¡Buenas! Hora del siguiente capítulo, vamos preparando la entrada de Ena, también en este capítulo se verá la batalla entre Issei y Doni a modo de conmemoración por la nueva temporada de DXD estrenada ayer (quería subirlo ayer mismo, pero a mi Internet le pareció buena idea fallar justo cuando terminé de escribir la ultima respuesta a los review y no volver hasta el día siguiente), especialmente por que empezó justo con el Juggernaut Drive y su desenlace, esta vez siguiendo paso a paso la LN, esto en parte me agradó y en parte no (me gusta DXD pero a ratos me parece demasiado ridículo, especialmente con todo el enfoque que le dan a los pechos, no que me moleste en verdad, si fuera así no habría mencionado siquiera a Chichigami en el capitulo 1, pero también es algo claro que DXC es mucho más ligero en lo H que DXD), así que empecemos ¿les parece? (Modo Jag Duran = ON) cinturón de seguridad y, vamos para allá.

-Diálogos- / -Pensamientos- / -*Diálogos en otro idioma o por medios de comunicación*-

[Seres sellados en SG] / [Autoridades nombradas por la Booster Gear]

-Dioses, hechizos y cánticos- / -Pensamientos de dioses, hechizos y cánticos mentales]

(Lugares, momento) / (N/a: nota de autor)

Capítulo 12: Viejos y nuevos recuerdos.

[Fake Reality]

-Al fin, en casa- suspiraba cansado Issei mientras Ryuuteimaru salía de la brecha dimensional justo sobre su casa en plena noche –ojalá hubiéramos vuelto mañana, tendría más tiempo para descansar- suspiró maldiciendo que el día siguiente era viernes y no el actual – no tenemos otra salida sorpresa, ¿verdad?- preguntó mirando a los líderes de las tres facciones judío-cristianas.

-No hoy por lo menos- le aseguró Azazel encogiéndose de hombros.

-Por cierto, Issei-kun, ¿qué autoridad estas usando?- preguntó curioso Sirzechs, solo habiendo sentido una pulsación de energía emanar del rey.

-[Fake Reality], no quiero que los humanos normales descubran a Ryuuteimaru-.

-Ah, no es necesario entonces-.

-¿Eh?-.

-Sí, veras, mi [Rook] instaló un sistema de sigilo que lo oculta a la vista de los humanos normales, además puede reducir su tamaño a voluntad así que no tienes por qué preocuparte por ocultarlo-.

-… me habría servido saber eso un poco antes, Oni-sama- suspiró el castaño desactivando su autoridad y dejándose caer en el respaldo de su "trono", notando ausentemente al navío detenerse justo sobre su casa -Ryuu, déjanos frente a mi casa y ve a descansar- indicó poniéndose de píe junto a todos los pasajeros, instantes después, todos, incluyendo el hipocampo alado que hasta ese momento estaba tranquilamente en un establo dentro del navío legendario, se encontraban en la entrada frontal de la construcción.

-Lo siento Issei-kun, en compensación haré que mis sirvientes preparen un establo apropiado para tu nuevo familiar, debería de estar listo para mañana temprano- se disculpó el Maou con una sonrisa divertida.

-Bueno, yo me retiro, nos vemos en clases Issei- dicho eso, Azazel se retiró caminando tranquilamente. Baraquiel por su parte asintió una vez al Campione antes de desaparecer en un círculo mágico.

-También nosotros nos retiramos, que pasen buenas noches- con eso, Miguel y su escolta desaparecieron en cruces de luz.

-Nos vemos Issei-kun, que descansen- por último, los dos demonios desaparecieron en un círculo mágico.

Sin apenas darles atención, Issei abrió la puerta de su casa tirando a Hydron de las riendas que Poseidón le había obsequiado, sorprendiéndose al toparse con el resto de los habitantes de la casa despiertos y, aparentemente, esperándolos.

-¡Ise/Issei/Ise-kun/Issei-sempai/Issei-san!- parpadeando un poco confuso al escuchar su nombre dicho en tantas formas distintas a la vez, el castaño se encontró rodeado por casi todas las mujeres presentes en la sala (con excepción de Rossweisse y las maid que permanecían junto a Kiba y Gasper un poco más lejos).

-¡Ise, ¿cómo fue la reunión?!- preguntó apurada y nerviosa Rias.

-Pues, fue, bien- respondió un tanto inseguro, tirando un poco del hipocampo.

Solo entonces todos repararon en el enorme ser mitológico.

-¿Un hipocampo alado?- preguntó sorprendida Rossweisse.

-¡Qué lindo!- exclamó Asia acercándose rápidamente a acariciar al equino, el cual se dejó consentir gustoso.

-Como esperaba de Asia- sonrió el Campione antes de sacudir la cabeza -Erica, te dejo las explicaciones, iré a dejar a Hydron en la piscina hasta que los sirvientes de Oni-sama terminen de construir un establo para él- con eso, jaló de las riendas rumbo al ascensor.

Al instante, la vista de todos se enfocó en la rubia que sonrió con orgullo.

-No fue una reunión, fue un banquete en nombre de Ise- explicó.

La respuesta de todos fue la misma -... ¿Eh?-.

-Sí, el Olimpo está tan agradecido con Ise por proteger a Atenea que le ofrecieron un banquete y decidieron unirse a la alianza, dentro de poco deberían de estar firmando un acuerdo, y Hydron, el hipocampo, es un regalo de Poseidón- les explicó.

Todos solo pudieron mirarla fijamente, tratando de procesar lo escuchado.

-Sea como sea, ya es muy tarde y todos estamos cansados, mañana les explicaré los detalles, vamos a dormir- indicó antes de girarse a la miko tras ella -si gustas puedes pasar la noche aquí Yuri, Ariana puede ir a recoger tu uniforme y útiles para las clases de mañana.

La castaña pareció dudar por unos instantes antes de asentir -lo agradecería mucho-.

-Bien, entonces te lo encargo, Ariana-.

-Por supuesto Erica-sama-.

Mientras la sirvienta salía de la casa a cumplir con sus órdenes, ambas jóvenes se dirigieron escaleras arriba para descansar.

-Karen, ¿está todo listo?- preguntó Liliana caminando hacia las escaleras, siguiendo a su maid.

-Así es Liliana-sama, ya está inscrita en la academia Kuoh, su uniforme y sus útiles le esperan en su habitación-.

-Perfecto entonces-.

Rias y el resto permanecieron estáticos unos instantes antes de que la pelirroja finalmente espabilara y suspirara un poco.

-Vamos a dormir chicos, mañana aclararemos esto-.

-Entendido, Buchou-.

(Time Skip, día siguiente, inicio de clases)

-Muy bien todos, tomen asiento- llamó Rossweisse ante todos sus estudiantes, mostrándose mucho más tranquila tras ya varios días fungiendo como maestra y logrando la atención de todos -hoy tenemos un par de noticias para ustedes, la primera, una nueva estudiante se unirá hoy-.

-¡Sí!- Apenas dijo eso, los chicos (excepto Issei quien ya lo sabía) festejaron contentos.

-Guarden silencio- pidió la valquiria antes de girarse a la puerta -ya puedes pasar-.

Instantes después, Liliana entró tranquilamente vistiendo el uniforme de la escuela.

-Mi nombre es Liliana Kranjcar, si tienen problemas con mi apellido pueden llamarme simplemente Liliana, es un placer-.

-…-.

-…-.

-¡Una hada! ¡Es una hada!- exclamaron todos los hombres emocionados.

A su vez, las mujeres empezaron a conversar entre ellas.

-¡Es muy linda!-.

-¡También es muy seria, parece alguna clase de princesa!-.

-¡ahora habrá tres One-sama en la escuela el próximo año!-.

-¡Muy bien, guarden silencio!- llamó Rossweisse calmando a la clase antes de girarse a la caballero -toma asiento junto a Aika-san- indicó mientras Kiryuu levantaba la mano para que la viera.

Liliana observó el lugar vació antes de negar.

-No puedo tomar un asiento tan alejado de mi señor-.

-¿Señor?- se preguntaron todos los estudiantes confundidos y sorprendidos (algunos por distintas razones), salvo Issei y Erica quienes mostraron preocupación y diversión respectivamente.

Sin decir nada, Liliana caminó hacia Matsuda, quien estaba a la izquierda de Issei y justo al lado de la ventana. El calvo se sonrojó al instante y se emocionó pensando que lo nombraría su señor, ante la incrédula y/o celosa vista de la mayoría, especialmente de Motohama puesto que toda la imagen de Liliana gritaba "loli" (excepto su altura).

Estando ante el chico rapado, Liliana abrió sus labios y con seriedad, dijo -No puedo sentarme lejos de mi señor, por lo que le pido que me ayude con mi misión y que me seda su asiento-.

Todos entendieron eso rápidamente, y dado que Issei era el único hombre cercano al lugar de Matsuda, era obvio de quien hablaba la caballero.

Notando como Matsuda parecía apunto de reaccionar negativamente, Liliana se apresuró a usar un hechizo básico de hipnosis en él.

-Ah, está bien- asintió ausentemente mientras tomaba sus cosas y se levantaba.

-¡A sus lugares!- comandó Rossweisse en cuanto vio a la mayoría de sus alumnos levantarse con muy claras intenciones de arremeter contra el rey en busca de respuestas.

Permaneció un rato mirando a los estudiantes con seriedad y no volvió a hablar hasta que se aseguró de que se mantenían callados.

-La segunda noticia es que este fin de semana vamos a participar en un ejercicio experimental de educación de valores y concientización-.

Notando la duda en sus estudiantes, la valquiria se giró a la puerta y por esta entraron una pareja de adultos, un hombre y una mujer vestidos con trajes formales, ambos castaños cargando unos maletines bastante grandes, que avanzaron hasta el escritorio del maestro y encararon a los estudiantes con sonrisas amables.

-Buenos días a todos, mi nombre es Kanbara Minato- se presentó el hombre con una leve inclinación.

-Yo soy Higashihongan Nozomi, un placer- se presentó a su vez la mujer –venimos de parte de la universidad de Tokio a llevar a cabo un pequeño ejercicio-.

-Antes que nada, me imagino que habrán pasado por un ejercicio en el que tuvieron que cuidar de un huevo o un costal de harina sin que se rompiera, ¿no es así?- preguntó el hombre.

Pidiendo permiso antes de hablar, fue Katase quien preguntó la duda de la mayoría -¿Se refiere a cuidarlos como si fueran niños?-.

-Correcto, sin embargo está muy claro que, aun con una nota de por medio, pocos se toman enserio la tarea, es por eso que nosotros empezamos hace poco un proyecto para que se relaciones sentimentalmente más y que les deje una buena lección de vida- dicho eso, Minato dejó su maletín en el escritorio y procedió a abrirlo, sacando algo de su interior.

-¿una muñeca?- musitó confundido Issei, viendo a la muñeca que simulaba ser un bebé de un año de edad.

-No es una muñeca normal- le corrigió tranquilamente –dentro tiene un complejo mecanismo que le permite simular el comportamiento de un bebe real: llorará por "comida", por estar "sucio" o simplemente por "extrañar" a sus "padres".

-¡Sorprendente!- exclamaron muchas chicas mirando a la muñeca con ojos brillantes.

-Sí, y hoy, ustedes formarán parejas y cuidaran de una de estas muñecas por el fin de semana- les informó Nozomi con una sonrisa –deberán tener mucho cuidado, los pequeños registrarán cosas como ruidos muy fuertes, golpes, movimientos muy bruscos, el hambre y cosas así, en el mejor de los casos solo reducirá el puntaje de ustedes, en el peor, el niño "morirá"- ante eso último, Asia se cubrió la boca con ambas manos –y claro, cada muñeca cuesta una pequeña fortuna, así que se les permitirá decidir si participan o no, de participar será su responsabilidad que las muñecas no se dañen mientras la cuiden o de compensar los daños, y en base al puntaje final se les concederá puntos extra en varias de sus materias-.

-Los que deseen participar, levanten la mano- indicó Rossweisse, todos la levantaron –bien, entonces empiecen a formar parejas ya sean hombre y mujer o dos del mismo género, en orden por favor-.

Casi al instante, cuatro chicas se pusieron de pie y se movieron rápidamente hacia Issei quien observó algo nervioso al trío de la iglesia y a Erica a su alrededor, con Yuri acercándose con más calma.

-¡Issei-san/Issei/Issei-kun, hagamos equipo!- exclamaron las tres religiosas al mismo tiempo.

-Todas, Rossweisse-sensei pidió que lo hiciéramos ordenadamente- les reprendió seriamente la miko.

-Además, antes de preguntarle a él, ¿no es obvio que deben de preguntarme a mí por mi consentimiento? Yo soy su pareja después de todo- intervino orgullosamente Erica.

Por su parte el castaño observó muy nerviosamente al resto de sus compañeros que lo veían con ira.

-¡Por favor, terminemos con esto rápido!-suplicó mentalmente.

-¡Ustedes, háganlo más tranquilamente!- les reprendió Rossweisse con molestia.

-Erica- llamó Xenovia poniéndose frente a la rubia –por favor, permíteme hacer pareja con Issei por esta vez- pidió con una leve inclinación, yendo por la ruta más rápida para determinar el asunto.

Erica permaneció viéndola seriamente por unos instantes antes de suspirar y asentir –está bien, se trata de un ejerció después de todo, puedo permitirlo-.

