Final MiX!

OPENING THEME: 004-Time Scar (Soundtrack: Chrono Cross Opening)

Capitulo 41: ¡Brilla, Semilla Dorada!, La transformación de N-Warrior.

Y

Visiones de un Futuro próximo.

-Isla Yang-

-Cerca de la costa.-

Música de fondo: - 022-Twilight Princess - Midna's Theme- (Soundtrack: Super Smash Bros Brawl)

Kristal se levantó después del terremoto y de la explosión que ocurrió después en el castillo. La hechicera nuevamente miró hacia el castillo, donde aún se podía sentir algo de energía.

"¿Qué habrá pasado?" preguntó ella con confusión, algo captando su atención. "¿uh?"

Al mirar más de cerca el castillo, se dio cuenta de algo; era el mismo que en su sueño, aquel que tuvo hace varios meses, y que mostraba a Alan luchando contra un ser oscuro, Exus.

"Es el mismo... eso significa que..." comentó ella, dándose cuenta de lo que significaba. "¡Oh no!"

Kristal comienza a correr por la costa, siguiendo su camino hacia el castillo.

-

En la torre cercana que servía de entrada al castillo de Exus, Zeros comenzaba a despertarse lentamente, justo después de la explosión. Se levantó con dificultad del suelo y observó a sus alumnos caídos, Break y Zam, en el suelo, aún desmayados. Al parecer Hades los golpeó mas duro de lo que había pensado. El hechicero se sintió tranquilo porque sus alumnos aún estaban con vida De repente, comenzó a sentir las presencias de millones de seres provenientes de otro mundo, y comenzaba a sentirse en la parte más alta del castillo.

"¿Qué rayos?" se preguntó él. "¿De quien son estas presencias? No será que... ¡Imposible!¿La puerta se ha abierto?" cuestionó él, la presencia de varios seres vivientes le daba la respuesta. "Debo hacer algo... pero ya no me queda energía para seguir, estoy muy débil... lo mejor será regresar con Maha y los demás y planear algún ataque."

Usando lo que le quedaba de fuerza, Zeros cargó a sus alumnos y comenzó a bajar las escaleras.

Mientras descendía, a mediados de las escaleras, observó a alguien con una ropa no de ese mundo y se puso en guardia.

"¿Quien es?" preguntó Zeros con autoridad. El sujeto se detuvo a unos pasos de él y lo miró fijamente, sonriéndole.

"Zeros, soy yo..." dijo el extraño… o extraña en este caso.

"¿Kristal?¿Eres tu?" preguntó el hechicero confundido. "No te reconocí con esa ropa."

"No tengo tiempo para hablar." Respondió ella con prisa. "¿Dónde están Duncan y Steve?"

"Ellos fueron al castillo a enfrentarse a Exus. Lo que no entiendo es de quien es la otra energía que luchaba con él. Esa energía me despertó. ¿De quien será?"

"Es de Alan…"

"¿De Alan?¿Esta energía tan grande? No puedo creerlo, su presencia es muy poderosa, mucho mas que la última vez que lo vi."

"Es el resultado del entrenamiento en la habitación del tiempo. Disculpa, pero no tengo tiempo, debo ayudarlo. Permiso."

"No te preocupes, ve y ayúdalo."

"Si..."

Kristal pasa de largo y continúa su camino, subiendo las escaleras, con Zeros mirando como se pierde en una curva. El hechicero sonríe, antes de comenzar a descender.

"Buena suerte, Kristal..."

-

Música de fondo: - 002-Dive into the Heart- Destati- (Soundtrack: Kingdom Hearts II)

Exus se encontraba frente al Portón de Espejo. Por fin se había abierto por completo, dejándole el camino abierto para ir a otro mundo. Al asomarse por el portal, el hechicero podía contemplar imágenes de un nuevo mundo, uno donde los humanos convivían con unas criaturas extrañas y algo poderosas. Varias ciudades grandes y concurridas, llenas de gente y de esas criaturas, corriendo por sus calles, luchando entre si amenamente y reuniéndose en distintos lugares. Un mundo con grandes praderas, bosques verdes, y aguas tan azules al igual que el cielo. La última escena mostraba la imagen de un planeta azul, suspendido en la vastedad del espacio.

"Al fin." Comentó Exus. "Un mundo nuevo. Por fin podré ir a conquistarlo y así crear mi nuevo imperio en toda la galaxia... uno de los doce Zodiacal Rings reside en ese mundo, cuando lo obtenga, Mi poder para abrir portales se incrementará y podré irme a otro mundo para conseguir otro anillo, y así hasta conseguir los doce y poder gobernarlo todo."

