Hola a todos, les traigo un nuevo capítulo que de verdad espero les guste. Es un poco duro al final así que leer con responsabilidad. Disfruten

Me sentía tranquila, a pesar de que Victoria aún estaba a nuestro acecho, me sentía tranquila. Tranquila de saber que mi hijo dormía en su habitación, bajo mi techo, tranquila de verlo comer y saber dónde está. Estás semanas sin él fueron tortuosas e intentaba ser fuerte para su regreso, aunque hubo momentos en los que no estaba segura si lo volvería a ver. Esme me dijo en todo momento que Anthony volvería, que los hijos a veces hacen locuras, pero claro ella tenía la eternidad para esperarlos, yo en cambio no.

Ahora lo importante es que está a salvo y feliz, y el hecho de que esté con Emma también me pone feliz.

A pesar de todo el enojo o rabia que siento por Edward, no me puedo hacer la desentendida, sabía que él era el responsable principal de que mi hijo estuviera nuevamente en Forks. Él y Jake lo habían rastreado por semanas por diferentes puntos dentro y fuera del país, hasta que Edward dio con su paradero final. En lo que respecta Derek aún no lo veo, solo sé que está bien ya que Anthony se había pasado a verlo, el hecho de que mi hijo ya no esté enemistado con su padre también me mantiene tranquila. En el fondo, entre todo este embrollo de vampiros psicópatas, vampiros buenos, hijo híbrido, divorcio y hombres lobos. Puedo rescatar las cosas buenas y estar tranquila. al menos por ahora porque, aunque rescate las cosas buenas, sabía que todo era una bomba de tiempo que podía explotar en cualquier momento.

Me senté detrás del escritorio frente a la computadora del trabajo, tenía tantas cosas atrasadas, facturas y pedidos. Está bien, Peter y Emma se habían hecho cargo de todo, pero el papeleo legal era absoluto problema mío y estaba atrasada. Mañana ya era noche vieja y ni siquiera tenía algo planeado para la noche, infinito trabajo, sin tiempo y las tiendas llenas, yo nunca dejaría de ser un desastre. Felicidades Bella Swan eres un desastre. Estaba tan cansada, molesta y enterrada en papeles, y como no podía ser peor se había puesto a nevar, era mejor apresurarme, no quería estar en medio de una tormenta de regreso a casa. Me concentré en el papeleo…

… 45 minutos totalmente concentrada hasta que la puerta del frente se abrió de golpe, me pare rápidamente para cerrarla hacia un frio del demonio. La cerré, pero al momento en que volví a mi puesto esta se volvió a abrir de golpe, nuevamente me acerque y la cerré con seguro, ahora si no se podría volver a abrir. Volví para poder terminar este trabajo interminable pero apenas me senté la puerta se abrió, pero ya no de golpe entonces me percaté que no era un accidente lo de la puerta si no, que no estaba sola. Mi corazón se aceleró, pero me quedé mirando la puerta sabiendo que alguien aparecería en cualquier momento.

-deberías cerrar la puerta, los humanos se enferman con esa nieve- esa voz, venía de una esquina justo donde había un sofá donde algunos niños se sentaban a leer, me gire y sus ojos rojos me penetraban de una manera que sentía que me atravesaba el alma. - ¿que estas esperando para cerrar? y no intentes huir o te quiebro el cuello, cierra la puerta y toma asiento solo quiero conversar.

Me acerqué a la puerta y la volví a cerrar, pero esta vez sin seguro, volví a mi puesto de trabajo, pero ya no a trabajar.

- ¿que necesitas Alex?

-respuestas

- ¿qué quieres saber?

-mira soy algo nuevo en esto, solo tengo siete años, bueno nuevo a diferencia de Victoria o alguno de los Cullen, pero sabes soy algo neófito, pero no estúpido. y para ser sincero me llama la atención esa obsesión que tiene Victoria hacia ti.

- ¿y por qué me lo preguntas a mí? ¿no deberías preguntarle a ella?

-sí, pero no lo sé a ti te puedo dominar a ella no, tu no me puedes mentir. - a decir verdad, me asustó un poco la forma en que lo dijo- Tranquila no te haré daño, no hoy al menos, Victoria no sabe que estoy acá por ende no debería causarte daño.

-Bien, entonces pregunta.

- ¿De verdad Cullen depresivo es el padre de tu hijo?

- ¿Cullen depresivo?

-Si, ese entrometido que lee mentes

-te refieres a Edward, pues si, él es el padre biológico de mi hijo

- ¿Como?

- la verdad no me gustaría explicarte los detalles

-lo respeto- se paró de su asiento y se puso a caminar, tenía un libro en las manos, era grueso y marrón, era de la sección de fantasía.

- ¿solo eso era? - sonrió

-obvio que no tonta- lo dijo en un tono burlesco- quiero saber porque Victoria te quiere dar caza a ti, a tu hijo y a todo aquel que te rodea.

- para hacerme sufrir no es obvio y ella cree que si yo sufro Edward también.

-Eso ya lo había notado como te dije no soy estúpido, pero la pregunta es el ¿por qué?

-ustedes están juntos ¿verdad?

-eso no te incumbe

-es para poder entender porque haces todo lo que ella dice- golpeó de manera firme mi escritorio cosa que hizo que me exaltara un poco, cuando retiró la mano vi una marca de sus dedos en la madera.

-no hago lo que ella dice

-está bien

-Ahora dime antes que pierda la paciencia y si te haga daño- dude un poco, pero al final comencé.

