Love Live! No me pertenece, es de sus respectivos autores
Una atmosfera oscura rodeaba la casa del joven Kousaka Honoka. El cielo nublado anunciaba que pronto caería una llovizna en la ciudad, leves rayos de sol se lograban distinguir gracias a las aperturas de las nubes en el cielo.
Seis de los nueve integrantes del grupo de idols muse, se encontraban en la habitación del pelinaranjo donde cada uno se permanecía a los costados de la mesa en el centro de dicho lugar.
- ¿Qué haremos con este dilema? –pregunto el pelirrojo que entre sus piernas se encontraba un gato negro que dormía plácidamente gracias a las caricias de su amo.
-Enserio, ¿Por qué le regalaste ese gato? –con un suspiro, el dueño de la casa le pregunto a su peliazul mejor amiga de la infancia.
-Me pareció un lindo detalle por nuestro aniversario –la aludida se encogió de los hombros y vio a su novio que se encontraba a su lado- creo que es una buena idea, ambos se llevan muy bien.
- ¡Pero si parece un mafioso! –soltó en un gritillo el ojiazul que al ver la sonrisa malévola del compositor del grupo- ¡Míralo, parece un nazi!
- ¿Eres un nazi? –ingenua, la escritora vio a su pareja que solamente rio.
-Para nada, aunque –coloco su dedo índice sobre su mentón y dio la impresión de estar recordando algo- aunque creo que tengo un bisabuelo o tío por parte de mi madre que fue alemán en la segunda guerra mundial.
-Eso no ayuda a tu imagen, cara de tomate –bufo la pelinegra que se encontraba en la esquina de la mesa- menos que tengas a ese gato sobre tus piernas.
-Kuro –llamo el pelirrojo a su negro gato que, al momento de despertar, vio a la enana del grupo con sus esmeraldas ojos- ¿Qué tal si le enseñas a Nico-chan tus encantos?
Sin chistar, el gato abandono el regazo de su amo para saltar sobre la mesa y caminar lentamente hacia su objetivo. La cara de la Yazawa era de un miedo infundido por aquel pequeño animal: sus ojos gatunos no le daban buena espina.
Cuando el gato estuvo enfrente de ella; con una elegancia natural se acostó en su regazo y acurrucándose volvió a dormir.
-P-pero que lindo gatito –Nico acaricio con suavidad el lomo del animal y un tenue sonrojo se apareció en sus mejillas- ¿C-como es que este animalito puede ser tuyo si es adorable?
-Todavía que te hago el favor de que Kuro esté en tu regazo –el Nishikino bufo, pero no logro ocultar una divertida sonrisa que salía de sus labios.
-Se ve muy lindo, nya, pero que no se me acerque- para fortuna de Rin, él no estaba tan cerca del gato de Maki, pero aun así se deslizo un poco hacia atrás por si acaso.
-Que ironía, el chico gato alérgico a los gatos –el dueño de la casa rio un poco al ver como su compañero de aventuras casi se salía de la habitación.
-C-chicos –Hanayo hablo levemente- ¿q-que no estamos aquí para hablar de Nozomi-chan y Eli-kun?
-Kayochan tiene razón, estamos aquí para hablar de esos dos –el pelinaranjo mayor le sonrió a la castaña y vio a sus demás amigos- ya han pasado dos semanas y según me ha dicho Kotori-chan, esos dos no han hablado por ningún medio conocido.
-Pensé que sería algo sencillo de solucionar o que con un perdón bastaría. Pero Eli me comento que ha intentado de todo para poder comunicarse con ella y Nozomi no se lo ha permitido –hablo la peliazul que al igual que sus amigos, parecía preocupada por su rubio amigo.
-Sin contar que lo que hizo no fue exactamente correcto –agrego el pelirrojo- menos lo que hizo después. No puedo creer que tuviera que intervenir Honoka para que se calmara –soltó un gran suspiro y negó con la cabeza.
-Pero debemos ayudarnos… somos, al fin y al cabo una familia… -comento la Koizumi.
