Holis, después de "unos meses" de mi ausencia e regresado con el cuarto capitulo de mi fic... Si... Me tarde un "poquito" pero lo más importante es que estoy de vuelta... La escuela me tiene hasta la coronilla de , pruevas, trabajos practicos, tareas, lecciones orales/escritas, etc... Que casi no tenia time de escribir, pero ahora que me desocupe, sube este capi
Cap 4
"Comienzo de una pesadilla"
Una chica dormía placidamente en su cama mientras que la oscuridad de aquella noche envolvía toda la habitación.
En ese momento, el dulce sueño de la chica se convirtió en una de sus peores pesadillas…
1º Vio a su amigo Ulrich…
"Ulrich querido, quisiera hablar con tigo un momento…" "…Esos amigos tuyos se te pegan como moscas…" Escuchaba su propia vos
"¿Jeremie los esta esperando, o este es su nidito de amor?" Su amigo frunció el ceño y desapareció
Luego vio a Odd…
"¡No tonto! Acaso no savias que el amarillo es el color de moda este año" "¿A ti quien te pregunto cretino?" Escuchaba una y otra vez, El rubio de mechón púrpura se cruzo de brazos totalmente enojado y también desapareció
Por Último vio a Yumi…
"¿Qué le ve a ella, que yo no tenga?" "¿Qué quieres?" "¿Podrías dejarnos en paz?" Yumi, simplemente se dio media vuelta y le dio la espalda, desapareciendo finalmente.
La chica se quedo totalmente sumergida en oscuridad y finalmente despertó sobresaltada.
Al día siguiente…
Aelita despertó violentamente, completamente bañada en sudor, se levanto de la cama y observo su reloj. 7.00 de la mañana, tomo su toalla y salio de su habitación. Se encontró con Sam, quien caminaba bostezando por el pasillo.
- Hola Aelita – La saludo
- Hola Sam – Le contesto la pelirrosada y ambas enfilaron para el baño
- ¿Y Sissi? –Agrego Aelita totalmente extrañada
- No se que le pasó – Comenzó Sam – Toque la puerta de su habitación y la llame varias veces, finalmente me respondió y me dijo que me fuera a bañar que ella después me alcanzaría… Se la escuchaba extraña – entraron al baño
- ¿Qué raro?, hasta ayer a la noche estaba bien¿No se que le pudo haber pasado? – Comento Aelita. Abrió la puerta de las duchas – ¡¡¡AHHH!!! – La chica tuvo otra visión…
--- VISIÓN DE AELITA ---
La pelirrosada se encontraba en la Hermita, su padre tocaba el piano y ella estaba a su lado, cerca de allí, en un estante, había una fotografía, no se veía claramente.
De repente el escenario cambio, Aelita estaba en su habitación y aparecieron unos hombres vestidos de negro, su padre la sujeto del brazo para sacarla de allí, pero antes de irse, coloco un papel dentro del marco de la fotografía. Finalmente todo se oscureció.
--- FIN VISIÓN DE AELITA ---
Aelita despertó, se encontraba acostada en el piso y rodeada por un montón de chicas que la miraban con preocupación
- Aelita¿Estas bien? – Le pregunto Sam al ver que la chica levantaba la cabeza
- Eso creo… ¿Qué ocurrió? – Preguntó en vos baja
- Te desmayaste,… Será mejor que vallas a la enfermería – Le sugirió Milly, quien se había agachado junto a Sam
- Cierto, por ahí solo te bajo la presión por un momento – La secundo Tamiya
-Mmm… No se preocupen, estoy bien… - Se defendió Aelita, pero finalmente termino aceptando la propuesta de las dos reporteras.
En la habitación de Jeremie…
El rubio de lentes ya había regresado de los baños y sin pensarlo dos veces, se sentó frente a su ordenador y comenzó a hacer un chequeo general de Lyoko.
Afuera…
Odd y Ulrich, había salido a tomar un poco de aire fresco, cuando se encontraron con William y Yumi, quienes charlaban animadamente.
- ¿Qué hay de nuevo? – Les pregunto Odd a ambos chicos
- Nada raro – Le respondió Yumi y le dirigió una sonrisa a Ulrich, el chico le guiño un ojo.