-¡Gracias!- exclamó contenta la peli azul antes de mirar al Campione –¡esforcemonos, Issei!-.

-Ah, si- asintió él, era la mejor opción a seguir dado que dicha opción tenía mayoría de votos.

-¡Mou!- se quejó Asia con un lindo puchero, pero aceptó el resultado al igual que las dos castañas que solo suspiraron.

-Asia-san, ¿Está bien si formamos un equipo?- pidió la miko.

-Está bien, Yuri-san-.

-Irina, si no tienes equipo, ¿vienes conmigo?- sugirió Kiryuu acercándose.

-Ah, claro, buena idea-.

-Vamos Lily, hagamos pareja-.

-Ni hablar, me harás hacer todo el trabajo-.

-Vamos, no seas así, ¿somos amigas de la infancia no?-.

Issei observó al resto de las chicas haciendo equipo al igual que su salón, y encontró especialmente divertido ver como Matsuda y Motohama eran obligados a formar una pareja "homo" al ser rechazados por el resto del grupo.

-¡Ven Issei, vamos a firmar y a recoger a la muñeca!- le apuró Xenovia tomándolo de la mano y jalándolo hacia el escritorio.

-Ah, si-.

-Bien, firmen estas hojas por favor- pidió Nozomi entregándoles unos papeles a ambos mientras que Minato salía al pasillo y volvía empujando de un carrito con varios paquetes y una laptop.

-Ahora vengan aquí- les indicó él sacando de entre los paquetes un par de pulseras –estos son sensores para que el "bebé" los reconozca como los padres, cuando llore deberán de pasar los censores por el pecho o la espalda y entonces podrán tratar de calmarlo- les explicó mientras se las ponía en las muñecas derechas –no podrán quitárselas hasta el Lunes que lo haga yo- dicho eso, se inclinó sobre otro paquete y sacó una bolsa con un pañal de tela y un biberón –estos son especiales para el bebé, tendrán dos pañales para cambiarlo y el biberón para alimentarlo, ¿alguna duda?-.

-No, todo claro- negó un tanto ansiosa Xenovia. Issei se limitó a asentir.

-Perfecto, ¿Qué prefieren, niño o niña?-.

-Niña por favor- pidió ella rápidamente.

-Muy bien, permítanme un momento- indicó sacando una muñeca con un traje rosa y abriendo la laptop, tomando un aparato conectado a esta –acerquen sus manos por favor, voy a registrar los sensores en la "bebé"- escaneando las pulseras, el hombre procedió a escribir sus nombres antes de preguntarles una última cosa -¿Qué nombre le pongo?-.

-¿Un nombre?- se preguntó Issei inseguro.

-Gri…- Xenovia por su parte empezó al instante, pero se detuvo con lo que parecía duda, antes de sacudir la cabeza y hablar –Issei, ¿Qué te parece Amy?-.

-¿Amy?, pues, si, me parece bien-.

-Amy entonces- asintió el hombre tecleando un par de cosas antes de tomar la muñeca, abrir un pequeño compartimiento en su espalda y conectarla al equipo por unos instantes antes de desconectarla y pasárselas con cuidado –ya está activada, tengan mucho cuidado-.

Con algo de torpeza, Xenovia se acercó y tomó la muñeca con manos temblorosas, tratando de acomodarla suavemente en sus brazos de la misma forma en que el hombre la había sostenido. Lentamente, ambos se alejaron del escritorio, permitiéndole al hombre empezar con la siguiente pareja. Fue entonces que Issei notó una sonrisa en los labios de la espadachina.

(Time Skip, sábado por la tarde, Residencia Hyoudou)

-Que aburrimiento- suspiraba Irina sentada en la sala junto al resto de los "padres" (excepto Kiryuu y Yuri) con su "bebé", Shin, en brazos –ya terminamos los deberes, no hay nada interesante que ver en televisión y no podemos entrenar por cuidarlos-.

-Ciertamente es frustrante no poder entrenar por ellos- asintió Erica quien leía un libro en otro sofá. Su "bebé", Cesar, permanecía en brazos de Liliana quien estaba sentada junto a Asia, ambas "alimentando" a sus "bebés".

-No tienes derecho a quejarte, no lo has cuidado más de un par de horas, ni siquiera lo cuidaste en la noche- le reprendió la bruja con leves ojeras.

-Si lo hubiera cuidado en la noche podría haberlo destruido por despertarme- afirmó encogiéndose de hombros.

Como nota, debido a los "bebés" que cuidaban, solo Xenovia había pasado la noche con Issei dado que ambos debían de cuidar de la misma muñeca. El resto había vuelto a sus propias habitaciones (en el caso de Asia y Yuri, fueron a la habitación de la rubia para cuidar a Airi juntas).

En eso, Amy empezó a llorar en brazos de Xenovia quien se apresuró a pasar su pulsera por el pecho de la muñeca, una risa alegre de bebé reemplazando por unos instantes el llanto antes de que volviera a llorar.

-Toma- Issei le pasó el biberón para que probara con el, y al no funcionar procedieron a cambiarle el pañal, logrando calmarla.

-La verdad yo pienso que es interesante- comentaba Xenovia con una sonrisa, su mirada fija en su muñeca –nos sirve de práctica para cuando tengamos nuestros verdaderos hijos-.

-Puede que, tengas razón- aceptó roja la ángel, y no era la única, todos estaban algo rojos, salvo Erica que suspiró aceptando lo dicho, y Asia quien, aunque se veía un poco roja, se veía más contenta que apenada.

En eso, entraron a la sala el resto de los habitantes junto a la residente "temporal", la miko Yuri.

-¿Que tal va el cuidado?- preguntó con una sonrisa Rias mientras todos tomaban asiento.

-Va bien, pero es algo aburrido sin nada que hacer- respondió Irina.

-Asia-san, disculpa que le hiciera cuidarla sola- se disculpó la miko sentándose junto a su compañera y tomando la muñeca quien, por la risa que soltó, terminaba de comer.

-Está bien, Yuri-san, tenia que ir a atender el templo-.

-Ahora que lo pienso, Issei-kun- empezó Kiba volviéndose el centro de atención -aun no nos has platicado de tu primer encuentro con Doni Salvatore-.

-¡Ah, es cierto! ¡Cuéntanos Ise-kun!- pidió Irina en un intento de entretenerse con algo.

El rey miró a sus amigos, notando que todos estaban interesados en la historia, por lo que suspiro antes de asentir -está bien, fue al día después de que me volví un Campione…-.

(Flash Back)

Lentamente, los ojos del castaño empezaron a abrirse, enfocando un poco las cortinas de la cama en la que descansaba.

-Estoy, ¿de regreso en casa?- se preguntó adormilado mientras se erguía en la cama y empezaba a visualizar mejor la habitación en que se encontraba -esta, no es mi casa-.

Era sin lugar a dudas lujosa, tanto como la habitación que le habían dado en el territorio Gremory pero más pequeña y daba un aire menos "actual", parecía un lugar más acorde a un rey o algo similar con todas las fornituras, decoraciones complejas, cuadros, etc...

-¿Qué rayos…?-.

[Al fin despiertas compañero]

-¿Draig? ¿Qué paso? ¿donde estamos?-.

[Mejor que te lo expliquen Azazel y el resto]

-¿Azazel-sensei?-.

En ese momento se abrió la puerta a la habitación y entró Ariana con una bandeja de plata cargando un cazo dorado con agua y algunas toallas.

-Ah, ya despertó- habló algo sorprendida de verlo consciente. Con tranquilidad dejó su carga en una mesa cercana y se acercó al recién despertado, deteniéndose a un metro de la cama y ofreciendo una inclinación -es bueno verlo despierto Hyoudou-sama-.

-Ariana-san, ¿donde estoy?-.

-Estamos en la cede de [Copper-Black Cross] de Milán, Erica-sama y sus aliados lo trajeron aquí para que se recuperara de sus heridas-.

-¿Aliados?-.

-Si, ahora mismo se encuentran desayunando el el comedor principal, ¿le gustaría acompañarles o prefiere que le traiga su desayuno a la cama?-.

-Creo que, prefiero ir con ellos- comentó levantándose de la cama, reparando en la pijama de aspecto costoso que vestía, era tan suave que le daba algo de comezón -eh, ¿hay algo, más apropiado, que pueda vestir?-.

-Claro, en aquel ropero encontrará toda la ropa que pueda necesitar, escoja lo que más le guste- le indicó un ropero de madera bastante grande y elegante -esperaré afuera- con eso, la maid procedió a salir de la habitación.

-...¿Draig?-.

[Estoy ocupado compañero, mejor apresurate a bajar]

-¿Ocupado con qué?-.

[...]

Suspirando al no escuchar al dragón, se encaminó al ropero y lo abrió, retrocediendo un paso al verlo lleno con lujosos trajes formales de una calidad comparable al traje que usó durante la reunión de los jóvenes demonios, también habían capas, mantos, abrigos y… ¿esas eran coronas? Buscando entre las prendas, encontró algo más cómodo para vestir, un pantalón de mezclilla negro, una playera de manga larga roja y unas zapatillas deportivas negras y blancas, todo de la más alta calidad.

Minutos después salió de la habitación, topándose con Ariana quien se inclinó levemente -por aquí por favor- le indicó empezando a caminar por el lujoso pasillo con el castaño tras ella. Varios minutos de caminata silenciosa después, la maid se detuvo ante una enorme puerta de madera que indicó con un gesto formal.

Acercándose, Issei procedió a abrirla, topándose con un enorme y lujoso comedor con varias personas dentro, 5 de las cuales reconoció al instante.

-Ise-kun, es bueno verte despierto- saludó Sirzechs alzando una copa de vino en su dirección con Grayfia de pie tras él, Miguel y Azazel sentados a sus lados.

-¿Oni-sama? Azazel-sensei y Miguel-san también están-.

-Vaya, en verdad está en buenos tratos con los tres- comentó sorprendido un hombre algo bajo pero de aspecto corpulento con barba, vestido con un traje y una bandana en la cabeza.

-Gennaro, más respeto, estas ante no uno, si no dos reyes y dos lideres de razas- le reprendió otro más, de piel oscura y cabeza rapada igualmente vestido de traje.

-¿Que está pasando?- preguntó en verdad confundido Issei, notando a Erica, quien vestía un lujoso vestido rojo similar al que había usado cuando se conocieron, ponerse de pie y acercándose.

-Por ahora vamos a tomar asiento, hay algunas personas que debes conocer antes de empezar a hablar- le dijo antes de tomarlo del brazo y guiarlo a la mesa, haciéndolo sentarse en la cabecera antes de sentarse ella misma a su derecha, en el mismo lado que los otros humanos presentes.

-Antes que nada, permitamos presentarnos su majestad- empezó el humano más cercano a él poniéndose de pie, un hombre apuesto de cabellos rubios y ojos azules, su traje formal desabrochado permitía ver claramente la costosa camisa blanca que vestia y contemplar su cuerpo musculoso que, de alguna manera, no desentonaba ni con su elegante rostro ni su actitud elegante -mi nombre es Paolo Blandelli, actual líder de [Copper-Black Cross]- se presentó inclinándose con una en el pecho.

-¿Es el padre de Erica?- preguntó el castaño.

-No su majestad, soy su tío, sin embargo soy su tutor legal en lugar de mi querido hermano que en paz descanse-.

-Ah, entiendo, disculpe la confusión- se disculpó sintiéndose confundido por la forma en que se refería a él -¿Majestad? ¿se refiere a mí? Pensaba que era por Oni-sama, ¿será por Draig?-.

-No se preocupe su majestad, es entendible y, en cierta forma, es gratificante que llegue a considerarme como alguien de tal importancia para mi querida sobrina-.

-Yo soy Gennaro Gantz, un placer- se presentó el de barba sin levantarse, solo alzando una mano a modo de saludo.

-Ah, si, igualmente-.

-Gennaro, muestra más respeto por todos los cielos- le reprendió el "calvo" antes de ponerse de pie e inclinarse en dirección a Issei -le ruego le disculpe su majestad, puede llamarme Clarens, estoy a sus ordenes-.

-Ah, un gusto pero, me siento incomodo con tanta formalidad, preferiría que fueran más relajados conmigo, como Gantz-san-.

-¿Gantz-san, eh? No está mal, es interesante ser llamado así por un japones- comentó el mencionado con algo de alegría, siendo él un otaku a puertas abiertas, era una experiencia reconfortante -es bueno saber que el nuevo rey es alguien fácil de hablar-.

(N/a: si se lo preguntan, no creé ni a Gantz ni a Clarens, son personajes de Campione! Que salen en unas cuantas ocasiones. Como extra, Gantz disfruta especialmente de los animes de chicas mágicas…)

-¿Nuevo rey?- preguntó confuso el castaño, interrumpiendo el regaño que Clarens quería soltarle a su compañero, antes de levantar el brazo izquierdo -¿Lo dice por que porto a Draig?-.

-¿Oh, no lo sabes? ¿Draig no te lo ha dicho?- intervino curioso Azazel.

-Insiste en que esta ocupado y que mejor les pregunte a ustedes, ¿qué está pasando?-.

Todos se miraron entre ellos, antes de que fuera el propio Lucifer quien empezara.

-Ise-kun, ¿qué tanto sabes sobre los Campioni?-.

