Posesiones
…
Ella es alta, cabello castaño ondulado, piel suave, ojos color rubí, cara bonita, labios finos pero se veían algo ligeramente gruesos, voz un poco grave pero con tonos sensuales.
En realidad no sabía quién era, pero lo que sabía, era de que ella era Shizuru, la ex prometida de Leo, y que ahora mismo trataba de entenderlo a pesar de todas las demás voces tratando de no sé, hacer esto un problema tal vez.
-quién eres?, que haces aquí?, por qué lo hiciste? -
-ok, espera un segundo podrías por favor soltarme?, no iré a ningún lado-
Dije haciendo que ella se percatara y se alejara.
-lo siento, no fue mi intensión, que me está pasando-eso último se lo decía más para ella misma
Suspire y la observe un poco rara porque estábamos en un punto incómodo que se podía hacer?, aun así no mucho y tampoco me podía librar de esto tan fácil, las voces tanto de mi espalda como las de Leo se callaron, sin saber qué hacer ante esta situación, pero era una oportunidad que no podía desperdiciar, a pesar de este tremendo error.
-mi nombre es Natsuki Kruger-dije esperando su presentación pero ella aún estaba algo perdida-la verdad es que no sé cómo comenzar a contestarte lo que me pides, no es que no lo recuerde claro - aunque esa era la verdad, no sé quién era ella, más bien era la primera vez que yo la veía-la verdad es que no tengo palabras para definir lo que me hiciste sentir esa noche - no sabía que estaba saliendo por mi boca porque siempre fui torpe con ella y la verdad mis pensamientos no decían mucho- te vi triste y sé que ese no es motivo para haber hecho lo que hice pero hubo algo que no me dejaba-obtenía su atención y su mirada solo buscaba algo tan desesperadamente que fue inevitable dejarla hacer lo que ella quería aunque sintiera muchas cosas un poco extrañas, si lo pensaba detenidamente tenía rastros del sentimiento dejado por Leo- digo eres hermosa y es una pena que estés triste sabes? -
Me quedaba pensando en lo que había dicho que me daba un golpe mental, era tan estúpida por decirle algo así a una chica que ni siquiera conozco, pero si lo vemos de cierta manera quien en su sano juicio no la besaría solo alguien que en verdad este enamorado o caliente, o que esté ciego, porque no hay otra explicación.
-ugh, digo yo ah!, lo siento!, no es lo que quise decir, no sé, que estoy diciendo-
Yo solo hablaba pensando en que momento me tragaría la tierra, cosa que no ocurrió, ya que no tenía ni principio, ni fin, mis amigas atrás mío tampoco decían nada, Leo tampoco, lo que sí sabía era que sus miradas eran de; "no puede ser", pero todo fue cambiado por una ligera risa, notando que era ella.
-lo siento, no fue mi intención solo que hacías caras muy chistosas, no sabías que decir y yo jajaja no sé, qué este pasando, esto es tan extraño-termino de decir y podría jurar que sus ojos se volvían más cristalinos-entiendo o tal vez, no, solo está bien, finjamos que nunca paso de acuerdo?, dejémoslo cómo un error, tu no me conoces y ni yo a ti vale?, será mejor que vayan a la ceremonia de apertura aún tienen algo de tiempo-
-s-si!, gracias! - esa era Mai tomándome de la mano y veía como esto había acabado.
-¿Tú no iras a la ceremonia? - esa era Mikoto
Ella se disponía a irse por otro lado pero volteo a ver a Mikoto, mientras le daba una media sonrisa y ojos melancólicos.
-estoy cansada de esas cosas, la verdad es que no quisiera ir, pero ustedes no deben de ver a un senpai así, no es cierto? -
Se dirigió a la banca en donde ella estaba y tomó una mochila la cual se veía que no tenía prácticamente nada o eso se notaba y empezó a caminar sin decir nada.
Nosotras por otro lado no hicimos ruido y la seguimos, la verdad la ceremonia de inicio escolar pasaba a segundo plano o hasta el último plano ya que cada vez que veíamos a más personas dirigirse a donde se estaba celebrando el Inicio de clases, los susurros no paraban.
