CAPITULO 85
Muy bien, esto es incomodo definitivamente. Se le queda mirando a la cama-demasiado-grande-para-dos, esperando tontamente que haya sido encantada con algún tipo de Magia Potteriana que le cumpla a la gente sus deseos más internos y que por consiguiente, transforme la cosa de madera en dos entidades separadas.
Pero por supuesto, nada sucede, la cama se queda en su estado actual de unitaria.
Una mirada rápida a su alrededor le deja claro que no hay algo más que pudiera servir como un lugar para dormir; seguro, hay un tipo de sillón contra una de las paredes, pero es demasiado delgado y curveado para que una persona duerma a menos de que no les importe despertarse con un cuello adolorido o sobre el suelo después de haberse quedado dormido quince minutos.
Genial.
Y no quiere ni considerar las implicaciones subyacentes de la cama, no quiere tocar las inferencias que pueda sacar ni con un poste de diez millas de largo al igual que estos arreglos particulares que le han ofrecido para esta noche.
O quizás, trata de decirse a sí mismo, que se espera que Loki duerma sobre el suelo porque él es un esclavo, y la cama, tan grande como es, sólo es para Tony, y es decir bastante que esa sea la interpretación menos molesta en la que puede pensar.
Haciendo una mueca, mira a Loki, quien está ocupado mirando una pintura llamativa en una de las paredes.
—Uh… entonces… ¿qué lado prefieres? ¿Izquierda o derecha? —pregunta, tratando de no sonar serio para eliminar su propia incomodidad, como si fuera totalmente normal. Pero no hay manera de que vaya a tener a Loki durmiendo en el piso, por muy incomodo que esto vaya a ser.
Loki ladea su cabeza hacia un lado mientras se gira para mirar a Tony. —No tengo una preferencia, cualquier lado está bien.
Y cuando Tony mira la cama frente a él se da cuenta de repente de lo fácil que sería para él el tomar ventaja de la situación para… hacerle cosas a Loki, y espera con desesperación que el dios no esté pensando tales cosas, dado el con quien va a compartir una cama, aunque el pelinegro no parece estar preocupado por lo que puede ver, le dejó claro a Loki en aquella muy vergonzosa ocasión que no iba a hacer algo como eso, pero desde entonces no ha vuelto a tocar ese tema de nuevo.
Y para ser honestos, no tiene deseos de volver a hacerlo de nuevo y traer a la luz tal conversación cuando estaba intentado dejarle morir por negligencia, con eso de que se puso muy excitado por un simple masaje de pies realizado por un dios de las travesuras y todo lo que le siguió, preferiría mejor actuar como si ese pequeño incidente jamás hubiera sucedido, y que Loki nunca hubiera hecho esas suposiciones sobre como las cosas iban a ser entre los dos.
Aún así, debería de decir algo, asegurarle al dios de alguna manera, preferentemente tocando esos eventos lo menos posible.
—Muy bien —dice, esperando sonar de lo más casual—. Dado que vamos a compartir una cama, hay necesidad de poner unas reglas y restricciones. No quiero tener miembros volando sobre mi cara o feas patadas en el estómago, así que quédate en tu lado y yo me quedaré en el mío, ¿de acuerdo?
Acercándose al pie de la cama, coloca un dedo justo a la mitad del filo del colchón y luego traza una línea hacia la cabecera, tan lejos como puede alcanzar sin caerse sobre la cama. La presión del dedo deja una suave marca sobre la colcha, indicando sus territorios separados.
Por supuesto que no es una barrera real, pero una imaginaria al menos es mejor que ninguna.
Se endereza, pretendiendo admirar su pequeño trabajo, la hendidura en la colcha dividiendo la cama de manera temporal en dos.
—Esa es la línea —dice de forma casual agitando los dedos—, y ni siquiera pienses en cruzarla, quiero una noche de sueño tranquila sin ser molestado por codos vagabundos, rodillas perdidas o pies extraviados.
