Antes que nada gracias a todos los que empezaron a leer este fic, en serio se los agradezco, y por supuestos a todos los que se tomaron su tiempo y me dejaron su opinión sobre el inicio de esta nueva historia, si los confundí o algo no le entendieron, tal vez se aclare en este capítulo, o sino háganmelo saber y yo con mucho gusto resolveré sus dudas.
Muchas gracias a:
Nicole: Siento la tardanza y muchas gracias, espero que te siga gustando.
Anónimo: Bueno espero que te siga gustando, trato de hacerlo interesante, y diferente, no me gusta que mis historias se parezcan a otras...y las sorpresa seguirán. BYE Gracias.
Bueno ¡a leer¡disfruten de la lectura!
"La Profecía de Godric Gryffindor"
Segundo capítulo
Los poderes han despertado
Un rayo débil proveniente del sol que apenas acababa de empezar a iluminar ese día de Junio, se colaba por una de las tantas ventanas de la Torre de Astronomía, un chico de cabello azabache y ojos verdes con gafas tenía la vista perdida en ese rayo, no quería salir de ahí, eran tantos pensamientos y sentimientos que lo atormentaban, se sentía culpable, por su culpa muchos de sus compañeros habían muerto y mucha gente que ese día había decidido dar un paseo por Hogsmeade había muerto; Voldemort lo había ido a buscar a él, y todas las personas que estaban cerca de él sufrieron la consecuencia de compartir el mismo lugar que Harry Potter, hasta sus amigos habían estado cerca de la muerte y eso sinceramente no se lo podía perdonar, tenía miedo que todas las personas que lo rodeaban, que lo estimaban, que lo querían sufrieran el mismo destino que sus padres y...Sirius, hasta alguien que nunca imaginó que se sacrificaría por él lo había hecho, Peter Pettigrew mejor conocido como Colagusano, se había interpuesto entre la maldición asesina de Voldemort y él, había saldado la deuda que tenía, demostró porque alguna vez Peter Pettigrew fue seleccionado para Gryffindor...Gryffindor otra de las razones por las que estaba encerrado, como ya lo había hecho antes Albus Dumbledore le había ocultado información que a lo mejor hubiera salvado más vidas, él, Harry Potter, era el heredero de Gryffindor, desde hace muchas generaciones que el heredero de Gryffindor se encontraba en la familia Potter y Dumbledore se lo había ocultado, durante la batalla salió al descubierto cual era el poder que poseía, era el mismo que tenía su padre, le había dicho Lupin, poder controlar las cosas con la mente, por eso pudo escapar por quinta ocasión de señor oscuro, aunque sin quitarle importancia a Colagusano, sin él, Harry Potter ya estaría muerto, pero no sabía como, sólo deseo que todos los mortífagos que lo rodeaban, incluido Voldemort, saliera disparado, y cuando vio lo que había pensado se había vuelto realidad, no lo dudó y se echó a correr...después de ahí los recuerdos eran confusos, no tenía la menor idea de cuando Hermione se unió a él en la huída, mucho menos Ron...y en su mente no había recuerdo alguno de cómo había llegado a Hogwarts. Una voz interrumpió sus pensamientos.
Harry...sé que estás aquí- preguntó una voz proveniente de la entrada de aquella habitación, el chico no contestó- no te sirve de nada ocultarte se que estás aquí, el mapa del merodeador nunca miente
déjame solo, Hermione- le dijo Harry a la chica castaña que lo había ido a buscar
no puedes estar escondiéndote de todos- dijo Hermione, después pudo visualizar a su amigo, estaba en una esquina, oculto, se fue a sentar a lado de él- y tampoco seguir culpándote
pero es mi culpa- contestó el chico ahora con la vista fija en el piso- si yo no hubiera salido de Hogwarts, no hubieran atacado el pueblo
pero no fue tu culpa- insistió Hermione- quien se iba a imaginar que justamente ese día atacaría Voldemort
pero era tan lógico, Voldemort siempre atacará donde este yo
no ha atacado Hogwarts- repuso Hermione
porque no puede o si no ya lo habría hecho desde hace mucho...ningún lugar donde este yo es seguro, ninguno, y todas las personas que me rodean corren peligro...por eso me debo de alejar de ustedes- Hermione lo tomó de la barbilla y lo obligó a verla a los ojos
Harry pensé que ya habías entendido que habemos personas que sabemos el riesgo que corremos...y no nos importa- le dijo, Harry no soportó la mirada de su amiga y la fijó en otro lado
¡que no lo entiendes!...no quiero que terminen muertos como mis padres, como Sirius, ni tú, ni Ron, ni Ginny, ni nadie que me conozca
¡por Merlín, Harry! Desde primer curso supe a lo que me arriesgaba si eras mi amigo y sabes que ¡no me importo¡eres mi amigo¿a cuántas cosas nos hemos enfrentado¡Y jamás te dejado solo! Sabes que cuentas con mi apoyo y con el de Ron...eres nuestro amigo- el asintió, y Hermione se levantó del suelo donde estaban sentados- ¿listo para salir?
