Después del último disparo de la cámara, Jackie sentía como su estómago se contraía y su respiración se aceleraba, percibía las palmas de Steven finalmente ejerciendo presión contra su vientre. Podía sentir en cada parte de su ser la corriente eléctrica que existía entre ellos dos.
-Hora de irnos- dijo Eric interrumpiendo los pensamientos de Jackie.
-Claro, andando- comentó Hyde alejándola de sí como si ella le quemara. Antes de que nadie más pudiera agregar nada, Hyde sujetó la mano de Jackie con fuerza y caminó arrastrándola fuera de la casa consigo.
La más pequeña consiguió decir un rápido "hasta luego" mientras trastabillaba tras su cita. El pelirrojo caminó decidido al carro de Jackie, lo rodeo y abrió la puerta del pasajero, antes de empujarla con un poco de brusquedad dentro del carro.
Los grandes ojos de Jackie solo lo siguieron mientras caminaba con prisa para ponerse al volante del coche, la menor no tenía idea de qué demonios estaba pasando, Hyde parecía como si estuviera escapando de una escena del crimen, estaba en uno de esos estados frenéticos que Jackie había llegado a conocer demasiado bien, los ojos azules de Hyde lo delataban, estaban demasiado serios, mirando al frente mientras conducía.
Steven estaba viendo sin ver, mientras su cabeza iba a un millón de revoluciones y si algo había aprendido Jackie sobre él, es que este era uno de esos momentos donde debía dejar que Steven llegará solo a la conclusión de su línea de ideas.
El hecho de que ella hablara hasta por los codos no iba a ayudar en nada, así que la más pequeña soltó un largo suspiro, un tanto preocupada por su noche y un tanto más por Hyde, sin tener nada más que hacer pero con una necesidad apremiante de llenar el silencio la morocha prendió la radio a la espera de que alguna canción acertada pudiera relajar un poco el ambiente.
En cuando Hyde la escuchó suspirar algo hizo clic en su cabeza- "Mierda"- pensó el muchacho dándole una mirada desolada a su acompañante. La delicada silueta de Jackie se encontraba físicamente lejos de él, intentando poner tanto espacio como fuera posible entre ambos, los ojos azules del muchacho podían observar como la castaña intentaba casi fundir su cabeza con el vidrio de la venta del auto como si quisiera pasar desapercibida, eso lo hizo sentir aún más incómodo.
No quería que ella la pasara mal con él, a pesar de todo el entendía por qué esta noche era importante para ella, sabía que su arranque no era exactamente un buen augurio para iniciar la noche, pero su muy incompetente cerebro había caído a un lugar que él jamás se había planteado, fue esa sensación… esa tensión casi primitiva, la textura deliciosa del cuerpo de Jackie debajo de esa tela, por más que Hyde quisiera pelear con esa idea, el joven había tenido pensamientos muy sexuales.
Las mejillas de Hyde se calentaron rápidamente mientras se colorearon de rosa, y es que las imágenes no paraban de llegar a su cabeza, imágenes de ellos en posiciones demasiado explícitas, imágenes de él destruyendo completamente ese peinado solo para ver su cabellera contrastar contra su piel desnuda y la imagen más perturbadora de todas, una imagen que caló más hondo que todo lo demás, una imagen brillo post coital de ellos dos una tarde de otoño, él sosteniendo su rostro con ternura antes de inclinarse sobre ella para besarla casi con devoción - "Si, estoy jodido"- pensó para sí antes de mirarla de nuevo y ver una expresión seria en su rostro.
Hyde dejó escapar un largo suspiro que captó la atención de ella, y antes de que Jackie pudiera abrir la boca el muchacho soltó su mano derecha del volante al que venía aferrándose como un salvavidas, la estiró para sujetar la mano izquierda de Jackie. El muchacho era muy consciente de que estaba jugando un juego demasiado peligroso acá, su parte racional tenía una lista detallada de por qué todo esto estaba mal, que era una mala idea de cabo a rabo, sin embargo, su instinto le suplicaba que confirmara solo una vez más si esa electricidad que sintió al tocarla de esa forma tan íntima realmente existía.