El inventor explica como si ese fuera el verdadero asunto, dada su previa reacción con Loki, pero debería de servir para tranquilizar la mente del dios, si fuera a tener alguna sospecha de que Tony pueda considerar tomar ventaja cuando se le presenta una oportunidad tan excelente, el estar junto a gente que sólo pensará que está ejerciendo los derechos que le corresponden. Indirectamente ha puesto la situación en claro sin tener que hablar de ese asunto vergonzoso que hizo que esto fuera necesario, y el punto principal debería de ser obvio – no habrá un cruce de la línea separando las dos partes de la cama, y eso incluye a Tony.
—Entendido —dice el dios, e incluso parece que está sonriendo un poco, lo cual es una buena señal—. Me quedaré en mi lado.
Y Tony deja que su mente se calme con eso, tranquilo de que no se necesiten más aclaraciones.
Buscando en su bolsa de viaje, saca su cepillo y pasta de dientes y comienza a lavarse, aliviado de moverse a asuntos más mundanos. Loki, por otro lado, ignorando tales procedimientos tontos de higiene, comienza a desvestirse tan desvergonzado como siempre. Tony se gira casualmente, dándole la espalda, pretendiendo mirar por la ventana aunque todo lo que puede ver es la oscuridad, que bien puede ser un pedazo de cartón negro cubriendo el panel de vidrio.
Mientras está parado ahí, cambiando el cepillo de lado, sus pensamientos distraídos una vez más regresan a revolver los eventos pasados del día, aún está de muy mal humor, y revisar esas memorias no está ayudando exactamente, aún le disgusta y le enfada como los esclavos son tratados aquí, lo que se espera que sus amos les hagan, por no decir nada de la jodida proposición de Geir. Al menos está alegre de que el bastardo no hiciera la sugerencia donde Loki pudiera escucharle. Por fortuna, Loki no ha preguntado que quería Geir, y no está muy seguro de que iba a decirle. Si luego le pregunta, ya inventara algo, es sólo que no puede creer cómo es posible que esa mierda sea aceptada, y más en una raza que se considera a sí misma como por encima de la humanidad.
Habiendo terminado su higiene dental, regresa a la cama. Loki está sentado contra la cabecera, las cobijas cubriéndole hasta la mitad de su pecho, mirándolo pensativamente.
—¿Aún está molesto por mis acciones de hace rato? —pregunta mientras Tony toma la bastilla de su camisa, a punto de empezar a desvestirse para una buena noche de sueño.
De repente dándose cuenta de que sus hombros están elevados lo que sería un par de pulgadas más de lo normal y su quijada esta apretada como si tratara de abrir una nuez con sus dientes, Tony se obliga a relajarse.
—Molesto, sí —admite—. Pero no por tus acciones, sino por las acciones de todos los demás. Cómo es que esta… mierda puede estar bien.
—Es lo que sucede con los esclavos que no se comportan como se supone que deben —Loki dice lisamente, sin mirar a Tony.
El masajea su cara con sus manos. —Sí, me he dado cuenta. Y lo dije antes, pero lo diré de nuevo: si hay un riesgo de que te metas en problemas de nuevo por no adherirte a como se hacen las cosas por aquí, entonces haz lo que sea que Asgard espera. Sólo… por apariencias.
Loki asiente, y Tony en verdad espera que mañana sea un glorioso día, mirando a la baja marca que ha dejado hoy, es difícil imaginar que se ponga peor.
Suspira en satisfacción mientras se arrastra bajo las cobijas después de lo que seguro ha sido uno de los días más largos de su vida. La cama es suave y atrayente y ya está medio dormido antes de que tan siquiera haya logrado cubrirse con el cobertor.
Tony puede que haya caído dormido en el instante en que su cabeza golpeó la almohada pero Loki aún está despierto, escuchando los suaves ronquidos detrás de él en algún lado.
Él puede decir cuan sorprendido estuvo Tony cuando vio la enorme cama, con la clara intención de ofrecerle la opción de hacer que su esclavo duerma en el suelo o compartiera su cama, dependiendo de sus deseos de esa noche, como si aún no terminara de caerle el veinte de cómo se hacen las cosas en Asgard, a pesar de todo lo que ha pasado.
Duda que Thor haya considerado esto cuando le pidió a Ingvar que les guiara a una habitación. El dios del Trueno simplemente fue demasiado descuidado como para pensar dos veces sobre los arreglos de cama, por otro lado, Loki ya lo había visto venir desde una milla atrás, incluso si había tomado a Tony por sorpresa.
