Capítulo 28

Bella 17 años

—¿Recuerdas el trato?—asentí embelesada por su historia— bien pues en este nunca establecía qué tenía que casarme con Irina, solo decía " la señorita Denali", Tanya es prima de Irina. El día qué te abandone en el lago— escuchar de sus labios qué me había abandonado, el que l finalmente lo aceptara era más duro de lo qué creí— Bella— se levantó del sillón, se arrodillo frente a mí y tomó mis manos, su tacto quemaba mi piel— perdóname, en su momento no lo quise ver pero si te abandone, y no sabes cuanto me arrepiento por ello, no sabes cuantas veces he querido regresar el tiempo y cambiar mi forma de actuar, cuantas noches me maldije por haber sido tan cobarde y no haber luchado por ti desde el primer momento — me besó muy tiernamente para darle énfasis a sus palabras, sus labios encendieron todo mi cuerpo con una corriente eléctrica, ni siquiera sabía que estaba adormecido—lo siento mucho— hubo un silencio aplastante entre nosotros, yo seguía analizando sus palabras, buscando las mentiras escondidas, pero no las encontraba— ¿me crees?— preguntó desesperado, besándome nuevamente

—Te creo— dije un poco mareada después de sentir sus labios, diablos cómo los extrañaba por no mencionar que la tensión en mi vientre aumento, haciéndome sentir incómoda. Sabía que no debía permitirle aturdirme de esa manera pero era imposible rechazarlo, mi cuerpo me estaba traicionando.

—Ese día, Alice fue a la casa del lago y me dijo qué Eleazar él tío de Tanya, estaba exigiendo qué se cumpliera el trato ya que la fecha límite para que me casara estaba a punto de expirar, yo no sabía por qué quería qué se cumpliera el trato a después de tantos años, y un par de meses después me entere qué era porque tenia cáncer, terminal y quería un heredero, pues no pensaba dejarle su imperio al bastardo de Irina. Así qué ahora debía casarme con Tanya y tener un hijo o hija con ella. Un legítimo heredero, un Cullen—Denali

—¿Por qué no me lo dijiste?—pregunté enojada yo hubiera entendido, si tan solo hubiera hablado conmigo, nos habríamos ahorrado todo este sufrimiento innecesario

—Por qué nadie podía saber, todo debía parecer real para evitar más habladurías, además apareciste con Jacob y después…—quizás el no me había dicho nada por que no confiaba en mí, porque jamás me vería cómo una igual para él siempre sería una chiquilla inmadura

—Edward yo no soy cualquiera— lo interrumpí enojada, liberando mis manos de las suyas— yo lo hubiera entendido o al menos lo hubiera intentado si tan solo me hubieras dado la oportunidad de hacerlo, si tan solo hubieras confiado en mí. Y no pongas de excusa a Jacob, ¿por qué sabes qué? él fue el qué me ayudó a levantarme después de qué me abandonaste en el lago, yo estaba tan destrozada, pensé que la había cagado, que te había hartado a tal punto que ni siquiera me querías cerca, no me hablaste en semanas, olvidaste mi cumpleaños y cuando llego a casa, te encuentro con Tanya— finalmente después de tanto tiempo pude desahogarme— ¿Que esperabas? ¿Que siguiera rogándote hasta que tu decidieras que si valía la pena luchar por mi? — lo hecho, hecho estaba, no podía permitirme confiar en el.

—Bella de verdad lo sé y lo siento, fui un completo idiota, solo trataba de protegerte— se justifico— bebí confiar en ti, darte más crédito, no sabes cuanto me arrepiento de haberte mentido, pero te juro que jamás volverá a suceder, te prometo que nunca más te mentiré o ocultarte nada, perdóname por favor— asentí no muy segura, había escuchado sus palabras pero aun no las creía, necesitaba que continuara para poder irme— Después de que estuvimos juntos— al recordarme eso se me heló la piel, desvié la vista avergonzada, ese había sido por mucho uno de nuestros peores momentos— contacte a Emmett, mi amigo y abogado, le conté todo y le pedí ayuda, le pedí qué buscara algún truco legal para romper el contrato, yo quería estar contigo de todas las formas posibles, después de sentir tu piel, tus labios, tu amor, no podía considerar siquiera, dejarte un minuto a solas, no quería separarme de tu lado nunca más, no me importaba si con eso perdía a mi familia o mi empresa, estaba y estoy dispuesto a sacrificar todo por ti, porque sin ti nada tiene sentido, mi mundo no tiene sentido

—Y aun así, me volviste a dejar— le recordé, quería creerle mi corazón lo hacia pero mi cerebro era más inteligente o eso creía— me dejaste sintiéndome usada, me dejaste pensando que yo solo era tu juguete, confirmaste mis peores miedos y los hiciste realidad—me trasporte tiempo atrás cuando desperté completamente sola en mi habitación, completamente humillada, usada y degradada a un simple pedazo de carne.