-tenía 17 cuando conocí a los Cullen y supe que eran vampiros, y si te juntas con vampiros es inevitable que conozcas a más vampiros así conocí a Victoria, Laurent y James. -enfatice en el nombre de James- Estábamos en el Bosque cuando ellos llegaron, al principio los Cullen intentaron cubrir mi aroma, pero James percató algo mal en mí y se dio cuenta que era humana.

- ¿Por qué te protegen tanto?

-no lo sé, soy como una especie de mascota para ellos.

-Sobre todo para Edward que jugó y se fue- eso me dolía en lo más profundo, pero era la simple y cruda verdad

- ¿puedo seguir?

-adelante

-Cuando James se percató que era humana intentó darme caza, pero los Cullen lo detuvieron, específicamente Edward, el logro quebrarme una pierna y morderme, pero succionaron el veneno. En fin, Edward atrapó a James y lo mató por intentar matarme.

- ¿y qué papel pinta Victoria?

- ¿de verdad aun no la captas? Victoria y James estaban juntos eran pareja, y ella quiere venganza por eso te utiliza para hacerme a mí lo que le hicieron a James para que Edward sienta lo que ella sintió

-no te creo

-Entonces para qué viniste a preguntar si piensas que miento- se notaba molesto empezó a tirar cosas al suelo rompiendo todo a su paso yo me intentaba alejar de él sabía que con un solo golpe me rompería en pedazos, levantó la cabeza como si percatara un efluvio. Se acercó a mí con una cara furiosa me tomó de los hombros y clavó sus ojos en los míos.

-olvidarás que estuve acá- con eso se marchó, pero era imposible olvidar.

En el momento exacto en que se marchó mis hombros se relajaron y solté todo el aire que había retenido para que no notara mi exaltación. Pasaron unos segundos y tuve a Edward, Alice y Emmet dentro de la biblioteca. Desde que habían vuelto era la primera vez que me sentía aliviada de verlos, Alice me tomo de los hombros.

- ¿Estás bien? Vinimos en cuanto me llegó la visión

-creo que sí. Solo algo… aturdida- Edward miraba todo el lugar Emmet recogía unos estantes que Álex había derribado y Alice no me soltaba del brazo.

- no alcance a leer su mente, y ya está fuera de mi rango es muy veloz. ¿A qué vino?

-por respuestas, al menos eso dijo. Quería hablar de Victoria y de su obsesión.

-parece que no es el lacayo más fiel- intervino Emmet con una sonrisa- eso nos facilita las cosas.

-sí, un poco, está dudando de la veracidad de ella y si está dudando es porque tenemos una opción.

- ¿Opción de qué?

- de que los deje tranquilos Bella, el hace todo lo que ella dice porque está enamorado de ella, ella le hizo creer que son pareja y que lo ama, pero bien sabemos que no es así. - escuché atentamente lo que decía Edward

-Entonces ella no es diferente a ti- me miro con cara de incomodidad, pero sabía que lo que había dicho estaba totalmente fuera de lugar- Lo siento, yo… no debí decir eso estoy un poco estresada y digo estupideces.

-Tranquila no hay problema. - se giró y se puso a recoger a un ritmo muy humano los libros tirados por el suelo. No podía ser tan hiriente a pesar de lo que me había hecho. ver sus ojos tristes me provocaba tristeza, quizás era porque son los ojos que veo a diario en mi hogar. Ordene mi escritorio no podía seguir trabajando por hoy.

- ¿algo especial que te dijera Bella?

-No, el solo hizo preguntas y luego se marchó cuando los sintió llegar

-Es mejor que te saquemos de acá, nosotros ordenamos esto.

-Está bien- tome mi abrigo y mire como Edward y Emmet ordenaban todo me dirigía a la puerta cuando recordé que ahora Anthony y Edward hablaban así que preferí asegurarme- Edward- él se giró con una pila de libros en la mano

- ¿sí?

-No le digas nada a Anthony.

-de todos modos, lo sabrá ¿lo sabes verdad?

- sí, pero quiero que pasemos un año nuevo tranquilos.

-está bien, no le diré nada.

-Gracias- solo me sonrió en respuesta

Aclarado eso me subí en mi auto mientras Alice me seguía en el suyo, era un auto muy conservador para su estilo.

Cuando llegue a casa estaba vacía no había absolutamente nadie ni vestigios de que hubieran estado acá hace poco. Iba a marcar a Anthony cuando escuche un auto aparcar fuera, mire por la ventana y era él, me relaje. al verlo, me saque los zapatos y me senté en el sofá a esperar que Anthony entrara. A penas entro sabía que algo andaba mal, se veía en su cara. No dijo nada solo camino por la sala y se sentó junto a mí, recostó su cabeza sobre mi hombro.

- ¿Día pesado?

-mucho

- ¿me quieres contar?

-es sobre papá y otra sobre Emma

- ¿discutieron?

-no, es algo peor.

-cuéntame- dudó un momento, intentó hablar, pero luego decidió que no- Anthony, cuéntame que te tiene así.

-partiré por papá, está mal, esta triste muy triste, tiene problemas en el trabajo y está solo, y… hoy estaba ebrio

- ¿Tu padre ebrio?

-sí, yo nunca ni siquiera lo había visto beber más de una copa de vino en mi vida.

-No, él no bebe ¿estás seguro de que estaba ebrio?

