Un silencio incómodo inundaba la primera planta de la residencia Blendy, Meredy sentada en uno de los sofás tranquilamente se limaba sus uñas mientras Natsu daba vueltas recogiendo y poniendo de vuelta en su sitio los objetos que su hermana menor había arrojado por los aires. Chelia por su lado había decidió subir a su cuarto un momento y se encontraba ahora bajando nuevamente las escaleras.

Una vez tocó piso con su ropa y peinado nuevamente en su lugar, colocó sus manos en su cintura y se dirigió a su hermana.

- ¡¿Qué rayos ocurré contigo?! ¡¿Por qué volviste con Wendy?!

- En primer lugar, como iba a saber yo que estaban cogiendo cuando volvimos, esto no es culpa mía.

- Y una mierda, sabías perfectamente lo que hacías. Era mi amiga ¿Por qué harías algo así?

- Bueno si era tan buena amiga, tenía derecho a saber.

- Loca, yo no voy mostrándole a tus amigas lo que hacen con Natsu. Esto era un secreto.

- ¿Loca yo? Te dejo sola dos minutos y destrozas la casa.

- ¡Tenía derecho a estar molesta! Habíamos acordado parar, LOS TRES. Y luego solo querían dejarme fuera.

- Bueno, eres un incordio. No me sorprende.

- ¡¿Huh?!

Natsu, solo observaba la discusión desde una distancia segura en silencio, sabía que lo mejor que podía hacer era mantenerse lejos y no interferir, suspiró pensando en el desastre que tendría que arreglar luego, mas en el momento en cuanto vio como Chelia se acercaba a agarrar a Meredy de su ropa, el tonó de un teléfono cortó la tensión en el cuarto.

Ambas mujeres se quedaron quietas al ser tomadas por sorpresa, Chelia fue nuevamente a decir algo, aunque con el teléfono molestando no era tan sencillo, se dio la vuelta a ver a su hermano que detrás de la mesa miraba el móvil en su mano, por un lado no quería interrumpir, pero por otro lado, ya lo había hecho.

- Perdón, ah, perdón - Se disculpó antes de darles la espalda y contestar el teléfono - ¿Si?... Sí, soy yo... ¡¿Qué?! Eh ¿Ocurrió algo grave?... Ah, sí, sí, Iré ahora.

- ¿Todo bien? - Meredy le preguntó tras notar cómo había subido la voz.

- Sí..., sí, todo bien... - Decía mientras miraba aún un poco desorientado la pantalla - ¿Chelia, dónde planeas ir a buscar a tu amiga?

- Voy a buscarla a su casa, no se me ocurré donde más podría haber ido, Wendy es bastante reservada.

- Iré a dejarte, espérame en el auto.

- ... ¿Seguro?

- Sí, solo, ve.

Chelia dio un último empujón a su hermana antes de aún molesta dirigirse hacia afuera.

Natsu igualmente se dirigió con la mirada una última vez a Meredy... Tomo aire, queriendo decir algo, pero decidió en contra, sacudió la cabeza y salió por la puerta. Esta, al verse sola se desplomó de vuelta en su asiento su expresión aún agria.

Afuera aún lado de la casa cubierto bajo el alero, un vehículo blanco lujoso y asientos forrados en rojo y en negro perteneciente al padre de los hermano les esperaba.

- ¿Papá no va a enojarse de que saques el coche? - Chelia preguntó mientras se colocaba el cinturón de seguridad en el asiento de copiloto.

- No si no le dicen, lo sacó todo el tiempo.

- Pensé que pedías permiso.

- ... ¿ Y qué te hizo pensar eso? - Decía mientras encendía el motor.

- ... - Chelia se detuvo a pensar un momento - Buen punto.

Natsu tronó sus dedos hacia adelante y ajustó los espejos mientras esperaba el motor calentase, nuevamente un silencio muerto se plantó entre ellos.

