Wola, vengo a ustedes con este fic, porque adoro al fantasma de la opera y esta idea se me vino a la cabeza, espero que les guste.

Cáp. 5 ¿Se conocen?

Y en otra parte de Europa.

- Christine, ¿estas segura? -

- Totalmente Raoul, no podemos huir toda la vida, tarde o temprano debemos volver a Paris y prefiero que sea pronto -

- Bien, si crees que es lo mejor, nos iremos mañana en la mañana -

Y nuevamente en Paris.

- Vaya trabajar como soprano es agotador – decía Elizabeth, que aparentemente tendría que trabajar como soprano unas dos semanas mas, ya que La Carlotta quería vacaciones, en fin.

- Pero si eres perfecta – decía Meg.

- Tal vez, pero eso no le quita lo agotador -

- Trata de ser bailarina y luego hablamos ¿vale? -

- Eso también ha de ser agotador -

Ambas estuvieron hablando como por una hora más, pero llegó Madame Giry con una noticia.

- ¿Adivinen qué? -

- ¿Qué? -

- Regresa Christine -

- ¿EN SERIO? – gritó Meg y Elizabeth solo se quedó muda.

- En serio -

Meg estaba muy feliz y decía que en cuando Elizabeth y Christine se conocieran de seguro las tres formarían un buen trío de amigas, pero en lo único que Elizabeth pensaba era en ver a Erik y contárselo.

- Veras Elizabeth que cuando conozcas a Christine nos vamos a divertir mucho -

- Genial -

Y esa noche:

- Erik, ¿ya sabes la nueva de que…? -

- ¿De que Christine regresa? -

- Exacto -

- Me entere antes de que llegaras -

- ¿Y cómo te sientes? -

- Con algo de esperanza -

- Ya veras que todo saldrá bien -

- Gracias Elizabeth -

Ella sonrió.

- ¿Pero qué haces aquí, deberías ensañar -

- Preferiría ensañar con mi maestro -

Erik se sintió agradecido, pues eso lo hacía sentirse necesitado, algo que Christine le hace sentir, pero de diferente manera, supongo que es porque Christine lo buscaba cuando creía que era su ángel de música, mientras que Elizabeth lo busca sabiendo en realidad quien es.

Durante lo que quedaba de noche ambos ensañaron hasta ya no poder más y Erik estaba seguro de que Elizabeth sería una excelente soprano sino fuera porque Christine ya tiene el lugar "apartado".

A la mañana siguiente:

- Christine regresaste – exclamaba Meg abrazando a la Daaé.

- Meg, ¿cómo has estado? -

- Bien, extrañándote -

- Sabes que fue necesario que me fuera con Raoul -

- Lo se -

En ese momento vieron como Elizabeth llegaba para trabajar.

- OH Elizabeth, al fin llegas, Christine ella es Elizabeth, Elizabeth, ella es Christine -

Tanto Christine como Elizabeth se quedaron mirando mientras se sonreían mutuamente la segunda nombrada dijo:

- Mucho gusto -

- Es un placer - y se estrecharon la mano.

Durante un buen rato las tres se pudieron a hablar de cosas superficiales, pero Elizabeth ya se tenía que ir a trabajar mientras que Christine y Meg se fueron a la habitación de la primera nombrada a charlar más a gusto.

Pero no solo ella se dirigía allá, también Erik tenía pensado hablar con Christine a través del espejo, pero cuando llegó y vio a la menor Giry decidió irse y volver después.

- Y dime ¿qué se siente ser la novia del vizconde Raoul de Chagny? – preguntó Meg, y eso hizo que Erik decidiera quedarse a escuchar.

Christine suspira y mira al infinito.

- Raoul es lo mejor que me pudo haber pasado, es todo un sueño. Es maravilloso, pues Raoul es cariñoso, detallista, magnifico, cuidadoso, amoroso (suspiro) ¿A dónde iba con todo esto? -

- Ahí Christine, se nota que estas enamorada -

Erik opinaba lo mismo que Meg, el ver a Christine sonriendo y hablando del vizconde mientras se pierde en sus fantasías, es síntoma de enamoramiento, Erik se sintió tan mal, rechazado, angustiado, traicionado y otras cosas, pero más que nada dolor.

