Seth estaba durmiendo tranquilamente, tanto que parecían horas debido al hecho de que no había nada de luz… ¿nada de luz?
"Ey Seth, despierta"
- Un momento… - Abrió los ojos en aquel momento y encontró que todo estaba oscuro, solo había una tenue luz afuera. El pelinegro acechó a ver, encontrando que neblina estaba cubriendo el cielo, lo cual no permitía que el sol pudiera brillar. – Oh… ya es hora.
"Ok Seth, este es tu primer incidente y de la misma forma, según la cronología de Windows, es el primero en la historia igual, así que ya debes estar preparado"
- Ciertamente… mi nivel ahora mismo es 19 y he estado practicando desde que tuve esa batalla con Yukari, debería poder defenderme ahora.
"Y además ya sabemos al verdadero culpable así como su ubicación ¿Seremos tramposos y vamos antes que Reimu y Marisa"
- Estaría bien, pero igual la fuerza de esos enemigos no es algo que pueda batallar por mi cuenta, puedo defenderme más no ganar posiblemente.
"Entonces deseas unirte a ellas para enfrentar el incidente, tampoco estaría mal, mejores posibilidades"
- Y si me ahorra la posibilidad de batallar tanto, mejor para mí.
"Entonces como empezarás"
- ¿Cómo más? Tantearé la aldea. – Se levantó en aquel momento y salió, una gran neblina realmente cubría a todo Gensokyo lo cual dejaba todo en la oscuridad, no es que tuviera mucho para ver, e incluso si volaba quizás estaría cubierto. – Keine seguro está en movimiento al respecto.
Al llamar a la nube voladora y volar, incluso el cielo estaba cubierto de neblina, fue un poco complicado ver por lo que en ese momento imaginó una linterna, para que al menos se ubique, así no le tomó mucho tiempo para llegar a la aldea que igual estaba cubierta en neblina y no había nadie en las calles, aterrizando en ese momento.
- Siendo una situación de peligro, realmente no pueden salir.
- Ey tu. – Escuchó una voz y figura que se fue acercando, así es que la reconoció. - ¿Seth-san? Es peligroso, con toda esta neblina no es que puedas salir realmente, tienes que refugiarte.
- Pensé en hacer algo para ayudar en la situación, si es que lo necesitan.
- Aprecio en sí la intención pero sigues siendo humano después de todo y como una protectora no puedo- - Seth mostró sus cartas y las armas que había imaginado en ese momento. – Esto…
- No soy alguien débil y lo sabes, además de que Marisa me ha estado entrenando para batallar en Danmaku, al menos aseguro no morir.
- … No estoy segura realmente… sigue siendo algo peligroso y… - En ese momento vio como llegaron Reimu y Marisa, aterrizando en ese momento.
- Ey Keine-san. – Saludó la sacerdotisa. – Y ¿Seth?
- ¿Qué te trae aquí-ze? – Preguntó la bruja.
- Ayúdenme a convencerlo de refugiarse, dijo que desea ayudar en el incidente. – Explicó a ambas, Reimu miró al pelinegro con escepticismo.
- Seth, realmente aprecio que busques ayudar, pero esto de los incidentes no es algo que cualquiera pueda realizar, mayormente involucra conflictos con youkais peligrosos que buscan poner la integridad de Gensokyo en la mira.
- Aseguro de que no seré un estorbo, más bien Marisa ha podido observar mi progreso en las batallas.
- Eso es cierto-daze, Seth está en un nivel bastante decente por ahora-ze.
- Y hace poco tuve una batalla de practica contra Yukari y casi fui a la par contra ella. – Eso sorprendió a las tres.
- Un momento… ¿batallaste contra ella? No me digas que fue cuando me fui de que prepararas las hamburguesas. – Expresó Keine con molestia. – Sabía que debí quedarme…
- No me hizo daño. – Seth la calmó. – Incluso le prometí pelear contra ella cuando tuviera mayor poder y que además soy tan entretenido que es una desgracia si muero.
- Bien… de todas formas, debes cuidarte. – El pelinegro sabía que Keine se preocupaba por su bien, si quería que al menos deje de ser tan preocupona, tendría que fortalecerse más, esa era una prueba para ella.
- ¿Realmente quieres venir-ze? No podremos protegerte. – Preguntó Marisa, el pelinegro asintió, esa era la prueba de fuego si deseaba vivir en Gensokyo, superar los incidentes e incluso ayudar, de tal modo reafirmaría su pertenencia en aquel mundo.
- ¿Hay pistas de donde proviene la neblina siquiera? – Preguntó Keine.
- He podido detectar que esta proviene cerca del lago de la niebla, si es un posible lugar además de que siempre está cubierto de neblina, entonces es el primer sitio a investigar.
- Entendido, vamos-ze. – Sonrió Marisa, así los tres empezaron a volar, Keine los vio irse.
