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REEEESPONDAMOS REVIEWS

Para Angel Arcano92

Técnicamente hablando, Mikane es el Anderson de este Alucard llamado Okami, pero bueno, en este capítulo se ve que tanta rivalidad habrá entre Naruto y Sasuke (y su hermano)

Para swid16kawail

Irónicamente, Naruto tiene poderes similares al Doc v:

Cosmos y su compañera son también creación de mi amigo Double Danger, también creador de Mikane y Axel :b

Para layettejean

Je xd

Reviews contestados, vamos a la..

ACCIÓN

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Capítulo 9

Preludio de Tormenta

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Naruto no se reportaba a Danzo.

Eso era algo que la mayoría de las personas no notarían a primera vista, el pelirrojo literalmente evitaba tener la mínima cantidad de contacto con el halcón de la guerra como fuera posible, así mismo, era la mayor razón por la que tenía que ir acompañado para saber el informe de sus misiones.

Esa era, también la principal razón, de porque era algo nuevo que hubiera aparecido en la oficina del Hokage, con un rostro completamente neutro y acompañado de una especie de chica hecha de gel azul, amarillo y verde en algunas partes, cubierta igualmente por una especie de abrigo hecho del mismo gel y una mochila bastante gruesa y alta.

Junto a ella también estaba una especie de aparato volador hecho de metal, que analizaba los alrededores, zumbando suavemente cada que se desplazaba—Los Yakuza "Tigre de Montaña" tenían una especie de criatura del mundo salvaje capturada junto a una especie de objeto tecnológico de origen desconocido, según lo que reportas, es desconocido las capacidades de lo que ambos son capaces de hacer, así que, ¿estas solicitando el hecho de ser tu quien los vigile?

El pelirrojo asintió suavemente—Con todo respeto— esa frase sonaba casi como una especie de sorna hacia el Hokage—. Dudo de que haya alguna cosa en esta aldea que sea capaz de mantenerlos capturados en lo más mínimo, y me gustaría mantenerlos bajo mi cuidado debido a que soy quien mejor podría tratar con ellos— declaró el pelirrojo simplemente.

—Costará bastante el escribir de manera completa los permisos necesarios para algo así, ¿Lo comprendes?

—No me importa— indicó el rubio igual de neutro que normalmente cuando hablaba con Danzo.

El pelinegro soltó un bufido por la nariz, y eso fue todo lo que soltó para mostrar su molestia—Llévalos a tu casa entonces, mantenlos ocultados de los que les puedan ver— indicó el Shimura antes de volver a ver los papeles en su escritorio.

El pelirrojo se dio media vuelta y empezó a caminar, siendo rápidamente seguido por la chica slime y el dron que volaba junto con ella. Para que luego un aura roja los cubriera a los tres apenas salieron de la torre Hokage, y desaparecieran en un borrón de velocidad.

Naruto dio media vuelta para ver como la chica hecha de gel se agitaba un poco antes de recomponerse, junto con la máquina voladora pareciendo recalibrarse por estar en otro lugar de repente, a un ritmo tan acelerado que le habría revuelto el interior a una persona normal.

Su cara cambio completamente y les dio una leve sonrisa a ambos—Bueno, supongo que sería mejor cosa de presentarnos, mi nombre es Naruto Okami, solo Naruto es suficiente, por ahora vivirán en mi casa, espero que les sea cómodo— dijo amigablemente.

—Ya nos presentamos, puedes designarme como Cosmos— dijo el dron con una cara holográfica que mostraba la expresión de una sonrisa.

La chica slime se movió levemente por la casa viendo los alrededores antes de girar la cabeza a un lado—Akia— se presenta ella con una cara neutra para luego empezar a "derretirse" y formar una pequeña bola de gel que empezó a moverse más libremente alrededor de la casa—. Es algo… pequeño— hablo en un tono un tanto pausado.

Luego el pelirrojo se rasco la nuca con una sonrisa—Jaja, perdón por eso, es lo máximo que he podido hacer estos días— indicó mientras se reía levemente—. En todo caso, pónganse cómodos, si no les molesta iré a descansar un poco, la misión en la que estaba me término agotando— dijo manteniendo siempre la expresión sonriente que tenia.

—Afirmativo, Sujeto designado, Naruto Okami— dijo Cosmos cordialmente—. Me encargaré del trabajo de vigilancia de mi compañera en cualquier situación que alerte de algo importante, puedes ir a descansar sin problemas— el pelirrojo asintió suavemente con su sonrisa haciéndose más grande.

—Muchas gracias entonces, si me permiten, iré a caer inconsciente— dijo caminando hacia adentro de su casa… y luego se escuchara el sonido de un cuerpo cayendo duro contra la madera.

Naruto no se cansaba realmente tan rápido, incluso haciendo misiones continuamente ante lo que Danzo le decía, lo único que se agotaba era su paciencia, más sin embargo, era por otra razón que buscaba descansar.

Quedaban unas horas antes de que la energía cósmica regresara a su alcance.

Lo cual era algo bueno, pero por el otro lado se tenia que manejar ante eso.

¿Por qué el motivo?

Naruto actualmente estaba funcionando a una millonésima parte de sus capacidades, de manera física o mental, era algo completamente aturdidor para él estar así. El Chakra y la energía cósmica eran parte de si mismo más de lo que cualquier persona podría decir lo mismo.

Que aquella mujer llamada Yukari le cortará el alcance a su Chakra, y que la bandana de su padre le cortará el alcance a la energía cósmica, era como si le hubieran arrancado partes del cerebro. Su cerebro, que estaba acostumbrado al procesamiento más acelerado y aumento de sentidos, ahora tenía que lidiar con la millonésima parte de eso.

Una persona normal probablemente estaría teniendo problemas ordenando sus pensamientos para poder mover los dedos.

Naruto estaba más que nada solo agotado mentalmente después de tanto, la principal razón era tener que ajustar sus métodos de combatir.

Y no es como que dormir le ayudará en algo a descansar.

No soñaba en lo más mínimo, por lo que la mayoría de sus sueños eran sólo pesadillas, memorias del pasado que simplemente ya había pasado tantas veces como para que le causarán algún miedo real, cuando no eran pesadillas, simplemente era la negrura de no estar consciente hasta que despertará.

Eso era todo lo que tenia en esos momentos.

Y eso era todo lo que le importaba.

¿Qué era exactamente que le tenía tanto miedo como para no dejar de soñar con eso?

¿El fuego?

¿La sensación de asfixia?

¿El odio de todo el mundo?

¿Estar solo?

Había una cosa en sus sueños que siempre se mantenía presente, el recuerdo de las personas, sus caras, antes de ser arrancadas de si. Como si jamás hubieran tenido una cara, como si sus voces jamás hubieran sido oídas, como si lo que le dijeron jamás hubiera importado.

