LOS PERSONAJES DE NARUTO NO ME PERTENECEN SON PROPIEDAD DE MASASHI KISHIMOTO.

Aquí empieza el segundo digámoslo así, arco de esta historia.

.

.

Eres tú, eres todo lo que veo

Oooh, me haces vivir ahora cariño

Oooh, me haces vivir

Eres el mejor amigo

Que alguna vez tuviera

He estado contigo mucho tiempo

Eres mi luz del sol

Y quiero que sepas

Mis sentimientos son verdaderos

Realmente te amo

Eres mi mejor amigo

Tu me haces vivir cariño, tu eres mi mejor amigo.

.

.

Capítulo 21: Eres mi mejor amigo / You are my best friend.

.

Aún sentía el calor de su cuerpo, todavía estaba oscuro, no amanecía del todo. Su brazos eran contenidos por el suave abrazo de él que dormitaba plácidamente frente a sus ojos : su respiración serena y calma que nada tenía que ver con la de horas antes, era hermoso observarlo en silencio y estar tan cerca, el contacto entre sus cuerpos todavía desnudos incrementaba la dicha que sentía en ese momento: era suya, se había entregado a ese hombre que nunca estuvo en sus pensamientos, que ni siquiera enterada estaba de su existencia, del hombre al que de un principio renegó tanto y deseo por un momento desapareciera de su vida, a ese hombre que únicamente se atrevió a fantasear en primera instancia solo por su físico y no por amor ni pensó jamás amar. Ahora le pertenecía, le había permitido explorar cada rincón de su cuerpo y disfrutar de él tanto como ella había disfrutado del suyo.

Después de tantas lágrimas, enojos y frustraciones había experimentado el amor, amaba al hombre que poco a poco le robó el corazón.

Su cuerpo estaba aliviado después de todo ese tiempo, por fin había podido liberar esa tensión sexual que la atormentaba desde hace meses, esas ganas que tenía por tenerlo y sentir su piel, sus labios devorando los suyos y escuchar su agitada respiración. Ya no, ya no eran fantasías o sueños lujuriosos ni nada por el estilo, todo había sido completamente real, tan real como el amor que le tenía.

Solo esperaba que no amaneciera pronto porque él se iría de su lado y aunque trabajaba a escasas cuadras no quería apartarse ni un segundo de él. Uno de sus brazos pasaba por debajo de la nuca de él y el otro debajo de uno de los suyos, se acercó más a su cuerpo aferrándose fuertemente a su espalda para poder esconder la cabeza en su pecho e inhalar su aroma. Así se mantuvo buen rato en esa posición.

Después buscó sus labios y los besó suavemente cuidando que ningún movimiento torpe de parte suya interrumpiera su sueño. Era de ella, ese hombre por quien suspiraba ahora, lo era todo; confidente, amante y amigo, quien realmente la hacia vivir.

Estaba consciente que, para un ninja de su rango dormir era fundamental y no quería despertarlo, dejaría que descansara lo más que pudiera porque tenía muchas responsabilidades. Lo vio por última vez y se apoyó en su pecho otra vez, se dejó llevar por el calmo ritmo de los latidos de su corazón y poco a poco se quedó dormida.

Cuando abrió los ojos de nuevo, el sol pegaba directo en su rostro, dejó de sentir su calor y a su lado vio solo un montón de sábanas, miró el reloj y faltaba media hora para las ocho de la mañana. Hinata se levantó tapando su cuerpo con aquellas telas blancas y comenzó a vestirse lo más rápido que pudo. Salió de la habitación y lo vio sentado en la mesa disfrutando de una taza de té, mientras sostenía el periódico.

