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GUERREROS DE LA NOCHE

Tortugas y Gárgolas se han reunido en la Torre del Reloj.

Van a realizar la ronda de esta noche, pero antes de que alguno pueda preguntar cómo se van a organizar, Leonardo habla primero.

- Nos dividiremos en grupos de dos, así abarcaremos un perímetro más amplio. Me gustaría que nos enfocáramos en integrar el estilo de pelea de ambos clanes, pero estamos en la época alta de delitos, así que nuestra principal prioridad es ofuscar el mayor número de asalto a transeúntes, a cajeros automáticos, minisúpers… -

Goliath, siendo el líder de su clan, permite que Leonardo exponga su plan con libertad también ante sus camaradas.

Queda impresionado por la solemnidad con la que Leonardo se expresa, no sólo ante sus hermanos, sino ante chicos más mayores que él, incluso ante un adulto veterano como lo es Hudson.

No puede imaginar cuánta ha sido la dedicación de Leonardo para convertirse en un líder competente a su corta edad, cuando él, a esa edad, aun cuando ya entrenaba para convertirse en un guerrero, todavía jugaba con sus hermanos y hermanas, porque eso era, un niño, y los niños, en lo que era su vasto clan, podían jugar todo lo que quisieran, ya que la seguridad dependía exclusivamente de los adultos.

¿Desde cuándo este niño abandonó sus juegos para tomar una espada y proteger a los suyos?

Goliath interrumpe sus pensamientos porque siente una mirada, voltea y descubre unos animosos ojos café claro; es Leonardo quien busca su aprobación del plan que ya no terminó de escuchar.

- Me parece una excelente idea. – dice Goliath disimulando hábilmente su falta de atención.

- Bien. – dice Leonardo con seriedad (aunque Goliath nota una pequeña sonrisa de orgullo en los labios del joven líder porque el plan ha sido aprobado); se vuelve para hablarle a los demás – Lex y Doni irán juntos. Broadway y Mikey… -

Mientras Leonardo forma los grupos de dos, en el corazón de Goliath surge un sentimiento de nostalgia por aquellos tiempos en los que él se sentaba bajo un frondoso árbol y miraba a los niños pequeños y a los más crecidos jugar en los espaciosos y tranquilos campos verdes, y su corazón bailaba de dicha porque la inocencia que jugueteaba frente a sus ojos estaba a salvo de la maldad de los humanos.

- Brooklyn y Rafa… -

- Pero creo que por hoy – interrumpe de repente Goliath – estaría bien si nos tomamos un descanso. -

- ¡Súper! -

- ¡Qué bien! –

- Ya hacía falta. –

- No me opongo. –

Los chicos festejan con entusiasmo que esta noche no haya ninguna ronda, excepto uno.

- ¿Tomarse un descanso? – pregunta Leonardo bastante sorprendido, creyendo imposible que valerosos guerreros, como lo son las gárgolas, dejen de vigilar el reino que han jurado proteger con sus vidas.

- Hijo, – dice Hudson – está bien tomarse un descanso de vez en cuando. No somos de piedra, ¿sabes? –

Todos se ríen del sarcasmo de la gárgola mayor.

Leonardo se avergüenza porque las gárgolas pueden pensar que él es un tirano.

- Es lo que siempre le decimos, – dice Rafael - que de vez en cuando hay que tomarse un "break".

- Pero nunca nos hace caso. – dice Miguel Ángel.

- Y se la pasa estudiando técnicas de pelea, - dice Donatelo – y entrenando y viendo las noticias para asegurarse que no se desate otra guerra de pandillas como la que se desató no hace mucho tiempo. –

Con los comentarios de sus hermanos, Leonardo ya no tiene de que temer que las gárgolas piensen que es un tirano, ya lo han confirmado.

Pero los chicos no piensan en nada de esto, piensan en cómo pueden divertirse.

- ¿Y qué vamos a hacer esta noche? – Miguel Ángel pregunta muy animadamente.

- Vamos a ver una película. – propone Lexington.

- Están pasando "Titanes del Pacífico". – dice Brooklyn – La que hizo un tal Guillermo del Toro. -

- Del Toro ha dirigido buenas películas. – dice Donatelo.

Goliath vuelve a perderse en sus pensamientos al mirar que sus "niños" se contagian fácilmente de la euforia de los niños con caparazón. Esto le da la esperanza de que él se está desempeñando bien como protector de los más jóvenes, no sólo de su seguridad física, sino también de sus corazones.

Ha procurado fervientemente que los corazones de Lexington, Broadway y Brooklyn no sean devorados por el odio y la sed de venganza, no como le sucedió a una gárgola que se perdió en las tinieblas del rencor contra los humanos.

Su pérdida ha sido la más dolorosa de todas.

- Pero no tenemos que ver la peli escondidos en el techo. – dice Rafael.

- ¿No? – preguntan las gárgolas con bastante desconfianza.

- Nop. – dice Miguel Ángel.

- ¿Entonces? – pregunta Broadway.

- Síganos y les mostraremos cómo. – dice Donatelo.

De un momento a otro Donatelo, Rafael y Miguel Ángel extienden sus planeadores, corren y emprender el vuelo.

Las gárgolas jóvenes pronto los siguen.

- Yo prefiero quedarme en casa a ver el partido de futbol. – dice Hudson y entra a la Torre seguido por Bronx.

Leonardo mira fijamente cómo se van alejando sus hermanos.

- Está bien, Leonardo. – le habla Goliath con una confortante sonrisa, esperando que él pueda comprender que su lucha no se trata de una guerra sin fin, aunque así lo parezca.

Leonardo mira a la distancia un poco más antes de voltear su serio rostro hacia la enorme gárgola; en el siguiente instante, una gran sonrisa rompe con la mesura tan poco propia para alguien tan joven.

Goliath asiente y emprende el vuelo.

Leonardo despliega su planeador para reunirse en el cielo con los demás.

La sonrisa de Goliath se ensancha más, contento de que el corazón de Leonardo tampoco ha sido aprisionado por el odio hacia los insensatos humanos.

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N/A:

1Cuando las gárgolas, en su serie, fueron a ver el espectáculo de La Manada se escondieron en el techo del escenario, e imaginé que harían lo mismo cuando van al cine, pero claro que esta vez van a hacer lo que hacen las tortugas: disfrazarse.

2La actitud de Leo en 2k12 me gusta (salvo las veces que se comporta como Rafa), pero yo me identifico más con Leo de 2k3 porque es un chico que no puede tener una actitud relajada por la enorme responsabilidad que pesa sobre sus hombros, lo que lo ha obligado a ser más adulto que sus hermanos, pero existen momentos en los que Leo puede olvidarse de ser adulto y ser más un adolescente.

Esos momentos me encantan.

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Y bueno, aquí se acaban los capítulos de relleno.

Quise explorar un poco en el carácter de los chicos y compaginar una tortuga con una gárgola.

En cierta forma son similares Mikey y Broadway, Doni y Lexington, un tanto Rafa y Brooklyn, aunque me pareció complicado compaginar a Leo y Goliath porque Goliath es un adulto, pero sí hay algo que tienen en común:

El amor.

Cada uno ama a una humana y su amor les parece un imposible, pero ya leerás de esto más adelante.

Muchas gracias por leer y por tus comentarios.

n.n