Uno se preguntaría cómo algo tan complejo como esto se podría resolver con una simple acción, sin embargo, dentro de la cabeza de Hyde el muchacho decidió que esta cuestión se podía tomar de forma arbitraria dejando todo en el accionar de Jackie, si solo había sido su imaginación ya sea que ella lo golpeara y le dijera que no o que ella lo sujetara y él no sintiera nada, en cualquiera de los dos escenarios él tendría forma de detener ese torbellino de pensamientos innecesarios dentro de su cabeza.
Nunca considero una posible tercera opción…
Cuando Jackie lo escucho suspirar se preguntó qué podría ser lo que había llevado a Hyde a tal estado de agitación. Cuando sintió la mano de Hyde alcanzar la de ella, su corazón dio un latido muy fuerte, algo dentro de ella hizo un sonido de - "Aaah, eso" - Jackie quiso reírse mucho de la situación, pero imaginaba que no era ni el momento ni el lugar, por lo que la muchacha simplemente se deslizó más cerca de él y enredó sus dedos con los de él estrujando un poco su mano, como diciendo un simple "aquí estoy".
Los ojos multicolores de Jackie buscaron el rostro de Hyde, se toparon un momento con sus ojos azules fijos sobre ella y ahí en ese momento suspendido en el aire Jackie estuvo segura que nadie nunca la haría sentir de la forma en la que Steven Hyde podía, como si estando con el existiera un lugar seguro en el mundo, como si estar completamente viva y feliz no fuera un deseo egoísta o irreal, estar con él siempre se iba a sentir correcto y en este punto era todo lo que a Jackie le importaba.
El pelirrojo carraspeo- No estoy molesto si es lo que te preocupa- intentó aclarar el joven.
La menor lo miró un momento más antes de agregar- Se que no es así como querías pasar la noche, pero prometo que vamos a divertirnos… aunque si de verdad no quieres hacer esto no voy a obligarte-dijo lo último en un desnivel más bajo volteando su rostro hacia el camino.
-Jacks…-suspiro- Escucha soy una persona de palabra, aunque no lo parezca, prometí llevarte o ¿no?- dijo tirando de sus manos entrelazadas para acercarla un poco más a él- Jacks- volvió a llamarla para que lo mirara.
Fue recibido por una cálida sonrisa que le llenaban los ojos de una luz que nunca le había visto con Kelso y ahí estaba de nuevo el corazón traicionero de Hyde con un BUM BUM acelerado- Gracias Steven- dijo la joven antes de inclinarse y plantarle un delicado beso en la mejilla.
El mayor sintió que su carne estaba más viva y llena de electricidad allí donde los labios de la pequeña se habían presionado contra él, y Steven Hyde tuvo la certeza de que al final de esa noche iba a arruinar su amistad con una persona, y no estaba enteramente seguro de con quién.
Una vez se acercaron más a la escuela, el pelirrojo soltó la mano de su cita para poder estacionarse, la muchacha estuvo a punto de abrir su puerta cuando…
-Espera, ya te abro- dijo con un tono mandón, antes de apagar el motor y bajar del carro.
La muchacha se retorció de emoción, si bien era consciente de que Red estaba tras esos buenos modales, es cierto que Hyde había hecho lo mismo por ella hacía tanto tiempo atrás, a pesar de las apariencias Steven era un caballero la mayor parte de las ocasiones.
La puerta de la joven se abrió, el muchacho extendió su mano para ayudarla a salir del coche. Jackie lo miró con aprecio mientras tomaba su mano y bajaba con elegancia del coche, Hyde cerró la puerta mientras colocaba su brazo en posición para escoltarla dentro del gimnasio.
La conglomeración de los estudiantes de Point Place en un solo lugar, ponía ligeramente incómodo a Hyde quien siempre estaba dispuesto a alejarse de los cánones establecidos por la sociedad, sin embargo, ya que estaba vez haría una excepción, aprovecharía su experiencia, fungiría meramente como espectador, especialmente observaría con mayor atención a su acompañante. Hablando con honestidad, las reacciones de Jackie frente a algo tan mundano como el baile se le hacía altamente entretenido.