-mamá, estuve con el la mayor parte de la tarde. - volvió a recostar la cabeza en mi hombro- ¿pasaremos el año nuevo juntos? -

-hijo, sabes que es complicado. Tu papá y yo nos estamos divorciando y…

-pero ya lo perdonaste, eso yo lo sé, te conozco, lo veo en tus ojos. Solo una noche mamá cenar conversar, servir la mesa y esas cosas. - Mire la pena y tristeza en sus ojos, definitivamente eran los mismos que había visto hoy en la librería así que cedí.

-Está bien, pasaremos todos juntos el año nuevo. - esbozo una pequeña sonrisa que de apoco se apagó.

-ahora dime, que sucede con Emma.- inspiro hondo antes de hablar

-Ella quiere ser una mujer nueva, no quiere recordar nada de lo que le ha pasado, y lo intenta yo sé que sí, y está bien que lo intente, pero se está comportando extraño, demasiado. Hoy supimos una noticia que debía devastarla, pero no le dio ni un porciento de importancia.

- ¿qué cosa? - me miro unos segundos-

-van a liberar a George viene con el añadida una orden de restricción con mi nombre.

- ¿Como es posible que liberen a ese cerdo?

-no tengo idea, no sé en qué están pensando en Seattle

- ¿Vuelve a Forks?

-Según Mary si…

-Que descaro ¿Que dijo Emma? ¿cómo esta ella? -dio un suspiro

-nada, no dijo nada, siguió hablando de lo mal que estaba quedando su dibujo. - Quede anonadada, cómo es que ella no dijo nada después de todo lo que ese cerdo le había hecho.

-no sé qué decir.

-yo tampoco. Hay es cuando fui donde papá a preguntar por la reacción que tuvo, pero llegué y estaba ebrio.

Nos quedamos sentados en el sofá, no cenamos, había sido un día largo para ambos y el apetito no era algo que tuviéramos, luego de un rato cada uno se fue a su habitación me acosté, pero no podía dormir. Cada vez que intentaba dejar el cigarrillo algo ocurría y me dejaba ansiosa sin poder dormir. Tome la cajetilla que tenía guardada en la mesa de noche junto con el encendedor, tome una chaqueta y salí por la puerta de la cocina hacia frio, la nieve que había caído en la tarde había dejado una gruesa capa. miraba como el humo salía cuando recordé que alguno de los Cullen debería estar haciendo guardia necesitaba hablar con alguien, aunque sea uno de ellos.

- ¿quién hace guardia? - en segundos tuve a Alice frente a mi

-yo- le sonreí, después de todo hubo un tiempo en el que ella y yo fuimos amigas. - ¿Cuándo tomaste ese feo habito?

-hace muchos años, cando salía con Derek a reuniones y las típicas fiestas de doctores, - se sentó junto a mí en el tronco del patio.

- Fue un día pesado hoy… para ti y Tony

- si hace mucho que no estábamos así de mal… emocionalmente hablando claro.

-Si escuche lo de Emma y lo de Derek, si preguntas mi opinión yo creo que esta en shock con un estado claro de negación y Derek obviamente está deprimido y con razón.

- ¿sí?

- es lo más lógico- guardamos silencio un momento mientras mi cigarrillo se consumía- Había querido hablar contigo Bella- solo la miré y la deje hablar- Nunca estuve de acuerdo con ninguna decisión que se tomó, yo nunca me quise ir… éramos amigas y yo quería cuidarte y te juro que me dolió en el alma tener que irme de Forks- solo la seguía mirando- di algo por favor.

- ¿Qué quieres que diga? éramos amigas y luego ya no estabas, ¿al menos viste mis mensajes?

-todos los días Bells y me torturaban te lo juro. quería volver y abrazarte y decirte que, si éramos amigas, quería que no me odiaras. Vi cuando supiste que estabas embarazada, pero jamás pensé que hubiera sido de mi hermano.

- ¿y que pensaste? que me había acostado con Newton por despecho.

-No, pero nunca imagine que fuera de Edward, luego de apoco deje de ver tu futuro, miraba en el de Charlie para saber que estabas bien. a Anthony nunca lo pude ver, asumí que el motivo principal era porque no lo conocía y era un bebe sin conciencia, cuando te vi bien, te vi feliz con Derek supe que debía dejarte ir que debía dejar de mirar en tu futuro, me hacía daño verte Bella porque de verdad eres mi amiga y de verdad espero que puedas perdonarme.- Una lagrima traicionera se asomó, y la abrace como hace tanto había deseado, era mi amiga y sabía todos mis secretos y podía ver mi futuro.

-Te quiero enana y de verdad no sabes toda la falta que me has hecho

- Y tú a mi Bella

-Como un vampiro es capaz de extrañar a alguien tan mundana como yo.

-es por eso por lo que somos amigas, yo estoy loca y tu ignoras eso tu eres mundana y te quiero así- Reímos ante este hecho, éramos tan diferentes, pero así éramos buenas amigas.

Después de un rato me enfríe así que decidí entrar, Alice se quedó fuera excusando que si entraba yo ya no dormiría y tenía razón. Entre a la casa y dejé mi vida y la de mi hijo en las manos de Alice Puse mi cabeza en la almohada y ya no supe más del mundo.

