Capítulo XII
¡No más una estrella fugaz!

Declaración: Los personajes de Sailor Moon utilizados en esta historia son propiedad de Naoko Takeuchi.

El día era perfecto, se podía escuchar el canto de los pájaros y el revoloteo de sus alas entre los frondosos árboles que rodeaban la cabaña. Serena despertó al lado de Seiya, el hombre de su vida. Ella examinaba detenidamente cada rincón de él. Su pecho desnudo era suave y sus brazos fuertes. Seiya aún dormía tranquilamente. Serena acariciaba ligeramente la larga caballera de su amado y suspiraba cada segundo su nombre. Sus pensamientos estaban con Seiya, sin duda, pero en su corazón existían el temor de estar viviendo en una fantasía. Miraba su sortija, no podía creer que sería la compañera de Seiya por el resto de su vida. Ella junto a su bebé le darían un significado a esta lucha por el amor. La joven estaba consciente que no sería fácil, que la batalla estaba por comenzar y que esta sería una prueba más que los uniría para siempre.

Seiya se movió un poco buscando el calor de Serena, la tomó entre sus brazos acurrucándose en su pecho. Ella besó su frente y acarició su mejilla, lo amaba sin dudarlo, Seiya se había convertido en su luz, una cálida luz que los protegería por siempre.

—Seiya, Te amo….le susurró la rubia al oído.

— Mi dulce bombón…dijo él despertando. —Te amo, cómo no tienes idea.

Serena lo abrazó fuertemente y beso tiernamente a Seiya.

—Seiya, haya afuera hace un día hermoso, desayunemos y vamos a dar un paseo.

—Solo si me prometes que te quedarás conmigo para siempre.

—Crees que podría desaprovechar estar con el cantante más guapo del Universo…dijo ella esbozando una risita. —Solo si tu me prometes que pase lo que pase jamás te apartarás de mi lado.

Seiya se acercó más ella

—Nunca Bombón, jamás me alejaré de tu amor….terminó de decir él y ambos se fundieron en un tierno y prolongado beso.

Seiya y Serena se levantaron de su nido de amor, mientras Serena tomaba un baño Seiya comenzó a preparar el desayuno.

—¡Taiki! Habla Seiya, tienes noticias de los abogados.

—Esperaba tu llamada, por lo que veo todo va de acuerdo al plan…dijo el castaño.

—Así es Taiki, crees que todo se pueda llevar acabo hoy mismo.

—Las probabilidades son muy altas, estoy ajustando los últimos detalles, pero ten por seguro que Serena quedará protegida por el nombre de nuestra familia.

—Estoy en deuda contigo hermano, Yaten y tú han sido un gran apoyo para mi….dijo Seiya.

—Eres feliz ahora Seiya y eso es lo importante. Te felicito por el gran paso que darán tú y Serena. Nos vemos esta tarde, trata de no regresar antes 5:00 pm. Mina y Yaten se están encargado de los demás preparativos.

—No puedo esperar más a que bombón sea la futura Sra. Kou….dijo Seiya muy emocionado.

—Lo será muy pronto, eso tenlo por seguro…terminó de decir Taiki y ambos chicos se despidieron.

Serena secaba su larga cabellera rubia, y se disponía a degustar el delicioso desayuno que había preparado Seiya.

—Pan tostado, mantequilla, mermelada de zarzamora, huevos, jugo de naranja, un poco de té verde y unos deliciosos panecillos….dijo Seiya.

—Eres un encanto Seiya…dijo ella sonriendo gentilmente.

—Todo por ti bombón…y ellos disfrutaron de un desayuno mágico compartiendo risas y besos.

Después de desayunar Seiya se dio un baño y mientras se preparaba para salir Serena aprovechó y marco a su entrañable amiga Mina.

—¡Serena!…gritó Mina. No puedo creer que hasta ahora te comunicas, necesito saber a quienes invitarás a la boda, y qué tipo de boda quieres, aunque te conozco prefiero preguntar, sabes que mis gustos son un poco exagerados.

Serena estaba en shock no podía entender como Mina sabía lo de la boda. Seguramente Yaten se lo había contado.

—Mina, pero qué cosas estas diciendo, ¿qué sabes tú de esto?…dijo Serena.

—Solo dime distes un ¡Sí!, al guapo de Seiya Kou. Serás la envidia de todas y me incluyo, solo espero que Yaten no me escuche….dijo Mina y se hecho a reir.

Serena negó con la cabeza esbozando una sonrisa por las cosas que decía Mina.

—Seiya me explicó todo, me ha dicho que lucharemos por nuestro amor. Me prepuso matrimonio y acepté. Lo amo, y quiero que mi bebé y yo formemos una familia a su lado.

Mina brincó de alegría.

—Serena, felicidades sin duda serás muy feliz. Seiya es increíble y sé que te ama tanto o más como tú a él. Tienes que decirle que estás embarazada, tiene que saberlo ya.

—Lo sé, hoy se lo diré solo estoy encontrado el momento adecuado.

