.
) ) ° ( (
GUERREROS DE LA NOCHE
…24 horas antes...
Abril estaba bajando la cortina de metal de su local. Era la hora de cerrar.
Aún siendo una hora relativamente temprana, las ocho de la noche, Abril ya daba por concluida su jornada laboral.
Ella prefería cerrar aproximadamente a la misma hora todos los días. Cerrar su negocio tan temprano no tenía nada que ver con el hecho de que no hubiese ventas.
2nd Time Around ya gozaba de cierta popularidad.
Gracias al carisma de la preciosa chica, no demoró mucho en que se divulgara, de boca en boca, la buena nueva de un lugar donde se vendían artículos antiguos, que sin embargo, los había de diversos tamaños: enormes y sofisticados que diminutos y lindos, y lo mejor era que, los precios estaban al alcance de todos los bolsillos; esto y además que un amigo suyo, tras la reinauguración (el local permaneció cerrado por los daños que ocasionó un terrible incendio), le ayudó a crear una página en internet, promoviendo su negocio con el eslogan "regalos para toda ocasión".
El negocio marchaba relativamente bien.
La premura por cerrar a una hora temprana se debía por el entorno de inseguridad que aquejaba a la ciudadanía desde hace semanas. Los robos a transeúntes y a locales comerciales comenzaban prácticamente al caer la noche.
Afortunadamente, no había ocurrido un incidente así. Fue por ese mismo amigo que su local y su hogar contaban con un excelente sistema de seguridad. Abril podía sentirse tranquila, sin embargo, prefería no tentar a la suerte.
Bajó la cortina, colocó los cerrojos, se aceró al panel de control y activó el sistema de seguridad.
- Listo. – hasta ese momento pudo sentirse a salvo.
Subió a su departamento, pero no se pudo cómoda para descansar. Se sentó en la sala y comenzó a orar para pedir por que sus amigos y los nuevos amigos de sus amigos regresaran a salvo. Todos ellos habían ido a arriesgar la vida para evitar una catástrofe (aunque hubo alguien más que no pudo participar, pero decidió salir a patrullar por su cuenta; también oró por él).
Sin embargo, Abril olvidó en sus plegarias pedir por su bienestar propio porque, justo en ese momento, algo acechaba desde fuera (no existía sistema de seguridad alguno que no pudiese traspasar).
Desde un edificio contiguo, más precisamente desde el techo, una sombra vigilaba el local de antigüedades y a su dueña.
) ) ° ( (