Fuera de la casa Swan

-ella te perdono

-Si, lo hizo- la cara de Alice era de felicidad, una felicidad que intentaba ocultar un poco, por mí. - Ella también te perdonará a ti Eddie es diferente la relación de amigos a una relación como la de tu y Bella, son de novela. - solo le sonreí ante su Eddie

-espero tengas razón enana

-que no siempre vea las cosas no quiere decir que no las sepa de antemano, tengo décadas de experiencia

- De verdad espero que me perdone, la necesito

- Lo hará. deberías irte ya llevas tres días haciendo la guardia

-solo un día más- le guiñe un ojo. pero me reprendió con la mirada

Un ruido de cosas cayendo me despertó de golpe y en lo único que pude pensar fue en mi hijo, me levanté y corrí a su habitación y solo vi su cama vacía, mierda hiperventilé de inmediato

-ANTHONY- baje corriendo la escalera y resbale en el último escalón cayendo al suelo, me incorporé de inmediato, pero ya no era necesario correr, tenía a mi hijo frente a mi tomándome del brazo

- ¡Mamá! ¿por qué gritas?

-escuche un ruido

-si a mí se me callo algo en la cocina

- ¿entonces estás bien?

-sí, solo fue un accidente- suspire y relaje los hombros- ¿te sientes bien? ¿desde donde caíste?

- si estoy bien, solo fue desde el último escalón

-relájate mamá estamos bien, no vendrán a la casa.

-sí creo que estoy un poco tensa. ¿Qué haces en la cocina?

-Quería ver lo de la cena en la noche

-Cierto hoy es 31, pero tú no sabes cocinar amor.

-Podría intentarlo, pero hice un desastre. - sonreí, era más alto que yo, ya debía afeitarse y tenía novia, pero a pesar de eso era un niño para mí.

-Yo hago la cena y tú ordenas la casa… los pasaremos donde tu papá así cuidas que esté sobrio y que esté ordenada la casa ¿te parece?

-ok, me parece- sonrió y subió supongo que para arreglarse y marcharse donde su padre.

Hice lo mismo me puse ropa rápidamente, debía ir a la tienda a comprar unas cosas que faltaban había tanto que hacer, así que solo respiré y me comencé a mover debía ser rápida en todo.

Baje la escalera y se me apareció Alice en medio de la sala. con unas bolsas en una mano y en la otra con lo que parecía ser un vestido dentro de una funda de ropa

-Creo que necesitas ayuda- le sonreí, en el fondo siempre sería la misma. La misma Alice de siempre.

El día transcurrió más que rápido, con la ayuda de Alice logre hacer la cena para la noche y arreglarme a tiempo y aparte me ayudo a trabajar desde la casa con las facturas de la librería. Estaba todo en orden y listo como debía estar, Pude toda la comida preparadas en fuentes para que se mantuviera caliente. Puse todo en el auto con la ayuda de Alice y marche, me vestiría donde Derek ya que el vestido que me había dado Alice no era muy abrigado y con la nieve no hacían muy buena compañía.

llegue rápidamente a mi antigua casa, ella me traía tantos recuerdos, después de todo era la casa en la que había vivido todos estos años, acá había nacido mi hijo, Derek me había pedido matrimonio yo le había dicho que si, habíamos vivido tantos buenos momentos. Ya a estas alturas no sacamos nada con lamentarnos, pero después de tantas navidades y años nuevos juntos los recuerdos no hacían más que bombardear mi cabeza.

Cuando llegue Anthony me abrió la puerta, aún tenía llaves, pero no encontraba prudente solo abrir la puerta. Me ayudó a entrar la comida que había preparado, más una botella de vino para la cena. Cuando entre a la casa, esta estaba reluciente, digna de una fiesta de año nuevo, aunque solo seriamos nosotros claro. Todo se veía espectacular, pero no veía a Derek por ningún lado

- ¿y tu padre?

-se está arreglando

-Perfecto, la casa les quedo hermosa

-Y espera a ver la mesa- entre al comedor y la mesa se veía espléndida, cada puesto estaba hermosamente montado de manera ordenada y armoniosa, con cada copa en su lugar, un plato base y los cubiertos de plata que llevaban décadas en la familia de Derek, las servilletas puestas en la mesa eran las que mi madre nos había regalado para nuestro matrimonio, ella las había comprado en un viaje que había hecho a Europa, ni siquiera me acordaba de ellas. Pero en la mesa de ocho personas contaba cinco puestos.

- ¿por qué cinco?

-tu, papá, Emma y yo. El quinto puesto no tengo idea de quién sea el solo me dijo que lo pusiera. - Quede un poco absorta en mis pensamientos, buscando en mi mente quien podría ser este quinto invitado, Estaba en eso cuando escuche a Derek detrás de mí.

-Hola Bella

-Hola

-Te ves muy bonita- su rostro se veía cansado, podía ver una sombra por debajo de sus ojos

-Tú te ves espantoso- me sonrió

-Me alegra tanto saber que pasaremos el año nuevo igual que siempre

-Si, la verdad es que Anthony me convenció, es lo mejor para todos,

-sí, lo es

- estoy algo confundida, para quien es el quinto puesto en la mesa

-Es una sorpresa.