—Me parece perfecto, todo se está resolviendo ahora. Mañana los chicos salen para Dubai, nos reuniremos con ellos en un par de días. Pero ahora lo más importante es organizar tu boda.

—Mina aún no hemos puesto fecha para la boda, creo que será después del concierto.

—No te preocupes Serena, déjaselo todo a Mina Aino. Solo dime qué boda quieres y a quiénes quieres invitar.

Serena no entendía la insistencia de Mina por algo que aún no había decidido.

—Lo único que necesito es a la gente que amo y me ama a mi lado.

—Perfecto Serena, tengo que irme ahora Yaten me espera, besos a Seiya…y Mina colgó.

—No te entiendo Mina, pero te has convertido en alguien muy importante para mi….dijo Serena para sí.

—Bombón, nos vamos, el Sol clama por nuestra presencia allá afuera.

Serena miró fijamente a Seiya.

—Me puedes explicar cómo Mina se enteró de nuestro compromiso.

Seiya esbozó una sonrisa pícara

—Seguro Yaten se los dijo, al no verme de regreso supuso que todo marchara conforme al plan.

—¿Cuál plan, Seiya Kou?….dijo Serena un poco enojada

Seiya se acercó a ella tomándola de la cintura

—El plan de pedirte que te casaras conmigo, aún si no me perdonabas….él la beso.—Te amo bombón, pero amarte nunca fue mi plan.

Serena se abrazó de Seiya fuertemente sin decir una palabra, mientras una peque lágrima acaricia su sonrojada mejilla.

—Vamos bombón, disfrutemos más de este lugar que no siempre tienes la oportunidad de estar en la propiedad de la Diosa del amor y la belleza.

Serena y Seiya se echaron a reír y ambos salieron a aventurarse al extraño mundo que les esperaba allá afuera.

OoOoOoOoO

La habitación era fría y oscura, Black Lady fumaba desde el balcón de unos de los hoteles más lujosos de París. Había tenido algunas entrevistas y pasarelas en la semana de la moda de ese país. Todos alababan su gran porte y belleza, y su carácter fuerte. Ella destacaba entre todas las otras modelos. Lo tenia todo o casi todo, era millonaria, su hermano Diamante la amaba y la protegía, podía tener todo lo que se le antojara. Pero sin duda, no lo tenía a él. Seiya Kou era ahora un espejismo en las portadas de revista. Terminó por ser una simple fotografía en una revista.

Cuando Seiya conoció a Black Lady, ella no mostró mucho interés por él. Porque ella decía que nadie la merecía inclusive él. Pero estaba equivocada, en su interior Seiya era la única persona que la entendía y la amaba. Pudo sentir en Seiya la calidez del amor, sin embargo, dada su posición no tenía que bajar la guardia y debía comportarse con indiferencia. Los caprichos de Black Lady eran complacidos por Seiya, su amor por ella era muy fuerte en aquel momento. Cuando estaban juntos ella dejaba ver su lado humano revelando lo frágil que era y lo necesitaba que esta de vivir una vida normal. El tener que cargar con el prestigioso apellido Black era algo que le estaba costando su felicidad. Diamante por otra parte la presionaba para entrar en la familia Kou, ya que lo que más le interesaba era apoderarse de parte de la fortuna de los Kou por medio de Black Lady.

En esa habitación tan vacía ahora ella se encontraba recapitulando su vida. Recordaba los días al lado de Seiya, la envidia que podía provocar entre las demás chicas que se intentaban acercar a él, incluso la envidia de su mejor amiga, Rei Ino. Sin duda eran la pareja perfecta, pero ella había acabado con todo eso. Seiya la amó, de eso no tenía duda. Pero ahora solo un débil recuerdo de ese amor era lo único que quedaba.

—Seiya Kou, tengo que recuperarte, porque sé que es a mi a quién amas.….dijo para sí.

El teléfono de su habitación sonó.

—Señorita Black, tiene una llamada de Rubeus.

Black Lady había mandado a Rubeus a vigilar a los hermanos Kou, en especial a Seiya y Serena Tsukino.

—Tienes algo importante que decirme Rubeus.

—Más que eso señorita Black, al parecer Serena y Seiya no se han visto. Los estuve vigilando y ellos jamás aparecieron en público.

—¡Y eso es importante!…gritó ella. —Te dije que no me molestaras si no había algo importante relacionando con Seiya.

—Déjeme terminar con todo respeto. Serena Tsukino fue llevada a urgencias por un desmayo repentino después de una exposición en la galería del Museo de Tokio, iba acompañada de Darien Chiba.
—Continua…dijo Black Lady.

—Haciendo algunas investigaciones con los médicos de ese hospital dirigido por Darien Chiba, una de las enfermeras me comunicó que el desmayo de Serena Tsukino fue probablemente a causa de su embarazo.

—¡Qué demonios estás diciendo!….gritó Black Lady.

—Serena Tsukino está embarazada, solo tiene unos cuantos meses…Rubeus hizo un pausa. —Darien Chiba no es el padre.

Black Lady se quedó en shock, todo se estaba desmoronando poco a poco. Tomó un poco de aire.

