CAPITULO 132

Tiene que admitir que el ambiente en el taller es algo extraño dado que los tres están reunidos alrededor de una de las mesas, observando mientras él gira la perilla para incrementar el escudo alfa terciario. Seguro Loki parece bastante tranquilo a diferencia del Capitán, quien está sentado allí con los brazos cruzados y un ligero pliegue entre las cejas,el tipo ha estado bastante cortante desde el incidente ya sea porque fue vergonzoso o porque aun sospecha que Tony es la escoria lasciva que piensa solo con su pene, no lo puede decidir,probablemente es una combinación de ambas.

Pero como sea, no es como si importara lo que Steve piense. ¿A él que le importa? Mientras que Steve no vaya a reportar las actividades privadas de Loki y suyas a Fury no hay diferencia, ya hay demasiadas personas allá afuera que lo consideran o un imbécil, bastardo, un narcisista obsesionado consigo mismo o todos lo anterior para que él se preocupe por lo que el Capitán América piense, ya está más que acostumbrado a que la gente no apruebe lo que él hace y a el mismo, ¿Así que por qué debería importarle?

Así es, a él no le importa.

Mueve un switch, ignorando los brazos cruzados y la mirada azul helada con el aire de desaprobación radiando de la dirección general de Steve, es una cosa positiva en realidad, el silencio, dado que significa que no tendrá su pensamiento interrumpido por plática sin sentido cuando está ocupado tratando de hacer ciencia.

Así que se hunde a sí mismo en los garabatos en la pieza de papel yaciendo ante él en el escritorio, probablemente no es entendible para alguien más, lleno de ecuaciones amontonadas por el precioso espacio; es bueno que la desaprobación de Steve este sirviendo para mantener al hombre callado, así que Tony se puede enfocar en su trabajo, no teniendo que perder tiempo en responder preguntas ignorantes.

Sip, de esta manera puede usar todas las partes de su cerebro para trabajar en el siguiente paso de los experimentos a la mano sin distracciones mentales innecesarias drenando su capacidad cognitiva, tan basta como es, Steve puede pensar lo que quiera, importa poco; no es como que le afecte a él de alguna manera, definitivamente no.

Parpadea al tiempo que la escritura automática de su mano se detiene, la ecuación ante él no funciona aparentemente ha habido algún error en el proceso.

Murmurado entre dientes escanea el papel tratando de localizar donde estuvo mal, no le toma mucho encontrar la omisión, un simple error de principiante que hubiera hecho que sus viejos profesores del MIT se avergonzaran de su antiguo estudiante, con una maldición murmurada, tacha la ecuación fallida alcanzando otro pedazo de papel para comenzar de nuevo.

Aunque es interrumpido por la voz de Steve.

—Stark, hemos estado sentados aquí por seis horas —el hombre dice, sonando cansado—. Creo que es hora de un descanso, estoy seguro de que todos estamos comenzando a tener hambre y apreciaríamos si pudiéramos comer algo antes de continuar.

Tony mira al Capitán, luego su reloj. Demonios, ¿cómo es que el tiempo pasó tan rápido? Pero venga, siempre parece sucederle eso cuando está inmerso en un proyecto aquí en su taller, perdiendo la noción del tiempo y luego sorprendiéndose cuando de repente ya pasa de medianoche.

Por supuesto, no pierde la insinuación oculta en esa voz, ya sea deliberada o no – cuan típico de Stark, egoístamente pensando solo en sí mismo y su propia diversión, sin detenerse a considerar el impacto que su comportamiento tienen en otra gente, mientras él este feliz. Y después del pequeño incidente reciente, tiene la certeza de que lo que sea que Steve estaba pensando de él antes de venir aquí, esas suposiciones solo han sido alimentadas aún más.

¿Pero qué le importa?

—Está bien —dice, tratando de hacer que su voz suene casual—. ¡Oficialmente es hora de la cena para todos! ¡Así que vayamos arriba, niños! —con eso se levanta y dirige el camino hacia el elevador con Loki y el Capitán siguiéndole.

El viaje a los pisos superiores pasa en silencio, puede sentir la mirada de Loki posarse sobre él, pero el Capitán está mirando hacia otro lado con sus ojos fijos en algún punto en la pared, cuando mira de nuevo al dios Loki ha optado por limpiarse las uñas con una expresión aburrida.

Wow, muy alegre aquí.

Cuando las puertas se abren con un sonido muy ligero, ni siquiera pasa un segundo cuando el Capitán ya salió seguido por Loki, quien aún está muy concentrado en sus uñas en una de sus manos. Un poco muy enfocado parece, dado que su pie se atora en el espacio entre el elevador y el piso y se tropieza cayendo en dirección al suelo con un grito de sorpresa, una mano inmediatamente sujetando su tobillo.

