LOS PERSONAJES DE NARUTO NO ME PERTENECEN SON PROPIEDAD DE MASASHI KISHIMOTO.

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¿Coincidencia o destino?

Que más de uno comparta la misma tragedia.

¿Coincidencia o destino?

Que más de uno luche por un mismo objetivo.

¿Coincidencia o destino?

Que la vida reúna a más de uno en el mismo sitio.

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CAPÍTULO 13: HISTORIAS PARTE 3 "ELEGÍA DE HONOR: EL ESPADACHÍN DE LA NIEBLA VS EL INMORTAL DE LA CASCADA"/ ELEGY OF HONOR; THE SWORDSMAN OF THE MIST VS THE IMMORTAL OF THE WATERFALL.

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Si las cosas no fueran tan confusas, quizá al menos pudiese ir a presumir a sus amigas la felicidad que estaba sintiendo en ese momento, bueno, en todo caso si es que las tres Kunoichis que la frecuentaban podía llamarles amigas. Pero algunos términos eran enteramente complejos y debían utilizarse con cautela; amiga no era sinónimo de compañera y de antemano Sakura Haruno le había ganado la batalla quedándose con el amor de quien había sido hasta el momento el amor de su vida, de Ino Yamanaka le habían dicho que debía cuidarse, pues las malas lenguas decían que estaba enamorada de su esposo, la única que quedaba en la lista como candidata a ostentar el título de amiga era Ten Ten, pero solo por un momento, seguramente más adelante tendría que llamarla cuñada, pues según los chismes y las habladurías la relación con Neji Hyuga iba viento en popa.

No tenía claro cómo debía ser una relación marital estando en esas condiciones, sus besos, sus abrazos por un momento le hacían olvidar la situación, no tenía expectativa alguna ni pretensión, únicamente se guiaba por lo que su propio cuerpo le decía, aunque claro estaba con sus excepciones, por ejemplo como la vez que sintió su cuerpo arder durante el primer beso, quizá porque su mente sabía que era su noche de bodas y era obligatorio tener relaciones sexuales o al menos eso creía, o la vez cuando sintió celos de pensar que pudiese haberse ido con otras, señales sutiles que le indicaban que algo estaba cambiando dentro de ella, ¿debía pensar ahora que era una mujer afortunada?, era muy pronto para decirlo, pero por lo menos esta vez era sincera consigo mismo, le gustaba Itachi Uchiha, su toque la sacaba de control y en varias ocasiones la llevó a sentir un cosquilleo en su intimidad, incluso a pensar ¿Cómo sería su cuerpo?, ¿Qué se escondía debajo de esos pantalones, debajo de esa camiseta?, hasta ahora lo único que le había visto eran los brazos y como no tenía problema sensitivo o algún tipo de neuropatía periférica, por lo poco que había podido sentir el cuerpo del Uchiha estaba… uff.

Dejando a un lado el aspecto físico, ahora debía centrarse en él como persona; si hacia una lista lo único que sabía de él era que… le gustaban los dulces, trabajaba mucho y según los demás era habilidoso y debía serlo, ya era jonin y realizaba misiones clase S, sobre su personalidad era amable, tierno pero también tenía su carácter, decía las cosas de frente y era un hombre capaz de disculparse de sus errores y que además amaba la paz. Desafortunadamente todo aquello lo había descubierto en una situación bastante mala; durante una discusión que casi termina en divorcio.

La soledad era buena compañía, muchas veces le ayudaba a aclarar su mente, sus dudas y ese día por primera vez se preguntó ¿qué hubiera pasado si no los hubieran obligado a casarse?, ¿se hubiesen conocido?, ¿se hubiesen gustado? En un principio lastimosamente sintió algo por él porque así se lo había propuesto, porque no le quedaba de otra, por… resignación, pero ahora ese cambio ya no lo sentía obligado, de hecho le gustaba más de lo que ella creía, su mente y su cuerpo se contradecían constantemente.

Itachi se había ido y ella en vez de volver a su habitación había entrado en la de él, se recostó en su cama, abrazó la almohada con la que dormía, aspiró su aroma y se quedó dormida.

Mientras su mente le decía que actuara como enamorada por "apariencia, su propio cuerpo le daba la espalda y buscaba lo que sea que fuese de él, aunque solo fuera su perfume", la necesidad de estar con él comenzaba a hacerse más fuerte sin darse cuenta; eso sin mencionar el sueño húmedo que había tenido con él mucho antes de conocer la verdad, eso de entrada le decía de antemano que más que gustarle lo deseaba.

Cosa que por supuesto no iba a reconocer, era demasiado impuro para ella.

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x-x-x

Un ave negra que revoloteaba en la ventana del de mayor rango y otra blanca que era realmente eficaz para moverse a través de las naciones y más cuando al final de los bosques les esperaba un mar delante. Medio día había transcurrido y a ese paso llegarían al anochecer a Kirigakure. Después de andar brincando de rama en rama, ahora únicamente se preocupaban por la lluvia y la niebla que les esperaría tan pronto entraran al país del agua.

—Qué suerte que de ahora en adelante tendremos nuestro propio jet privado— comentó Shisui recostado sobre sus brazos, recién acababa de levantarse de una siesta. Mientras Deidara lo veía con desdén.

— ¿Jet privado, Huh?, ten más respeto hacia mis obras, además yo estoy muy cansado apenas y pude dormir anoche—expresó con molestia dejándose caer — después de todo soy quien los lleva y los trae y no me dejan siquiera descansar lo suficiente— recalcó viendo de reojo a Itachi quien desde la mañana no había pronunciado palabra alguna. Una vena sobresalió de la frente del rubio al sentirse evidentemente ignorado — Itachi… ¿me estas escuchando? — habló con molestia mostrando los colmillos

—Déjalo— interrumpió Shisui— debe de estar pensado en… —la noche de anoche, pensó aguantando la risa— la misión.

Sasori los vio de reojo y rodó los ojos pues no soportaba que no dijeran las cosas tal cual son, no obstante no se metería en la vida privada de él, cualquier cosa que estuviese pensando o hubiese pasado era muy asunto suyo, además no quería saber detalles, para él era bastante claro lo que sucedía entre un hombre y una mujer cuando estaban solos y más cuando eran esposos, sea por contrato o no al fin y al cabo tenían necesidades y si era sincero la esposa de Itachi no estaba nada mal, prejuiciosa, medio sangrona e idiota al mismo tiempo pero linda físicamente, bien podría haber plasmado su belleza en una marioneta eterna, pero para su desgracia solo podía conformarse con materiales no humanos. Ni modo.

Deidara los miró con fastidio y terminó recostándose— tomaré un descanso— informó e inmediatamente se quedó dormido.

Sasuke se mantuvo igual que su hermano en silencio, había escuchado demasiada estupidez como para seguir contribuyendo, la situación era complicada de por sí y si a eso le sumaba el problema que tenían con la Uchiha idiota que la había golpeado, asumió entonces que más que nada le preocupaba el hecho que continuaran con el hostigamiento. Era su hermano y lo amaba, por lo tanto lo ayudaría en todo lo que necesitara.

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Hinata se levantó, frotó sus ojos y se quedó un tiempo más acostada pensando en lo que debía hacer; "quedarme como genin o superarme como ninja" el objetivo que tenía Itachi era sumamente noble, pero difícil por no decir que imposible, aun así deseaba contribuir en algo. Se levantó, tomó una ducha, se vistió, sacó su kit de armas los desempolvo y se colocó su banda ninja que hacía mucho tiempo había permanecido guardada, se la puso y salió de su casa, estaba decidida, no podía continuar llorando todo el tiempo, no cuando su esposo se la pasaba fuera, arriesgando su propia vida, él había prometido protegerla pero ella también quería protegerlo, sus palabras la habían hecho reaccionar, desde ese momento no dejaría que nadie pasara por encima de ella, ni las miradas malintencionadas de algunos Uchihas, mucho menos la mujer que la había golpeado ayer, se defendería de quien sea, ella era la futura líder del clan Hyuga.

Salió de su casa, tomó aire y con la cabeza en alto atravesó el clan Uchiha, conforme avanzaba se dio cuenta que nadie la molestaba, al salir esbozó una sonrisa de satisfacción, su cambio comenzaba a hacerse notable y seguramente su seguridad había amedrentado a más de una, por lo que caminó felizmente a su próximo destino.

Lo que ignoraba era que, a lo que realmente temían era a la mirada asesina que Itachi la noche anterior les había regalado.

El llamado a la puesta lo sacó de sus asuntos, mucho papeleo por revisar y solicitudes de los aspirantes de ese año, era el precio que estratégicamente debía pagar por ser la sede de los exámenes chunin

—Adelante— pronunció el hombre, dejando los papeles sobre la mesa y sorprendido de verla frente a él.

—Buenas tardes Hokage sama, ¿puedo hablar con usted un momento? — cuestionó decidida, por primera vez no dudaba y el hombre lo notó de inmediato, la pequeña niña reprimida y cobarde. ¿En dónde estaba? Hiruzen sonrió, "Itachi" fue el único nombre que vino a su mente, no existía nadie más que él para motivar y hacer cambiar de opinión hasta la persona más abnegada del mundo.

—Por supuesto— respondió invitándola a tomar asiento, cosa que ella inmediatamente hizo— dime, ¿Qué se te ofrece? —preguntó desde su escritorio con los codos sobre la mesa y las manos entrelazadas.

