Posesiones 3

….

Ese día era mi despedida de soltero, yo no quería porque nunca me llegaron a gustar las fiestas, o más bien así era mi naturaleza, si, me divertía pero tenía otros gustos, Shizuru siempre me decía que era más hogareño y yo no pude estar más que de acuerdo, dedicarle mi tiempo a llenarme de alcohol y hacer tonterías no era lo mío, yo preferiría leer o adelantar tareas, era un simple ratón de biblioteca y eso a ella le gustaba por que podía darle todo el tiempo del mundo, aunque no estuviésemos haciendo nada, eso era lo agradable porque ella podía estar pasando el tiempo conmigo haciendo lo que quisiéramos ya sea ella estar leyendo un libro mientras tomaba el té y yo haciendo lo mismo con un café o preguntarnos cosas de nuestras materias a veces teníamos materias en común por así decirlo, ya que los dos estudiábamos cosas distintas, ella administración de empresas y yo bueno no era tan genial pero la robótica era lo mío, pero al final del día nunca terminábamos de hablar.

Era un relación tranquila, era eso lo que nos gustaba no es que sea conformista o que no haya tenido la iniciativa porque también íbamos al parque de diversiones, o íbamos de karaoke, o a algún evento deportivo hacíamos cosas que estaba bien intentarlas, nunca le hicimos feo a algo, solo parecía buena idea. Pero para algunas personas o más bien para alguien no era muy agradable o bien visto esta clase de relación.

Pero desde que lo conocí en la preparatoria se me hizo un chico malo, si, todos decían que el era genial, atlético, inteligente, con un buen estatus, simplemente el era el premio mayor de cualquier chica y a él le encantaba ser el centro de atención, en cambio Shizuru era lo opuesto o bueno casi opuesto porque ella es la mujer ideal de toda persona y hasta podría decir que a pesar de ser muy tranquila y eso, nadie se atrevía a decir algo de como ella tomaba su vida ella podía hacer todo perfectamente, haciendo así que ellos fueran destinados uno para el otro, pero para Shizuru eso obviamente nunca iba a pasar se conocían desde que nacieron y ella siempre lo vio como ese hermano o amigo al que le podías contar todo, eso me decía ella.

Pero para él eso era como darle un golpe en la cara y al principio no me aceptaba porque decía que no tenía chiste y que no podía darle la vida que se merecía Shizuru, obviamente fue demasiado cortes para decírmelo solo a mi ya que ella había nacido en una cuna de oro, para cuando entramos a la universidad apenas me aceptaba o por lo menos pensé que le caía bien, aunque eso tampoco me importaba al igual que a Shizuru, lo que yo no pensaba era que desde ese momento quería deshacerse de mi de esta forma o lo pensó al instante en el que yo le propuse matrimonio a Shizuru.

Al principio había dudado de él por que sentí su odio cuando se lo propuse, pero después pasó y decidió que yo tuviera una despedida de soltero al cual obviamente yo no quería, de hecho eso no estaba en los planes pero ese día antes de la boda sucedió, primero me había quitado el teléfono diciendo que tendríamos una día de chicos sin nada de chicas o más bien se refería a que no estuviese pegado a ella aun antes de la boda, segundo; si le había dicho a Shizuru que quería hacer algo por mi así que también la convenció de hacer una noche de chicas que no se preocupara, que no haría otra cosa que tomar unas copas e ir a ver un partió, o eso pensaba.

Era extraño eso lo sabía se estaba portando más amable de lo que me demostraba, me sentía incómodo y el lo sabía, hasta llegué a sentir que el lo sabía por eso decidió actuar antes de que supiera yo que era lo que en realidad estaba pasando.

Pará esto sabía que Reito había traído a un par de amigos suyos ya que, yo no era una persona muy social para hacernos compañía así que primero fuimos a un árcade, después fuimos a un partió de béisbol, y así finalizar con la ida a un bar, el cual negaba, ellos se divertirían y yo solo esperaba la hora de irme a la habitación del hotel.

No sabía en cuál de todos mis parpadeos pasó, pero desperté con un balde de agua fría, tenía miedo, mucho miedo, veía a esa persona a los ojos, unos ojos obscurecidos por la necesidad de hacer daño, solo con ese sentimiento.