-Que son humanos que mataron a dioses y robaron sus poderes-.

-Correcto. Solo los humanos son capaces volverse uno, los humanos con menos probabilidades de lograrlo. Ah habido ocasiones en las que un usuario de una [Longinus] con completo control sobre su [Sacred Gear] logró matar a un dios, fuera un [desencadenado] o uno normal, pero nunca se volvieron un Campione- el diablo se detuvo un momento para enfocar al castaño con tanta seriedad como pudo -hasta ayer que lograste derrotar, no solo a uno, si no a dos [desencadenados] de alto nivel-.

-¿Eh?- musitó sin comprender, corrección, sin creer lo que estaba diciéndole.

-Ise-kun, eres el primer portador de [Longinus], y el primer humano reencarnado en demonio, en volverse un Campione-.

El mundo pareció detenerse para el castaño.

-...¿es en serio?-.

-Es correcto su majestad- intervino nuevamente Paolo -mi propia sobrina, Erica, nos ha relatado su encuentro con el Victorioso Persa Verethragna y el Rey Celestial Melkart, y en conjunto a la palabra del Dragón Gales, Draig, no cabe la menor duda de que usted es el séptimo Campione, el nuevo rey de la humanidad-.

-Eso, eso… ¿que significa?- preguntó dudoso, enfocando su vista a los tres seres sobrenaturales presentes.

-En resumidas cuentas, que eres jodidamente más fuerte que antes y que estás a la par de cualquiera de nosotros tres en importancia y poder político, Rey de Japón- le explicó Azazel, mirando atentamente su reacción -también que ahora atraerás a muchas existencias poderosas, más que antes, creo que ya puedes despedirte de la idea de una vida pacifica-.

-...¿Qué tan fuerte soy ahora?-.

-Normalmente, todo nuevo Campione es asignado al lugar 100 de los más poderosos del mundo, pero considerando que tienes a Draig y a quienes mataste, yo digo que estas en el 95 como mínimo, ahora mismo Vali no podría hacerte nada si no usa su [Juggernaut Drive]-.

Issei permaneció cayado, procesando lo que estaba escuchando, con una sonrisa de alegría y alivio formándose lentamente en su rostro, alzando su mano frente a su cara y apretando el puño -con esta fuerza, puedo protegerlos, ya no les pasará nada- para él, antes que nada, significaba que finalmente podría proteger a sus seres queridos.

Asia, Rias, Akeno, Koneko, Gasper, Kiba, nadie de ellos tendría que pasar por situaciones de peligro graves ante seres de mayor poder, ante la [Khaos Brigade], no mientras él estuviera junto a ellos.

Todos notaron el brillo en sus ojos, y era claro la alegría que ahora sentía, sin embargo, solo los tres antiguos seres lo miraban con una sonrisa, dándose una idea de sus pensamientos, los humanos se encontraban inseguros, sus experiencias con los otros Reyes de la humanidad no les ayudaban a mantener la calma, aunque en el caso de Erica, ella lo miraba con curiosidad, preguntándose que estaría pensando para que se alegrara tanto.

El primero en hablar fue Miguel, quien le ofreció una suave sonrisa -Felicidades Issei-dono, ahora tiene menos preocupaciones-.

La sonrisa del castaño aumentó un poco al tiempo que lo miraba a los ojos -Si, con esto, puedo protegerlos mejor-.

Esto confundió a los tres hombres humanos, y nuevamente fue Paolo quien habló por los tres.

-Disculpe su majestad, le ruego no lo tome como una ofensa pero, ¿a que se refiere?-.

-A mis amigos- respondió al instante, haciéndolos suspirar de sorpresa a los tres mientras los ojos de Erica se abrían en comprensión -siempre pasa algo peligroso a nuestro alrededor- y bajando un poco la voz, apenado, admitió -varias veces es por mi culpa, por tener la [Booster Gear], pero ahora, con este poder, podré protegerlos mejor- aseguró, provocando que el aliento dejara los pulmones de los tres hombres al ver la decisión en sus ojos.

Nunca esperaron encontrarse con un Campione con tanta determinación de proteger ni con tanto cariño a sus conocidos (por que era algo que resaltaba con facilidad en su mirada), ni siquiera Lady Ashia quien era conocida por ser la más benevolente de los Campioni, ni John Pluto Smith quien mostraba completa dedicación a su "profesión" como héroe en Estados Unidos, mostraban tal voluntad o aprecio.

Tomó un momento de silencio para que Paolo recuperara el control sobre si mismo y sonrió completamente relajado por primera vez en todo el día -ya veo, me alegro por usted, su majestad-.

-Ah, enserio, no me acostumbro a eso- comentó apenado mientras se rascaba la nuca – Paolo-san, ¿podría dejar de lado todo el asunto de majestad y las formalidades?, me siento incomodo-.

-Hyoudou Issei, eres un rey. Es natural para nosotros tomar máximas precauciones para respetar tus deseos tanto como sea posible. También es deber de un rey aceptar el respeto que ofrecemos como caballeros. Sin embargo, sus intenciones de practicidad son apreciadas enormemente- fue la respuesta del caballero legendario.

-¿Respeto?- musitó apenado el Campione rascándose la nuca -supongo que era algo que debía esperar, pero no me acostumbro tan rápido a eso- reconoció. Se había hecho un poco a la idea de ser tratado así con los Gremory, y estaba seguro que recibiría aun más respeto cuando se volviera un demonio de clase alta, pero esperaba que eso tomara su tiempo por lo que se acostumbraría sobre la marcha, esto era muy repentino para su gusto.

-Entiendo que puede ser problemático para usted, alteza, pero lo que le ofrecemos a todos los Campioni es el mayor temor y reverencia. No importa cuál sea el temperamento que puedan mostrar, son los que tienen experiencia más allá de lo que los humanos podemos aspirar a obtener, portadores de grandes logros dignos del título exterminador de dioses-.

Paolo detuvo un momento su explicación con su vista fija en la de Issei, quien asintió entendiendo su punto, antes de continuar.

-Por otra parte, incluso sin tener en cuenta el respeto ofrecido a todos los reyes demonios, desde un punto de vista personal, me gustaría ofrecerle a Hyoudou Issei el máximo apoyo. Esto para Europa es evidente, pero también se extiende a cualquier parte del mundo-.

-¿Eh, enserio?- preguntó sorprendido el castaño, y no era el único, los dos otros hombres humanos se mostraban igualmente incrédulos, solo Erica y los tres lideres sobrenaturales sonrieron.

-Si, eh pasado las ultimas horas conversando con sus aliados- le explicó señalando a Miguel, Azazel y Sirzechs quienes asintieron -y con mi querida sobrina, y tras conversar con usted tengo la certeza de que formar una alianza con un Campione genuinamente interesado en una alianza de paz entre distintas facciones es una de las mejores acciones a tomar- le aseguró.

-Claro, asumiendo que aun tengas intenciones en apoyar a la alianza, Issei- intervino Azazel desde su lugar.

Era un punto importante. Antes, pese a que tenia influencia al ser el Sekiryuutei, era el sirviente de Rias, no tenia influencia notoria así que su opinión era, hasta cierto punto, prescindible. Ahora era distinto, ahora era uno de los reyes de la humanidad, los infames Campioni, con el poder e influencia necesaria para iniciar un conflicto a gran escala con alguna otra facción.

Aunque claro, este tema no les preocupaba a ninguno de los tres seres sobrenaturales presentes.

-¿Por que no querría apoyar a la alianza?- preguntó extrañado el castaño.

-Bueno, los Campioni son enemigos naturales de los dioses y seres sobrenaturales de gran poder, no seria de extrañar que desarrollaras una aversión hacia nosotros o hacia la alianza tras volverte uno- le explicó Miguel.

-Pero bueno, ahora tenemos a un Campione apoyándonos, esto será muy bueno en un futuro, por ahora sera algo muy problemático- continuó Azazel.

-¿Problemático?-.

-Si, después de todo, todas las facciones temen a los Campioni, podría ser contraproducente si declaramos abiertamente que hay uno de nuestro lado- explicó el Cadre -necesitamos mejorar las relaciones con otros grupos antes de revelar esto-.

-El problema es que la energía que emites ahora es muy notoria Ise-kun- continuó Sirzechs -si la dejamos sin restringir, cualquiera podrá discernir que eres un Campione, necesitaremos sellar tu poder y mantener esto en secreto, al menos por un tiempo-.

-¿En verdad es tan complicado?- preguntó confundido el rey, no terminando de entender.

[Si, el temor puede segar a cualquiera, y no hay nada que los dioses teman más que a los Campioni] intervino Draig de forma en que todos lo escucharon [para colmo, también eres mi portador y tienes el [Grimorio de Prometeo], si esto se revela sin más, no debería de sorprendernos que, no solo se nieguen a empezar negociaciones, si no que inclusive terminen formando alianzas entre ellos para atacar a las tres facciones Católicas]

-¿Draig?-.

[Perdona la tardanza compañero, estaba analizando las autoridades que tomaste de esos dos]

-Oh, cierto, es un punto importante- exclamó Azazel irguiéndose en su asiento con mucho interés -¿que descubriste?-.

[Compañero] llamó el dragón, procurando que solo su portador lo escuchara [¿está bien si hablo aquí? Los humanos parecen ser de confianza, pero nada nos garantiza que esos tres no se vuelvan nuestros enemigos en un futuro]

Issei parpadeó un poco ante eso, pero respondió sin dudas -esta bien, no creo que tengamos que pelear contra ellos-.

[Si tu lo dices] aceptó antes de volver a hablar para todos [Son autoridades interesantes…]

Sin embargo, una sensación extraña se extendió por las columnas de los cuatro lideres de facciones presentes. Issei, siendo la primera vez que la sentía, parpadeó confundido y miró en todas direcciones, sintiendo en sus instintos que había un oponente formidable cerca. Por el contrario, más familiarizados con la sensación, Sirzechs, Miguel y Azazel se pusieron de pie con absoluta seriedad en sus facciones.

Antes de que alguien dijera nada, las puertas del comedor se abrieron de golpe y un hombre en traje entró rápidamente, se veía muy apurado -¡Señor Paolo!- llamó con voz agitada.

Entrecerrando los ojos ante las reacciones de los 4 lideres, el caballero se puso de pie y encaró a su subordinado -¿Qué sucede?-.

-¡Lord Salvatore, ah llegado, y se acerca rápidamente!- exclamó entre suspiros, ahora todos, incluyendo a Issei, estaban de pie -dice, querer conocer a su nuevo "hermano", y parece que, los sintió a ellos- dijo señalando a los tres no-humanos.

-¿Qué hay de Sir Rivera?- inquirió alarmado.

-¡No se sabe!- Ante eso, el caballero se giro rápidamente hacia Sirzechs y compañía.

-Nos retiramos ahora mismo- informó el demonio recibiendo un asentimiento de Paolo antes de girarse al castaño -Ise, me temo que debes quedarte, si te está buscando, podría ser malo para [Copper-Black Cross] que no estés cuando él llegue-

-Entiendo- asintió.

-Buena suerte, si las cosas van a mal y necesitas apoyo, llamame por medio del enlace- le indicó Azazel antes de que los cuatro desaparecieran a su manera.

-Su majestad- llamó Paolo al castaño -le pido se prepare, su congénere, Lord Salvatore es alguien, especial-.

Parpadeando confundido ante eso, Issei no pudo preguntar nada puesto que, en ese momento, las puertas volvieron a unirse y por estas entró un joven apuesto en sus veintes, de cabello rubio y ojos verdes, vestido de ropa veraniega y cargando un estuche grande con tranquilidad, pese a que dicho estuche le enviaba una mala sensación al castaño.

-¡Buenas!- saludó con total tranquilidad, sin dirigir su vista los humanos presentes que se arrodillaron ante él con la vista fija en el suelo, aunque Erica primero se colocó al lado de Issei antes de inclinarse y ni de lejos tanto como los adultos presentes -escuché que mi nuevo hermano menor está aquí- comentó fijando su vista en el único que seguía de pie e interrumpiendo el saludo que Paolo quería darle -¿Eres tú?-.

-¿Hermano menor?- preguntó confundido.

-Se dice que los Campioni somos los hijos ilegítimos de Pandora, lo que nos vuelve a todos hermanos de una u otra forma- respondió con suma tranquilidad poniéndose frente a él a unos metros -¿Entonces, eres tú?-.

-Ah, si, soy Hyoudou Issei- se presentó el castaño.

-El Séptimo Campione- aportó Erica a su lado, aun arrodillada pero con su mirada fija en el rey italiano.

-Mucho gusto, soy Doni Salvatore, llamame Doni- saludó alegremente mientras le tendía la mano -Ustedes los japoneses dicen el nombre después del apellido, ¿no? Entonces tu nombre es Issei, ¿puedo llamarte así?-.

-Ah, si, está bien- asintió tragándose todo su odio hacia los chicos guapos y dándole la mano. De momento parecía ser alguien agradable y algo atontado, en cierta forma le recordaba un poco a Kiba y Xenovia. Sonrió levemente ante ese pensamiento, el podía volverse un buen amigo…

-¡Perfecto!- exclamó contento el rubio con una gran sonrisa que fue respondida por el castaño -¡Conmemoremos nuestro primer encuentro con una pelea!-.

-...¿eh?-.