Exus estaba emocionado, la sola idea de ir a explorar un nuevo mundo lo emocionaba. Su sueño se estaba haciendo realidad.

Pero entonces, sintió algo…

Varias presencias poderosas estaban esparcidas por todo el planeta que miraba en el portal. No eran tan grandes como el de él, pero si se unían, estaría en problemas.

"Estas presencias, no son de los humanos." Comentó el hechicero con detenimiento. "Deben tratarse de esas extrañas criaturas. Debo tener cuidado, ya que las energías que siento tienen un poder igual al de los seres de este mundo. Aún así, no me detendrán... ¡Nadie podrá detenerme!"

Entonces, varias sombras, creadas por los objetos, comenzaron a moverse. Pronto, las figuras oscuras conocidas como Heartless aparecieron del suelo, mientras el hechicero los miraba con detenimiento.

"Vayan mi Heartless, dominen este nuevo mundo para su amo y señor."

Los Heartless, siguiendo las ordenes de Exus, caminaron hacia el portal y se lanzaron a el, viajando a través del Portón de Espejo hacia el otro mundo. El hechicero oscuro comienza a reír al ver esto.

"La conquista comienza, ¡Nadie podrá detenerme!"

"¡Yo lo haré!"

Música de fondo: - 048-God Warrior vs. Saint (Soundtrack: Saint Seiya)

Exus miró hacia atrás, viendo como, de entre los escombros y el humo, Alan lograba salir con dificultad, mientras caminaba hacia él, mirándolo desafiantemente.

"¡Yo me encargare de detenerte!" exclamó el joven. "¡No permitiré que te vayas!"

El aura del joven comienza a elevarse. Exus ve como el humo donde estaba el muchacho comienza a arremolinarse, dejando ver una esfera enorme de energía congelado.

"¡ARTICUNO SUISEIKEN!"

La enorme esfera de aire frío vuela a gran velocidad, golpeando a Exus en el estómago, lo cual hace que retroceda. Alan ahora se encontraba detrás del hechicero, con su puño hacia delante luego del golpe. La esfera de aire gélido seguía girando en el estómago de Exus, congelando casi todo su tronco por algunos segundos, mientras el ser oscuro miraba con sorpresa.

"No puedo creerlo." Comentó el hechicero. "He recibido su golpe por completo. Yo que soy el futuro soberano de este mundo, ¡¿he sido tocado por este sujeto?!" preguntaba mientras se voltea a ver a Alan, mirándolo furia. "¡No te lo perdonare!"

El joven se da la vuelta para quedar frente a frente con su oponente, quien coloca sus manos a un costado, reuniendo energía.

"¡FOREVER ZERO!"

El poderoso cilindro de energía engulló a Alan, quien se cruzó de brazos y comenzó a resistir el poder. Estaba a punto de salir volando, cuando un brillo en su frente apareció y un aura dorada envolvió su cuerpo. Con un movimiento de sus brazos, el humano dispersó la energía, al mismo tiempo en el que el aura dorada desaparecía.

"No es posible..." comentó el hechicero con asombro, viendo como el joven se acercaba a él.

"No te permitiré que realices tus planes... ¡yo te detendré!"

El aura azul de Alan se vuelve a encender mientras avanza a su oponente. Ya frente a él, le lanza un golpe hacia el rostro con su puño derecho, uno que Exus detiene fácilmente con su mano derecha.

"Tonto." Comentó el hechicero. "Tu no eres de este mundo, ¿por qué peleas para protegerlos?"

"Porque ellos me cuidaron cuando llegue aquí, ¡Debo pagárselos!" respondió el joven.

"¿Con este poder? No me hagas reír."

"No... no con este…"

Entonces, el brillo dorado en su frente apareció nuevamente, al igual que el aura dorada que comenzó a rodearlo.

"Esta es..." dijo el joven, mientras sus ojos se volvían dorados, su cabello que se erizó y cambió de color, siendo ahora dorado, y su tez se volvió mas blanca. El brillo en su frente cesó para mostrar un símbolo con forma de rombo con cuatro líneas, cada una perpendicular a un lado de la figura en su frente.

"¿Pero que rayos…?" preguntó Exus con asombro, mientras veía la mirada de determinación en los ojos del joven.

"¡Esta es mi verdadera fuerza!"

Una expulsión de energía mandó a volar todas las rocas cercanas que no estaban aferradas al suelo. Con sus nuevos poderes, Alan hizo retroceder a Exus, quien aún sostenía el puño de su contrincante, hacia el portal. El hechicero trata de poner fuerza, pero el humano lo superaba con cierta facilidad.

