Capítulo 4
Buscando a un padre
-Jajá- una voz tenebrosa se escuchaba - ¡¿Quién eres?!- Gosei estaba en pose de pelea, al parecer estaba peleando con alguien - ¡Ya no importa, maldito sayayin! - un humo negro empezó a envolver al azabache - ¡Lo que importa ahora es, ¿Quién eres tú?!- el chico cada vez se estaba confundiendo aún más por las palabras del desconocido.
- ¡Hay! - El chico despertó de la pesadilla que lo estaba atormentando, rápidamente volteo a ver a su amiga quien yacía en un profundo sueño, con solo ver el rostro de la rubia el azabache se empezó a relajar.
¨Qué bueno que desperté, me alegra que Lucy este cerca, pero quien era esa voz¨Gosei empezó a pensar de quien se trataba esa voz, pero no llego a ninguna parte, el chico entonces se le ocurrió ir al bosque para entrenar y para que se le pasara el susto.
En unos minutos el semi sayayin ya se había cambio de ropa, se había puesto unas bermudas con una camiseta azul (Las había comprado, cuando estaba en Hargeon) y le escribió una nota a su amiga para que no se preocupara.
En un lugar desconocido
Un grupo de magos estaban discutiendo sobre el gremio de Fairy Tail ya que era un gremio algo problemático –Esos idiotas de Fairy Tail solo se la pasan destruyendo todo- hablaba un mago –Para serles sinceros a mí me gustan esa clase de idiotas- un chico peli azulado dijo arrogantemente –No cabe duda que son unos idiotas sin embargo no podemos pasar por alto el hecho de que son competentes- hablo otro de los desconocidos – representan un verdadero gremio- al parecer todos los magos tenían diferentes puntos de opinión –Yo digo que los dejemos estar, sin tipos como ellos el mundo sería un lugar muy aburrido-
Con Gosei
De vuelta con nuestro protagonista, este estaba entrenando dando golpes al aire, haciendo lagartijas, etc. Para Gosei entrenar, era una buena forma de despejar sus pensamientos y relajarse, tal vez fuera por su sangre sayayin o porque desde niño lo entrenaron.
-Uff…creo que fue suficiente por hoy- De repente su estómago empieza a rugir –Jajá…creo que tengo hambre, mejor me voy al gremio para que Mirajane me prepare una deliciosa comida- el chico entonces empezó a caminar hacia el gremio, imaginándose comer ese gran postre que le había dado Mirajane el día anterior.
Mientras seguía saboreando, el chico miro un árbol el cual tenía marcas de golpes, Gosei le dio curiosidad así que decidió acercarse. Cuando miro de cerca el árbol, se dio cuenta que las marcas fueron hechas por una persona que probablemente tuviera una gran fuerza, el chico toco una de las marcas y extrañamente sintió que ese árbol le era familiar, entonces se le ocurrió olerlo, cuando lo olio no pudo sentir ningún aroma lo que significaba que las marcas fueron hechas hace un largo tiempo
- ¿Quién te habrá hecho esto, amigo? - Gosei sentía cierta conexión con el árbol, pero no quiso dale importancia y procedió a seguir con su camino.
En el gremio
El semi sayayin al fin había llegado al gremio y fue bien recibido por todos los integrantes que estaban en el gremio especialmente una albina, que rápidamente lo consintió con comida, lo que hizo que el azabache se pusiera muy contento
-Está muy bueno Mirajane, haces una deliciosa comida- el chico estaba disfrutando su comida mientras que la albina estaba muy feliz por los cumplidos que le daba el azabache.