En ese instante, ajeno a todo. Un auto negro, muy parecido a una limusina, se estaciono frente a la entrada del colegio y de el bajó un hombre vestido de traje, que fue corriendo a abrir la puerta de atrás. Dando así a que dos personas bajaran de el, una mujer de pelo rubio ondulado cerca de las puntas, vestida de pantalones negros y remera blanca escotada y un hombre de cabello castaño claro corto, vestido de jeans oscuros, una camisa y un pulóver. Ambos entraron al colegio donde los esperaba el director Delmas y el Jefe del Departamento de Investigaciones.
Yumi vio a esas personas y frunció el seño, "Algo traman", pensó, Ulrich la vio y echo una mirada hacía donde la nipona tenia la vista fija
- ¿Y eso? – Pregunto al aire, Odd y William también observaban
- ¿Qué tramaran? – Pregunto Yumi
- No se, pero preguntémosle a Jeremie, seguro que el podrá infiltrarse en el sistema de cámaras de seguridad – Aventuro Odd, a modo de respuesta todos corrieron hacía las habitaciones.
En la enfermería…
Aelita estaba recostada en una de las camas, mientras que Yolanda, le tomaba la presión
- No tienes nada – Dijo la mujer – Aunque aún no comprendo porque te desmáyate – Aelita se incorporo lentamente – Ten cuidado y descansa, si te sientes mareada, regresa – Le sugirió la enfermera. Aelita asintió y se marcho despidiéndose con la mano.
Sam la esperaba afuera, con cierta preocupación, apenas la pelirrosada se dio vuelta, la morena se había levantado de su asiento
- Vamonós, pero que nadie se entere de esto – Le pidió Aelita, Sam sonrió
De vuelta en la habitación de Jeremie…
Tocaron la puerta y el rubio les dio permiso para pasar. Odd, Ulrich, Yumi y William, entraron mientras que este último cerraba la puerta tras de si.
- ¿Porque esas caras? – Pregunto el chico de lentes al verlos
- Oye Jeremie¿Podrías entrar al sistema de cámaras de seguridad e intentar meterte en la camara del despacho del director? – Le pidió Odd mientras apoyaba una mano en el hombro de su amigo
- ¿Y eso porque? – Le pregunto Jeremie desconfiado mientras pensaba, "¿Acaso este quiere hacer una broma y necesita la vista adecuada del lugar?".
- Dos personas han llegado al colegio y puede que sean más detectives infiltrados – Le explico Yumi brevemente
- ¿Ustedes están seguros de lo que me están diciendo? – Les pregunto el chico mientras se daba vuelta para mirar a su ordenador
- Debemos cerciorarnos – Le respondió William con voz queda
- Muy bien, veamos – Aceptó el rubio e introdujo varias claves en su computadora, finalmente, logro entrar – Ahora busquemos la camara del despacho del director… -
En ese momento, volvieron a tocar la puerta
- ¿Quién es? – Pregunto Jeremie
- Sam y Aelita – Respondió la pelirrosada desde el otro lado
- Pasen – Les respondió el genio y volvió a su trabajo, mientras era supervisado por Odd. Las dos chicas entraron
- ¿Tienen una reunión y no nos invitan? – Comento Sam irónica, Yumi enteró a las recién llegadas de lo ocurrido, cuando William se percató de algo
- ¿Y Sissi? – Preguntó
- Pensamos que estaba con ustedes… - Le respondió Aelita preocupada
- ¿Con nosotros? No la vemos desde anoche – Agrego Odd dándose vuelta para mirar a ambas chicas
- Lo encontré – Exclamo Jeremie – Mirad, allí están – Todos se acercaron al ordenador para ver
- ¡Genio, ponle sonido! – Lo retó Odd
- Lo siento, lo siento, ya… –
El director Delmas estaba sentado detrás de su escritorio mientras que la mujer rubia y el hombre castaño claro lo miraban desde el otro lado. La luz le daba un cierto toque acogedor al lugar, pero también encandilaba a la camara, por lo cual, los chicos tuvieron que conformarse viendo las sombras de las tres personas.