Eran las personas que alguna vez amo.

Un hombre gentil y su hija dándole alimento.

Un maestro que paso del desprecio al entendimiento.

Un numero pequeño, pero considerable de personas extendiendo sus manos hacia él, con sonrisas, gestos serios o con expresiones que no sabia discernir. Y luego estaba él, caminando en un océano de cráneos, cada vez más hondo, en un cielo negro en completa oscuridad.

La siguiente vez que Naruto se despertó, puso un brazo sobre su rodilla mientras se sentaba en el suelo pensativo, el futon todavía cubriéndolo, viendo al frente, a ningún lugar en particular… sus ojos brillaban en morado.

Para alguien de su edad biológica, la mente de Naruto había alcanzado la maduración mucho antes de que su propio cuerpo lo hiciera. Tan solo en los primeros momentos de su entrenamiento tuvo que pasar una cantidad considerable de tiempo madurando hasta su máximo potencial, lo más cercano posible a la perfección.

Cerró sus ojos.

Podía sentir las diferentes vibraciones de frecuencia de energía a su alrededor.

Su nariz grababa los olores tenues y fuertes de cosas pasadas.

Sus oídos le alertaban de los movimientos del viento sacudiendo las hojas de los árboles a la tierra partiéndose lentamente.

Su cuerpo había recuperado las fuerzas que había sentido antes se habían desvanecido, deshaciendo el control sobre su cuerpo, y luego viendo a su alrededor, medio adormilado.

—Me debería hacer una cama— murmuró al aire levantándose. Abrió las puertas corredizas para ver el jardín que rodeaba su casa, el dron volador se encontraba sobre el techo, seguramente recargando baterías, al mismo tiempo que la chica slime estaba descansando sobre el césped, el pelirrojo se encogió de hombros al ver eso antes de dar un paso afuera de su casa y desaparecer completamente, como si se hubiera convertido en humo.

Luego apareció en los bosques de entrenamiento, cerca de las afueras de la aldea, inhalando suavemente el aire nocturno helado.

Camino por un páramo abierto con grandes rocas y un lago cerca, dando un par de saltos leves a modo de estiramiento, escuchando a sus huesos tronar después de no haberse movido en lo más mínimo por varias horas.

Se paró enfrente de una roca, viendo fijamente que hacer con ella antes de poner una mano sobre ella y que esta fuera recubierta por un aura de color azulado, para seguidamente el pelirrojo caminara para alejarse de la roca— Amenooshikorowake.

Una de sus habilidades que manipulaba los conceptos, en este caso, el concepto de "arma", que podía incluir prácticamente cualquier aditamento que Naruto se imaginara. Creando una de las pistolas que había usado los Yakuza que había enfrentado, notando con mirada absolutamente neutra su forma y composición antes de apuntarla contra la roca, disparando segundos después para ver como la bala quedaba aplastada contra la superficie aumentada con Chakra.

Naruto miro el arma por varios momentos antes de tirarla detrás suyo dejando que fuera tragada por un portal negro—Por lo que me informaron, antiguamente usaban pólvora para hacer que la bala disparará, y luego cambiaron a un tipo diferente que no genera humano… ¿Un tipo de Nitrocelulosa, tal vez?— se pregunto a sí mismo pensativo, teniendo una imagen mental de como funcionaba una pistola simple después de verla una vez.

Más allá de eso también estaba el hecho de que por lo que sabía, las armas de fuego habían sido creadas debido a que era mucho más fácil y mucho más letal para los enemigos enseñarle a alguien a combatir con ellas.

Además de las pistolas comunes o escopetas, estaban las armas que eran automáticas –que disparaban mientras se mantuviera el gatillo apretado– y las que no eran automáticas que disparaban balas por ves –lo que Naruto no sabia que se llamaban semiautomáticas–

El disparo automático era mucho más rápido que el semiautomático, en lo que a un arma le tomaba hacer varios disparos, otra podía descargar un numero prácticamente incontable de balas.

Exactamente por eso es que Naruto considero ineficaz el primero. Gastaba las unidades –balas– de manera tal que el tirador tendría problemas siquiera contando cuantas le quedan, el rápido disparo hacia que fuera impreciso por el movimiento de las armas, el sobrecalentamiento de disparar algo tan rápido probablemente dañaría internamente el arma, las únicas que eran diferentes eran las llamadas ametralladoras, y eran tales que gastaban una cantidad considerable de balas en segundos.

Una cosa principal era…

¿Por qué le importaba en lo más mínimo? No es como que fuera su estilo en lo más mínimo usar un arma de fuego, y no es como que lo estuviera haciendo más que nada por algo de curiosidad recordando que la chica pelinegra con la que había peleado usaba esas.

Son diferentes. Fue lo que notó el pelirrojo.

El tampoco necesitaba una espada, o una lanza, o un arco, o armas en general, cuando su cuerpo por si solo era mas fuerte que cualquier arma común.

Sin embargo, era debido a eso que ni una sola de sus armas era común en lo más mínimo.

El herrero dentro de su cuerpo que había creado incontables armas hasta apilarlas sin fin no se quedaría contento con un arma que considerará simple y común.

Primero que nada. Pensó volviendo a llamar a su manipulación del concepto de armas para crear nuevamente una pistola en su mano, esta vez con una forma más alargada y cuadrada, apuntando a la roca.

Esta vez cuando disparo hubo un sonido más contundente, como algo cortando el aire rápidamente. Un poco mejor. Pensó el pelirrojo con el arma en mano analizando detenidamente el hecho de que era casi tan silencioso como un arma que usaba silenciador, la mayor parte del ruido era la explosión por romper la barrera del sonido y el impacto de la bala. Pero se puede mejorar.

Alzó las dos manos mientras la pistola que había creado y se deshacía en un brillo anaranjado, para seguidamente inhalar profundamente y concentrarse a detalle en sus siguientes creaciones, pensando en los materiales, la forma, la textura, el funcionamiento.

En sus manos aparecieron dos armas.

Una pistola de recámara bloqueada de color blanco con lo que parecían ser circuitos de color azul en ella, de gran tamaño, en la otra mano, estaba un arma igual de grande, de 300mm en largo, bastante gruesa con color negro y componentes rojos adentro, pareciendo un reflejo de cada una.

Apunto con ambas armas hacia la roca, antes de que un aura de color carmesí cubriera sus manos y se pasará a las pistolas, y luego soltar un disparo doble que atravesó la roca, haciendo explotar los trozos de roca apenas impacto.

Y luego los árboles detrás.

Y luego siguió a una velocidad enorme, mientras humo salía de las armas y el pelirrojo suspiro.