- ¡Cuídense, yo seguiré protegiendo la aldea humana! – Se despidió de ellos. Los tres comenzaron a volar en dirección hacia aquel lago para ver si este era la razón de que tal niebla de color rojo estaba cubriendo Gensokyo.
- Hace algo de frío-ze… - Marisa se cubrió con ambos brazos. – Ahora estoy extrañando al sol-ze.
- Si no queremos seguir pasando frío, debemos derrotar a quien sea responsable de esto, y ese lago se ve como un buen punto de partida. – Los tres continuaron volando hasta llegar a una parte cercana, aterrizando casi al pie. El lago en sí estaba cubierto de neblina como tal decía su nombre pero no veía nadie alrededor.
- Tal parece que está vacío. – Señaló Seth.
- ¿Estás segura de esto Reimu? – Preguntó Marisa, tampoco es que hubiera nada alrededor con lo que puedan tener la idea de todo eso.
- Quizás solo estaba teorizando algo pronto, tal vez podríamos buscar algo más y… - En ese momento escucharon pasos cerca, voltearon a ver, encontrando a una chica de cabello rubio corto, vestido de color negro, se veía alegre.
- Que bien sienta que el sol no me moleste, puedo andar libre sin mi bola de oscuridad. – En eso vio a los tres. - ¿Igual quieren jugar?
- Oigan, por la forma en que habla, parece que es al responsable-ze. – Susurró Marisa a los otros dos, Reimu asintió.
- En sí, parece algo sospechosa, quizás debamos preguntarle. – La sacerdotisa se acercó a ella. – Esto… no sé si puedas responderme algo.
- ¿Sí? – Preguntó ella, mirando a la pelinegra.
- Esta neblina, dijiste que te molestaba el sol ¿no?
- Si ¿Qué no es grandioso? Mayormente solo salía cubierta de mi masa de oscuridad y es un fastidio porque acababa chocando con los árboles al no ver nada, pero finalmente eso se acabó, soy libre para hacer lo que quiera. – En ese momento la olfateó. – Ese olor… es de carne humana… ah… - Un hilo de salvia recorrió la comisura de sus labios. – Ahora que me doy cuenta, tengo hambre y no he comido humanos… ¿puedo darte una mordida?
- No. – Respondió Reimu con rostro inexpresivo.
- ¡Vamos, aunque sea un brazo o una pierna, se ven apetitosos!
- Estás loca si crees que cederé mi cuerpo para que devores. – Aquella chica pareció decepcionada.
- Una lástima… entonces no me dejan otra opción, los atacaré y entonces devoraré después. – Hizo aparecer esferas de oscuridad en sus manos. – Soy Rumia, una youkai que controla la oscuridad y amo comer humanos, así que sean buenas personas y déjense devorar.
- Reimu, parece que llegó la hora de la batalla-ze. – Marisa se preparó al igual que Reimu, Seth sacó su pistola.
- Jeje, no me subestimen, como youkai tengo una gran fuerza y estamos en mi territorio que es la oscuridad, prácticamente soy invencible.
- Eso lo veremos. – Señaló Reimu. Ella empezó disparando de sus balas contra ella, la rubia empezó a volar extendiendo las manos, la sacerdotisa le siguió junto a Marisa y Seth. Rumia preparó sus ataques.
- Tienen mala suerte de haberse encontrado conmigo, ahora es el momento de que caigan ante mí. – Rumia empezó su ataque en aquel momento contra los tres, estos esquivaron los ataques de la rubia pelicorto. - ¡Ey, no lo esquiven!
- Eso es obvio, si no lo hacemos, recibiremos daño. – Señaló Seth. Eso solo sirvió para enojar más a Rumia que empezó a atacar con mayor velocidad.
- ¡Vamos, al menos una mordida a sus cabezas! – Fue directo hacia Marisa, atacando contra esta, la bruja voló en su escoba, evitando los ataques de ella. - ¡Estoy molesta, bien, entonces tomen de mi primera Spell Card, Moon Sign: Moonlight Ray! – La spell Card de Rumia se activó, comenzando el ataque en aquel momento que fue contra ellos, los tres esquivaron el ataque.
- Eso hay que acabarlo. – Señaló Reimu, Seth tuvo una idea.
- Si ella se mantiene en la oscuridad es porque detesta la luz, entonces mis spell cards serán más que suficientes. – Cargando la pistola sacó su primera spell card Ignis. – Toma esto.
La llamarada de fuego tenía una luz muy intensa para Rumia que se cubrió los ojos, en ese momento hizo aparecer una esfera de oscuridad, escondiéndose dentro de ella.
- ¡Oye, eso lastima, apágalo! – Gritó pero Seth se negó.