Él está al lado de Loki en un instante, arrodillándose junto al dios con preocupación—. Ey, ¿Estás bien? —pregunta, poniendo una mano en el hombro de Loki de manera instintiva, esperando que no sea nada peor que una torcedura.

Loki asiente, mordiendo su labio con un quejido. —Estoy bien. Es solo mi tobillo que me he torcido, no es nada serio.

—Será mejor que pongamos algo de hielo alrededor para minimizar la inflamación —Steve suelta junto a ellos, siempre el héroe servicial.

—Sí, ya me encargo —Tony responde, en particular no quiere que Steve se meta; él puede cuidar de Loki, con cuidado ayuda a que el dios se levante en un pie, sosteniendo uno de sus brazos con fuerza como apoyo—. ¿Puedes poner algo de peso en el tobillo? —pregunta, aliviado de que no parece que haya algo roto, al menos.

Tentativamente, Loki pone su otro pie en el piso, una expresión de dolor apareciendo en su rostro mientras sacude su cabeza. —No, me temo que no.

Muy bien.

Sólo lo piensa un segundo, después de todo a querido hacer esto a Loki por un largo tiempo y en verdad le vale un rábano si Steve lo está viendo o no, así que se agacha para poner un brazo detrás de las rodillas de Loki y con la otra sosteniendo su espalda, luego levanta al dios en la típica posición de novia.

Loki suelta un chillido de sorpresa pero no ofrece protesta alguna, simplemente pone un brazo alrededor de los hombros de Tony para sostenerse.

Ignora la mirada de Steve que puede sentir quemarle la nuca mientras carga a Loki hacia el sillón y lo deposita con cuidado en los cojines. —Iré por algo de helo —dice, esquivando a Steve quien ha estado siguiéndole muy de cerca.

Al menos piensa que tiene algo en el congelador, así que se apresura hacia la cocina y después de rebuscar un poco, regresa a la sala con un paquete de hielo en su mano.

El rostro de Loki está tenso, pero no suelta sonido cuando Tony se arrodilla a su lado y coloca el pie de Loki en su regazo, quitando el calcetín con extremo cuidado.

—Al menos no luce inflamado —Steve comenta superfluo por algún lado encima del hombro de Tony—, aunque creo que el hielo no le hará daño.

Tony suelta un sonido mientras aplica el hielo, tratando de no mover mucho el pie. Luego mira a su alrededor por algo que pueda servir para descansar el pie, omitiendo la tentación de preguntarle al Capitán si quisiera servir de eso, en lugar opta por una silla baja yaciendo contra la pared, la jala hacia el sillón ayudando a Loki a levantar su tobillo adolorido en el asiento, esperando que eso sirva por ahora.

Con cuidado, mira al dios reposando en el sillón, tratando de juzgar si Loki sufre de más dolor del que deja ver, incluso si el tobillo no parece hinchado, tiene que doler bastante si no puedo poner nada de peso en él.

—¿Estás bien ahí? ¿Quieres que te traiga algún analgésico?

Loki sacude su cabeza. —Estoy bien, no te preocupes por eso sólo necesito descansar mi pie por un rato y estoy seguro que estaré mejor pronto —ofrece con una sonrisa avergonzada—. Lamento haber arruinado cualquier oportunidad de continuar los experimentos por hoy.

—Eh, tenemos mucho tiempo —aleja la preocupación y palmea gentilmente el hombro de Loki – o lo aprieta – antes de recordad de repente que Steve aún está en la misma habitación.

Con reluctancia aleja su mano.

—Muy bien, supongo que es hora de la cena —mira el pie de Loki de manera objetiva—. Espero que a nadie le importe cenar aquí en la sala.

Pone un plato lleno de comida en la mesa frente al dios en el sillón, junto con cubiertos y un vaso de agua. Con hielos.

Quizás pueda tener un trabajo como mesero si en algún momento pasa una mala racha. Sabe qué tipo de propina le hubiera gustado recibir como muestra de apreciación de su comensal actual.

Bien, no que eso vaya a pasar con Steve sentado junto enfrente de la mesa mirándolos con esa mirada impenetrable y quizás no en algún tiempo, si el pie de Loki termina estando muy adolorido para ese tipo de actividades, si no supiera mejor, diría que hay alguien allá arriba haciendo todo en su poder para evitar que Tony Stark logre dormir con Loki.

Pero tiene el desafortunado pie envuelto en bonitos vendajes, al menos, así que ha hecho todo lo que puede por ahora. Con suerte sanará pronto.

Como es usual, la conversación en la mesa es incómoda, pero ya se ha acostumbrado, aunque incluso Loki no parece encontrar la situación particularmente dura, ya que esta contándole alguna anécdota asgardiana a Steve, así que Tony se concentra en su comida aliviado de que Loki se esté encargando de la conversación. Porque ¿por qué debería de estar interesado en platicar con alguien quien solo lo considera un imbécil insensible?.