-Un combate- repitió abriendo su estuche y sacando de el una enorme espada de dos manos. Por la sensación Issei sabia que era una espada normal, pero había algo que lo ponía en alerta, especialmente cuando Doni la empuño con total tranquilidad y la apoyó en su hombro -peleemos aquí y ahora-.

-¿Por qué?- preguntó confundido Issei.

-Por que es divertido- respondió encogiéndose de hombros haciendo que Issei abriera los ojos incrédulo.

Concedido, Issei también disfrutaba de una buena practica con Kiba o con Saji, y mentiría si dijera que no tenia el más mínimo interés de combatir contra Vali en una situación controlada, pero no quería decir que estuviera dispuesto a pelear con alguien que apenas conocía simplemente por diversión.

-Ademas, cuando me enteré de la presencia de Melkart y Verethragna me emocioné mucho, pero no pude enfrentarlos gracias a ti, considera esto como una compensación-.

-¿Eh? Pero, ¡No había tiempo, destruirían toda Cerdeña antes de que llegaras!- reclamó incrédulo el castaño.

-Pero esos dos seguirían vivos y aun podría pelear con ellos, o contra el ganador- "refutó" Doni.

-Este, este tipo es igual que Vali o Verethragna, ¡son unos soberbios idiotas belicosos!- masculló mentalmente molesto, tirando a la basura todo intento de ser amistoso con él, simplemente no podía tolerar a alguien tan deseoso de combatir como para ignorar y/o desestimar a los inocentes -olvidalo, no pelearé contigo- negó de forma cortante, provocando que los humanos presentes aguantaran la respiración y se preparan.

-¿Eh? ¿Por qué?- preguntó algo deprimido.

Pero Issei no le respondió, simplemente se giró y caminó a la salida.

-Eh, una lastima- suspiró Doni antes de girarse a Paolo -por cierto, sentí tres poderosas presencias cuando venia aquí que desaparecieron rápidamente, ¿que pasó?-.

Su pregunta logró detener en el acto a Issei, quien volvió a verlo alerta. Algo le daba mala espina.

-Eran aliados de su majestad, Hyoudou Issei-.

-¿Es así? ¿Quienes eran?-.

Paolo se mostró recio a responder, pero las ordenes de los Campioni eran absolutas para los humanos -el Arcángel Miguel, el Cadre Azazel, y el Rey Demonio Sirzechs Lucifer-.

-Oh, vaya, interesantes aliados- comentó impresionado -hubieran sido un buen combate, ¿por que no los entretuvieron hasta mi llegada?-.

Los humanos tragaron duro ante eso, y las gotas de sudor empezaron a bajar por el rostro de Paolo, pero aun así habló con claridad.

-Por que nosotros, [Copper-Black Cross], hemos jurado obediencia a Hyoudou Issei-.

Eso sorprendió a todos, incluyendo a los dos Campioni, pero los humanos comprendieron rápido. Al decir eso, dejaba en claro que la organización ahora le pertenecía a Issei, lo que le daba cierta protección ya que, cualquier amenaza contra esta seria también contra Issei, lo que podría terminar en un conflicto mayor. Eso bastaría para mantener a raya a muchas organizaciones enemigas o terceros.

Pero tratándose de un Campione, las cosas no eran tan sencillas.

-Ya veo, entonces me traicionaron- musitó Doni, levantando su espada, lo que espanto a los humanos y alarmó a Issei -en ese caso, hora de la represalia-.

[Booster Gear]

[Balance Breaker: Welsh Dragon Scale Mail]

-¡Como si fuera a dejarte!- masculló furioso Issei cargando en un instante y lanzando un feroz golpe a la quijada del rey quien se cubrió rápidamente con su espada, evitando el daño y siendo lanzado contra una ventana a gran velocidad, fuera del edificio.

-¡Ise!- exclamó apurada Erica mientras los otros humanos presentes lo miraban incrédulos.

-¡¿Tienen alguna forma de sacarlo de aquí?! ¡¿Transportarlo a una montaña o a una dimensión de bolsillo?!- preguntó apurado el castaño.

-¡No disponemos de un circulo para transportar a un Campione!, ¡mucho menos una dimensión de bolsillo!- le negó la rubia apurada.

Tanto tiempo con los demonios terminó por pasarle factura a Issei, haciéndole creer que los círculos de transporte y las dimensiones de bolsillo eran cosas comunes cuando en realidad, eran pocas las organizaciones mágicas con la capacidad de realizar algo por el estilo, y aun entre las que podían, solo eran algunos pocos (en comparación a sus números generales) miembros los que tenían esa capacidad.

-¡Entonces yo me encargo de él!- afirmó Issei extendiendo sus alas y saliendo por la ventana.

-¡¿Dos Campioni peleando?! ¡Todo será reducido a cenizas!- exclamó alarmado Genaro.

-¡Empiecen la evacuación de la sede y los alrededores!- comandó rápidamente Paolo -¡yo iré a buscar a Rivera!-.

Con eso los hombres asintieron y salieron presurosamente del comedor sacando celulares y empezando a llamar rápidamente a otros miembros.

-¡Erica…!- empezó cuando solo él y su sobrina estaban presentes, solo para ser interrumpido por ella misma.

-Iré con él, podría necesitar apoyo- le afirmó mirándolo directamente a los ojos con total certeza, tal que aturdió por completo a su tío.

-...Está bien- aceptó con algo resignación -ve, pero ten cuidado-.

-Lo tendré- con eso, un circulo mágico cambió su vestido por su atuendo de combate y su amada espada ropera apareció en su mano. Rápidamente se dirigió a la ventana y salto sin mostrar el más mínimo miedo o aprensión.

(Con Issei y Doni)

-Ese fue un buen golpe, casi sentí un cosquilleo en mis brazos- comentaba para si mismo el rey de la espada de pie en medio de la "plaza" frente a la sede con una sanja bajo y frente a él, producida al derrapar con sus pies para frenar su avance, con decenas de hombres y mujeres huyendo despavoridos a su alrededor.

En ese momento salio el castaño en su armadura y descendió rápidamente, aterrizando a unos metros frente a él.

-No pensé que eso fuera suficiente para hacerte pelear, me alegro- sonrió el rubio.

-¿Fue actuado? ¿No ibas a atacarlos?- preguntó sorprendido su oponente, se veía tan determinado a atacarles…

-Pues en parte, pero no importa ya, ¡Empecemos!-.

-¡Seras…!-.

[¡Compañero, calmate!] le reprendió Draig [ya no hay vuelta atrás, debemos tener cuidado, nos enfrentamos a alguien dentro de los 100 más poderosos, aun si nosotros también estamos en esa lista ahora, él lo ah sido por mucho más tiempo, tenemos las de perder]

-Tienes, razón- asintió calmándose un poco -no podremos con él solo con el [Balance Breaker] ¿verdad?-.

[No lo creo]

-Entonces necesitaremos esas autoridades- comprendió, sintiendo su instinto gritar por alguna acción en especifico que no comprendía del todo, como si quisiera incinerar por completo al espadachín frene a él -¿Como las uso?-.

[No estoy del todo seguro, es la primera vez que me topo con esto compañero, pero me hice una idea general de lo que hacen: la de Melkart te deja controlar la tormenta, y la de Verethragna te deja usar las 10 encarnaciones]

-Entonces, ¿lo que usamos contra esos dos, lo puedo usar?-.

[[White Stallion], si, está disponible, al igual que otras dos formas más. Siento que hay tres más disponibles y a la vez no, como si algo las retuviera, dos más están disponibles pero no siento que tengan utilidad en combate, se sienten muy pasivas, y las dos restantes estan bloqueadas]

-Eso es problemático- masculló mentalmente -Analizalas un poco más, iremos con la [Booster Gear] por ahora- le indicó guardando sus alas.

[Entendido]

[Boost]

Con eso, los propulsores a su espalda estallaron en un instante y se lanzó de frente contra Doni a gran velocidad.

-Oh vaya, eres muy rápido- comentó impresionado el rubio empuñando su espada con ambas manos y preparándose.

[Boost]

Una vez frente a él, Issei lanzó un golpe con toda la fuerza que pudo acumular en su puño derecho, pero Doni simplemente dio un paso a la izquierda, dejando el golpe pasar de largo.

Abriendo los ojos como platos bajo su máscara, el castaño observó la espada venir rápida e inmisericorde con claras intenciones de partirlo en dos. Reaccionando rápido, saltó como pudo, arqueándose de espaldas y dejando el filo pasar a escasos centímetros de la armadura sin tocarla, o eso creyó.

Alejándose con dos Flic-Flac, Issei retrocedió varios metros y cayó de rodillas, llevándose una mano a la espalda baja donde podía sentir un profundo y algo doloroso corte que iba de lado a lado.

-Este tipo…- masculló adolorido y algo incrédulo. Aunque Doni no parecía ser tan veloz como Kiba, apenas y pudo reaccionar a ese corte. Un segundo más y lo habría partido en dos.

[Boost]

[No lo subestimes compañero] le reprendió Draig antes de notar algo [un momento, una encarnación más está disponible, creo que fue en cuanto te daño]

-¿En serio?-.

-Vaya, no está mal, esquivaste muy bien- le felicitó Doni -¡Vamos, apenas estamos iniciando!- con eso, salió disparado a una velocidad moderada contra Issei, pero su juego de pasos fue tal que, para cuando el castaño se dio cuenta, estaban cara a cara a poco más de dos metros.

-¡¿Qué?!-.

Retrocediendo un rápido paso para evitar ser decapitado, Issei se encontró completamente a la defensiva esquivando corte tras corte dirigido en su contra, cada uno con una técnica por mucho superior a la de cualquier espadachín que hubiera visto hasta la fecha y sus heridas no dejaban de aumentar, cortes aquí y allá que eran cubiertas en cuanto la armadura se regeneraba.

-¡Kuso! ¡Si tan solo pudiera responder!- maldijo antes de que algo hiciera clic, y siguiendo sus instintos, recitó -¡El gran símbolo de mi poder, es el del camello feroz!-.

[Persian Warlord: Camel]

-¿Oh?- notando el flujo de energía en su oponente cambiar, Doni observó con interés al tiempo que lanzaba un corte descendente con todas las intenciones de partirlo en dos…

[Boost]

… mismo que fue desviado por el nuevo rey, quien había pateado la hoja donde no tenia filo y la dirigió a un costado, provocando que esta conectara con el suelo generando un corte que se extendió varios metros. Siguiendo con su movimiento, Issei pateó con fuerza el abdomen del rubio, mandándolo disparado de espaldas hasta que se estrello contra un edificio a varios metros de distancia, atravesándolo y siguiendo de largo, estrellándose en otro más y finalmente parar.

-...¿Eso fue?- murmuró sorprendido Issei, no sabiendo de donde había salido aquel verso o aquella fuerza.

[Parece que es la cuarta encarnación, el camello]

-¿Esa fue una?-.

[Correcto]

En eso, los escombros del segundo edificio explotaron y de estos salio Doni quien mostraba una sonrisa alegre y, por todo daño, mostraba algunas manchas de tierra -¡Muy bien, de eso estaba hablando!- exclamó emocionado, siendo escuchado por Issei desde donde estaba.

Con un impulso, Doni salió disparado contra Issei quien simplemente se preparó para recibirlo.

[Boost]

[Espera compañero, hay algo mal aquí]

Sin poderle responder, Issei salió al encuentro del rey de la espada, saltando a un par de metros de él, esquivando un corte horizontal y lanzando una patada directa a su rostro, que el espadachín esquivo agachándose y girándose rápidamente, abanicando su espada con intenciones de cortarlo a lo ancho de la espalda, solo para que el pie del castaño cayera sobre la punta, clavandola a tierra.

[Boost]

Alzando el otro pie, Issei se preparó para patear a Doni en la cara -¡Blug!- cuando un intenso y un tanto familiar dolor se regó por su cuerpo y tosió algo de sangre que se escapo por entre la máscara. No frenándose ante eso, Doni retrajo su espada y lanzo un corte en su contra, dando de lleno.

Con una herida profunda atravesando todo su torso, Issei salio disparado contra otro edifico, destruyendo la fachada por completo y siendo enterrado en alguna parte de su interior. Instantes después movía los escombros sobre él, dejándolos caer a su lado mientras sentía como la autoridad se desactivaba forzosamente...

[Reset]

... al mismo tiempo que las cargas que tenia desaparecían.

-Eso, fue- empezó incrédulo.

[Intoxicación por sobrecarga poder] confirmó Draig

-Pero, no había pasado desde que logré el [Balance Breaker]…-.

[Ahora las cosas son distintas, tu cuerpo se adaptó para resistir tus autoridades, y en consecuencia la cantidad de impulsos que puedes cargar también aumentó, pero parece que no puedes usarlos al mismo tiempo, tu cuerpo no lo soporta aun]

-¡Aquí estas!- exclamó Doni entrando en la destruida sala con la espada descendiendo en un corte implacable que Issei no podría esquivar como estaba en ese momento.

Al mismo tiempo en que el castaño notaba la velocidad de ese corte, sus instintos gritaron y en su mente, apareció la imagen de un ave de presa volando en el cielo.

[Persian Warlord: Bird of Prey]

Tras eso, ante los ojos del castaño, todo empezó a moverse extremadamente lento, incluyendo la espada del rubio. Rápidamente, Issei se alejó de él, pero no estando acostumbrado a su nueva velocidad, salió disparado y se estrelló contra el muro a sus espaldas, atravezandolo con facilidad.