¿es necesario¿no me puedo quedar aquí todas las vacaciones?- preguntó Harry
lo dudo...a menos que quieras tener a todos buscándote y preocupados, además la que tendría que soportar a Ron sería yo y sinceramente no quiero- le respondió ella sonriendo
no has arreglado las cosas con él ¿verdad?- le preguntó Harry
lo mío con Ron no tiene solución...y no me cambies de tema, Harry Potter... ¿vas a salir?- el asintió- muy bien, que todavía te falta para empacar
eso es fácil- respondió él- sólo me concentro en que todas mis cosas se empaquen y sin necesidad de mover un dedo
como sea ¿bajamos?- volvió a preguntar ella
ya que- contestó Harry, y ella salió por la puerta, pero una mano la detuvo
gracias, Hermione
de qué, Harry, eres mi amigo- y dicho esto salió, Harry no tardo en alcanzarla
Hace mucho que no padecía lo horrible del insomnio, saber que necesitas dormir, pero hay tantas cosas en tu mente que te parece imposible, la última vez que lo había sentido fue cuando llegó a Italia hace 18 años, en ese entonces era el enojo que le duró mucho tiempo, y una gran preocupación por todas las personas que estimaba y que se habían quedado en Inglaterra; y ahora era la visión que había tenido no la dejaba conciliar el sueño, saber que Harry había enfrentado a Voldemort, no era algo que la dejara tranquila, la guerra ya había empezado de nuevo en su país natal, la segunda guerra había iniciado y ella sabía que el momento de volver había llegado, pero no podía, simplemente no podía, tenia miedo, mucho miedo, pero también sabía cual era su papel en esa guerra, pero significaba arriesgar a la persona que más quería en el mundo...su hija. Las horas siguieron transcurriendo y ella no logró conciliar el preciado sueño, cuando vio que el sol empezaba a iluminar su habitación decidió levantarse, y arreglarse para comenzar un nuevo día, cuando se estaba vistiendo se vio al espejo, unas grandes ojeras rodeaban sus ojos cafés, aunque su verdadero color eran azules, una mirada cansada tenía en su rostro, desde que había tenido esa horrible visión se había puesto más pálida, las ojeras se acentuaban conforme pasaban los días, su cabello pelirrojo desde hace 16 años estaba sin vida...y una gran angustia la embargaba, optó por usar maquillaje para simular un poco su falta de sueño, y para despejarse un poco antes de ir a desayunar tomó una taza de café muy cargado, era necesario que despertará, no podía atender así a sus pacientes, se sentía cansada y no podía darle a sus pacientes una visión de doctora enferma. Mientras estaba tomando la taza de café y viendo el noticiero matutino, una lechuza atravesó la cocina, donde estaba Emily, y se posó enfrente de ella, tomó la carta y la lechuza se fue, sólo una persona le escribía a través de las lechuzas y ella con ansias leyó la carta, le sorprendió saber que no era exactamente de quien pensaba, pero estaba relacionado
Estimada Sra. Bernini:
Se le solicita su presencia en el Colegio Italiano de Magia y Hechicería para tratar un asunto de gran importancia relacionada con su hija Cassie, dada su condición de muggle un profesor de esta institución irá por usted el día de hoy a su domicilio para traerla al colegio, será a las ocho de la mañana, cuanto antes mejor y se le suplica de la manera más atenta que no posponga el día, porque el asunto a tratar es de suma importancia.