"hey, hey, esa no es Shizuru?, la que su novio la dejó vestida y alborotada? "
"si"
"dicen que su novio le robo mucho dinero"
"que jugó con ella"
"yo escuche que el día de la boda desapareció dejándole una nota que decía que gracias a ella no tendría por qué trabajar en su vida"
"Ahora mismo está repitiendo año, por lo que sucedió"
"y eso que decían que era inteligente, perder todo por alguien así era de esperarse"
"muchos le dijeron que ese novio suyo no era el mejor, hasta Reito-senpai sabía y se lo advirtió y aun así él está cuidando de ella"
Era incómodo, molesto y sobre todo no podíamos hacer nada, hicimos de oídos sordos como ella, pero cierto espíritu no estaba muy acorde y tampoco podíamos decirle que se calmara, por que seríamos nosotras las locas, no era sano para Leo, pero entendíamos lo que sucedía con sus lamentos.
Después un rato habíamos llegado al lugar donde estaban a nada de comenzar con el discurso.
-bueno chicas aquí se pueden quedar, esta parte es de los de nuevo ingreso así que me marcho-
Dio una pequeña reverencia y se fue.
-que le podía decir? - dije mirando a mis amigas que compartían dicho sentimiento o no todas ya que Nao me veía un poco molesta y Mikoto observaba por donde se había ido.
-como haya sido fue un desastre Nat, ahora no sabremos, Si podemos seguir hablando con ella o cómo hacer para que no se sienta tan mal, la viste?-decía Mai preocupada, era raro verla así, en realidad era muy emotiva con los espíritus pero tanto como para preocuparse por personas reales de carne y hueso que no sean de la familia ya era muy extraño.
-sí, creo que todas vimos que ella está a un paso de la locura y desesperación -
-y eso es muy malo-comentaba Mikoto
-malo? - decía Leo
-sí, puede que esté a nada de suicidarse, hay que terminar con esto-decía Nao más seria de lo normal.
Era cierto que esta clase de cosas podían pasar es más su depresión, tristeza, sus ganas de no seguir adelante que simplemente el extenderles la mano al hoyo en donde se encontraban estas personas necesitaban toda la ayuda, el problema era como hacerlo?, nadie lo sabían en esta ocasión.
-que!?, tienen que ayudarla por favor!-decía exaltado Leo
-cálmate lo haremos-dijo Nao
En realidad la cabeza calculadora de este grupo era Nao, ella podía decir cómo podríamos hacer que el espíritu se vaya en paz, de una forma que se podría decir que era un juego sucio, no decíamos nada mientras nos ayudaba a lidiar con esos pequeños problemas, Mai era quien conectaba ese espíritu con sus pendientes y viceversa, mientras que Mikoto y yo, éramos quienes nos encargábamos de los espíritus malvados. Aunque todas sabemos y tenemos la fuerza suficiente para hacer el trabajo en solitario siempre nos ha gustado trabajar en equipo pero ahora, era todo tan extraño desde que había perdido mi amuleto esa noche y que hayan tomado mi cuerpo.
Había pasado un mes desde que inició la escuela, el podernos acercar a sido difícil ya que Shizuru se saltaba clases, o si entraba pero su objetivo en sí no era poner atención y nadie decía nada o simplemente no iba, y lo dificultaba más porque ella estudiaba otra cosa.
-tenemos que hacer algo chicas - ese era Leo entiendo cómo se sentía, pero él también lo notaba
-no diré nada porque alguien me dirá que tengo que ser empática-decía Nao mirando a Mai, que por supuesto yo también entendía que si no hubiera sucedido lo de esa noche ahora mismo no tendríamos esta situación que va a paso caracol.