Suprimió el ruido de todo eso con su control del sonido, de todo excepto del sonido de la pistola disparando, siendo prácticamente silencioso en todo momento.

Los principales componentes metálicos, como la corredera de acero, se tratan con un tratamiento de superficie protector, junto con eso, había cambiado completamente su interior, siendo ahora impulsadas por un pequeño sistema integrado con la cámara de admisión donde se reciben los proyectiles.

Un microgenerador electromagnético de alto rendimiento que se integra en la estructura básica de las armas, al principio de la sección de expulsión y conectada directamente con ésta, cuando un proyectil era admitido en la cámara de expulsión y el microgenerador recibía en sus sensores la orden de disparo –accionada por el gatillo o cualquier otro medio– produciendo una acción digital de apertura de campo, es decir, el sistema genera dentro de la vaina del proyectil un campo electromagnético de intensidad concreta, el cual reacciona automáticamente con el contenido del casquillo creándose una barrera de igual polaridad, la cual genera un potente vector de fuerza proyectada que impulsa la cabeza del proyectil a través del sistema de expulsión.

En resumen, usando ese mecanismo, al estar compuesto por un sistema aislado, no era susceptible de fallar en ningún caso o provocar encasquillamiento, ya que era un proceso magnético dirigido y de gran efectividad que aprovecha la convergencia energética para, en un solo paso, impulsar la cabeza del proyectil, expulsar la vaina y dejando entrar el siguiente.

El tiempo en el que eso ocurría era ligeramente inferior a los tres nanosegundos.

Dadas sus características, también le permitía otra cosa a Naruto, y era que el disparo de un arma virtualmente en cualquier medio evitando fallos de funcionamiento. El ruido por detonación, cosas como los problemas de calentamiento eran evitados con eso, otras situaciones derivadas en las armas de proyectiles convencionales se evitaba, lo cual era una ventaja sustancial, ya que podía estar seguro plenamente en que el mecanismo no dejaría de funcionar o que el arma quedará inútil ante la rotura de alguna de una parte puramente mecánica.

—Debería ver que tipo de municiones podría crear— mencionó al aire, antes de guardar las pistolas en portales negros.

Naruto se quedó callado pensando después de haber quedado satisfecho con los resultados que había visto, sentándose tranquilamente sobre una piedra, y viendo fijamente a la nada por largo tiempo.

La principal razón por la que le habían interesado esas armas era simple y llama tranquilidad, tanto por como servían de tener que usarlas o enfrentarlas, a como porque aquella mujer con la que había peleado las había usado.

Se dio cuenta de que estaba pensando mucho en ella, Mikane, y se sentó en una roca cercana, meditando al respecto.

¿Era porque se sentía atraído hacia ella de algún modo?

Conociéndose a si mismo lo suficiente… diría que no.

Tanto Mikane como su madre Yukari eran mujeres que cualquiera podría considerar hermosas, pero Naruto ni siquiera estaba pensando ni quería pensar en la mujer rubia, tampoco era exactamente por una cuestión de poder, la rubia le había dado bastantes problemas también.

Así que… pensó detenidamente.

No era del tipo que pensara mucho al respecto de la apariencia de alguien al respecto de sentirse atraído, y siendo sincero consigo mismo, no recordaba mucho de la apariencia de ambas para todo lo que importaba.

Se conocía a si mismo mejor que nadie como para saberlo.

Algo le cautivo en aquella Yokai. Algo más allá de apariencia o de poder… la verdadera pregunta sería preguntarse que era.

Alzo la mirada hacia el cielo nocturno, viendo la noche estrellada y la luna dejando la luz sobre él, antes de simplemente suspirar y levantarse de golpe, estirando su cuerpo otro poco—Bueno, supongo que ya es suficiente de esto, tengo que entrenar un poco para no oxidarme— comento al aire caminando hacia la roca enfrente suyo y luego dándole un golpe con el dorso de la mano que la resquebrajo.


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—Oye… ¿No te parece raro?— pregunto un chico de cabello rubio mientras se estiraba un poco.

A su lado estaba un tipo de su edad de cabello negro, usaba un short blanco y camisa azul con el símbolo del clan Uchiha—Pasan muchas cosas extrañas en la aldea, ¿De que hablas?

—Principalmente, el hecho de que todo por acá parece dañado— comentó el rubia de ojos morados, y Sasuke Uchiha miro a los alrededores.

Árboles y rocas completamente dañados, el suelo mismo etapa con varios agujeros como si una gran cantidad de personas hubieran peleado antes allí—Tal vez este lugar es parte de un campo de entrenamiento, aunque… la mayoría de daño parece reciente no he hecho nada de que hubiera un combate o algo.

El rubio se encogió de hombros—Cómo sea, mejor para nosotros, no notarán si ya de por si hacemos daño— comentó con una risa el Ojimorado antes de que se pusiera en poción de guardia enfrente del pelinegro.

Este soltó un bufido—Si te quieres ganar una paliza, por mi bien, Namikaze— declaró el pelinegro poniéndose en su propia posición de combate .

Ambos se prepararon para lanzarse contra el otro, y luego, cuando dieron un paso al frente…

Una explosión salió del agua que los hizo brincar a ambos del susto.

Y luego vieron una figura de cabello rojo salir de las aguas sosteniendo un enorme pescado en su espalda para luego girarse para verlos después de pasarse una mano por la cara—¡Hey! Lamento si los asusté, solo venía por algo de comer, espero no les moleste— indico el pelirrojo simplemente con una sonrisa en su cara, haciendo que el rubio y pelinegro se vieran entre si.

Seguidamente hubo un leve sonido de los estómagos de ambos gruñendo… Tal vez deberíamos comer antes de entrar. Consideraron ambos, antes de notar como el pelirrojo de la nada había hecho un fuego en pocos momentos—Los peces aquí son bastante grandes así que si quieren pueden comer también— declaró el pelirrojo alzando una mano en forma de invitación.

—Bueno… a caballo regalado no se le ve el diente— declaró el Namikaze empezando a caminar a la pequeña fogata para el enorme pez.

—El burro por delante— indico el Uchiha poco antes de seguirle.

Para ser un fuego tan pequeño no tardó mucho tiempo en cocinar el pescado, el pelirrojo saco de lo que parecía un estuche en su pantalón un cuchillo de supervivencia y cortó la carne, sacando las espinas y dándoles un trozo en una hoja a cada uno de sus compañeros en la comida, además de poner sobre la carne algunos ingredientes que ninguno de los dos noto de dónde habían salido—Bueno, ¿Qué los trae por aquí? Parecen ser Shinobis por las bandanas que llevaban— comento el Ojiazul dándole una mordida a su trozo de carne.