Atte. Profesora Claudette Matteotti
Directora del Colegio Italiano de Magia y Hechicería
Nunca en los seis años que su hija llevaba en ese colegio habían solicitado su presencia, y ahora querían que fuera para tratar un asunto muy importante ¿qué podía ser tan importante para llamarla¿habían expulsado a su hija? Muy dudoso, ella era una alumna excepcional y que sobresalía sobre todos sus demás compañeros, a pesar de haber desconocido por once años que era bruja, de haber ignorado el mundo mágico, pero a fin de cuentas era una Potter y la heredera de Gryffindor...¿y si sus poderes habían despertado? Esa sólo idea hizo temblar a Emily, sería la señal que de la hora de volver a Londres había llegado. Prefirió no seguir pensando en ello, y habló al Hospital donde trabajaba para pedir permiso para faltar, no dudaron en darle el día libre, ella era una de las mejores doctoras especializadas en neurocirugía con las que contaba el Centro Médico de Florencia y ese día no tenía ninguna cirugía planeada. Y tal como decía la carta a las ocho en punto apareció un hombre a la mitad de la estancia, ella no se sorprendió al verlo llegar.
Buenos días, señora Bernini, soy el profesor Alighieri- se presentó el hombre, era más joven de lo que se había imaginado Emily, a lo mucho tenía treinta y cinco años
buenos días- contestó Emily- disculpe mi pregunta ¿cómo iremos al Colegio?..perdone mi ignorancia pero desconozco totalmente el mundo mágico- mintió ella, por años había fingido no saber nada de magia incluso enfrente de su propia hija
no se preocupe, señora- respondió el profesor- iremos por medio de esto- y sacó una botella rota de vidrio, ella fingió sorpresa- es un traslador, lo toca y lo transporta al lugar donde este programado...tenemos que esperar unos minutos para que se active
no hay problema ¿y seguro que esa cosa sirve?- preguntó ella
por supuesto, no se preocupe, es el mejor medio de transporte mágico- contestó el profesor Alighieri- le puedo hacer una pregunta señora Bernini, un tanto personal
espero que se la pueda contestar- dijo ella sonriendo
¿sabe algo del padre de Cassie?- preguntó el profesor
¿el padre de Cassie?...bueno él salió de mi vida hace mucho tiempo
¿era mago?- esa pregunta si que no se la esperaba Emily "¿desde cuándo los profesores se interesan por los padres de las alumnas?"
¿por qué la pregunta?- respondió ella, definitivamente no iba a andar propagando información acerca del padre de su hija
lo sabrá cuando hable con la directora- dijo él, después vio su reloj- creo que ya es hora, sólo tómelo y de preferencia cierre los ojos- ella lo obedeció, sintió como era transportada, apareció en una oficina, supuso que era de la profesora Matteotti, no tuvo mucho tiempo de ver la habitación, ni de reponerse del mareo que le había provocado el traslador tantos años de no usarlo tenían efecto sobre ella, cuando sintió como una muchacha de cabello negro la abrazaba
¡mamá!- exclamó Cassie- pensé que no vendrías
como creíste eso...cualquier cosa relacionada contigo jamás la pospondría- abrazo a su hija con más fuerza, hasta que una mujer interrumpió el encuentro entre madre e hija
bienvenida, señora Bernini- dijo la directora del Colegio, Emily se separó de su hija y se encontró con una mujer de unos cuarenta años, de cabello castaño y ojos oscuros
gracias, profesora- respondió Emily
me retiro- anunció el profesor Alighieri- mucho gusto, señora Bernini
igualmente- respondió ella, después el profesor salió de la oficina
por favor, tome asiento- le indicó la directora, Emily se sentó en una de las sillas colocadas enfrente del escritorio, su hija se sentó en la silla de a lado, cuando ambas estuvieron sentadas la directora tomó asiento- espero que haya disfrutado el viaje
pues mas bien, me mareo, no sé como dicen que es el mejor transporte mágico- Claudette Matteotti sonrió
no soy una persona que se ande con rodeos, prefiero ir directo al grano- dijo la directora- la mandamos llamar señora Bernini porque hace unos días descubrimos unas cualidades muy especiales en Cassie- la aludida estaba sonriendo- ella no es una bruja cualquiera- los temores de Emily se vieron confirmados- todos en el mundo mágico pueden hacer magia, pero la mayoría requerimos de una varita, y muy pocos magos lo logran hacer sin ella, Cassie pertenece a esa minoría
no entiendo- mintió Emily, sabía muy bien a que se refería, su hija había heredado el mismo poder que ella tenía, poder hacer magia sin varita
Cassie le harías una demostración a tu madre- ella asintió, susurro algo parecido a wingardium leviosa y con un simple movimiento de mano hizo flotar un florero que la directora tenía sobre su escritorio
comúnmente necesitamos de una varita- la directora sacó su propia varita e hizo que el florero volviera a su lugar- pero ella no...este tipo de poder comúnmente se transmite por línea sanguínea, o por muchos años de entrenamiento, pero es rara la persona que lo logra...tenemos la idea que los pudo haber heredado de su padre, ya que usted es una muggle ¿el padre de Cassie era mago¿o alguien de su familia tiene estos poderes?