- Te veías preocupado... ¿Ocurrió algo?

- No tengo idea, iré a ver.

- Ah.

- No tienes que preocuparte - Puso su mano en su cabeza y revolvió el cabello de su hermana - Ya te contaré luego, tú solo preocúpate de no perder a tu amiga.

Chelia solo sonrió mientras Natsu empezaba a sacar el vehículo de la acera a la calle.

Wendy corrió sin rumbo por un par de minutos hasta verde completamente privada de aliento... Cayó con las manos en las rodillas en lo que intentaba recuperar el aire. Ni siquiera estaba segura de por qué había huido, las imágenes de Chelia seguían dando vuelta en su cabeza... Ya le parecía demasiado saber en lo que estaba involucrada su familia como para además saber que ella no solo era parte, si no potencialmente la causa... Sabía que correr era inútil, no solo había dejado bastantes de sus pertenencias en su casa, tendrían que verse en clases al empezar la siguiente semana... Pero aún si era solo un día más, quería alejarse y poder ordenar sus pensamientos.

¿Cómo debía de dirigirse a ella la próxima vez que inevitablemente se viesen, ahora que sabía sobre su "situación" familiar?

Wendy miró a sus alrededores... Pensó en qué hacer, hacia dónde huir ahora... Solo quería volver a casa lo más pronto posible y en cuanto su respiración había vuelto a la normalidad, se encaminó de vuelta a su hogar.

... Cada vez que cerraba los párpados volvía a ver la escena y volvía a sentir el calor en sus mejillas, sabía que estaba mal... Qué no debía pensar en su amiga así... Y que principalmente lo que ella hacía era aún peor... Pero incluso así, no podía evitar la excitación que toda eso le causaba... Wendy siempre había estado demasiado avergonzada para investigar los temas sexuales a su alrededor... No solo era virgen, a sus quince años, nunca había tenido novio, siquiera había dado su primer beso y al ver a Chelia negarse a todos los avances que más de un chico de su escuela habían hecho hacia ella, pensaba que esta también estaba desinteresada en el tema. Jamás se imaginó era porque no solo tenía a alguien más en mente, si no, que ese alguien sería su hermano mayor, de alguna forma se sentía más alejada que nunca de Chelia... No solo porque está había guardado esta información de ella y con razón... Sí no por que también sentía dentro de sí una diferencia en madurez que no había sentido antes... Como si está revelación hiciese a Chelia más adulta de alguna forma... Y que la dejaba cada vez más atrás... Más sola, Wendy no tenía ningún otra amiga, siempre había estado por su cuenta y metida en sus estudios, no había sido hasta finales del año anterior que Chelia se había transferido a su clase y no podía estar más agradecida de que ella hubiese hecho el, a su parecer, esfuerzo de hablar y pasar tiempo con ella a pesar de Wendy sentir era una persona aburrida, aún con eso, Chelia había decidido arrasar con todas sus defensas para llegar hasta ella... Y eso había hecho. Definitivamente no quería perderla... Pero estaba sobrepasada con toda la nueva información que había descubierto estos últimos dos días... Sabía que la única forma de solucionarlo sería hablando con ella... Pero no quería hacerlo aún... Mas se dio cuenta no tendría opción de esperar tras al llegar a su casa ver a Chelia sentada en la acera esperando por ella.

Chelia se levantó de su lugar al ver a Wendy y tímidamente se encaminó en su dirección en silencio, una vez estaban cara a cara, la agarró de las manos y dijo - Creo que te debo una explicación...

Ambas chicas ahora se encontraban en el cuarto de Wendy, una habitación simple, mucho más pequeña que la de Chelia.

Una cama, un escritorio y una cómoda, todo de colores blancos o madera en comparación a toda la decoración rosa que Chelia poseía. Con no mucho espacio mas, ambas decidieron sentarse en la cama, recostarse en la muralla y hablar un momento.