Una vez que la cena ha sido terminada y los platos han sido recogidos, esta por levantarse y buscar su portátil, decidiendo que será mejor sacar algo de trabajo, pero se detiene y se voltea hacia Loki mejor.

—¿Quieres que busque algunos libros para ti? —le pregunta al dios aún sentado en el sillón, por razones obvias no se ha movido de su lugar.

—En verdad lo apreciaría —es la respuesta, acompañada de un ligero asentimiento.

Así que Tony diligentemente se va a la biblioteca, tomando los libros que están esparcidos sobre la mesa con pequeños separadores sobresaliendo de ellos – obviamente en el proceso de ser leídos por alguien y ese no es él – y regresa con su encargo a la sala, poniendo la pesada torre en la mesa.

—Aquí tienes —palmea discretamente la rodilla de Loki, el toque oscurecido de la vista del Capitán, a pesar de no ser ya más un secretoaún se siente extraño mostrar alguna evidencia física de su relación a su visitante espía.

—Gracias —el dios responde, sujetando la mano de Tony y acariciándola de manera afectiva, es claro que no le importa en lo más mínimo que Steve losesté mirando de manera tan obvia como un halcón.

—Ni lo menciones —se encoge de hombros, tratando de ignorar la sensación de la vista de Steve pegándosele como una camiseta mojada.

Luego, todos se sientan ahí por un par de horas, él tecleando en su computadora, Loki inmerso en sus libros y Steve en el diario y es ahí cuando su garganta comienza picarle de una manera muy familiar.

—Muy bien, definitivamente voy por una bebida —proclama poniendo su computadora a un lado—. ¿Quieres algo, Loki?

—No, gracias, estoy bien.

—¿Ni aspirinas? —Intenta persuadirlo— No hay puntos extra ofrecidos en Midgard por sufrir en silencio innecesariamente, sabes.

Loki sacude su cabeza. —Es solo una simple torcedura.

—Muy bien. ¿Entonces qué tal tu, elásticos? —Pregunta, girándose hacia Steve— Sé que el alcohol es una perdida contigo, pero ¿Quizás un vaso de leche o lo que sea que sea tu bebida recreativa? ¿Jugo de manzana? ¿Batido de Zanahoria?

—Algo de jugo de manzana estaría bien, gracias —Steve responde, lentamente bajando su periódico que ha estado oscureciendo la parte inferior de su rostro.

Mientras Tony se dirige a la cocina, Steve se levanta para seguirle, como si dudara que Tony sea capaz de servir un simple vaso de jugo sin asistencia y necesita de alguien que observe el procedimiento pero elige no comentar sobre eso.

Unos minutos después, Tony se está haciendo un Martini, mientras Steve se recarga contra la barra de la cocina, bebiendo de su vaso de frutas mientras mira a Tony con una expresión indescifrable, tratando de deshacer algo de tensión Tony agita la botella medio vacía en su mano en dirección del otro hombre.

—¿Seguro que no quieres algo en esa manzana tuya? —Ofrece con ligereza— No hay nada en este mundo que no mejore con un poco de alcohol.

Steve se aclara la garganta, enderezándose un poco. —Supongo que te debo una disculpa —dice lentamente ignorando la pregunta de Tony—. Quiero decir, brincar a conclusiones de esa manera sobre cómo están las cosas, creyendo que eras egoísta y despreocupado, parece que no… tenía razón sobre ello.

Tony puede sentir sus cejas perder en la línea de su cabello. ¿El gran Capitán América, disculpándose por creer que era un imbécil ególatra preocupado con nada más que su propio pajarito?

—Meh, está bien —intenta no darle importancia, decidiendo justo ahí no culpar al ben Capitán—. He sido acusado de peor, créeme.

Y no es que importe que opine Steve de él; esa repentina sensación de calidez en su interior es solo por el alcohol deslizando por su garganta cuando le da un gran trago a su bebida en mano.

—Bueno, sin importar eso —Steve insiste, claramente incomodo—. No debí de haber… asumido cosas.

—Sólo olvídalo hombresote. —A decir verdad nunca he disfrutado escuchar a la gente disculpándose con migo en primer lugar y preferiría terminar con esto ahora—. Así que ¿mejores BFF? —pregunta, extendiendo su mano como ofrenda de paz.

Steve no se molesta en preguntar qué significa el nuevotérmino; simplemente asiente cortésmente y toma la mano de Tony de manera firme.

Tony le da otro trago a su Martini, disfrutando como hace que la tensión previa dentro de él se desvanezca, como si deshiciera un nudo muy apretado.

Sip, una muy buena marca este.

Cuando Steve se ha disculpado y retirado por esa noche, Tony cierra su computadora y se gira hacia el dios leyendo a su lado.