—Lo sé, lo siento tanto, se que me comporte cómo un animal contigo, se que no me alcanzara la vida para pedirte perdón, pero él día qué te fuiste, ese mismo día había encontrado la forma de romper el contrato de dejar a Tanya de finalmente poder estar contigo, pero te fuiste y no volviste, ¿por qué te fuiste? Yo dejé todo por ti, a Tanya, la empresa de mi familia, mi herencia, todo— me reclamo cómo si tuviera algún derecho

—¿Ya no estás comprometido con Tanya?— medite en voz alta

—No, unos días después de que te fuiste firmamos un acuerdo que invalidaba el contrato con Eleazar

—¿Dónde está ella ahora?

—En Italia estudiando diseño de modas o eso creo

— Yo…— Mi cerebro comenzaba a creerle, pero ¿Cómo decirle, que estaba terriblemente herida?¿que estaba harta de que me hiciera sufrir?¿que era una cobarde y preferí huir antes de hacerle frente a los problemas?¿que en mi cabeza es imposible que alguien cómo él ame a alguien cómo yo ?¿ que tenía miedo de que de alguna manera el me regresaría al orfanato?

—Si vamos a hacer esto debemos confiar en el otro, yo te hablo y tú me hablas—me tomó nuevamente las manos— ¿por que te fuiste así cómo así?¿por que te fuiste sola?

—Tu me dejaste desde antes—trate de hacer tiempo, no encontraba las palabras para decirle cómo me sentía

—Isabella, me enamoré de ti sabiendo que aun eras una niña, sabiendo que nuestro amor no iba a ser fácil, que te iba a perder en algún momento cuando crecieras, que iba a ser muy difícil verte partir y que lo único que me quedaría sería esperar tu regreso, pero por amor todo se puede, si aún no estás lista te seguiré esperando cada vez que sea necesario, porque en la vida, al igual que el amor, nadie dijo que sería fácil— sus palabras eran tan dulces que terminaron por romper mi caparazón, las lágrimas comenzaron a fluir libres por mi rostro, el me tomo entre sus brazos y me sostuvo

—Es complicado— dije finalmente— es… perder algo que creíste que era tuyo, pero que en realidad nunca tuviste destroza poco a poco tu alma en pedazos, te quedas atrapado en el "que hubiera pasado" y sobre todo en tus errores— esperaba que me entendiera, ya que no encontraba mejores palabras para describirlo— Antes de que Tanya y todo se complicara, juraba que de verdad me amabas, que finalmente había encontrado mi hogar y de pronto todo termino, cómo si nada hubiera sido real .

—Isa, cariño yo te amo y siempre fui tuyo, desde el primer momento en el que vi tus hermosos ojos, tus mejillas sonrojadas, estaba a tus pies en cuestión de segundos. Lo que sucedió con Tanya, solo me confirmó que no puedo ser feliz si no estoy contigo, Isabella tu eres mi felicidad, el amor de mi vida y estoy dispuesto a luchar por ti hasta el final de los tiempos y aun después de eso— me dijo con vehemencia

—Pero— dije necia— no tiene sentido que tu me ames, yo… tu… somos tan diferentes y no me refiero solo a la edad— ¿acaso él no veía el mar de diferencias que nos mantienen separados?

—Nena el amor no es cuestión de lógica, si amarte no tiene lógica, estoy completamente demente, por que te amo Isabella— nuevamente me beso, pero esta vez lo hizo de verdad, una beso que me dejó sin aliento y totalmente hechizada bajo su efecto— te amo, te amo y te lo seguiré diciendo hasta que te entre en esa cabeza dura que tienes— tenia que admitir para mi misma que había perdido con mi misión autoimpuesta, le creía y estaba tan perdidamente enamorada de el cómo el primer día que lo vi.

De repente algo se accionó dentro de mí aceptando esta verdad, sabía que las cosas no solo iban a cambiar sino que ya lo habían hecho y que a partir de ahora nada volverá a ser lo mismo nunca, con eso claro tome su rostro entre mis manos y lo bese, profundamente dejando todas mis reservas y temores atrás, mostrándole todo el amor que sentía por él.

Edward 31 años

Sus dulces y suaves labios me tenían hipnotizado, la había extrañado tanto que era indescriptible el alivio que sentía al tenerla entre mis brazos, pero aún tenía un punto que aclarar con ella, la aleje de mi lentamente, tratando de no darle la impresión equivocada, ahora que conocía sus temores sería muy cuidadoso de no alimentarlos, cómo había estado haciendo.