El rubio asintió comiendo animadamente—Íbamos a los campos de entrenamiento, pero vimos el lugar destrozado y creíamos que era aquí, ¿Tu hiciste todo esto?— pregunto curioso.

Su respuesta fue el pelirrojo agitando una mano en negación—La mayoría de hecho las causaron cosas que estuve probando, no me gusta causar daños— declaró sin más el Ojiazul.

—¿Eres alguna clase de inventor o herrero?— pregunto el Uchiha el igual de curioso, después de todo, como cualquier persona con sentido común sabía que las armas venían de algún lado, y como un Shinobi alguien que proveía de armas era parte esencial de las cosas.

—Podrías decir que lo soy— indico el pelirrojo con una sonrisa divertida.

—Bueno, mi nombre es Menma Namikaze, un gusto— indico el rubio alzando el puño.

—Sasuke Uchiha— indico el pelinegro simplemente.

—Solo llámenme Okami— indico el pelirrojo manteniendo su sonrisa antes de chocar el puño con el rubio.

Este se le quedó viendo fijamente, interesado en algo—Hay algo en tu apariencia que se me hace familiar— murmuró viendo al pelirrojo—. Pero no sé que es.

Sasuke se le quedó viendo a su mejor amigo con cara neutra completamente.

Realmente, no había mucho de similar en ellos cuando mirabas a detalle.

El cabello de color rojo de Okami era de un tono más brillante y de diferente tonalidad que cualquiera que hubiera visto antes, el color de piel del Ojiazul era un tanto más oscuro que el de la mayoría de personas que conocía, mientras Menma tenía una cara un tanto redonda, el pelirrojo tenía una cara un tanto más afilada.

Eso junto con el hecho de que el pelirrojo era una cabeza más alto que el rubio no les daba mucho de parecido, más allá de las marcas en sus mejillas.

Incluso en eso, las de Menma eran delgadas y solo le cubrían las mejillas. Las del Ojiazul eran más rasgadas, llegándole al cuello.

El pelirrojo se paso una uña por las marcas que le cubrían las mejillas—Si te preguntas por estas… no lo se, supongo que ambos tuvimos una exposición similar el mismo día— declaró el Okami encogiéndose de hombros.

Arashi pareció extrañarse al escuchar eso—¿Exposición?

—CPB, de las siglas de envenenamiento por Chakra Bijuu— dijo el pelirrojo jalando la carne del pescado con sus dientes—. Tenemos la misma edad supongo, un 20% de los niños nacidos en nuestro mismo año fueron expuestos al Chakra del Nueve Colas hace años, la mayoría no sobrevivió así que esto puede ser una explicación de porque las marcas que tenemos— indicó el Ojiazul, notando como el rubio se llevaba una mano al estómago y apretaba—. En fin, no estamos aquí para hablar de ese tipo de cosas deprimentes, ¿No estaban a punto de entrenar? ¿Me puedo unir?— pregunto con una sonrisa el pelirrojo.

—¿Uh? Uhm… seguro— dijo Menma, un tanto sorprendido por el cambio tan rápido de actitud de parte del Okami.

Este se levantó y se sacudió el agua que le cubría, como un perro, apagando igualmente la fogata y haciendo que los dos presentes se tuvieran que cubrir—Muy bien, si quieren pueden venir los dos al mismo tiempo, tengo curiosidad de ver como pelean.

—Creo que eso ya seria mucho, además, estoy seguro que yo mismo te voy a dar bastantes problemas— declaró el rubio con una leve arrogancia mientras él y el pelirrojo se paraban uno enfrente del otro.

Sasuke se encogió de hombros y agarro otro trozo de pescado, alzando una mano—¡Hajime!— anuncio él para comenzar con el combate.

Naruto dio un paso hacia atrás cuando el rubio se había lanzado enfrente suyo a un disparo de velocidad, haciendo un movimiento más similar a un zarpazo que un golpe, pocos segundos de empezar a dar una mezcla de patadas y zarpazos en rápida sucesión.

El pelirrojo o se hacía a los lados sin mover los pies, o simplemente daba un paso en reversa, nada más de lo permitido—Nada mal, un estilo de combate que ataca continuamente es bastante eficaz para no dejar a tu oponente nada de espacio— hablo el pelirrojo agachándose para evitar un zarpazo y luego darle con el codo al Ojimorado, haciendo que se le fuera el aire de golpe a Menma y retrocediera por el impacto—. Sin embargo movimientos de extremidades largos te dejan expuestos a los lados, y tener un estilo de combate como el tuyo hace que la única defensa que puedas tener es seguir atacando, es un problema cuando dicho estilo también te deja aperturas que se pueden aprovechar.

El rubio se había agarrado el costado, y luego miro al pelirrojo, procesando sus palabras. Estaba… siendo educado en su forma de pelear… y no era tan arrogante como para no escuchar consejos, luego abrió un poco más los ojos cuando escucho una voz en su cabeza.

Más te vale que no pierdas contra este tipo, mocoso. La voz grave de la criatura milenaria sonó en su cabeza, haciendo que el rubio se quedará quieto, el zorro jamás le hablaba para nada que no fuera importante, e incluso así su ayuda era peligrosa. Te daré algo de mi Chakra por ahora, más vale que le ganes.

¿Qué te importa a ti que le gane? Okami parece un buen tipo.

No me agrada, así de simple. Fue la respuesta que escucho antes de que un aura de Chakra rojo como el fuego le cubriera.

Sasuke se paró al instante de donde estaba y Naruto miro interesado al Namikaze, Menma se miro las manos y las apretó repetidamente, más allá del aura roja cubriéndolo y el aumento de fuerzas que sentía, no había ningún cambio—Antes de continuar— dijo el pelirrojo con una sonrisa—. Te aconsejo que ahora además de los ataques normales, les añadas codazos y rodillazos, ayudan con la movilidad y el ataque cercano— indicó el Ojiazul inclinándose hacia adelante, en señal de que no se retractaba en lo más mínimo.

—¡Ja!— sonrió Menma ante eso, poniéndose en cuatro patas—. ¡Pues prepárate a que tus propios consejos te pateen el trasero!— declaró para luego lanzarse a una velocidad tal como para quebrar la roca debajo de sus pies.

Fue a una velocidad de vértigo contra el pelirrojo, tal que el propio Sasuke prácticamente sólo vio como un borrón rojo se lanzaba al Ojiazul, lo siguiente que vino después fue una lluvia de patadas, rodillazos, codazos y zarpas dando a un ritmo mucho más acelerado que el anterior.