pues...realmente no sé, su padre no hablaba mucho sobre él, y hace años que estoy alejada de mi familia- respondió Emily
realmente no es importante saber de dónde obtuvo sus poderes Cassie, sino es importante que ella aprenda a utilizarlos, por el momento sólo puede hacer hechizos básicos que no tienen gran complicación, pero se necesita entrenar y aquí en Italia no hay nadie que la pueda ayudar a controlar sus poderes, la mejor persona en el mundo que le puede ayudar está en Inglaterra, se llama Albus Dumbledore y es de los mejores magos en el mundo, ayer por la noche hablé con él y está gustoso de aceptar a Cassie en el Colegio que él dirige y por supuesto darle clases para que maneje sus poderes, pero necesitamos de su permiso para que Cassie pueda ingresar a Hogwarts
Inglaterra...- susurró Emily, el destino quería que ella y su hija fueran ahí
¡por favor, mamá!- le suplicó Cassie- Hogwarts es el mejor Colegio de magia de Europa ¡por favor!
no sé, hija, no sé
no es necesario que usted viaje con ella, sólo necesitamos de su permiso- intervino la directora- y si usted quiere ir con ella, el profesor Dumbledore me aseguró que le podría conseguir un trabajo
está bien- contestó Emily, su hija celebró empezando a saltar de alegría- pero yo viajaré contigo, regresaré a Inglaterra- la directora sonrió era más que evidente el amor incondicional que Emily Bernini le profesaba a su hija
¿en serio, mamá?- preguntó Cassie
muy en serio, Cassie- respondió su madre- profesora ¿cuánto tiempo tenemos para preparar nuestra partida?
pues cuanto antes mejor, si se puede en una semana ya deben estar en Londres, si gusta señora Bernini podemos recurrir a la magia para hacer más fácil su mudanza- dijo la profesora Matteotti
si todo va a ser más fácil, agradecería mucho la ayuda- contestó Emily
eso tenlo por seguro, mamá- dijo Cassie
le escribiré al profesor Dumbledore, para que se ponga en contacto con ustedes- dijo la directora del Colegio levantándose de su lugar- las clases terminaron hoy, Cassie ¿si quieres puedes irte hoy a tu casa?
pues ya tenía mis cosas listas para irme- respondió Cassie- mamá ¿me esperas unos minutos para irme a despedir de mis amigos?
anda, dudo que a Lorella y Riccardo les guste que te vayas sin despedirte de ellos- dijo Emily sonriendo con tristeza, ella no se pudo despedir de sus amigos cuando dejó Inglaterra. Cassie salió disparada de la oficina
es una muy buena chica- comentó la directora- sin duda Hogwarts le gustará
indudablemente, es un lugar único, le encantará- dijo Emily distraídamente, muy tarde se dio cuenta que había hablado de más
señora Bernini, si es que ese es su verdadero nombre- dijo la directora viendo a Emily a los ojos- ¿quién es usted realmente?
perdone profesora, pero no sé de que habla- dijo Emily
no se sorprendió cuando Cassie le mostró su poder, mas bien mostró preocupación y usted me acaba de confirmar que conoce Hogwarts o ha escuchado hablar de él¿el padre de Cassie era mago¿o usted es bruja?- Emily estaba muy nerviosa, nadie en los 16 años que llevaba viviendo como muggle había descubierto tantas cosas sobre ella en un instante
lo que sea del padre de Cassie no es de su incumbencia, él salió de mi vida hace mucho tiempo- respondió Emily un tanto alterada- y sobre mí no hay nada que decir
¿por qué lo oculta, señora Bernini¿por qué finge no saber nada de magia¿qué le hizo el mundo mágico?