—¿estás seguro de lo que dices?…dijo ella.

—Sí. No hay duda, es posible que el bebé que espera Serena Tsukino sea del joven Seiya Kou.

Black Lady colgó fuertemente el teléfono. Se sentía derrota, gritó una y otra vez el nombre Seiya. Su furia la llevo a tirar cosas de su habitación se sentía traicionada por su propia indiferencia hacia al hombre que alguna vez la amó. Estaba segura que Seiya todavía no se enteraba, tenía que hacer algo.

—Esto no se va a quedar así, Serena Tsukino no te quedarás con Seiya, el me pertenece. No permitiré que él se entere que esperas un hijo de él. Haré todo lo que esté a mi alcance para destruirte ¡Serena Tsukino!…dijo ella echando gritos.

Black Lady comenzó a llorar, lo estaba perdiendo todo. Un hijo era un arma muy poderosa que ni ella podía combatir. Cuando se tranquilizó tomó su celular y marcó a Diamante.

—Necesito que obligues a Seiya a regresar Diamante, te lo suplico…dijo ella destrozada.

—Black Lady, ¿qué pasa?…dijo Diamante inquieto por su hermana.

—Todo se está saliendo de control, Seiya ya no me ama…..dijo ella con un hilo de voz.

—Sigues en París, yo acabo de llegar, vine hacer unos negocios iré a tu hotel para conversar. Black Lady colgó y espero a que llegara Diamante.

Diamante entró a la habitación, en la cuál todas las cosas parecía estar fuera de lugar. Las luces estaba apagadas pero la luz de la luna enmarcaba la silueta de una mujer acurrucada en uno de los rincones de aquel inhóspito lugar. El joven se dirigió rápidamente a ese lugar, miró el rostro de su hermana.

—Rini, ¿qué es lo que te pasa?…dijo él dulcemente.

Black Lady lo miró fijamente y después de unos segundos lo abrazo y rompió en llanto.

—¿Quién te hizo esto?…el preguntó.

—Serena Tsukino, ella es la culpable de todo esto.

Diamante se separó de ella.

—¿Quién es Serena Tsukino?

—La mujer que me arrebató el amor de Seiya.

Diamante no entendía las palabras de su hermana.

—Pensé que Seiya no te importaba, que todo el noviazgo era beneficio propio y para enriquecernos. ¿A qué viene todo esto?.

Black Lady, limpió sus lágrimas.

—Así fue en un principio, pero ahora que no lo tengo a mi lado me di cuenta que lo amo. Y que me estoy perdiendo si él no está a mi lado.

—¿Quién es Serena Tsukino?…volvió a preguntar Diamante.

—Es una mujer que no vale nada, amiga de Mina, Haruka y Michiru. Seiya y ella se conocieron en las grabaciones del video musical. Aparentemente, ellos se enamoraron y aunque yo estaba presente me pasaron por alto.

Diamante presionó fuertemente sus manos

—Esto nos perjudica. Perdiste el control Rini, ahora tienes que recuperarte no puedes dejarte caer. Seiya regresará a tu lado.

—Porque me llamas Rini, soy Black Lady….dijo ella tajantemente.

—Nunca me ha gustado ese nombre artístico tuyo, siempre serás mi dulce hermana pero este medio te ha hecho fuerte y egoísta. Tuviste a Seiya en tus manos, cuando te sugerí que te casaras me respondiste que no serías de nadie….Diamante hizo una pausa. —Y ahora te veo destrozada porque lo has perdido.

Black Lady desvió la vista un poco no soportaba ver a su hermano así.

—En verdad lo amas o todo esto es producto de una venganza en contra de esa tal Serena Tsukino.

—Lo amo, Diamante, tienes que ayudarme a recuperarlo. Tienes que traerlo a Dubai nuevamente. Sé que Seiya está confundido, haré que vuelva amarme.

—Seiya y sus hermanos viajan mañana, por alguna razón adelantaron su viaje. Ellos y sus abogados vienen hablar conmigo.

—¿Qué estás diciendo?…preguntó Black Lady inquietamente.

—No creí que fuera nada de lo normal, y pensé que temía que ver con el contrato. Pero a decir verdad, es algo muy raro….Diamante hizo una pausa. —Si lo amas lo tendrás, no puedo negarte nada hermana….él depositó un beso en su mejilla. —Pero esta vez, actúa inteligentemente.

Ella le sonrió mientras se reponía un poco.

—Anunciaremos tu compromiso con Seiya Kou en las revistas de todo el mundo. Prepararé a mis abogados por cualquier demanda. Si Seiya no acepta casarte contigo, lo arruinaremos a él y a todo su familia. Su carrera quedará destruida.

—¿Y ella?

—De Serena Tsukino me encargo yo….dijo tajantemente Diamante.

La mirada de Black Lady volvió a la vida, una sonrisa apareció en su rostro. Ella se quedaría con Seiya y ni ella ni ese bebé lo impedirían.