'Ese brillo, esa transformación.' Pensaba el ser oscuro. 'No cabe duda; este muchacho ha alcanzado a rozar el poder de la semilla dorada, y, con ese poder, ¡es mas fuerte que yo!'

Ya ambos estaban en la orilla del portal, amenazando con caer. Con un último esfuerzo, Alan expulsa aún mas poder.

"¡Si no puedo evitar que vayas a otro mundo, entonces iré con ustedes!" Exclamó el joven, elevando aún más su aura. "¡Vayamos juntos a otro mundo, Exus!¡Que mi aura se eleve hasta el infinito!"

Luego de esto, una columna de luz sale del castillo, elevándose hasta el cielo, mientras Alan y Exus luchaban mientras caían por el Portón de Espejo, dirigiéndose a un nuevo mundo.

-

La expulsión de energía hizo que Kristal perdiera un poco el balance. Era una presencia muy poderosa, una que, por unos segundos, superaba a la de Exus. Intentando descifrarla, la hechicera se dio cuenta de a quien pertenecía.

"¿Alan?" se cuestionó, no creyendo lo que sentía. "No es posible... debo ir a investigar."

La joven se levantaba y estaba por correr, cuando un fuerte dolor de cabeza hizo que se desplomara en el suelo. Kristal se sujetó la cabeza mientras la oscuridad la rodeaba.

Tenía una visión…

-

Música de fondo: - 023-Friends in My Heart- (Soundtrack: Kingdom Hearts)

Era un lugar hermoso. Una pradera verde con un gran lago de agua cristalina cerca. El clima era hermoso, un cielo azul y un sol que no molestaba. Entonces, sobre una pequeña colina, debajo de un gran árbol, varias personas se encontraban comiendo. Kristal, quien estaba mirando como espectadora, identifico rápidamente a dos; eran ella y Alan.

Pero había otras personas ahí:

Un chico de aproximadamente quince años, de cabello y ojos negros, con una gorra roja con negra y chaleco azul cerrado, con pantalones azul celeste. A su lado había un roedor amarillo.

Otro joven de unos diecisiete, que tenía el cabello café y alborotado, ojos color chocolate y unos googles azules en la cabeza. Tenia chaqueta azul y una camisa azul marino con amarillo y pantalones negros. A su lado había un pequeño dinosaurio anaranjado.

Había otro chico, de unos catorce años, cabello café, parecido al del joven anterior sólo que más claro, además de que sus ojos eran color carmesí, tenía unos googles amarillos en la cabeza, vestía camisa azul y pantalones grises. Con él estaba un dinosaurio rojo, de medio metro de altura.

Una chica pelirroja de unos catorce años de edad, con un cabello de una forma muy extraña, con ojos marrones, blusa color limón y falda blanca, se encontraba abrazando al chico de gorra negra.

Otro era.... bueno... un roedor anaranjado, de un metro de altura, su cola tenia forma de trueno.

El grupo se encontraba comiendo en el campo. Entonces, el chico de googles azules y el de la gorra roja con negro querían agarrar el mismo sándwich. Se miraron a los ojos durante un rato.

"¡Ash, yo vi ese sándwich primero!" dice el muchacho de googles azules con enfado.

"¡Claro que no Tai!¡Yo lo vi primero!" respondió el joven de gorra roja con negro.

Ambos chicos comenzaron a pelear por el sándwich, viendo quien se quedaba con el. Entonces, el chico de googles amarillos se metió a la conversación.

"Oigan, hay muchos sándwiches aquí, no pelen por uno." Comentó el chico, ganándose la mirada de furia de los otros dos.

"¡Tu cállate, Takato!" le gritaban ambos, haciendo que se callara.

"S-si..."

El chico de googles azules y el de gorra roja con negro seguían peleando, hasta que la chica de blusa verde abraza por la espalda al chico de gorra roja con negro.

"Latias, no hagas eso..." dice el chico de gorra roja con negro. La chica solo ríe un poco.

"Es extraño que tengas como novia a un Pokemon, Ash." Comentó el joven de cabellera alborotada. "¡No es mi novia, Tai! ¿Cuántas veces te lo tengo que decir?" preguntó el muchacho con enfado.

Pero ellos no eran los únicos. Recargado en el árbol, habían dos personas; un joven de unos diecisiete años, cabello castaño y de ojos verdes, vistiendo una playera celeste, un chaleco azul y unos pantalones negros. A su lado, recargada en el hombro del joven, estaba una chica algo bajita, pelirroja, de largo cabello amarrado en una trenza, con ojos color carmesí. El joven mira hacia arriba, viendo a otro joven, más adulto que los otros, de larga cabellera rubia, una sudadera roja, pantalones blancos y un chaleco negro, recostado en una de las ramas del árbol.