- Descubrí tu talón de Aquiles. – Siguió disparando más bolas de fuego que asustaban a Rumia, un momento que Reimu aprovechó para disparar su Spell Card, lanzando una esfera como de Yin Yang que acabó por golpear a la otra Spell Card.
*PINCH*
- No puede ser… me descuidé debido a esa molesta luz, pero no volverá a ocurrir, como youkai soy superior a los seres humanos y…
- Hablas demasiado-ze. – La interrumpió Marisa. – Incluso creo que eres débil-ze.
- ¡No es cierto, sé que soy fuerte, los youkais son más fuertes que los humanos por naturaleza!
- Pues tuviste la mala suerte de encontrarte con humanos que saben usar poderes mágicos. – Señaló Seth cruzándose de brazos.
- Entonces… ¿quieres seguir peleando o te rindes? – Preguntó Reimu, Rumia gruñó por debajo.
- ¡No es justo, solo quiero comer humanos, que acaso eso es algo malo!
- Si, lo es. – Respondieron los tres al mismo tiempo.
- Que malos son. – Hizo un puchero. – Supongo que debería rendirme, después de todo tampoco quiero gastar muchas energías en batallar, si se pierde, se pierde.
- ¿Ahora vas a responder las preguntas? – Preguntó la sacerdotisa.
- Dependiendo de que vayan a preguntar.
- Solamente si eres la responsable de este incidente. – Rumia se cruzó de brazos.
- Quisiera, pero no fui yo quien lo hizo, aunque debería agradecerle a quien sí, finalmente puedo caminar en Gensokyo sin problemas.
- Justamente nuestro trabajo es que vuelva a haber sol-ze, no aguantaremos el frío.
- Ya veo… entonces volveré a esconderme en mi esfera de oscuridad… ugh… volveré a chocar con arboles y me haré daño. – Soltó lagrimones.
- … Podría arreglarlo. – Comentó Seth, a lo que Rumia le vio fijamente.
- ¿En serio? ¿Podrías hacer que camine sin necesidad de esconderme? – Rumia le vio con brillo en los ojos.
- Podría, pero antes tenemos que arreglar este incidente ¿puedes esperar? – Ella asintió con ganas. – Te avisaré luego.
- ¡Que bien, gracias, eres un humano amable, ahora si pudieras darme tu mano, podría…!
- Soy bueno, más no un filántropo. – El pelinegro soltó un suspiro. – Nos veremos.
- Claro, lo esperaré con ganas~ - Ella se fue en aquel momento, quedando solos una vez más en los terrenos cercanos al lago.
- Seth, hacer tratos con youkais no es precisamente algo bueno. – Expresó Reimu.
- Digamos… que me dio algo de lastima, así que dije ¿por qué no?
- Eres demasiado bueno Seth-san… siento que palidezco ante tu calidez. – Marisa se cubrió con ambos brazos.
- Dejen de jugar, tenemos un incidente que resolver. – La sacerdotisa los calmó. Siguieron avanzando hasta llegar justamente a las orillas del lago, estaba cubierto de una neblina gélida y realmente parecía el sitio más probable con el que el incidente se originara. – Muy bien, ahora tenemos que buscar al responsable aquí.
- Bueno, sabemos que las hadas habitan muy cerca de este sitio-ze, así que podría ser una de ellas. – Respondió Marisa. Se pusieron a observar los alrededores del lago si había alguien cerca con lo cual pudieran hablar.
- ¿Tuviste suerte? – Preguntó Marisa a Seth, este negó. – Se supone que está habitado, es raro no ver a nadie-ze.
- ¿Vemos arriba? – Sugirió Reimu. Así los tres volaron para ver desde la cima en el lago pero no se veía nada. – Que raro, las hadas suelen ser traviesas y una molestia en general, a este punto ya debería atacarnos una.
- ¡Ustedes! – En ese momento vieron a una hada de cabello verde volar hacia ellos. - ¿Qué hacen en nuestro territorio? Los atacaré por meterse aquí.
- … ¿No se ve débil-ze? – Preguntó Marisa, los otros dos asintieron.
- ¡No soy débil, juro que soy una hada fuerte! – Confirmó y en ese momento los atacó pero no hizo mucho daño, Reimu la apartó fácilmente con su mano. – No puede ser, me derrotaron…
- Oigan… empiezo a creer que este sitio no es donde vino la neblina. – Expresó la sacerdotisa.
- Entonces… ¿de dónde vino?
- ¡No me ignoren! – La misma hada les gritó, en ese momento se sintió un aire gélido que invadió el lugar.
- Hace más frío de repente… - Marisa se cubrió con sus brazos al igual que Reimu y Seth.
- ¿De donde vendrá este frío? – Preguntó el pelinegro.
- ¡Jajajajaja! – Escucharon una risa, en ese momento apareció otra hada de cabello azulado y vestido del mismo color, alas azules como hechas de hielo estaban tras su espalda. – Insensatos, tuvieron mala suerte en que me presente aquí, yo, la más fuerte de todo Gensokyo, Cirno está aquí. – Hizo una pose.