OoOoOoOoO

Una hermosa cascada era el marco ideal para las fotos que Serena y Seiya se estaban tomando. Todo se había detenido para ellos, en ese instante de tiempo lo único que importaban era el amor que se tenían.

—Te parece si nadamos un poco…sugirió él.

Pero no traemos un traje de baño, estaríamos empapados el resto de la tarde.

—¿y quien dijo que usaríamos ropa bombón?

Serena se sonrojó un poco

—Es un lugar privado y nadie más que tú y yo estamos aquí.

Serena miró a Seiya y asintió con la mirada.

—Ven para acá bomboncitó…gritó Seiya, mientras se zambullía en las cristalinas aguas que adornaban la cascada.

Serena cuidadosamente se sumergió en la calidez del agua para no caer. Seiya fue por ella. El agua cayendo de la cascada los cubría por completo mientras ellos disfrutaban de un beso un poco complicado. El ruido de la cascada era ensordecedor.

—¡Estoy embarazada!…Serena gritó fuertemente.

Seiya abrió sus enorme ojos sin saber si había escuchado bien. Su reacción hizo que serena repitiera esas palabras mágicas que fueron directo al corazón de Seiya.

—¡Estoy embarazada! Seiya y tú serás el papá más famoso y guapo.

Seiya se separó de Serena y se alejó un poco de la cascada salió del agua y subió a una de las grandes piedras que se encontraban alrededor dejando a Serena un poco sin saber qué pasaba.

—¡Te amo Serena Tsukino, y hoy soy el hombre más feliz de la Tierra y el Universo¡ ¡Vámos a tener un bebé! ¡Te amo Serena, y mi hijo y tú! Serán lo que más ame en este mundo….Seiya gritó con tanta intensidad que los pájaros salieron de su escondite y las ardillas salieron disparadas a buscar refugio.

Seiya saltó al agua para encontrarse con Serena, ella derramaba lágrimas de alegría. No esperaba esa reacción de Seiya.

—Júrame que lo que escuche no es una alucinación bombón.

Serena negó con la cabeza.

—Vamos hacer papás Seiya y soy la mujer más feliz por tenerlos a ambos.

Seiya abrazó y beso a Serena. Lo tomaba con delicadeza acariciaba su abdomen dándole la bienvenida a su bebé. Ambos salieron del agua para descansar un poco. Seiya estaba muy emocionado y le hacía muchas preguntas a Serena sobre su salud y su seguimiento.

Un leve silencio se presentó repentinamente

—Pensabas decirme esto a pesar de lo ocurrido en la isla…dijo Seiya mirándola fijamente.

—Debo reconocer que al principio me veía renuente pero Mina me hizo entender que mi bebé no tenía la culpa de nuestros errores. Así que cuando Mina y yo viajaremos a Dubai buscaría la oportunidad para decírtelo sin esperar nada a cambio, solo quería que supieras que dentro de mi nace una persona que forma parte de ti y que fue producto de ese amor en la Isla de la Diosa Venus.

Seiya derramó unas lágrimas.

—Te amo bombón, me has hecho el hombre más feliz por darme una razón más para vivir. Ahora entiendo a qué te referías en ese discurso, y tienes razón amo a este bebé más que a mi vida.

Serena sonrió y ambos terminaron con un beso apasionado lleno de amor.

—Creo que debo retirarme de la música…dijo Seiya. —No quiero separarme de ustedes ni un momento.

—No puedes hacer eso Seiya, es tu carrera además sus canciones siempre tienen un mensaje lleno de amor….dijo Serena. —Nosotros te acompañaremos en tus giras, no creas que es una excusa para seguir tomando fotos a cada lugar que visiten…dijo ella sonriendo.

—Bombón, me encanta tu determinación. Yo cuidaré de ustedes y los llevaré siempre conmigo. Lo que sea necesario para que estemos juntos.

—Ninguno tiene que sacrificar nada Seiya…dijo ella. —Te amo, y prometí ser tu apoyo incondicional.

—Lo eres bombón, siempre lo has sido. Te amo mi dulce bombón.

Seiya y Serena siguieron disfrutando de ese cálido día, mientras su cantante favorito no paraba de hablar y planear su vida juntos.

OoOoOoOoO

El Sol estaba ocultarse y en la cabaña había mucho movimiento. Mina preparaba todo para la ceremonia que llevaría acabo en un par de horas. Había contratado a un banquete especial que se colocaría al final de la terraza de la cabaña. En ese lugar había un hermoso y cristalino lago, un pequeño kiosco pensado por Mina para descanso de sus invitados. Pequeñas lamparas y velas eran colgados para dar un toque mágico y especial.

La boda de Serena y Seiya se llevaría acabo en ese lugar. Tal como Serena lo quería estarían presentes solo a la gente que realmente amaba a Serena. Mina movió todas sus influencias para traer a la familia de Serena, quienes sorprendidos por la noticia no duraron en acompañar a su querida hija. Para Serena sería una sorpresa inesperada. Los invitados no tardarían en llegar y Serena y Seiya aun no aparecían de su paseo.

