Fic
El Secreto de las Castas
Capítulo 24
Una canción de nuestra vida
En la entrada principal, continuaban llegando más invitados, era increíble que ya hubiese comenzado la fiesta y aun todavía llegaran más y más personas, Tom, su familia y Jim en una camioneta de lujo bajaban y en otra junto a ellos la familia de Johnson, contento porque su esposa se llevaba de maravillas con Gaby la esposa de Tom quien estaba embarazada y ambas compartían el gusto de que ella tendría un niño esa misma noche, y Tom el esposo de Gaby ya lo conocía, le llamaban Nicolas y sería un Johnson.- ¿Entonces le cambiaran el nombre al niño, George? - Si mi esposa quiere que se llame como su padre, se lo prometió ella le dijo que, si teníamos un hijo varón, le llamaría Charles y el niño se llamará Charles Johnson. La pareja bajaba con su hija mayor una mujer hermosa parecida a su esposa, alta de cabellos castaños y una mirada penetrante como la de su padre, ella estaba un poco incomoda porque sus padres tenían un bebe y ahora sería una hermana de un niño pequeño, cuando ella estaba tan alta y crecida que ya no la seguirían los chicos, pensando que Charles figuraría como un hijito a su lado.
- Jenny esta incomoda, no quería mas hermanos, piensa que no es correcto tener hermanitos a su edad. - También lo pienso, pero ustedes son muy jóvenes, tuvieron a Jenny muy pronto. - La realidad, si, mi esposo tenía la edad de mi hija cuando yo estaba embarazada y… el se enteró cinco años después, yo no estaba con George. - Pero ahora lo esta y su ija es hermosa, ella debe comprender que, si le dieron un hijo, es un regalo precioso. - Si, perdí la matriz cuando nació mi hija por unos quistes que no sabía que me habían dañado, fue un milagro que Jenny naciera bien y sana, para mi es la mejor hija del mundo.
Entraban y sus maletas eran tomadas con sus apellidos como si fueran recibidos en un hotel, pues Tom llevaba a dos niños, mismos que uno de ellos era el mayor cabellos castaños ojos cafés, mientras que el menor era de cabellos dorados lacios y su mirada gris. Gaby era de cabellos castaños y mirada color miel claros, llamaba mucho la atención su embarazo tan prominente, el vestido hacía que un listón de seda cayera desde encima de su vientre. Jim quien mostraba una mirada azul y cabellos castaños, tomaba a el hijo menor de Tom y le daba la mano advirtiéndole no soltarse ni separarse de sus padres o de él.
- Gaby no te preocupes, Candy dijo que la habitación de Tom tendría lugar para los niños, que no estarían lejos de nosotros y a mi me tocara en una de las habitaciones cerca de mi madre.
Ellos estaban entregando los equipajes y notando que todo los subían escaleras arriba, cuando entraba una mujer demasiado llamativa con un hombre que Jim reconocía de la televisión y este susurraba con su hermano, - Ese es el que dijo que nuestro cuñado era gay y el muy sin vergüenza viene a la fiesta. - Cálmate Jim, esa mujer es una ex de mi cuñado o algo así, imagina cuando vea a los hijos grandes de mi hermana, se le caerán los chones. Ambos hermanos se reían mientras de que Johnson que los miraba, alejaba a su mujer y a su hija de tener que estar cerca. - Tom, pasemos al salón, sé dónde estarán las mesas de nosotros, Albert me aviso que estaríamos cerca de su familia. - Gracias George, sin ti no hubiéramos llegado temprano, nadie tiene autos ni jets tan veloces, temía por mi mujer y ni sintió absolutamente nada, esta muy contenta de que tu esposa le haya conseguido este vestido tan elegante. - Ustedes son como de nuestra familia, Albert para mí lo es.
Albert giraba y notaba la señal de George este se iba a la entrada saludando a todos y topándose de frente a Doraly y a su marido. Este los ignoraba y alzaba su saludo - ¡Cuñados! Bienvenidos están en su casa. Tom lo abrazaba y le decía feliz cumpleaños presentándole a Gaby y a sus hijos, lo cual los niños lo reconocían y lo abrazaban diciéndole tío. Los acompañaba a todos por la orilla del salón hasta llegar a las mesas principales, donde Sean y Katy se acercaba a saludarlos, - Gaby, hija, el es mi esposo Sean, el padre de Candy y Tío de Tom. Y ella con lagrimas emocionada comentaba - Mi hijo Zac se parece a usted. Sean bajaba el rostro al pequeño de ojitos grises y este lo levantaba emocionado, se parecía a su hermana, la madre de Tom sacaba su cartera y una fotografía de su hermana junto a sus padres y él. - Toma hija, esta es mi familia, ella es la madre de tu marido y ellos son nuestros padres.