Hinata se detuvo de pronto y comenzó a sentirse muy avergonzada, no sabía como se relacionarían de ahora en adelante, ayer por la noche tuvo el valor de confesarle prácticamente que deseaba hacerlo con él, pero para ese momento sus piernas temblaban y no sabía si podría mirarlo a los ojos después de lo que había sucedido- Hinata san- escucho sintiendo que el mundo se le caía encima- ven- sus piernas no respondieron, se quedó pasmada viendo hacia el suelo. Itachi dejó el periódico en la mesa y se levantó un tanto mareado yendo hacia donde estaba ella- ¿qué pasa?- pregunto sin detener la marcha, ella tragó saliva poniéndose cada vez más nerviosa conforme lo sentía más cerca. Itachi por su parte entendía la situación, no era fácil asimilar que tu primera vez hubiese sido con un hombre al que no habías elegido por voluntad propia y con el que apenas comenzabas prácticamente a llevar una relación más formal. Además sexo y amor eran dos cosas totalmente diferentes y lo que el había visto en sus ojos en primer lugar había sido una mirada cargada de deseo más que otra cosa- Te- tengo que ir al baño- pronuncio intentado escapar de la situación, pero el Uchiha alcanzo a tomar su mano- de acuerdo, pero ya debo irme a la comandancia , ¿podrías antes, darme un abrazo?- cuestiono, Hinata quien se encontraba dándole la espalda se paralizó negándose a dar la vuelta - por favor- suplicó. Hinata agacho la mirada y lentamente volteo hacia él - No Itachi san, jamás vuelva… vuelvas a… pedírmelo de esa manera- se sintió muy mal, no tenía por qué rogarle por muestras de cariño, no él, no Itachi "maldita vergüenza"

-De acuerdo- respondió, tomándola del rostro para verla frente a frente- pero solo si tú me prometes dejar de sentirte avergonzada- respondió.

-Itachi san… es que…n-no no es usted, soy yo…

-Lo sé Hinata, eres una señorita de familia, poco te hablan de ello, no es secreto que para muchas familias sea un tema tabú, realmente lo comprendo, pero lo que sucedió anoche- ella enrojeció mucho- fue maravilloso, no te avergüences de ello, es algo completamente normal y como te dije desde un principio nunca voy a hacer nada que tu no quieras- Hinata sonrió y se abalanzó sobre él, lo apretó muy fuerte, tanto que por un momento Itachi sintió que le faltaba el aire- Nos vemos más tarde- concluyó dándole un beso en la frente antes de salir por la puerta.

Hinata se maldijo internamente por su actuar, ¿por qué no podía dejar a un lado su estúpida timidez y empezar a vivir sin miedo su nueva vida?

Apenas unas horas antes estaba completamente desnuda dormida en su cama, abrazada de su cuerpo también desnudo y ahora cuando debía ir a besarlo después de una noche maravillosa como había dicho, lo único que había demostrado era ser una niña inmadura, miedosa y torpe.

"Basta ya Hinata" se dijo internamente, tenía que cambiar y debía ser ahora. Con prisa giro la perilla de la puerta y la abrió, lo vio doblar la esquina de su casa - ¡Itachi san! - gritó haciendo que voltearse y detuviera su paso. Itachi comenzó a caminar de vuelta y ella hacia él, hasta que se encontraron en un punto medio- ¿sucede algo? - preguntó despreocupado.

-Nada-respondió ella rodeando el cuello de Itachi con sus brazos, a lo cual él reaccionó con una sonrisa-solo olvide decirte, que te vaya bien en el trabajo-dijo para acto seguido acercarse a su rostro y besarlo, pero la diferencia de altura no se lo permitió, Itachi notó de inmediato como se colocaba de puntitas y rio, ella lo miró desconcertada y él en lugar de agacharse para facilitar el alcance la tomó por la cintura y la elevó hasta que sus caras estuvieron frente a frente, fue en ese momento que aprovechó para besarlo lenta y delicadamente, sus manos acariciaban su rostro mientras las de él continuaban sosteniéndola. Al poco tiempo él comenzó a bajarla y lentamente se separaron-muchas gracias - pronunció agitado mientras acariciaba una de las mejillas de Hinata y luego se fue.

Cuando Hinata entró de nuevo a su casa flotaba en las nubes, actuaba como lo que era en ese momento, una adolescente enamorada, aunque ante la sociedad era una señora. Se quedó un rato parada detrás de la puerta, repitiendo en su mente ese último beso al mismo tiempo que acariciaba sus labios, luego fue a su cuarto, tomó una toalla limpia y se metió a bañar, pues esa noche prepararía una cena especial para ambos.

Caminó por la aldea hasta llegar al mercado Uchiha, tomó unos cuantos tomates, y vio con curiosidad una manzana, "preparare una tarta" pensó feliz, pero – Miren, miren, miren a quien tenemos aquí-escuchó una irritante, desagradable y chillona voz familiar y rodó los ojos.

.

.

Itachi llegó a la comandancia paso frente a todos a paso veloz sin siquiera decir palabra alguna. El de la arena, quien estaba detrás del mostrador, en completo silencio lo siguió con la mirada mientras uno de los chicos lo saludaba de forma vana– Hola Itachi como estas…-¡PAFF! resonó en la recepción -¿Uh?- expreso Deidara con una gran mueca en su rostro, viendo como se encerraba en su oficina- ¿alguien sabe que le pasa?.