—Ami, me preocupa que Serena no llegue a tiempo…dijo Mina un poco inquieta.—Taiki le dijo a Seiya que no llegara antes de las 5 pm pero ya van a ser las 6 pm y los invitados no tardan en llegar.

La peli azul esbozo una sonrisa y colocó su mano en el hombro de la rubia.

—Tranquila Mina, ellos aparecerán en cualquier momento. Seiya sabe que tiene que estar lo antes posible.

—Serena no se espera nada de esto. ¡Qué envidia! Nuestra amiga conquistó a Seiya Kou, no puedo creer que se case primero que yo…exclamó Mina.

—Su amor es diferente, su inicio fue diferente. Ella no sabía nada de él, es por eso que enamoraron. Creo que Seiya buscaba a alguien como Serena. Ella tiene un buen corazón, es gentil y vive en us propio mundo. Sin embargo, logró tocar el corazón de Seiya. Tal vez si Serena hubiera sabido quién era Seiya Kou, jamás se le hubiera acercado o sido tan cortante….Ami hizo una pausa. —Serena trató a Seiya como cualquier persona, se enamoró de él como algo normal. Pero cuando se dio cuenta quién era ya era demasiado tarde.

Mina estaba sorprendida por la palabras de Ami.

—Ami, pero qué cosas estás diciendo. Eso no quita el hecho de qué Serena será la esposa de Seiya Kou….Mina bajo la mirada. —Si tan solo Yaten me pidiera que me casara con él. Todo sería hermoso.

Ami rió para sí.

—Tranquila Mina, que Yaten está muy interesado en ti.

Mina asintió con la cabeza y pegó un brinco

—No es momento de estar pensando en esas cosas. Serena se casa y yo Mina Aino soy la responsable de que esta ceremonia se lleve acabo….y se echó a reír fuertemente.

Yaten y Taiki se acercaron a las chicas para informarles que todo estaba listo y solo esperaban que Serena y Seiya aparecieran. En ese momento las puerta principal de la cabaña se abrió y los amantes aparecieron ante ellos. Serena estaba impactada por lo que veía.

—Pero que significa esto, ¿qué hace ustedes aquí?….preguntó Serena.

Mina se lanzó contra Serena le dio un abrazo fuerte para felicitarla por el compromiso y la tomó de la mano para llevarla a la habitación principal.

—Serena, no hay tiempo tienes darte un baño, vestirte, maquillarte y peinarte. Los invitados están por llegar.

Serena no sabía los qué pasaba miraba a todos lados a Seiya, pero nadie decía una palabra.

—¡Serena!, hoy es tu boda con Seiya, vamos no hay tiempo que perder…dijo Mina.

—¡Qué!..gritó Serena. —Seiya Kou me puedes explicar esto, no entiendo nada.

Seiya se acerco a la rubia muy cariñosamente

—Bombón, esta noche a la luz de la Luna nos convertiremos en lo que tanto deseamos. Nuestra boda se llevará acabo en este hermoso lugar.

—Seiya, por qué no me dijiste lo que planeabas….preguntó ella.

El joven esbozó una pequeña sonrisa

—Porque no podría soportar el hecho de perderte de nuevo. Bombón, mi dulce bombón, a partir de hoy tú y nuestro bebé estarán protegidos por mi.

Cuando Seiya terminó de decir eso, todos se sorprendieron por el hecho de que Seiya sabía que Serena esperaba un bebé del cantante. Yaten fue el que resultó más sorprendido que todos.

—¡Seiya será papá!…dijo él y se echó a reír. —Espero que así ya madure….dijo el cantante acercándose a Serena para felicitarla. —Sin duda has traído la alegría a nuestras vidas Serena.

—Pero que te pasa Yaten…gritó Seiya.

—Nada, nada hermano. Te felicito solo espero que seas muy buen padre…dijo Yaten.

Taiki por su parte lo sabía, Ami se lo había contado ya que ella estaba enterada de los planes que tenía Seiya y de las reuniones con los abogados sobre la herencia de los Kou. Taiki confianza plenamente en Ami así como ella a él. A Ami le pareció oportuno incluir al bebé de Serena en la herencia, y no dudo en hablar con Taiki al respecto. Él por su parte quedó muy sorprendido pero al igual que Yaten disfrutaba de la idea de ser tío.

—Felicidades Serena y Seiya, sin duda serán buenos padres….dijo Taiki abrazando a ambos. —Contaran con Ami y conmigo para ser los mejores tutores en la educación de su bebé.

—Así es cuenten con nosotros…resaltó Ami.

Hubo un silencio por las palabras de Taiki y Ami y después todos se echaron a reir.

—Ya basta de conversación, Serena tenemos que ponerte hermosa para uno de los días más importante de tu vida….dijo Mina.

Serena se separó de Seiya dandole un tierno beso mientras sus dedos disfrutaban de la lejanía de sus cuerpos.

En la habitación principal estaba el vestido que Serena usaría para la boda. El vestido era muy hermoso de color perla como la Luna. Tenía una caída suave y ligera con la intensión de moverse al compás de los pasos de Serena.