-¡Ite!- masculló levantándose de nuevo -¿Eso que fue?-.

[Parece la Séptima encarnación, el ave de caza]

-¡Es una locura!, ¡nunca me moví así de rápido!-.

-¡Vaya! Eso fue mucho más rápido que antes ¿También tienes una autoridad de velocidad?, tienes una gran variedad de habilidades- comentó impresionado Doni -pero si solo se trata de velocidad, no es suficiente-.

Nuevamente, el Campione rubio se movió contra él, entrando en la sala en la que estaba con su espada en lo alto. Issei flexionó las piernas y se movió a una velocidad imposible, desapareciendo de la vista de una persona normal, pero Doni no se preocupó, solo tomó una postura de esgrima con su espada firmemente sostenida ante él.

Issei, quien estaba tratando de golpearlo en la cara, se sorprendió cuando, no solo movió su cabeza a un lado con suma facilidad, si no que también tenia la espada completamente extendida, como si ya hubiera completado un ataque. Apenas terminó de procesar eso, escupió sangre y se llevó una mano al costado, donde la armadura destruida mostraba un profundo corte.

Rápidamente retrocedió varios metros con un impulso en conjunto de su autoridad y sus propulsores y se arrodillo, adolorido.

-¿Qué, fue eso?- jadeó por el dolor.

-Eso, es el resultado de mi entrenamiento de visión y corte- le comentó tranquilamente Doni, tomando una postura relajada -es bastante simple, durante la lluvia torrencial debo de enfocar una sola gota de agua y concentrarme solo en esa, luego viene el corte, si logro cortarla limpiamente en dos, apruebo-.

-¡¿Quien eres? ¿Assassin Sakaki?!- gritó incrédulo en respuesta .

-No, ¿que no me presenté ya? Soy Salvatore Doni- respondió encogiéndose de hombros -como sea, esta técnica, ¿creo que la llaman "El secreto de los ojos de la mente" en las novelas chinas? No estoy seguro, lo dominé por mi cuenta pero bueno, como decía es algo un tanto complejo, pero teniendo en cuenta que es simplemente cortar algo muy rápido en el menor tiempo posible, no me dio muchos problemas-.

-E-este tipo…-.

-En fin, sigamos- con eso, Doni volvió a cargar contra su oponente.

-¡Tch, [Dragon Shoot]!- cargando rápidamente una esfera de poder dragoniaco, Issei se la lanzó de frente, generando un torrente de energía pura en su contra.

En respuesta, el brazo derecho de Doni se volvió plateado y la espada empezó a brillar instantes antes de que el filo del arma se encontrara con el torrente de energía y lo partiera en dos, pasando por los costados del Campione y destruyendo un par de edificios a sus espaldas, sin embargo, Issei ya no estaba ahí.

Habiendo aprovechado la cobertura que su ataque le brindó, Issei había salido rápidamente del edificio y se encontraba corriendo lejos de ahí, tratando de poner algo de distancia entre ambos.

[¡Compañero, espera, algo va mal con tu…!]

-¡Gah!- en medio de su carrera, sintió un agudo dolor extenderse a lo largo y ancho de su pecho, especialmente en su corazón, era tan intenso que le obligo a caer de rodillas, derrapando un poco antes de finalmente parar junto a un edificio casi en ruinas, tosiendo ferozmente.

[...corazón] completó el dragón [parece que la aceleración del ave de caza es mucho para tu sistema cardíaco, especialmente en tu estado actual]

Eso tenia sentido, antes, cuando sufría por cargar demasiado poder, el envenenamiento le afectaba tanto que le tomaba cerca de una hora con Asia tratándolo para recuperarse lo suficiente para siquiera caminar y hablar con normalidad, ya ni se diga correr o pelear, el hecho de que fuera capaz de correr por tanto tiempo a esa velocidad ya era prácticamente un milagro, prueba de su anatomía superior actual.

-Genial, simplemente, genial- masculló tratando de recuperar el aliento, apoyándose en un pilar -¿Que sigue?-.

-¡Ise!-.

Escuchando a alguien llamarle, Issei se giró a tiempo para ver a Erica aterrizar a un par de metros de él, acercándose rápidamente a ayudarle a estar en pie con preocupación en su rostro.

-¿Erica? ¿Que haces aquí?- le cuestiono débilmente con una mano en el pecho.

-Vine a apoyarte, no podré pelear a tu lado, pero algo podré hacer-.

-¡Aquí estas!-.

Ambos se giraron alarmados al origen del grito, topándose con la imagen de Doni cayendo en dirección a ellos, habiendo saltado desde algún punto, con la espada en lo alto. Actuando en instinto, Issei empujó a Erica a un lado y él mismo dio un paso al costado, evitando por los pelos un corte que pudo partirlo en dos.

Siguiendo con su movimiento y aun presa de sus instintos, Issei se agachó y tomó el pilar en el que se había de la base apoyado y hizo ademan de levantarlo, algo que su conciencia no comprendía, puesto que tenia muy en claro que para lograrlo necesitaría como mínimo la fuerza de una torre o muchos impulsos, cosa que no podía hacer en su condición y situación actual, sin embargo…

[Persian Warlord: Bull]

… levantó con una facilidad abrumadora y, usándolo como bate de béisbol, golpeó a Doni quien tenia abiertos los ojos como platos por la sorpresa, siendo este lanzado a la distancia, atravesando cuadras enteras antes de detenerse, con toneladas de escombro sobre él.

-la segunda encarnación, el toro- musitó sorprendida Erica.

-¡Draig, ¿algo nuevo?!-.

[Un par de cosas, el toro, como resulta obvio, da una fuerza inmensa, parece que se limita a tu voluntad compañero, tenlo en cuenta, y el jabalí parece ser en extremo destructiva, pero creo requiere de algo, un objeto o ser, de gran tamaño como blanco, ah "resplandecido" cada vez que enfocabas uno de los edificios en los que ese tipo ah caído]

-¿Y la ultima que podemos usar?-.

[La décima encarnación, el guerrero, no estoy seguro, es muy compleja, pero siento que también es muy útil]

-Concentrate en esa, yo haré tiempo-.

[Entendido, suerte compañero]

-Bien, Erica…-.

-No me iré- le aseguró decidida, cortándolo.

Issei la miró sorprendido puesto que ahora comprendía bien que los humanos temían a los Campioni, y aun así, ella estaba más que dispuesta a ayudarle, sin embargo, se tragó su sorpresa y sonrió agradecido, mentiría si diera que no necesitaba ayuda.

-¿Tienes algo para mantenerlo quieto un momento?-.

-Tengo un par de trucos que podrían servir, pero solo nos conseguirá unos pocos segundos-.

-Es suficiente- le aseguró poniéndose de pie y mirando al frente, notando a un muy emocionado Doni acercarse a gran velocidad -¡Te lo encargo!-.

Con eso, los propulsores de la armadura se encendieron, saliendo al encuentro del Campione. A veinte metros del rubio, Issei golpeó con fuerza el suelo, levantando un enorme trozo cuadrado de la plaza en la que pelaban, tan larga como la distancia que los separaba y con unos tres metros de grosor, usándola a forma de muro, mismo que Doni cortó de un tajo, su brazo brillando en color plateado dejando en claro que estaba usando una autoridad, pero al otro lado de esa improvisada pared le esperaba el castaño con una roca del tamaño de un auto, la cual lanzó de frente, dándole al rubio justo en la cara y haciéndolo retroceder.

Bajando los brazos con los que se había cubierto, Doni se sorprendió enormemente al ver a Issei ante él, sujetando los dos enormes fragmentos de su improvisada barrera en sus manos y usándolos para aplastarlo. La roca salió disparada en todas direcciones ante la fuerza usada al tiempo que Issei alzaba el vuelo, cargando poder en una mano.

Dragon-Shoot!-.

El torrente de poder destruyó aun más la plaza en el suelo y generó una explosión que levantó más polvo y escombro, tardando un rato en asentarse lo suficiente para que se pudiera ver a Doni cubierto con ambos brazos y su espada, sus ropas hechas harapos en algunas partes y un leve rastro de sangre saliendo de la comisura de su boca y frente.

-Jeje, ah pasado un buen tiempo desde que alguien logró hacerme sangrar a base de pura fuerza física- comentó emocionado mientras miraba a Issei descender a tierra, cortando distraídamente, sin apenas ponerle atención, al enorme león plateado que se abalanzó desde su espalda, destruyéndolo con facilidad ante la tranquila vista de Erica quien, honestamente, lo veía venir.

En ese momento, los fragmentos del león de acero se movieron y círculos de alquimia se dibujaron bajo estos y rápidamente, una jaula se formó alrededor del rubio, limitando sus movimientos.

-¿En verdad pensaban contenerme con esto?- masculló con sorna mientras alzaba la espada, pero se detuvo al notar como la energía mágica de Issei incrementaba exponencialmente y este alzaba las manos sobre su cabeza, siguiendo su instinto, al tiempo que recitaba.

-¡Su columna puede ser aplastada, sus huesos pueden ser rotos, sus tendones desgarrados, su pelo arrancado de su cráneo, su sangre puede ser derramada sobre la tierra y ser revuelta en una espuma sangrienta!-.

[Persian Warlord: Boar]

Sobre la cabeza del nipón surgió una enrome brecha dimensional de la que lentamente surgió un titanico jabalí ante la sorprendida mirada de ambos reyes.

-No sabia que tenias ese truco…- comentó sorprendido el rubio instantes antes de que la bestia soltara un rugido abominable que sacudió toda la zona y cargara directamente contra él, aunque el gigantesco ser tenia su vista fija en un edificio a sus espaldas.

Pese a eso, el rubio se encontró envestido por la vestía, su espada separandolo de uno de los filosos colmillos de la bestia la cual dejaba la destrucción más absoluta a sus espaldas a cada paso que daba hasta que finalmente se estrelló contra el edificio más cercano, generando una explosión de escombro y polvo que cubrió toda la zona, con Doni saliendo disparado a la distancia, estrellándose en medio de una calle a casi un kilómetro de distancia y generando una enorme sanja antes de finalmente parar.

-Wow- murmuró sorprendido el castaño mientras Erica se apresuraba a su lado rápidamente.

[Compañero, lo tengo]

-¿Qué es, Draig?- preguntó su portador mirando a su brazo con la rubia escuchando a ambos hablar.

[La décima forma es la espada dorada que Verethragna usó contra Melkart, es una espada capaz de cortar lo divino, debería de permitirnos bloquear la autoridad de ese tipo]

-¡¿Enserio?!- preguntó entre incrédulo y emocionado.

[Si, pero me temo que está limitada, como el resto de las encarnaciones, ¿Lo notaste?]

-Si, se sienten descargadas, como si fueran de un solo uso- asintió el castaño.

-Me recuerda a una autoridad del rey de Estados Unidos John Pluto Smith, le toma un ciclo lunar recargar una de sus autoridades, dicha autoridad es proveniente de un dios lunar- aportó Erica.

[Dado que Verethragna es un dios solar probablemente nos tome un día entero para poderlas usar de nuevo, sin mencionar que parecen tener condiciones para usarse, como es el caso de la décima forma]

-¿cual es?-

[Conocimiento, necesitamos saber de que dios proviene la autoridad]

-En ese caso- intervino la rubia, atrayendo la atención de ambos -[Ripping Silver Arm], la autoridad que le da el brazo de plata para volver lo que toque en una espada bajo su control, la obtuvo del Rey de los Tuatha de Danann, Nuada, y [Man of Steel], que lo protege del daño y lo hace casi invencible, del legendario héroe, Siegfried-.

Apenas dijo eso, tanto Draig como Issei sintieron un cambio en su interior, aunque uno leve.

[Parece que vamos por buen camino, pero no es suficiente, necesitas más conocimiento compañero]

-¿No sabes nada de ellos?- inquirió el castaño.

[No mucho, solo detalles generales que aprendí con mis anteriores portadores ya que nunca les dí mucha importancia, pero de todas formas no sirve que yo sepa de ellos, la autoridad es tuya, no mía, tu eres el que debe obtener la llave para usarla, en este caso, el conocimiento]

-¿Qué tanto?-.

[Comprensión absoluta del dios]

-Es demasiado, uno solo supone decenas de libros, no tenemos el tiempo para que lo estudie…- murmuró frustrada Erica, pensando como proceder, hasta que sus ojos se abrieron como platos ante una idea, y su rostro se puso rojo -creo que, tengo la solución- empezó lentamente, recuperando el control sobre sus emociones -pero debemos decidir a cual atacaremos, no creo que podamos hacer algo contra ambas a la vez-.

Eso puso a pensar a Issei, por un lado estaba la autoridad que lo protegía de todo, por el otro estaba su poder de ataque. A primera vista lo mejor seria eliminar [Man of Steel], pero que pudiera hacerle daño no significaba que pudiera tocarlo (especialmente con su ridícula velocidad de reacción) o sobrevivir a su espada, ademas fue capaz de cortar un Dragon-Shoot con su espada por lo que nada aseguraba que no pudiera usarla para protegerse en distintas situaciones, por otro lado, sin [Ripping Silver Arm] perdería lo que parecía ser su principal forma de atacar, ademas de que sin esa autoridad Issei esperaba que su armadura pudiera resistir mejor sus ataques.