-Tienes razón, Hanayo –hablo Maki con un poco de seriedad en su voz- antes que nada, necesito que me digan que paso esa noche cuando fui en busca de Umi.
-No fue tan malo como crees –el pelinaranja mayor soltó un tenue suspiro- cuando te fuiste Nozomi-chan comenzó a llorar…la verdad fue algo que no me esperaba –vio por un momento al suelo- la tuvimos que llevar a su casa cuando por fin se calmó. De hecho, Hanayo-chan y Kotori-chan se quedaron con ella esa noche para vigilarla.
-Definitivamente Eli tiene aire en vez de cerebro en esa cabezota –el pelirrojo negó varias veces.
-No fue totalmente su culpa –abogo la arquera- no supo actuar. No lo defiendo, pero entiéndalo, el jamás haría algo para lastimar a Nozomi.
-Y creemos en eso, pero… -el pelinaranjo mayor negó un poco con la cabeza- Eli-kun no actuó como debería.
-Aun así –se animó a hablar la castaña- él quiere arreglarlo con Nozomi-chan. Malo sería si la ignorara y se fuera con Yuki-san –se ajustó sus lentes y vio atentamente a la peliazul- Umi-chan tiene razón, nada lo justifica, pero él no le haría daño a Nozomi-chan a propósito.
-Kayochin, ¡eres tan linda cuando te pones así de seria! Que podría comerte a besos en frente de los demás sin pena alguna –el chico gato abrazo a su amada fuertemente casi al punto de tirarla en contra del piso.
-R-Rin-kun, compórtate… –murmuro Hanayo con su voz nerviosa.
- ¿Qué no pueden hacer eso en la casa? - bufo la Yazawa que no dejaba de acariciar el lomo del gato- Tenemos que centrarnos en nuestro problema actual, ¿Qué no entienden eso?
-Mira quien lo dice, Nico-chan – contesto el Nishikino- tu eres la que no deja de acariciar a Kuro.
-No se puede evitar. Tu gato es sumamente lindo, ¡no sé cómo eres dueño de semejante ternura! –vocifero la pelinegra mientras negaba con la cabeza.
-Chicos, por favor –la arquera intento hacer que sus amigos dejaran sus asuntos para centrarse en el problema actual- ¿de qué te ríes, Honoka? –vio el cómo su mejor amigo de la infancia no para de sonreír y soltar dos que tres risas traviesas.
-Es que así es muse, no creo que nos concentremos tan rápido –hablo el joven pelinaranjo- Umi-chan, ¿No crees que son divertidos?
-No digo lo contrario, es solo que –la joven soltó un sonoro suspiro- a veces me gustaría que pusieran atención en lo que es importante.
-Veras como surgirá algo de esto –el ojiazul sonrió con gran confianza- no solo ellos están aquí intentando dar ideas, Kotori-chan se encuentra ahora con Nozomi-chan para animarla.
-Pero ella si está haciendo algo…-la joven Sonoda vio de nueva cuenta el cómo su novio discutía con su mejor amiga y el cómo los menores se abrazaban.
-Todos hacen algo, solo espera y tendrás el resultado esperado –confiado se cruzó de brazos y admiro la futura escena.
- ¡Tengo una idea nya! –grito el chico gato que por fin dejo de abrazar a Hanayo.
- ¿Qué te dije? –el líder del grupo le guiño el ojo a su mejor amiga y presto atención al pelinaranjo menor- ¿Cuál es tu idea, Rin-kun?
- ¿Qué tal si hacemos un paseo por el pasado, nya? –dijo con una brillante sonrisa.
- ¿A qué te refieres? –la pelinegra alzo la ceja, sin entender lo que decía el joven.
-L-lo que quiere decir Rin-kun: es que podríamos hacer que ellos dos vieran las escenas más importantes de su relación… -hablo con timidez la joven Koizumi.
-Eso tiene lógica –el pelirrojo pensó bien la situación y les dio a sus amigos una tenue sonrisa- no suena mal, a decir verdad. Con una buena planeación, puede que salga bien.