—Hokage sama, vengo a postularme para los exámenes chunin, me gustaría poder subir de rango y realizar misiones para la aldea— su voz firme, su mirada tan llena de determinación le decían sin duda que la chica frente a él quería superarse. La vio extenderle un papel con sus datos que indudablemente era su solicitud.

—Esa es una excelente noticia—dijo el hombre haciendo que la Hyuga suavizara la mirada, tuvo miedo por un momento que su petición hubiese sido rechazada, habían pasado cuatro años desde la última vez que nunca esperó volverse a postularse, más que nada para no volver a experimentar el mismo fracaso, haber sido eliminada en las preliminares era definitivamente algo que siempre había querido olvidar— tu hermana Hanabi es una de las candidatas más prometedoras de éste año— Hinata sonrió y sintió un poco de vergüenza que su hermana menor la alcanzase.

—Si lo sé y eso me motiva a hacerlo mejor que antes, quiero que Hanabi, mi padre e I…—paró un momento, empezó a juguetear un poco con sus dedos y sus mejillas comenzaron a adornarse con un tono rojizo.

— ¿Itachi? —cuestionó el tercero, viéndola titubear. Sarutobi rió en sus adentros, a pesar de los años no había cambiado, ese lado suyo era parte de su personalidad, de su ser, era parte de ser Hinata Hyuga y aunque ella llegase a ser la kunoichi más fuerte de Konoha ese aire de inocencia y su torpeza jamás la abandonarían.

—Si— pronunció escondiéndose entre sus hombros. El hokage por fin dejó escapar una leve risa, Hinata de inmediato volteó a verlo y él aunque pudiese verse un tanto entrometido no dudaría en preguntar, en parte porque le tenía mucho aprecio al Uchiha y la idea que ambos se estuviesen llevando bien le agradaba a pesar de no haber estado de acuerdo desde un principio.

—Me alegra saber que te lleves bien con Itachi— sus mejillas se encendieron aún más, no era normal que le preguntase ese tipo de cosas tan personales, al mismo tiempo tampoco podía negarse a contestarle o ser grosera, "era el Hokage".

—Gracias— respondió a secas.

—No te preocupes Hinata, no necesitas decir más, solo espero que a pesar de todo lo que ha sucedido recientemente exista al menos algo bueno— Hinata sonrió, no iba a decirle abiertamente que comenzaba a sentir cosas por Itachi, ni que el Hokage fuera el doctor corazón o algo por estilo, pero al menos podía dejarle saber que las cosas no eran tan malas después de todo.

—Todo marcha muy bien Hokage sama, no se preocupe por eso.

—De nuevo, me alegro mucho de escuchar eso Hinata, y sobre los exámenes chunin, darán comienzo en una semana, actualmente no tienes a ningún sensei a tu cargo, por lo que te pido te mantengas informada, ¿de acuerdo? — Hinata asintió, observó a un ave posarse en la ventana y luego de eso salió de la oficina del kage, justo cuando iba saliendo entró una mujer rubia de cabello largo, llevaba puesto un saco verde y venia acompañada de una joven de cabello negro que llevaba consigo un cerdo, la vio de reojo sin reconocerla, pero no le presto mucha atención, llevaba un poco de prisa.

Entonces pues se alejó de los dominios del Hokage y se fue hacia el clan Hyuga, la relación con su hermana menor no estaba del todo bien, quería disculparse con ella y hacerle una proposición que esperaba no rechazara, por lo que caminó lo más rápido que pudo.

. Era la una de la tarde cuando llego al clan Hyuga.

Abrió la puerta y en cuanto lo hizo los sirvientes la saludaron— Buenas tardes Hinata sama, hace tiempo que no la veíamos por aquí— dijeron al unísono, ella les devolvió el gesto y amablemente les preguntó por su hermana—Esta en el jardín—exclamó uno de ellos y Hinata se fue rápidamente hacia donde se encontraba.

La vio lanzando unos kunais hacía varias dianas, mientras caía al vacío, Hinata abrió los ojos al observar como todos daban en el centro— eso fue increíble Hanabi chan— dijo haciendo que la menor voltease hacia donde estaba ella.

—Ah… eres tú— pronunció sin emoción. Le volteó la cara y se fue por los kunais.

—Lo siento Hanabi, lo siento mucho— la menor volvió hacia ella, sin entender muy bien de que estaba hablando— siento mucho lo del otro día, yo no debí de actuar de esa manera, discúlpame— pronunció acercándose a ella, para ayudarle a recoger las armas.

Hanabi hizo una mueca, no entendía su repentina actitud, le parecía extraña— Itachi san me explicó todo, me habló sobre Akatsuki y a él también le he pedido disculpas, en la mañana se fue a una misión junto a los demás y…— Hanabi reaccionó de inmediato

— ¿Qué?, ¿Cómo que se fueron?— frunció el ceño, estaba harta de largas— No se pudo haber ido, prometió entrenarme— Hinata la miró con ternura, Hanabi era una prodigio dentro de su clan y aun así sus gestos infantiles salían a flote.

—Es una misión muy importante, pero… yo he venido a entrenar contigo — dijo poniéndose en una posición de ataque—yo también participaré en los exámenes chunin—Hanabi levantó una ceja, necesitaba a alguien que estuviera a su nivel o incluso más arriba que ella y Neji para su desgracia había salido de misión hace casi 5 horas.

Hanabi suspiró y negó con la cabeza— Lo siento onii chan, pero no eres rival para mí— exclamó haciendo que Hinata hiciera una mueca. Se sintió mal que su propia hermana la viese como la débil y peor aún la menospreciara, pero desde ese día se había prometido no llorar más, era momento de superarse y lo demostraría.

—Entiendo— pronunció imitando a Itachi— no te preocupes Hanabi, comprendo que tengas miedo— terminó dando media vuelta retirándose del lugar, la menor entrecerró los ojos, el comentario le había molestado y era lo que Hinata precisamente estaba buscando.

—Onii chan— pronunció antes de que su hermana abandonara el jardín— enséname tu mejor técnica y dame tu mejor golpe — Hinata volteo para verla con el Byakugan activo. La mayor sonrió internamente y se lanzó hacia ella. No paso mucho tiempo para que el show de intercambio de puños suaves se hiciese presente, ráfagas de viento movían con violencia las hojas de los árboles y lo harían por un buen tiempo.

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Tras casi nueve horas atravesando el mar, llegaron a su destino.

—Estamos a punto de entrar a Kirigakure, la barrera de niebla que protege a la aldea es sumamente densa, por lo que en poco tiempo perderemos la visibilidad y peor aún es que de noche— dijo Itachi observando a los demás.

—Deidara— dijo Shisui— será mejor que subamos para ver si desde más alto logramos ver algo, en estas circunstancias, nos será difícil atraparlo.

—Conoce el lugar, sabe que lo están buscando y lo peor es que utiliza ese jutsu tan fastidioso de niebla, no poseo alguna técnica para contrarrestarlo, podríamos utilizar los C1 de Deidara para lograr disipar un poco la niebla, pero…

— ¡Ajaaaaa!, ¡lo ves!, ¡¿no es mi arte fantástico?! — dijo contento colocando un brazo alrededor de Sasori.

—Deidara…suéltame, además solo mencioné que podíamos, pero el ruido llamaría mucho la atención.

—Huh, no había pensado en eso— dijo el rubio rascándose la cabeza.

—Claro que no Deidara, tú no puedes pensar eso, porque tú no piensas

— ¡¿Qué dijiste?! — cuestionó enfadado mostrando los colmillos

— ¿Además de idiota sordo?

— ¡¿Quéee?! .

—Lo que escuchaste.

—Suficiente caballeros—hablo Shisui colocando un brazo sobre el hombro de cada uno— debemos pensar en un plan de infiltración y ataque.

—Sasuke— pronunció Itachi— has estado muy serio, ¿tienes algún plan en mente? — todos voltearon a verlo.

—Tengo uno— respondió— pero… ¿Cómo sabemos realmente que Kisame Hoshigaki está aquí?

—Según el informe, Kisame Hoshigaki, hace apenas dos días acaba de asesinar a todo su escuadrón y a Fuguki Suikazan, uno de los siete espadachines de la niebla, se dieron cuenta de inmediato y alertaron a los cazadores anbu, por lo que la isla entera está rodeaba y no hay información sobre aldeas o pueblos vecinos de su avistamiento, de cualquier manera, sería bueno ir directamente con el Mizukage para saber si hay noticias sobre él, pues si ya ha salido del país del agua, entonces no tiene caso continuar aquí.

—Me parece buena idea Itachi— intervino Shisui— sería bueno que mientras unos vayan por información otros nos quedemos a investigar.

— ¿Qué dices Sasuke? —volvió a preguntarle, de entrada sabía que su hermano tenía un plan, seguramente durante todo el camino, había diseñado uno, después de todo tenía experiencia contra usuarios de la niebla y había visto pelear a Kakashi con otro de los espadachines "Zabuza Momochi"

—Podemos sobre volar toda la isla y enviar los C1 de Deidara a inspeccionar los lugares, entonces en algún momento se dará cuenta y acatará, si es que está ahí dentro, Deidara, si puedes sentir su presencia, ¿verdad?

—Claro, huh.