"Oye Zero, baja, no seas anti-social." Comentó el muchacho de ojos verdes. Pero el hombre rubio no le responde, sólo se queda mirando al cielo. "Creo que no me hará caso."

"No pierdas el tiempo, X, sabes que no bajara." Dijo el roedor anaranjado, acercándose a ellos. "mejor disfruta tu tiempo con ti chica."

"También disfruta el tiempo, Raichu." Comentaba la chica pelirroja.

"Lo haré, Lucy, lo haré… "

Había mas, muchas más personas en el lugar, pero la escena se veía borrosa y Kristal no los pudo identificar. Sólo notó ahora a Alan y a la Kristal de la visión, quienes veían divertidos toda la escena.

"Son extraños." Comentaba la Kristal de la visión.

"Ya se, pero son nuestros amigos." Le respondió Alan.

"Ya lo sé, pero eso no les quita lo extraño, no lo niegues."

"No lo hago, Kristal… no lo hago."

Ambos se empiezan reír mientras la imagen se aleja de ellos. Varias Keyblades estaban del otro lado del árbol, con la Chaos y Balance entre ellas…

-

Música de fondo: - 049-Under the Wood of the 'World Tree' (Soundtrack: Saint Seiya)

Kristal abrió los ojos y se puso de pie. La visión esta vez era tan clara como el cristal. Alan estaría bien, y sabía que pronto conocería a aquellos con los que estaba en la visión, sabiendo de antemano que serán unos grandes amigos. La joven volvió a mirar el castillo, comenzando a correr hacia el.

-

En el exterior, después de que Exus cruzara el portal, los Heartless comenzaron a desvanecerse. La pelea había terminado y los héroes de Shadow Realm habían perdió; no pudieron evitar que Exus entrara al portal, pero estaban tranquilos al saber que Alan iba con el y que Kristal pronto entraría. Rápidamente comenzaron a tratar a los heridos del combate, ya que había muchos.

De pronto, un terremoto sacudió la isla una vez más, dándole la señal a los sobrevivientes de que regresaran a los barcos para dejarla. Por ahora, su mundo estaba a salvo.

Maha y los demás hechiceros miraban como la isla Yang comenzaba, sorpresivamente, a hundirse en el mar lentamente, producto del enorme despliegue de poderes de Alan y Exus y de la desaparición del poder oscuro de este último. Las aguas estaban inundando la tierra, el campo de batalla, limpiando la sangre derramada durante el combate.

Ese era el último día de la isla oscura.

-Castillo de Exus, salón del portal.-

Kristal había llegado al salón principal del castillo, notando que era igual al de su sueño, donde encontró a Duncan y Steve en el suelo, sólo que ellos no estaban por ninguna parte. Dejó de buscarlos cuando sintió otro temblor, dándose cuenta, al mirar por una ventana, que la isla comenzaba a hundirse. Caminó hacia las escaleras y se encontró la gorra gris de Alan en el suelo. Después de tomarla, continuó subiendo las escaleras, encontrándose con el sombrero de hechicero de Exus.

Definitivamente era idéntico a lo que vio en su visión, la misma habitación donde Alan y Exus luchaban. Rápidamente notó el portal que estaba en el centro, acercándose a la orilla para verlo más de cerca, mirando el planeta azul que era el mundo al que estaba conectado. Dudaba en si entrar o no, puesto que sabía que Exus había entrado, con Alan siguiéndolo de cerca.

"Kristal..."

Ella volteó hacia atrás, viendo con una mezcla de alivio y preocupación a Duncan y a Steve, quienes tenían varias heridas en sus cuerpos.

"¡Están vivos! Que alegría..." comentó Kristal, relajándose un poco.

"Debes irte Kristal." dijo Duncan seriamente, confundiéndola.

"¿Qué?¿Por qué?"

"Porque Alan necesita tu ayuda. El solo no podrá contra Exus, debes ir y ayudarlo..."

"Lo se, es mi destino el ir con él. Maestro, Steve, los extrañaré…"

"Yo soy el que te extrañaré, Kristal." Comentó Steve. "Sin ti aquí, ya no tendré a nadie a quien explorar." Comentó mientras hacía un movimiento con sus manos, abriéndolas y cerrándolas.

"Bueno, tienes a Sapphire." respondió la hechicera.

"Tienes un punto..."