Mientras el semi sayayin estaba devorando su comida, había una discusión entre el maestro Makarov y un niño llamado Romeo - ¿Aún no ha vuelto mi padre? - el anciano rápidamente le contesto –No seas fastidioso Romeo el hijo de un mago debe tener fe en su padre y saber esperar pacientemente su regreso- el niño rápidamente le replico –Pero dijo que volvería a cabo de tres días y ya ha pasado una semana- A Gosei le llamo la atención el niño, le impresionaba que un hijo se preocupara tanto por su padre – Si no recuerdo mal fue al monte Jácome – al parecer el chico se estaba enojando cada vez más – No esta tan lejos, tienen que ir a buscarlo – el anciano levanta la voz –¡Tu viejo es un mago y en este gremio no hay un solo mago que no sepa cuidarse de sí mismo vete a casa y tomate un vaso de leche- el niño se harta y golpea a Makarov y sale corriendo llorando no antes sin decir - ¡Los odio! – cuando el maestro se recuperó Gosei fue a verlo – Creo que se ha excedido un poco maestro- Makarov se toca la nariz por el dolor –Si lo sé, pero Romeo debe entender que su padre es un mago poderoso y es un miembro de este gremio – Gosei extrañamente al escuchar esas palabras sonríe –Creo que usted también está preocupado por el padre de ese chico ¿Cierto?- Makarov se queda asombrado de que Gosei descubriera sus pensamientos – Maestro le pido que me deje ir a la montaña- El azabache hace una reverencia de súplica, Makarov se queda pensando unos instantes -¿Estás seguro de que puedes encontrar a Macao y traerlo con vida?- el chico no titubea e inmediatamente le contesta – Si estoy seguro, maestro – el anciano suspira –Entonces que se le va hacer, te dejo ir pero con una condición, que vuelvan ambos a salvo – El azabache se pone de pie nuevamente – Trato echo – el azabache sale corriendo por la puerta mientras Makarov se le queda mirando – ¿Esta seguro maestro, de enviarlo a una misión tan pronto? – La albina lucia algo preocupada por su amigo - No te preocupes Mira seguro que volverá –
Al poco tiempo Gosei llega a la montaña, gracias a que se escabullo en un tren (Se escabullo porque no tenía dinero en sus bolsillos) la temperatura estaba muy baja y había nieve por todos lados, el azabache no le importo y siguió subiendo la montaña, pero entre mas subía la tormenta empeoraba y más se le dificultaba caminar entre la nieve.
Inesperadamente algo ataca a Gosei quien no logro percatarse a tiempo, recibiendo así el golpe, tan rápido como toco el suelo Gosei se volvió a levantar logrando ver a su atacante, pero se llevó una grata sorpresa al darse cuenta que quien lo ataco era un gorila Vulcan, Gosei se pone en posición de pelea y Vulcan se abalanza encima de el, pero es recibido por un golpe al hígado que lo manda a volar, Gosei va tras él, pero no lo encuentra, solo sus huellas, entonces las sigue las cuales lo guían a una cueva que no dudo en entrar.
Adentro de la cueva era un tempano de hielo, literal todo lo que había dentro de la cueva era hielo, pero ya no había rastro del Vulcan – ¿A dónde habrá ido? - el chico buscaba por todos lados, pero no lo encontraba, hasta que fue sorprendido por el Vulcan quien le enterró un pico de hielo en el hombro, pero esta vez el chico contesto rápidamente con un golpe lo suficientemente fuerte para dejar inconsciente a alguien - ¡Maldición! Fui descuidado con este simio – decía mientras se quitaba el pico de hielo. Cuando volvió a fijarse en el Vulcan, ya no era un simio si no ya era un humano - ¡¿Pero qué carajo?!- el chico se asustó pues pensaba que todos los Vulcan eran simios y no eran humanos, pero rápidamente se le fueron las dudas al ver que la persona que estaba inconsciente tenía la marca del gremio -Él debe de ser Macao, me pregunto ¿Cómo se convirtió en simio?, no hay tiempo para eso Gosei tenemos que sacarlo de aquí- el chico se acercó al mago inconsciente y lo despertó – Oye, despierta Macao – el mago estaba despertando – Eh… ¿En dónde estoy?