- ¿Qué te dije, Umi-chan? –Honoka aun sonriendo asintió- muse no es el tipo de grupo que tiene ideas normales o de maneras convencionales. Somos un grupo extremadamente raro si lo quieres ver así. Pero así funcionamos.
-En eso tienes razón, Honoka- la escritora le sonrió y vio a sus amigos- ¿alguna idea de cómo recrear esos momentos?
- ¡Eso también lo pensé, nya! –el joven gato los vio atentamente y soltó una leve carcajada- pero puede que no le guste mucho a cierto pelirrojo amargado.
- ¿Yo? ¿Qué tan mala es la idea? –Maki, ya resignado opto mejor por acceder a lo que sea que pensara el pelinaranjo menor. Le había prometido a Nozomi que la ayudaría y eso haría.
Primera estación: Salón de primer año de la preparatoria.
- ¿Que se supone que hago aquí? -pregunto la pelimorada, que vestida con su uniforme escolar se encontraba detrás de la puerta que daba al que fue su salón de clases.
-Solo quería que salieras de tu habitación -la sonrisa de inocente de la Minami no le parecía creíble para la sacerdotisa.
-No sé porque no te creo -la mayor entrecerró los ojos y analizo cada gesto de la menor que al igual que ella portaba su uniforme escolar.
-Confía en mí, ¿sí? -la peligris río un poco y toco en la puerta- solo disfruta -con eso dicho, abrió la puerta y espero a que su superior entrara.
-Presiento algo, mas no sé si es bueno o malo -desconfiada de la situación, se aventuró a entrar al salón- las cartas me dijeron que algo inesperado pasaría hoy.
Sin más, y ante la mirada atenta de la Minami, Nozomi entro al salón por completo.
La luz era escasa, pero al cabo de unos segundos, la oscuridad desapareció para dar espacio a una escena conocida para la pelimorada.
En el escritorio de la maestra, se encontraba Nico vestida con un pantalón negro y camisa verde.
El salón estaba lleno de personas que había visto solamente en los pasillos; eran alumnos de diferentes cursos y clubes. Inclusive había una chica del club de ocultismo.
Pero lo que le llamo la atención, fue el chico gato alias Rin que se encontraba parado en su asiento y con una mirada fría en su rostro.
-Mi nombre es Hoshizora... -carraspeo un poco y negó varias veces- A-Ayase Eli. No es para nada un placer estar con ustedes este año nya, me caen mal todos -dijo el pelinaranja con una falsa voz de seriedad.
-No recuerdo que Elicchi hiciera eso -murmuro para ella misma- pero, entiendo el punto. Sonó un poco grosero cuando se presentó con los alumnos.
- ¡E-es genial, ¡Rin... ¡Digo, A-Ayase-san es fantástico! -grito con cierto nerviosismo la Koizumi que se encontraba en el asiento detrás del Hoshizora.
-Tampoco recuerdo eso, pero... -la joven pelimorada soltó un suspiro nostálgico- de una manera menos efusiva, también grite, pero interinamente al ver a Elicchi entrar al salón. Mi vista no se apartaba de él, aquel que no temía a lo que digieran las personas y peleaba por lo que amaba.
-Me alegra que esté funcionando -la voz del Nishikino fue suficiente para hacer que la mayor saltara de la impresión y se girara a verlo un tanto asustada.
-Maki-kun, ¿Desde cuándo te convertiste en un espía? -pregunto mientras intentaba recobrar la normalidad de los latidos de su corazón- ¿Donde esta Kotori-chan? -busco detrás del joven, pero no vio a la mencionada.
-Se fue al siguiente escenario -Maki tomo suavemente la mano derecha de la joven y tiro de ella suavemente- vamos.
- ¿A dónde me llevas? ¿Qué está pasando aquí? -caminando detrás del Nishikino, intento averiguar la verdad.
-Cumpliré mi promesa -afirmo con su voz serena- sé que lo lograremos -vio desde su hombro a la ojiverde- haremos que todo este como antes.