Después de entregar sus entradas se toparon con la puerta del gimnasio cubierta por globos, rayaba en lo corriente pero la sonrisa de su acompañante crecía a cada paso que daban, apretaba con más ánimo el antebrazo de su acompañante, así que al joven solo le restó suspirar para sí y recordarse que Jackie tenía que pasársela tan bien como fuera posible.
La joven muchacha no podía creer lo idéntico que todo se veía, si ya llevaba un tiempo viviendo en este mundo, en esta época, pero era poder realmente rehacer uno de los recuerdos más preciados que tenía de su adolescencia, todo estaba justo como lo recordaba.
Los globos, las guirnaldas, la mala música y el ponche con vodka, todos los adolescentes ataviados con sus mejores galas, el camarógrafo esperando en el pequeño arco decorado, las mesas y los manteles de segunda, todo justo como lo recordaba; la pequeña no pudo evitar soltar un pequeño chillido de emoción, generando que su cita lanzara un suspiró para sí una vez más.
-Jacks- Trató de llamarla al orden. El mayor siendo consciente de que el ruido que acababa de hacer lastimara incluso las orejas de los perros.
-Mira, vamos a tomarnos una foto por favor- dijo señalando el arco, antes de girarse hacia adentro para quedar parada completamente frente a él regalándole un pequeño puchero, que hizo que el estómago del joven se retorciera de forma comprometedora.
-Ni de broma, la señora Foremand sacó como mil fotos- dijo el con voz seria frunciendo lentamente el ceño.
-Vamos Steven, por favor-continuó suplicando- Podemos irnos media hora antes a buscar algo de cenar si nos tomamos la foto ahora-
-Atrevido de tu parte pensar que dicha foto va a suceder- contestó mordaz sin ceder un centímetro- O que tienes con que negociar- finalizó el pelirrojo.
-Atrevido de tu parte asumir que NO va a suceder- dijo ella estirándose cuan alta era quedando tan solo a centímetros de su rostro- Recuerda que Jaquelin Buckhar siempre consigue lo que quiere Steven Hyde- dijo la castaña mirándolo con decisión.
-Eso está por verse solecito- susurró Hyde dispuesto a no ceder frente a los encantos de la menor, a pesar de que tener su rostro tan cerca del de él, solo le hacía desear inclinarse un poco más y callarla de una forma más acorde a sus impulsos carnales, el deseo fue mayor a su auto control y de un momento a otro sus manos se encontraban rodeando la cintura de Jackie para sostenerla aún más cerca de él, de una forma posesiva.
La castaña creó solo un pequeño espacio entre ambos ya que sus manos se encontraban ahora estrujando un poco la solapa de su traje -Definitivamente es una apuesta que voy a ganar Steven- dijo la muchacha sosteniéndole la mirada, azul y multicolor se encontraron en una batalla de resistencia y tensión.
-¡Jackie!- se escuchó el grito de una voz femenina, provocando que la morocha se separara de un salto del joven para mirar a la persona que la llamaba. Una muchacha rubia se acercaba con prisa, decorada con un vestido color rosa pastel con encaje de un tono más claro de cuello redondo alto y sin mangas, con un cintillo y un moño justo debajo del busto antes de la cintura para caer en una figura en "A" haciéndola ver delicada. Su cabello rubio venia sujeto en una coleta alta adornado con una corona de flores silvestres y un par de mechones sueltos enmarcando su cara.
Tras ella venía un joven en un traje blanco con camisa de volantes de rosa pastel y moño en blanco, con una rosa en su solapa. El joven era rubio cobrizo y de ojos grises que miraban con incógnita la imagen frente a él.
-Dominique, no me dijiste que ibas a venir con Jason- dijo emocionada la aludida antes de salir dispara a saludar a sus amigos, dejando un poco descolocada a su cita sin estar enteramente seguro de que hacer.
-¡Tú nunca dijiste que ibas a venir!- comentó la rubia con emoción.
-Nadie me lo había preguntado- se encogió de hombros.
-Te dijimos que podíamos venir todos juntos- dijo Jason colocando sus manos en los bolsillos, mientras miraba a Hyde sin terminar de descifrar la naturaleza de la relación de ambos.