La primera pregunta tomó a Wendy por sorpresa - ¿Eres virgen verdad?

Wendy pasmada, inmediatamente empezó a tartamudear y tropezar en sus palabras. - E...pu, ah,... Eh... Qué... Yo. Ah?

Chelia rio - Era de imaginar. Bueno aún si no lo fueses, no creo que haría mejor está situación.

- ... Pues no, la verdad no.

- ¿Crees que estoy mal por lo que hago? ¿Crees que eso me convierte en alguien peor?

- Eh... Noo... Pero, no se trata sobre eso...

- ¿Entonces?

- ¿Entonces qué...?

- Entonces de qué se trata.

- ... Es tu hermano!

- Lo sé, créeme que lo sé.

- No vas a ser como tú hermana y decir que esa es la mejor parte ¿Verdad?

- No, claro que no... De hecho... Odio que seamos familia. Todo sería tan fácil si no.

- Aún si no lo fuesen... Es alguien bastante mayor qué tú.

- Son solo tres años... De aquí en adelante hará menos y menos diferencia.

- ... ¿Supongo?...

- Mmm, honestamente no sé por dónde debería comenzar.

- ... ¿Por qué..?

- ¿Mm?

- ¿Por qué harías algo así? ¿Qué te lleva a hacer algo así? Me preocupa que te hayan...!

- ¿Utilizado? ¿Te preocupa que Natsu se haya aprovechado de mí?

- ¡Sí!

- Puedes quedarte tranquila, no es eso, nunca ha sido eso... Sí me preguntas el porqué... Bueno creo que es lo normal ¿no?

- ¡¿Normal?!

- Querer estar con quien amas... Querer besarlo, abrazarlo querer tomarse de la mano y bueno... Hacerlo.

- ¡No es normal tener ese tipo de amor con tú hermano! - Wendy hacia énfasis en sus últimas palabras.

- ... No, no lo es. No...pero... ¿Qué se supone haga al respecto?

- ...

- Natsu siempre ha estado ahí, para protegerme, para reconfortarme, preocupándose por mí, para alegrarme el día, hacerme reír, apoyarme... ¿Cómo se supone no me enamorase?

- ... - Wendy apartó la mirada... No sabía cómo contestar a eso.

- Yo no lo decidí... Solo ocurrió. Natsu no ha estado siempre en nuestras vidas... Natsu no empezó a vivir con nosotras hasta hace... ¿Ocho años atrás? Siempre supe de él, claro está, había veces que salíamos los tres junto a papá antes de viniese a vivir con nosotras... Pero aún así fue un cambio drástico para mí... Mi única experiencia era con Meredy, siempre discutiendo, quitándonos las cosas la una a la otra, tirándonos del pelo... Y de pronto... Había un chico en casa... Qué se preocupaba por mí, que me prestaba sus cosas, que me hacía de comer, que me acompañaba a la escuela, que se peleaba con chicos que me molestaban, UE hacia de todo...por mí. Qué me defendía, que me quería, que aún si papá ni mamá estaban, aún si Meredy estaba molesta... Él siempre estaba para mí... ... Al inicio solo era querer verme bonita en casa, estar avergonzada de que pensaría él de mí... Qué me siguiese queriendo y dando atención, con eso yo era feliz. Me tomó tiempo darme cuenta que estaba enamorada... y creo que para Meredy fue igual. Natsu puede que pensase solo estaba haciendo lo que debía hacer, su trabajo como "hermano mayor"... Pero para mí... Es más de lo podía pedir.

- Aún así... Eso no explica cómo eso te lleva a algo como... Como... Como tener sexo con él.

- No, supongo que no - rio - Creo que fue el miedo...

- ¿Miedo?

- Hubo un incidente en mi escuela anterior... Una vez me estaba cambiando y... Un profesor... Intentó encerrarse en el baño conmigo...

- ¡¿Eh?!