-Está bien, creo que confiare en ti- lo dije con un tono inseguro para que el notara mi desconfianza, pero rio

-Quédate tranquila y confía en mi

-Está bien, mejor iré y me arreglare

No demore mucho en peinar mi cabello, cambiarme ropa y maquillarme un poco, dentro de la casa la calefacción era más que placentera así que el vestido estaba cómodo, lo más probable es que Alice si habría considerado esto. Cuando estuve lista baje, use tacones, pero ya no era un desafío estar en ellos, podría decir que desde que nació Anthony algunos de mis sentidos habían mejorado considerablemente, entre ellos mi equilibrio, aunque claro no tentaba mucho a mi suerte

Al bajar Emma ya había llegado. Nos reunimos todos en la sala a conversar un rato mientras daba la hora para cenar, eran cosas triviales las universidades de los chicos, la biblioteca y esas cosas. Cuando fue la hora de comer me pare de mi asiento, pero Anthony no me dejó ir.

-Mamá. Emma y yo serviremos la comida y les avisaremos cuando este todo listo. -me volví a sentar.

-Está bien

-Papá ¿sirvo a tu invitado misterioso?

-por favor, ya debe estar por llegar.

-está bien- Con ese Esta bien Emma y Anthony desaparecieron en la cocina dejándonos a Derek y a mí solos después de mucho tiempo de esto.

- ¿no me dirás quién es tú invitado o invitada?

-No hay otra chica Bella. -me sonrió-Y no. no te diré hasta que llegue.

-Está bien. -Guardamos silencio un momento, después de todo lo que había pasado y todo lo que se había dicho era un poco incomoda esta situación.

-Me llegaron los papeles ya. solo una firma y serás libre.

-Siempre he sido libre

-Sabes a lo que me refiero.

-No es algo que quiera discutir ahora Derek

-Está bien.

-Anthony me dijo que tenía problemas en el trabajo

-Si, un poco.

- ¿es grave?

-si Bella, es grave. Muy grave.

- ¿Que sucedió?

-¿De verdad quieres que te cuente?

-que ya no vayamos a estar casados no significa que no me importe que pase contigo- solo me miro un momento y luego empezó a hablar-

-Cuando Tony se fue estaba muy enojado, furioso para ser sincero, llegue acá y me tome un par de vasos de bourbon… luego me llamaron para una urgencia, una urgencia a la que no debí ir. La cosa es que cometí una negligencia con mi paciente Fue una cesárea no se en que momento, ni como lo hice, solo sé que ella ahora es infértil. Ella y su familia tomaron medidas legales y tengo mi licencia suspendida hasta nuevo aviso.

- ¿Estas en juicio?

-no aun, los abogados se encargan que no llegue a juicio, pero para ser sinceros me están despedazando, sacaron mi expediente y tengo una detención por sustancias ilícitas.

-Eso fue hace mucho tiempo Derek, aun ni siquiera eras doctor

-sí, pero me incapacita para seguir ejerciendo medicina, luego no sé cómo, ni porque, ni de donde salió tu expediente clínico, y claro luego del embarazo de Tony yo hice una cesárea de emergencia por la cual fui cuestionado ¿recuerdas?

-obvio que recuerdo eso.

-Bueno salió a discusión nuevamente por las medidas que tome, aparte tu expediente clínico indica que gracias a eso tu ahora eres infértil.

-Pero no sirve si yo no te demande.

-No, no aplica como demanda, pero si para cuestionar mi capacidad en la medicina.

- ¿Cuánto tiempo estarás suspendido?

-depende del veredicto, pero para ser sincero, la cosa no se ve bien, no creo que vuelva a ejercer Bella- vi en su rostro tristeza y dolor, él amaba su trabajo.

-No seas pesimista Derek, todo se solucionará,

- ¿como?

-no lo sé, pero se solucionará. - solo me sonrió, no nos habíamos dado cuenta, pero la música estaba sonando todo el rato, lo más probable es que Anthony la haya cambiado. No miramos de manera cómplice-Ese es tu hijo -

-Si, creo que le enseñe bien

- ¿a seducir mujeres?

- a ser un caballero, ¿me concedes esta pieza? - lo consideré un momento y tomé su mano.

Era una pieza de jazz muy lenta de esas que había escuchado ciento de veces tocar en el saxofón a Derek y a mi hijo. Bailamos lento, pero con paso firme

-he de pensar que Anthony es tu cómplice

-no, piensas mal, yo no planee nada- acerco más mi cintura a él, su aroma era como él, pero no olía a él, ya no había café si no unos cuántos tonos de alcohol

paso su mano por mi rostro y sentí el calor de la yema de sus dedos, cerré los ojos y deposite mi cara en su mano, pero Derek acerco mi boca a la suya, por un momento cedi, pero rápidamente me separe de él

-No

- ¿por qué?

-solo no

- ¿por qué Edward esta acá?

- no empieces con eso- solo cayo

-tiene razón perdón

-solo no es lo mejor, para ninguno de los dos. - dio un suspiro ahogado- lo siento.

-tranquila, tienes razón

Después de esto todo se estaba tornando un poco incomodo, pero debía estar calmada todo esto era por Anthony, era una "noche familiar"" como las de antes, el problema era que ya hace mucho habíamos dejado de ser esa familia.

Cuando Anthony llamó a la mesa fuimos al comedor y como si el invitado misterioso llevará un reloj tocaron a la puerta era obvio que sería él o ella, después de todo era noche vieja y nadie tocaría la puerta a no ser que estuviera invitado. Derek se paró del sofá y se dirigió inmediatamente a la puerta mientras yo pasaba al comedor. Anthony me movió la silla para que yo me sentara en una de las cabeceras, Los platos estaban servidos y Emma estaba a la derecha del otro extremo de la mesa. Anthony se sentó junto a ella. Derek entro en la habitación, pero solo, se veía un poco de nerviosismo en el

-bueno primero que todo espero que no desesperen ante mi invitado, después de todo es uno de los motivos por el que llegamos a este capítulo en la historia- Era raro como lo presentaba- Edward pasa por favor.