nada, no me hizo nada, pero prefiero seguir ocultando quien soy, antes de poner en peligro la vida de mi hija y la mía- dijo Emily bastante enfadada
entonces ¿quién es usted¿a quién le teme?- preguntó la directora
le repito lo que sea sobre mí no es de su interés- contestó Emily- así que por favor no siga preguntado y no intente investigarme, quiero seguir manteniéndome en secreto, y por favor no le comente nada a Dumbledore sobre mí...le advierto si sé que habló sobre mí o investigó sobre mí lo lamentará
no se ponga así, señora Bernini, tranquilícese- le dijo Claudette Matteotti- y no voy a investigar nada sobre usted
gracias- respondió Emily más tranquila- lamento mi comportamiento pero no soportó que hagan preguntas sobre mí
no se preocupe- dijo la directora, en ese momento alguien tocó y por la puerta entró Cassie
ya regresé- anunció- Lorella no me quería dejar venir
el traslador ya está listo- dijo la profesora Matteotti- cuando quieran irse
pues ya- contestó Cassie- antes de que me arrepienta o Lore venga y no me deje ir
mucho gusto en conocerla, señora Bernini, me da gusto el gran apoyo que le da a su hija
gracias- respondió Emily- también me dio gusto conocerla
hasta luego, Cassie- se despidió la directora de su alumna- aprovecha tus clases con Dumbledore y Hogwarts
eso haré profesora, gracias- dijo Cassie y después abrazó a la directora
cualquier cosa que necesiten se pueden comunicar conmigo- les dijo Claudette Matteotti, antes que madre e hija desaparecieran al tocar el traslador que les había dado.
Tres semanas de vacaciones y ya no lo soportaba, que daría por irse de ahí, por no volver a ver jamás en su vida a su odioso primo Dudley y a su horrible tío Vernon, a su tía Petunia le tenía alguna forma de afecto, lo había aceptado en su casa, tal vez de no muy buena manera pero lo había hecho y al final de cuentas era la hermana de su madre, la única familia que le quedaba no la podía olvidar así si más, bueno su primo también era familia, por así decirlo, pero la relación de él con su tía había mejorado desde que volvió de su quinto año, y con su primo, Dudley, nada con él se podía resolver.
Era una calurosa tarde en Privet Drive, y él Harry Potter estaba sentado en el suelo de su habitación, tenía ordenes estrictas de no salir, y por primera vez no quería desobedecerlas, si salía y los mortífagos lo encontraban habría una matanza como la de Hogsmeade un mes atrás ¿cuántas personas habían muerto ese día? No lo sabían con exactitud, muchos cuerpos fueron encontrados destrozados y sin forma alguna de reconocerlos, las listas de desaparecido seguían aumentando a pesar que ya había pasado más un mes desde el día del ataque, tantas vidas perdidas sin razón; no quería que pasara de nuevo, no por temerle a Voldemort, eso había quedado claro Harry Potter no le tenía miedo a Lord Voldemort, pero si a que tantas vidas de personas inocentes, se perdieran por esa guerra absurda que inundaba en el mundo mágico, para los que habían vivido la primera guerra, la que en ese momento hacía sufrir y estremecer al mundo mágico era mucho peor, nadie podía estar seguro si sobreviviría al día siguiente, si sus seres queridos lo harían, si podía haber una luz en medio de toda esa oscuridad, si algún día podrían volver a ser felices, nadie lo sabia, pero todavía en algunos corazones se albergaba la esperanza, esa el razón por la que valía pelear, por la que la orden del fénix no se daba por vencida, por la que él se preparaba para un día acabar con el señor Oscuro, la esperanza de un nuevo amanecer donde todo será mejor, donde la ambición y la maldad de una persona no hará perder la vida de personas inocentes. Sabía que la mayor parte de las personas del mundo mágico tenían la firme esperanza, que él, Harry Potter, volviera a vencer a Voldemort, él lo quería hacer y tenía sus motivos. Sus pensamientos se interrumpieron cuando una lechuza se acercaba velozmente hacia él, cuando estuvo frente a él la reconoció como la lechuza de su mejor amigo, una pequeña lechuza, que ya había crecido un poco, llamada Pig.
¡ay, Ron! Nunca me vas a dejar en paz- dijo cuando tomo la carta, en los días de vacaciones había recibido casi una carta diaria de Ron, sin contar las de Hermione, Ginny, Lupin y hasta de Dumbledore, todas con la misma pregunta ¿Cómo estás? Ya estaba harto, tenían la misma actitud que mostraron después de la muerte de su padrino, entendía que estuvieran preocupados, pero tantas cartas, además estaba casi seguro que estaban viviendo en la misma casa: Grimmauld Place, pero qué podía hacer, le seguían escribiendo y por más que les dijera que estaba bien, le seguían y seguirían enviando cartas, ansiaba la llegada de la carta donde le avisarán el día que lo recogerían...ese día llegó.