Segunda estación: escaleras que van desde el segundo piso al tercer piso.
- ¿Que hacemos aquí? -preguntó la pelimorada al estar en la entrada de las escaleras del segundo piso.
-Solo mira y sabrás -Maki señalo las escaleras y sonriendo se dispuso a ver qué pasaría en las escaleras, baja el líder de muse con una actitud seria al igual que su compañero en aventuras en el salón de clases. Bajaba con cuidado y a decir verdad algo torpe, le era difícil caminar con la gracia con la que el ex bailarín caminaba frecuentemente.
- ¡O-oye! -a unos metros del pelinaranja, la peligris que había acompañado a Nozomi se encontraba agitada y apenada.
- ¿Uhm? -metido en su papel, se dio la vuelta y vio a la joven- ¿Necesitas algo? -la vio dudar- si es algo, dilo rápido que tengo prisa.
La ojiambar con sus mejillas sonrojadas comenzó a dudar, buscaba algo en las paredes que la ayudara, pero no la encontró. La mirada fría y esos ojos azules se le quedaron viendo fijamente. Tomo valor y le sonrió abiertamente y con cierta gracia.
-Soy Toujo Nozomi, es un placer -dijo con su gran sonrisa y fina voz.
-Recuerdo ese día. Estaba tan nerviosa que no sabía que decirle -la pelimorada sonrió bobamente- su mirada inquisitiva sobre mi provoco tantos sentimientos que no pude explicar y sigo sin poder hacerlo -soltó un suspiro y vio brevemente el techo- sentí miedo, pero quería ser tan valiente como el en aquel entonces. Quería estar a su lado aun si eso me llevara hacia el fin del mundo.
-Eso es muy romántico, nya -el pelinaranja menor hacia hecho aparición al lado de la pelimorada.
La joven solamente salto un poco y se giró a ver al joven gato- ustedes me van a matar de un susto, Rin-kun -la joven sonrió y acaricio la cabeza del Hoshizora- adivino, iremos a otro lugar, ¿verdad?
-En efecto nya -el asintió y tomo la mano de la chica- ¡Adelante!
-Vamos entonces -sonriendo lo acompaño- Rin-kun -él le contestó con un "¿Uhm?" - muy buena actuación por cierto~
-Gracias, Nozomi-chan~ -el asintió y por poco ronronea cuando la joven Toujo acaricio su cabeza.
Tercera estación: salón del consejo estudiantil.
- ¿Es aquí? –pregunto la sacerdotisa al chico cara de gato.
-Sí, nya –el asintió y abrió poco a poco la puerta- te lo advierto, esto no es apto para cardiacos –con una sonrisa traviesa abrió por completo la puerta y espero a que Nozomi entrara por completo al salón.
-Veamos que aventura es ahora –nostálgica y ansiosa, entro al lugar.
En la escena, se encontraban Maki haciendo el papel de Eli y Umi siendo Nozomi. Su posición era como generalmente encontrarías al presidente del consejo estudiantil y a su vicepresidenta: sentado codo a codo y acomodando papeles.
-Umi… digo, Nozomi –corrigió el pelirrojo con un carraspeo leve- ¿terminaste los trámites para el camión que pidieron los del club de futbol soccer?
-Sí, Elicchi –tan metida estaba la arquera en su papel, que le salió tan natural el apodo que suele usar la pelimorada con el rubio- tengo todo listo aquí mismo –con suavidad le entrego los papeles que el recibió con una tenue sonrisa.
-Gracias, Nozomi –asintió un poco y volvió a firmar y acomodar el papeleo.
-Elicchi – el joven Nishikino respondió con un "uhm"- ¿crees algún día tu y yo podremos salir?
- ¿A qué viene eso, Nozomi? –fingiendo que no entendió, detuvo su trabajo y vio a su acompañante- si salimos casi siempre.
-Elicchi es más denso que el aceite –la joven soltó un profundo suspiro y negó con la cabeza- ¿será que mis sentimientos no te han llegado?