Sin palabras, no podía emitir una sola palabra, Edward era el invitado tan misterioso de Derek, en que maldita pesadilla estaba metida. Cuando Edward entro solo sonrío de manera incomoda, y se sentó en el puesto que Anthony había preparado para el cómo invitado misterioso. Antes que Derek se sentara no pude evitarlo, pero le pregunte

- ¿qué haces acá?

-Te juro tiene una explicación - luego Derek se sentó y solo sonreí, esa sonrisa que había ensayado millones de veces para sus fiestas aburridas con doctores aburridos a la que debíamos ir solo respire y deje que la noche pasara.

Hablamos de temas triviales, quien raramente se veía mas cómodo era Derek, y con eso le seguía Emma, eran un poco indiferentes a la incomodidad que sentíamos Anthony, Edward y yo. Aunque nuestros niveles de desagrado eran más elevados de lo normal, intentamos conversar como personas civilizadas y así hacer más a mena la noche. Mi copa de vino estaba casi intacta al igual que la de Edward, claro el no podía beber, mi hijo en cambio tenía casi vacía la suya y Derek llevaba tres vasos de bourbon. Llego la hora del postre y los comentarios de Derek empezaron a ser fuera de lugar y desagradables.

-Nunca me has dicho Edward donde estuviste todos estos años- Fue una pregunta de Derek directa para Edward

-en muchos lugares, Sudamérica, África y Europa.

-Que divertido, viajes, mujeres, almas que desangrar, supongo.

-No lo fue, soy vegetariano. mi viaje no fue de placer, y solo hubo una mujer. Victoria era mi objetivo

-oh ya veo, bueno déjame decirte que no eres muy bueno en eso de Victoria. -la conversación se estaba poniendo tensa y Anthony y yo solo nos mirábamos, Emma solo miraba y comía.

-No, la verdad es que la cacería no es lo mío.

-y la paternidad tampoco ¿verdad? -enserio había dicho eso-

-papá creo que ya has bebido suficiente. -Anthony se paró para acercarse a Derek

- ¿A quién le dices? ¿a mi o a él? - pero en el momento en que dijo eso volvió a su asiento.

- ¡Derek, Basta! suficiente de juegos por una noche-

-Es mejor que yo me retire, creo que ya es hora. -

-No, tu eres mi invitado y te quedas porque me lo debes- Edward solo sonrió de manera sarcástica

- ¿Me estas desafiando, a mí?

-Si, no me das miedo, no eres más que un niñito inmaduro, que arranca de sus problemas. Se que no eres capaz de hacerle daño a un humano por Carlisle, pero aún más importante por Bella, porque ella terminaría de conocer al monstruo que eres, sé que no eres capaz de hacerme daño a mí, por Anthony el niño que yo crie por ti. -hubo un silencio sepulcral en la mesa. Pero mi hijo veía de manera furiosa a Derek -No me mires así.

-en menos de diez minutos, has mencionado dos veces que no soy tu hijo.

-" no te debes esforzar tanto, de todos modos, todos sabemos que él no es tu hijo" Eso lo dijo Roger Tuner y tenía razón, no importa cuánto me esfuerce, en el fondo todos sabemos que no eres mi hijo y que nunca lo serás, porque eres como ellos. - apunto a Edward.

No sabía que hacer ni que decir, estaba paralizada en mi asiento, mire a mi hijo y solo miraba a la nada con los ojos empapados, pero aún no caía ni una lagrima por ellos me miro y vi todo su dolor.

-Ciento de veces los escuche llamarme por ese apodo que me habían dado, todos sabían quién era mi padre biológico. Pero jamás pensé que algún día tú lo insinuarías

- ¿cuál apodo? raro, el nieto del jefe o Bastardo Cullen- me pare de la mesa y tome a Anthony de la mano

- ¡CALLATE! cállate. -luego le hable directo a mi hijo-Ve, por favor vete. - no dijo nada solo asintió con la cabeza-Edward llévate a MI hijo por favor- enfatice en el mi mirando Derek. Edward se paró de manera automática del asiento tomo a Anthony del brazo y se lo llevo junto con Emma. Eso nos dejó solos a mí y a Derek. Seguía sentado en la misma silla en uno de los extremos de la mesa, yo estaba parada aun junto a la mesa, vi cómo se servía otro vaso de alcohol, estaba enfurecida. Me acerque a él y le arrebate de las manos su vaso estrellándolo contra una de las murallas.

- ¿Esto eres ahora? ¿un ebrio sin familia? Anthony de verdad quería pasar un año nuevo familiar.

-Tú lo hiciste así, cuando los elegiste a ellos.

-Yo no he elegido a nadie, solo nos protegen. -cambio el tema rápidamente

-Veo que Edward hace todo lo que le dices.

-Estás loco- no podía más con esto, debía salir de hay

-loco-se paró de su asiento- yo no estoy loco, tu eres la loca al querer estar con ellos-yo no podía con esto, me dispuse salir, pero su fuerte agarre me detuvo apretando mi brazo de manera casi estranguladora.