William y Judith recibían abrazando a George a su esposa y a su hija, para luego saludar a la familia de Sean, quienes iban por primera vez a una fiesta con ellos. Posterior a lo lejos miraba a uno de los asistentes llevar a Doraly junto a la mesa de Grandchester y Judith le avisaba a su marido.
El coordinador del evento anunciaba sorpresas para los festejados, a los que Alexander y Albert se iban a la mesa principal junto a sus padres, las niñas de Alex ya estaban sentadas cerca de ellos y junto a su madre que estaba incomoda porque su marido no le permitía dejar a sus hijas solas.
Por un costado salieron Anthony y Andrea, recibiendo los aplausos y el locutor comentaba, los jóvenes Anthony y Andrea Andrew festejados también el día de hoy, que cumplen años junto a su padre y su Tío. A lo que Andy venía vestida de bailarina luciendo sus hermosas y largas piernas, su hermano en esmoquin la llevaba de la mano haciéndola posar al centro, en una pierna con una pose de ballet, los dos poseían micrófonos de diademas. El Coordinador agregaba, - Tocaran Los Jóvenes William y Alexander Andrew. Entraban los otros hermanos se sentaban en ambos pianos y comenzaban a tocar al mismo tiempo coordinándose mientras Andy giraba de un lado a otro y su hermano solo daba pasos para conseguir bailar con ella y que esta fuera la que girara. El salón estaba apagado y solo había luces con los pianistas y los bailarines.
La armonía de la pareja dejaba a todos en silencio, mientras notaban el parecido a Rosemary y a sus hermanos los gemelos. La pieza terminaba. Con aplausos y los tres caballeros se levantaban cubriendo a la dama, quien hacía una pose y por micrófono decía,
- Feliz cumpleaños Papá, Tío Alex, Anthony.
Albert camino al frente y ella corrió como una niña pequeña hacia su padre, este extendió sus brazos y ella se lanzó a los de él, girando con su bebita. Como si no tuviera peso, la tomaba de su cintura la elevaba como si fuera una niña ella se reía al bajarla lo abrazaba y le daba besos en su rostro. - ¡Papito! - ¡Mi bebita!
Ambos se rieron por cómo se trataron y se abrazaban, haciendo a todos participe de como jugaban ellos. Los tres jóvenes atrás esperando a más de cinco metros viendo la escena, al llegar Andy con ellos imitaron a los otros tres hermanitos menores que ya se habían presentado, firmes un saludo militar y salieron a paso rápido sin decir más.
En la mesa de los Cornwall, Anabel comentaba
- Que hermosa se ve, ¿Cierto Archie? Este se quedaba mudo, mirando como salía del escenario porque pronto iría con ella.
En las mesas de los invitados había muchos asombros, sobre todo al escuchar los nombres de los jóvenes y Alexander negaba al pensar que, si él tenía más hijos, pero este no decía nada pues Albert no se separaba del grupo de sus amigos, sus padres y sobre todo sus suegros quienes permanecían al margen de ser vistos por Terry.
El actor por su parte buscaba la mirada de Diane, pues ahora resultaba que tenía sobrinos mayores su amigo y tenía razón al sentirse muy sorprendido, ya que Albert siempre había sido muy juzgado por todo el mundo, al ser el mayor de los Andrew y que fuera hasta gay militar.
El coordinador del evento anunciaba una pieza musical para los festejados, el sonido de la orquesta comenzaba con una danza, dejando a todos en silencio, se volvían a apagar las luces y las pequeñas sobre el escenario salían de un lado y otro entre cruzándose, pero la luz se encendía en la pista y bajo el escenario salían cuatro damas haciendo lo mismo. Vestidas con faldas de picos en seda delgada que volaban con sus figuras, cuatro mujeres hacían un movimiento de puntas y arcos tal como lo hacían las pequeñas en el escenario, la melodía continuaba, los hombres de esmoquin, sin iluminarse bajaban simulado un vuelo a las cinco chiquillas que se enlazaban con las cuatro mujeres bajo el escenario ya unidas con los mismos pasos, continuaron enlazándose con las mayores.