¡Hola Harry!
¿Cómo estás? Por acá todo sigue como siempre, nadie sabe nada, o fingen no saberlo. Bueno como sea, te escribo para avisarte que cuando canuto aparezca, irán a buscarte unos amigos.
Nos vemos hasta entonces
Ron Weasley
¿canuto aparezca¿su amigo se había vuelto loco o qué¿canuto¿Sirius?..instintivamente Harry volteó a ver el cielo, no tardo en entender lo que su amigo le había dicho, cuando la estrella Sirius apareciera miembros de la orden del fénix lo irían a buscar, en época de guerra no se podían fiar de nada, ni de nadie, y el uso de claves se había vuelto común, aunque en este caso era evidente que su amigo no tenía mucha imaginación que digamos.
Las horas siguientes para Harry Potter pasaron muy lentamente, empacar para él se había vuelto una tarea fácil, en cuanto termino de leer la nota de su amigo sus cosas se guardaron en su baúl, sólo fue cuestión de esperar. Su espera sólo fue interrumpida cuando su tía lo llamó para que le ayudará a cocinar, pero casi se corta el dedo por voltear a ver el cielo, su tía prefirió echarlo de la cocina, y así él volvió a su recámara y a su espera. Cuando por fin el sol se ocultó y las primeras estrellas empezaron a brillar, el timbre de la casa sonó y unas voces familiares se oyeron en la estancia de la casa, Harry Potter tomó sus cosas y bajo de inmediato a su encuentro con los miembros de la orden del fénix. Sonrió al ver quienes estaban ahí, muchas conocidos entre ellos casi toda la familia Weasley, Ron, Ginny, Bill, Charlie y el padre de los antes mencionados, Hermione Granger, Remus Lupin, Nymphandora Tonks, Ojoloco Moody y Kingsley Shacklebolt.
Hola, Harry- le dijo una pelirroja en cuanto lo vio, todos los presentes desviaron su mirada hacia las escaleras donde se encontraba el aludido
Hola- respondió él sorprendido de ver a sus amigos
¿Cómo has estado?- preguntó Ron, Harry ignoró a su mejor amigo
Petunia disculpa por llegar así, pero teníamos que venir por Harry- le dijo un Remus Lupin que a pesar de lo cansado de su rostro, estaba sonriendo-es un gusto volverte a ver- la cara de Petunia Dursley se perdía entre el miedo y la aversión a todos los magos y brujas que se encontraban ahí
¿a qué hora nos vamos?- preguntó una impaciente Nymphadora Tonks
no te apresures- le respondió el señor Weasley
estoy segura que Harry ya se quiere ir- dijo la metamorfomaga
pues Potter tendrá que esperar- contestó Ojoloco Moody
Ron, Hermione ayuden a Harry con su baúl- les ordenó el señor Weasley, ambos asintieron y fueron hacia donde estaba el ojiverde, el cual todavía no se había movido ni un milímetro de las escaleras
Harry- lo llamó Hermione pero esté aun no salía de la sorpresa- ¿tu baúl?
Harry- le dijo esta vez Ron
ya voy, ya voy...esperen aquí yo subo por él- contestó por fin el ojiverde
te acompañamos- dijo Ron y los tres subieron a la habitación de Harry
¿desde que hora empacaste?- preguntó Hermione una vez que entraron a la habitación, no había rastro alguno de que un mago estuvo durmiendo en esa habitación durante tres semanas
después de recibir la carta de Ron- respondió Harry
te ayudo a cargar el baúl- dijo Ron, pero Hermione sacó su varita
¡Baúl loco...- pero cuando vio el baúl de su amigo ya estaba flotando
odio que hagas eso- le dijo Ron a Harry
recuerda no debes usar en exceso tu poder- agregó Hermione, ganándose las miradas reprobatorias de sus amigos
pero la magiaque hagoes indetectable- replicó Harry
pero no deberías arriesgarte- insistió Hermione
no le hagas caso Harry- dijo Ron- es una loca histérica, paranoica
yo no soy paranoica- le reclamó Hermione al pelirrojo
¡ah, no!- dijo con ironía Ron- te recuerdo lo sucedido hace dos meses, si no hubieras sido tan paranoica no te habrías imaginado cosas donde no había nada
¡nada¡ahora resulta que estoy ciega¡sé perfectamente que vi!- exclamó Hermione enojada
¡BASTA!- gritó el ojiverde callando a sus amigos, ya estaba más que harto de sus discusiones, sólo había disfrutado de cinco meses sin esas discusiones, que ahora eran peor que antes- pueden dejar sus discusiones para después o mejor aun arreglarlas
yo no tengo nada que arreglar con él- contestó Hermione enojada, sólo un pensamiento se cruzaba en su mente jamás, pero jamás perdonaría a Ronald Weasley- todo esta perfectamente claro