-Suéltame

-no, ahora yo voy a hablar. ¿Me tratas de loco a mí? yo que cuide a tu bastardo por casi 18 años, yo que te ayude a crear tu maldita biblioteca- me tenía apretada por los hombros sacudiéndome de manera violenta y gritaba sin parar, cosas que ni le entendía, cuando lo sentí. Mi mejilla arder, y mi labio perforarse con el contacto de uno de mis dientes.

La pesada mano de Derek había caído en todo el lado derecho de mi rostro, intente zafarme de su fuerte agarre, pero era casi imposible

-Derek suéltame. - dije con dificultad

No me escucho, solo sentía de su parte ira, y golpes que propinaba en el lado derecho de mi rostro, golpes que había intentado parar con mis inútiles brazos, logre darle un golpe en la ingle y me zafe de sus manos, pero rápidamente el jalo de mi cabello llevándome al suelo. donde se posicionó sobre mi inmovilizando todo mi cuerpo, ya no eran mis hombros los que tenía entre sus manos si no mi cuello, azoto mi cabeza unas dos o tres veces, contra el suelo y luego empezó a faltarme el aire. Vi sus ojos negros fijos en los míos, mientras a mi empezaba a faltarme peligrosamente el aire. mis ojos comenzaron a ceder cuando volví a sentir aire en mis pulmones y el peso de Derek ya no estaba en mí. Edward estaba junto a mi tomando mis signos vitales, no sé si fue la falta de aire o el cansancio mental y físico pero mis ojos cedieron de un momento a otro.

Desperté y estaba en mi auto, estaba recostada en la parte trasera de él, me incorpore y vi a Edward cuando me percate que el camino no era al de mi casa hable

-pensé que me llevarías a mi casa.

-Es más seguro donde nosotros- no dije nada, no tenía fuerzas ni ganas de refutar mire de reojo por el retrovisor y mi cara era un desastre, mi cuello se empezaba a poner morado y sentía arder mi nuca, me toque y sangraba. Vi la sangre en mis dedos y las lágrimas empezaron a caer por mi rostro de manera desproporcional, al principio en silencio, pero después de un modo en que no lloraba hace años.

Edward estaciono el auto en un costado de la carretera y se cambió al asiento de atrás. Saco un pañuelo con el que me limpiaba el rostro.

-shhh tranquila, no debí dejarte sola.

-No sabias que pasaría, yo tampoco nunca lo imagine

-debes relajarte- puso su mano helada en el costado derecho de mi rostro, se sentía tan bien ya que la cara palpitaba como si tuviera una herida abierta, me relajé un poco y acompasé mi respiración, cuando ya estuve muy tranquila pude entablar una conversación normal.

- ¿qué paso con Derek?

-me contuve de matarlo, pero lo dejé inconsciente no despertara en varias horas

- ¿y mi hijo?

-en casa, con Esme, yo ya hablé con ella, se está haciendo cargo de la situación, pero no tiene muchos más detalles.

- ¿cómo esta?, ósea ¿cómo estaba cuando lo dejaste?

-triste, callado, decepcionado y con un sin fin de emociones que no podría describir-

-no puede verme así, no puede

-no lo hará, pero sabes que lo sabrá.

-sí pero no quiero que me vea esta noche, ya fue suficiente.

-Él está en mi casa, con Esme, Carlisle y los demás.

-llévame a mi casa.

-Bella, es mejor que estemos con los demás.

-no quiero cruzarme con Anthony, no quiero que Jake se entere aun, quiero estar en mi casa, en mi cama, con mi ropa -lo mire fijo a los ojos - por favor-Dio un suspiro eterno

-Está bien esperemos unos minutos a la respuesta de Alice, y dependiendo ella mandara a Carlisle para que te examine. -Esperamos unos minutos más, tenía frio Edward se percató de eso y saco su mano de mi rostro

-no por favor, está muy helada y de verdad se siente bien, si la sacas arde demasiado- volvió a poner su mano en mi rostro luego de unos minutos el teléfono de Edward sonó me miro antes de responder

-Es Alice. ¿Ya lo viste?... perfecto, ¿y Anthony? entonces vamos…. claro lo esperaremos. Gracias hermana.

- ¿qué dijo?

-que podías quedarte en tu casa por hoy, Carlisle ira enseguida con Rosalie, Anthony está bien, Jasper logro que se calmara y ahora duerme.

-perfecto.

-Bien ahora vamos. - salió del auto y volvió al asiento del conductor, subió lo que más pudo la calefacción.

Entramos en la casa y lo primero que hice fue sacarme los zapatos Edward encendió todas las luces. Me sentía agotada, me senté en el sofá, no podía dejar de pensar en todo lo que había ocurrido hoy, el de hoy no era Derek, era otra persona. No era el hombre con el que yo me había casado la persona que me había dejado el rostro imposible era un monstruo y yo no sabía qué hacer, ¿qué le diría a mi hijo? ¿debía ir a la policía? no sabía nada. Miraba al vacío cuando me tomaron la mano, era Carlisle.

-Hola solo Bella- le sonreí ante su ocurrencia

-Hola doctor Cullen.

-vamos a revisarte te parece- solo dije si con la cabeza

Reviso mis dientes creo que para ver que mis piezas dentales estuvieran intactas, también reviso mi brazo derecho que estaba tornándose morado, mi cabeza necesitaba puntos, pero por lo que dijo creo que solo dos o tres. Mi cuello estaba un poco complicado, iba a necesitar radiografía para ver si no había mayor lesión en esta zona. Tenía la cara inflamada, pero gracias al frio de Edward no tanto a como debía estar y por último curo mi labio.