Era tan sorprendente el maquillaje, la iluminación, la música, todo parecía tan profesional. La pantalla que mostraba los videos, esta vez se encendía mostrando el acercamiento a los rostros, de las bailarinas, como sonriendo danzaban sin ninguna equivocación, los dientitos de las jovencitas iluminaban sus rostros, logrando que Albert las viera, pues eran sus hijas y las de Arthur, quien no imaginaba como se habían aliado a sus primas.
La danza dramatizaba ahora más y los saltos eran con las piernas abiertas cruzándose entre ellas, ninguna se equivocaba, las mayores se acomodaban y quedaban las cuatro en forma de arco, donde pasaban las pequeñas en puntitas, como si se tratara de un mundo nuevo. La melodía iba en la finalización, los cuatro caballeros subieron con ambos brazos en sus cinturas, a las cuatro damas, mientras las pequeñas coordinadas se unían a la danza con tres caballeritos que las ayudaban a girar quedando una al centro quien con ambas manos parecía volar y decía en su diadema al micrófono "Felicidades Papi".
Las luces se encendieron y los cuatro hombres, William, Alexander, Joseph y Anthony bajaron a sus damas, quienes se acomodaban agradeciendo. William salía con su tía Rosemary y Anthony con Andrea, Alex se llevaba a Candice y Joseph se llevaba a su madre, esta última le lanzaba un beso a Albert, a lo que su hijo Joseph la tomaba de su cintura saludaba de forma militar y se llevaba a la dama, mientras los gemelos, se daban una mano a cada una de las niñas y la última era acompañada por Bert quien con mucha formalidad llevaba una manita tras su espalda mientras le daba su mano a una de las trillizas. Terry en su lugar estaba mudo, un joven de los bailarines era muy parecido a los gemelos, su hija se quedaba asustada al ver tanto galán, mientras Niel y Nail miraban a su madre y hermanas desconociendo a todos esos jóvenes que fueron anunciados como primos de ellos.
- Papi, ese chico, es igual a los festejados y esta altísimo
- Si hija, dicen que es sobrino de tu tío Alex, estoy seguro de que nos lo presentara al finalizar las danzas.
El locutor anunciaba a los jóvenes Andrew, las mesas comentaban con alegría mientras las damas se iban a cambiar sus atuendos, los caballeros tomaban sus lugares de nuevo en los pianos, esta vez, entraron todos juntos frente a los pianos, se sentaron Anthony y Ángelo Terence, este último llamando mucho la atención. Todos con diademas, iniciaban la melodía en varios idiomas, la orquesta se unía haciendo un sonido acoplado a los pianos, iniciaba Ángelo en español, la canción contigo a la distancia, la siguiente línea la hizo en francés, Anthony, continuaron cada uno de ellos incluyendo los gemelos y Bert, italiano, japones, alemán, arábico, húngaro, eslovaco, hebreo, portugués e inglés. Todos combinaban los idiomas y los coros se unían, la voz más gruesa bajaba el tono y la canción daba simetría. La versión fue compuesta, por ellos al finalizar los aplausos. Ellos saludaban y salían todos por un costado del escenario, dando tiempo a que las damas se cambiaran.
Aquí algo pasaba que dejaba muy asustados a los Grandchester. Ángelo entraba por primera vez y tocaba el piano, pero al pasar por la pantalla, era ver al actor como si estuviera en una película de sus inicios, el joven había iniciado en habla hispana la canción y el tono de voz era muy distinto al del actor, esta vez sonaba muy modulado y sabía cantar perfectamente. Doraly se quedaba con los ojos abiertos y giraba a ver al actor y a su hija, que demostraban que no sabían quién era.
En la mesa de Tom, este le confiaba a Jim, Gaby y George, que era su sobrino, era uno de los mellizos hijo de su prima Candy y su cuñado Albert Andrew. Gaby inquieta mencionaba, es muy atractivo, pero se parece tanto al actor, esas coincidencias pasan, vi un programa de personas muy parecidas que no tenían nada de familiaridad. Jim se acercaba a su hermano y le pedía que le confirmara que si ese también era sobrino suyo. - Si Jim, y te conoce, así que, por favor, no lo confundas con ese, porque el chamaco trae nuestra sangre, lo juro.
Se tocaba una música de fondo, servían copas y bebidas, botanas y salían los pasteles por un costado llegando hasta colocarlos en su lugar el escenario se corría dejando una pista más amplia, unas cortinas se acomodaba y músicos de banda juvenil comenzaban tras esas cortinas a acomodarse para darle espacio a la orquesta que fungía en esos momentos.