- ¿Cómo es que…? –Nozomi alzo la ceja confundida. Aquel momento fue cuando ellos apenas llevaban un mes como presidente y vicepresidenta del consejo estudiantil. Aun no conocían al grupo e incluso, no había nadie ese día en el salón que pudiera contar aquello.
-Solo disfruta el espectáculo, Nozomi-chan –le murmuro el chico gato que parecía contento con lo que venía a continuación.
-Nozomi –la suave y cálida voz del pelirrojo se hizo sonar en la habitación- ¿enserio piensas eso?
-Elicchi, no digo mentiras –la joven Sonoda soltó un gran suspiro y vio con una media sonrisa a su acompañante- las cartas me dijeron que esto sería difícil, pero no calcule la magnitud de la situación.
-No soy tan complicado como parezco –con cuidado, tomo la mejilla de su compañera y la acaricio- incluso yo escucho la voz más tenue.
-No entiendo –su cara variaba entre confusa y apenada- ¿mi voz te ha alcanzado?
-Eso debería preguntártelo yo, Nozomi –con una sonrisa divertida se fue acercando lentamente.
Sin dejarla contestar, el pelirrojo tomo posesión de los labios de la peliazul que no se disgustó en ningún momento de dicha acción.
-Vaya –la pelimorada estaba asombrada, no solo por el hecho de que ellos dos se besaran con ella presente, si no por el hecho de que supieran de aquel momento tan íntimo que tuvo con el presidente del consejo estudiantil.
-Te sorprenderías las cosas que uno se entera en esta escuela, nya –hablo el chico gato- pero espero que disfrutes el final.
- ¿Aún falta? –alzo la ceja y su mirada vago entre Rin y la pareja que continuaba besándose suavemente- antes que nada, ¿Cuánto van a durar en eso? Que yo recuerde, Elicchi solo me dio un beso suave, no algo tan largo como lo que están haciendo esos dos.
-No digas nada, nya –el Hoshizora rio travieso- que ellos no saben eso. Si se enteran Maki-kun me matara por hacerle todo esto.
-Pues yo no veo que se quejen –la joven rio al igual que el menor al ver como la pareja no se separaba- será mejor darles algo de intimidad, ¿no?
-En efecto nya –tomo la mano de su acompañante y salió con ella del salón- pienso que te va a gustar el ultimo escenario~
-Eso lo veremos, Rin-kun.
Cuarto y último escenario: jardín de la escuela.
El jardín de la escuela, ¿Qué se puede platicar de el? En el que se encontraba el gran árbol que había sido confidente de muchos de los alumnos e incluso maestros de Otonokizaka. La tarde ya se pintaba de anaranjado y sus diversas tonalidades, la breve brisa acariciaba las mejillas de Nozomi y hacía con ella bailar sus cabellos.
- ¿Y qué hacemos aquí? –su pregunta se fue directo al aire. Aquel que la había acompañado se había desvanecido de la nada- tal parece que estoy sola en esto.
-Nozomi –aquella voz la hizo estremecer. Era la voz de la persona que había estado evitando por semanas. Ayase Eli se encontraba debajo del árbol, y en cuanto la llamo, se levantó y camino hacia ella.
La sacerdotisa de muse no sabía qué hacer con exactitud: por una parte, quería salir corriendo de ahí, y por otra, quería quedarse y verlo. Lo extrañaba tanto, a puntos tan altos que ni ella misma se imaginó.
-Elicchi, digo…Eli –se reprimió a si misma cuando menciono aquel apodo- ¿Qué haces aquí?
- ¿No lo recuerdas? –hablo calmado- en este lugar, te pedí que fueras mi novia –señalo aquel gran árbol- justo debajo del árbol fue donde te confesé mis sentimientos después de ese beso.
- ¿Del beso donde te avergonzaste y te pusiste rojo como un tomate? –bobamente rio al momento de recordarlo- ahora que lo pienso, actuaste como un niño.