—Perfecto, entonces si Kisame Hoshigaki ataca, Deidara puede detonar el C1 y darnos la localización exacta, luego podemos enviar clones para persecución y algunos explosivos para continuar disipando la niebla, lo importante es que los anbu y el Mizukage estén enterados, para evitar confusiones.

—Esa suena una como una excelente idea— comentó Shisui— pero…

—No he terminado— lo interrumpió Sasuke— también podemos esperar por el refuerzo que Itachi pidió — los demás voltearon a verlo completamente sorprendidos, ¿en qué momento?

—Ya entendí, respondió Shisui, ese cuervo tuyo, ¿verdad? —Itachi asintió —déjame adivinar… Neji Hyuga, ¿no es cierto? — volvió a asentir, Shisui rió— y pensar que tu esposa tiene la habilidad que necesitamos, ¿por qué no la trajiste a ella?

—Lo pensé, pero incluso con el byakugan es difícil, se necesita de un ojo lo suficientemente entrenado para percibir el chakra dentro de una niebla tan densa, ayer que hablé con ella, sutilmente saqué a colación el tema del rango ninja y Hinata aún es genin, no puedo arrastrarla a una misión de rango S— los cuatro restantes se vieron de reojo aguantándose las ganas de reír. Un Hyuga siendo un genin…pfff.

—No me cae mal, pero no soporto que sea tan inútil, la única vez que participó en los exámenes chunin, perdió en las preliminares, fue patético, pero bueno supongo que cada quien desperdicia sus habilidades como quiere.

—Lo que sucede Sasuke, es que Hinata no es una persona que le gusten las peleas, o enfrentamientos, no le gusta lastimar a los demás, ese tipo de actitudes en el campo de batalla, sabemos perfectamente que no sirven— todos asintieron— si no es capaz de utilizar su habilidad para el combate, sería una candidata perfecta para aprender ninjutsu medico e incluso como ninja rastreador, pero para ello se necesita tener un rango más elevado y no creo que le interese si les soy honesto.

—Entonces prácticamente Sasuke tiene razón, es una inútil, huh— Itachi rodó los ojos, mientras Shisui formaba una leve sonrisa.

—Suficiente—interrumpió Sasori— no estamos hablando sobre la esposa de Itachi, estamos esperando al tipo que nos ayudará a buscar a Kisame y nos evitará estar perdiendo el tiempo, lo único que te reprocho Itachi, es el no haberlo traído con nosotros desde un principio— todas las miradas se centraron en el Uchiha, Sasori tenía razón.

—Se me ocurrió en la mañana , es todo— la verdad era que Itachi tenía planeado ingresar al Hyuga a Akatsuki no solo por su evidente talento, si no para mantener tranquilo a Hiashi Hyuga, darle un puesto dentro de la "policía" era un avance y estaba seguro que con eso lograría darle el protagonismo al clan Hyuga que tanto estaban deseando— ahora lo siguiente es ir con el Mizukage , Deidara elévanos, utilizaré el katón para dispersar las nubes y ver en donde está el edificio central del Mizukage, cuando lleguemos ahí Shisui y tú regresaran para encontrarse con Neji Hyuga.

— ¿Cómo lo encontraremos? —preguntó Deidara bastante confundido.

—Antes de llegar hasta acá, he dejado uno de mis cuervos, Neji, Kakashi y Gai ya se reunieron con él y en este momento están cruzando el mar, necesito que vayan por ellos lo antes posible.

—Bien—exclamó Deidara formando otro C2— Este los llevará con el Mizukage, Itachi, Sasuke Y Sasori subieron al ave y se dirigieron a la oficina del kage, mientras Shisui y Deidara iban a toda velocidad para reunirse con Neji y los demás, eran las nueve de la noche y si se apresuraban se reunirían al amanecer. Los planes habían cambiado drásticamente, pero todo buen ninja debía reconocer que había ciertas cosas que un Uchiha, un marionetista o un pirómano no podían hacer y precisamente era ver el chakra.

Eran las nueve de la noche y los tres ninjas se reunían con el cuervo de Itachi para posteriormente dirigirse hacia la aldea de la niebla al mismo tiempo que Shisui y Deidara iban a toda velocidad para reunirse con ellos y llevarlos lo más rápido posible a Kirigakure.

Diez minutos habían transcurrido e Itachi, Sasori y Sasuke habían logrado encontrar la oficina del Mizukage, rápidamente fueron hacia allá, aunque tuvieron sus dificultades, la gente de Kirigakure era bastante hostil, y no esperaban un recibimiento diferente. A regañadientes les habían indicado la localización exacta y eso únicamente porque llevaban la carta firmada por el kage.

—Mizukage sama— pronunció un hombre de cabello azul y con parche en el ojo.

— ¿Qué sucede Ao?

—Los ninjas de Konoha está aquí— el cuarto levantó ambas cejas.

— ¿Tan pronto? — era increíble, apenas antier había mandado la petición y ambos países estaban sumamente alejados uno de otro. Además atravesar el mar no era sencillo. Ao asintió— Hazlo pasar— ordenó y de inmediato observó la figura de los tres hombres.

—Buenas noches Mizukage sama— dijeron los tres al mismo tiempo, haciendo una pequeña reverencia.

—No los esperaba tan pronto, pero debo admitir que me alegra mucho— sonrió— me parece que ustedes no solo son los ninjas de Konoha, ¿verdad? — cuestionó al ver a Sasori con ellos.

—Así es— respondió Itachi— nosotros somos Akatsuki

—Ya veo, entonces tenemos aquí al reivindicado escorpión de la arena roja, Sasori, el maestro de títeres

—Un placer sanbi sama— respondió con ironía— perdón Mizukage sama— el kage rió, le agradaba la idea de no tener que mostrar hipocresía. Ao alzo una ceja

—Sin embargo, tengo entendido que, también han reclutado al ninja terrorista de la roca, Deidara, ¿Dónde está él?

—Él está junto a otro compañero revisando la zona, debo decir Mizukage sama, que es difícil entrar al país con tanta niebla, hemos tenido algunas dificultades para llegar aquí.

—Ja… ¿dificultades?, han llegado hasta acá en tiempo record y me hablan de ¿dificultades?— aquello sonaba bastante pretencioso—No sean tan presumidos.

—No lo somos, de hecho— habló Sasuke— únicamente hemos venido con usted para saber si han tenido noticias sobre Kisame Hoshigaki, no queremos estar buscándolo en los alrededores de la isla inútilmente.

El Mizukage sonrió— No lo han visto salir, pero… tiene una habilidad increíble— paró observándolos fijamente— y me temo que no les agradará mucho la idea— los tres hombres se vieron entre sí.

—Bueno, para que haya pedido refuerzos, de entrada sabemos que tiene una habilidad en particular que le preocupa, ¿no es así? — intervino Itachi

—Si— respondió levantándose de su asiento— él puede vivir prácticamente en el mar, y como se habrán dado cuenta, estamos rodeados por kilómetros y kilómetros de agua

Sasori comenzó a reír sarcásticamente — Eso quiere decir que estamos buscando en el sitio equivocado, bien pesando Itachi, definitivamente necesitamos del byakugan.

—Lo más seguro es que se encuentre en el mar, la pregunta es… ¿en qué parte exactamente? — cuestionó Itachi, viendo como el Mizukage se iba hacia el ave en la que viajaban.

—Iré con ustedes— pronunció, Itachi asintió, quien mejor que el Mizukage para guiarlos a través del país del agua— en algún punto la marea debe ser anormal, es ahí en donde aparecerá, Ao, te quedas a cargo de la aldea.

—Si Mizukage sama— luego todos subieron, debían reunirse lo más rápido posible con Shisui y los demás, debían transmitirle la información recién obtenida.

— ¿Huh?...

— ¿qué ocurre Deidara? — Itachi y los demás vienen de regreso, ¿Qué hacemos?

—Puede que tengan información importante, pero nosotros debemos continuar hasta encontrarnos con los demás.

Deidara asintió y continuaron con su camino. Entre el grupo de Itachi y Shisui se llevaban media hora de diferencia.

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Cuando Hiashi Hyuga vio a sus hijas entrenar, una leve sonrisa se dibujó en su rostro, llevaba más de una hora observando como la mayor de ellas por fin comenzaba a tener un cambio de actitud. Le era gratificante el pensar que no se había equivocado, y que había tomado la decisión correcta, aunque evidentemente aun le faltaba mucho para superar a su hermana menor.

Hinata había caído más de veinte veces, su cuerpo estaba notablemente lastimado y apenas y podía respirar. Jadeante y encorvada sus movimientos cada vez eran más torpes y conforme avanzaba el tiempo la diferencia entre las dos se hacía más notable; llevaban cuatro horas entrenando, él mismo había impuesto a Hanabi para resistir tanto y por ello el tiempo transcurrido en la menor no parecía afectarle. Un último golpe sobre el pecho de la mayor, la hicieron caer por última vez, Hinata tosió un poco de sangre, sus canales de chakra estaban completamente bloqueados.

—Ya fue suficiente— escucharon las dos al ver a su padre frente a ellas.

—Si— respondió Hanabi haciéndole una reverencia a su padre.

Hinata como pudo, se levantó, su cuerpo tambaleante la hacía moverse de un lado a otro, trataba de mantenerse de pie, pero el cansancio era excesivo— bu- buenas noches pa-pa— apenas y pudo pronunciar, su vista se nubló, sintiendo como su cuerpo dejaba de reaccionar, todo dio vueltas y se desplomó. Afortunadamente Hanabi había alcanzado a sostenerla, Hiashi fue hacia ellas, cargó a su hija mayor y caminaron hacia la casa principal.

