La música es mi musa:

Canción para este capítulo: Where we land, Ed Sheeran

Letra: "Tell me your secrets. Give me a friend".

Capítulo 2

Secretos

Hermione corrió hacia el restaurante muggle, directamente hasta la mesa donde Theo la estaba esperando. Se reunían cuatro veces a la semana para la cena y ella se encontró con que estaba esperando con ansias estas dos horas durante todo el día. Los días que transcurrían entre ellos, cuando no se reunían, la dejaban un poco inquieta. Los fines de semana, se quedaba con él en su casa.

Ella había alquilado un pequeño piso en el Callejón Diagon, cerca del Ministerio, donde estaba realizando un internando durante el verano. Kingsley Shacklebolt había sido nombrado Ministro de Magia temporal inmediatamente después de la batalla y se había acercado a ella de inmediato para hablarle acerca de un internado en el Ministerio. Ella había aceptado de inmediato, esperando que eso ayudara a encontrar a sus padres. Ella había tenido razón, le había dado los contactos que necesitaba para rastrear a sus padres. Por desgracia, sin embargo, encontrarlos no significaba que los recuperara. Sus recuerdos se habían perdido para siempre. Había descubierto que aparentemente habían establecido un testamento con el Ministerio en caso sucediera algo así.

Sin que Hermione supiera, Dumbledore había hablado con sus padres sobre lo que podría sucederles y la incapacidad mental había sido mencionada. Por supuesto, se suponía que podía suceder debido a algo como la Maldición Cruciatus, y no por un avanzado hechizo de memoria realizado por su propia hija, pero el resultado final había sido el mismo. La casa en la que había crecido había sido vaciada y vendida. Su valor en oro ahora estaba en su bóveda y los Weasley's habían sido nombrados como sus guardianes mágicos.

Todavía era desgarrador, el haber perdido a sus padres en la guerra. Aunque ella consideraba a Ron y a Harry como su familia, en realidad no lo eran. Tener un verdadero hermano... era especial. Y aunque ella no estaba llevando necesariamente bien el resto de las implicaciones de ser una Nott perdida, tener a Theo como un hermano era absolutamente maravilloso.

Lo besó en la mejilla mientras lo abrazaba y luego le dejó sacar una silla para ella.

- ¿Cómo estuvo tu día, hermanita? – preguntó con alegría, sentándose.

Ella se encogió de hombros. – Hoy fue el día, estamos muy cerca de alcanzar nuestro objetivo para poder ofrecer el programa el próximo año. -

Theodore e sonrió. - Hermione, ¿por qué no me dejas donar el dinero que necesitan? -

Hermione suspiró. - Porque el punto es no tener a las familias de magos más ricas financiando esto, Theo. Ellos necesitan que el Ministerio lo haga, es maravilloso que quieran ayudar, pero no es así como desean obtener fondos cada año. Ellos no quieren estar pidiendo a los sangre pura cada primavera que mantengan el programa funcionando año tras año. Sí, se harán recaudaciones de fondos, y ciertamente puedes donar entonces pero necesitan un presupuesto de Shacklebolt. -

Su cara era feroz y Theo alzó las manos en derrota. -Bien, bien, pero te das cuenta de que puedes mantener este programa funcionando por el resto de tu vida natural con sólo el interés que hagas de tu mitad de la fortuna de Nott, ¿verdad? -

Ella se encogió ante él. - No estoy tocando ese dinero, se siente mal de alguna manera. Además, nadie sabe que soy un Nott. ¿No sería realmente extraño si de repente dirigiera ese oro hacia este proyecto? -

Él sonrió y luego sacudió la cabeza, agarrando su menú. - Eres adorable, vamos a tener que anunciar que eres un Nott pronto, Hermione. Me sorprende que se haya quedado fuera del Profeta durante este tiempo, pero mi tío lo sabe ahora. Tenía que decirle y él no mantener el silencio acerca de esto por mucho más tiempo. -

Hermione dio un largo y sufriente suspiro y luego se sintió enrojecer ante la ceja levantada de Nott. Éste era un viejo argumento entre ellos últimamente. Theo estaba listo para hacerle saber al mundo que ella era su hermana. Hermione era egoísta. Quería mantener esta noticia para sí misma.

- ¿Te avergüenzas de mí? - Theo preguntó en voz baja.

Hermione jadeó y miró hacia arriba. - No, Theo, por supuesto que no, solo estoy disfrutando de tenerte para mí misma. Mi razonamiento detrás de no querer dar la noticia es completamente egoísta. Además, no estoy segura de que estoy lista para ser una Nott. Eres como la realeza. Va a haber todas estas expectativas sobre mí que sé que no voy a cumplir. -

Theo dio un lento asentimiento, pero parecía triste. - Sé que tienes miedo, Hermione, pero tú eres mi única familia ahora, con la partida de papá, solo somos tú y yo y realmente quiero poder verte en público. -

Ella le dirigió una pequeña sonrisa. - ¿Cansado de los restaurantes muggles?