-Quería parecer genial al momento de hacerlo –un poco nervioso rasco detrás de su nuca- pero al ver tus lindos ojos y tus mejillas teñidas de rojo, no pude evitar avergonzarme.
-Sí que eres problemático –ella negó y soltó un suspiro- ¿todo esto fue tu idea?
-No, fue idea de nuestros queridos amigos que quieren que arreglemos nuestros problemas –una sonrisa ladeada apareció en sus labios- Nozomi, te he extrañado mucho, intente comunicarme contigo, pero cada intento fue en vano. ¿En verdad no quieres saber nada de mí?
-No es eso… -la joven vio a su acompañante. Tenía el semblante completamente afligido; el al igual que ella, había sufrido con su separación- es que repaso ese momento en mi mente, pero no encuentro el por qué besaste a Anju-san. No lo comprendo por más que lo pienso.
-Fue un acto de estupidez. No me justifico, ni tampoco pido que no me odies ahora. Solo quiero decirte que jamás haría algo para hacerte daño. Eres la persona que más amo en este mundo, Nozomi –en un intento de sentirse seguro, tomo las manos de la ojiverde que para su sorpresa no las quito- la cosa más estúpida que he hecho es hacerte llorar, incluso ahora lo estoy volviendo a hacer –con sumo cuidado limpio una lagrima rebelde que resbalaba de la mejilla de la chica.
- ¿Y cómo sé que no volverá a pasar? –su estado era una combinación de furia y tristeza- ¿Cómo sé que no me lastimaras?
-Porque he aprendido que no quiero perderte –su voz sonaba convencida de lo que decía- lo que más odie de estas dos semanas no fue saber que estabas enojada conmigo, si no el saber que podría perderte por una estupidez de mi parte –negó varias veces con la cabeza y la vio fijamente a los ojos- eres lo único que quiero en este mundo. No me importa siquiera volver a bailar como lo hacía antes. Contigo conocí lo que realmente era amar y sentirse amado.
-Elicchi… -sus palabras fueron cortadas por un fuerte abrazo de parte del ruso. Las lágrimas que había contenido escaparon súbitamente de sus ojos y mojar la camisa del rubio- ¡Tonto, tonto, tonto, tonto! –en su ira y frustración golpeo el pecho del chico con toda la fuerza que podía.
Le dolía tanto físicamente como emocionalmente el verla así. Pero no se quejaría, merecía eso y más.
La dejo golpearlo a su placer y gusto, no mostro muecas de dolor en su rostro. Espero a que ella se calmara, que desquitara todo lo que su corazón había guardado.
- ¡Eres un completo tarado! –termino con dos puños en el pecho del chico- júrame que no volverás a lastimarme, hazlo.
-Nozomi-tranquilo y pese al dolor, la alejo un poco y con una genuina sonrisa limpio sus lágrimas con su pulgar- te juro, por lo más sagrado que jamás hare algo que te lastime –ante la mirada atenta de la chica beso su frente- Eres lo más bello que me pudo suceder. La tierna luz de tu mirada –con cuidado paso su pulgar desde la mejilla hasta la barbilla de la chica- Quiero estar contigo, ¿Quién más puede hacerme sonreír como tú?
Y en ese momento, sin dudarlo ni un segundo, la beso suavemente. Como lo había hecho en antaño cuando se aventuró a amar sin volver atrás. Por su parte, la pelimorada dudo por unos segundos, pero le respondió el beso como lo habían hecho sus dos kouhais en la escena anterior.
- ¡Funciono, nya! –el efusivo grito del chico gato hizo que la magia del momento desapareciera.
-Rin-kun, eres un genio –el líder del grupo choco los cinco con su compañero de aventuras- ¿Qué haces aquí? ¡Deberías graduarte y estar trabajando para la en una telenovela!
-Es buena idea, Honoka-kun nya –el asintió varias veces.
-P-pero si te vas… me quedare sola –la tenue voz de la castaña logro que el pelinaranjo menor dejara su extraña meta y corriera a abrazarla- ¿R-Rin-kun?