— ¿Por qué estaban entrenando? — preguntó dudoso, esas actitudes no eran típicas de ella.

—Onii chan se inscribió en los exámenes chunin—respondió, Hiashi llevó su vista hacia la mayor, cerró los ojos y la subió hasta la que había sido du habitación, cerró la puerta y en cuanto lo hizo volvió a sonreír. Si definitivamente había tomado la decisión correcta.

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!CLAP-CLAP-CLAP!

Resonaba en el agua sus andares, haciendo que las ondas expansivas de la misma generaran cierta frecuencia que había sido percibida por el espadachín en cuestión. Tres de la mañana y los ninjas de la hoja no detenían su paso, Neji, Kakashi ambos con sus ojos activos y Gai pode delante de ellos.

Su áspera piel rondando por los alrededores; tenía en conciencia que lo buscaban, no solo uno si no varios, antes había visto claramente un grupo sobre un ave atravesar el mar y éste seguramente era de refuerzo. Decidió atacar con la ideología de dividir para vencer, lo superaran en número, pero él era mucho más astuto y tenía ventaja de campo.

—Suiton Kirigakure no jutsu— pronunció desde las profundidades del mar. Pronto la densa niebla se apoderó de un rango bastante amplio aproximadamente un kilómetro, los ninjas de la hoja detuvieron el paso al percatarse de las nubes blanquecinas que nublaron por completo su visión.

—No logro ver nada— pronunció Gai.

—Es demasiado pronto para que la barrera de Kirigakure se haga presente— pronunció Kakashi— además, la rapidez con la que se propagó no es normal, la niebla por evaporación de agua tarda mucho en manifestarse, por lo que me temo, estamos dentro del jutsu del enemigo, tengan cuidado.

—No veo a nadie en los alrededores— pronunció Neji moviendo la cabeza en todas las direcciones, ¿Qué hacemos? — se dirigió a Kakashi.

—Neji, asegúrate de ver en todas las direcciones—Neji asintió volviendo a examinar el lugar, volteo hacia arriba y cuando menos esperó vio una enorme masa de chakra debajo de sus pies— ¡Cuidado, debajo de nosotros! —gritó, luego los tres ninjas saltaron, sintiendo el agua caer sobre sus cuerpos tras una explosión.

—No se separen— pronunció Kakashi, viéndose en clara desventaja, pues en ese momento solo dependían de Neji, su equipo de perros ninjas no le servían de nada, pues bajo el agua cualquier olor se perdía. Unos segundos después sintieron una ligera descarga eléctrica, los tres se paralizaron por un momento, luego aunque la niebla les impidiera el 90 % de visibilidad, lograron ver claramente unas bolas destellantes desplazarse en sentido horizontal.

— ¿Centellas?— cuestionó Gai saliendo del aturdimiento— ¿Por qué hay centellas?, acaso es también usuario del ¿raiton?

—No— respondió Neji, comenzando a sudar— se trata de otro individuo, hay alguien más aparte de él y nosotros.

— ¿Qué? — estaban realmente ante un problema.

—Tiene sentido, aunque pueda utilizar el elemento rayo, si está debajo del agua, le afectará igual que a nosotros— exclamó Kakashi.

—Ahí viene de nuevo— exclamó Neji, luego comenzó a rotar, para ir desviando una tras otra las centellas. Sabía que no resistiría por mucho tiempo, pero hasta el momento lo único que podían hacer era cubrirse de los ataques eléctricos.

—Hay problemas— pronunció Itachi tan pronto lo percibió, haciendo que el grupo con el que venía volteara a verlo y ordenó al ave ir lo más rápido que se pudiera.

Afortunadamente Deidara y Shisui habían llegado a donde estaban ellos, se sorprendieron mucho cuando vieron la enorme nube de niebla que cubría el lugar. La extensión era masiva y desde esa distancia podían darse cuenta del poder que tenía Kisame Hoshigaki.

—Vaya, es increíble, huh— Shisui se quedó observando la situación, vio como un ave negra volaba sobre la niebla e inmediatamente pensó en Itachi, aquel cuervo era sin duda de él e indicaba una señal de auxilio.

— ¡Rápido Deidara, aletea para dispersar la niebla que está debajo del cuervo!

—Si— respondió acercándose al lugar y el ave comenzó a crear con sus alas, ráfagas de viento que creaban un gran oleaje, desplazando la niebla y las centellas. Dentro de ella, los tres ninjas de Konoha no podían hacer nada más que resistir el embate del viento

— ¿Qué ocurre ahora? —cuestionó Gai sin entender lo que sucedía. — ¿Otro enemigo?

—No lo creo— respondió Kakashi, notando como poco a poco podían observar la luz de la luna.

— ¡Ahí Deidara, vamos por ellos! — gritó Shisui en cuanto pudo verlos, el rubio asintió acercándose a toda velocidad— Kakashi, Gai, Neji, por aquí— les llamó, los tres ninjas saltaron hacia el ave y se alejaron del lugar, Neji inmediatamente cayó debido al cansancio, llevaba más de cuarenta minutos protegiéndolos

—Descansa Neji, te lo mereces— pronunció Gai auxiliándolo.

— ¿Qué ocurrió? — preguntó Shisui de inmediato viendo como el ave negra se posaba sobre su hombro.

—Fuimos emboscados, uno de ellos sin duda es Kisame Hoshigaki y el otro utiliza el elemento rayo, por lo que no podemos bajar a pelear cuerpo a cuerpo con ninguno de los dos es imposible.

— ¿Son aliados? — cuestionó intrigado.

—No lo sé, no creo.

—Bien, entonces creo que ha llegado el momento de hacer salir a nuestro amigo— pronunció Deidara moldeando arcilla en forma de peces de mayor tamaño— prepárense para un show marítimo, huh— pronunció lanzando sus bombas al agua— esto será increíble— dijo emocionado haciendo una posición de manos— ¡Katsu!— gritó creando una enorme explosión, que levantó olas de gran tamaño e hizo que miles de especies marinas se alejaran del lugar.

El Mizukage había notado desde hace rato como los peces y toda vida marina huían despavoridas, su comportamiento inusual le indicaba que algo grave pasaba, de pronto un estruendo aturdió sus oídos y vieron una ola masiva levantarse, Itachi, Sasuke, Sasori y el Mizukage se quedaron observando completamente sorprendidos, la explosión había sido de tal magnitud que la presión generada, junto con el choque termal del aire caliente y la humedad del mar en combinación con el aire frio del agua de mar caer, habían creado una tormenta eléctrica que venía acompañada de un enorme remolido. La niebla se había ido y por fin Kisame Hoshigaki se dejaba ver; un hombre de gran tamaño, dientes afilados, piel azul, que llevaba consigo una enorme espada.

Por otro lado un hombre de talla similar, piel marrón e inusuales hilos uniendo sus miembros, su cara completamente cubierta, que únicamente dejaba ver el color de sus ojos, un verde muy singular.

Ambos hombres estaban frente a frente, separados únicamente por el remolino que se tragaba con furia cualquier cosa que se atravesase en su camino. Los truenos y rayos azotaban el cielo sin compasión alguna y la lluvia caían sin control, la luna había sido cubierta en su totalidad por las nubes grises de la tormenta mientras los Akatsuki presentes observaban en silencio la situación.

—Hasta que por fin apareces — dijo el hombre que llevaba en su frente una banda ninja proveniente de la aldea de la cascada— es hora de que vengas conmigo

Kisame comenzó a reír sin apartarle la vista— vaya, vaya, Kakuzu de la aldea de la cascada, ¿a qué se debe el honor de tu visita ? — le preguntó sonriente, mostrándole sus afilados dientes.

—Tu cabeza vale millones— respondió a secas.

—Tal como lo esperé del legendario caza-recompensas.

—Me aseguraré de dejarte reconocible— Kisame llevó su brazo hacia su espalda y empuño su espada, lentamente la llevo hacia el frente de su cuerpo dejando que todos los presentes aparecieran su belleza.

—Acabaré contigo y después seguirán esas basura de la hoja— respondió desafiante apuntando hacia los hombres sobre el ave.

— ¡Oye, oye, oye!, tranquilo— comentó Shisui— hemos venido a hacerte una propuesta— Kisame rió— ¿Qué clase de propuesta podrían hacerme ustedes? — cuestionó sin para de reír.

—Si fuera tú, no me descuidaría— exclamó Kakuzu dirigiéndose hacia Kisame y en menos de dos segundos ambos estaban intercambiando golpes y las ondas expansivas entre la fuerzas de ambos era brutal, Deidara y Shisui podían sentir el aire que emanaba de sus golpes, ¡era increíble, dos bestias peleando entre sí!

—Esto le encantará a Itachi— pronunció Shisui mientras Deidara y los demás miraban con detenimiento la pelea.

Luego de unos segundos ambos ninjas corrían alrededor del gran remolino, Kakuzu hizo una posición de manos y de inmediato un rayo se dirigió hacia Kisame, el ninja utilizo su espada para cubrirse, dio un salto y contra atacó con dos tiburones de agua que se dirigieron hacia el cuerpo de; hombre, de la espalda de Kakuzu salió un especie de ente o capa negra con mascara que evaporó el jutsu— ¿Qué es eso? — preguntaron con curiosidad los ninjas sobre el ave. Kisame se dejó caer sobre él lanzando un espadazo, el cual impactó con el kunai que llevaba el de la cascada en la mano, para ese entonces las manos de ambos temblaban soportando el poder del otro, mientras los truenos iluminaban sus cuerpos, la marea cada vez se movía con más violencia y la lluvia arreciaba cada vez más.