Esta vez, el pelirrojo se mantuvo en su propio lugar, recto…

Y con sus manos movía de un lado a otro los ataques del Ojimorado incluso antes de que impactarán, mirando fijamente en todo momento al rubio con interés. Interesante, su estilo de combate se ve complementado cuando usa el Chakra de su Bijuu, nada mal. Pensó con una sonrisa viendo como el rubio daba un paso hacia atrás y empezaba a mandar Chakra a su mano derecha.

—¡Rasengan!— exclamó volviendo a lanzarse al pelirrojo.

Sasuke parpadeo.

Y lo siguiente que vio fue como Menma salía volando contra unos árboles a una velocidad enorme, la energía roja que le cubría desapareciendo mientras tosía repetidamente, el pelirrojo al momento fue a ayudarle a levantar, palmeando un poco la espalda del rubio—¿Qué demonios… paso?

—Ahh, eso… bueno, como dije, los codazos son buenos, sobretodo cuando tu oponente va rápido en tu dirección y tu igualmente vas contra él, se produce un efecto de rebote, quien tenga mayor resistencia es quien evita eso— dijo mostrando como los zapatos que llevaba se habían rasgado en la parte de abajo.

Menma no iba a comentar en el hecho de que la propia piel del pelirrojo no parecía tener un rasguño, ni en el hecho de que sentía como si todas las costillas se le hubieran roto. El pelirrojo le ayudo a levantarse, el Uchiha se quedo callado por bastante tiempo antes de también ponerse en donde antes había estado el Namikaze.

El pelirrojo después de asegurarse de que el rubio estuviera bien, volvió a ponerse enfrente, y como Menma no tenia fuerzas para levantar la mano, ambos simplemente se pusieron en guardia de una.

Naruto noto con una sonrisa los ojos rojos de dos tomoes de Sasuke—Vaya, interesante que me consideres digno de tener que usar el Sharingan contra mi— indicó el pelirrojo poniéndose en guardia.

—Hmph— soltó el pelinegro—. Me aseguraré de grabar bien todos tus movimientos, así que no esperes que sea tan fácil de vencer como Menma— declaró el Uchiha, no iba a comentar el hecho de que el Namikaze pudiendo controlar el Chakra de la criatura en su interior lo tenia asombrado, sobretodo por el hecho de que el pelirrojo le hubiera ganado de un golpe.

Considerando que el nivel de masa muscular que tenia el pelirrojo era mayor a ambos, tenia sentido que pudiera ganarle a Arashi en pura fuerza bruta, así que tenia que evitarlo con velocidad y reflejos, lo cual era algo que podía ganar con su Sharingan.

Dejo que el Ojiazul fuera quien se acercará a él con la guardia en alta, y mando el Chakra a sus ojos para que no se perdiera ningún detalle de lo que pasaba, llevando la precognición de su Dojutsu a su máximo.

Podía verlo.

Podía ver como el puño se acercaba a su cara lentamente, incluso antes de que el pelirrojo moviera hacia adelante su brazo, en una imagen futura de como se iba mover, podía ver a detalle la velocidad a la que iba a moverse.

Por eso fue que ver como el puño iba más rápido de lo que su precognición le había mostrado fue respondido con Sasuke moviendo la cabeza hacia atrás producto del golpe que le dejó aturdido.

¿Qué?

Volvió a ver al frente y lanzó un golpe.

Lo siguiente que sabía era que había recibido otro golpe al otro lado de la cara con el brazo contrario.

Sus sentidos y su cerebro no podían procesar lo que pasaba a suficiente velocidad.

Giro sobre si mismo para darle una patada giratoria al pelirrojo, solo para entonces su pierna fuera agarrada y terminara en el suelo, con el puño del Ojiazul a centímetros de su cara—Incluso aunque tus ojos puedan seguir el movimiento de las cosas, todavía necesitarán tiempo para que procesen todo, no tengo mucho que decir de tu estilo de combate. El Puño del Fuego de los Uchiha necesita del Sharingan para estar completo así que no tengo nada que comentar en como funciona— declaró el pelirrojo igualmente ayudando a Sasuke a levantarse.

—¡Jajajaja! ¿Cómo estaba de que no ibas a perder tan fácil, Sasuke? ¡Jajaja…! Ack, duele reírse— murmuró el Ojimorado sosteniendo su pecho.

El pelirrojo camino hacia él y su mano brillo en verde unos segundos, poniéndola a la altura del pecho del Namikaze, y este abrió los ojos cuando unos segundos después, el dolor se fue—…¿También eres médico?— pregunto Sasuke asombrado.

—Soy también un poco de todo— declaró el Ojiazul moviendo sus manos como si estuviera haciendo magia, antes de que el brillo cesará y Menma se moviera con mayor libertad que antes—. Aunque supongo que ayuda que tengas una regeneración ya de por si notable.

El rubio se rasco la nuca por eso—Jejeje, es… un secreto, no es… nada importante— dijo con un notable tono de incomodidad.

Su respuesta fue el Ojiazul agitando su mano levemente—No te preocupes, entre zorros nos entendemos supongo— declaró con una risa antes de mirar hacia el sol y poner sus dedos enfrente de su cara, como si estuviera contando algo—. Bueno, si no les molesta me iré, ya se me esta haciendo tarde.

—Considerando todo, también iremos, solo veníamos aquí a calentar de todas formas y nos diste una paliza— se río Menma empezando a caminar para seguir al pelirrojo, quien simplemente se encogió de hombros en respuesta.

—Seguro, soy nuevo en la aldea así que agradecería bastante a gente que conociera aquí— indicó el pelirrojo sonriendo.

Así mismo, empezó a ser seguido por el Uchiha y el Namikaze, en silencio que fue roto por el pelinegro—¿Así que… como eres tan fuerte? No conozco a muchas personas que puedan hacer lo que tu tan fácilmente, ¿eres un Jōnin?

—Soy un Genin en las reservas— indicó el pelirrojo simplemente con una risa—. De hecho hasta estoy seguro que ustedes tienen más experiencia en eso que yo, solo que entre algo tarde en el programa y no había manera de asignarme un equipo, así que la solución es normalmente hacer misiones en solitario o acompañado de equipos.

—Eso significa que podrías hacer una misión con nosotros— noto Menma emocionado por la idea.

—Aunque eso no responde mi otra pregunta— recalcó Sasuke.

—Bueno, mi padre, mi tío y otras personas me entrenaron cuando era niño— indicó el Okami rascándose la nuca.

—¿Son fuertes?— pregunto el rubio.

El pelirrojo se quedo pensando en eso, recordando la sensación de simplemente pararse cerca de estar en alguno de ellos—Son los más fuertes— dijo con una sonrisa.

Sasuke noto, a diferencia de un curioso Menma, que Okami no había dicho "Que conozco", pero le resto importancia. No tanto porque no le diera importancia sino… por otra cosa.