lo mismo dijo- añadió Ron, en eso entró una pelirroja
¡a que hora piensan bajar!- exclamó Ginny al entrar a cuarto de Harry- ya está todo listo para irnos
si ya vamos- contestó Harry, y así los cuatro salieron, Hermione y Ron seguían enojados, sin verse siquiera, Ginny convencida que su hermano necesitaba de un milagro para solucionar las cosas con Hermione, y Harry estaba feliz por fin iba dejar a los Dursley y esta vez para siempre
¿listos?- les preguntó Lupin cuando bajaron, los tres asintieron
¡Portus!- exclamó Ojoloco Moody señalando con su varita una taza de té, está produjo un resplandor azul- listo acérquense- así lo hicieron todos los presentes- a la cuenta de tres todos tocan el traslador ¿entendido?- todos asintieron- si por alguna razón no funcionará y fuéramos a dar en algún lugar desconocido o lleno de mortífagos...
Moody no vamos ir a dar con los mortífagos- dijo Tonks desesperada de la actitud extremista del experimentado auror
por si acaso un grupo especial de la orden va a estar preparada para cualquier eventualidad- terminó Ojoloco Mooody
adiós, Petunia- dijo Lupin- Harry despídete de tu tía- él aludido volteó a ver a su actual tutor
adiós, tía Petunia- dijo Harry, y por primera vez en los casi 16 años que llevaba viviendo en la casa de los Dursley su tía lo abrazó, ambos sabían que esa tal vez sería la última vez que se vieran, porque Harry no tenía las mínimas intenciones de volver a la casa donde pasó los peores años de su vida, y Petunia vio en los ojos de Harry la misma mirada que Lily tenía cuando se fue de casa de sus padres, esa vez hace más de veinte años ella le rehuyó a su hermana menor y la insultó, no haría eso mismo con Harry, comprendió que para él ella era su única familia, ojalá un día Lily la perdonara por haber tratado tan mal a su hijo...su sobrino, él hijo de aquella pelirroja traviesa de ojos verdes que a pesar de ser como el agua y el aceite a final de cuentas era su hermana.
por favor, cuídate- le susurró Petunia al separarse de él, al cabo de unos segundos todos los magos y brujas que habían estado enfrente de ella desaparecieron al tocar una taza de té...las lágrimas que por dieciséis años aguanto ya no pudieron con ella y bañaron su rostro...en su mente le pedía perdón a su hermana por haberla tratado tan mal durante su niñez, por despreciarla por ser bruja, por haberle echado la culpa de la muerte de sus padres, por negar que tenía hermana, por Harry...por tantas cosas que se había jurado no volver a pensar, pero esos remordimientos ya no podían con ella y sólo le quedaba pedir perdón a la memoria de su hermana, tal vez en un futuro en algún lugar después de la muerte se reuniría con su hermana y con sus padres...donde ya no habría ni rencores, ni envidias. Petunia Dursley lloró hasta que ya no pudo, hasta que ya no tenía más lágrimas que derramar...ni su esposo, ni su hijo supieron lo acontecido ese día en la casa de los Dursley y sólo basto con decirles que Harry Potter por fin los había dejado.
no pensé que tuviéramos tantas cosas- le comentó Cassie a su madre- recuérdame que la próxima vez que me mude sea de forma definitiva
y mira que estamos dejando algunas cosas- le contestó Emily- imagínate si tuviéramos que cargar con tanto mueble ¡hasta Inglaterra!
eso es fácil, lo encoges y listo...¿pero es necesario cargar con todas esas fotos?- dijo Cassie señalando las tres cajas llenas de fotografías, su madre tenía una afición por coleccionar fotos...aunque lo más raro y que jamás le había preguntado es que casi todas las fotos que había eran de Italia, de su vida allí, no había ninguna de Inglaterra, y la mayoría de ella y su madre; a excepción de dos fotos una donde aparecían dos muchachos, un hombre y una mujer, ambos de pelo negro y con facciones que dejaban ver su parentesco ¿gemelos? Lo más seguro sin embargo estaba segura que nunca en su vida los había visto, su madre siempre había evadido la pregunta de quiénes eran esos jóvenes, y la otra foto, un bebé muy tierno y hermoso, el cabello negro y sus ojos verdes eran lo que más resaltaba ¿quién era? Eso también lo desconocía la hija de Emily Bernini o mejor dicho de Emily Potter.