—Oye tú— habló Shisui haciendo que se separaran. Kakuzu volteo a verlo y molesto le pregunto — ¿qué quieres?

—También tengo una propuesta para ti, eres un tipo bastante interesante— mencionó bajando del ave de Deidara— ¡Shisui!…. ¿Qué haces? —cuestionó el rubio recordándole lo antes mencionado por Kakashi — se lo que hago, no te preocupes—volteo hacia él dedicándole una ligera sonrisa.

— ¿Una propuesta? —cuestionó curioso— dejaré que hables si se trata de dinero— pronunció haciendo que Shisui comenzara a reír— no le veo la gracia.

—Lo siento, lo siento, pero es que me es bastante gracioso, no te lo tomes a mal—Kakuzu entrecerró los ojos, si no tenía nada interesante que decirle, entonces que se largara de una buena vez a no ser que…

—Ya entiendo—dijo sacando una tercera mascara— lo que quieres es parte de la recompensa, ¿no es así?— supuso aumentando su enojo, Shisui levantó una ceja y se rascó la cabeza— ¡ha!, no pienso darte un centavo.

—La verdad es que…si, venimos por Kisame Hoshigaki, pero no precisamente para llevarlo a una oficina de recolección— confesó para luego comenzar a esquivar los ataques del hombre, Shisui y los demás estaban impresionados de ver el alcance que tenía el ninja, era como si sus brazos fuesen una especie de extensión— ¡wow, que técnica tan interesante!— pronunció alegre, tomando los hilos de sus brazos, Kakuzu hizo una mueca y Shisui vio como una de las máscaras lanzaba un rayo contra él, al mismo tiempo que Kisame se dejaba caer con el fin de asestarle un golpe con su espada. Shisui dejó que Kisame lo golpease, sin embargo en cuanto lo hizo desapareció— un clon— exclamo el de la niebla con sorpresa girando su cuerpo esquivando por un pelo el ataque de Kakuzu.

—Ya veo— pronunció Kakuzu— un Uchiha.

—El clan de los ojos locos— dijo Kisame en tono de burla.

—Oigan, oigan, tranquilos, vengo en son de paz.

—Ya te dije que no pienso darte ningún centavo— volvió hablar lanzándole un jutsu de fuego, el cual fue contrarrestado con otro similar.

— ¡Por fin!, me estaba empezando a preocupar por ustedes— Shisui sonrió al verlos bajar de aquella ave.

—Vimos una gran explosión antes de llegar, ¿Qué sucedió? —preguntó Itachi viendo a los dos hombres frente a él.

Cuando llegamos había una gran nube de niebla que se extendía a más de un kilómetro cuadrado, seguramente percibiste que se encontraban en peligro pues tu cuervo revoloteaba—Itachi asintió— Deidara dispersó un poco la niebla, con ello logramos rescatar al equipo de apoyo y utilizó su C1 para crear la explosión y hacerlos salir

—Entonces la explosión la provocaron ustedes— intervino Sasuke.

—Así es —contestó Shisui— además con la explosión logró erradicar toda la niebla y pudimos tener visibilidad, la técnica de Deidara fue la clave para el éxito de esta misión.

— ¿Deidara siendo útil? — cuestionó Sasori levantando una ceja, mientras veía como el rubio iba hacia él.

— ¡Todo fue gracias a mi arte! huh— presumió alzando las manos hasta sus hombros y colocando las palmas en posición supina, escuchando como una risa malévola interrumpía sus diez segundos de fama.

— Debo decir que esta reunión es bastante peculiar y ventajosa para mí—pronunció Kakuzu observando a dos hombres en particular—nunca imaginé que de este encuentro pudiese obtener más de lo pensado, el chico rubio es Deidara el terrorista de la aldea de la roca, y el otro es el renombrado escorpión de la arena roja, el maestro titiritero Sasori, pagan por sus cabezas una buena cantidad de dinero— pauso viendo como Itachi y Sasuke activaban el sharingan —oye chico — habló dirigiéndose a Shisui— cambie de opinión, estoy dispuesto a pagarte una comisión si me ayudas a llevarme los cadáveres— Itachi lo volteo a ver sin entender muy bien a que se refería.

Shisui volvió a reír—Lo siento, pero no estoy tras el dinero.

—Es una lástima, pero supongo que por los ojos de ustedes tres también podrían darme algo y que decir de la preciada cabeza del mismísimo Mizukage quien a su vez posee al tres colas en su interior Yagura Karatachi—expresó sacando la cuarta mascara. Itachi, Sasuke, Sasori y el Mizukage lo observaron con sorpresa, viendo como cada una de las máscaras iba tras ellos.

El Mizukage lo atacó con su bojutsu ocasionando la ruptura de la cuarta máscara (la de doton) y vio claramente a un chico atravesarse rápidamente.

—Ustedes pagaran por esto— pronunció Kakuzu, viendo como caía el ente y esquivando los ataques del chico que recién lo retaba.

En apariencia el Mizukage era tan solo un niño, sin embargo era despiadado, Kisame aprovecho la oportunidad para atacarlo por la espalda, pero su ataque fracasó estrepitosamente cuando del agua se formó un espejo que reflejo inmediatamente el ataque, Kisame se vio forzado a utilizar a Samehada para destruir su propio jutsu.

—Es justo como lo esperé del Mizukage— dijo observándolo como si fuese su presa. Kisame estaba dispuesto a acabar con él, y Yagura pensaba exactamente lo mismo, ninguno de los dos perdonaría su traición y se enfrascaron en una batalla campal.

Itachi, Sasori, Deidara y Shisui se encontraban luchando contra las máscaras restantes del ninja, mientras Sasuke seguía tras Kakuzu,

— ¡Ten cuidado Sasuke!— le grito Kakashi, Itachi inmediatamente volteo hacia donde su hermano se encontraba, lo amaba, pero odiaba esa actitud suya de querer hacer las cosas solo, afortunadamente Kakashi había bajado para apoyarlo.

Dentro de la pelea hubo un momento en el que Itachi y Shisui se cruzaron— ¿qué es este jutsu? —le preguntó, tenía una idea pero no estaba seguro del todo.

—Parece que puede manejar más de un tipo de chakra, ten cuidado con la máscara de raiton— indicó señalándola, Itachi vio como Sasori la esquivaba sin dificultad alguna, dándole un golpe con la cola de Hiruko, la máscara dio vueltas y lanzó un rayo que impacto en el agua, justo en ese momento Deidara caía cerca de la zona y la corriente rápidamente se esparció recibiendo de lleno una descarga eléctrica.

— ¡AAAAGGGHHH! —grito sin poder mover un solo músculo. Itachi inmediatamente formó los sellos y con un katón la destruyó, Deidara cayó sobre el agua, sus músculos estaban entumecidos. Gai bajo velozmente a rescatarlo y lo dejó con Neji, pues era su turno de ayudar.

Simultáneamente a Itachi, Shisui había realizado la misma técnica para destruir la máscara de viento y Gai utilizó la fuerza de sus piernas para destruir la de fuego e inmediatamente se fue hacia donde se encontraban Sasuke y Kakashi. Mientras Itachi, Sasori y Shisui ayudaban al Mizukage, quien había recibido un corte en el brazo con Samehada forzándolo a tomar su segunda forma como bijuu. Kisame tenía varias heridas en su cuerpo, sin embargo eso no le impedía seguir de pie, su fuerza no había disminuido ni un poco

—Mizukage sama— pronunció Itachi al verlo transformado— recuerde que…

—Lo sé— respondió— no he pedido mi conciencia, puedo controlar a mi bijuu.

—No nos referimos a eso Mizukage sama— interrumpió Shisui— si no a Akatsuki— Yagura lo vio con molestia— no eres quien para decirme que hacer—respondió haciendo que Shisui se rascara la cabeza. La apariencia del chico ahora era una masa de chakra roja.

—Shisui es el vicecomandante de Akatsuki, perdone por no presentarlos antes— dijo Itachi.

—Sé muy bien lo que les prometí, pero no puedo perdonar a un traidor— Kisame lo vio con rencor y se lanzó contra el dispuesto a asesinarlo. Samehada rompió las vendas que la contenían, había reaccionado ante el chakra del bijuu y deseaba poder obtener un poco de el. Kisame de nueva cuenta se dejó caer anteponiendo a Samehada, Sasori inmediatamente hizo algunos movimientos con sus dedos inmovilizando a Kisame, quien quedó suspendido en el aire mientras sangraba debido a los cortes provocados por los hilos, Yagura aprovechó la situación para crear una bijuudama y justo cuando pensó que lo tenía, la espada mordió los hilos de chakra liberándolo— Tshhh…— gruño Sasori arrugando la nariz, luego el de la niebla de un espadazo devolvió el ataque, los tres chicos se movieron rápidamente del lugar y la bijuudama impactó en el agua. En cuanto cayó al suelo, Kisame corrió hacia Sasori— Tus hilos son demasiado molestos— le dijo atacándolo con su espada, Sasori utilizó la cola de la marioneta para cubrirse del ataque-crack-crack-crack- escuchaba desde adentro, haciendo una mueca de fastidio mientras sudaba debido al esfuerzo que hacía para contrarrestar la fuerza del espadachín— eres bastante resistente— dijo Kisame aplicando muchas más fuerza, la cual logró por fin vencer la dureza de la marioneta, un crujido mucho más fuerte se escuchó y Sasori rápidamente tuvo que salir, para evitar ser aplastado.