[¿Tiene otra autoridad para atacar ademas de [Ripping Silver Arm]?] inquirió Draig pensando igual que su portador.

-No, esa es la única forma que puede atacar de frente, pero no por eso debe ser subestimado- fue la respuesta de la espadachina, y tenia razón, después de todo, Doni logró matar a un dios cuando era un humano sin el más mínimo talento para usar magia ni de disponer de un arma legendaria, el que no pudiera usar más de una autoridad para atacar no significaba que fuera un enemigo débil.

-Entonces vamos con Nuada- decidió Issei con seguridad, aunque se confundió al ver como la rubia se volvía a sonrojar -¿Erica?-.

La rubia no respondió verbalmente, solo ce acercó, rodeó su cuello con sus brazos y, ante la incredulidad del castaño, lo besó.

Demasiado ocupado en memorizar la sensación de sus labios contra los suyos o en responder inconscientemente al feroz baile en que sus lenguas estaban enfrascadas, a Issei le tomó unos instantes notar la masiva cantidad de información asaltando su cerebro.

(Con Doni)

-Vaya, eso fue en verdad bueno- comentó impresionado el rey de la espada, escupiendo algo de sangre a un lado antes de ponerse de pie de un movimiento y correr emocionado de regreso al campo de batalla en linea recta, cortando en dos lo que sea que estuviera en su camino: autos, edificios, monumentos, si estaba frente suyo era un obstáculo que debía y fue cortado.

Le tomó unos instantes pero finalmente volvió a donde su oponente actual esperaba. Notó que se encontraba besando a una joven rubia que no reconocía (no que le importara la identidad de un simple humano incapaz de darle una pelea decente) pero no le dio importancia y siguió con su carga, alzando su espada a pocos metros de ambos con su brazo brillando intensamente en plateado, cuando un intenso resplandor dorado surgió de entre el punto de contacto entre ambos, sus labios, inundando fácilmente todo el mundo a su alrededor y engullendolos a los tres.

[Persian Warlord: Warrior]

Cuando ambos rubios volvieron a abrir los ojos, se impresionaron al verse en algún tipo de dimensión de bolsillo o algo similar, puesto que no podía ser llamado de otra forma. El lugar era una imponente tierra similar a un desierto o prado rocoso con varios pilares de roca por el lugar, toda la tierra y roca era de color dorado y parecía ser de noche, iluminado por el brillo de la tierra misma y lo que parecían ser estrellas doradas que flotaban por todas partes.

-Esas, no son estrellas- musitó hipnotizada Erica, notando como lo que flotaba en el lugar y surgía de la misma tierra eran magnificas espadas europeas de hojas bastante anchas tan doradas y brillantes que bien podían ser pasadas por estrellas o el propio sol a la distancia.

-¡Woah, son muchas espadas!- comentó impresionado y emocionado el cabeza hueca -¿Que puedes hacer con ellas? No parecen ser espadas normales en ningún sentido-.

-En la antigua Irlanda, se cuentas historias de la llegada de la gente de las estrellas, con ansias de conquistar la tierra que entonces le pertenecía a los Fir Bolg, los Fir Domnann, los Galioin y los Fomoró, en lo que se conoció como la quinta invasión- estando en una especie de transe, Issei recitó con elocuencia empuñando una espada bastarda con su mano derecha, y en respuesta a sus palabras, las espadas flotando apunaron al impresionado rey espadachín -esos conquistadores fueron los Tuatha dé Danann, liderados por varios gloriosos reyes entre los que se destacaba el magnánimo rey, Duana-.

Al instante y con una velocidad propia de las saetas (flechas), una enorme cantidad de espadas descendió contra el rey italiano quien empezó a esquivar y contraatacar con una fluidez sorprendente, su brazo brillando intensamente en plateado.

-Impresionante, ¿puedes controlar todas estas espadas?- preguntó Doni bloqueando cinco espadas seguidas con la propia.

-Tres veces fueron las que la gente de la diosa Danu combatieron en tierra Irlandesa, siendo su primer encuentro contra los Fir Bolg quienes se opusieron a la oferta de compartir las tierras, encuentro en el que, tras días en las que su ejercito colisionó una y otra vez contra el ejercito del rey enemigo Eochai, el propio Duana, propuso culminar el conflicto con un combate entre los mejores diez guerreros de cada bando, y en un trance de furia guerrera inducido por la diosa de la guerra Morrigan, se enfrentó al campeón enemigo Streng-.

-Un momento, ¿esto que es?- musitó sorprendido el rubio, notando como, ante cada colisión entre su espada y las espadas enemigas, su brazo empezaba a brillar cada vez menos y algo de fuerza le abandonaba, y todo pese a que había logrado evitar que las espadas doradas le cortaran. Sin embargo, esa hazaña se volvía cada mes más difícil, no solo por la súbita debilitación de su brazo, si no por que cada vez más espadas volaban contra él, acorralándolo lentamente.

-En la contienda, pese a que el rey enemigo, Eochai, sucumbió, el propio Duana perdió el brazo derecho ante Streng, y con el, su derecho a ser Rey. En un intento de ayudarle a recuperar su derecho sobre el trono y poder derrocar a su suplente, el tirano Bres, híbrido de los Danann y los Formorian, el dios Diancecht en conjunto a los herreros Goibniu le forjaron un brazo plateado para reemplazar el perdido, pero el brazo de plata solo le permitió volver a empuñar su espada de luz, Claimh Solasis-.

-Esto es un tanto problemático- musitó algo apurado Doni mientras corría por todo el lugar, esquivando espadas que salían disparadas de todas partes, incluyendo del suelo mismo, usando tan poco como le era posible su espada -y ese truco podría terminar empeorando todo, aunque igual y tengo que cargarlo…-.

-No fue si no hasta que el hijo de Diancecht, Miach, logró regenerar el brazo natural de Nuada que este logró recuperar su derecho al trono, mismo que ocupó por veinte gloriosas años, hasta que conoció su fin a manos de Balor y su "ojo maldito"- sacudiendo la cabeza, Issei pareció por fin liberarse del estado en el que estaba y enfocó seriamente a su oponente -es ahí donde radica el secreto de tu brazo plateado, puesto que Duana fue conocido como "el de brazo plateado", el cual le permitió volver a empuñar su sagrada espada-.

-Oh, oh- murmuró el rubio notándose al centro de un torbellino de espadas doradas sin ninguna vía de escape, no notando como Issei había alzado el vuelo y lo miraba por el "ojo" del tornado mientras varias espadas volaban hacia la que empuñaba y se unían, aumentando enormemente de tamaño.

-¡Tu brazo derecho infunde lo que sea que toque con la esencia de la resplandeciente Claimh Solasis, la implacable espada de la que nadie puede huir!- rugió el castaño mientras descendía con velocidad contra el rey, quien, ocupado en vigilar atentamente las espadas a su alrededor, levantó demasiado tarde la vista, no pudiendo hacer nada para evitar la hoja ante sus ojos.

Nuevamente un destello dorado inundó todo el lugar, antes de que se volvieran a encontrar en la destruida plaza, con Doni derribado en la tierra, mirando al cielo con los ojos abiertos de par en par, a Erica mirando todo sorprendida, y a Issei aun erguido si bien respirando con dificultad, dejando ir la espada, ahora de color bronce, en su mano derecha, desvanecimiento en partículas de luz.

-¿Se, terminó?- preguntó exhausto el castaño.

-Jeje, no me esperaba eso- comentó entretenido Doni mientras se ponía de píe, sacudiéndose la ropa -no puedo usar mi brazo, al menos por ahora- comentó viendo su brazo unos instantes antes de volver a levantar su espada -bueno, sigamos- y con eso, salió disparado contra Issei.

-Tch- chasqueando la lengua, Issei cargó en su contra, bloqueando la espada con el guantelete derecho, logrando resistir aunque las grietas se regaron a lo largo de la pieza de armadura, permitiendole golpear a su oponente en la nariz, pero para su frustración, no se veía muy afectado -¡Dragon-Shoot!-.

-Huh- con un ademan de su espada, el rubio cortó el torrente de energía sin muchos problemas -esa armadura tuya es bastante buena, y has mostrado muchos trucos muy interesantes, incluso lograste sellar una de mis autoridades- comentaba amenamente -ahora que uno de mis trucos está listo, es mi turno, ¡Oh sacerdotisas de Dionisio, embriagense con el vino de los dioses!-.

[Boost]

-¿Qué?- musitó confundido el castaño, apenas y habiendose tensado un poco ante las palabras de su rival.

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

[Boost]

-¡Draig, es demasiado!- gritó el castaño envuelto en una temible aura de poder que seguía aumentando sin control, generando intensas corrientes de viento y una presión abrumadora mientras caía de rodillas y escupía sangre, los impulsos cargándose uno tras otro.

[¡No soy yo, la [Booster Gear] está fuera de control!]

-¡Vaya, no me esperaba eso!- comentó Doni, quien se mantenía erguido con calma junto a él -¿te gusta? Es mi autoridad [Divine Confusion], hace que los poderes de mis enemigos se salgan de control, pero es algo difícil de controlar, incluso para mí-.

-Seras…- masculló con dificultad el castaño mientras el casco de la armadura se desmoronaba.

-Bueno, fue divertido- comentó alzando su espada, listo para decapitarlo.

-¡Ha!- cuando una lanza plateada voló rauda y chocó contra la espada del rey, desviando el corte y salvandolo, dándole el tiempo suficiente para que él y su compañero actuaran.

[Explosion]

[¡Compañero, ahora!]

Dragon-Shoot!-.

Un intenso torrente de poder surgió del puño del castaño, lanzando por los aires al rubio y desintegrando cualquier otra cosa que tocó.

[Reset]

El ataque y la distancia fueron suficientes para liberarse del efecto del ataque enemigo, por lo que Issei y Draig recuperaron el control de la armadura.

-Draig, ah, ha, terminemos, con esto- habló con dificultad el castaño, volviéndose a erguir mientras palabras surgían en su mente.

[Concuerdo]

-Yo soy, el gran rey, derrocador de tiranos, asesino de dragones, protector del pueblo, mi aliento personifica la intensidad del ciclón, mi voz resuena con la fuerza del trueno, mi sangre fluye con la indomabilidad del mar,- empezó a recitar una vez completamente erguido, sus ojos brillando en dorado con la pupila en rendija de color jade -¡Yo soy, el magnánimo rey de la tormenta!-.

[King of the Storm]

Una lluvia torrencial cubrió el cielo, con feroces torrentes de viento y truenos resonando en todas partes al tiempo que dos enormes garrotes aparecían en las manos del castaño, e instantes después, Issei salió disparado, dándole alcance a Doni con facilidad.

-¡Rah!- con un feroz golpe del garrote Yagarish envuelto en corrientes de aire, el rubio salió despedido contra una colina a la distancia.

-Ok, eso dolió- se quejó el rubio irguiéndose, solo para ver a Issei sobre él, Ayamari alzado sobre su cabeza y cargado de una ingente cantidad de electricidad.

El garrote descendió con tal ferocidad que Doni, quien cubrió el ataque con su espada, fue enterrado un poco en la tierra y lodo producido por la tormenta, más sin embargo no se veía afectado.

-Muy buen golpe, pero la electricidad no permanece en mí, no con este cuerpo de acero y esta protección- le informó.

Fue ahí cuando Issei notó como la espada de su rival estaba envuelta en runas, y que la electricidad parecía circular por su cuerpo hasta llegar a tierra.

-Es como un pararrayos- pensó sorprendido.

[Eso quiere decir que la electricidad no será un problema en tanto tenga a donde dirigirla, ademas, los dioses de acero tienen una debilidad muy simple]

-¿Cual?-.

[El fuego]

-Eso, me da una idea- sonrió con ferocidad el castaño para confusión del rubio.

Lo siguiente que Doni supo es que Yagarish le había golpeado con fuerza en la quijada, lanzandolo por los aires e impulsándolo con viento. Usando su autoridad, Doni aumentó tanto su peso que empezó a descender velozmente a tierra, pero Issei lo interceptó con Ayamari, nuevamente atacándole con electricidad.

-¡Veamos como te va con la electricidad sin poderla conducir fuera, o contra esto!- gritó abriendo la mascarilla de su armadura y abanicando a Yagarish, soltando un torrente de fuego en la corriente de aire, volviéndose en algo tan intenso que obligó a Doni a cerrar los ojos al tiempo que era rodeado en una incandescente esfera de fuego.

Alzándose sobre el rubio, Issei alzó ambos garrotes rodeados de sus respectivos elementos y los descendió contra la llameante figura que era Doni, lanzandolo cual meteorito, tanto en velocidad como en aspecto/densidad, contra un lago cercano, estrellándose violentamente, provocando que el agua se alzara varios metros en el aire y que vapor surgiera de este, pero ahí no acababa.

-¡Ven a mi lado, para obtener la victoria! ¡Sol inmortal, envíame el caballo veloz luminoso! ¡Milagroso caballo veloz, ven y trae la aureola ante tu amo!-.

[Persian Warlord: White Stallion]

Las nubes de tormenta se despejaron, dejando ver el resplandeciente sol del cual surgió un brillante corcel de llamas que descendió implacable contra el lago, generando una explosión solar tan intensa que, a su final, solo dejó un cráter humeante, sin ningún rastro del lago que ahí estaba hace tan solo unos instantes.