-Ni idea- respondió Kisame que recién entraba- Intente saludarlo allá afuera, pero paso de largo, ni me vio- levantó ambos hombros, luego la puerta se abrió de nuevo.

-Oye, um, sabes ¿Qué le pasa a tu hermano?

- ¿A Itachi? - levanto ambas cejas en sorpresa- No, ¿Por qué?

-Entro como bala sin decir palabra alguna, luego se encerró en la oficina.

- ¿Y eso tiene algo de malo? - conocía a su hermano, sabía que en ocasiones solía hacer algo raro y en realidad aquello era un hábito bastante frecuente- acostúmbrense, se pone así cuando tiene mucho trabajo.

-Y se pondrá peor- todos voltearon con Sasori - ¿Por qué? -preguntaron al unísono, mientras Itachi suspiraba en señal de cansancio observando pilas de papeles sobre su escritorio que tenía que revisar, firmar y sellar una por una. Caminó hasta sentarse detrás de su escritorio y comenzó a trabajar.

-Entiendo-respondió Sasuke- ¿y Shisui?.

-Esta con el Hokage, mañana se llevarán a Hidan y están preparando su extradición. Kakuzu está con él, porque considera que hacer un viaje hasta Sunagakure, será demasiado costoso, está tratando de convencerlos que sería mejor ir en una de las aves de Deidara, pero Shisui considera que llamarían demasiado la atención-Sasuke arqueo una ceja- insistió

-Ese tacaño- dijo Kisame. Luego todos volvieron a sus labores.

.

.

- ¿Qué haces aquí Hyuga?, creí haberte dicho, que no eras bienvenida…! lárgate!-reía altaneramente aquella Uchiha, Umai, junto a sus dos compinches. Hinata la miró de reojo y continuó con sus compras, colocó la manzana y otras tantas dentro de su cesta y posteriormente se fue hacia donde estaban los condimentos. La chica enfureció, apretó los puños y la siguió- ¿Qué no

oíste? - continuó con su acoso y Hinata sabía de antemano que lo que quería era provocarla, lo había intentado antes, lo estaba intentando ahora y seguramente continuaría insistiendo, pero lo que aquella "estúpida" no sabía era que ya no aguantaría más, esta vez se defendería de ser necesario.

-Lo siento…- pronunció de espaldas haciendo que la otra sonriera sintiéndose victoriosa.

-Así me gusta Hyuga, que sepas quien manda aqu…

-No tiendo tu cacareo- terminó. Las mujeres detrás de la tal Umai se vieron entre sí y se llevaron una mano a la boca.

-Te crees muy lista pero yo…

-Mas que tu, si-interrumpió de nuevo viendo despreocupadamente las especies – UUUUUU- aullaron las demás moviendo ambas manos de un lado a otro a la altura de sus mejillas, alimentando de esta forma el coraje de la mujer, quien apretaba los dientes y respiraba entrecortadamente -calma- susurro solo para si, respiro hondo sonrió y caminó hasta pararse delante de la Hyuga, ya que continuaba dándole la espalda como si no estuviera ahí. Ignorándola por completo. La Uchiha sonrió de medio lado viendo como Hinata cruzaba sus brazos- Si fueras inteligente Hyuga, jamás habrías aceptado el arreglo, mira que venir a un clan en donde jamás serás bienvenida ni reconocida como miembro, eso si que es un acto muy estúpido -sonrió con arrogancia

-Me tiene sin cuidado, lo que tú y tu banda de zopilotas piensen, además a nadie en este clan le importa mi vida, eres tú la única obsesionada conmigo, la que siempre está al pendiente de lo que hago y dejo de hacer- Hinata por primera vez la miró a los ojos con fastidio- aunque… te compadezco y entiendo que estes… celosa.

- ¿Yo celosa de alguien tan insignificante como tú?, ¡ja, por favor, no me hagas reír!.

-Ni tan insignificante, porque ya quisieras estar en mi lugar- la Uchiha comenzó a reír falsamente.