—Te ves hermosa Serena, que envidia me das…exclamó Mina llena de emoción.

—Mina, se supone que somos amigas….dijo Serena.

Mina rió escandalosamente.

—Lo sé Serena, pero sabes como anduve tras uno de los Kou y mírate ahora tu tienes al más guapo, claro después de mi Yaten.

—¿Por uno de los Kou? No será que por Seiya también.

Mina volvió a reírse nerviosamente

—Serena, por supuesto que no. Yaten es el elegido, lo prometo….Mina hizo una pausa.— Seiya es como un niño, Taiki es muy intelectual para mi, en cambio Yaten es…los ojos de Mina se iluminaron.

—Entonces estoy en lo correcto….exclamó Serena.

—Bueno sí un poco, pero Seiya nunca se hubiera fijado en mí..rió la rubia.

—¡Mina Aino!

—Tranquila Serena, mejor hay que apurarnos que los invitando están por llegar.

Serena comenzó a reír al ver a su amiga sonrojada por el juego de palabras que habían tenido.

Afuera de la habitación se comenzó a escuchar un escándalo y gritos. Las dos rubias no sabían que estaba pasando. Serena sintió como su corazón comenzó a latir esperando lo peor.

Mina fue a echar un vistazo no sin antes decirle a Serena que permaneciera en la habitación y no saliera. Al reunirse con los demás no podía creer lo que sus ojos están viendo.

—¡Necesito hablar con ella Kou!…no permitiré que esto se lleve acabo.

—Cálmense todos por favor…dijo Taiki.

—Taiki tiene razón es mejor que nos tranquilicemos ….dijo Ami.

—¡Mina, por qué no me habías dicho nada de esto! En qué momento Serena se involucró con Seiya.

Seiya se mantenía a la defensiva, mientras sus hermanos trataban de calmarlo. Mina no sabía que decir, no esperaba este tipo de escenas en la boda de su mejor amiga.

—¡Haruka! Creo que es mejor que te vayas…dijo la rubia. —Después hablaré contigo.

—¡Dónde está necesito verla!…gritó el rubio.

—No verás bombón, veté Haruka….dijo Seiya.

—¡No me iré! Y es mejor que te alejes de ella Kou.

Todo se intensificaba más, todos gritaban y no sabían qué hacer por la actitud de Haruka.

—¡Basta!…gritó Serena. —No discutan más, por favor….dijo ella derramando un poco de lágrimas.

Seiya fue junto a ella. —Bombón.

—Hablaré con Haruka, déjenos solos por favor. Estaré bien…dijo Serena mirando fijamente a Seiya.

Haruka y Serena regresaron a la habitación clamando un poco el ánimo de todos.

—No puedo creer que es sujeto se haya aprovechado de ti.

—Él no lo hizo, me enamoré de él Haruka y tienes que entenderlo.

—Serena, tú no perteneces al mundo de los Kou. Ellos están involucrados con la familia Black. Puedes resultar herida, que acaso no lo entiendes. Serena mi deber es protegerte. Seiya y Black Lady están unidos por asuntos legales más que por amor. Tu no mereces a ese sujeto, mejor dicho, Seiya no te merece.

—Haruka…suspiró Serena. —Amo a Seiya, me enamoré de él y quiero ser feliz a su lado. Él y yo seremos muy felices. Pero mi felicidad no estará completa si tú no entiendes el camino que he elegido….Serena hizo una pausa. —Estoy consciente que estar a su lado será muy difícil, ahora lo está haciendo, pero de debo luchar por esto que siento.

Haruka derramó un poco de lágrimas.

—Eres una tonta Serena, ella no te dejará en paz. No puedo permitir que te dañen. Diamante puede acabar con todo lo que tu amas.

Serena caminó hacia Haruka y tomó sus manos.

—Estaré bien, si tú estas conmigo y no me dejas sola. Esa familia, no podrá conmigo si la gente que amo está siempre unida. No sé que vaya a pasar después de este día, pero lo que si estoy segura es que será un nuevo comienzo para todos, incluyendo un nuevo comienzo para esa chica.

Haruka acarició la mejilla se Serena

—Siempre haz sabido mis verdaderos sentimientos hacia ti…dijo él. Pensé que podría tener una oportunidad.

Los ojos de Serena nuevamente comenzaron a cristalizarse.

—Y tú sabes que siempre he sido clara contigo, y eso te ha convertido en alguien muy importante para mi. Haruka, acepta mi decisión y comparte conmigo la felicidad que siento al casarme con Seiya.

Haruka se separó de ella

—Creo que ya no tengo mucho que hacer por aquí. Solo espero que ese sujeto no se aproveche aún más de ti, eso jamás se lo perdonaría….terminó de decir y salió de la habitación.

Todos estaban a la expectativa de lo que pudiera estar ocurriendo entre Serena y Haruka. Cuando vieron que Haruka regresaba a reunirse con ellos un ambiente más armonioso empezaba a sentirse.