- ¡Yo nuca dejaría a mi hermosa Kayochin! –el grito del chico gato se escuchó incluso en las afueras de la ciudad- ¡Nunca, nunca, nunca! –con fervor comenzó a mecer a la chica entre sus brazos.
-Vaya chicos –la peliazul arquera de muse vio a la pareja recién reunida y les sonrió- felicidades por resolver sus problemas.
-Lo mismo digo, nos tenían preocupados –el compositor del grupo los vio y al igual que su novia, les sonrió enternecido.
-Chicos, muchas gracias –la sonrisa de Nozomi no cabía en su cara. Era una mezcla completa de gratitud y orgullo por sus amigos.
- ¿Qué tal si vamos a comer para celebrar? –ofreció la peligris con una espléndida sonrisa.
-Estoy de acuerdo, actuar todo eso fue cansado –la enana soltó con un bufido- ¡Tienen suerte de que la gran Nico ni actuara enfrente de ustedes!
- ¡Pero ni dijiste nada nya! –rio divertido el chico gato. Que soltó a su amada para salir corriendo tras ver la vena que salía de la frente de la pelinegra- ¡ni siquiera sabes actuar!
- ¡Ven aquí y te enseñare mis dotes de actuación! –furiosa y con el puño alzado, comenzó a seguirlo.
-Ya que recuerdo –el pelirrojo entrecerró los ojos- ¡maldito chico gato, me engañaste con esa escena! ¡se perfectamente que me grabaste! –con esos estruendosos gritos persiguió al Rin en busca de venganza.
-No sé porque no me sorprende –el pelinaranjo mayor negó con la cabeza y vio a su querida novia- Kotori-chan, ¿Cómo te sientes después de actuar? –
-Me recuerda algo importante- su mirada cambio de una feliz a una completamente molesta- ¿¡Quién te dio el derecho de hablarme así, Kousaka!?
-P-pero, ¡era parte de la actuación! –grito en su defensa. El mismo sabía que cuando la pajarita le decía por su apellido, estaba más que perdido.
- ¡Pues ve y grítale así a tu madre! –con desdén, tomo el brazo de la Koizumi que estaba más que confundida- Kayochan y yo nos iremos adelantando. ¡adiós!
- ¿P-porque me meten en esto? –pobre chica castaña, se la llevaron a rastras del lugar seguida por un pelinaranjo que preocupado por su relación sentimental salió corriendo por su novia.
-Ahora tengo que ayudarle –la peliazul vio a la pareja recién formada con una media sonrisa- ¿nos vemos después en ese restaurante que fuimos la última vez? –la pareja asintió- entonces nos vemos –se despidió con la mano y salió en busca de sus dos mejores amigos y Hanayo que ya se habían alejado bastante.
-Vaya amigos que tenemos –hablo el rubio tras reír un poco- los quiero tanto.
-Lo mismo, son como nuestra familia –la pelimorada mantuvo la vista en la persecución- como nuestros hijos, ¿no? –poso su mirada en su novio.
- ¿Mis hijos hacen incesto? –abrió los ojos como platos en broma y después soltó una gran carcajada- Dios, ¿Quién dice que no te diviertes fuera de la escuela?
-Nunca he estado tan de acuerdo contigo Elicchi –sonriendo se paró de puntitas para plantarle un beso en la mejilla y después tomar posesión del brazo derecho del chico- ¿Qué tal si alcanzamos a Umi-chan? Creo que necesitara ayuda.
-Es nuestra labor como padres a fin y al cabo –sin más comenzó a caminar con su amada.
¡Ya tocaba subir algo de Umi y Maki! Me siento feliz de haber actualizado hoy… aunque se supone que debería de estar estudiando e_e
Sin más que decir: dudas, críticas o alguna cosa por favor no duden en comentarlo. Sus reviews alimentan la creatividad de cualquier escritor, así que regalen aunque sea un review a cada historia que lean en sus hermosas vidas.
Nos vemos en la siguiente actualización~ n_n