-¿Tu lugar?, si solo eres una intrusa, una parte de un acuerdo, ¿Quién querría ser una moneda de cambio?, por favor- pausó moviendo alrededor de la Hyuga- veamos; número uno, sé que siempre has sido la vergüenza de tu padre, ¡uy si que envidia!- se burló- dos; tienes esposo simplemente porque te casaron a la fuerza, de otra manera estarías tan sola como siempre, lo sabemos Hyuga, sabemos que si no es por ese acuerdo ningún hombre se hubiera fijado en ti; eres demasiado torpe, tonta y débil, dime… ¿Qué mujer te tendría envidia?-Hinata por primera vez apretó lo dientes- y tres; debe ser muy triste convivir con un hombre que no te ama- Hinata rio recordando lo que había pasado la noche anterior y la Uchiha levanto una ceja ante la duda que le generaba su reacción.

-Quizá, si sea triste, pero no lo es tanto como desear a un hombre que ni soltero ni casado te ha hecho caso- respondió retadoramente- Ser tú, sí que debe ser triste, pues sé que estas enamorada de mi esposo y que también debe ser triste no poder verlo todos los días, debe ser triste no poder besarlo y abrazarlo cuando se te dé la gana, debe ser triste no poder platicar con él todas las mañanas, tardes y noches, debe ser triste pensar que se duerme y amanece en la cama de otra mujer que no eres tú, debe ser triste no sentir sus labios besando y recorriendo cada centímetro de tu cuerpo, debe ser triste no amanecer en su cama después haberte hecho suya, después de haberte hecho el amor, después de sentirlo y tocar su cuerpo desnudo, debe ser triste no poder verlo encendido, ver la lujuria en sus ojos y que no seas tú la mujer que lo excita y desea, debe ser triste que no diga tu nombre entre gemidos, debe ser triste no escuchar su agitada respiración en la oreja, eso sí…que debe ser triste- Hinata sabía que había exagerado bastante en algunas cosas, pero la Uchiha la había sacado de sus casillas, no era nadie para reprocharle nada y sus últimas palabras sin duda la habían hecho enfurecer bastante. No sabía hasta donde o que problemas le podría acarrear aquello, pero sin duda alguna por primera vez disfrutaba haber tirado tanto veneno, pues lo disfrutaba en grande, la reacción y expresión que tenía la Uchiha en ese momento, no tenía precio.

-Puedes decir todo lo que quieras- contestó tratando de sonar lo más calmada posible, cuando por dentro la sangre le hervía y los músculos de su mandíbula apretaban tanto sus dientes que parecían romperse en cualquier momento

-Me importa muy poco si me crees o no.

-Ja, Itachi san, no se conformaría con tan poco- pronunció con veneno y sintiéndose de nuevo victoriosa, "¿Cómo contestaras Hyuga?, se preguntó, "¿diciendo de nuevo, no me importa?, patética"

Hinata vio de nuevo esa desagradable sonrisa, a la mierda la gentileza, esto era personal y no iba a retroceder, esa… "zorra" se lo había buscado. Por primera vez en su vida, sonrió de medio lado, imitando su altanería y en un tono sumamente despectivo –"si se conformara con poco, te hubiera elegido"- las entrañas de la Uchiha comenzaron a retorcerse, mientras las dos zopilotas se quedaban con la boca abierta. Para Umai, ya era oficial la guerra estaba declarada, no había marcha atrás, se dedicaría a destruirla y sabía perfectamente como empezar a hacerlo. Umai sonrió, haciendo que la expresión de la Hyuga se relajara un poco ¿Qué trama? se preguntó internamente.

-Pensé que eras tonta, pero jamás imaginé a que grado, de verdad crees que Itachi te quiere, jajajaja, ¿sabes que es más triste aun?... vivir engañada- le susurro al oído Hinata, solo movió la cabeza su cercanía le generaba asco, no dijo nada, pues estaba preparada para su patético contraataque- veamos si sigues pensado lo mismo cuando "ella" regrese a la aldea- Hinata entrecerró los ojos ¿ella?. Umai noto su reacción- ay,no me digas que no sabes sobre ella- dijo llevando una mano sobre su boca y haciendo como si estuviera sorprendida- tks…lastima- Hinata la vio en silencio y comprendió que era una de sus jugarretas, no caería- Bueno, si me disculpan, tengo que irme, pues "mi esposo" llega hambriento después del trabajo y lo voy a consentir- exclamo dándose media vuelta.

-Veremos si te sigues siento tan segura cuando Itachi vea de nuevo a Izumi san y te mande a la mierda-Hinata volteó de nuevo y sonrió- Me das tanta lastima.

-La que dará lastima serás tú.

-Itachi jamás me dejaría por esa tal Izumi, que seguro ni existe. De verdad inventa mejores historias, aburres.