-Re-Reito?, qué sucede?, po-por qué estoy atado?-

-vamos eres un chico listo, a estas alturas ya deberías de saber que esta pasando-

La verdad lo sabía, sabía que sentía odio por mí, pero nunca imagine que algo así pasara.

-pe-pero-

-shh, nada de peros, nada te salvará de lo que va a pasar-

En donde estaba esposado era una columna de cemento estaba sentando en el piso, y cada que me movía me dolían las muñecas, en verdad estaba preocupado, preocupado por Shizuru más bien que por mi.

-y Shizuru? -

Dije con un poco de desesperación tratando de hacerlo entender también, pero fui golpeado con su pie en la cara.

-una basura como tú no debería de decir su nombre-

Ese primer golpe sólo fue el inicio de muchos más, sintiendo el sabor metálico en mi boca, la dificultad para respirar y ahora la poca visibilidad.

-no te preocupes amigo mío, yo cuidare de mi Shizuru, me casaré con ella, la haré mía de una y mil formas de las cuales tu no pudiste hacer, así que no hay nada más que decir de ese tema-

El escucharlo decir esas palabras hicieron que sintiera algo dentro de mí un enorme enojo, sentía todo mi cuerpo arder que poco me importo lastimarme las muñecas, quería golpearlo, golpearlo hasta que dejara de existir. Pero de nuevo recibía otra paliza y aun así no dejaba de seguir sintiendo ese enojo cada que salía de él el nombre de Shizuru.

-ya te dije que no te preocuparas, será muy fácil, simplemente no te presentaras en la boda, y luego me preguntara Shizuru que por que tardas demasiado, yo le diré que iré a verte y al final tú la abandonaste robándole mucho dinero tanto como para hacer una nueva vida sin necesidad de trabajar en todo lo que te queda de vida, tal vez se gane ella el odio de sus padres pero bueno son los gajes del oficio al final seré yo quien le ayude a salir de ese infierno en la que la metiste-

Al terminar de escuchar todo lo que iba a hacer, no conmigo sino con ella, no sabría decir cómo fue pero pude zafarme de las esposas tal vez rompiendome la mano, pero eso poco me importo porque lo había tirado al suelo, lo golpee tan fuerte como pude, tratando de no sé, sacarle la idea de que lo que estaba haciendo estaba mal. Desgraciadamente de un momento a otro no lo sé, él había sacado un arma y me disparo, sin más, solo veía la luz tenue que nos alumbraba y una mancha la cual sabía que era el, maldiciendome y llamando a alguien más mientras lo hacía, sentía pequeños dolores que poco a poco se estaban calmando hasta que nada, no había absolutamente nada, todo era blanco, sin otro color, sin sonido, sin olor, sin nada.

Y al siguiente empezaba a escuchar a lo lejos el llorar de alguien, el sonido de una voz que me hacía sentir extraño, era como si me llamara y una parte de mi sabía que pasaba y la otra no sabía si quería seguir viendo blanco y sin escuchar nada pero ahí estaba ella, llorando, llorando en los brazos de ese tipo, sintiendo aun ese remordimiento y desde que reaccione he estado tratando de alejarla de él de que sepa que él es malo, de que el me asesino.

-y,... eso es lo único que recuerdo, así que, así que por favor solo les pido que le digan que el es malo-

El silencio era tan abrumador hasta que los mire y notaba que estaban llorando.

-Dios, en serio la amaste mucho, no te preocupes si es necesario obligaremos a Natsuki a ayudarte, no te preocupes-decía la chica llamada Mai

Había pasado tal vez una semana desde que estaba en el templo esperando que pudieran ayudarme, pero era más que nada para que Natsuki se recuperará, tal vez se veía físicamente bien pero espiritualmente no lo estaba apenas podía levantarse de la cama y cuando lo hacía le daban de comer y lo hacía comiendo casi la mitad de un banquete.