¿si crees que escribiéndome cada semana es suficiente para tu madre? Pues no...digamos que las fotos son una forma de tenerte cerca- contestó Emily, tomando una foto donde su hija en ese entonces de cinco años jugaba en la playa
¿cómo es Inglaterra, mamá?-preguntó Cassie de repente mientras seguía encogiendo las cajas que ya estaban listas
ya lo verás, te va a gustar a pesar que hayas vivido en Florencia toda tu vida...no debes olvidar que llevas sangre inglesa
¿mi papá era inglés?- preguntó curiosa Cassie, eran pocas las ocasiones en que podía sacarle información a su madre
si...él nació Londres- respondió Emily satisfaciendo la curiosidad de su hija y creyendo que no iba a preguntar más sobre ese desagradable tema, pero estaba muy equivocada...
mamá...si mi padre sigue viviendo en Londres ¿podré verlo?- dijo Cassie, su madre se puso pálida y temblorosa
lo...lo...dudo- contestó Emily- tu...tu padre es un hombre muy ocupado
cómo lo puedes sabes si no has sabido de él en 17 años
dieciséis- corrigió Emily
lo que sea...estoy a punto de cumplir 17 años- empezó a decir Cassie- y no sé quien es mi padre ¡y no vayas a salir con lo mismo de siempre! "Tu padre fue alguien que amé demasiado, pero me traicionó" ¡es lo único que se de él!...¿y si de él herede mis poderes? Si fue así él me podría ayudar...por favor mamá dime algo
de él no heredaste tus poderes, de eso estoy segura- contestó Emily- y no puedes verlo
¿POR QUÉ!- saltó Cassie- ¡es justo que yo lo conozca y él a mí!
eso no es posible- dijo Emily- tú no puedes ver a tu padre
¿por qué¿qué te hizo para que lo odies tanto?
hizo algo que jamás le podré perdonar, jamás
pero yo lo quiero ver...-suplicaba Cassie
no puedes verlo, Cassie...porque él está... en prisión- su hija se quedó estupefacta, no se esperaba eso una duda saltó a su mente ¿prisión¡su padre en prisión¿qué delito cometió¡por eso lo odiaba su madre? Los pensamiento ya no pudieron seguir divagando acerca de su padre porque una carta apareció de repente en frente de ella, la leyó lo más rápido que pudo, al terminar de leer la última frase la carta esta se incendió y no quedó rastro de la carta que Albus Dumbledore le envió a Cassie Bernini
¿qué fue eso?- preguntó Emily
una carta de Albus Dumbledore y sistemas de seguridad...bueno dice que dentro de dos horas dos aurores que según la carta de llaman Kinsley...mmm...Shackel...bueno algo y Nympha...o como se diga ese nombre Tonks vienen por nosotros- contestó Cassie
¿Nymphadora Tonks? Si que conocía ese nombre ¿la hija de Andrómeda Black¿auror? La última vez que la había visto tenía cinco o seis años¿la reconocería? muy dudoso, y el otro nombre jamás había hablar de él,no corría el peligro que alguien la pudiera identificar, aunque con el cabello pelirrojo, largo, y ojos castaños ¿quién la podía identificar como Emily Potter?
Espero que les haya gustado, estoy segura que más de uno, si no es que todos, ya saben quien es el padre de Cassie, pero esa historia la contaré más adelante, lo prometo. ¿Qué tal lo de Colagusano? Digamos que esa es una de mis teorías del 6º libro, Peter, la rata traidora, se va a arrepentir. Y lo de Petunia...lo tenía que poner en algún lado, porque dudo que los Dursley vuelvan a aparecer ¿qué les pareció?.
En el próximo capítulo: la llegada a Inglaterra, y la aparición de nuevos personajes...y más información sobre Cassie, en este capítulo sólo la presento por así decirlo, pero ese personaje supongo que todos saben su importancia.
Por favor dejen algún comentario, ya saben que se recibe de todo felicitaciones, críticas, howlers...lo que quieran.
Ahora si me despido.
Con mucho cariño
Gala Potter