-Claro, Itachi, jamás te dejaría por la única mujer a la que de verdad ha amado, ¿Por qué Itachi te dejaría para estar con la única mujer que "de verdad" ha elegido el mismo? -Hinata comenzó a apretar de nuevo los dientes. Sabía que quería hacerla enojar y aunque estaba consciente y trataba de ignorarla, esta vez no pudo ¿y si era verdad?, "no, no Hinata no le creas"- No es como que el mismo haya ido a comprar un anillo y le haya pedido matrimonio frente a todo el clan- Hinata se tensó, apretó los dedos de los pies para que la hiena aquella no se diera cuenta.

-No es como que le haya dolido tanto que ella lo dejara, como para que se desapareciera tantos años de la aldea-aquella frase, hizo dudar a Hinata, en parte porque hasta ella misma se había preguntado ¿Por qué siendo hermano de Sasuke nunca lo había visto hasta el día de la cena de compromiso? Itachi le había dicho una vez que había cosas que no podía decir, ¿sería sobre ella?- si claro, Itachi jamás te dejaría por la única mujer a quien le lloro tanto, por quien suspiro tantos años y por quien aún lo sigue haciendo-Hinata tragó pesado , su piel se erizo y sus sentimientos se mezclaron entre un profundo odio y miedo- Itachi san ama locamente a Izumi, es la única por la cual ha roto las reglas y se ha metido en problemas, imagina la sorpresa que se llevará cuando la vea de nuevo, seguro mandara al carajo el estúpido contrato entre clanes y se fugara con ella, tal cual lo hizo hace seis años, cuando ella estaba comprometida con otro chico e Itachi no dudo ni un segundo en robársela -sonrió maliciosamente al ver como la mirada desafiante de Hinata había cedido. Estaba logrando su cometido- sigue creyendo Hyuga que un hombre como Itachi se va a enamorar de ti y disfruta lo que te queda o más bien las miserias de afecto obligado que te da, si es que se le puede llamar así, porque en su corazón y su pensamiento siempre ha estado y estará ella- las demás chicas se quedaron viendo a su amiga, estaban boquiabiertas, jamás imaginaron que le diría tal cosa y temían las repercusiones que esto podría traerle.

-Umai, por favor, ya no sigas-le susurraron, pero ella no iba a terminar hasta desestabilizarla mentalmente- cuando Izumi vuelta e Itachi vea al amor de su vida, tu…serás historia, porque en este momento solo le sirves para… satisfacer sus necesidades como hombre y eso solo cuando no puede controlarse, porque le juro amor eterno esperando por su regreso -volvió a reír- no falta mucho para que regrese y cuando lo haga estaré en primera fila viendo como Izumi san con una mano en la cintura te lo quita- terminó con una sonrisa ladina y luego se dio media vuelta dejando a Hinata hecha un mar de dudas , "no, no es verdad" se decía internamente. "ella me odia y haría lo que fuera por molestarme" se decía internamente, pero al mismo tiempo le surgían las dudas y comenzaba a pensar si ese "no hare algo que tu no quieras" era un pretexto para no faltar a su palabra. Hinata terminó de agregar unas cuantas cosas en la canasta y camino de regresó a casa.

Había cosas que no sabía sobre Itachi, cosas que a sus ojos concordaban con lo que la sucia rata esa le había dicho, no quería dudar de Itachi, no ahora que…había sucedido por fin algo tan bonito entre ellos.

Hinata se quedó buen rato sentada en la mesa meditando y al final decidido que, si de verdad existía esa mujer y regresaba, la haría regresarse con las manos vacías, pues nadie, pero nadie le iba a arrebatar el amor de Itachi. Se había propuesto enamorarlo locamente a como dé lugar.

.

.

Tras unos cuantos minutos se sintió fatigado, recargó la espalda en el asiento y dejó caer su cabeza hacia atrás, observó sin motivo el techo y cerró sus ojos. En ese instante la imagen de Hinata viéndolo con esos ojos cargados de deseo invadió por completo su mente y se estremeció ligeramente cuando aún en el recuerdo sus dedos palparon parte de su anatomía, en sus huellas estaba grabada la suavidad de su nívea piel y el recorrido que hicieron desde su muslo, pasando por la curvatura de su cintura hasta situarse en la parte más superior de su espalda entre las escapulas. Todavía sentía como sus senos se aplastaban contra su pecho, aquellas masas blandas que por respeto no palpo ni saboreo para no invadirla demasiado y que no se sintiera tan incomoda. Sonrió pues a pesar que todo había sucedido en penumbra absoluta y que por ende no tuvo la dicha de ver ese cuerpo desnudo, por lo poco que se permitió al tacto Itachi supo que era hermoso.