- Bien, ustedes han venido a darles una mano a los demás detectives¿no es así? – Pregunto el hombre canoso
- Así es señor, en realidad es para cubrir mejor la zona, también habíamos pensado en… Echar un vistazo en otros lugares, como la vieja fabrica y la casa que esta cerca del bosque… - Le contó la rubia…
- ¿NUESTRA FABRICA¡NO LA NUESTRA! – Exclamó Jeremie, mientras se agarraba la cabeza, los demás soltaron un grito de horror
… - Además, estuvimos pensando en interrogar a los alumnos, si saben algo sobre,… sucesos extraños que hayan ocurrido... – Agrego el hombre
- Bueno, entonces ustedes son… - Comenzó el director
- Los hermanos Lawrence, Martín y Ami Lawrence a su servicio señor – Los presento la mujer
- … Bueno, Martín y Ami, tienen mi permiso… - Les dijo el director, los dos hermanos se despidieron y salieron del despacho.
Jeremie cortó la comunicación y miró a los demás, con la cabeza baja
- Tenemos serios problemas… - Admitió
- ¿Qué ocurre? – Le pregunto Aelita
- Los hermanos Lawrence, son mundialmente conocidos por resolver casos y descubrir secretos, muy rápido – Contó brevemente, los demás lo miraron sorprendidos.
- ¿Nos estas diciendo que, quizás en un par de horas… - Le dolía admitirlo, pero era muy probable - … ¿Descubran nuestro secreto…? – Termino Sam
- Esperemos que no… - Rogó Jeremie
- No puedo creerlo… - Dijo Odd pálido como la cera, sus amigos lo miraron – Mi hermana lo sabe… Lo sabe… ¿Y si le preguntan?… -
- ¿Cómo es eso de que lo…? – Comenzó Jeremie, pero entendió a que se refería su amigo – ¿Se lo dijiste? – Pregunto escéptico
- Me vi obligado… - Confeso Odd –…Encima que X.A.N.A casi nos liquido… Se lo tuve que decir –
- Pues corre a prevenirle o estamos fritos – Le apresuró William
- Gracias chicos – Les dijo Odd y salio a toda velocidad del cuarto de Jeremie
En cuanto a Sissi…
La chica había faltado a clases, ni siquiera había salido de su habitación, solo quería estar sola, estaba mal, pero no por ella, sino por los demás. Había echo demasiadas cosas malas, y los remordimientos que tenia la carcomían por dentro, no quería ni salir al umbral de la puerta.
La luz entraba de lleno en la habitación, iluminándola, pareciendo casi irreal. La chica, acostada entre sus sabanas revueltas, estaba abrasada a su almohada con los ojos enrojecidos de tanto llorar. Estaba destrozada, tanto, que hasta había puesto varias cosas, en la puerta, para que nadie pudiese pasar. En ese momento su móvil sonó, la chica miro quien era "Aelita" Sissi, volvió a dejarlo sobre la cama y le lanzo un almohadón para taparlo, finalmente dejo de escucharse. La chica, no tenía fuerzas para hablar, apenas podía respirar, se abraso con fuerza a su almohada húmeda por las lágrimas, y comenzó a llorar otra vez.
En la habitación de Jeremie…
- No contesta – Mencionó Aelita tristemente
- ¿Creen que le halla pasado algo? – Pregunto Yumi y miro a Jeremie
- No hay ninguna torre activada, X.A.N.A no esta involucrada en esto – Le informo su amigo
- Y si no es X.A.N.A¿Quien es? – Preguntó Ulrich, con el ceño fruncido
- ¿Quién o que? – Agrego Sam, los demás la miraron
- ¿A que te refieres con eso? - Pregunto William
- Hoy, cuando fui a buscarla, no pude abrir la puerta, pero ella me dijo que me valla a bañar, que después me alcanzaba, pero… No salio – Relato la morena
- ¿Creen que este bien? – Agrego Aelita.
- No lo se… - Le respondió Jeremie
- Además en el tono en que me lo dijo, no se oía muy bien – Revelo Sam
- Pues vallamos a verla… - Aventuro William
Mientras tanto Odd…
El chico corría a toda velocidad por los pasillos del colegio en busca de su hermana. Ya tenía más o menos la idea fija de donde podía estar. Así que se dirigió a la cafetería.