Alexander se acercaba a Terry y este preguntaba sobre el chico tan parecido a él. - Si Terry es hijo de mi hermano, no se parecía tanto a ti antes, te lo aseguro, de niño no había visto tantas similitudes, pero ahora que lo vi de nuevo créeme por eso mi esposa esta tan sorprendida, además la familia de Albert siempre estuvo protegida en varios lugares, nunca estuvieron aquí, si no mi padre no los dejaría irse, su madre estuvo a punto de divorciarse de mi hermano, nosotros queriéndolo casar y el con problemas maritales. Otra cosa Terry, a mi sobrino no le agradas, imagina cuantas veces lo han comparado contigo en sus últimos años, es un chico muy listo e inteligente, además es como su madre, militar, es mellizo de una preciosa jovencita mi sobrina es divina también tiene el castaño en su cabello, pero más dorado, se ve muy bonita y ella no se parece a ti - Alex, es una sorpresa fantástica, mi hija quiere conocerlo, mira como la tienes, un amigo joven de su edad. - Los mellizos tienen diecinueve años. -¡Que! Tu hermano tiene hijos tan grandes. - El mayor rebasa los veinte. Doraly que escuchaba a Alexander bajaba el rostro y su marido, incomodo susurraba -Creo que nos pondrán una demanda por difamación, querida.
El organizador volvía al micrófono y mencionaba que había unas piezas musicales que serían cantadas por los hijos de Albert y Candy Andrew. Alex que estaba junto a Terry preguntaba ¿Candy? Así se llama mi esposa, la madre de mis hijos de México. - Pues mi cuñada se llama Candy Andrew. Y mira, es ella. Albert tomaba a su mujer besándola cariñoso, a lo que ella lo abrazaba de su cintura mostrando una figura preciosa y un rostro divino con unos ojos verdes que el mismo Terry admiraba, dejándolo boca abierta, se veía tan jovial, era más alta, mas estilizada, y en si era mucho más elegante y sus cabellos más dorados intensos que los que su mujer tenía, pero su rostro y su mirada era tan parecía a su Candy.
Caminaban a su mesa, donde estaba colocado el escenario cubierto ahora con cortinas, bajaba una pantalla enorme y se apagaban las luces. Una luz iluminaba un costado y salía Joseph, su voz tan grave, cantaba una melodía lenta llamada, No puedo evitar enamorarme de Elvis Presley. Albert y Candy, bailaban al centro, encendiéndose una luz iluminándolos, junto a ellos otras parejas se acercaban, sus padres bailaban cerca de la pareja.
Joseph Cantaba y en la pantalla, fotografías en color sepia se movían donde eran niños en una playa, dos mujeres tomaban el sol, una de ellas era la abuela Judith alta y muy bonita en un traje de baño que ella utilizaba y Katy también en otra sección miraba a sus niños, sonriendo por como jugaban, ambas abuelas estaban muy jóvenes aún. Rosemary siendo niña, corría lanzando agua con Alexander, su hermano gemelo Albert estaban junto a ella, aparecía a lo lejos Tom el hermano de Candy, siendo niño, Candy jugando con él. Albert miraba a la niña y le daba un caracol de mar tomaba su mano y se separaba con ella, mencionando que el se casaría con ella, ella reía y lo abrazaba escondido tras unas palmeras.
Los hombres sabios dicen
que solo los insensatos se apresuran,
pero yo no puedo evitar enamorarme de ti.
¿Debería quedarme?
¿Sería un pecado
si no puedo evitar enamorarme de ti?
Como un río fluye
con certeza hacia el mar,
cariño, así vamos tú y yo,
algunas cosas estaban destinadas ocurrir.
Pasaban imágenes de ella de joven y el también, ahora se escapaban el era soldado, ella vestía de militar, ambos tenían un romance, pero recibían una misión que los separaba y ella ya esperaba a Joseph. Volvían a encontrarse, ambos se amaban, ella ahora tenía mellizos y salía en la pantalla señalando dos dedos.
Toma mi mano,
toma también mi vida entera,
porque no puedo evitar enamorarme de ti.
Como un río fluye
con certeza hacia el mar,
cariño, así vamos tú y yo,
algunas cosas estaban destinadas ocurrir.
Ellos viajaban y ahora estarían separados, había varios niños, uno de ellos era igual a Albert de niño, otro de cabellos castaños los mellizos y dos niños rubios de ojos claros. Su madre se despedía de él y mostraba un embarazo con otros dos pequeños
Toma mi mano,
toma también mi vida entera,
porque no puedo evitar enamorarme de ti.
Porque no puedo evitar enamorarme de ti.