— ¡Daaanaaa! —gritó Deidara al ver como la marioneta se partía en dos, se preocupó y aunque su cuerpo no le respondía del todo se fue hacia ellos— ¿A dónde vas? —preguntó Neji, viendo como formaba una figura de arcilla y la lanzaba hacia Kisame— ¡Haaa! — grito viendo como el agua brotaba por todos lados, mientras el cuerpo de Kisame volaba por los aires desmaterializándose en gotas de agua.

— ¿Qué? —cuestionó parando en seco, Kisame apareció tras él atacándolo con la espada— tus bombas también son bastante molestas— le dijo, Deidara trató de esquivarlo pero su cuerpo aún permanecía entumido, se movió un poco, pero Samehada logró impactar con su cuerpo rasgando parte de su hombro y espalda, Deidara empezó a sangrar y cayó increíblemente debilitado, Kisame estuvo punto de darle el golpe final cuando sintió que algo le impedía moverse; de nueva cuenta eran los hilos de Sasori que aunque no lo detuvieron por mucho tiempo, si le había dado el tiempo suficiente a Shisui para ir a rescatar a Deidara, mientras Itachi le daba un golpe en el estómago para alejarlo de ellos.

Neji bajo del ave, cuando sintió y vio como comenzaban a deformarse cayendo al mar como un pedazo de masa flotante.

Sasori e Itachi se reunieron con Shisui, quien auxiliaba a Deidara —Deidara… ¿estás bien? —cuestiono Sasori observándolo de reojo.

—S-si, huh— respondió aguantando el dolor— cuando me golpeó con su espada sentí que al mismo tiempo se robaba mi chakra, me debilitó en segundos tengan cuidado— informó agarrándose el brazo afectado, estaba demasiado cansado y sentía como poco a poco su cuerpo se debilitaba.

—Eso es porque Samehada devora chakra— contestó el Mizukage que recién se reunía con ellos.

—Ahora entiendo porque corto mis hilos de chakra tan fácilmente— exclamó Sasori sonriendo de medio lado.

—Ese traidor— pronunció Yagura— asesinó al líder de los 7 espadachines de la niebla, únicamente para robarse a Samehada, la espada más poderosa de las siete.

Kisame comenzó a reír sin dejar de mostrar sus afilados dientes, sus ropas estaban rasgadas y su cuerpo mostraba heridas que habían parado de sangrar — Eres mucho mas cruel de lo que dicen, y me parece irónico que hable de traición Mizukage sama — esto último derrochaba sarcasmo— cuando fue usted quien mandó a Fuguki sama a asesinarme por seguir sus propias órdenes— pronunció con cierto rencor en su tono de voz. Itachi y Shisui se vieron entre sí, algo similar habían vivido.

— ¿De qué hablas?— cuestionó el Mizukage con molestia — yo no ordené absolutamente nada,

—Esa es la típica excusa que ponen todos los que están arriba para librarse de sus culpas, yo al menos admito que si los asesiné, fuera parte de la misión o no, lo hice, pero ustedes pretenden limpiarse las manos para quedar bien frente a las demás naciones utilizando a los shinobis como escudo para tapar sus propios crímenes y lo podrido que están los sistemas de las aldeas, para luego como cobardes mandarnos al matadero y así dar la impresión de manejarse bajo un gobierno "lleno de rectitud y transparencia" — Itachi y Shisui se sintieron profundamente identificados con las palabras de Kisame, aunque no podían decir que todos los altos mandos de Konoha estuviesen podridos, aun dentro de toda esa oscuridad siempre había alguien que brillaba con luz propia y era la esperanza a la que muchos se aferraban, incluidos ellos dos. A lo lejos había alguien aparte de ellos dos que comprendía a la perfección su rabia y su enojo. Esa persona apretó los puños y su furia se hizo mucho más grande, por lo que su nivel de pelea incrementó considerablemente

—Te repito, no sé de qué estás hablando, yo no le di esa orden a Fuguki.

—Pues eso fue exactamente lo que me ordenó, y después de ello trato de asesinarme según tengo entendido, bajo sus órdenes, pero como puede ver no lo logro.

Yagura paró, y volvió a su forma original, haciendo que más de uno se sorprendiera— Kisame, tu historial como ninja mostraba que habías sido leal a la aldea, hasta este momento, no tendría por qué ordenar tu asesinato, si no fuese por algo realmente grave—su voz resonó en lo más profundo de sus branquias— te repito yo no ordené el asesinato de tu escuadrón, ni mucho menos el tuyo, si Fuguki actuó por cuenta propia, tarde o temprano sería condenado a muerte lo hubieses asesinado o no, pues no me gusta que me desobedezcan, jamás tolerare que actúen por cuenta propia sin consultarme antes y más cuando eso implica seguir manchando el nombre de nuestra aldea. cuando entre al poder, decidí cambiar la imagen de Kirigakure a la de una aldea mucho más amable, ese es, era y sigue siendo mi objetivo, por lo que cualquier persona que interfiera será eliminada—la seguridad de sus palabras no dejaba cabida a las dudas, hablan sin titubeos, los Uchihas, Sasori y Deidara, nunca habían escuchado tanta determinación por parte de una persona que se consideraba sumamente imperiosa— sin embargo, pareciera como si el destino se empeñase en seguir tiñéndonos de sangre— aquellas palabras salían desde lo más profundo de su corazón. Todos entendían perfectamente cómo se sentían y Kisame más que un desertor parecía un ninja dispuesto hacer cualquier cosa con tal de llevar a cabo con éxito una misión; un verdadero Shinobi, por otro lado Yagura no había resultado ser el sanguinario kage que todos pensaban que era, él realmente buscaba un cambio por el bien de su país, de su gente y sobre todo de su aldea y ese ideal congeniaba perfectamente con los objetivos de Akatsuki.

—Kisame— interrumpió Itachi— estamos formando una organización que traiga paz a todas las naciones, necesitamos a ninjas fuertes con habilidades increíbles y para mí, tú eres uno de ellos, por eso te pido que por favor te nos unas— confesó acercándose a él. Neji se encontraba a unos cuantos metros de ellos, pero podía escuchar sin problema todo lo que habían estado hablando. Kisame alzó una ceja, para él aquello era sumamente extraño.

—Esa era la propuesta de la que te hablé desde un principio, como verás no buscamos el dinero, ni tomar tu cabeza, si no tus habilidades como ninja.

—A cambio de tu cooperación, se les es entregado el perdón para poder realizar misiones por todos los países sin ser perseguidos, además de ser borrados del libro bingo.

—En tu caso Kisame— interrumpió el Mizukage— es la aldea quien debe pedirte una disculpa, ordenaré de inmediato que te eliminen del libro bingo y asumiré las consecuencias mis errores como tal— Kisame comenzó a bajar la guardia y observó a ambos Uchihas acercarse mucho más a él.

— ¿Que dices Kisame?—preguntaron al mismo tiempo viendo como el ninja los miraba aun con desconfianza.

—No te preocupes, si te unes… ten por seguro que Akatsuki jamás te traicionará— exclamó Itachi extendiéndole su mano mientras sonreía, a la vez que veía como Shisui colocaba un brazo en el hombro de Itachi y Sasori aparecía del otro lado de Itachi cargando a su compañero herido. Kisame colocó de nuevo a Samehada detrás de su espalda y estrechó su mano.

—Y yo… estaré apoyando a Akatsuki — intervino el Mizukage, en ese momento las cejas de todos se alzaron con sorpresa al notar su expresión; Yagura de la aldea de la niebla, el despiadado cuarto Mizukage "estaba sonriéndoles"

Con ello el acuerdo estaba hecho, Kisame era ahora un miembro de Akatsuki. El sol estaba a punto de salir, la lluvia había cesado al igual que los truenos, el cielo comenzaba a despejarse y del remolino solo quedaba un ligero oleaje.

Neji se distrajo un momento para ver con asombro la actitud de todos los Akatsuki, especialmente la de Itachi Uchiha, todo parecía ir mejorando cuando las máscaras que supuestamente habían derrotado, volvieron a levantarse, Neji sintió una presencia detrás suyo e inmediatamente activo el byakugan y observó que se trataba de una masa de chakra flotante, no obstante había algo más que aún no encajaba, utilizó su puño suave para cortar el flujo de chakra de aquel ente, pero en lugar de dañarlo, lo atravesó y se dio cuenta que era intangible, volteó a ver a Kakashi, quien había perforado el cuerpo de Kakuzu y lo vio caer al mismo tiempo que aquel ente frente a él lo hacía. Neji se había dado cuenta desde hace tiempo que dentro del cuerpo del ninja había mas de un corazón latiente, pero no lo había entendido hasta ese momento; no eran las máscaras, si no los entes el problema que debía exterminarse de raíz y a cada uno le correspondía un corazón con un tipo de chakra diferente.