-No, puedo, más- comentó exhausto Issei, sintiendo todo su cuerpo doler, especialmente sus brazos, los cuales parecían estar hechos trizas.

Lentamente, bajó a tierra, cayendo de rodillas con el [Balance Breaker] desactivado apenas tocó tierra.

-¡Ise!-.

Con la vista borrosa, apenas notó como Erica se apresuraba a su lado saltando en el aire.

-Draig, estoy muy, cansado, te dejo, el, rest…- incapaz de de terminar su frase, Issei cayó inconsciente, evitando caer a tierra solo gracias a la velocidad de Erica quien llegó a su lado y le abrazó.

[Claro, dejámelo a mí Compañero]

[Persian Warlord: Ram]

(Time Skip, al día siguiente)

-Ugh, ¿Donde estoy?- murmuró Issei mientras se despertaba, notando que estaba de nuevo en una lujosa habitación con una pijama que le daba comezón.

[Buenos días compañero, ¿Que tal te sientes?]

-¿Draig? Me siento, bien, ¿Por qué?- preguntó confuso.

-¿No recuerdas lo que pasó ayer?-.

Sobresaltándose al escuchar una nueva voz, Issei se giró a su origen, topándose con Erica recién entrando en la recamara.

-¿Ayer? ¡Ah, Doni! ¡¿Qué paso con…?!-.

-Tranquilo, responderé todas tus dudas pero antes, ¿vamos a desayunar?-.

Notando su estomago rugir, el castaño asintió y le pidió que saliera para que se pudiera vestir. Instantes después, ambos caminaban rumbo al comedor.

-Pensé que había destruido este lugar ayer?- comentó entre apenado y sorprendido Issei tras descubrir que justo era el mismo lugar donde había desayunado el día anterior.

-Así fue, pero tus aliados lograron reconstruirlo en cuestión de horas, incluyendo todos los edificios en las cercanías e inclusive restauraron el lago que vaporizaste-.

Justo en ese momento llegaron al comedor, y tras la puerta, no solo le esperaban los mismos que el día anterior, si no que también un hombre de aspecto cansado y…

-¡¿Doni?!-.

-¡hola Issei! ¿Dormiste bien?- le preguntó tranquilamente el espadachín con graves quemaduras, tanto solares como de fuego, viéndose a través de los vendajes que lo cubrían casi por completo, inclusive de su cabeza solo su cabello (el cual estaba muy corto) sus ojos, oídos, nariz y boca estaban descubiertos.

-¡¿Pero qué, como…?!-.

-Tranquilo Ise-kun, no tienes que preocuparte, al menos por ahora- le calmó el propio Sirzechs.

-¿Eh?-.

-En palabras simples, lo dejaste tan herido que no nos atacará por ahora, especialmente con el hombre a su lado- explicó Azazel mientras señalaba al hombre que aun no conocía quien se puso de pie y se inclinó ante él.

-Un placer conocerle, su majestad Hyoudou Issei, puede llamarme Rivera, quisiera ofrecerle una disculpa por las acciones de este idiota-.

-¡Hey! Eso es ofensivo- se quejó Doni.

-No me das razones para pensar lo contrario- contraatacó él con voz tensa, cargada hasta el tope de frustración y enojo.

-¿Eh?- murmuró confundido el castaño.

-Él es el mejor amigo de Lord Salvatore, y el único capaz de controlarlo- le explicó suavemente Erica.

-¡Issei, ese fue un buen golpe, por un momento pensé que no la contaba!- comentó alegremente el rey atolondrado -ahora sientense, tu y Erica deben de estár hambrientos-.

Eso sorprendió a todos los humanos.

-Lord Salvatore, si no le molesta, ¿le podria preguntar como es que sabe mi nombre?- inquirió la rubia con respeto, pero claramente dudosa, eran pocos los humanos a los que el rey de la espada recordaba.

-¿Eres la amada acompañante de Issei no? ¡Obviamente conocería a alguien así!-.

-¿Amada eh? No pensé que tendría que empezar a pensar en una boda tan pronto…- se quejó Paolo ante la divertida mirada de todos, salvo su sorprendida y apenada sobrina, y el castaño que estaba más ocupado en fulminar con la vista al idiota que en escuchar sus bajas palabras.

-¡¿Como rayos sobreviviste?!-.

-Entre en un estado de animación suspendida, pasé la noche bajo escombros y después bajo agua cuando tus aliados restauraron el lago- explicó encogiéndose de hombros -pero bueno, después de algo como eso, inclusive yo estaría exhausto, además de que es difícil moverse con estas quemaduras, ¡muy buen trabajo Issei! Es un empate-.

-¡Deja de decir algo como eso con tanta seriedad!- se quejó sentándose a la mesa y alargando la mano para tomar algo de comida.

-Oye, eso se vé bueno, ¿me das un poco?-.

-¡Ya tienes mucho en tu plato!-.

-Pero no de eso, vamos solo un poco-.

-¡Ni hablar!-

Los demás presentes se dedicaron a mirar con distintas reacciones como ambos Campioni conversaban tan relajadamente, de una forma que uno podría relacionar con bastante facilidad a "rivales amistosos", aun cuando uno de ellos tenia poco interés en permanecer cerca al otro.

(Fin Flash back)

-...Eso fue mucho más violento de lo que creía- comentó Irina con la mirada plana, insegura de como reaccionar -ni un solo día y ya te estabas peleando con otro Campione…-.

-No es como si yo lo quisiera- reclamó el rey.

-Sus habilidades con la espada suenan increíbles- comentó impresionado Kiba.

-Lo son, como ya dije una vez, aun si no fuera un Campione, Lord Salvatore nos superaría a mí y a Lily con suma facilidad- aportó Erica.

-Disculpen la interrupción- llamó Karen entrando a la sala, llamando la atención de todos los presentes -venia a informarles que la cena está servida-.

-Oh vaya, ¿Ya es tan tarde? Vamos en un momento- le aseguró Rias mientras uno a uno todos se levantaban y se dirigían al comedor -aunque me sorprende Ise, pensé que dijiste que odiabas a Doni-.

-Claro que lo odio-.

-Pues la ultima parte no lo deja ver- refutó risueña Erica, metiéndose un poco con el castaño.

-¿Quien podría soportar a un idiota?- espetó molesto.

-Nosotros te queremos a ti-.

-¡Erica!-.

-Ella tiene razón, Ise-sempai-.

-¡¿También tú Koneko-chan?!-.

Todos soltaron un par de risas ante eso, aunque en el caso de cierta chica fueron un tanto más cortas para luego dirigir su mirada a la muñeca en sus brazos, algo deprimida.

(Time Skip, esa misma noche)

-¡Uwaaaaaa, uwaaaa!-.

-¡Toma, el biberón!-.

-¡Gracias!-.

Rascándose los ojos para despertarse un poco, Issei observó a Xenovia acercar "alimentar" a la muñeca, logrando evitar que su llanto continuara, antes de mirar el reloj digital en un mueble junto a su cama.

-Las tres y media- suspiró cansado, estirando un poco su espalda -voy por un vaso de agua, ¿quieres uno?-.

-Por favor, muchas gracias Issei-.

Respondiendo con una sonrisa, el castaño salió bostezando de la recamara, dejando a la espadachina sola con el "bebé".

Mientras caminaba hacia el comedor, el castaño se detuvo al ver una puerta abrirse lentamente, en concreto, la puerta a la habitación de Liliana. Sin embargo, la que salió de esta no era la espadachina de cabellos plateados, si no Erica quien, para completo shock del castaño, llevaba su muñeca en brazos junto a la bolsa con todos los objetos necesarios para el cuidado.

La rubia, lentamente, cerró la puerta sin hacer ruido y, con el mismo cuidado, se dirigió a la suya y entró, no reparando en el rey que permaneció congelado en su lugar antes de que sonriera y suspirara un poco.

Erica no era tan ajena la practica como creía, ¿o es que las palabras de Xenovia habían movido una fibra?

De regreso con la mencionada ex-exorcista, afortunadamente la "bebé" terminó a los pocos minutos, solo que al separar el biberón de la muñeca, este soltó un par de sonidos en especial.

En respuesta, Xenovia lo recostó en su pecho con su "cabeza" por sobre su hombro y empezó a darle suaves palmadas en la espalda de forma constante hasta que finalmente
"eructó".

-Los bebes son mucho más trabajo de lo que esperaba- comentó para si, notando que aun no estaba emitiendo los "suspiros" que indicaban que estaba dormido, por lo que siguiendo con las indicaciones de los encargados empezó a mecerlo suavemente en sus brazos, en un intento de emular la acción que había visto realizar ocasionalmente a madres con sus pequeños o a monjas en los orfanatos, no notando como, en algún momento, había empezado a tararear una canción de cuna.

Esa fue la estampa con la que se topó Issei al volver con un vaso de agua en manos: a Xenovia arrullando a la "bebé" mientras tarareaba dulcemente y sus ojos mostraban mucha ternura.

Fue algo que le afectó en gran medida, sonrojándose casi en el acto y casi dejando caer el vaso, por suerte, logró controlarse lo suficiente para evitarlo, pero no pudo evitar quedarse mirando en silencio por varios minutos, ni la sonrisa que se formó en su rostro al ver a Xenovia en ese estado… ni a la gran calidez que se regó por todo su cuerpo, especialmente en su pecho.

(Time Skip, al día siguiente, inicios de clases)

-Muy bien, es hora de regresar las muñecas- informó Minato antes de que, una a una, las parejas empezaran a avanzar para entregarlas, recibiendo su puntaje ahí mismo.

La mayoría recibió un puntaje aceptable, algunos más altos que otros, como fue el caso de los bebes de Asia y Yuri, Liliana y Erica e Irina y Kiryuu que obtuvieron un puntaje bastante elevado. Por otro lado, el de Motohama y Matsuda fue el del puntaje más bajo, casi resultando en la "muerte".

-¿Ustedes son los últimos?- inquirió amablemente Nozomi.

Xenovia simplemente asintió, preocupando al castaño y a sus amigas. La peli azul había estado muy callada en toda la mañana.

Ambos encargados procedieron a quitarles las pulseras a ambos, ante lo cual la chica tembló de forma casi imperceptible, aunque se relajó un poco cuando les devolvieron las cintas de estas sin los sensores a modo de recuerdo.

Lo siguiente fue entregar la muñeca, la cual Xenovia sostenía algo firmemente antes de entregarla con un suave suspiro, ganándose una sonrisa amable de aliento por parte de la mujer, quien se la pasó a su compañero para que comprobara el puntaje.

-¡Felicitaciones! Lograron el puntaje más alto de entre sus compañeros- les informó Minato con una sonrisa.

-¡¿Eh?! ¡¿El bebé bajo el cuidado de la bestia pervertida?!- exclamaron incrédulas muchas de las estudiantes.

-No, momento, debió ser por Xenovia, no hay forma de que el pervertido lograra tal puntaje- opinó una, siendo apoyada al instante por todas.

-Cierto, tienes razón- asintió Katase acercándose a la peli azul -eres increíble Xenovia-san, pensar que lograste tal puntaje pese a estar emparejada con él-.

La espadachina se limitó a asentir, preocupando aun más a Issei y compañía.

Las cosas siguieron así durante todo el día. Xenovia casi habló, respondiendo a todo tan brevemente como podía, alarmando a todo el que la conociera, y justo en cuanto las clases terminaron, salió rápidamente de la escuela, apenas despidiéndose de todos con un rápido "adiós".

-Xenovia/-san- musitaron preocupadas Asia e Irina al mismo tiempo, haciendo un ademan de seguirla, pero alguien les ganó.

-Yo iré- informó Issei antes de salir tras la espadachina a paso veloz, saliendo de la escuela apenas a tiempo para verla desaparecer, corriendo con toda la velocidad que su pieza [Knight] le brindaba.

[Fake Reality]

Cubriéndose con una ilusión, Issei desplegó sus alas de dragón y alzó el vuelo, buscando por todo Kuoh en cuestión de horas.

-Donde estas- murmuró para si, su vista moviéndose rápidamente a lo largo del cuarto parque que había revisado, hasta que sus ojos se enfocaron en una solitaria pero enorme fuente -¡ahí!-.

Descendiendo en picada, Issei aterrizó frente a la fuente, guardando sus alas y finalmente desactivando su autoridad.

-Xenovia- llamó, pero la chica no respondió siguió sentada en la banca, con los codos apoyados en las rodillas y su rostro sobre sus palmas.

Sin decir nada más, el castaño se acercó a la espadachina y se sentó a su lado, esperando a que ella empezara.

-...supongo que, me veo ridícula, ¿No?- empezó finalmente tras varios minutos en silencio, su voz escuchándose algo quebrada.

Issei no respondió, dejándole continuar.

-Es decir, ¡mirame!, sentada en medio de un parque, triste por una muñeca- soltó una risa amarga levantando un poco el rostro, permitiendole ver sus ojos rojos e inflamados con lagrimas cayendo por sus mejillas, empapando su uniforme, fue ahí que también notó un camino de lagrimas bajar por sus antebrazos -valiente portadora de Durandal, o demonio, resulté ser- nuevamente dejó caer su rostro en sus palmas y continuó con su llanto silencioso.