Atravesó el patio a toda velocidad con la suerte de su parte, ya que Jim no lo pescó. Entro de golpe y allí la vio, la chica de mechas rubias tomaba un café mientras charlaba animadamente con Alex. Odd corrió a toda velocidad hacía la mesa. Puso su mano, produciendo un ruido seco y sorprendiendo a los dos jóvenes
- Disculpen. Eli, necesito hablar contigo, a solas, tres segundos, ahora – Soltó Odd sin vueltas; su hermana, lo miro con extrañeza, pero aceptó. Ambos chicos salieron afuera
- Muy bien ¿Qué querías decirme? - Pregunto con seriedad su hermana
- Tenia que decirte que… - Comenzó Odd
- ¡Eloise! – Interrumpió una voz de mujer, la chica de mechas rubias puso cara de horror y miro en la dirección de la cual venia la voz
- ¿¡AMI LAWRENCE!? – Dijo con un dejo de terror, bastante disimulado - ¿Qué haces aquí?, pensé que estabas en una misión en Finlandia –
- Ah, si… Eso, bueno, ya resolvimos el caso y vinimos para darles una mano – Agrego sin interés alguno - ¿Quién es el? – Dijo mirando estañada a Odd
- El es mi hermano, Odd – Presento Eloise, y se puso detrás del chico, colocando sus manos sobre los hombros de su hermano. Como intentando protegerlo de la engreída chica. Ami se acerco para mirar con ojo critico al chico de mechón púrpura, este se asusto al tenerla tan cerca y comenzó a sudar frió.
- ¿Estas nervioso? – Pregunto la rubia
- Eh… No… - Dijo y miro hacía abajo, no quería verle sus ojos verdes, que lo taladraban y lo hacían sentir incomodo – Estoy bien –
- Mmm… Los ojos te brillan, parece que escondes un gran secreto… Y hace mucho tiempo atrás – Observo Ami levantándole la cabeza con una de sus delicadas manos. Odd recordó a Lyoko y X.A.N.A, y trago saliva.
- Ah… ¿Un secreto? – Dijo incrédulo el chico – Bueno… Tengo novia hace dos años y mi hermana no lo sabe – Mintió y puso una sonrisa de lado. En ese momento sintió que las manos de su hermana le apretaban los hombros
- ¿Cómo es eso de que tenés novia? – Pregunto su hermana con una sonrisa y se agacho para mirarlo. Sin que Ami se diera cuenta, le guiño un ojo al chico.
- Bueno… Después te explico… - Comento Odd sonriendo de oreja a oreja y antes de irse le susurro al oído de la hermana – No digas nada… De ya sabes que… - Y se marcho corriendo a toda velocidad
- Encantador… - Comento la engreída de Ami, Eloise suspiro, mientras pensaba "Me dejo acá, con esta… Engreída de Ami, y ¿Solo me vino a prevenir de que no dijera nada de su secreto?… Si salgo viva de esta, lo mataré por dejarme sola con la loca".
En la habitación de Sissi…
Unos golpes se oyeron del otro lado de la puerta, y resonaron en toda la habitación, despertando a la pobre Sissi, quien ni siquiera se inmutó por levantar un dedo.
- ¿Sissi¿Estas ahí? Abre por favor – Se oyó la voz preocupada de Sam.
- No puedo – Respondió la chica, sin moverse de la cama y con la voz casi apagada. Desde el otro lado de la puerta, Sam se volteo para mirar a sus amigos
- ¿Qué hacemos? – Pregunto Aelita
- Dejémosla un tiempo sola, creo que lo necesita – Supuso Jeremie
- Este… ¿Eso es seguro? – Le preguntó William un poco desconfiado
- Si busca un poco de soledad, debemos darle ese tiempo que necesita, ya veras, mañana estará con una sonrisa radiante – Lo tranquilizó el rubio de lentes.
- Cualquier cosa Sissi – Agrego Sam – Estaremos en la Hermita – Todos se fueron en dirección al patio y se toparon con Odd en el camino.
- Esa… Horrible,… Manipuladora… Desquiciada – Balbuceó Odd con nerviosismo extremo
- Ya cálmate, quieres – Le exigió Sam y al ver que Odd le hizo caso omiso, le dio una bofetada. El chico se froto el cachete, mientras que los otros se quedaron escépticos mirando a la pareja.