Una imagen de ella miraba él cinco niños estaban en la imagen, el lloraba acariciando la fotografía. Ahora estaban separados, ella no sonreía, el solo miraba la imagen. Y la melodía terminaba.
Aparecía otra luz, esta vez era Ángelo y donde estaba antes Joseph, se uniría Candice. Guitarras se escuchaban, ahora dos voces se oían los mellizos cantaban More than Words. Las parejas que bailaban al centro se retiraban a sus mesas. Veían la pantalla ya no en color sepia, ahora era un varios colores, pero continuaban siendo dibujos en movimiento
Diciendo "te quiero",
no son las palabras que quiero escuchar de ti.
No es que quiera que no me lo digas,
pero si supieras
cómo de fácil sería
mostrarme cómo te sientes.
Candy estaba molesta, los niños no estaban, ella lloraba, le llamaba y le decía que se los habían llevado, que no encontraba a los niños y ella no podía ir a buscarlos, la imagen de una Candy muy joven con lágrimas, su cabello recogido y sufriendo angustiada con un teléfono pidiéndole a él que los encontrara.
Más que palabras (hacer algo más que hablar),
es todo lo que tienes que hacer
para convertirlo en realidad,
entonces no tendrías que decir
que me quieres,
porque yo ya lo sabría.
Ahora aparecía el, vestido de soldado con rango, dejándose caer de un helicóptero, escondido, sacando a sus hijos de un lugar el llegaba hasta ahí, el abuelo Sean más joven estaba muy enojado, gritaba enfurecido que ellos eran suyos. Albert estaba en las sombras y el abuelo era golpeado, con una pistola amenazaban a los niños, y Sean, se detenía levantando las manos para que no asustaran a sus pequeños. Por la parte trasera, se movía la taza del baño, un papel y los chicos salían con su padre. Volviendo a colocar la taza.
¿Qué harías si mi corazón
estuviera partido en dos?
Más que palabras para mostrar que sientes
que tu amor por mí es real.
Albert mostraba un plano haciendo señas y sus hijos dos niñas y cinco hombrecitos miraban atentos, asintiendo sus cabecitas porque irían por su abuelo y ellos debían escapar solos de ahí.
En el salón en las mesas de los militares todos estaban de pie, atentos ante lo que los dibujos mencionaban, ninguno se movía, Sean y William observaban en silencio, impactados por la dinámica que estaba sucediendo en la pantalla.
¿Qué dirías si
me llevase esas palabras?
Entonces no podrías empezar de nuevo
con solo decir "te quiero".
Más que palabras...
Ahora que he intentado hablar contigo
y hacértelo entender,
todo lo que tienes que hacer es cerrar los ojos
y extender tus manos,
y acariciarme,
abrazarme fuerte,
nunca dejarme ir.
Joseph llevaba en su espalda a una pequeña sonriendo, era igual a la tía Rosemary hasta algunos dientes le faltaban, sus cabellitos estaban despeinados, pero ella abrazaba cariñosa a su hermano, mientras los demás los seguían, haciendo movimientos como pequeños militares, pegados a la pared, girando y saliendo del lugar, antes que su padre y su abuelo. Afuera, salían Sean y Albert y ellos de entre las ramas, sucios y escondidos, salían camuflados al verlos libres.
Más que palabras
es todo lo que siempre necesité que mostraras.
Entonces no tendrías que decir
que me quieres,
porque yo ya lo sabría.
¿Qué harías si mi corazón
estuviera partido en dos?
Más que palabras para mostrar que sientes
que tu amor por mí es real.
Los niños eran llevados en avión, su padre los despedía y Sean, era quien se iba con ellos. Las niñas lloraban porque su papá no regresaba con ellos, solo les decía que le dijera a su mami, que la amaba.
¿Qué dirías si
me llevase esas palabras?
Entonces no podrías empezar de nuevo
con solo decir "te quiero".
La canción terminaba, las voces se escucharon simétricas, para cuando finalizaba la música, ambos hermanos estaban juntos la imagen de ellos de niños estaba en la pantalla y ahora estaba ahí, ella era abrazada y sus ojos estaban tristes desde esa distancia, Candice aventaba un beso y decía "Felicidades Papá, te amo." Ángelo asentía y salía con ella.
Gracias por comentar y seguir leyendo esta historia, no sabía que la estuvieran leyendo,
no había casi comentarios y pensé que ya la tenían olvidada, un capitulo más espero que ahora si la comenten.
Un Abrazo a la Distancia
Mayra Exitosa