—Entonces, qué dices ¿ya es hora de dormir? —incluso si no sea un opción está noche, al menos pueden acurrucarse, ahora que ya no tienen que dormir en camas separadas para poder mantener las apariencias.

Con eso, Loki se recarga en el sofá, poniendo con cuidado su libro sobre el cojín. —Suena como una muy buena idea —responde ladeando su cabeza, su mirada deslizándose por el cuerpo de Tony de manera lenta—. Estoy completamente de acuerdo con la acción sugerida.

Tony asiente en dirección a la silla donde el pie de Loki aún está elevado. —Bueno, al menos de que las cosas hubieses mejorado considerablemente en las últimas horas, supongo que no tenemos opción que repetir el previo ejercicio de transporte —dice con una sonrisa, moviéndose alrededor de la mesa con la intención de tomar al dios y cargarlo hacia la cama.

Loki levanta una ceja, su rostro indescifrable. —Sabes, no creo que eso sea necesario —y luego se levanta sin ningún preámbulo, dando varios pasos en dirección a Tony sin mostrar ni siquiera un ligero cojeo.

Tony parpadea.

—Ey, ¿cuándo obtuviste de vuelta tus poderes curativos? —pregunta, arrugando la frente con sorpresa— ¡Ni siquiera podías poner peso en ese pie hace algunas horas!

Loki le mira de manera tan inocente que es obvio que no lo es, mientras levanta su pie unas pulgadas del suelo y agita sus dedos. —Sabes, pensándolo bien, no creo que viera algo malo con él para empezar.

Y Tony le mira boquiabierto, la implicación de las palabras lentamente tomando significado. — ¿Quieres decir que fingiste todo esto?—tartamudea completamente confundido— Pero ¿Cómo?

Las comisuras de la boca de Loki se elevan ligeramente. —Bien. Supuse que el buen Capitán tenía que ver el lado considerado y afectuoso de Tony Stark que he tenido el privilegio de experimentar todos los días y dado que tú eres demasiado orgulloso para explicar cómo están las cosas a Steve o tan siquiera dejarme hacerlo, supuse que un poco de demostración era lo indicado para hacerle reconsiderar sus suposiciones infundadas de ti —el ligero estiramiento de sus labios se convierte en una sonrisa contenta—. Y mis planes funcionaron ¿Verdad?

Le toma varios segundos largos a Tony el poder encontrar las palabras o tan siquiera cerrar su boca para empezar. —Por qué tú pequeño diabólico… finalmente lo entiende—. ¡No puedo creer que en verdad planearas todo esta situación!

—Algunas veces se puede lograr grandes cosas con planes retorcidos o simplemente empujar las percepciones de alguien en la dirección correcta —Loki responde, no parece arrepentido en lo más mínimo.

Con eso, Tony estalla en carcajadas, incapaz de detenerse. —Y aquí me tenías sirviéndote y esperando al pie de tu cama toda la tarde —estira su mano para palmear el trasero de Loki—. Pequeño diablillo.

—Dios de las travesuras —Loki ofrece como explicaciónaun fingiendo inocencia. Luego, una sonrisa positivamente traviesa se extiende en su rostro mientras se acerca, su aliento tibio en la mejilla de Tony—. Y eres libre de castigarme hasta satisfacer tu corazón., tenemos toda la noche —susurra en el oído de Tony con una sisea seductor, luego se aleja un poco, contemplando el cuerpo de Tony de pies a cabeza.

—Pero primero, hay algo que he querido hacer ya por mucho tiempo.

Antes de que pueda preguntar que pudiera ser eso, Loki desliza un brazo por la parte de atrás de las rodillas de Tony y lo empuja hacia atrás y un segundo después Tony se encuentra siendo cargado estilo novia hacia el cuarto.

Finalmente me senté a actualizar. Quisiera que todos le mandaran un gran saludo y abrazo a mi bella beta, paciente y bella y alegre y tan comprensiva, por su gran apoyo en que esto siga saliendo (aunque yo no coopere): mi bella Rossy. ¡Hermosa! No sabes lo mal que la pasaría sin tí (comprobado con Make a Wish dos horas revisándolo!).

En noticias menos felices, mi terrible horario de actualización seguirá igual o peor, pero al menos ya tengo fecha de entrega final y una probable para la defensa (que sería algo así como el 7 de septimebre) así que, por favor, les suplico sean pacientes un poco más. Sé que no es justo, pero incluso mi cerebro ya esta cansado (con decirles que sentarme a betear y terminar de traducir algunas cosas fue lo que llame "tomarme unos minutos para mí", así que ya se imaginarán) y se me olvida el español (he desucbierto que el estres tiende a reducir mi habilidad de comunicación coherente).

Por todo, muchas gracias por seguir la historia, por elegirla y leerla. Un mega abrazo a todos ustedes.