- el chico contesto tranquilamente – Estas en el monte Jácome, porque aceptaste una misión- el mago se queda pensando hasta que recuerda lo sucedido – Ya recuerdo…acepte exterminar todos los Vulcan de este monte, logre derrotar a 19 de ellos, hasta que me derrotaron- decía el mago algo apenado – Vaya sí que fueron muchos – Gosei le enseñaba la sonrisa característica de su familia –Si derrote a varios, pero no pude completar el encargo, ahora como voy a verle la cara a Romeo, debe sentirse avergonzado de tener a un padre débil – el chico podía sentir la inseguridad de Macao lo que provoco que sintiera algo de celos hacia Romeo – Yo creo que tu hijo le gusta mucho tener un padre que se preocupa por él, ya que él estaba muy preocupado por ti, hasta le dio un golpe al maestro, jajá - A Macao se le hace una sonrisa y empieza a soltar unas pocas lagrimas – ¿Tú crees que soy un buen padre? A Romeo siempre le molestan diciéndole que soy un borracho inútil, un bueno para nada – Gosei le toma del hombro – A él no le importa eso, para el eres el mago más fuerte de todo el mundo, el solo quiere tener un padre, no un mago que busca misiones peligrosas…- el azabache pone una cara triste – Lo bueno que Romeo tiene un padre que se preocupa por él, no como yo… mi padre me dejo desde que era pequeño para convertirme en su sucesor, yo nunca tuve amigos, lo más cercano que tuve a un padre fue aquel ser que me cuido, aquel que me alimento, solo eso tuve, desde pequeño me gusto leer porque era lo único que me entretenía, pero yo nunca busque pelear, yo solo buscaba la felicidad, y la encontré en Fairy Tail, ahora ustedes son mi familia- el chico y Macao se sintieron identificados, cada uno tenía vidas distintas pero ambos buscaban lo mismo ser felices con sus seres queridos.
Gosei ayudo a Macao a levantarse y lo llevaba cargando de un hombro - ¿Cómo te llamas chico? – decía el debilitado mago – Me llamo Gosei – el mago se le hizo una enorme sonrisa – Sabía que eras tu Gosei, solo tú puedes tener ese peinado – el mago estaba muy animado por ver a su viejo amigo – Lo siento Macao pero no recuerdo nada de Fairy Tail, no recuerdo mi pasado- El mago se quedó mirando el azabache – Que importa, lo que importa es que estas vivo, además algún día podrás volver a recuperar tus recuerdos, te lo aseguro – el chico le da una sonrisa – Gracias por comprenderme Macao.
Magnolia
Romeo estaba sentado en unos escalones recordando a otros niños burlándose de su padre y los miembros de Fairy Tail solo eran unos borrachos que no hacían nada en todo el día. Recordó a los matones que lo amenazaban, gracias a ellos su padre se vio obligado a hacer el trabajo, el chico empieza a soltar unas lágrimas de arrepentimiento, pero es interrumpido por una voz que gritaba - ¡Romeo mira quien viene conmigo! - el chico mira de donde proviene la voz y mira de que se trataba de Gosei quien traía a su padre - ¡Papa! - el chico se le hace una gran sonrisa y corre para abrazar a su padre - ¡Papa al fin has vuelto!- el mago mostraba una cara de vergüenza – Perdóname Romeo, tu padre es solo un maldito borracho- el niño rápidamente le recrimina –Eso no es cierto mi papa es un mago de Fairy Tail, y eso me hace estar orgulloso de ser tu hijo- Macao no puede ocultar sus lágrimas y abraza a su hijo.
Gosei se le hace una gran sonrisa, por ver que Macao es un buen padre, y Romeo un buen hijo, y no son igual que su padre y el, ya sin más que hacer en ese lugar el azabache se retira, pero alguien le grita - ¡Gracias Gosei-San por traerme a mi papa! - el niño lo decía con una sonrisa que el azabache se le alegro su corazón - ¡De nada Romeo, disfruta estar con tu papa! - el azabache les extendía la mano para despedirse amistosamente.