- ¿Y eso porque? –
- Para que te calmes – Le respondió Sam y le puso la mano en un hombro – Ahora que estas más "relajado"¿Nos decís porque venias tan histérico? – Agrego poniendo énfasis en "relajado". Odd respiró hondo y miro al techo, finalmente les contó lo que le había pasado con Ami Lawrence, mientras caminaban por el bosque. Todos se miraron con una sola pregunta en sus cabezas, "¿Cómo diablos había podido hacer eso?".
Mientras tanto Sissi…
La chica se había levantado finalmente de su cama, ya era media tarde y la luz ya no entraba tanto en la habitación. La chica miró el reloj, las cinco de la tarde, había faltado a las clases de la mañana y ahora no tenia ni las más remotas ganas de pensar en eso. Sus amigos la habían dejado sola, tal y como ella quería, se acercó a su guardarropas y se vistió lentamente.
Poco después, la puerta de su cuarto se abrió poco más de un centímetro y medio, y comprobando de que no hubiese nadie en el pasillo, Sissi Salió de la habitación y corrió hacía la dirección.
En la Hermita…
Los chicos entraron y comenzaron a investigar si Hopper había dejado alguna pista sobre Cartago, pero, luego de un rato, cayeron en la cuenta de que no había nada. Todos se reunieron en la desordenada sala, en la cual había un piano de cola. Decepcionados por la frustrada búsqueda se relajaron y se dispersaron por todo el lugar.
De repente, un viejo televisor se encendió sin motivo alguno, cosa que no pasó desapercibida por ninguno de los chicos, en la pantalla del televisor, se veía una imagen borrosa y casi indefinida y se escuchaba una voz entrecortada por la interferencia.
- Por... favor... tengo… decirles… algo… importante… X.A.N.A… - Se oía, Jeremie al oír la última palabra sacó su inseparable laptop de su mochila y conectó un cable en el puerto USB y el otro extremo al televisor, la imagen se transfirió a la computadora y los siete chicos observaron con desdén. La voz de Hopper se oyó mucho mejor.
- Les tengo malas noticias, todo el mundo esta en peligro, X.A.N.A tiene un plan macabro que… - La comunicación se cortó, el televisor y el pequeño computador se apagaron al instante. Jeremie intentó restablecer la comunicación, pero no pudo.
- X.A.N.A, se enteró de que Hopper se había comunicado con nosotros y cortó la energía – Descubrió Jeremie con voz fría.
Volviendo con Sissi…
La chica corrió por el patio de la escuela, particularmente desierto, y llegó hasta la dirección. Agitada respiró profundo y se percato de la presencia de la secretaria de su padre. Esta dejó de escribir en su ordenador y le lanzó una mirada curiosa.
- Tu padre esta en una reunión muy importante con dos destacados detectives… - La previno – Así que no te convendría interrumpir – Sissi se dio media vuelta para irse y sin querer escuchó un fragmentó de la conversación.
- Iremos a la Hermita y si es necesario, voltearemos el lugar de cabeza, hasta obtener una pista, la más mínima que sea, sobre el proyecto en el que Hopper trabajaba - Oyó Sissi, y en ese momento recordó la que le había dicho Sam antes de irse, "…Estaremos en la Hermita…". Tenia que ir a avisarles a sus amigos de que corrían riesgos de que los descubrieran. El ruido de la cerradura de la puerta la sacó de su ensimismamiento, y corrió lo más rápido que pudo hacía el bosque.
La chica no sabia en que pensar, solo corría por el lugar intentando librarse de cada pensamiento malo sobre su pasado que se le cruzaba por la cabeza.
En el cielo, habían comenzado a formarse nubes oscuras que se reunían tapando todo el cielo celeste que se veía y lo peor de todo era que, esas nubes eran muy oscuras, tanto, como el pasado de Sissi.
Regresando a la Hermita…
Mientras Jeremie trabajaba por restablecer la conexión, Aelita se distrajo un momento y miró hacía donde estaba el piano de cola. En ese momento recordó la visión que había tenido esa mañana en el baño de chicas y se dio media vuelta sobre sus talones para mirar a la biblioteca que estaba allí¡Eureka!, la fotografía enmarcada aún seguía allí, polvorienta y casi irreconocible por los kilos de tierra que tenia encima, perro estaba allí.