- No ocurrió nada por suerte, en cuanto noté sus intenciones, grité... Grité por la única ayuda que conocía... Y te juró Wendy, segundos... En segundos, Natsu echó la puerta abajo y le dió la paliza de su vida, le reventó la cara contra los espejos, rompió los lavabos el agua salía por todos lados y la sangre Wendy, la sangre, ¡no sabía que alguien podía sangrar tanto!... Natsu casi lo mata ahí mismo, no fue hasta que llegó más gente que lo detuvieron... Y una vez paró... Lo primero que hizo fue correr hacia mí... Y abrazarme... Pocas veces he visto a Natsu llorar... Siempre intenta mantenerse fuerte frente a nosotras... Una vez fue poco después que empezó a vivir con nosotras, aunque intentaba ocultarlo, la otra vez... Fue cuando me abrazó y lloraba de lo preocupado que estaba por mí, y de lo feliz que estaba de haber llegado a tiempo a salvarme. Fue después de eso que Natsu me introdujo a que hiciese judo... Para poder defenderme, intentó que Meredy también lo hiciese, pero con ella no hubo suerte, así que Natsu se ha tomado de forma más personal el defenderla. También fue entonces que me transferí de escuela.

- ... No sabía eso.

- Bueno, no me gusta hablar al respecto - Chelia hablaba aún con una sonrisa en su rostro, a pesar del tema... Recordaba los positivos con mucha más fuerza - Pero creo que es relevante ahora. Porque luego de ese incidente... empecé a necesitar más de Natsu... lo necesitaba para sentirme segura... Y que si iba a tener mi primera vez con alguien, tenía que ser con él, quería que fuese él... Así por lo menos si llegaba a estar en una situación "así" de nuevo... No me sentiría tan... vulnerable, no quería que mi primera vez fuese "así". Tenía sentido para mí, no solo era de quién estaba enamorada... Era quien podía defenderme... Y quien más se preocuparía por mí... Aún me siento un poco mal de haber usado de excusa el querer "asegurar" mi primera vez para que Natsu lo hiciese conmigo, pero funcionó... Y fue la mejor experiencia de mi vida... Fue todo tan... Romántico, tan asombroso, tan cálido, me sentía tan querida, tan segura y finalmente tenía a Natsu para mí..., Al principio se supone iba a ser solo eso... Pero ya no había marcha atrás... Necesitaba más... Meredy se dio cuenta de lo que hacíamos, acepto que no eramos muy discretos al respecto, principalmente yo, solía ser bastante... Ruidosa cuando... Ya sabes, y ella habría querido su parte del pastel... El resto es historia.

- Wow...

- Yep... Wow...

- ... ... Aún no me parece correcto... Pero supongo que lo entiendo un poco más... No sabía por lo que habías pasado. Lo lamento.

- Honestamente no me molesta, estoy feliz haya ocurrido ese incidente - Chelia decía mientras una sonrisa aparecía en su rostro - De no ser por eso, quizás mi amor por Natsu jamás se habría consumado, gracias a eso también, me cambiaron de escuela y... Te conocí a ti - Chelia agarró su mano y entrelazó sus dedos con los de Wendy - Soy mucho más feliz ahora - Wendy no pudo evitar sonreír junto a ella.

- Eso resuelve un par de mis dudas... Pero aún tengo tantas preguntas... - Wendy se irguió hacia adelante

- Pues aprovecha, estoy de humor para contestar todo lo que necesites - Ambas chicas rieron para colocarse frente a frente a charlar, ahora más calmadas y más cómodas.

- Dices que Natsu no empezó a vivir con ustedes hasta más tarde ¿Acaso no son hermanos?

- Natsu no es hijo de mi madre y solía vivir con su mamá, por eso también Natsu y Meredy se llevan por tan poca edad... Natsu tiene 18, Meredy los cumple en poco y yo estoy por cumplir 16.