Theo rió. - No, pero quiero que conozcas a mis amigos, quiero conocer a tus amigos, quiero poder pasar por el Ministerio e ir a verte a la hora del almuerzo. Además de que vamos a volver al colegio en sólo dos semanas, Hermione. -

Hermione suspiró. -Bien, tienes razón, ¿podríamos decirles primero a mis amigos? Podrían ser más agradables.

Theo frunció el ceño. -Mis amigos también serán agradables, Hermione. -

Ella sacudió la cabeza e intentó ocultar lo incómoda que se sentía manteniendo esta conversación. – Tus amigos me atormentaron de niña, Theo. –

Él suspiró. - Bueno, es bastante justo. Le contaremos tus amigos primero, los míos serán los siguientes, y el Profeta será lo último. De hecho, podemos esperar a hacerlo hasta que no tengamos más opción. -

Hermione asintió y se echó hacia atrás en su asiento con un extraño escalofrío recorriéndola. - Esto va a ser una locura ¿Podemos esperar hasta después de esta semana? Quiero decir, yo preferiría anunciarlo mientras esté segura en Hogwarts. -

Theo le dirigió un pequeño asentimiento de cabeza y una suave sonrisa. - Hermione, va a estar todo bien, lo prometo. –

Unos días más tarde, se sentaron juntos en la mesa de la cocina de Weasley mientras Hermione les contaba a sus amigos las sorprendentes noticias.

Molly Weasley estaba horrorizada. - Tu pobre madre - dijo, sosteniendo una mano conmocionada en su boca.

Ginny parecía confundida. - No lo entiendo, estaban casados ... ¿Por qué renunciar a 'Mione?

El rostro de Arthur estaba preocupado. - Habría sido un escándalo fantástico y la gente se los habría echado en la cara constantemente. -

George bufó con disgusto. - Ella era su hija y para salvar su pellejo ellos simplemente la abandonaron. - Miró a Theo con disculpas. - Es una auténtica mierda. -

Theo asintió y se echó hacia atrás en su asiento. - Mi madre no habría tenido opción, sin embargo. Mi abuela, su suegra, era verdaderamente una mujer horrible. Ella dirigió esa casa con un puño de hierro. La carta que mi papá me envió decía que no se les había dado otra opción y si se negaban podrían haber conseguido que matara a Hermione. Algo sobre el honor de la familia y todo eso. -

Ginny parecía escandalizada. - Eso es asqueroso, no solo era su culpa. -

Theo se encogió de hombros y Arthur cambió muy elegantemente el tema. - Entonces, ¿Vas a estar reclamando a Hermione, anunciando esto? -

Theo asintió con la cabeza. - Sí, sí, no me importa que quisieran que se guardara el secreto, ella es mi hermana, y todo el mundo lo sabrá. -

Hermione se frotó la cicatriz de su antebrazo y le dedicó una débil sonrisa a Harry, quien la observaba atentamente.

- ¿Estás bien con esto, Hermione? - Preguntó Harry con cuidado.

Ella se encogió de hombros. -Tengo que estarlo, ¿no? Y preferiría que Theo lo anunciara y que luego sea una historia de última hora de Rita Skeeter. -

Ron gruñó, con su cara un poco pálida. - Pero, 'Mione, ahora eres rica. -

Theo se echó a reír y luego se encogió de hombros. - En realidad, no me quita ni una mierda de dinero. -

Hermione se sonrojó. - No necesito dinero, tengo un hermano, eso es todo lo que quiero.

Theo pareció sorprendido y luego le sonrió y la abrazó. - Nunca quise tener un hermano, pero estoy muy feliz de tenerte. -

Todos rieron y la tensión se evaporó.

Molly dejó en claro que, ya que ella y Arthur eran los guardianes mágicos de Hermione, eso significaba que Theo era su hijo también para cuidar (No importa que ambos fueran mayores de edad) y procedió a asegurarse de que Theo viniera siempre que Hermione lo hiciera.

Theo estaba claramente abrumado, pero actuó como un perfecto caballero.

Harry superó el impacto rápidamente, al igual que los otros Weasley. Sólo era Ron quien seguía luchando con todo.

Acarició a Hermione después de la cena, con la cara todavía trastornada.

- ¿Es por eso por lo que no saliste conmigo? ¿Por lo que me has estado evitando todo el verano? – preguntó.

Hermione suspiró. - Ron, los dos estuvimos de acuerdo en no salir y ustedes han estado tan ocupados en el Ministerio este verano como yo. -

Ron se puso un poco rojo, pero se encogió de hombros. - Pero no me hablaste de esto, ¿Pensé que éramos mejores amigos? -

Hermione se sonrojó esta vez y luego abrazó a Ron. – No te lo oculte solo a ti, tampoco le dije a Harry ni a nadie más, necesitaba tiempo para acostumbrarme a todo esto y quería estar a solas con mi nuevo hermano, la guerra fue bastante terrible para él también, Ron. -

Hubo un bufido, pero pareció darse cuenta de que discutir con ella sobre esto no era en su mejor opción.