Aelita atravesó la habitación y tomo la fotografía entre sus manos, la limpio con una de sus rosadas mangas del suéter y se quedo mirando la foto del interior. Parecía ser en navidad. La Aelita de la foto tenia, aproximadamente, unos cinco años y enfrente de ella había una caja marrón. Estaba abierta. Y de ella, medio cuerpo de un muñeco sobresalía. Aelita lo reconoció en seguida. Era el señor Puck. Su padre estaba arrodillado a su derecha con una expresión de alegria en el rostro y su madre, en el lado izquierdo sonreía feliz. Dos lágrimas nacieron en los ojos de la pelirrosada y se deslizaron por sus pálidas mejillas.
Yumi y Sam, se acercaron a la chica y la vieron llorar en silencio. Ambas chicas se pusieron a cada lado de la pelirrosada y la consolaron. Aelita les mostró la foto, las dos chicas se entusiasmaron y agarraron la fotografía, fue entonces cuando Aelita se percato de que un papel había caído al suelo. Se arrodillo y lo levantó.
El papel estaba doblado en cuatro, y en su interior había una especie de carta escrita a mano y un poco des prolija.
Luego de todo lo sucedido, realmente me tendría que haber negado a trabajar en aquel maldito proyecto. Mírenme ahora, una familia destrozada. A mi esposa se la llevaron, y no quiero que hagan lo mismo con mi pequeña hija, es por eso que me yo la llevare, para ponerla a salvo. No será una de mis mejores ideas pero, por lo menos podremos vivir en paz en un mundo donde no existe el tiempo y así escapar de los problemas...
La carta continuaba, pero la última parte había sido arrancada, es por eso que Aelita no pudo terminar de leerlo.
Mientras tanto en el bosque, no muy lejos de allí…
Sissi corría lo más rápido que sus piernas le permitían, y a pesar de la vegetación del terreno, resbalo varias veces, pero siempre siguió adelante.
Finalmente llegó al patio de atrás de la Hermita y se metió por la puerta trasera, corrió hacía la sala y se encontró con sus amigos.
Todos se sorprendieron con la inesperada llegada de la chica.
- Tenemos... que salir… de aquí… ahora… - Dijo totalmente agotada.
- ¿Porque Sissi¿Qué ocurre? – Preguntó Aelita y se acercó a la recién llegada.
- Los detectives… - Comenzó Sissi, Jeremie se paró al instante recordando el fragmento de la conversación de ambos gemelos con el director Delmas.
Ajeno a todo, un auto particular se detuvo frente a la casa "abandonada". Ulrich escuchó un ruido y calló al resto con una mano levantada, y lentamente se acerco a la mugrienta ventana. Asomó su cabeza lo suficiente y vio que dos figuras se acercaban hacía la casa.
- ¡Retirada, retirada, ahí vienen! – Alertó el chico. Ocho chicos saltaron de sus lugares y se dirigieron hacía la puerta, por la cual, Sissi había entrado unos segundos antes. Pero a Aelita se le cayó el marco con la fotografía y regresó a buscarlo.
Desde el patio de adelante Ami Lawrence distinguió una sombra en la ventana. Parpadeó.
- ¡Hay alguien allí adentro! – Gritó y corrió hacía la puerta de la casa.
Sissi se detuvo en el umbral de la puerta y regresó para apurar a Aelita. La chica agarró a la pelirrosada y la jaló del brazo con violencia. La puerta de adelante se abrió y una histérica rubia entró de golpe. Observó el lugar con detenimiento, pero no vio a nadie. Aelita y Sissi, estaban escondidas detrás de una pared y aprovecharon la distracción de la mujer para salir por la puerta de atrás.
- ¿Estas segura de que había alguien aquí? – Pregunto Martín.
- Si… - Dirigió la mirada hacía el televisor y vio un cable tirado en el suelo –…Muy segura… - Sonrió con malicia.
En la fabrica…
Jeremie, sentado en su sillón frente a la supercomputadora, miraba a sus amigos con pesar, y finalmente soltó un suspiro para cortar el silencio incomodo que se había apoderado del lugar.