El pelirrojo noto, después de que estaban llegando adentro de la aldea el cómo estaban apunto de llegar a mi que parecía una gran mansión en medio de la aldea, era al menos cinco veces más grande que el hogar de Naruto, haciendo que se quedará viendo el lugar con curiosidad.

Habían dos mujeres en la entrada pero no les puso atención en lo más mínimo hasta que una de ellas aclaró su garganta, haciendo que bajará la mirada. Eran una chica de cabello rubio y otra de cabello negro, parecían una versión femenina de Menma y Sasuke, lo cual le hizo verlas con curiosidad.

—¿A dónde creen ustedes dos que se fueron sin avisar?— pregunto la de cabello rubio con las manos en la cintura.

El pelinegro fue el primero en defenderse—Ya estábamos bien de la ultima misión, no es para que nos traten como inválidos— indicó, haciendo que el pelirrojo alzará una ceja al escuchar una leve notoriedad de nerviosismo en su voz.

Luego la pelinegra presente le agarro de la oreja y empezó a jalar al Uchiha con los ojos cerrados y una expresión molesta en su cara—Sasuke, te atravesaron a ti como una muñeca Vudú y a Menma-kun casi lo parten en dos, hace dos semanas. ¿Y aún así a los dos se les ocurre salir antes de que les den un periodo de prueba?

Por su parte, la rubia de ojos azules miro al rubio de ojos morados con una sonrisa maliciosa—Mamá no está nada contenta con esto— declaró ella y el rubio se agitó nervioso.

Cualquier otro en su situación se habría reído, pero el Okami simplemente mantuvo su sonrisa casi de siempre viendo la situación, tenia suficiente educación para no reírse de la desdicha ajena, no significaba que no la encontrara divertida.

Y luego las dos mujeres giraron sus cabezas a verlo.

Hubo una reacción mixta interesante.

La pelinegra frunció levemente el ceño y la rubia lo suavizó, ambas de golpe, mostrando en definitiva a cada clan que pertenecían—Hey, quien sea que seas, más te vale que no te metas en esto— dijo la pelinegra cruzándose de brazos.

El pelirrojo simplemente alzó una mano con una sonrisa y la agitó, quitando peso al asunto—Comprendo, comprendo, no hay necesidad de ser tan fríos— dijo el Ojiazul antes de notar como la rubia había caminado hasta ponerse enfrente suyo.

—Si, Satsuki, no hay razón para ponerse tan fría con alguien así— declaró ella con una sonrisa coqueta, viendo al pelirrojo que era más de una cabeza de alto que ella, su propia cabeza apenas le llegaba al pecho, puso un dedo sobre el pecho del Ojiazul, subiendo suavemente, notando la tonificada musculatura que tenia—. Mi nombre es Naruko Uzumaki, ¿Y que de ti grandote?— pregunto ella de forma coqueta.

—…Sólo llámame…Okami— era turno del pelirrojo de ponerse crispado por la cercanía de ella.

—Lindo nombre para un tipo como tú— indicó ella con una sonrisa interesada al mismo tiempo que se acerca lentamente al pelirrojo.

Naruto no negaría el hecho de que Menma estuviera haciendo un ademán de querer vomitar le hacía sentirse en la misma situación que él, poco antes de que su cara de pusiera en una expresión de un tanto sorprendida al ver como la rubia daba una patada hacia atrás que envío al rubio contra una pared—Ehhm, en todo caso, será mejor que yo me vaya. Tengo unas cosas que debo hacer, espero no molestarles— dijo con una sonrisa que no mostraba lo incómodo que de sentía.

—Mejor para nosotros que tener a un tipo cualquiera por aquí— dijo la pelinegra viendo con el ceño fruncido al pelirrojo.

La rubia se giró a ver a la chica llamada Satsuki—Hey, hey, ¿Por qué tanta hostilidad? Parece un buen chico— dijo ella abrazando el brazo del pelirrojo con ambos brazos, el pelirrojo se quedó callado por como el pecho de la Ojiazul se apretaba contra su brazo—. Perdona a mi amiga, siempre está estreñida, ¿Quieres que te vaya a acompañar a tu casa?— pregunto ella con una sonrisa y un sonrojo grande en su cara.

El pelirrojo se quedó pensando en el hecho de que ella estuviera sonrojada era un indicio de lo mucho que ella hacia eso, que era poco o nada, por lo cual era… un detalle curioso de su actitud de enamorada.

La mente del Ojiazul proceso las cosas a un ritmo más rápido de lo habitual.

No tenía parentesco sanguíneo con ella o con Menma en lo más mínimo, para todo lo que importaba, ni siquiera era de la misma especie que ellos dos, su sangre demoníaca y divina se aseguraba de eso.

Junto a eso, acababa de conocerlos, sabía quienes eran, pero no tenía ningún motivo para actuar agresivo con ellos, así como no tenía en lo más mínimo ningún tipo de crianza junto con ellos no había mucho problema.

De eso a tener a su hermana coqueteando con él lo tenía increíblemente incómodo.

—Bueno, espero no sea una molestia.

—Para nada, ¿Eres nuevo en la aldea? No te había visto por aquí, tu color de cabello es curioso también, solo conozco a dos personas que lo tienen así, luego te tengo que presentar a mi madre, seguramente le agradaras a ella— dijo Naruko abrazando un poco más cerca su brazo—. Ya me agradas a mi, sobretodo porque tenemos marcas a juego— dijo ella moviendo sus mejillas un poco, con marcas de tres bigotes de zorro en su cara.

Naruto mantenía su sonrisa habitual siendo acompañado por la rubia.

Y por dentro estaba gritando mentalmente en pánico.

Se giró para ver a Menma y Sasuke.

Sus ojos mostraban una cosa clara aún cuando su cara decía otra.

Menma saliendo de la pared, hizo una señal con la mano como si cortará su cuello, y Sasuke hizo la cabeza a un lado, haciéndose el desentendido.

Traidores. Pensó el pelirrojo siendo jalado cada vez más lejos.


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Después de un incómodo viaje en el que la rubia coqueteaba con él, Naruto había regresado a su hogar nuevamente, y ahora que tenía completo acceso a sus habilidades, lo primero que considero era el hecho de que ahora tenía acceso a hacer lo que quisiera.

Lo primero que había hecho había sido usar su control de la materia para crear los objetos que se le vinieran en gana.

Lo que se traducía en más que nada la creación de muebles, había llenado su casa con la mayoría de cosas que iba a necesitar para todo el lugar en sus labores diarias.

Naruto no era mimado en lo más mínimo, ni tampoco se consideraría a sí mismo lo suficientemente pomposo como para vivir como un noble, pero con todo y todo, sabía que entrar y ver una casa completamente vacía sería raro.