-¿Y arruinar su noche? ni de broma- hizo un gesto con la nariz- Sería de muy mal gusto Jason, ¿sabes? A las chicas les gusta saber que son especiales- dijo la castaña antes de codear a la rubia, provocando un sonrojo entre ambos.
-Ese no es el caso- la golpeó la rubia mientras sus mejillas se ponían más rojas.
-Si Jackie, venimos como amigos- agregó el joven antes de reacomodar su corbatín.
El pelirrojo está considerando dejarla ser e informarle que iría por ponche cuando sintió la mano de Jackie de nuevo en su brazo tirándolo cerca de ella y sus amigos.
-Steven ¿Tú le crees? - dijo sonriendo de forma traviesa, invitándolo a unirse a la conversación.
-Si el propósito de su atuendo era disimular el sonrojo de toda la noche, entonces sí, supongo que sí les creo- dijo el mayor con una sonrisa de lado y su mirada cuestionando seriamente a su cita.
La pareja se sonrojó aún más - Hubo una pequeña tos por parte del joven rubio- Perdona la introducción tardía soy…-
-Jason Abernathy y Dominique Dubois- Cortó Hyde antes de extender su mano para estrechar con fuerza la del muchacho frente a él- Si, Jackie nos ha hablado sobre ustedes.
Jason entendió de inmediato que ese apretón pretendía ser un concurso de meadas, así que apretó con la misma fuerza con la que lo hizo el mayor, para dejar en claro que no se iba a amedrentar por una cosa como esa, sin embargo tenía que admitir que el joven apretaba fuerte.
-Tu debes ser Steven- dijo la muchacha rubia ajena a la medición de testosterona que sucedía frente a ella - Jackie también habla mucho de ti-
-A ¿si?-
-Claro, es una máquina- continuó la rubia- Steven dice que… el libro que Steven me recomendó… tu gusto por la música no es nada si lo comparamos con el de Steven- fingió imitar a su compañera, mientras ponía sus manos como jarras sobre su cintura.
La expresión de Hyde pasó del asombro a la altanería- Siempre supe que eras mi fan, Jacks- dijo en un tono que pretendía ser un poco mordaz, pues no sabía cómo reaccionar con honestidad al hecho de que Jaquelin pusiera tanta atención a lo que salía de su boca.
La más joven se sonrojo levemente, mientras intentaba mantener la compostura, antes de que una idea se colara por su cabeza y una sonrisa altanera se manifestara de forma muy lenta sobre su rostro- Soy la presidenta de tu club de fans, Steven Hyde y espero que nunca se te olvide- agregó levantando su barbilla con orgullo, mientras veía al pelirrojo abrir mucho sus ojos con sorpresa.
La castaña se acercó rápidamente a él y le plantó un travieso beso en su mejilla, antes de girarse hacia su amiga- Dom ¿Tienen mesa? Me gustaría dejar el bolso y el chal-
-Seguro, vamos- dijo con una sonrisa cómplice la rubia, antes de enredar su brazo con el de la castaña- Ya volvemos- agregó como último dejando a los dos varones solos y claramente incómodos.
Hyde observó como Jackie se inclinaba más contra su amiga mientras se alejaba y comenzaron a cuchichear a una velocidad alarmante, estaba tan concentrado en seguir la figura de su acompañante que olvidó por un instante que no se había quedado solo.
-¿Qué intenciones tienes con Jacks?- La pregunta brotó de la nada, sacando al mayor de su estupor para enfrentarse al rostro serio del joven Jason.
-¿Jacks?- soltó una risa sarcástica- ¿Dejó que la llamarás Jacks?- mientras fruncía el ceño al ser consciente de la intimidad que existía entre su cita y el grupo de amigos con el que frecuentaba.
-No estás contestando mi pregunta ¿Qué intenciones tienes con ella?- mantuvo su seriedad el menor.
-Haciendo amigos desde el inicio, he mocoso- contestó agresivo el mayor- Lo que pase entre Jaquelin y yo es cosa nuestra, no tengo porque darte explicaciones- dijo cuadrándose cuan alto era.