Itachi abrió de nuevo los ojos, pero su visión era borrosa, sintió una punzada en la cabeza sintiendo que la temperatura de su cuerpo comenzaba a elevarse. Se levantó y fue al baño para mojarse la cara, sintiéndose culpable de haberla pensado de aquella forma, aunque extrañamente no se sentía para nada excitado ni nada por el estilo, volvió a su asiento y continuo con su trabajo.

-Hola- saludo Shisui en cuanto llego a la comandancia- ¿alguna novedad? - pregunto revisando el correo que estaba encima de la recepción.

-Llego esto- dijo Sasori- entregándole un sobre color amarillo- es para Itachi, pero ya tiene suficiente trabajo, asi que no quise entrar a su oficina- Shisui vio de reojo al pelirrojo – ya dime, ¿Qué ocurre? - Sasori sonrió de medio lado.

-A Itachi le pasa algo- Shisui se acercó más.

- ¿Cómo?

-Esta mañana, lo note algo raro, iba como tambaleándose y lucía un poco más pálido de lo normal

-Iré a verlo- dijo el Uchiha- acompáñame.

Después de un rato comenzó a sentirse mareado entre tantos papeles, debía ser cuidadoso con las peticiones y tener tacto al momento de rechazarlas, pero ya se estaba cansando. Le agrada que Akatsuki rápidamente se estuviera haciendo conocido, pero era demasiado molesto tener que revisar un montón de peticiones absurdas de las cuales bien podía hacerse cargo cualquier genin.

Itachi suspiro tras llevar poco más de dos horas sellando papeles con misiones "DENEGADAS"

-Hola- pronuncio Shisui entrando a la oficina y se agarró la cabeza - lo sé, son absurdas y nos hacen trabajar el triple-Itachi levantó una mano detrás de toda la montaña de papales en señal de afirmación – déjanos, te ayudarte pronunció tomando una pila del escritorio para poder verlo -¡oh, por kami, te ves fatal este día ¿qué te paso?! - cuestionó al verlo mucho más ojeroso de lo normal, se tocaba la sien y claramente veía como luchaba por mantener los ojos abiertos – te dije- escucho el susurro de Sasori

-Nada - respondió, y los dos entrecerraron los ojos.

-Si claro Itachi, apenas y puedes mantenerte despierto, te estas tambaleando y ni siquiera sabes lo que estás haciendo - pronunció el Uchiha viendo como firmaba el escritorio en lugar del papel -en serio, ya- le quito una taza antes que la estrellara contra el escritorio pensando que era un sello.

- ¿Um? - pronunció cuando sintió el jaloneo- supongo que estoy muy cansado.

- ¿Supones? -dijeron los dos arqueando una ceja, más evidente no podía ser.

-Itachi ve a casa y descansa, Sasori y yo nos ocuparemos de esto- Itachi negó.

-Tenemos mucho trabajo Shisui, ¿Qué paso con Hidan?

-Mañana lo llevaremos a Sunagakure.

- ¿A qué hora salimos?

- ¿Salimos? -cuestiono Sasori notando como poco a poco comenzaba a tener la vista perdida

-Oye, tus no iras a ningún lado amigo, no en esas condiciones-dijo Shisui.

- Shisui, solo estoy un poco cansado, en la noche me repongo, para mañana ya estaré mejor, estoy bien de verdad-pronuncio poniéndose de pie y cuando lo hizo sus piernas perdieron fuerza y de desvaneció

-Suficiente-exclamó Sasori-hay que llamar a un médico. Shisui en ese momento abrió la puerta y llamó a Sasuke- Dile a Sakura chan que necesitamos que venga-Sasuke lo miró confundido y cuando vio detrás de él abrió los ojos más de lo normal, su corazón se aceleró e intentó entrar, pero Shisui lo detuvo-Nii San que tie… - su tono denotaba preocupación observando como Sasori lo ayudaba a acomodarse en la silla- Pero Shisui.

-Tiene fiebre- dijo Sasori tranquilamente, tras colocar una mano en su frente.

-Ve Sasuke - le ordenó al ver que no se movía y este salió lo más rápido que pudo.

La chica de cabello rosado, se ruborizo un poco cuando vio a Sasuke fuera de su casa, miró hacia un lado llevando un dedo a su barbilla-Sasuke kun- decía avergonzada.