"Y, no quiero admitirlo, pero ella tiene mas para explorar que yo."

"Tienes otro punto…"

"Cuídate Kristal." dijo Duncan. "Debo decir que fue un honor para mi que hayas sido mi alumna por estos años."

"Yo soy la que debería agradecerle, maestro. Muchas gracias por todas las enseñanzas. Ahora, deben irse, la isla esta por hundirse."

"Lo sabemos. Adiós Kristal."

Un brillo blanco cubrió a Duncan y a Steve, desapareciendo de la vista. Habían sido tele transportados a un barco cercano, salvándose de la destrucción de la isla.

La hechicera comenzó a recordar todos los momentos que vivió con ellos dos. La amistad con Steve, quien era su amigo de la infancia. Vivieron juntos durante varios años y crecieron juntos. Fue cuando las perversiones de Steve comenzaron y que intentaba por todos los medios el tocarla, manosearla y verla sin ropa. A muchas personas les molestaría algo así, pero no tanto a ella, porque lo conocía desde niños. Además, era gracioso ver su reacción cuando el padre de ella, Quarz de los Royal Spellcasters, lo castigaba por intentar hacerle algo.

Luego, a los diez años, llegó Duncan, el joven hechicero de veinte, quien, bajo la instrucción del Dark Sage, los tomó como aprendices. El les enseñó a como usar bien su magia y como volverse mas fuertes con sus hechizos.

Los tres se habían vuelto una familia y pasaron por muchas cosas juntos. Era una lastima el tener que separarse, pero ese era el destino de ella.

"Si... nos veremos pronto..."

Ahora, ella se dio la vuelta, encarando al portal abierto bajo sus pies, sonriendo. Era la puerta a su nuevo destino, uno que ella no hubiera imaginado.

Su destino cambió desde el momento que conoció a Alan, dándose cuenta de que era un humano, no un Duel Monster como ella. Tan diferentes y tan parecidos, ella comenzó a tomarle cierto cariño mientras pasaban mas tiempo juntos, intrigada por su forma de ser, vestir y lugar de procedencia.

Duncan y Steve también lo vieron como parte de la familia, era tan… natural. Los cuatro se unieron más durante esta misión de restaurar los Elemental Cristals y, aunque fue un fracaso, no se arrepentía de nada. Conforme el tiempo transcurría, el cariño que ella sentía hacia él crecía más y más, tanto que a veces no podía controlar que el sonrojo se esparciera por su rostro. Él era un chico tímido y reservado, pero se fue abriendo poco a poco con ellos, revelándose como una persona graciosa y leal.

Luego de un año de estar separados, pudo pensar más acerca de sus sentimientos. Lo extrañaba, lo hacía desde el día en el que empezó a entrenar con su padre. Durante ese tiempo, pudo resolver lo que sentía por el humano, segura de su decisión.

Ahora, frente a la puerta de los mundos, con la destrucción de la isla a su alrededor, la hechicera sonreía, pensando en volver a ver al muchacho que había cambiado, sin querer, su destino.

"Alan, pronto estaremos juntos nuevamente..." comentó ella. "Y reuniré el valor suficiente para decirte lo que siento... que yo... te amo."

Con esto dicho, Kristal cierra los ojos y salta al portal, justo antes de que el agua de mar ingresara a la habitación e inundara todo por completo, el Portón de Espejo cerrándose detrás de ella, impidiendo que alguien más entrara.

Había dejado ya Shadow Realm…

-

En el Portón de Espejo, un túnel con varios espejos en sus paredes que conectaba ambos mundos, Alan, aún transformado, logra golpear a Exus en el rostro, quien cae más rápido. El joven aumenta la velocidad y lo sigue.

"No te escaparas Exus." Comentó él, descendiendo rápidamente." ¡Aquí voy!" Exclamaba el humano, mientras descendía hasta el otro extremo del túnel dimensional, llegando a otro mundo.

Fin del Capitulo 41

Música de fondo: - 008-The Biggest Dreamer -Jikai Yokoku- (Soundtrack: Digimon Tamers)

Preview del Capitulo 42: Hola a todos, aquí Alan. Exus y yo hemos dejado Shadow Realm, así que ahora todos pueden vivir en paz. Pero, ¿dónde estamos?¿Será acaso este el verdadero fin? Momento ¿Qué es esa criatura? Oh cielos, es un… No se pierdan el último capitulo de The N-Warriors: Shadow Realm saga: Epílogo: El inicio de una Nueva aventura.

¿Ahora donde estamos?

ENDING THEME: 009-Endless Dream (Soundtrack: Yu-gi-oh! GX)