- …Bien… - Dijo. Sus amigos lo miraron - …Tendremos que hacer todo lo que sea necesario para evitar que nuestro secreto sea descubierto… -
- ¿Alguna sugerencia Einstein? – Preguntó Odd desganado mientras miraba al suelo. Un silencio corto que fue interrumpido por la voz de Aelita.
- Por más tonto que parezca… No debemos hacer nada fuera de lo común… - Su voz resonó por todo el laboratorio.
- O sea,… Nada de X.A.N.A, nada de torres activadas, nada de Lyoko,… Nada de nada… - Comentó Odd, aún con la cabeza baja.
- No mientras estemos vigilados – Aclaró Yumi – Pero si podremos seguir reuniéndonos en las habitaciones, en mi casa, o aquí – Lo animó.
- En pocas palabras… Esto seria como un tema Tabú – Finalizó Ulrich, con voz fría. William suspiro con bronca.
- El destino a veces se pone en tu contra… - Comentó. Mientras tanto, arriba en el cielo, las nubes negras ya se habían apoderado de casi toda la ciudad, cubriéndola de tinieblas. La mayoría de sus habitantes, pensaron que era solo una tormenta que no seria más que un temporal, pero realmente ignoraban su verdadera procedencia.
- ¿Qué pasó con X.A.N.A, recuerdan lo que dijo Franz? – Agregó Aelita, cambiando de tema, y un escalofrío la recorrió entera.
- El súper scanner no detecta ninguna torre activada – Le informó Jeremie y desvió la vista hacía el ordenador, de repente, una ventana se abrió, y la imagen de una reportera de televisión se mostró en ella.
- Todos los meteorólogos están asombrados por la gran tormenta que se a instalado sobre la ciudad – Se escuchó su voz. En la pantalla, se mostró el cielo negro en su totalidad. Parecía de noche, entonces, la mujer agregó - No tienen ni la más pálida idea de donde pudo venir esta tormenta. Ya que, para la ciudad no se registrarían lluvias hasta la mitad de la semana que viene… – Jeremie apoyó un codo en una de los apoyabrazos de su asiento y apoyó su cara sobre la misma mano. Frunció el seño ligeramente mientras transcurría la noticia. Un hombre pelado se veía en la pantalla y dijo.
- Realmente, este es un fenómeno inexplicable, tanto que, ni nuestros sistemas más sofisticados han logrado detectar su procedencia… Y algo más, no parecen estar echas de vapor,… Sino de… - Dudó un momento - …Electricidad… - La última palabra sacó a los chicos de su tranquilidad, y todos se miraron entre si, teniendo la misma respuesta en sus cabezas… "X.A.N.A".
En el Kadic…
- ¡Debemos hacer algo! – Replicó Odd
- ¿Qué quieres que hagamos? X.A.N.A no esta en Lyoko, y ahora se nos hará mucho más difícil, porque ya no depende de él – Le informo Jeremie, desde su asiento, en su habitación.
- ¿Ah, entonces nos vamos a quedar de brazos cruzados mientras X.A.N.A se dedica a destruirnos? – Volvió a insistir el rubio de mechón púrpura.
- No es así – Sonó la voz de Aelita desde el ordenador de su "amigo" Jeremie – Estando en Lyoko, les informare de cada actividad extraña que se registre – La cabeza de Aelita apareció en una de las tantas ventanas que se encontraban abiertas en la pantalla del ordenador.
- Parece algo arriesgado, pero servirá – Se oyó la voz de Yumi, también proveniente del ordenador, pero a diferencia de Aelita, Yumi estaba en su casa, y se comunicaba con sus amigos vía celular.
Poco a poco, los chicos se fueron cada uno a sus habitaciones, para ir a dormir. Yumi, se despidió de sus amigos y se corto la comunicación con ella. Finalmente se quedaron, Ulrich, Odd y Jeremie y Aelita, reunidos.
- Realmente siento culpa, por tener que dejar a Aelita sola de guardia en Lyoko – Comentó Ulrich.
- Oh, no te preocupes, ya estoy bastante acostumbrada, además, soy la única que posee una fuerte conexión con Lyoko y cada una de sus torres – Aclaró – Así que si ocurre algo raro, les avisare enseguida –
Finalmente. Ulrich y Odd decidieron irse a dormir. Y se despidieron de Jeremie y de la Aelita virtual. El rubio largó un bostezó y luego de tantas insistencias de Aelita, decidió hacerle caso e irse a dormir un rato.