Estaba tan mal que se fue a su morada, pero estaba tan distraído y caminaba tan rápido que ni se dio cuenta del ruido que hacía, fuerte y atemorizante que todos lo escucharon y se asustaron, Elizabeth también lo escucho. Ella se percató de quien se trataba y rápidamente fue a las catacumbas.

Y al llegar lo que vio fue a Erik maldecid a alguien mientras rompía y tiraba todo lo que encontraba a su paso mientras sollozaba.

- Erik, Erik ¿qué sucede? -

- Ese idiota… maldito… lo odio -

- Adivino no te fue del todo bien con Christine ¿verdad? -

- ¿Tú qué crees? -

- Tampoco me trates así, escucha debes calmarte -

- ¿Y COMO DEMONIOS QUIERES QUE LO HAGA? -

- Mira Erik, no me grites, se que estas exaltado, molesto, furioso y todo lo que quieras, pero rompiendo tus cosas no cambiaras las cosas -

En ese momento, Erik, ya cansado de romper cosas, se dejo caer en su banco que usa cuando toca el órgano, mientras se tapaba el rostro con las manos y seguía sollozando, Elizabeth se acercó.

- Ya tranquilo, no pasa nada – decía ella mientras le acariciaba la espalda.

- Perdóname, no quise gritarte, pero estoy muy furioso -

- Me imagino -

- Bueno ya, estoy bien, no tienes que quedarte, se que tienes que trabajar -

- ¿Seguro de que estarás bien si te dejo? -

- Tranquila, lo estaré -

- Bien -

Elizabeth volvió al trabajo, pero de repente vio a Meg correr hacía su dirección.

- ¿Qué sucede Meg? -

- Al fin conseguí que mamá me dijera que planean hacer los dueños para año nuevo -

- ¿Y qué es? -

- Una mascarada -

- Guau, suena extravagante -

- Si, ¿vas a ir verdad, porque tienes que ir -

- Pero Meg, no tengo con quien ir, además no tengo disfraz -

- Amiga mira donde trabajas, el disfraz es lo de menos y lo de la pareja ya lo solucionaremos luego -

- Bueno esta bien -

- Bueno prepárate, que ya casi hay que empezar con la obra de hoy -

Elizabeth se fue a alistar para trabajar como soprano, mientras que Christine estaba en su habitación, pensando en muchas cosas, como que hacer con Erik ahora que lo volviera a ver, porque ella sabía que no podía estar con él, amaba a Raoul y no pensaba dejarlo ir así como así, pero tenía miedo de que Erik le fuera a hacer algo a Raoul.

Pero dejo eso para después, ahora tenía que ver que tan buena cantante era su nueva amiga, Meg le había dicho que era maravillosa, pero quería comprobarlo ella misma, y se llevó tremenda sorpresa al escucharla, Elizabeth la superaba y por mucho, la envidiaba, pero el alegraba que alguien fuera así de buena. Y se empezó a preguntar si Erik ya la había escuchado, pues sería extraño que alguien que canta así no fuera visitado por el Fantasma de la Opera.

Y en el palco 5, ahí estaba Erik escuchando a Elizabeth, ni se percató de que Christine estaba allí, pero aunque se hubiera dado cuenta, dudo mucho que hubiera hecho algo diferente a seguir sentado mientras escuchaba a su amiga.

Nuevamente después de la función y de que todos felicitaran a Elizabeth, ella fue a ver a Erik.

- ¿Y cómo estuve? - dijo una vez que estaba con él.