- ... Sigue siendo raro lo cerca de edad que están. Es casi al mismo tiempo... Uno esperaría que entre un matrimonio y el siguiente habría más pausa entre un hijo y otro...

- Ah... Sí... Sobre eso... - Se rascaba la nuca - Mis papás, no decidieron empezar a salir hasta que bueno, Meredy. Y la Madre de Natsu estaba casada... Con otro hombre... Tengo entendido fue una situación incómoda cuando hubo que explicar por qué el segundo hijo tenía el pelo rosa. Para ese entonces... Mis padres ya estaban juntos y no fue hasta que Natsu nació que supieron quien era el padre.

- ... ª

- Yep. Pero papá siempre se preocupó de Natsu y su madre, antes no solía ganar tanto claro, así que no podía aportar tanto, económicamente, pero siempre intentó estar ahí... No fue hasta que pudieron dejarnos en manos de Natsu que mamá y papá empezaron a trabajar más lejos... Y por más tiempo.

- Ya veo.

- ...Hey, Wendy...

- ¿Sí?...

- Sabes puedes también preguntar con respecto... Ah bueno... Ya sabes... Sexo... Me imagino alguna duda tendrás.

El rostro de Wendy se encendió fuertemente... El tema la superaba un poco... Pero... Definitivamente tenía... Dudas... Carraspeaba en su mano preparándose para preguntar mientras evita sus ojos se topasen con los de Chelia.

- Bue... bueno... Ya que lo dices...

- ¿Sí?

- ... Cómo... Cómo se siente...

- Genial.

- ...

- La verdad no sé bien cómo explicarlo... Es llenador... Por obvios motivos, es cálido y hay mucha presión dentro de ti y se siente... Bien... Muy bien. Honestamente no puedo explicarlo.

- ... Wow... - A pesar de la información poco esclarecedora que se le había otorgado, para ella cualquier cosa era más de lo que conocía.

- Hey... Recuerdo como mirabas a Natsu... ¿Te gusta?

- ¿Eh? ¿Yo? No, no, no, no... Solo me fijaba... En... En el parentesco.

- Oye... No te voy a juzgar, lo entendería, yo soy quien más piensa es sexy.

- ... Bueno... Quizás un poco, es bonito... Eso definitivamente, pero de ahí a que "me guste", no, con suerte lo conozco.

- Entiendo.

- Pero a la vez... No puedo negar que quiero saber más de él...

- ¿Uy, a la pequeña Wendy le interesa un chico? - Decía fingiendo sorpresa.

- No, no, no, no es eso... Es solo...quizás un poco... Aún así es demasiado pronto.

- Esta bien... Créeme, no es una mala elección. Pero que sepas era mío primero.

- ¡No planeaba quitartelo!

- Ah, ¿Planeabas compartirlo?

- !!No!!

Chelia rió, mientras Wendy se encontraba avergonzada a no más poder... Entonces sintió su móvil vibrar... Lo revisó y Wendy vio la duda en su rostro

- ¿Ocurre algo?

- No, es solo que Natsu dijo no podría venir a buscarme... Qué tenía que ver algo de su hermano.

- ¿Hermano?

- Si... Por parte de su madre, Natsu tiene un hermano mayor.

Wendy acompañó a Chelia de vuelta su casa, tras haber reído y charlado, su relación no solo había vuelto a la normalidad, había mejorado un poco... - Iré a arriba por tus cosas... No sé si quieras pasar...

- No... No aún...

- Está bien...bueno, de cualquier forma... Aún queda un día de este fin de semana... Sí Querés quedarte o quieres volver en cualquier otro momento... Eres bienvenida.

- Gracias... Pero creo que necesito descansar, han sido suficientes emociones por una semana.

- Te entiendo, espera un momento. Vuelvo enseguida.