-Me importa porque es mi amiga- dijo seco el rubio también elevándose todo cuanto se lo permitía su altura- Algo que no puedo decir de ti, todos saben que tú y tu grupito de amigos junkies, siempre han tratado mal a Jackie, el por qué ella insiste en juntarse con gente así escapa a mi entender…-
-Mira niño bonito, no tienes una puta idea de lo que pasa en el sótano, si vuelves a ofender a mis amigos o a ella no respondo de como termines- cortó furioso, sintiendo sus mejillas calentarse por el enojo.
-Lo que tú no entiendes es que ella me importa más de lo que a ti te pretende importar, es evidente que solo quieres probar que te puedes meter entre sus piernas, como si fuera igual a las demás. Jacks es la persona más apasionada e interesante que he conocido, sin embargo no entiendo cómo puede fijarse en un sujeto que no tiene oficio ni beneficio-
Hyde estaba dispuesto a soltar el golpe cuando vio venir hacia ellos a la muchacha en cuestión, apretó con más fuerza su puño, tenso la quijada y soltó con voz baja muy consciente que Jackie tenía un muy buen oído
-Quiero dejar algo muy en claro imbécil, yo he cuidad de Jaquelin desde antes que tú figuraras una mierda en su vida, no tienes ni puta idea de lo que pasa entre ella y yo o entre ella y el grupo, yo soy a quien más le importa que ella esté bien y feliz-
-Si tanto te importara su felicidad no la harías tan miserable- respondió el rubio sin medir el nivel de su voz- No te pasearías por la escuela con cuánta fulana se te atraviese si en realidad te importan los sentimientos de Jackie-
-¡Jason!- el grito furioso de Jackie hizo que el rubio brincara siendo consciente que lo habían escuchado- ¿De qué demonios están hablando?- Exige cruzándose de brazos y encarando al rubio.
-Aparentemente Jaquelin, yo soy un perdedor sin oficio ni beneficio del cual deberías abstenerte de asociarte- Contestó el ojiazul dispuesto a mandar todo a la mierda en ese momento.
La menor sentía venir el estallido y su rostro se tornó pálido pues sentía como todo por lo que había trabajado se iba ir a la basura en solo un instante.
La morocha giró su rostro completamente enfurecido hacia el que asumía era el culpable de sus pesares- Jason, no tenías derecho, soy perfectamente capaz de pelear mis batallas sola y nada de esto es de su incumbencia- Terminó mientras lo fulminaba con la mirada.
-Steven, me disculpo mucho por mi cita, normalmente no es un asno- comentó la rubia con un claro gesto preocupado.
-Como sea- dijo él recuperando su zen frente a las muchachas, para después buscar sus gafas dentro de su saco y colocarlas sobre su rostro- Voy a buscar a mis amigos, tú puedes hacer lo que te dé la gana "Jacks"- pronunciando su apodo como quien pronuncia algo echado a perder.
El pelirrojo se alejó finalmente de ahí, muy consciente de que si se quedaba iba a decir algo de lo que realmente podría arrepentirse.
En cuanto el mayor estuvo lo suficientemente lejos, el reclamo de Jackie no se hizo esperar.
-Jason Abernathy, ¡¿en qué demonios estabas pensando?! no tenías ningún derecho- agregó furiosa mientras las lágrimas rabiosas se juntaban en los grandes ojos de la castaña- ¿Tienes idea de cuánto tiempo llevo esperando esta oportunidad con él?
-Jackie solo estoy…-
-¡No! no tienes idea de lo que acabas de hacer- gritó la menor importándole poco que estaba haciendo una escena- Eres mi amigo y acabas de joderme toda la noche- le recriminó con desprecio - Mantente alejado de mí y mi cita lo que resta de la noche- agregó fulminante.
-Jacks, en serio lo siento, pero solo estoy tratando de cuidarte de gente que es...-
-Ni se te ocurra terminar esa frase- levantó su mano enguantada para detener el discurso del rubio.- Solo déjame tranquila ¿Quieres?- se alejó del rubio tan rápido como le permitieron los tacones, dejando al más alto con las palabras en la boca.
El rubio solo la vio marcharse antes de girarse hacía su pareja, apenas trató de abrir la boca cuando se dio cuenta de la mirada furiosa de su cita, soltó un suspiro resignado, ¿Como era posible que él habiendo hecho una buena acción acabara fusilado por todos los flancos?