-Te debes tomar estos analgésicos y estos antinflamatorios- me los entrego en la mano-, y luego que te duches te pones esta crema en la cara y en el cuello.

-está bien Carlisle.

-mírame, -examino mi mirada- aún estás en shock debes calmarte

-es difícil,

- lo se linda, pero vas a estar bien. Yo cuidare a Anthony esta noche sabes que está en buenas manos ¿verdad?

-sí, estará bien por esta noche. - vi que Rosalie y Edward discutían por algo que no alcanzaba a escuchar, pero veía en la expresión de su rostro que era importante - ¿qué sucede? - se miraron entre sí, pero nadie dijo nada- por favor díganme, ya es suficiente por hoy- Rosalie fue la que hablo

-Edward dejó inconsciente a Derek, Emmet fue a buscarlo hace unos minutos, pero ya no estaba, ni el, ni su auto. Aparte Emmet encontró el aroma del sociópata de Alex. - la verdad estaba un tanto indiferente a Derek.

-ok, solo vean que Anthony este bien. - se miraron entre sí, me sentía tan rara ignorando la existencia de Derek- ¿Por qué no siento nada Carlisle? -

-estas aun en shock y pasas por un momento de negación, puede durar unas horas o un par de días. Es un proceso normal ya que el que te daño fue él y no deseas saber nada de su persona al menos por ahora. -Ahora si tenía sentido

- ¿Quién de ustedes se quedará? -la pregunta iba dirigida a Rose y Edward

-quien tú quieras

-Edward, necesito hablar contigo. -solo asintió con la cabeza

Luego de unos minutos Rose y Carlisle se marcharon y me quede sola con Edward, en este momento no me da incomodaba su presencia. Subí al segundo piso con un poco de dificultad y me metí en la ducha. la herida de mi cabeza ardía con el agua caliente, mi boca también, pero de igual manera se empezaban a relajar todos los músculos de mi cara y mi espalda. No estuve mucho rato, solo el suficiente para sentirme más relajada, Entre a mi habitación y me puse mi pijama, no seque ni peine mi cabello solo fui al baúl que tenía a los pies de mi cama y saque una chaqueta, era de Charlie, la tome y me acosté con ella, sintiendo su aroma. No paso mucho cuando sentí un suave golpe en mi puerta.

-adelante- entro Edward con una caja pequeña en las manos,

-lo siento si te moleste, pero debes ponerte esto.

-Ya lo había olvidado -me senté y con un espejo de mano que me paso pude aplicar esta crema en mi rostro y en mi cuello.

-Dijiste que querías hablar conmigo.

-Si, gracias, por lo de hace un rato, no sé qué habría pasado si no llegas. y también quería preguntar por qué fuiste hoy a la cena.

-No quería ir, pero Alice dijo que debía había muchos vacíos porque no ve el futuro de Anthony también dijo que no debía despegarme de ti.

- ¿Derek te invito?

-sí, dijo que sería bueno para todos, y como fue una llamada telefónica no pude leer su mente. - solo guardamos silencio un minuto - ¿Puedo preguntar algo?

-claro

-Hace unos días le dijiste a Anthony que ya no me amabas, ¿es cierto?

-Edward han pasado dieciocho años, ¿qué esperabas?

-Tus reacciones hacia mí no me dicen eso tu corazón se acelera

-No te amo, te ame irrevocablemente, actualmente Edward solo me dueles, mucho.

-hace un rato cuando te pedí perdón por dejarte sola, no fue por hoy, fue por hace dieciocho años.

-Creo que ya te perdoné, el día en que trajiste a mi hijo de vuelta. -Me sonrió-

-Él es grandioso, es muy inteligente, tiene pensamientos tan… sinceros, es leal, valiente. Saco todo lo maravilloso de ti Bella.

-Si, es maravilloso. No podría pedir un hijo mejor. - Volvimos a guardar silencio, pero esta vez no eran incomodos si no necesarios.

-me hubiera gustado estar en su vida

-aunque no lo creas, a mi también me hubiera gustado que estuvieras en su vida, el seria menos... retraído.

-Debiste llamarme Bella.

- ¿me hubieras creído?

-no lo sé, pero de todos modos hubiera estado acá en cinco minutos.

-Charlie te hubiera dado un tiro, él te odiaba.

-Bueno con Charlie teníamos mucho en común, Ambos odiaban a Edward Cullen, y para ambos la mujer de su existencia era Isabella Swan- hablar de Charlie me ponía triste, más que cuando hablaba de mamá

-El día en que me case me hizo prometerle que no dejaría que ningún hombre jamás me volvería hacer daño. Le falle

-No, Charlie estaría orgulloso de la mujer en la que te has convertido, fuerte, valiente, emprendedora, una gran madre, una gran mujer.

-Se que es una estupidez, pero me harías un favor, solo hoy. - por mis ojos ya corrían lagrimas descontroladas-

-El que quieras.

-No me creo capaz de dormir podrías tararear para mí, por favor. - solo asintió. Yo me acomodé para dormir y sentí la voz de Edward tararear, vi en la mesa de noche como daban las doce. Ya era uno de enero. La voz de la Edward seguía tarareando y uno de sus manos acaricio mi cabeza, no pude parar de llorar, de pena, de rabia, de impotencia de siento de emociones que sentía en mí.

-Feliz año nuevo Edward

-Feliz año nuevo Bella

luego de eso cerré mis ojos y dormí.