- Cirno-chan, no pude hacerles nada. – la hada peliverde empezó a llorar.
- Eso es porque no estás a mi altura Daiyousei, déjamelo a mí y verás como estos intrusos caerán fácilmente ante mi poderosa fuerza. – Sonrió con confianza.
- Cirno-chan… - Esa hada Daiyousei la miró con brillo en los ojos, Cirno volvió a reír de forma altanera.
- Ella parece ser una fanfarrona. – Señaló Seth.
- Pero nada quita que es una hada un poco más poderosa que la otra, así que no podemos bajar la guardia… creo… - Reimu tampoco estaba muy segura, después de todo Cirno tenía muchas aberturas en su posición de batalla.
- Pueden atacar con todo lo que tengan, yo lo aguantaré como la más fuerte de Gensokyo, y después conocerán su triste final.
- … ¿Quién empieza? – Preguntó Reimu, Seth dio el paso en aquel momento.
- Tengo spell cards de fuego, así que soy su debilidad. – Cargó su pistola, Cirno le vio con una sonrisa.
- Así que eres mi primer rival, muy bien, atacaré con todo desde el inicio ¡Freeze Sign: Perfect Freeze! – El ataque de hielo fue contra Seth que no se movió. - ¿Tan atemorizado que no puedes moverte? Sabía que sería fácil.
- Ignis. – Lanzó la llamarada de fuego que acabó por sobrepasar el ataque helado, dejando a Cirno boquiabierta.
- ¿Q-Que? ¿Qué fue eso?
- Solo una spell card de fuego.
- ¡Eso lo sé! Pero por qué es más fuerte que yo, no es justo. – Empezó a quejarse. – Se supone que soy la más fuerte de Gensokyo, nadie puede ganarme.
- ¿Si quieres eres merecedora de ese título? – Preguntó el pelinegro, la hada se quedó tiesa.
- E-Esto… es verdad porque yo lo digo… y…
- La fuerza no se mide por lo mucho que lo pienses, eso se demuestra con acciones, y eso que soy el más débil de los tres. – Y Cirno se puso palida, al saber que fue superada por el débil de ese grupo.
- (Entonces… las otras dos deben ser monstruos…) – Se puso de rodillas. – Yo… nunca tuve oportunidad alguna. – Seth se acercó a ella, sujetando su hombro. - ¿Humano?
- Quizás no seas fuerte como aclamas, pero cualquiera puede crecer y mejorar, eso se aplica a todos.
- Yo… ¿puedo volverme más fuerte?
- Claro, el entrenamiento lo logra todo y si tienes ganas y la fortaleza, lo lograrás. – Cirno miró a Seth con brillo en sus ojos.
- … Maestro… por favor… enséñame a ser más fuerte. – Sujetó el brazo de Seth. Reimu y Marisa miraron al pelinegro con rostros inexpresivos.
- ¿Qué está haciendo-ze? – Preguntó la rubia.
- Es un forastero muy extraño… pero funciona totalmente. – Sonrió Reimu por debajo. En ese momento notó algo cuando la neblina se despejó, una mansión al otro lado del lago. – Ese lugar… Marisa, Seth, hay otro lugar donde ir.
- ¿Dónde-ze? – Señaló la mansión, entonces la rubia sonrió. – Ya veo, entonces es nuestro siguiente objetivo-ze.
- Lo tengo. – El pelinegro asintió. – Debo de irme, tengo que arreglar esta situación.
- Claro maestro, espero que logres enseñarme a ser fuerte. – Cirno se veía esperanzada de ello. Ya entonces volaron hacia aquella mansión, el lugar donde se llevaría a cabo la siguiente parte del incidente y Seth lo sabía, las cosas se complicarían así que tendría que prepararse para ello.
Jackson G-MAN Dragneel: Gracias por ello, como tal he estado tomando cada fuente para informarme y siempre tener más me sirve, así que eso lo haré.
El Redentor 777: Así es con Seth, nunca abandona América y este fue con él jaja, ya habrá más comidas que buscará realizar y mostrará a las chicas.
Ya empezamos con el primer incidente, en sí este decidí ponerlo por tal debido a ese hecho de que es uno de los más reconocidos y pues en sí, si seguro andan por este círculo, la animación de Sr. Pelo resume en forma cómica como es y decidí usar un poco ese recurso en cuanto a comedia. Ya igual como es algo que he observado, la mayoría de fics OC de touhou prestan especial atención a las chicas de la mansión, ya en tal mi caso como haré, buscaré darle atención por igual a todas, ya se verá. En el siguiente cap seguiremos con esto, y lo que espera en la mansión, hasta el próximo cap. Saludos.