—No hemos terminado de hablar— dije ante su mirada confusa— falta un punto muy importante qué no me ha dejado dormir.

—¿Cuál?— preguntó nerviosa otra vez, me tomé mi tiempo para tratar de escoger las palabras correctas pero no existían

—¿Por qué me entregaste a mi…. tu tu virginidad?, en ese momento juraste que me odiabas, yo te había herido y traicionado cómo nunca en la fiesta de compromiso, además ¿no se suponía qué Jacob era tu novio?— explique en busca de respuestas, cada noche después de esa, no había podido dormir sin preguntarme por que lo había hecho

— Yo…. Edward, te mentí— dijo avergonzada desviando su mirada al suelo

—¿Cómo?¿Jacob no era tu novio?— pregunté sorprendido, yo lo había visto besándose en varias ocasiones por no mencionar que nunca se despegaban.

—Si lo era pero no cómo crees— lo mire con cara interrogante— El día qué me invitaste a tu fiesta de compromiso ¿recuerdas?, me dijiste qué llevará a Jacob— asenti ese día estuve a nada de besarla y contarle toda la verdad— un día antes él me pidió qué fuera su novia y yo acepte para qué me acompañara a la fiesta.

—Pero yo te vi besarlo desde muchísimo tiempo antes— debatí, si íbamos a estar juntos, quería estar seguro que él ya no significaba nada para ella, quería ser el dueño total de su corazón, no estaba dispuesto a compartir nada, mucho menos con un niño.

—Lo sé, te vi cuando se separó de mí, todo fue un malentendido, Jacob mal interpretó todo y me besó, además estaba ebrio, yo le dije qué no lo volviera a hacer

—Pero ¿por qué me mentiste?— eso seguía sin tener sentido, si él no era su novio ¿por que me hizo pensar que lo era?

—Yo… quería darte celos— dijo avergonzada— solo.. no se… no quería qué pensaras que estaba sola… es patético… soy patética— susurro. Mi pequeña solo había intentado darme una cuchara de mi propia medicina, a eso había orillado a mi ángel a mentir

—¿Pero en algún momento sentiste algo por él?— pregunté ansioso

—No de la forma en la que crees, él simplemente era mi amigo, lo quería cómo tal, me recordaba a mi hermano— dijo con melancolía

—De verdad lo siento, siento mucho haberte orillado a eso y sobre todo la forma en la que me comporte contigo me ponía enfermo verte con Jacob— admití— pero ¿por qué te entregaste a mí?— pregunté nuevamente por que aun no contestaba, al decir esas palabras, disfrute de cómo se ponía colorada, la había extrañado tanto la calidez que invadía mi pecho cada vez que la miraba.

— Por que a pesar de todo, me vuelves loca, cuando estoy cerca de ti, cuando me acaricias, cuando me besas, mi cuerpo comienza a quemarse y lo único que parece aliviarlo eres tu— dijo tranquilamente provocándome sin quererlo como siempre— prométeme algo— pidió

—Lo que quieras

—Jamás volverás a mentirme, jamás volverás a ocultarme nada, jamás volverás a lastimarme y sobre todo jamás me vuelvas a dejar — me pido con el corazón en la mano, la abrace muy fuerte.

— Jamás, te juro, no volveré a lastimarte, jamás permitiré que te alejes, porque tu presencia me da vida, respiro y palpito con el ritmo de tu corazón, te necesito para vivir, para existir— la bese con fervor sellando mis palabras.

Me besó con ternura y desesperación, nuestros dientes chocaron un segundo por su emoción, después su aventurera lengua se coló entre mis labios, eufórico la acepte, sus tímidas caricias hacían estallar de deseo todo mi cuerpo, respondí a sus besos con la misma pasión, sentí su mano colarse en mi pelo, enredando las hebras cobrizas en sus dedos, dando jalones, que enviaban corrientes eléctricas a cada parte mi cuerpo.

Gracias a todes por su apoyo, es especial a: Wenday14(asi es por fin van a hablar, como debieron hacer desde el principio), jupy (el final se acerca, la platica es muy importante para poder llegar ahi), Diannita Robles (gracias por leer, saludos), Ary cullen (ya era hora, se tardaron bastante estos necios jajaj), ALBANDIA (Bella necesitaba un golpe de realidad para madurar un poco como todes nosotros creo), Adriana Molina (gracias igualmente), por sus comentarios que saben que me encantan.

Les invito a darse una vuelta por (la que yo considero mi obra maestra) "El último baile de las luciérnagas", lo encuentran en mi perfil.

Nos leemos pronto :)