- Maravillosa, como siempre -

- Que bien -

- Si, aunque creo que esta fue tu última noche -

- ¿Por qué lo dices? -

- Bueno el regreso de Christine implica que ella vuelva a cantar y que tú vuelva a ayudar a Madame Giry, Christine debe ir a donde debe y tú a donde debes -

- Ah, por eso -

Aún cuando Elizabeth sabía lo mucho que Erik amaba a Christine y lo importante que era para él que ella fuera soprano, realmente le había dolido que le dijera que ella no pertenecía al mundo de la música, pues es era un mundo importante para Erik y si ella no podía pertenecer a ese mundo, eso significaba que ella no era importante para Erik, así que solo bajo la cabeza triste y dijo.

- Yo… me tengo que ir -

- ¿Tan pronto? – preguntó Erik sin entender la reacción de su amiga.

- Si, yo… no me siento bien - ella solo volteo sin verlo y ya estaba saliendo.

- ¿Te pasa algo? -

- No, nada – dijo antes de cerrar la puerta e irse.

Elizabeth caminaba con deseos de llorar, caminaba tan rápido como podía y se tropezó con Meg y Christine que la buscaban para hablar con ella, pero ella no freno y solo siguió su camino.

- ¿ESTAS BIEN ELIZABETH? – le gritó Meg, a ver si así la escuchaba.

- ESTOY BIEN MEG -

- Que raro, por lo común Elizabeth siempre se va con una sonrisa enorme -

- Tal vez tuvo un problema de último minuto – dijo Christine-

- Tal vez -

Erik se quedó solo y confundido, sin entender que fue lo que le paso a Elizabeth, trató de analizarlo, pero sin resultados, en una de esas recordó lo que le dijo de que esa era su última noche como soprano y que debía volver a donde pertenecía "¿eso le habrá molestado?" se preguntó, entonces se dio cuenta de que hizo sentir rechazada a Elizabeth y quiso golpearse a si mismo por bruto "mañana me disculpare".

Pero esa disculpa no llegó, pues Elizabeth no fue a trabajar, mandó una nota de su parte diciendo que estaba enferma y que no podía trabajar, todos estaban preocupados por ella, porque ya antes se había enfermado y había trabajado, fuera lo que le pasara debía ser algo horrible, pensaban todos, y Erik fue el que más se sintió mal por su ausencia.

Lo que tenía Elizabeth, no era más que una depresión temporal, pues sabía que Erik no quería dañarla a propósito, pero lo que le dijo la hizo sentir mal y no podría verlo por ahora, así que no fue a trabajar, trató de calmarse pero sin muchos resultados, ya cuando un nuevo día había llegado, se dijo a si misma que ese día debía trabajar, aún no quería ver a Erik, pero tenía que trabajar, y tal vez podría evadir a Erik todo el día.

Fue cabizbaja al teatro, todos la recibieron alegres, pero se daban cuenta de que seguía mal, así que no la presionaban mucho, Elizabeth estaba acomodando unas cosas en el pasillo, cuando escucho que varias personas andaban por ahí, pero no les prestó mucha atención, hasta que escucho a Meg.

- Ah, ahí estas, MIREN AQUÍ ESTA-

- ¿Qué sucede Meg? - preguntó Elizabeth.

- Te presentaremos al novio de Christine -

- Eh… -

- Ah, ahí estas, te buscábamos por todas partes – empezó Christine que iba agarrada de la mano de Raoul -

Al momento de verlo mejor, Elizabeth quedó pasmada (y no es porque fuera guapo, bueno si es guapo pero no fue por eso), a ese chico lo conocía, si, por supuesto que lo conocía, solo que desde hace años que no lo veía.

- Él es mi novia Ra… -

- Raoul -

- ¿Elizabeth, por Dios ¿eres tú? – dijo Raoul al verla mejor y ambos se abrazaron.

- Ustedes – decía Christine - ¿se conocen? -

Ellos solo vieron a Christine y sonrieron.

Notas de la Autora: bien termine un nuevo capitulo, espero que les haya agradado, ya saben para comentarios, sugerencias, felicitaciones, rechazos, regaños, reclamos, quejas y cualquier otra cosa, envíenlas en sus reviews por favor, bueno gracias Bye.