Pasaron los minutos en silencio, solo interrumpido por sus leves suspiros, con el castaño tratando de pensar en la mejor forma para calmarla.

-Yo no pienso que seas ridícula- finalmente habló.

-Por favor, solo lo dices para animarme- espetó incrédula sin levantar la vista.

Issei se levantó, haciendo creer a la chica que finalmente se había cansado y que se marcharía, dejándola sola como ella quería. Sin embargo, un par de manos la tomaron suave pero firmemente de las mejillas, obligandola a levantarla y mirar directamente a los ojos del rey. No había burla o decepción ahí, solo calidez y, comprensión

-Lo digo en serio Xenovia, también a mí me entristece-.

-¿Eh?-.

-No puedo decir que al mismo nivel- se explicó dejando ir su cabeza y rascándose la nuca inseguro, antes de ponerse de cuclillas ante ella, tomando sus manos, haciendo que dejara de clavar sus codos en sus piernas, lo que, a estas alturas, parecía le dejaría marcas por un tiempo -pero, yo también me encariñe con Amy, así que, no creo que seas ridícula, más bien, eres sorprendente, por llegar a sentirte así-.

Xenovia no respondió, solo lo vio con la boca abierta mientras las lagrimas seguían fluyendo, por lo que decidió agregar algo más, algo que, hasta ese momento, estaba dispuesto a guardarse para sí por un tiempo.

-Vi como cantabas una canción de cuna mientras la arrullabas la otra noche- le comentó, haciendo que ella se sorprendiera más -y, la verdad, estoy seguro de que serás una madre increíble- le aseguró -eso me hace feliz-.

No pudiendo soportarlo más, Xenovia cayó de rodillas junto a él, enterrando su cara en su pecho y abrazándolo con fuerza, llorando a todo pulmón.

Algo inseguro, Issei devolvió el abrazo y la acarició un par de veces en la cabeza y la espalda, sintiendo él mismo como un par de lagrimas se le escapaban, en conjunto con unas gotas que pronto se convirtió en una lluvia casi torrencial. Sin embargo, ninguno hizo amago de moverse y permanecieron así por casi media hora, hasta que la espadachina finalmente se calmó y se separó de él.

-Gracias, Issei- le agradeció con voz suave antes de inclinarse y besarlo levemente en los labios.

El castaño se sonrojó un poco, pero sonrió -cuando quieras Xenovia- levantó la mirada al cielo unos instantes antes de erguirse y extenderle la mano -vamos, todos estarán muy preocupados-.

Ella asintió tomando su mano y levantándose, aferrándose casi al instante a su brazo. Rascándose la nuca ante eso, Issei procedió a crear una sombrilla con [Fake Reality] y ambos empezaron un tranquilo andar para regresar a casa.

-...Issei-.

-¿Que pasa?-.

-si nuestro primer hijo es una niña, ¿podemos llamarla Amy?- preguntó insegura.

Eso le hizo tropezarse con su propio pie, casi dando de cara con el suelo y faltando poco para que la sombrilla se volviera una ilusión normal, pero logró recuperarse lo suficiente para evitarlo.

Mostrándose muy apenado por el tema, Issei desvió la mirada tanto como pudo -...¿y, si es, niño?-.

Escuchando su respuesta, Xenovia sonrió alegremente -¿Que te parece Zen? ¿o tal vez…?-.

Aun sin dirigirle la vista y completamente incomodo por el tema, Issei se permitió sonreír al notar que la espadachina estaba mejor.

(Al mismo tiempo, Templo Himejima)

En medio de la tormenta que azotaba Kuoh, la puerta a la cámara principal del templo se abrió y una hermosa joven de cabellos negros vestida con un uniforme de una escuela totalmente distinta a las presentes en Kuoh entró con tranquilidad.

-*Te dije que lo entiendo, abuelito. Sí, estoy bien, probablemente... ¡ohh cállate! Bueno, nunca he salido con un chico antes, pero... ¿¡Y quién crees que tiene la culpa!?*-.

Y dicha joven, la cual se encontraba hablando por celular, no se trataba de Himejima Akeno (pese a que su figura estaba bastante cerca de poder competir con la de la nefilim) o Mariya Yuri.

-*Eh, ¿cómo seducir a un hombre? ...Si eres tú el que me lo enseñe, no va a ser de ninguna utilidad de todos modos, abuelito. A lo mejor estás atrasado, ¿sabes? Estudiaré por mi cuenta*-.

Ausentemente, dejó un paquete envuelto junto a un muro y se sentó tranquilamente en un cojín, soltando un par de bolsas de viajes también, de una de las cuales salieron una gran cantidad de papeles con fotografías y datos de personas, entre los que destacaba cuatro expedientes: Hyoudou Issei, Erica Blandelli, Himejima Akeno y Rias Gremory.

-*Dejando eso a un lado, he encontrado a una chica interesante y a otras dos que pueden ser algo problemáticas... Síp, claro, son concubinas del rey... Sí, pero no tengo ganas de perder. Ya veré que haré con ellas, tenlo por seguro... Sí... Sí, sí. Claro que estoy dispuesta a usar la fuerza de ser necesario. De esa forma es más interesante después de todo. Bien, te llamaré después*-.

Con eso, cortó la llamada y, en respuesta, la lluvia y el viento se calmó un poco.

-Así que el viento era culpa del abuelito después de todo... que abuelo tan problemático-.

Después de encogerse de hombros y murmurar, la joven estaba a punto de meter el móvil en su bolsillo cuando recordó que estaba completamente descargado. Haciendo una pausa a mitad de camino, ella empezó a buscar el cargador que debía estar en una de las bolsas.

El teléfono celular con el que había estado hablando no había tenido ninguna fuente de energía.

Fin del Capitulo.

Bueno, se terminó, y estoy seguro de que tendrán sus preguntas al respecto con el tema de las muñecas, es decir, ¿de dónde se me ocurrió? Y ¿no exageraste un poco con el llanto? Pues, ambas tienen respuestas conjuntas.

Se me ocurrió a mediados de febrero que recordaba las veces que menos tiempo pude dormir, recordando cuando un grupo del gobierno que buscaba reducir el indice de embarazos a temprana edad fue a mi escuela con el proyecto.

La mujer que nos habló del proyecto nos comentó que las muñecas simulaban tan bien a un bebé que varias estudiantes que habían practicado el ejercicio habían llorado un poco cuando les recogieron la muñeca, o que muchos, ya fueran hombres o mujeres, lloraron cuando les dijeron que el "bebé" había muerto por malos cuidados, y viendo al resto de mis compañeros puedo afirmar que tenia razón, inclusive cuando yo entregue la mía me sentí algo deprimido.

La verdad siento que me afectó más de lo que yo creía inicialmente, es decir, este tema estaba pensado para dentro de varios capítulos, pero no me lo podía quitar de la mente así que decidí ponerlo ya, además, como alguno tal vez esté pensando, el nombre que yo personalmente le di a la muñeca fue justamente Amy.

Recordando ese evento, recordé que el sueño de Xenovia al volverse demonio era "ser madre", y me puse a pensar: si yo que en ese tiempo no había pensado a fondo sobre formar una familia propia fui afectado tanto, en alguien con un sueño así, como Xenovia, será mucho más significativo.

Bueno, dejando ese tema de lado, ¿qué les pareció el combate contra Doni? Era algo que quería escribir ya y me pareció buena idea en este capítulo enfocado principalmente en Xenovia que resultaría muy corto por su cuenta y no me dejaba buen sabor de boca subirlo tan corto o incluyendo más del arco de Ena de lo que ya tiene, también me ayudo a integrar a Liliana a la escuela y preparar el camino para Ena.

Sobre el asunto de las dimensiones de bolsillo y los círculos de transporte, era algo que me tenia un tiempo molestando. En Campione! No existen ninguno de estos, mientras que en DxD las dimensiones de bolsillo son usadas para los [Rating Games] (lo que las vuelven comunes y "fáciles" de usar) y los círculos de transporte son bastante comunes, aunque los primeros que se mostraron fueron hechos exclusivamente para el séquito de Rias y Sona (¿Recuerdan cuando no pudieron llevarse a Asia con ellos la primera vez por no ser una demonio reencarnada?) y luego mostraron otros más "potentes" al permitir a seres de distintas razas usarlos, inclusive yo ya mostré varios de estos tras los combates contra Loki y Voban.

Tras pensarlo un poco, decidí volverlos algo limitado a razas sobrenaturales y ciertos grupos de magos cercanos a dichas razas, todos estos con gran capacidad con la magia. Es decir, en DxD se supone que la magia humana surgió como imitación de la magia demoníaca, producto del contrato Demonio-Mago, aquí simplemente hice que la magia usada por algunos grupos surgiera directamente de la magia demoníaca, permitidores el uso de círculos mágicos de transporte, y creo que queda claro que ni [Copper-Black Cross] o [Bronze-Black Cross] pertenecen a este grupo de magia.

En fin, a los review y terminamos:

IvaXter: Thanks, I hope you liked this one too.

Ronaldc v2: Gracias, tenia mis dudas con Yuri, me alegro de haber acertado. El Olimpo fue una idea que se me ocurrió de la nada, no lo tenia planeado hasta que lo escribí. Pues, al final alargamos un poquito más la espera con la interacción entre Xenovia y Ena, pero aun así tuvimos mucho de ambas, especialmente de Xen, espero te gustara. Hasta luego.

Leincrowbell: Gracias, es bueno ver que esté acertando en la manera de escribir. Sobre la cita con Erica, será sin falta el próximo capitulo, por ahora, espero este te gustara, hasta la próxima.

Soulalbarn18000: Es bueno saber que estoy haciendo un buen trabajo, espero permanecer así. ¿que te pareció este capitulo? Tanto la batalla contra Doni como el enfoque a Xen… creo que se nota que es mi favorita de DXD ¿no? Pero bueno, espero leer tu opinión, hasta luego.

CCSakuraforever: gracias, seguiré esforzándome, espero te guste también este capitulo. Hasta luego.

Miguelzero24: Es bueno ver que te gustara, espero este también fuera de tu agrado. Seguiré esforzándome con la trama. Bueno, nos vemos en la próxima.

Logan: Llegé a pensar en hacerlos pelear contra el Olimpo, pero no era el momento, ya veras en un futuro como los cuatro unen fuerzas para enfrentarse a alguien que los supera. Y si, es Afrodita aunque no habrá nada entre ellos, eso fue Afrodita siendo Afrodita, pero ¿puedes adivinar los otros dos dioses?

No estoy seguro si lo dices en serio o no, viendo esa despedida estilo HolaSoyGerman, pero Jag Duran es un Youtuber que hace principalmente videos sobre Games of Thrones y generalmente empieza sus videos con esa frase. Bueno, hasta la próxima.

ReyEvolution: ¿Que puedo decir? Para la historia era mejor que fuera Erica. Pero bueno, espero que este capitulo fuera de tu gusto, me gustaría leer tu opinión. Hasta la próxima, sigue con el buen trabajo con tu fic.

Carlos Trujillo: pues, no lo pienso hacer tan "docil", pero hay que tener en cuenta de que Erica y Yuri son chicas muy… especiales, no saldrá bien parado si es muy rebelde. Espero te gustara el capitulo, hasta luego.

Leknyn: Te entiendo hermano, la uni quema mucho. Que bueno que te gustara el capitulo, y la verdad, tambien a mí me gustó mucho Poseidon por Percy Jackson, aunque de momento sigo en el primer libro jeje, pero espero ponerme a la par pronto. Bueno, espero te guste el capitulo, hasta la próxima.

Lenin: me alegra que te gustara. Lamentablemente, Las chicas humanas no reencarnaran en nada, y Afrodita simplemente estaba actuando como le corresponde, no habrá nada entre ella e Issei. Bueno, espero que te gustara el capitulo, hasta la proxima.

Horakthy baraq: Se te echaba de menos, bienvenido. Me alegra que te gustaran, me esmeré con ellas, aunque creo que este de aquí me quedó mejor en cuanto a Xen. Sobre el [Joven]… solo dejemos en que diste en un punto importante, pero que tardará en llegar, solo diré que seguirá limitado a las mujeres, Issei no besará a ningún hombre. Bueno, espero que el capitulo te gustara, hasta luego.

FlashHero: Vaya, son muchas dudas e ideas, por desrgacia, no puedo responder mucho a eso ya que seria un spoiler brutal. Sin embargo, puedo decir algo sobre la idea de Percy Jackson y las nuevas piezas de Rias: si alguien de PJ aparece será cuando Zeus y Poseidon pártan a luchar contra el Trihexa, es decir, dentro de mucho tiempo, y sobre Rias, ya tengo algo en mente, ya lo veras. Con Asia, en el canon el combate contra Loki fue después del Juggernaut Drive, así que, bueno, pasó antes de que se volviera Campione. En fin, espero te gustara el capitulo, hasta la próxima.

Darksquall013: Gracias, es bueno que te guste, espero que este tambien te agrade, hasta la proxima.

DracoANgel12: Gracias, la verdad es que le pongo bastante empeño, espero este capitulo tambien te guste.

Grievous: no te apures, todos nos confundimos un poco, por ejemplo, ahora mismo no recuerdo en que volumen fue que los padres de Issei volvieron del crucero, aunque creo que fue en el regreso del inframundo. En fin, espero te gustara el capitulo, hasta luego.

Bueno, seria todo por hoy, los veo en la próxima.