—Lamento mucho haber interrumpido su celebración….dijo él mientras dirigía su mirada a Seiya. —Más vale que no le hagas daño, y sabes a qué me refiero.

El rubio salió de la cabaña, subió a su automóvil y a toda velocidad dejó el lugar.
Mina fue inmediatamente a ver a Serena, quién se encontraba mirando la partida de Haruka desde una de las enormes ventanas de la habitación.

—Él lo entenderá, solo dale tiempo. Pensé que él se había olvidado de ese tonto amor que siente por ti. Cometí el error de invitarlos a él y a Michiru. Cuando llamé a la casa de Haruka nadie contestó y dejé mensajes de voz, sin embargo, recordé que tenía el número de Michiru le marqué y me dijo que ella decidió alejarse de Haruka después de regresar de la Isla. Ahora ella está de gira dando conciertos y se disculpó por no poderte acompañar.

Serena miró a Mina fijamente

—Después de que Haruka se enteró de tu separación con Darien las cosas entre ellos dos cambiaron, así que Michiru decidió alejarse de él para pensar profundamente su relación. Serena, esto no es tu culpa, Haruka debe entender que tu amor por él es de otra forma.

—Mina, pude ver el sufrimiento de Haruka en sus ojos. Me pedía que no lo hiciera….Serena rompió en llanto.

Mina abrazó a su amiga. —Es normal Serena, Haruka siempre te ha amado. Pero él estará bien. Está encaprichado contigo pero en el fondo su único amor es Michiru. Vamos a darle un poco de tiempo, el entenderá que el amor que te tiene es puro con el dos buenos amigos, y que si intensión siempre ha sido protegerte.

Serena secó sus lágrimas.

—Allá afuera está alguien impaciente por convertirte en su esposa no lo hagamos esperar. Vamos a seguir poniéndote más hermosa que nunca, además los invitados están por llegar.

Serena se tranquilizó y sonrió un poco. Pensó en Seiya y su bebé nadie le arruinaría este momento de felicidad.

Ami y Yaten eran los anfitriones de la pequeña ceremonia que se llevaría acabo en unos momentos. La hermosa chica peli azul daba la bienvenida a los invitados. Los primero en llegar fueron Lita y Andrew que hacían una pareja hermosa. Con unos minutos de diferencia llegó Setsuna acompañada de la familia de Serena. Ami dulcemente les ofreció algo de beber y los dirigió a la terraza que lucía hermosa y celestial. Mina había invitado a los amigos más cercanos de Serena cuando era ella estudiante, de los que destacaban Molly y Kelvin. Los chicos estaban asombrados por la acogedora que era la recepción. La profesora Esmeralda, quién había animado a Serena a continuar sus estudios también estaba presente.

Las luces de un automóvil lujoso deslumbró a Ami y Yaten quien ya no esperaban a más invitados. Una hermosa joven con cabello color turquesa bajó, desprendiendo una suave fragancia que cautivo inmediatamente a Yaten. Su elegancia al caminar era sin duda la de una princesa.

—Michiru…exclamó Ami. —Pensamos que no vendrías por lo ocurrido…pero Ami no terminó de decir la frase.

Michuru sonrió delicadamente con una elegancia intrínseca de ella.

—No puedo perderme el día tan especial de esa niña, a pesar de todo, ella es a quién tenemos que proteger. Por ella conocí a Haruka, y sé que le alegrará tenerme aquí.

Los ojos de Ami brillaron. —Estoy segura que sí, por favor pasa no tarda en empezar la ceremonia.

—¡Espera!…dijo una voz que venía desde la oscuridad.

Michiru, Ami y Yaten dirigieron la mirada hacia esa voz.

—Les pido que me disculpen he sido un tonto, Michiru perdóname….dijo Haruka quién había regresado más tranquilo. Le debía una disculpa a Serena, sin lugar a dudas.

Michirú se acercó a él y acomodó el cabello despeinado de Haruka.

—No es a mi a quién tienes que pedir perdón. Tu y yo hablaremos luego, ahora tenemos que ser felices porque esa niña lo merece.

—Eres muy gentil Michiru…dijo Haruka, tomando de la mano a su hermosa acompañante y depositando un beso en ella.

Ami llevó a Haruka y Michuri a la terraza. Todos estaban completos, la gente que amaba a Serena estaban presentes. El juez había llegado todo estaba listo.

—Serena te tengo una sorpresa, es mi regalo para ti.

Mina se dirigió a la puerta y al abrirla aparecieron los padres de Serena. Ella trató de llorar de la emoción pero no pudo. Corrió a abrazarlos y no podía dejar de estar tan feliz.

—Mi hermosa princesa….dijo Kenji con lágrimas en los ojos. —Yo seré quién te entregue a ese hombre que aún no tengo el gusto de conocer.

Todos allí rieron por las palabras del padre de la novia.

—Serena, estás hermosa hija. Tienes que invitar a Cenar a Seiya a la casa para conocerlo. Es un hombre muy guapo. Estamos muy felices por ti y por todo lo que haz logrado.