Corrió lo más rápido que pudo para unirse a la pelea, al parecer de todos los presentes era el único que había descubierto su técnica, pero aun debía hacer una prueba, su intención era lograr golpear todos corazones al mismo para detener el flujo de chakra y ver que sucedía. Si caía, había descubierto la manera de vencerlo.

A lo lejos los demás Akatsuki y el Mizukage, veían como los entes se reanimaban, observaron al Hyuga luchar contra uno de ellos y también se sorprendieron cuando lo vieron atravesarlo sin hacerle daño alguno, en ese momento Sasuke, Gai y Kakashi luchaban contra el hombre de la cascada. Sonrieron al ver un plan de ataque tan efectivo; primero vieron a Gai aturdirlo con su feroz taijutsu pues a pesar de su fuerza física, la velocidad de Gai era superior, vieron como el cuerpo de Kakuzu golpeaba el agua hundiéndose varios metros y en cuanto salió apreciaron a Sasuke acercarse a él, dejándolo inmóvil con un genjutsu, Kakuzu empezó a resistirse y notaron con asombro como comenzaba a moverse, sin embargo antes de que pudiese liberarse, Kakashi lo atacó perforando su corazón con un chidori. La sangre de Kakuzu comenzó a brotar y cayó de rodillas en el agua. Luego vieron que el ente que recién había atacado Neji colapsaba misteriosamente. Tras ello lo vieron correr a toda velocidad hacia donde Kakuzu se encontraba y se lanzó al ataque.

Neji aprovechó el momento para realizar su jutsu de 64 palmas asegurándose de cerrar todos los puntos de chakra— cuatro, ocho, dieciséis, treinta y dos, sesenta y tres— pronuncio, y de inmediato los entes de las máscaras cayeron, Sasori, Itachi, Kisame y Shisui, miraron extrañados el hecho, hasta que voltearon y vieron al Hyuga en acción, quedándose impresionados de la rapidez de sus movimientos. En ese momento Itachi recordó las palabras de Hinata "él está capacitado para realizar ese tipo de misiones" y entendió porque. Su jutsu era impecable y letal. Sin embargo cuando estuvo a punto de cerrar el último punto de chakra vio como Itachi Uchiha se interponía, ya no podía detenerse—sesenta y cuatro —terminó, golpeándolo de lleno.

— ¡Itachi!— exclamo Sasuke preocupado, Neji no hizo más que abrir los ojos ante la repentina acción.

—U- Uchiha— pronuncio viendo su gesto de dolor— ¿Por qué?— cuestiono confundido.

Itachi tosió un poco se sangre para luego desintegrarse— lo necesitamos en la organización— pronuncio acercándose a ellos. Era evidente que había utilizado un clon de sombra. Todos los demás se vieron entre sí, observando como a pesar de los golpes del Hyuga el hombre de la cascada se ponía de pie.

—Kakuzu—pronuncio Shisui — eres un ninja extraordinario, tu jutsu, tu fuerza, hicieron que Itachi te considerara para ser miembro de Akatsuki y no lo culpo, sería bueno para nosotros que te unieras,

Kakuzu se levantó y los miró con desconfianza, una vez ya había sido traicionado por personas que decían llamarse sus aliados, — además—continuó Shisui— todos ellos, ahora son ex criminales, por lo que su cabeza ya no vale absolutamente nada, ahora son miembros de Akatsuki que han sido perdonados y pueden viajar a través de todas las naciones con total libertad, siempre y cuando presten su fuerza para protección de otros—el ninja comenzó a reír

— ¿Por qué debería unirme?—pregunto sin dejar de reír. — No me interesa ni el bienestar ni la destrucción de las naciones— exclamo sin dudar. Shisui sonrió, se colocó a un lado de él y le dio una palmada en la espalda, mientras todos lo miraban incrédulos, Shisui a veces era demasiado atrevido y confiado, especialmente cuanto el tipo le había dicho de antemano que no le interesaba su propuesta.

—Porque te ofreceremos, una vida sin persecuciones, casa, comida y lo más importante… una remuneración económica considerable por cada una de tus misiones, si sabes a lo que me refiero— pronuncio frotando su dedo pulgar contra el índice y el medio. Kakuzu inmediatamente supo que se trataba de dinero.

— ¿De cuánto estamos hablando? — para Kakuzu era importante conocer el monto. No aceptaría cualquier cosa.

—No te precipites, ya lo hablaremos en su momento— pronunció Shisui sin alejarse de él— la aldea de donde provienes no es una de las más importantes y por lo que sabemos carece de kage, pero si tienen un líder al cual debemos pedirle tu indulto para que posteriormente se te borre del libro bingo y puedas acceder a los demás países sin problemas.

Kakuzu rió de nuevo, mientras Shisui lo veía un tanto confundido— A toda esa bola de traidores ya los asesiné hace mucho tiempo—comentó, llamando la atención de Itachi.

— ¿Traidores? —cuestionó intrigado. Al parecer la palabra traición estaba de moda en ese momento— ¿Por qué no nos cuentas?, quizá podamos ayudarte— Kakuzu lo vio en silencio tratando de comprender su comportamiento. Apenas unos segundos antes estaba combatiendo a muerte contra su equipo.

—Anda— interrumpió Shisui dándole otra palmada en la espalda— confía en nosotros.

Kakuzu sonrió tras su máscara, le parecía sumamente irónico y hasta absurdo que ninjas de la hoja fuesen los que ahora le querían ayudar— ustedes dos— pronunció señalando a Shisui e Itachi— se parecen mucho a un viejo "amigo"— expresó cerrando los ojos— y esa persona es por mucho la más fuerte a la que me he enfrentado en toda mi vida, la fuerza de ese ninja me condenó.

— ¿De quién se trata? — cuestionó Shisui, Kakuzu lo volteo a ver. No tenía caso seguir ocultándolo.

—Hashirama Senju— confesó sorprendiendo a todos los presentes.

Itachi, Shisui , Kakashi , Gai, Sasuke y Neji se vieron entre sí. Sabían que Hashirama había existido hace más de 100 años, de hecho debían remontarse a los inicios de la aldea, al final de la primer guerra shinobi, cuando Uchihas y Senjus firmaron el acto de paz, ¿cómo era posible que alguien como él siguiera con vida y con una apariencia tan joven?

— ¿Hashirama Senju?, ¿el primer hokage? — le preguntó Sasori sin poder creerlo, estaba mucho más impactado que los demás, de todos era quizá quien más conocía de su historia. En cierta punto había escuchado por Orochimaru, su antiguo compañero de prácticas, sobre la historia de un ninja tan longevo que había luchado contra el primer Hokage y que continuaba con vida— entonces… no me digas que tú eres….— paró, seguía sin poder creerlo, la historia sobre la inmortalidad de la carne era real, lo estaba comprobando con sus propios ojos— el ninja que robó el jiongu — exclamó abriendo mucho sus ojos, todos voltearon a ver al pelirrojo que parecía no salir del shock— no puede ser…

— ¿Sasori? — le preguntó Itachi, nunca lo había visto actuar de esa manera, era algo demasiado insólito e inusual en él.

—Itachi, Shisui, él es el legendario ninja que se enfrentó al primer Hokage, Kakuzu, el inmortal de la cascada— todos voltearon a verlo, ahora entendían porque a pesar de los golpes no había muerto. Kakashi, Shisui e Itachi, estaban particularmente sorprendidos ante la declaración del pelirrojo. Algo habían escuchado sobre ese rumor, pero estaba prohibido sacar el tema a colación, estaba totalmente restringido para cualquier ninja que no fuese el Hokage o el consejo de ancianos

— ¿Cómo sabes eso? — preguntaron los tres

—Orochimaru— interrumpió Kakuzu, haciendo que Sasori asintiera. No era para nada extraño, después de todo Orochimaru era un sanin, compañero de Tsunade Senju; la nieta del primero y discípulo del tercero quien a su vez había sido discípulo de Hashirama— Tú, Orochimaru y yo, no somos tan diferentes, los tres experimentamos con humanos, ¿no es así?... asesino del tercer Kazekage — Sasori sonrió de medio lado— tienes más de treinta años y luces mucho más joven que cualquiera de ellos— los ninjas de Konoha voltearon a ver a Sasori; apenas se habían dado cuenta de su verdadera apariencia; piel blanca, ojos color miel, pelirrojo y una cara que pareciera haber sido tallada por los mismo ángeles. "Sasori dana" pensó Deidara entreabriendo los ojos para poder verlo solo por unos segundos.

—Digamos que… me quedé en mis veinte— contestó burlonamente. El Mizukage volteó a verlo. Era sumamente contradictorio que Kisame con esa apariencia fuese menos peligroso que el pelirrojo, estaba claro que las apariencias engañaban.

—Entonces—hablo Shisui retomando el tema— ¿Qué paso después de tu lucha contra el primero?

—No me digas— interrumpió Kisame, riendo sínicamente— te dieron la espalda ¿no es así?

—Parece que sabes mucho del tema—respondió sin dejar de mirarlo. Había escuchado toda su historia.

—Digamos que…sabía— dijo observando de reojo al Mizukage.

— ¿Entonces? — cuestionó Sasuke.

