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GUERREROS DE LA NOCHE

Esperar.

Esperar.

Esperar.

Aun con el frío viento que sopla incesante a esas alturas, Leonardo debe esperar a que alguien llame o le envíe un mensaje para saber sobre la forma en que van desarrollándose los acontecimientos. Al menos, con el último mensaje, recibió buenas noticias. Su hermano ha sido hallado.

Leonardo se alegró mucho, pero otra preocupación lo embargó. Mañana, Xanatos debe atender varias reuniones de negocios, y desde temprano, debe ir con él, pero ha preferido permanecer en una de las torres más altas del castillo, mirando a la distancia, esperando por noticias, en vez estar en su habitación, descansando, porque el siguiente día será muy ajetreado.

Es muy tarde pero, ¿cómo puede dormir habiendo otras cosas por las que preocuparse? Sobre todo el hecho de que el mundo, y todo lo que habita en él, puede ser destruido por una diminuta piedra brillante.

Leonardo suspira, anhelando el poder estar con hermanos y amigos en esta nueva misión, pero deja escapar otro suspiro, porque sabe perfectamente que "él se lo ha buscado" (palabras que con gusto se las restregaría en la cara su hermano Rafael); él mismo es el que se ha hecho a un lado. Ahora todo depende de las gárgolas y de sus hermanos para que encuentren la forma de salvar al mundo. Lo que debería hacer es ir a dormir. Cansado no será de mucha ayuda a Xanatos, no tanto para soportar la apretada agenda del día de mañana, sino para poder enfrentarse al enemigo si éste decide atacar de nueva cuenta.

- Debo dormir. – se dice con cansancio, pero no se mueve; continúa mirando a la lejanía.

En realidad, lo que le preocupa es un presentimiento que ha tenido desde esa conversación, una plática que ocurrió hace algunas horas en esa misma torre en la que él ha permanecido.

La ninja estaba calculando la distancia que sería necesaria para utilizar el ala Delta, cuyo cilindro sostenía con la mano derecha. Ya había hablado con Leonardo por teléfono, ya que él demoraría en llegar al castillo, y acordaron en que ella partiría cuanto antes en busca de Miguel Ángel; pero ella estuvo esperando a Leonardo. Ella esperó, esperó y esperó hasta que ya no fue posible, y sin poder esperar más, la ninja miró hacia la brillante ciudad, visualizando en su mente la ruta que debía seguir para encontrarse con las dos chicas que…

- ¡Hola! – de repente oyó un saludo algo apremiante, pero con sólo escuchar la voz, la ninja supo que se trataba de Leonardo.

Ella se giró, y le sonrió.

- Konnichiwa [Hola]. –

- Okuretesumimasen [Perdón por el retraso]. – Leonardo acortó la distancia entre ellos.

- Mondainai [No hay problema]. – ella, sonriente, aceptó la disculpa.

Se miraron a los ojos por un instante. Era evidente que ambos estaban felices por volver a verse, pero Leonardo sabía perfectamente que el tiempo apremiaba.

- Ya… - tuvo que pasar saliva porque le fue muy difícil poder hablar – Ya tienes que ir. –

Ella acerco más su rostro al de él (él se sonrojó), además tomó su mano, pero él no dio ni un paso atrás.

- ¿Watashi o matte kuremasu ka? [¿Me esperaras?] – ella le habló con ansiedad.

- Hai [Sí]. – Leonardo respondió sin titubeos pero sin poder decir todo lo que quería decir.

Ella soltó la mano de él, se alejó corriendo hacia el muro bajo, saltó por sobre éste, hacia el vacío, pero le tomó un instante elevarse hacia el cielo.

Leonardo la observó. Parecía que la chica quería alcanzar a la resplandeciente Luna, pero pocos instantes después, ella desvió su rumbo. Él continuó observándola hasta perderla de vista, y desde entonces no se ha movido de ahí.

Si Leonardo no se ha movido del lugar en el que ha estado por horas, no es por no romper la promesa, es por el mal presentimiento que persiste.

Hace más de una hora que la ninja le informó que había hallado a su hermano, por lo tanto, ¿por qué no ha vuelto?

Es justo cuando el presentimiento le dice el por qué ella no ha regresado.

Porque ella definitivamente no va a volver.

Leonardo se da cuenta que la breve charla fue una despedida.

Ella se ha ido y no volverá a verla, quizás en meses, quizás años.

