CAPITULO 11
La siguiente vez que se topa con Loki es en la biblioteca. El dios está sentado en uno de los sillones individuales de piel café, la nariz hundida en un libro, un pie doblado bajo de él. Parece estar completamente inmerso en la cosa esa, la cual parece pesar al menos un par de libras. Es más como un ladrillo que un libro real.
Tony no baja ahí muy seguido. Los libros llenando los estantes son bastante viejos, muchos de ellos clásicos que todos claman haber leído pero que nadie realmente lo ha hecho (incluyendo Tony), dado que sus preferencias personales incluyen los más recientes desarrollos en ciencia y tecnología. La idea de perderse dentro de Macbeth o Ulysses hasta que sus ojos estén sangrando nunca le ha llamado la atención.
Se recarga sobre el lindel de la puerta, observando la pequeña escena frente a él. Loki está demasiado metido en lo que sea que este leyendo para notar que tiene audiencia, dándole vuelta a una hoja de vez en cuando. No parece ser una de las Eddas esta vez, pero Tony no puede evitar sentir curiosidad. ¿Qué estará leyendo un dios de las travesuras? Especialmente uno tan arrogante como Loki quien probablemente piensa que cualquier cosa escrita por enclenques humanos no merece su atención.
Quizás sólo deba dejar a Loki a sus propios asuntos y continuar hacia donde se dirigía – su reproductor DVD y el sillón donde planeaba dejarse caer a mirar una película.
Pero, como era usual, la curiosidad le gana y en lugar de dar la vuelta para irse, se despega del marco y entra sin prisas en la habitación, como si tuviera un asunto planeado allí y que no tomó un pequeño desvío porque Loki estaba ahí.
Se sienta en el sillón enfrente del que Loki está ocupando, dando un espectáculo para estirar sus extremidades y bosteando contento antes de acomodarse en una posición cómoda. La piel café cruje mientras ajusta su cuerpo, como si protestara ante esta molesta intromisión.
Loki no levanta la mirada pero Tony puede decir que el dios ha dejado de leer.
—Ya veo que has encontrado algo de interés en mi humilde biblioteca. Dime, ¿qué título de libro humano ha logrado atrapar la atención de un dios esta vez? —la pregunta sale más burlona y condescendiente de lo que era su intención, pero como sea—. ¿101 Maneras de Dominar a la Raza Humana? ¿Cómo Convertirse en un Gobernante de la Tierra en Diez Rápidos Pasos?
Loki se tensa, pero la mirada que dirige a Tony esta en blanco. —Crimen y Castigo —responde sencillamente, doblando la cubierta del libro para que el título sea visible.
¿Crimen y Castigo, eh? No un libro que hubiera estado en la lista de lectura de Tony. Es uno de esos pesados clásicos rusos, pero eso es todo lo que sabe. Aunque cree que tiene que ver con un asesinato, y Siberia y los Gulags. O quizás ese era otro libro que tampoco había leído.
—¿Tema fascinante, eh? —no puede evitar comentar—. Supongo que nuestro sistema de justicia humano difiere bastante de la manera en que la justicia es expedida en Asgard ¿verdad?
—Lo es —Loki acepta, no parece que tenga alguna inclinación para discutir el tema más a fondo.
Tony no sufre de las mismas obsesiones. —Tengo que darles crédito a ustedes, realmente tienen maneras muy creativas de administrar la justicia, aunque en algunos caso un poco… extraño —tamborilea su dedo contra su barbilla como si contemplara algo antes de seguir—. Entonces ¿qué tan seguido es sentenciada la gente con esclavitud en Asgard? ¿Cómo, no lo sé, por tratar de destronar al Padre de todo y ese tipo de cosas?
—Se ha sabido que sucede.
—Uh-huh. Pero apuesto a que tú eres el primero que ha sido sentenciado a ser el esclavo de un mortal midgardiano.
—No estoy familiarizado con algún otro tipo de caso —es la tensa respuesta.
—Entonces eres un pionero, Cuernitos, descubriendo nuevo terreno y todo. Pero está bien, todos tiene que aparecer en el libro de historia por algo.
El comentario no provoca una respuesta, así que decide continuar de nuevo. No es que realmente este seguro de a donde está llevando esto, pero es realmente difícil dejar pasar la oportunidad de mirar a Loki retorcerse en su asiento, como un conejito atrapado incapaz de escapar. O una víbora sería una comparación apropiada, una que Tony está provocando con un palito sólo por pura diversión.