—Mi misión era robar el Mokuton del primero, los líderes de la aldea me ordenaron que lo hiciera. Yo confiaba mucho en mis habilidades, pero en aquel tiempo, no era inmortal y Hashirama tenía una habilidad increíble para regenerarse de las heridas y me venció, además de eso, me dio la oportunidad de vivir— confesó viendo a Itachi— yo regrese a mi aldea y cuando lo hice, lo primero que hicieron fue humillarme y castigarme, por haber sido derrotado, sin siquiera importarles quien era mi rival y que estaba arriesgando mi propia vida, me encarcelaron y golpearon, haciendo que empezase a sentir un odio hacia todos los involucrados, yo tenía una esposa e hijos en quien penar en ese momento y amenazaron con dañarlos, fue entonces que tomé la decisión de matar al carcelero y al líder junto a todo su consejo y antes de huir robé el jutsu prohibido de la aldea, para convertirme en un traidor. Eso es todo.

—Lo sabía, siempre son los de arriba quienes terminan siendo los más sucios criminales— expresó con ironía haciendo que el Mizukage bufara.

—Ya te dije que arreglaré ese asunto— dijo con molestia cruzando los brazos.

—Kakuzu— habló Itachi— ven con nosotros, hablaremos con el tercer Hokage sobre tu situación.

—Así es — interrumpió Shisui— nosotros nos encargaremos de arreglar todo, estoy seguro que podemos solucionarlo, ¿Qué dices? — Kakuzu lo vio de reojo. Comenzaba a sentir una extraña sensación de compañerismo.

—Está bien, acepto— respondió— pero que quede claro que solo lo hago por el dinero.

Shisui rió y volteo hacia sus compañeros —chicos de ahora en adelante él es Kakuzu de Akatsuki— pronunció guiñándoles un ojo, Gai levantó el pulgar y Kakashi lo vio con desdén. Itachi sonrió ofreciéndole su mano y justo en ese momento el sol salió completamente.

—Oigan— pronunció Deidara— ayúdenme— terminó desvaneciéndose, afortunadamente Sasori aún lo sostenía—Tshhh— masculló.

—Toma— escuchó la voz de Sasuke— quien traía consigo las partes de Hiruko. Itachi sonrió, pues el gesto de su hermano era un gran avance. Sasori lo vio de reojo y formó una ligera sonrisa— te lo agradezco — Sasuke lo imitó ayudándolo a sostener a Deidara.

—Necesitamos que atiendan a Deidara— dijo Itachi.

—La aldea está muy lejos, lo mejor es continuar avanzando hasta llegar a los bosques del país del fuego— pronunció el Mizukage, todos asintieron pues por el momento era lo más sensato que podían hacer. Desafortunadamente ya no podían contar con Deidara, por lo que les tomaría aproximadamente poco más de seis horas llegar a la orilla, no obstante llegar a la aldea de la niebla a pie les llevaría trece horas— En los límites del bosque hay una pequeña aldea, ahí podemos llegar para que atiendan a Deidara y podamos descansar un poco.

—Mi- Mizukage sama, ¿vendrá con nosotros? — cuestionó Shisui impresionado.

—Si— respondió, había dejado a Ao a cargo de la aldea y confiaba en él, además quería reunirse con el tercer Hokage para aclarar de la forma correcta la situación de Kisame — como ustedes saben a Kisame no se le entregara un perdón, porque no existe un crimen que perseguir, he leído el acuerdo de Akatsuki y sé que el ninja en cuestión pasa a ser parte de la organización, yo necesito aclarar ese punto con Sarutobi— exclamó haciendo que Itachi y Shisui asintieran. Entendían que la situación era muy diferente a la de Sasori y Deidara.

Todos necesitaban reponer fuerzas, pero no podían hacerlo y menos en medio del mar, por lo que tuvieron que continuar avanzando a pesar de las heridas de algunos y el cansancio de todos. Les esperaba un largo viaje.

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El sol se asomaba de nuevo, eran las diez de la mañana, cuando entreabrió los ojos, se sentó, llevo una de sus manos a su nuca moviéndola de un lado a otro, sentía su cuerpo entero dolerle, moretes en casi todo su cuerpo, cansancio generalizado, se sentía como si literalmente le hubiese caído una roca encima. Observó su alrededor y abrió los ojos con sorpresa, "estaba en el clan Hyuga" bajó inmediatamente y vio a su hermana y a su padre tomar el desayuno.

—Buenos días Hanabi chan, Otou san—pronunció haciendo una reverencia.

—Buenos días— dijeron los dos al mismo tiempo.

—Me enteré que has decidido ingresar a los exámenes chunin—dijo Hiashi mirándola fijamente. Hinata tragó saliva, odiaba ese efecto que su padre tenía sobre ella, aagh, detestaba tener que temerle la mayoría del tiempo.

—Si— susurró.

—Es una buena idea, un Hyuga no puede quedarse como un genin eternamente, es una vergüenza— Hinata agachó la vista, su padre… ¿no podía simplemente dejarlo ahí?, ¿Cuál era su necesidad de recalcárselo?

—Gracias, si me disculpan, debo retirarme— pronunció colocándose sus zapatos.

—Hinata, ven en la tarde, para que continúes con tu entrenamiento— ella asintió aunque su cuerpo le dolía demasiado, pero, nadie le dijo que obtener fuerza era fácil, se ganaba a base de esfuerzo, mucho entrenamiento y sacrificio, entonces debía dejar a tras sus propias debilidades y comenzar a ser una mujer más fuerte no solo mentalmente si no físicamente.

—Iré a cambiarme de ropa y vuelvo —pronunció indicando el estado en el que se encontraba; ropas rasgadas (que no mostraban nada), pero sí muy sucias— los Hyuga asintieron.

—Antes de que te vayas, desayuna algo— pronunció Hiashi, Hinata sonrió, se nuevo se quitó sus zapatos y se sentó a comer con ellos. Hacía mucho tiempo que no desayunaba con su familia.

Cuando terminó de comer, se fue directamente a "su casa", por primera vez estaba feliz de regresar a pesar del buen momento que había pasado con su familia. Abrió la puerta de aquella solitaria casa, tomó algo de ropa y se metió a bañar, cuando terminó de arreglarse, vio el reloj y notó que pasaba de medio día. Fue hacia la cocina y paró esbozando una sonrisa; aún seguían donde mismo las tazas que Itachi había dejado encima del mueble hace más de dos días, ¿debía levantarlas? O esperar a que él regresara para que terminara de preparar el café que le prometió.

Al final optó por dejarlas donde mismo y se paró frente a la puerta de la habitación de él, no sabía si era correcto entrar e invadir su privacidad, pero por alguna razón necesitaba hacerlo. Después de una pelea mental giró lentamente la perilla y abrió poco a poco la puerta, se quedó parada en el marco observando lo vacío que estaba y entendió a qué se refería Itachi. Abrió los cajones sintiendo que estaba cometiendo un delito y se dio cuenta que estaban vacíos. Inmediatamente pensó… ¿que no había ido por su ropa? , si se ponía a recordar, el día en que habían ido por sus cosas al clan Uchiha, Itachi únicamente había salido de ahí con… prácticamente nada. Hinata cerró el cajón y se fue a acostar a su cama, abrazó la almohada, cerró sus ojos y dejó que su perfume la volviera a envolver, luego recordó que debía ir a entrenar con su hermana y giró hacia el pequeño buró que estaba junto a ella, notó algo que brillaba y se levantó para ver de qué se trataba, se entristeció un poco cuando vio que era la argolla de matrimonio, no podía culparlo ni reprocharle nada mucho menos cuando ella misma se la había quitado la misma noche de su boda. Es más si no fuese porque había visto la de él, ni siquiera se hubiese acordado de la suya.

Rápidamente se levantó y se fue a su habitación, abrió uno de sus cajones, sacó una pequeña cajita, la abrió para apreciar su belleza, la tomó entre sus dedos y se colocó de nuevo su argolla. Acto seguido salió del clan Uchiha, aún más decidida que ayer a vencer a su hermana menor.

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x-x-x

Eran las dos de la tarde, ya habían llegado a la pequeña aldea, en donde Deidara estaba siendo atendido. Estaban comiendo, Itachi estiró su brazo izquierdo para tomar el salero y en cuando lo hizo recién notó que había olvidado colocarse de nuevo su anillo. Las cosas habían resultado tan complicadas que ni cuenta se había dado de ello. Miro al frente y se dio cuenta de la cantidad de personas que estaban ahí, anteriormente eran solo los tres Uchihas quienes realizaban ese tipo de misiones, ahora eran diez hombres dentro del equipo; siete de ellos (incluyéndose) verdaderos Akatsuki, uno que estaba próximo a ingresar y dos jounin de la hoja que eran el primer equipo de apoyo de la organización. Definitivamente nunca esperó verse rodeado tan rápido de ninjas con tantas habilidades y estaba ansioso por continuar con su búsqueda, el solo hecho de pensar que allá afuera existiesen ninjas con quien sabe qué tipo de habilidades sumamente extrañas, le parecía fascinante.

¿Era pura coincidencia o parte de su destino haberlos reclutado? Tenía dentro de su vida;

-A dos Hyuga bajo su cargo.

- A dos artistas que habían actuado por locura y…

- A dos verdaderos shinobis traicionados, que habían sido tratados como traidores cuando en realidad, solo cumplían con su misión.

¿Con que otra cosa, podría encontrarse a futuro?

CONTINUARÁ…

Hasta aquí el capitulo, de nuevo, perdonen mis errores, pero mis ojos fallan cuando reviso y al final termino dejando otros que mi cerebro ignoró por completo.

Ya saben dejen sus reviews, saludos...