- Yo solo... quiero que sepas que estoy aquí para ti, ¿De acuerdo? -

Hermione asintió y le besó la mejilla. - Gracias, Ron. -

Harry le dio buenas noches y ella se fue más que feliz de que todo el mundo estuviera al tanto de su nueva situación y muy contenta de que hubieran aceptado a Theo tan calurosamente.

Al día siguiente, sin embargo, fue el turno de Theo para compartir su secreto. Theo había invitado a sus amigos antes de que llegara Hermione, para tener tiempo de darles una advertencia.

Draco Malfoy se quedó mirándolo como si hubiera crecido una cabeza extra, Goyle parecía confundido, y Blaise Zabini parecía muy divertido.

- Ah, hombre, una heroína de guerra es una Nott. Esto no tiene precio - dijo Blaise, levantando la copa a Theo.

Theo se estremeció, pero rodó los ojos. -Sí, estoy seguro de que mis antepasados están orgullosos. -

Zabini resopló mientras Gregory Goyle se ponía de pie, todavía parecía confundido. - Pero ella es una sangre sucia. -

Theo luchó por tener paciencia. No hacia falta perder la paciencia con sus amigos ahora. Estaba seguro de que habría muchas oportunidades de hacerlo en las próximas semanas. Especialmente cuando comenzaron su octavo año de escuela.

- Ella fue criada por muggles, sí, sin embargo, ella es mi hermana, mi hermana mayor. - respondió Theo lentamente.

Draco alzó la vista. - ¿Cómo saben que tu madre...? - Su voz se apagó ante la mirada oscura de Theo, pero recuperó rápidamente su bravuconería. - Maldita sea, Theo, no seré el único que te pida esto, ¿Cómo lo sabes?

Blaise contestó, sin embargo. - Un hechizo puede decir si son medios hermanos o completos. -

Draco tragó saliva y luego dijo: - Bueno, mierda.

Goyle negó con la cabeza. - Pero ¿Por qué la dieron a los muggles?

Theo suspiró. - Papá estaba preocupado de que se pareciera demasiado a mi madre y él la quería tan lejos de la familia como sea posible. Mi abuela era malvada, amenazó con matar al bebé si no la hacía desaparecer. Me dijo que incluso le dio al bebé una poción para cambiar el color de sus ojos, que eran originalmente azules como los míos. - Theo se frotó la cabeza distraídamente. - Aún no le he dicho eso a Mione. -

Blaise silbó a eso, sus ojos se ensancharon. - Amorosa familia la que tenías, Nott. -

Theo rio entre dientes. - Sí, he quemado el retrato de la justo después de leer la carta de papá, no quiero que le diga cosas groseras a mi hermana. –

Draco gruñó, pero asintió. - Bueno, pero ¿Qué pasa con el resto de nosotros? Hicimos su vida un infierno. Ella fue torturada en mi maldita casa. -

Theo perdió su buen humor. - Lo sé, pero tú no... -

Draco sacudió la mano. - ¿Sabía que era tu hermana? No, no lo sabíamos, pero incluso si mi tía lo hubiera sabido ella todavía la habría torturado. -

Theo suspiró. - Y mi abuela amenazó con matarla cuando ella era un bebé. Supongo que entiendo lo que es tener parientes de mierda, Draco. -

Blaise resopló. - Eso es genial, nos perdonas, pero ¿Qué pasa con ella? -

Goyle habló. - Ella nos odia. -

Blaise asintió con la cabeza. - Bueno, ustedes dos, en especial, fueron unos completos imbéciles. - les dijo a Goyle y Draco

Draco suspiró y se sentó, tomando un largo trago de whisky. - Ella probablemente va a maldecirnos hasta la mierda. ¿Quién la culparía? -

Blaise levantó su vaso de nuevo y se echó a reír. - No yo. Me voy a disfrutar del espectáculo. -

Theo bufó, pero parecía un poco preocupado. - No seas tonto, no te perdonará, pero no te maldecirá, sabe que son mis amigos. -

Draco resopló ante su amigo. - Creo que estás subestimando su odio por mí. -

Theo parecía incómodo y se sirvió otra copa. - Bueno, pase lo que pase, mejor no la maldigas de vuelta, Draco. -

Draco le dirigió una mirada ruda. - No es broma - dijo amargamente mientras se hundía de nuevo en el sofá.

Goyle se sentó de nuevo, parecía un poco asustado. Mientras, Blaise daba patadas a la mesa de café con una gran sonrisa en la cara ante el malestar de sus amigos.

•••

Nota de la autora: Muchos deben preguntarse por qué los Weasley son los guardianes mágicos de Hermione cuando ella es mayor de edad ya. Esto se debe a que cuando Dumbledore habló con sus padres ellos le "cedieron" la custodia de Hermione a los Weasley en caso de que algo les ocurriera y toda esa conversación sucedió cuando Hermione era menor.

Hola, hola, ¿Cómo están? ¿Cómo va la historia?
Espero que la estén disfrutando, vamos con el capítulo 3

Att .: Garde
P.D .: Gruñir es la moda * Gruñido * (A ver, ¿Quién entendió esa pequeña referencia? Los leo)