No es que Tony haya proclamado ser un ganador gentil, y algunas veces sólo tiene que restregarlo un poco. Especialmente si el perdedor es Loki.
—Viendo como la esclavitud institucionalizada ha sido prohibida en las partes civilizadas del mundo ya hace tiempo, estoy algo curioso de cómo este negocio de la esclavitud funciona en la práctica. ¿Qué se espera que los esclavos hagan, en verdad? Porque francamente, no puedo pensar en muchos usos para ti —Tony dice, su comentario hace que Loki se encoja un poco.
La mirada que lo Loki le da es de sospechosa, como si tratara de encontrar algún motivo oculto en las preguntas de Tony. —Ellos hacen lo que sus amos decidan que harán —finalmente dice cauteloso.
—¿Y eso usualmente que conlleva en Asgard?
—Cualquier trabajo que se necesite hacer en una casa normal. Tareas de cocina, cuidar el ganado, limpiar, servir en la mesa, preparar las cenas, y… otras cosas.
—¿Cómo cuáles?
Loki se reacomoda en su asiento. —Servir como esclavos de cama.
¿Esclavos de cama? ¿Cómo…? Ahora es Tony quien se remueve en su asiento. Sinceramente se arrepiente de haber preguntado. Rápidamente, busca algo más que decir que mueva la conversación por otro camino. Lo que sea.
Estabas por ir a ver un DVD antes de terminar de alguna manera aquí su cerebro le suministra.
Sí, eso funcionará.
—En serio, ese libro parece totalmente tedioso. ¿Por qué no te muestro un tipo de entretenimiento cultural más interesante que este planeta tiene para ofrecer? ¿Alguna vez viste una película, Rodolfo?
No, Loki nunca había visto una película antes en su larga vida, y francamente no tiene ningún deseo de ser expuesto a tal entretenimiento humano soso.
Le hubiera gustado negarse a la propuesta de Tony, pero su radar de peligro y propio instinto de preservación le dicen que su mejor opción es aceptar. Sugerencias hechas a un esclavo usualmente no son más nada que ordenes veladas, después de todo. Y un Tony complacido es mejor que uno molesto, especialmente si Loki es el responsable de la parte del disgusto. Así que sigue a Tony hacia la sala sin quejarse, tres pasos detrás.
La pantalla colgando de la pared más lejana es grande, cubriendo una parte sustancial de ella. Tony asiente en su dirección y dice orgullosamente algo que contiene las palabras nuevo completamente y pulgadas y dólares pero no significa mucho para Loki. Para lo que le importa, es una pantalla plana en una pared, así que sólo escucha con una oreja el parloteo de Tony.
Habiendo terminado su pequeño monologo, Tony se sienta en el suelo y comienza a revisar pilas de cosas planas que parecen cajas, murmurándose a si mismo lo que suena como comentarios desaprobatorios para cada caja en su mano que termina en el suelo de nuevo. Loki se queda parado, mirándolo desde una distancia segura. Supone que las cajas con las imágenes en ellas son películas, aunque Tony parece tener un momento muy difícil decidiendo.
Después de unos minutos en ello, Tony levanta la mirada.
—Siéntate ¿sí? Como que me distrae el que estés ahí paradote como un asta mal colocada.
Hay un sillón detrás de él, pero no es tan grande y probablemente no era para más de cuatro personas sentadas apretujadas. Se lo piensa por unos segundos, no está seguro de que se espera de él. En Asgard, los esclavos nunca se sientan al mismo nivel que sus amos, o que la gente libre. Si no hay bancas o sillas más bajas alrededor, los esclavos se hincarán en el suelo, cualquier otra cosa estaría por encima de su posición. Verdad, Tony lo hace sentarse en la mesa, igual que él, durante las comidas, pero es imposible incluso para un esclavo comer de una mesa mientras está sentado en el piso. Un sillón parece diferente. Mira el mueble, pero a falta de otra directriz, se sienta en el suelo en su lugar.
Aparte, entre mas distancia mantenga entre él y Tony mejor. Por varias razones.
—¿El sillón no es lo suficientemente bueno para ti?