- Wendy miró alrededor del patio frontal y notó la ausencia del lujoso auto blanco que estaba afuera de la casa que sabía era del padre de Chelia... Presumiblemente Natsu aún no volvía... Miró hacia el cielo... Los últimos rayos de sol desaparecían y el tono de las nubes pasaba de un rosa a un azul oscuro... Debía apresurarse para volver a casa antes de que oscureciera. En lo que pensaba en volver a casa y dormir un poco, Chelia volvió a salir con su mochila en sus brazos, la cual dejó en manos de Wendy. Se despidieron con una sonrisa prometiendo volver a verse en clases llegado el día lunes. Wendy se alejó de vuelta a la calle e hizo una última reverencia mientras Chelia se despedía moviendo una mano.

Chelia volvió a entrar de vuelta y suspiró... cansada pero a la vez feliz de haber podido arreglar las cosas... Y que Wendy la entendiese un poco más... No tener que ocultar más su amor de su mejor amiga era un gigante peso levantado de sus hombros, en cuanto subió las escalas de vuelta a su cuarto vio a Meredy saliendo de su propia habitación.

Se quedaron en silencio mirándose por un momento.

- ¿Todo bien?

- Por suerte, Wendy comprendió.

- Me alegro por ti.

- Y una mierda. No te metas en mis amistades. Ya es suficiente que te metiesas en mi relación con Natsu.

- Oof, alguien no se ha tomado su café.

- Estoy hablando enserio. Meredy. Deja de intentar arruinar mi vida - Fueron las últimas agotadas palabras de Chelia antes de entrar a su cuarto y cerrar la puerta detrás de sí.

- ... Agh - molesta exhaló con fuerza Meredy - Fue un puto error, ok? Se me pasó la mano. Fue un puto error - Meredy igualmente dió de un portonazo y se encerró en su cuarto.

Wendy tarareaba mientras caminaba tranquilamente devuelta a su casa hasta que sintió una gota caer en su nariz... Abrió los ojos en sorpresa y se giró hacia arriba, más gotas empezaron a caer sobre ella... Lentamente se largaba a llover, decidió correr, mas al ver como la lluvia caía cada vez más fuerte decidió entrar a la tienda más cercana que vio con intención de comprar una sombrilla... Por suerte, parecía ser ella la única que no se había fijado en el clima y habían sombrillas disponibles en todos lados...

Una vez había salido de la tienda, con una parca que por suerte llevaba en su mochila y la sombrilla en mano decidió retomar su camino... Más se detuvo al ver un auto estacionado a un lado del puente que cruzaba por encima del río... Reconoció el auto... Definitivamente era el de la familia de Chelia, se acercó... Y miró alrededor al ver que no había nadie cerca... Entonces vio la luz que brillaba por debajo del puente... Había un fuego... Su curiosidad pudo con ella y lentamente bajo por la ladera del río a ver qué ocurría allí...

En efecto... Natsu estaba ahí... De pie mirando el algo que ardía a sus pies... El qué... Wendy no estaba segura... ... Wendy no dijo nada... Solo miró la escena por unos segundos... ... ... Dio un paso hacia atrás en sorpresa al ver como el fuego... O mejor dicho lo que fuese estaba ardiendo se girase o se moviese... Entonces... Wendy escuchó una respiración áspera sin aire y... ¿Adolorida?... No era ella y tampoco era Natsu... ¿Qué rayos... Estaba quemando...? - ¿Natsu? - Wendy llamó y este se giró hacia ella... ... ... Natsu estaba llorando fue lo primero que Wendy notó o por lo menos había estado llorando... Sus ojos rojos y sus párpados hinchados... Al verla... Notó como la hasta ahora solemne expresión de Natsu se llenaba de dolor... Para luego saltar hacia ella empujándola al suelo... Wendy no sabía cómo responder al ver, sobre su falda Natsu se encontraba llorando de forma desconsolada mientras abrazaba su cintura...

- Ya... Ya... Todo va a estar bien - Fue lo que salió de sus labios, sus manos acariciando su cabello y la lluvia incesante caía sobre ellos.