Se puso el pijama, abrió las sabanas de su cama y se acomodo dentro de ellas. Se dio media vuelta, y se quedo mirando la pared, con el póster de Einstein que estaba pegado en ella. Cerró los ojos y se relajó ligeramente. Respiró profundo y comenzó a dormirse. Soltó un leve ronquido y, para arruinar su sueño, alguien golpeo la puerta.
El chico despertó de golpe pensado que era Aelita. Pero, luego identificó de donde provenía el sonido.
Buscó sus anteojos en el suelo y se levantó con pereza, abrió la puerta un poco y asomó la cabeza. A simple vista y sin ponerse los anteojos, diviso lo que parecía ser una mujer rubia. Pestañó varias veces y fue cuando la mujer habló.
- ¿Jeremie Belpoins? – El susodicho, se estaba acomodando los lentes
- Si, soy yo – Respondió este con voz adormilada - ¿Qué necesitan? – Pregunto y miró de pies a cabeza a la mujer, fue entonces cuando logró reconocerla. "¡Era Ami Lawrence¡Nunca reconocerla antes!" Sonó una voz adentró de la cabeza del chico "¿Y ahora que hago?" Preguntó otra segunda "Jamás me había sentido tan nervioso" Comentó una tercera.
Jeremie, miró a alrededor y vio al gemelo de Ami, Martín Lawrence. Comenzó a sudar frío.
- Queríamos preguntarte si… - Hurgó en su bolso - …Esto es tuyo… – Sacó de el, un cable que el rubio reconoció al instante, y por ello, se le callo el alma al suelo "Si decís que si, te van a someter a un tedioso interrogatorio" Le advirtió la primera voz, que fue interrumpida por la segunda "Pero si le decís que no, tal vez te dejen en paz…". Jeremie no tuvo tiempo de pensar nada más, porque escuchó una alarma que le era demasiado familiar.
- Ah… Regresó en un momento – Avisó y cerró la puerta de golpe. Corrió hacía su computadora y estableció conexión con Lyoko
- Aelita,… Aelita ¿Qué ocurre? – Preguntó desesperado
- ¡Jeremie! X.A.N.A activó,… Aunque esto te parezca raro… tres,… Cuatro… Cinco… ¡¡¡Seis torres, en el sector polar!!! – Resonó la voz aterrorizada de Aelita.
- Oh, oh – Dijo Jeremie al escuchar los insistentes golpes en la puerta de entrada – No te preocupes, ahora vamos para allá – Dijo y cortó comunicación con la pelirrosada. Se vistió muy rápido. Tomó su laptop y miró en todas direcciones, finalmente su mirada se fijó en la ventana.
Amy Lawrence, cansada de llamar con insistencia, decidió entrar por la fuerza. Abrió la puerta de un golpe y encontró a Jeremie, quien tenía un cable en la mano.
- No, no es mío – Dijo estirando el brazo y mostrando la evidencia. Amy y Martín se quedaron escépticos, pero finalmente aceptaron el hecho de que el chico tenía razón. Se despidieron de él, y se marcharon. Apenas cerraron la puerta, Jeremie abrió una de las ventanas de su cuarto y salió por ella. Considerando la idea de que se había vuelto completamente loco, pero que, dadas las circunstancias, decidió seguir caminando lo más aferrado que pudiese a la pared y sin mirar hacía abajo. Comenzó a cruzar el estrecho espacio que había entre su ventana, y la siguiente de la derecha, la cual daba a la habitación de Ulrich y Odd…
Bueno¿Que les pareció este capitulo? Espero que bueno, pero ahora...
Proximo capitulo: La profesora Hertz desaparece y llega una profesora muy familiar para alguien... ¿Con un regreso al pasado se puede borrar la memoria de los últimos aliados? Y aquella tormenta que parecia "normal" se va tornando más violenta a medida de que pasan las horas. Una decisión crucial puede cambiar el rumbo de las cosas...
Plis dejen un rr, si quieren que siga esta loca hisoria mia... xD!