Sasuke ni noto aquellos ademanes, pues estaba realmente preocupado-Sakura, necesito que vengas - pronunció algo desesperado, cosa que no era muy común en él. Sakura por su parte salió del trance notando la expresión de su rostro, entendió que no era momento ni estaba ahí para coqueteos- ¿qué pasa? - exclamó con firmeza - Mi hermano no se siente muy bien, necesito que vayas a revisarlo - Dame un segundo, iré por mis cosas-respondió entrando de nuevo y en menos de un minuto salió. Sasuke inconscientemente y guiado por la desesperación de llegar lo más pronto posible, tomó la mano de la Haruno quien tembló un poco ante el inesperado contacto y se la llevó casi a rastras.

Cuando llegaron vieron a Shisui, Sasori y Fugaku con Itachi, quien ya se encontraba recostado sobre un sillón con una manta en su frente.

-No es necesario, estoy bien, supongo que fueron los tragos de ayer, es todo - habló y luego vio como Sakura soltaba la mano de su hermano y se dirigía hacia él mientras Shisui colocaba una mano en su hombro, Sasuke cerró sus ojos y sonrió, aquella acción era una de sus muestras de apoyo, pero cuando volteó a verlo notó como trataba de aguantar la risa, volteó hacía Itachi quien lo miraba con una ligera sonrisa en su rostro y luego a su padre quien con los ojos cerrados y los brazos cruzados trataba también de contener la risa, para rematar aquel idiota de pelo rojo también sonreía ladinamente y aunque no lo estuviera mirando a él, le molestaba ser el único que no sabía que sucedía dentro de aquella oficina.

Tras unos cuantos minutos y revisión de signos vitales- Sakura sacó con una receta y se la dio a Fugaku- Sus pulmones se escuchan congestionados como si se hubiera expuesto mucho al frío, esta deshidratado y su está muy agotado.

-Acababa de llegar de una misión con Shisui, después salió a otra y …-pauso viendo el monto de papeles que tenían enfrente…supongo que se ha extralimitado en sus funciones- respondió guardando la receta en uno de sus bolsillos.

-El exceso de trabajo le cobro factura, procura descansar lo suficiente Itachi san-dijo la pelirrosa guardando sus cosas.

-No se preocupen, estoy bien, ya me siento mejor, hay que terminar con esto- dijo tratando de sentarse para posteriormente ir de nuevo a su escritorio.

-Itachi san, te lo repito debes descansar- dijo Sakura tratando de impedir que se levantase, de pronto Sakura sintió como Sasuke le apartaba- Yo me encargo- respondió, empujándolo y haciéndolo caer de nuevo en el sofá- Escúchame idiota, ya te dijeron que debes descansar, así que has caso y deja de actuar de esa forma tan inmadura aquí muchos somos capaces de realizar tu trabajo, nada va a pasar si te ausentas unos días, baka- Itachi aun con la visión borrosa intento mirarlo fijamente, pero no pudo, agacho la cabeza – Nii san, no te preocupes deja que nosotros nos encarguemos del resto, ¿de acuerdo?- pregunto pero ahora de forma más calmada, casi dulce. Itachi sonrió y coloco una mano en el hombro de su hermano- gracias Sasuke- el menor se sintió extraño y movió la cabeza hacia un lado, haciendo un puchero con la boca. "Que lindo" pensó Sakura cuando observo en sus mejillas un ligero rubor. Estaba actuando de forma infantil, Sasuke estaba siendo el pequeño hermano menor en ese momento.

-Vamos, Sasuke hay que llevar a tu hermano a su casa- Sasuke asintió, y al poco tiempo los brazos de Itachi descansaban entre los hombros de su padre y hermano- estará bien -decían ambos al observar como todos por las calles se acercaban para ver que le pasaba y era completamente normal, pues hasta ese momento, nadie había visto a Itachi Uchiha enfermo.

.

.