-es parte de nuestro trabajo aunque ahora mismo ni yo sé cómo acercarme-
-es lo malo de que no estudiemos la misma cosa-les decía intentando recordar nuestros horarios los cuales apenas nos daba tiempo de vernos en la escuela al igual que en la casa
-por el momento será mejor que la dejemos ser un poco, acostumbrarnos a la vida escolar, ya después tal vez se nos dé la oportunidad de acercarnos o de que Nat se acerque-decía Mikoto mientras se levantaba para irse
-Supongo que el gato tiene razón-decía Nao quien chasqueaba los dedos y aparecía el espíritu de un zorro pequeño de nueve colas, de color amarillo como las estrellas, nosotras hicimos una reverencia a ese espíritu mayor mientras que Nao le ofrecía un pequeño tributo, un dulce y una fruta-podrías vigilar a esa chica por mi? -
El zorro miro a los ojos a Nao y desapareció el tributo con sus colas, le daba un beso y se iba, era impresionante ver esa escena o más bien a ese espíritu, era tan hermoso y que Nao lo haya conseguido era saber que alguien más, haya congeniado y le haya gustado su forma de ser de ella, que es igual a la de un zorro con toques de una araña que te engatusa, el principio es el mismo el final es otro.
Otro mes había pasado y nada que reportar de nuevo solo que las visitas de Reito han sido un poco más de lo usual tal vez su ansiedad se haya acortado y era inevitable.
-muy bien chicos, déjenme recordarles sobre su proyecto del semestre recuerden que lo pueden hacen en pareja, equipo o de manera individual depende de ustedes y que dependiendo de cómo lo entreguen será su calificación, a que voy con esto, a que aún no he recibido los nombres de ciertas personas que veo pero que no me han dado ni su nombre y bien eso sería todo-
La verdad no me preocupaba puesto que fue lo primero que hice, preferiría hacer las cosas sola.
-siempre haciendo la misma dinámica-
Escuchaba la voz de Leo, aunque siempre me seguía poco a poco se controlaba más aunque su ansiedad regresaba de vez en vez.
-cierto, que tu estudiaste lo mismo que yo-decía mientras me ponía un auricular y fingía hablar con alguien
-sí y se cuáles son los libros necesarios para que esto sea más fácil, y será mejor que lo hagas ahora antes de que tal vez, ya no se encuentren los libros-
-tranquilo, aún falta tiempo-
-Natsuki… -
-ok, ok, ya voy, no entiendo por qué tanto afán sabes que no soy así, pero solo lo hago porque sé que no me vas a dejar ni dormir, estos nerds-
Agarre mis cosas y salimos del salón.
-también eres una nerd, no creas que no te vi mirando ese concurso de robots solo anotabas de cómo estaban hechos-
-o-oye!, deja de espiar así a las personas!, y sólo es educativo ok? -
-si, claro para hacer tu propio robot? -
-si! -
-jajaja! -
-cállate! -
Me puse el otro auricular y puse música fuerte para no escucharlo y mandarle un mensaje a las chicas que se fueran sin mí porque iría a la biblioteca. Después de ese ligero inconveniente y que desgraciadamente tenía que quitarme los audífonos porque tiene que haber silencio, veía a pocas personas, notando que también trabajaban en sus proyectos, suspiré y decidí ir por donde Leo me decía para obtener lo necesario y terminar este calvario.
-no sería más fácil conseguir todo esto en Internet? -
-a él, le gusta que sea sacado de un libro que de Internet por que todo eso lo sabe, así que te bajara puntos, lo veras el día que entregue calificaciones-
-que anticuado-
-más bien lo que trata de hacer es que no se pierdan las viejas costumbres, hay libros que no podrás encontrar en internet solo en una biblioteca o en una tienda de libros pero para todo esto hasta eso ahora en dia hay ciertos temas que son difíciles de encontrar-
Me decía Leo mientras me señalaba y yo agarraba el libro, llevaba alrededor de quince libros y pareciera que aún faltaban más.
-vamos, creo que esto será suficiente-
-quieres tener una calificación perfecta?-
-no, pero tu si, entonces deja por lo menos poner estos en una mesa, junto con mis cosas y seguiremos de acuerdo?-
-sí, pero en la que esta hasta el fondo, es más tranquilo e incluso puedes escuchar música, si quieres para no dormirte-
-ugh-
La verdad es que en ese tiempo Leo me había observado y conocido más, sabía que no era fan de los libros de metodología del robot, o ciencia de la robótica cosas que no llevaban a lo que en verdad era, esto era como la introducción de la introducción y era difícil para mí, más bien era aburrido hacer estas cosas, no era lo mío aunque me gustara la robótica prefería construir y que mi imaginación me lleve a lo desconocido aprender de lo que veo y esas cosas pero como en cualquier carrera uno tiene que entender la bases.