El chico estuvo por las calles un rato contemplando cuan alegre era la ciudad hasta que se dio cuenta que tenía una herida, así que decidió ir al gremio para recuperarse o más bien dicho porque quería el postre que le hacia Mirajane.
Cuando llego al gremio solo quedaban algunos pocos miembros, como Cana, Mirajane y el maestro Makarov –Hola a todos- decía el semi sayayin – Hola Gosei-Kun…- al parecer la albina se dio cuenta de la herida que tenía Gosei –Oye Mirajane me puedes dar algo de comer- La maga de las cartas se le acerca a Gosei –Oye Gosei tienes una herida en tu hombro- el chico ve su herida y no le da importancia – A sí, me la hizo un simio – decía aun con una sonrisa – Gosei puedes sentarte aquí- la albina tenía un botiquín en la mano – Okey Mirajane-San- el chico se sentó donde le había dicho la albina quien le empezó a limpiar la herida – ¿Cómo fue que te hizo esto? – el chico trataba de mantenerse relajado pero sentía incomodidad por la herida – Estaba buscando a Macao cuando me ataco el simio – la maga de las cartas se rio –Jajá aun sigues recibiendo muchos golpes, fortachón, pero recuerda que no eres inmortal- el chiste no le callo para nada bien a Mirajane – Si lo sé, pero así soy yo, me distraigo fácilmente- la albina estaba vendando al azabache – Ya quedo listo, solo ten más cuidado para la próxima – Mirajane se fue a la cocina y le traje un plato bien lleno de comida al semi sayayin, quien estaba encantado por la comida.
El chico se devoraba su comida cuando apareció el maestro – Hola Gosei ¿Cómo te fue? - el anciano se sienta a lado de Gosei – Me fue muy bien maestro, pude encontrar a Macao- el chico ya se estaba terminando la comida – Muchas gracias Gosei, pero ¿te puedo pedir un favor? – el chico puso toda su atención en el hombrecito – Esta bien, me puede decir lo que usted quiera – el anciano entonces bajo de su asiento – Por favor sígueme a mi oficina – el chico se levantó de su asiento y siguió a su maestro dejando solas a Cana y a Mirajane - ¿Cómo crees que se lo tome? – Cana le preguntaba a la mesera – No lo sé, pero espero que todo vaya bien –
Makarov y Gosei ya habían entrado a la oficina del anciano, y ambos se sentaron viéndose cara a cara - ¿Entonces que quería decirme maestro? - el anciano toma aire y empieza hablar – Mañana llega una de las magas más fuertes que haya habido en nuestro gremio, su nombre es Erza Scarlet- el chico no entendía por que el anciano le estaba diciendo que iba venir una de las magas más poderosas del gremio – ¿Por qué me esta diciendo esto maestro? – el anciano con tranquilidad le contesta - Ella es una de las personas que más te conocen Gosei, pero ella no sabe que has vuelto ni tampoco sabe que perdiste la memoria, así que te pido que entiendas que mañana ella estará confundida- el chico rápidamente entendió lo que estaba diciendo su maestro – A entiendo, quiere que mañana yo le explique todo lo que sucedió en este tiempo que llevo aquí – el anciano le asiente confirmándole lo que tenía que hacer mañana –Claro que si no quieres puedo…- Gosei interrumpe a Makarov – No yo puedo maestro solo déjemelo a mí- el maestro se relajó con las palabras de Gosei ya que él pensaba que se iba a negar –Entonces mañana, hasta entonces vete a descansar, que mañana necesitaras fuerzas- el chico solo asiente y se levanta de su asiento y sale por la puerta –Solo espero que Erza entienda- el anciano pensaba en su cabeza mientras sacaba una foto en la que se podía ver a miembros del gremio más jóvenes entre ellos estaba un chico con peinado alborotado junto una chica peli roja.
