió este deseo, comencé a pensar que era un absurdo… pero cuando te conocí, mi vida empezó a tener sentido…
Elan comenzó a sentir los labios amargos, su corazón de cristal negro parecía querer palpitar, y sus labios temblaron, y de sus ojos escurrió algo que Bastian no vio, era una lágrima negra.
-Te daría mi vida Elan… si me la pidieras…
Elan no pudo aguantar más y salió corriendo de ese lugar, dejando solo y confundido a Bastian, mientras ella se limpiaba furiosamente las lagrimas negras que le escurrían, se detuvo cerca del bosque prohibido y se introdujo en el.
-BASTA – Gritó en la soledad, escuchaba voces de protesta en su interior ¿Qué le estaba pasando? – ME DIO SU CORAZON Y YO LO HE UTILIZADO… NO PUEDO SENTIR NADA, SOY UN ANGEL NEGRO, UN ANGEL NEGRO NO TIENE SENTIMIENTOS… EL AMOR CORTA COMO EL CRISTAL… NO PUEDO DEJAR QUE ESE ESTUPIDO SENTIMIENTO ME INVADA… DEBO SER FUERTE… DEBO SER FUERTE… VOY A DESTROZAR A BASTIAN POR HACERME SENTIR ESTA MALDICION ¡PAGARAS POR ESTO BASTIAN!