Veía la mesa que me había indicado, las personas que había poco a poco las iba dejando atrás para solo escuchar el silencio, un silencio que si no estás acostumbrado a él, este te podría comer vivo, así como me daba cuenta de que estaba apuntó de poder por fin descansar los brazos, notaba que alguien estaba leyendo en el marco de una ventana, específicamente ese alguien era con quien no sabíamos cómo acercarnos.
Mi instinto hizo que me moviera bruscamente a no estar en su área de visión notando que ella no se había percatado de mí, aunque escuchaba ligeramente la música que salía de sus audífonos. No sabía qué hacer y tampoco podía evitar lo siguiente que sucedería, lo cual era que mi pila de libros caía estrepitosamente en el suelo, la mire de reojo esperando a que no lo notará, pero eso era imposible uno de los libros caía cerca de ella y que estaba segura que su campo de visión lo vería si es que no estaba tan concentrada leyendo el libro que tenía entre sus manos, pero lo había visto.
-demonios-dije para mí misma
-estas bien? - preguntaba ella, viendo cómo me ayudaba a ponerlos en la mesa y yo queriendo meter mi cabeza en un hoyo.
-s-si, gracias-
-son muchos libros, para alguien un poco pequeña no?-
La mire poniendo atención a los libros que faltaba por recoger, esperando a que no se hayan doblado o roto las hojas.
-n-no soy pequeña y gracias-
Me había enojado, la verdad no me gustaba que me dijeran pequeña media 1.65 y a lo mucho ella me sobrepasa por diez o quince centímetros, no era la gran diferencia, pero ella por fin me miraba.
-ara, perdón no fue mi intención insultarte-
-lo sé, solo se me cayeron por que te veías tan concentrada leyendo que no quería interrumpirte - dije poniendo el último libro que yo había tomado y ponerlo la mesa
No dijimos nada más y Leo tampoco sabía que decir era extraño pero cuando le ponía la atención necesaria se veía el en paz, mientras la observaba, y ella ni sabía que él estaba su lado mirándola como la mujer más hermosa o algo parecido.
Suspiré y ella dejó los últimos libros para observarlos, leyendo cada título, tocando las portadas de algunos otros que tenían pasta dura y que eran viejos, esos la verdad ni siquiera sabía que eran, en realidad ella se había perdido entre ellos.
-Shizuru-había dicho Leo, algo melancólico y ella volteaba a verme un poco espantada mirando a todos lados
-me, me hablaste? - me miró ella, recargándose un poco en la silla mientras que su otra mano se la ponía en la cabeza.
Suspiré y miré a Leo y él se alejaba diciéndome lo siento.
-no, pero dicen que cuando uno escucha su nombre es porque es un llamado de alerta, ya sea para la prevención de una situación peligrosa o incomoda-dije esperando a que no se confundiera más o cambiará su cara
-no creo que esta sea una situación peligrosa, entonces sería la otra-dijo sonriendo retomando su postura y recogiendo las pocas pertenencias que tenía, dejando el libro que tenía leyendo
-oye dejas tu libro-
Se detuvo y sin voltear me dijo.
-ese libro es el último que necesitas, no te preocupes, puedes dejarlo en cualquier sección de este librero-señalándome el librero a su lado izquierdo y se fue
Me acerque y tome el libro observando el título que decía; ¿que sabemos de? Los robots y sus capacidades, de Elena García Armada. La verdad parecía un libro como el de yo robot pero observe a Leo perdido en el también, no dije nada y lo puse con los demás, tenía que empezar para poder devolver aquel libro desgastado.
Aunque no lo pareciera era más sencillo para mí entender a Leo que al profesor que solo parecía dedicarse a leer un instructivo para que nosotros entendamos como es que la robótica es tan genial si solo leemos un manual, pero no era así o eso decía Leo, notaba su interés y su emoción de la robótica Que me reí un poco.