-Mai no llores, estoy aquí- contestaba la pelinegra llamada mikoto

-estoy aquí sabes?-contestaba Natsuki quién aún seguía degustando la comida

-bueno así ya no lo repito-

-yo, ah gracias- fue lo único que pude contestar

-es nuestro trabajo-dijo Nao seriamente-y entonces como la encontramos, danos información que podamos utilizar ya que el primer contacto es muy importante, aunque ya lo hicimos pero aun así tampoco podemos meterte en la conversación así como así sin que nos tache de algo-

-solo le he visto salir raras veces de su departamento, el maldito de Reito es quien decidió ayudarla manejando toda su empresa familiar, mientras que ella se queda en silencio, mirando por la ventana, a veces sale por que la obliga Reito a salir porque está preocupada por ella, otras veces solo está el con ella todo el día tumbados en la cama y solo Reito hace o pide de comer y nada más, no sé cómo hacerle para que se conozcan-

-eso es algo preocupante no lo crees? - decía seriamente Mai secándose las lagrimas

-preocupante y enfermizo, más bien porque lo hace- preguntó ahora Nao

-para el le conviene porque así está con ella todo el día, tratándola bien pensando en que ella caerá a sus pies en algún momento, mientras que ella, solo está pensando en mí, en que por que lo hice, en por qué me fui, para ella es extraño todo lo que pasó, incluso contrato un investigador pero ese solo le dice mentiras, porque le paga Reito para que no indague más de lo que debería-

Dije pensando en susurros de medianoche como sus lágrimas caer en sus sueños, me sentía tan frustrado tan cansado, y tanto enojo.

-tranquilo, tengo el presentimiento de que Shizuru me está buscando-dijo Natsuki

Pero ese tono en que lo decía era como si fuera obvio y no era obvio, o no lo veía, me llegue a sentir algo enojado pero pregunte de nuevo.

-cómo sabes? -

-pudiste sentir la conexión no? -

-conexión? -

-si, pudiste sentir algo cuando te metiste en mi cuerpo, pero también sentiste algo cuando la abrazaste y la besaste no es así? -

Trataba de recordar algo y si había sentido mi corazón latir desbocado eran sentimientos descontrolados.

-s-si, tienes razón sentí algo -

-puede que me esté buscando solo por eso, es ahí donde nos podemos colar, ella por su curiosidad y nosotros para aclarar las cosas, pero tendremos que tener cuidado, las cosas que digamos solo es para ganar su confianza y una de ellas será a reglar el porqué de ese beso, Mai me contó algo extraño pero aun así tenemos que disfrazar ese hecho y puede que hasta le digamos la siguiente vez que somos y que hacemos-

Terminó de decir antes de que le ayudaran a levantarse e irse.

.

La lluvia no paraba de caer como el cielo sólo se seguía tornando más oscuro a cada hora que avanzaba y llegaba el anochecer.

Pará alguien no podía parar de rehacer la escena donde le gritaban su nombre desesperadamente, como si se conocieran como si esperaba a que fuera él.

Pero no en cambio trataba de recordar esos ojos verdes, ese calor que emanaba de ella, el olor de su cabello que parecía una noche de luna llena. En una parte se sentía ansiosa de ir a buscarla para saciar su ansiedad de curiosidad por que sintió ese algo que no creyó sentir más, se sintió calmada por primera vez en ya casi un año.

-hace un año-susurre

-dijiste algo Shizuru?-

Miraba a mi mejor amigo quien me daba su encantadora sonrisa, mientras preparaba la comida y yo seguía sentada en una silla cómoda para ver el panorama a través de la ventana, así como las gotas caer.

Si supiera que a veces me molesta que me sonría y no se por que por que se que tiene sonrisas distintas.

-no-

-en un momento estará la comida-

-está bien, gracias -

-no tienes por qué dar las sabes que haría todo por ti -

Pará ese momento dejo de hacer lo que estaba haciendo y camino hacia mí para darme un beso en la cabeza, y después alejarse, era incómodo por que lo hacía cuando éramos niños pero tampoco podía no dejarlo, me ha estado ayudando todo este tiempo sin a verme dicho te lo dije.

Pero eso solo fue de nuevo el inicio para que volviera a recordar a esa chica, recordando sus labios encima de los míos.

Preguntándome cuando la podre ver de nuevo.