Además de eso, empezó a usar su Rama Dimensional para expandir el espacio interno de su casa tanto como se le ocurriera. Para ocupar algunas otras cosas.

—¿Qué es ese instrumento?— pregunto Cosmos flotando alrededor de Naruto cuando el pelirrojo había salido de la casa, sacando lo que parecían ser una especie de círculos concéntricos que giraban en distintas direcciones, además de tener lo que parecían frascos con una especie de líquido de color morado en ellos siendo llenado lentamente.

—Son instrumentos que usan en occidente— indicó el pelirrojo simplemente, habiendo terminado de poner un total de dieciséis de los frascos con reliquias de color dorado y morado encima de ellos—. En los países del oeste usan energías diferentes al Chakra que hay por aquí, algunos usan algo que llaman magia, otros usan algo llamado Chi. Y tienen diferentes formas de estudio en eso.

—¿Magia?— pregunto Cosmos, y si tuviera cejas, Naruto estaría seguro que el pequeño dron estaría alzando una en duda—. Eso no suena muy científico para mi.

—Lo es, por si mismo— indicó el pelirrojo sentándose sobre el suelo de su casa y alzando una mano—. Puedes ver el Chakra, la energía que nosotros usamos, como una manipulación de la energía electromagnética a nuestro alrededor para lograr diferentes cosas. Algunos generan fuego, otros mueven las moléculas del agua, otros directamente generan electricidad, o manipulan la tierra. La manipulación de lo físico usando energía que también viene del cuerpo, Yin y Yang.

—Aunque comprendo un tanto el método en el cual un pseudo-sistema nervioso puede generar mutaciones que generen habilidades psionicas, desconozco bastante el como eso se puede comparar a la magia o como podría ser algo de utilidad—indicó Cosmos haciendo que el pelirrojo se rascara la nuca.

—Para ser sinceros, yo mismo no es como que pudiera usar Chakra cuando era niño. Así que mi explicación puede ser algo mala, perdón por eso— dijo el pelirrojo con una risa—. Bueno… ¿Cómo ponerlo simplemente? Ahh si, ya se. El Chakra es usar la energía de nuestro cuerpo y nuestra alma para manipular lo que te rodea, es como gastar tu propia resistencia. Por el otro lado, la magia es manipular las energías a tu alrededor y de ti mismo para generar un resultado— el pelirrojo se quedo pensando unos momentos—. Ahora que lo pienso, alguien que use Senjutsu aumentaría tanto magia como Chakra— comentó distraídamente.

—Me estas perdiendo— indicó el dron.

—Hace un tiempo me enfrente a una mujer que podía manipular las sombras mejor de lo que un Nara podría hacer en toda su vida. Su madre, también, poseía la capacidad de manipular las fronteras conceptuales de algo— indicó el pelirrojo—. Ese tipo de cosas, son, en esencia. Magia, que no está situada a la mismas limitaciones ... hace un tiempo me enfrente a una mujer que podía manipular las sombras mejor de lo que un Nara podría hacer en toda su vida. Su madre, también, poseía la capacidad de manipular las fronteras conceptuales de la realidad— indicó el pelirrojo—. Ese tipo de cosas son, en esencia, magia que no está situada a la mismas limitaciones que la humana. Lo que esos aparatos son es recolectores de energía cósmica y de otros tipos, la almacenan y la convierten en una sustancia líquida que permiten que sean usadas de distintas cosas.

—Pareces saber mucho para alguien que aparentemente es nuevo en el sistema militar de este país— indicó Cosmos con lo que sonaba como curiosidad.

—Mi padre se encargó de que supiera un poco de todo— declaró con una sonrisa el pelirrojo—. En todo caso, en algún tipo de cosas prefiero la magia que el Chakra.

—Es algo curioso, viniendo de alguien que se hace llamar a sí mismo parte de estos Shinobi, escucharte decir eso— indicó Cosmos haciendo que el pelirrojo soltará una risa avergonzada.

—Más que nada, las enseñanzas de magia que he tenido han sido un tanto más actualizadas que el Chakra, tener que aprender mis propias formas de usar el Chakra fueron las primeras cosas que hice cuando empecé a entrenar, me gusta de hecho usar las cosas que aprendo de otros lados, es interesante— declaró con una sonrisa.

Cosmos se quedo en silencio, flotando al lado del pelirrojo, antes de hablar—Akia se esta comiendo uno de tus recolectores— indicó el dron mientras el Ojiazul se volteaba para ver a la slime recostándose contra el frasco morado y empezando a cubrirlo.

—Bueno, los metales de los que está hecho son resistentes a los ácidos, pero aun así, no se si la Cósrlaa líquida no sea volátil o peligrosa— indicó el pelirrojo parándose para ir a separar a la chica slime del recolector de energía cósmica—. En todo caso, ¿No hay problema si les pido algo de ayuda en algunas misiones que tengo? Estoy de hecho curioso de saber que más podrían hacer que no sea… bueno, contra mi— indicó jalando a la slime con sus manos cubiertas de una energía de color blanco.

—Suenan parámetros aceptables, como colaboración por dejarnos residir aquí— dijo Cosmos viendo como su compañera era jalada hasta ser separada del artefacto dorado y púrpura.

—Me parece bien, en todo caso, prometo que no los llamare para misiones muy peligrosas, más que nada es que me sería de bastante utilidad alguien que pueda vigilar desde arriba y alguien que literalmente puede comer lo que sea— indicó como si el mismo no fuera capaz de hacer eso.

Realmente, estaba más curioso simplemente de las capacidades que ellos tendrían más de que pudieran ayudarle en algo.

Realmente, no necesitaba algún tipo de ayuda ahora con su energía cósmica de regreso, y ahora estaba el detalle de también tener de regreso acceso a varias cosas más que antes de su combate con Mikane y la mujer llamada Yukari no había podido acceder.

Por otro lado, no tenia intenciones hostiles más allá de curiosidad.

—Yo no quiero, conociendo como son por aquí pueden terminar cazándonos a mi y a Cosmos— dijo Akia cambiando a su forma de mujer en los brazos del pelirrojo, y girando para verle con grandes ojos de cachorro apaleado—. ¿Y no serias tan malo como para hacernos eso, verdad?— pregunto actuando de una forma mucho más femenina que en cualquier momento que el pelirrojo le hubiera visto.

A lo cual simplemente respondió con una sonrisa más grande—Hey, no hay problema, soy el más fuerte por aquí— declaró con completa seguridad de sus palabras.

La slime pareció desanimarse por eso—Lo cual me da menos confianza— dijo ella, haciendo que el pelirrojo soltará una risa por eso.