-que es tan gracioso como para ver que es la primera vez que ríes así? -
-nada-dije recuperando la compostura y mirando mi reloj ya iban a hacer las ocho de la noche-será mejor que nos vayamos-levantándome para estirarme y empezar a acomodar mis cosas
-pero aun no terminamos -
-no soy un ratón de biblioteca como tu Leo-
-te vas a llevar los libros? -
-no quiero tener una tarjeta de biblioteca-dije terminando de guardar mis cosas
-pero…-decía Leo
-lo sé, lo sé, relájate-dije tomando unos libros y con rapidez y cuidado subí al librero para ponerlos arriba de él y así nadie los tomase-no pensaras que los deje en su lugar después de todo lo que pase o si? -
-por eso es mejor terminarlo ahora y lo que haces es una violación a la biblioteca-
-estoy teniendo cuidado, y sabes que no soy de las personas que les gusta hacer las cosas que normalmente uno hace- dije poniendo el último libro con más cuidado que los otros - además ya es hora de la cena, así que andando muero de hambre mañana continuamos y me sigues explicando -
-esta bien-
El proyecto que era para el término del semestre lo terminé en una semana con ayuda de Leo y su forma de explicar más sencilla, pero lo suficiente para hacerlo a mi manera.
-mañana se lo entregaras? - me preguntaba Leo, mientras volvía a poner en su lugar a todos los libros
-aún queda tiempo, no crees que eso sea exagerado hay temas que aún no hemos visto para terminar el proyecto-
-pero el propósito de esto es ver de cuánto eres capaz, así que mientras más rápido mejor, te lo puede regresar para que corrijas algo, aunque no lo creo, lo hiciste muy bien-
-me dejaras de molestar si lo entrego mañana? -
-si-
-ok, mañana lo entrego-dije tomando el último libro, aquel que se veía más viejo que los que en verdad eran viejos-que haré contigo amigo-
En realidad el libro en un principio no sabía o más bien no le encontraba lógica pero fue el que más me ayudó a entender y poder implementar todo lo necesario al trabajo, y es que en realidad me sentía satisfecha con él.
-ella dijo que lo dejaras en este librero-
-sabes?, por qué tenía este libro?, sino mal recuerdo dijiste que ella estudiaba administración de empresas-
Él se acercó a mí, observó el libro sintiendo como lo tocaba pero él Sabía que no podía sentir el libro como tal, pero sentía que algún dobles de su portada era un recuerdo no deshecho o olvidado.
-era como una biblia para mí, si algo no entendía lo volvía a leer y me ayudaba, me ayudó mucho aunque no tenga a veces que ver con lo que tenía que hacer, es un buen libro, su contenido me hizo ser la persona que soy o más bien lo que quise hacer cuando lo encontré, eso fue antes de conocerla, en realidad este libro era mío, lo robe de la biblioteca de la preparatoria-dijo apenado, no lo podía creer a decir verdad
-wow no creí que alguien tan débil como tu hiciera tal cosa-
-en realidad fue lo único que robe-
-debe de ser muy importante entonces como para que lo hayas robado y que ella lo dejase aquí-
-la verdad pensé que lo había tirado pero creo que no pudo hacerlo, así que decidió dejarlo aquí -
Me dirigí a mi mochila y la abrí de nuevo para meterlo ahí
-que haces? -
-llevármelo-
-por qué? -
-este puede ser la mejor excusa para poder entablar una mejor conversación no crees?, además si ella no ha venido es porque sabe que estoy aquí, con el libro que no puede leer, si me pregunta o algo se lo daré sino, es que… - no quise llegar a esa parte lo hice siendo racional
-lo sé, que ya está dejando de quererme-
-eso no pasará, vez como esta de desgastado, creo que todo esto no lo harías tu o si? -
-no-
-entonces tranquilo será un buen plan-
No dijo más y la verdad no sabría decir que podría pasar y la única que lo sabría sería el espíritu acompañante de Nao.