Cuando Gosei salió se despidió de Cana y Mirajane y se fue rápidamente, pero las chicas estaban hablando de algo - ¿Estas segura de dejarlo ir, desde que lo conociste te gustaba? - la maga de las cartas le preguntaba a su amiga – Si estoy segura, no estoy lista para volver a sentir lo mismo- la chica albina se tocaba el pecho mientras su amiga la veía con una cara de pena.
Gosei llego a la casa que estaba rentando con Lucy, pero no había nadie adentro, el azabache sentía que tenía que hacer algo, así que se puso a limpiar toda la casa, alzo la cama donde dormía la rubia, incluso hizo la comida para la chica.
Cuando se acostó en el sillón se quedó profundamente dormido, hasta que alguien lo despertó – Gosei-kun despierta – cuando el chico despertaba vio de quien se trataba – A Lucy ¿Cómo te fue hoy? - el azabache trataba de que sus ojos se abrieran bien – Me fue muy bien, hoy robamos un libro Natsu y yo – la chica se reía un poco ya que recordaba la vergüenza que tuvo que pasar – ¿Tuvieron algunas dificultades? - al instante le contesto moviendo sus manos para negarlo – No tuvimos muchos problemas, ya que Natsu se encargaba de pelear, yo solo me pude deshacer de uno de ellos – el chico le toca la cabeza a la rubia – Me alegra que todo haya ido bien Lucy-San – al darse cuenta que estaba algo cerca de Lucy se sonrojo un poco así que, decidió alejarse un poco para no incomodar a la rubia quien también estaba algo sonrojada.
Ambos se quedaron algo callados con lo sucedido hasta que la rubia hablo – A Gosei te gustaría comer conmigo – el chico se quedó pensando un poco hasta que recordó que había comido en el gremio – Lo siento Lucy, pero ya he cenado en el gremio, pero si quieres te puedo acompañar- la chica solo asintió algo avergonzada. Ambos se fueron a la sala donde se sentaron en la mesa y empezaron hablar, no sin antes que el azabache le trajera la comida a la rubia quien se quedó fascinada por lo caballeroso que era el chico.
Así estuvieron charlando hasta que el cielo se terminó oscureciendo – O vaya mira la hora, creo que ya es hora de dormir – la chica se quedó sorprendida ya que se le fue el tiempo hablando con el azabache.
Ambos se fueron a dormir a sus respectivos lugares, el primero en dormirse fue Gosei ya que aún estaba cansado por el viaje, y Lucy no tardo tanto en acompañarlo ya que ella también estaba cansada.
A la mañana siguiente el azabache despertaba muy tranquilamente, pero se dio cuenta que su amiga ya no estaba pero que le había dejado una nota –No quise despertarte pues te veías muy cómodo, te veo en el gremio- el chico miro la hora y ya casi era medio día, lo cual asombrado al azabache quien nunca se había despertado tan tarde, rápidamente el chico se cambió de ropa (Una bermuda azul, con una camisa morada) y salió disparado hacia el gremio.
No demoro tanto tiempo en llegar, pues se había ido corriendo a una gran velocidad. Cuando entro por la puerta saludo a todos los que estaban en el gremio – Uff…hola a todos…Uff – el azabache estaba tratando de recuperar el aliento cuando volteo a ver hacia al frente y vio a una maga peli roja, al instante recordó sus sueños y sin querer su cuerpo ya no pudo moverse - ¿Pero ¿qué? Mi cuerpo no puede moverse, que me está pasando – el chico aun trataba moverse cuando su compañera rubia lo llama – Gosei-San por aquí – la chica estaba muy sonriente por ver a su amigo, pero no sabía lo que había provocado
La peli roja voltea a ver a Gosei y se estremece al ver el rostro del azabache.
¿Qué pasara ahora? Es la pegunta, tendrán que descubrirlo en el siguiente capitulo
Hola a todos aquellos lectores que leen mi historia, les quiero agradecer por leer mi historia, enserio se los agradezco mucho, espero que disfrutaran el capítulo ya que me puse algo sentimental para hacerlo, ya sin más su amigo el sayayin forajido se despide y les desea un feliz día