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Con sus manos, movió los escombros que cubrían el lugar rápidamente, haciendo que los trozos de roca y metal salieran volando.

Un pelirrojo de ojos rojos con una cruz dorada en ellos miraba con una expresión neutra como una mujer de cabello castaño rojizo estaba debajo de los escombros respirando con dificultad—Ese maldito de Jashin, vaya que me la jugo esta vez— murmuró ella soltando un leve gimoteo cuando el pelirrojo retiro un escombro que estaba aplastando su costado izquierdo.

¿Qué demonios te paso a ti?— pregunto el pelirrojo agarrando a la castaña y poniendo su mano sobre una de sus heridas más grandes, su mano brillo en verde antes de que un chispazo de color negro saliera de las heridas.

¿Recuerdas lo que te dije apenas llegaste aquí?— pregunto la mujer mirando fijamente al pelirrojo—. Tu me pediste la defensa definitiva y te dije que me trajeras el alma de 40 millones de mortales si querías que te diera algo de ese nivel…Y tu dijiste que no te interesaba algo con un precio así… Otro tipo vino, pidiendo la arma definitiva, y apenas dije el numero que necesitaba me trajo más de las que pedí, muchas… Muchas más— declaró ella como si nada, viendo al cielo—. No es una mala muerte morir por un arma que tu misma creaste, si te soy sincera— declaró ella siendo movida por el pelirrojo.

Supongo— comentó esto antes de que ella pusiera una mano sobre su hombro.

Espera, espera… al otro lado, quiero que me lleves al otro lado— declaró la mujer haciendo que el Ojirrojo viera fijamente como estaban a unos metros de un enorme caldero de fundición.

¿Qué es lo que quieres que haga?— pregunto el pelirrojo curioso.

El alma de un ser celestial será mucho mejor material de forjado que almas humanas— declaró ella en el momento que el pelirrojo se daba la vuelta y empezaba a caminar hacia el caldero—. Será un poco tosco en su creación, pero te aseguro que será una defensa mejor de lo que te puedas imaginar, la heredera de Amatsumara mismo. Neatla, diosa de la forja, ¡Usara su misma alma y cuerpo para forjar la mejor defensa que exista!

El pelirrojo se quedo callado al mismo tiempo que una prenda de color carmesí le cubría el torso.

Llevaba unas botas altas de color negro con rojo, unos pantalones de color grisáceo con correas que se sujetaban a sus piernas, tenía un par de cuchillos de supervivencia a cada lado junto a fundas para sus dos pistolas "Riesenhaunt y Riesengross" como las había llamado, estaban en su espalda.

Tenía un chaleco de color negro con inscripciones grises en el área de pecho y abdominales, encima de eso, tenía una chaqueta de color rojo con inscripciones doradas a su alrededor y con capucha, además de eso, tenía guantes de color negro que tenían una especie de disco en la muñeca, además de eso, llevaba dos espadas en la espalda, una de color negro y la otro de color turquesa.

El pelirrojo apretó la tela negra entre sus dedos repetidamente, Danzo le había dicho que la misión a la cual iría sería importante. Así que se había preparado acordé, había sacado bastantes reliquias y armas que tenía de su bolsillo de Kuninokotachi, además de prepararse con muchas otras cosas.

Si alguien que le conociera supiera las cosas que tenía guardadas para esa misión pensarían que estaba apunto de salir a una guerra contra un ejército del reino celestial en búsqueda de destruir cualquier signo de que existieron.

Alguien le llamaría exagerado.

Naruto simplemente carecía de cualquier signo de arrogancia para si mismo, si le decían que la situación era sería, es porque sería ya fuera lejos de su nivel de poder o cerca, él se lo tomaría con absoluta y total seriedad. La única ocasión en la que estaba en la oficina del Hokage era cuando la misión era asignada.

Ese día incluso Danzo estaba un tanto curioso de su nueva apariencia, pero no lo suficiente como para tratar de tratar de sacarle información al pelirrojo.

Con las manos detrás de la espalda el pelirrojo le daba al Shimura la misma mirada muerta que siempre le daba, una que le hacía sentir como que estuviera hablando con un cadáver viviente, y eso era viniendo de alguien que tenía soldados sin sentimientos y que tenía de segundo al mando a alguien que experimentaba en revivir cadáveres.

—El objetivo que tendrás en este caso es debido a un ataque hecho a una de nuestras provincias vecinas. En la Provincia Kogeta para ser más precisos, un ataque de lo que nuestros informantes llamaron "Ninjas Voladores" que usaban artefactos para volar, se acercaban a Konoha pero los interceptamos antes de que pudiera llegar, tenían tecnología fuera de lo normal, avanzada incluso para nuestros estándares— indicó el Shimura—. Junto a eso tenemos a una flota de barcos acercándose al país del fuego desde el Mar Sekai, pertenecen al país del cielo, un antiguo enemigo de Konoha que fue destruido en la Segunda Guerra Shinobi, parece ser que los descendientes de sus sobrevivientes buscan venganza. Tu objetivo será encontrar su base principal que debe estar cerca de las fronteras del País del Fuego, y destruirlo completamente.

—Seguro— indicó el pelirrojo restando importancia al asunto—. Matar a todo lo que este a mi alcance, no será demasiado difícil.

—Este no será como tus otras misiones, no te enfrentas sólo contra un objetivo reducido de personas, es un país completo, sus números van de los cientos a los miles, no es algo que puedas hacer solo— indicó Danzo.

El pelirrojo se le quedo viendo fijamente con la misma mirada neutra—¿Puedo ir ya a mi misión?— pregunto con tono neutro.

—…No, aun no, tendrás que ir acompañado de una persona que conoce donde se encuentran las ruinas del país del cielo y con la protección acorde a eso— declaró el Shimura, al mismo tiempo que el pelirrojo giraba su cabeza cuando la puerta.

Los ojos del pelirrojo pasaron de su desinterés normal, a una expresión de sorpresa viendo como tres equipos, un hombre anciano y un niño joven entraban por la puerta.

Una era un peliplateado acompañado de Menma, Naruko, y Sasuke. Otra era una mujer de cabello castaño y marcas moradas en sus mejillas acompañada de Satsuki, una chica de cabello rosado y una con cabello morado, por último, un hombre de cabello negro con barba y piel morena además de llevar un cigarro, tenia de equipo a una chica rubia de ojos azules con ropa morada, un chico gordo de cabello castaño y un chico pelinegro de expresión aburrida.

—¡Hey, Okami, vamos a formar un equipo después de todo!— exclamó Menma contento al verlo.

El pelirrojo sonrió, pero por dentro, sus emociones eran otras.

Me cago en todos tus malditos muertos y descendientes, Danzo.