-entonces?, que ha pasado? -
Había pasado otra semana más sin podernos acercar o eso pensábamos.
-algo tienes de razón, ha estado un poco inquieta, buscando algo en la biblioteca-
-que hiciste Nat? -
-ves te dije que sería buen plan-le decía a Leo
-no estoy muy seguro-
-secuestre algo tal vez importante para ella-dije sacando el libro
-Natsuki!, si sabias que era algo importante porque lo descuidas! -
-relájate!, no fui yo, así estaba cuando ella me lo entrego-
-entonces crees que con el libro vendrá a ti? - preguntaba Mikoto
-la verdad no he pensado en eso- y era verdad
-dioses Natsuki, debiste de habernos dicho que tal si se enoja o como lo dijo Nao se desespera más, sabes que no podemos jugar con esas cosas-me regañaba Mai
-no estoy jugando, lo estoy tomando muy en serio, solo quiero que si sabe a quién se lo dio que hable conmigo-
-esta bien, perdón es que es un tema delicado, llegué a escuchar rumores, bueno los mismos de siempre, pero también los profesores se sienten preocupados, saben que es una adulta pero la verdad si se preocupan por ella, le ayudan pero hasta donde pueden, le entregan solo lo que tiene que hacer para pasar las materias, saben de lo que es capaz, con decirte que no les importa que no asista a clases, mientras tengan la esperanza de que ella les entregue los trabajos, será una carga menos o eso dicen, incluso han pensado, en que no haga los exámenes sólo puros trabajos, pero ella no tiene intenciones de querer terminar su carrera o querer hacer los trabajos-
-wow, vaya, tanto así? - decía Nao-acaso era que una diosa? -
-si-contestaba Mai- ella hizo muchas cosas desde que entró, que dejó muy impresionados a los profesores, prácticamente toda la escuela estaba a sus pies, su inteligencia, belleza, altruismo, literalmente era como nos dijo Leo-kun, que los profesores e incluso el decano están dispuestos a ayudarla pero lo único que pueden hacer es eso, sin perjudicarla, incluso las veces que no viene es porque solo se le tiene permitido una vez por semana, en realidad tiene privilegios que muchos notan y eso les molesta, pero eso no les importa, una gran mente que fácilmente sobrepasa a muchos provoco eso, y en realidad no era a la única sino también a Leo-kun lo tenían en un pedestal, pero ahora con todos los rumores es tan difícil que se toque el tema con Shizuru-san, algunos dicen que el no pudo haber hecho eso, en serio tratan de que vuelva la Shizuru-san de antes incluso la doctora de Psicología está dispuesta a darle terapia pero ella las rechaza-
Nos quedamos en silencio y tal vez solo esperando que alguna tenga una idea de lo que sucederá después pero nada.
-ok, si ella no viene yo voy por ella, ya entregue lo más importante y no me han dicho nada entonces creo que puedo saltarme unas clases -
-estas segura de eso? - preguntó Mikoto
-sí, sí, de todas maneras mi amigo puede ayudarme si no entiendo algo, él sabe más y entiendo mejor de lo que algunos profesores tratan de explicar, verdad Leo? -
-sí, claro-
-ah!, ventajas de tener a alguien que ya estudió eso, suerte entonces-
Tome mis cosas y me fui de esa mesa esperando encontrarla en la biblioteca.
-no creo que venga ya es tarde, Natsuki-
-tienes razón-mire mi reloj y eran ya las 8 de la noche.
Me sentí decepcionada por no encontrarla aunque hubiera sido mejor haberle preguntado a Nao dónde andaba ella ahora mismo. Y le preguntaría esa noche para que no esté perdiendo el tiempo o eso pensaba.
Una semana más había pasado y gracias a Nao que me mantenía al tanto sabía dónde se encontraba o más bien a que clases entraba, ya que cuando ella entraba a alguna clase yo podía entrar a alguna mía y cuando no era así, solo me limitaba a observarla.