Está bien, parece que eligió la alternativa equivocada.
—El suelo está bien —dice, pero la mirada reprobatoria en el rostro de Tony no es muy difícil de interpretar, así que retrocede de espaldas y sube su trasero al sillón, obedeciendo la orden silenciosa.
El sillón es realmente cómodo.
Satisfecho aparentemente, Tony devuelve su atención a su previa actividad. —¿Así que qué tipo de películas prefieres, Bambi? Horror, acción, drama… —revuelva algunas de las cajas con sus manos, mirando cada una de manera crítica antes de dejarla de nuevo y colocarla junto a sus compañeras rechazadas—. No, espera ¡ya sé! —señala con un dedo a Loki—. Eres del tipo de la comedia romántica, ¿cierto?
No sabe si se supone que deba de dignarse a responder esa pregunta, así que sólo dice que no tiene una preferencia en particular. No es como si Tony no pudiera elegir lo que quisiera, a pesar de lo que dijera Loki
—No me estas ayudando aquí, Cuernitos —Tony le reprende, obviamente hubiera preferido otra respuesta.
Loki no dice algo, sólo frunce el ceño ligeramente ante uno de esos insultos tontos. Francamente se está cansando de ellos, aunque va más allá de la simple irritación. Tony ya ha tomado la libertad de Loki, seguido de sus ropas que eran su última conexión con Asgard, y encima de eso, el hombre ni siquiera le iba a conceder el uso de su nombre verdadero. Como si ni siquiera fuera merecedor de tan simple reconocimiento ya, como si Tony hubiera hecho su mejor esfuerzo para quitarle todo, incluido su propio nombre. Lo cual es todo lo que le queda, excepto su vida, la cual realmente no cuenta dado que técnicamente le pertenece a Tony ahora.
El hombre es más perceptivo de lo que Loki creía.
—¿No te gusta cuando te digo "cuernitos", Bambi? —Tony pone su mano sobre su corazón, pretendiendo lucir insultado—. Y yo que me esforcé tanto en pensarlos sólo para ti —sacude su cabeza con tristeza mientras chasquea con los labios.
La usual burla. Loki se dice a si mismo que no va a dejar que le moleste. Quizás es un juego que Tony tiene, tratando de provocar a Loki para que se enoje y luego castigar a su esclavo por actuar fuera de lugar.
Y Tony claramente esta en ello, cuando otra de sus sonrisas enormes se apodera de los labios del hombre.
—Pero si no te gusta, estoy seguro de que podemos arreglar otra cosa. Te llamaré por tu nombre – Larry o Lenny o como sea que sea, ya me olvidé – si tú te diriges a mí como "amo" —la mirada que le da a Loki es engreída—. ¿Qué tal?
Loki hace una mueca de dolor internamente. Seguro, si Tony se lo ordena no tendrá otra opción, pero el dirigirse a un mortal por tal título es demasiado humillante para un dios. Si bien, para ser honestos, está sorprendido de que Tony no hubiera insistido en eso ya – es la manera en que un esclavo en Asgard se dirigiría a su dueño, después de todo. Aun así su boca se siente como si estuviera llena de cenizas de tan sólo pensar en decir tan respetuosa palabra a Tony.
Tony observa a Loki por un rato, y luego se encoge de hombros y se gira. —Bueno, supongo que no es un trato, Cuernitos.
El hombre continúa revisando la pila en silencio, mientras Loki le mira aburrido. Luego, de repente Tony levanta la mano triunfante, mostrando su elección
—Aquí vamos - ¡la película perfecta para esta noche! —le muestra la caja a Loki para que pueda leer el título.
Reindeer Games (Operación Reno).
Su expresión en su rostro debe de ser muy divertida dado que Tony está riendo mientras pone el disco en el reproductor, luego se deja caer en el sillón junto a Loki.
La película es tan estúpida e insípida como lo esperaba.
Aún así, es definitivamente mejor que la alternativa de ser torturado hasta la muerte en los calabozos en Asgard.
(N/T)Aclarando el detalle de la película Reindeer Games. Tony en la película de Los Vengadores, versión inglés, se dirige a Loki como Reindeer Games, en español lo hace como Cuernitos, así que realmente no tiene mucha relación en la traducción, pero en la versión en ingles de esta historia es simplemente otro juego de palabras de Tony.
Maiden