En esa ocasión, cuando ella fue contratada para asesinarlos a sus hermanos y a él, pero por alguna razón, sea porque fue obra de algún maleficio, o todo lo contrario, que haya sido obra de una bendición, la primera vez que sus miradas se encontraron sus corazones se entrelazaron, y aunque ella misma le afirmó que no había manera de que pudieran estar juntos porque pertenecían a bandos opuestos, él jamás perdió la esperanza de que así sucedería; y esta noche, aunque ninguno pudo expresarlo con palabras, pero sus corazones se juraron que estarán juntos algún día.

Impulsado por una férrea esperanza, Leonardo corre hacia el mismo muro bajo (pero no él no posee ningún ala Delta).

- ¡FLOR DE LOTO! – grita con todo su ser.

Corre hasta que topa con el muro.

– ¡TE ESPERARÉ! –

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En alguna parte, una linda jovencita, vestida con un elegante y ondulante vestido blanco, camina con cierto apremio entre la multitud, pero repentinamente se detiene. Sus ojos rebelan que ella lucha por contener en su alma un dolor insoportable. Un instante después, prosigue su camino.

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En el castillo, Owen ha estado también a la espera de noticias, sentado al escritorio de su Señor, observando, por medio de las cámaras, al guardián.

Leonardo ha apoyado su frente sobre el muro, encorvándose un poco, como rezando una plegaria.

- Le tomó tiempo, - habla Owen – pero finalmente, Leonardo ha aceptado que ha sido abandonado, otra vez. –

Apaga el monitor.

Owen fue quien recibió el último informe del guardián (Xanatos se ha ido a descansar desde hace un buen rato), el cual reportaba que encontraron a la tortuga perdida, pero no hallaron la gema. Tiene sospechas de haber sido engañado.

- Leonardo no mentiría. La chica sí. -

Owen acomoda los anteojos sobre el puente de su nariz, pensando en las instrucciones de su Señor: Si no obtenía la gema con ayuda de Leonardo, la obtendría con sus propios medios.

El hombre que, aparentemente no muestra signos de cansancio, procede a cumplir el mandato de su Señor, pero por un instante, por un breve instante, la seriedad de sus facciones se transforma y se crispa en una grotesca mueca de triunfo.

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Su corazón un vuelco da,

por el inquietante mensaje que

en este santiamén en él aflora:

Acercándose el peligro viene ya.

Para llorar no es el tiempo ahora...

Leonardo se sobresalta. Su corazón late con demasiada prisa.

Pasa su brazo por sus ojos restregándolos, después retrocede, avanzado unos metros se detiene, y se arrodilla. Su respiración va moderándola para tranquilizarse y poder idear un plan.

No tiene a su alcance algún medio que le ayude a abandonar el lugar, no sin enfrentarse al Señor del castillo.

Su corazón comienza a latir más lento, pero el mal presentimiento persiste.

Necesita un plan... ¡Necesita un plan o la más pequeña posibilidad de evitar que la gema caiga en las manos equivocadas!

Sí. Cuenta con una alternativa, y es peligrosa para él porque es una técnica que no ha dominado.

- Debí volver con El Antiguo. –

Sacude la cabeza porque es inútil reprocharse a sí mismo.

Continúa con la meditación.

Tiene que estar preparado, más de lo que ha podido estarlo en toda su vida.

Una oportunidad. Es todo lo que tiene.

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N/A:

.El Antiguo (The Ancient One en inglés) es un personaje que aparece en la temporada 4 de TMNT 2003. Este maestro se encargó de ayudar a Leonardo a superar su sentimiento de fracaso y rabia por no haber podido proteger a su familia tras un enfrentamiento con Shredder, enfrentamiento en el que perdió un pedazo de caparazón. Después de ayudarlo, estuvo entrenando a Leonardo por un tiempo, pero la familia de Leonardo estuvo en peligro, y él debió regresar, dejando a medias su entrenamiento.

(En lo personal, me hubiera gustado que este maestro hubiese entrenado más a Leo. Por esto, en este fic, Leo sabe cómo utilizar su Qi, o Chi o energía vital, siendo una de las técnicas que aprendió de El Antiguo, pero esta técnica no la sabe utilizar en un cien por ciento por la repentina interrupción.)

.El verso contiene las dos primeras líneas del segundo opening de Dragon Ball Z.

Esto es un pequeño homenaje para Luis Alfonso Mendoza (recientemente fallecido), actor de doblaje que le dio voz a Gohan de Dragon Ball Z y también a Leonardo de TMNT 80s.

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Y por fin se ha revelado el nombre de la chica amada de Leonardo 8D

Bueno, yo soy de la generación que vio a las Tortugas Ninja de los 80s, y para mí, la única chica que puede ser la media naranja de Leonardo, es Flor de Loto.

Gracias por leer.

^.^