Desde que había regresado de las compras se encerró en su cuarto. No quería pensar en lo que la tipa esa le había dicho, sin embargo, al mismo tiempo no dejaba de pensar en ello, sobre todo porque jamás le habia preguntado si él tenia a alguien mas y eso la hacia sentir sumamente egoísta. Se levanto de su cama en donde había permanecido mas de dos horas y se puso de rodillas para sacar algo debajo de su cama una caja en donde orillada por el dolor y el rencor había arrojado la fotografía en donde ambos posaban para la primera fotografía de recién casados, el cristal estaba roto y la imagen llena de polvo. La tomo entre sus manos y observo detenidamente a Itachi, aquel rostro que se mostraba no era en definitiva el de un hombre enamorado, de hecho, pudo ver por primera vez resignación en el detrás de una falsa sonrisa, supo cuanto se había esforzado por mantener esa farsa, el lo había soportado todo con la frente en alto y ella se escondía bajo sus cabellos y lamentándose entre lagrimas por su suerte. Si lo que la Uchiha decía era verdad, entonces eso significaba que la situación de Itachi era peor que la de ella, pues al menos aquella mujer correspondía a su amor y para ella las cosas eran totalmente diferentes, mientras uno tenia la posibilidad de vivir felizmente casado con el amor de su vida, ella solo vivía en fantasías que quizá o nunca se hubieran hecho realidad- No Hinata, deja de pensar esas cosas, te quiere confundir, quiere que las cosas entre ustedes estén mal, porque esta enamorada de él, no se lo permitas- decía en voz alta, mientras guardaba de nuevo la caja vacía debajo de la cama y tiraba los restos de vidrio-Ahora, las cosas son diferentes, el te quiere, tu lo quieres-dijo sonriendo- buscare un marco muy bonito para poner nuestra fotografía- luego escuchó una puerta abrirse, vio el reloj y se asustó no era la hora de salida de Itachi. Sigilosamente camino hasta la salida de su habitación y cuando estuvo en el marco vio a Fugaku entrar a la habitación de Itachi, abrió sus ojos y se acercó rápidamente hacia donde estaba

-Fugaku sama, ¿Qué sucedió? -pregunto viendo como entre los dos ayudaban a Itachi a recostarse.

-Enfermo, tiene fiebre y agostamiento físico, necesita descansar-respondió Sasuke.

-Sakura le receto esto- exclamo dándole la receta y los medicamentos que ya habia comprado- es un mucolítico, asegúrate que lo tome, esta mañana se desvaneció en el trabajo y aun así insiste en que no tiene nada-Hinata asintió viendo la palidez en su rostro- enfermo debido a que estuvo expuesto al frio, así que hay que cuidar la temperatura, que este templado y beba mucha agua- Hinata volvió a asentir.

-No dejes que se levante o permitas que vaya al trabajo, es demasiado terco así que …

-Ya basta, lo entendí-respondió con una voz más ronca y cansada de lo normal.

-No esta demás recordártelo- respondió Sasuke-Itachi sonrió.

-Nos vamos- hablo Fugaku despidiéndose de Hinata e Itachi y salieron de la habitación. Hinata se sentó a su lado e Itachi con los ojos entreabiertos -estaré bien, no es nada.

-Fue mi culpa- dijo mirando hacia abajo- te enfermaste porque te obligue a dormir afuera bajo la lluvia cuando nos fuimos en la misión- era cierto, Itachi se había quedado toda la noche sin dormir bajo la lluvia y aunque se había cubierto no era suficiente.

-No digas eso- hablo bajito, abriendo su mano para que Hinata la tomara- Sakura también dijo que es cansancio, pretendí querer hacer todo y no descanse lo suficiente, es normal que mis defensas disminuyeran.

-Si, pero precisamente porque llevabas muchos días fuera sin descansar como es debido y encima….yo

-Shhhh… ya no hablemos de eso, no tiene caso Hinata san- ella sonrió ante su gesto, era demasiado noble como para culparla de algo que en realidad sabia si era su culpa. Hinata se acerco mas a él con la intención de darle un beso, Itachi era adorable, pero este volteo la cara evitando que tocase sus labios-No Hinata chan, podría contagiarte, me sentiría muy mal por eso. Hinata tomo la mano de Itachi entre las suyas-Creo que eso ya no importa Itachi san, porque …bueno…. Vera… ya sabe- dijo nerviosa, evitando decir la palabra que tanto le avergonzaba, Itachi trato de reír -Lo sé- respondió-entonces prácticamente somos una pareja de enfermos- ella asintió dándole por fin un beso en los labios.

-Iré a prepárate algo para comer- termino viendo como la sonrisa del Uchiha se desvanecía y dejaba caer la cabeza sumiéndose en un profundo sueño.

.

.

CONTINUARÁ…

Sorry de nuevo si hay faltas, pero por mas que reviso nunca las veo en el momento y a veces mi pc las corrige, pero como es ameriana omite muchas

Thanks.