-Natsuki ahí esta-me hablaba Leo, haciendo que pusiera atención al ver su figura sentarse en aquella banca donde la conocí-no piensas darle el libro?, está sola-
-la verdad es que no lo sé, sabes que no ha vuelto a la biblioteca a buscarlo y si llego de la nada siento que lo estropeare-
-esto es tan frustrante-
-lo sé, pero no podemos movernos tan libremente-
-lo siento, se que fue mi culpa, pero ahora que la observó y está aquí enfrente en serio mis deseos, impulsos o lo que sea que siento, los estoy tratando de contener así como ustedes me dicen, y en serio lo agradezco, pero me duele el verla así-
Lo que decía Leo lo entendía en cierta forma, y lo sentía en otra ya que, cada vez que la veía me sentía nerviosa, pero eran los sentimientos o residuos de lo que Leo siente por ella.
-lo sé, lo notó-fue lo único que pude decirle sin sentir algo más allá que la realidad de que no debía de confundirme y separar o olvidar eso que había dejado Leo conmigo.
-quisieras intentarlo, por favor-
-Leo… -
Iba a decirle que en verdad no sabía cómo acercarme a ella, y esa era una realidad y él lo entendía, el repetirle las cosas se ha hecho un hábito, es tan terco como yo, en distinta forma, pero verlo observando a su ex era otra cosa, veía amor, admiración, anhelo, en verdad la extrañaba, así que Suspiré saque el libro de mi mochila y decidí caminar, tenía que intentarlo a pesar de que pueda hacer esto más un caos.
-ujum- dije estando a un lado de ella y ella por un momento se había espantado-lo siento no quería asustarte, desconocida-
Ella me observaba y no sabía que decir pero estaba confundida.
-desconocida? - decía ella
-si, en ningún momento me dijiste tu nombre a pesar de que son contadas las veces que hemos hablado-Omitiendo lo que se habló en esas veces, pero notaba un ligero rubor-entonces… eh desconocida, solo te había estado buscando porque quería darte esto-le mostraba el libro, obteniendo su atención
-yo… -
-fue de mucha ayuda, incluso terminé el proyecto y se lo di al profesor, aún no me ha dicho nada, pero tampoco es para que me lo quede-
-debiste de haberlo dejado en la biblioteca-
-pensé que era importante, por eso quise dártelo personalmente-
-importante? -
Sentía como su cambios constantes de sentir eran entre confusión, enojo, sorpresa, tristeza, amor lo cual no sabía a ciencia cierta en que sentir.
-o bueno eso sentí, cuando te vi leerlo, aunque ahora que lo pienso para leer un libro de robótica eso significa que estudias lo mismo, que yo?-
Su cara era todo un poema.
-no-decía ella tomando el libro que le ofrecía, para observarlo, sentirlo, abrirlo, notar esas marcas que me dijo Leo que le había hecho, sabiendo de que era ese libro que me había prestado-no estudio eso, solo, solo lo hojeo, porque este libro le pertenece a otra persona que le gustaba mucho este libro, era como su biblia-
Finalizo aun observándolo sin saber qué otra cosa podía haber en el o que le dijera algo o yo que sé, era tan extraña la situación, que a veces me pregunto que si esta broma es por parte de los dioses o por los demonios y su afán de divertirse.
Pero ahora que ella había hablado la situación cambiaba no podía dejar que dejara de hablarme.
-más que nada era así porque yo sentía que ese libro es un cuento de hadas aunque no lo fuese, pero siempre me despejaba la mente-decía Leo, tratando de comunicárselo o solo encontrar una razón a lo que ella dijo y yo lo tomaba
-entiendo el porqué, es como si se tratase de un cuento de hadas, aunque no lo sea-
Ella me observaba de nuevo sorprendida así como Leo lo hacía también.
-tu…jejeje, e-eso siempre decía-
Respondió no sabiendo cómo lidiar con la ola de emociones que se presentaban de nuevo, pero lo que veía era que lloraba de nuevo. Mi instinto como el de Leo fue el acercarnos aunque supiera el que no podía sentirla, el tener una mirada suplicante me hacía involucrarme más de lo que debía, era por esa razón de que la abrazaba lo más fuerte que podía sin lastimarla y que ella me utilice como su pañuelo, hasta que ella lo decidiera.