Tony. Su mente viaja a los eventos de hace rato, pero esta vez no es el incidente con Fjalar, si no a la escena de Geir llevándose a Tony para discutir un asunto "privado".
Por supuesto, Loki sabe exactamente qué fue lo que le preguntó Geir a Tony, conoce al hombre, sabe en cuál dirección fluye su rio, él ya se le había insinuado dos veces, incluso si fue hace un par de siglos desde la última. De nuevo, Thor no tenía ni la menor idea, pero Loki estaba muy consciente de lo que el brillo en los ojos del hombre significaba mientras salía de las sombras para alcanzar a Tony.
Él ya sabía sin la menor de las dudas que Tony le diría que no a la propuesta del hombre, así que nunca se preocupó cuando los dos se alejaron, a pesar del disgusto que se apoderó de su estómago. No, Tony nunca dejaría que alguien tomara ventaja o le lastimara de alguna manera. Él no lo haría, porque él… se preocupa.
Detrás de él puede escuchar que Tony comienza a moverse en sus sueños, lento al principio pero luego con más intensidad hasta que prácticamente se está revolcando entre las sabanas. Aparentemente está teniendo algún tipo de sueño, y de qué tipo, está claro por los movimientos de sus caderas y los nada sutiles gemidos escapando de los labios del hombre.
Entre esos gemidos Loki puede escuchar el sonido de su propio nombre.
Un instante después, el bulto durmiente que es Tony se gira y termina descansando contra Loki, un brazo enredándose automáticamente alrededor de su cuerpo.
Y a Loki no le importa.
Mientras el cuerpo detrás de él sigue acomodándose, puede sentir la erección de Tony presionada contra él.
Y a Loki tampoco le importa.
Unos segundos después, Tony vuelve a gemir suavemente, restregándose un poco contra la espalda de Loki.
Y Loki puede sentir algo despertarse en su entrepierna.
Está teniendo un sueño, y es uno de esos sueños dónde estás casi consciente que estás soñando, pero no estás seguro.
Hay un cuerpo firmemente presionado contra el suyo, sus piernas y brazos entrelazados.
Y así, extiende un poco su mano y acaricia el cabello negro, dejando que los mechones sorpresivamente suaves se deslicen entre sus dedos.
En respuesta, un par de brazos se sujetan a su cintura, y luego unas manos acarician sus costados con aprecio, sobre su espalda y pecho. Él jadea ante las sensaciones acercándose al otro cuerpo un poco más, desesperado por caricias más intimas.
Y como si leyera sus pensamientos lujuriosos, una mano se desliza hacia su entrepierna, tomando su erección y acariciándola con insistencia. Él tiembla y embiste contra el toque, gimiendo con placer contenido.
Ellos juguetean y giran, cuando por fin se detienen, él está arriba. Reteniendo el aliento ante la vista de ese cuerpo esbelto y atractivo debajo de él, se agacha y recorre con su lengua ese pecho tonificado, por el estómago plano y aún más abajo, siguiendo el delgado camino de suave vello oscuro bajo el ombligo.
Se despierta sobresaltado, al principio no seguro de donde está pero comienza a recordar lentamente.
Está en Asgard.
Está oscuro en el cuarto, el fuego habiéndose extinguido hace horas. El brazo de Tony aún está alrededor suyo, su cuerpo presionado fuertemente contra su espalda, el hombre mismo dormido profundamente y babeando un poco sobre el hombro de Loki.
Se queda ahí quieto por unos minutos, escuchando los respiros en la habitación casi silenciosa. Loki coloca su palma sobre la mano que descansa descuidadamente sobre su pecho, entrelazando sus dedos.
Tengo mucho sueño T_T así terrible, pero no he terminado las tareas y este capítulo tiene como una semana sentado en mi correo xD Así que dije qué tanto es tantito y aquí lo tienen :P Espero lo disfruten, porque ¡Loki tiene fantasías! Ya dimos otro paso en esta línea del tiempo medio confuso que ni yo sé en cuál día van.
Un montón de gracias por sus comentarios, ¡sí los leo! Y me hacen muy feliz.