Serena abrazó y besó una y otra vez a sus padres y no terminaba de agradecerle a Mina con su mirada por haber hecho hasta lo imposible por traerlos ese día tan especial.

—Tenemos que irnos, tendrán mucho tiempo después para llorar. Serena déjame retocarte un poco. Estamos listos, futura Sra. Kou llegó el momento.

Serena suspiró y salió de la habitación del brazo de Kenji quién la entregaría con el hombre a quién la vida había puesto para ella.

OoOoOoOoO

Serena hizo su entrada triunfal al lado de su padre. Todo era mágico y comenzó a sonar una melodía en voz de Mina para su entrañable amiga:

Sueña con un mañana
Un mundo nuevo debe llegar
Ten fe, es muy posible si tú estás decidido
Vive, con la emoción de volver
A sentir a vivir en paz

Serena dirigió la mirada a Seiya quién estaba parado al lado de sus hermanos, esperando a la mujer de su vida. Sus ojos comenzaron un poco a cristalizarse, miró a su alrededor y ahí estaban toda esa gente que la había apoyado. El camino hasta llegar a su amado Seiya Kou era eterno pero lo disfrutaba del brazo de su padre. Miró hacia derecha y pudo ver a Haruka y Michirú y sintió paz en su interior. Haruka la miró y pudo ver en su mirada el amor y la aceptación por la decisión que ella había tomado. La voz de Mina seguía interpretado esa canción que hizo a todos erizar su piel.

Dónde las almas se unan en luz
La bondad y amor renacerá
El día que encontremos
Ese sueño cambiará y no habrá nadie
Que destruya de tu alma la verdad
Sueña que no existe fronteras
Un amor sin barreras, no mires atrás

Sueña con un mundo distinto….

Serena se detuvo frente a Seiya, el padre de la novia entregó la mano a su hija y abrazo a fuertemente a Seiya, mientras susurraba unas cuantas palabras al hombre que le había robado a su hermosa hija. Seiya se sonrojó un poco y rió para sí asintiendo con la cabeza.

Seiya tomó la mano de Serena y depositó un beso sobre ella. —Mi dulce bombón, ya no soy más una estrella fugaz.

La música paró y una dulce melodía comenzó a sonar dando lugar a la ceremonia.

Seiya miraba con ternura a Serena mientras todos estaban atentos por las palabras del Jueza. Ami derramó un par de lágrimas por el amor que emanaban Serena y Seiya, el ambiente era mágico y el discurso del Jueza era muy dulce. Taiki le ofrecido su pañuelo, ella lo miró y pudo ver el amor en ambos. Taiki la tomó de la mano y le ofreció su brazo de apoyo.

Serena miró a Seiya y a su mente vino el primer día que accidentalmente lo conoció, después vinieron los recuerdos de esos días en la Isla de su sueños y el momento de su primer beso, el atardecer en ese risco, y aquel día en el que le escuchó decir que la amaba. Ahora él estaba allí junto a ella, con un porte de grandeza, con una elegancia propia de los Kou. Sus pensamientos y la dulce mirada llena de amor de sus grandes ojos enmarcados por esas largas y abundantes pestañas serían solo para ella y su bebé.

La jueza estaba por terminar su discurso.

—Hay alguien aquí presente que no apoye está ceremonia de matrimonio entre Serena Tsukino y Seiya Kou.

Se hizo un silencio corto pero que al mismo tiempo parecía eterno.

Serena miró hacia atrás y pudo ver desvaneciéndose entre las sombras al que una vez fue su gran amor. Ella sintió paz y tristeza al mismo tiempo pero miró a Seiya y supo entonces que todo había quedado atrás y que pronto empezaría un nuevo día.

—Antes de proceder con las firmas, Serena y Seiya quieren decirse algunas palabras mientras se entregan sus sortijas.

Ambos asistieron con la cabeza. Mina y Yaten llevaron las sortijas a donde se encontraban los casi esposos. Mina guiño el ojo a Serena en señal de felicidad y apoyo. Yaten le dio la mano a su hermano, a quien Seiya agradeció con una sonrisa pícara.

—Serena, mi dulce bombón, has traído a mi la mayor felicidad. Nuestro amor no nació accidentalmente. Ese día que te vi por primera vez en el aeropuerto, te observé detenidamente, me pude percatar que tú no prestabas atención a nada más que no fuera tu pasión. Me acerqué a ti, y ver esos ojos puestos en mi fue lo mejor que pudo haberme pasado este día. Nunca pensé que ese fugaz encuentro daría pie a la mejor experiencia de mi vida, y sin darme cuenta fue el inicio del verdadero amor entre los dos. Eres muy gentil bombón, con muchos sueños y te enamoraste de mi sin pensar y saber quién era yo. Y aquí delante de las personas que te aman. Te aseguro que te protegeré a ti y a nuestro bebé.

Muchos se sorprendieron al escuchar la última frase de Seiya, en especial Haruka y Michitu, y por supuesto los padres y el hermano de Serena.

—Eres una mujer extraordinaria bombón y siempre estaré orgulloso de ti. Te amo, y siempre permite me amarte y ser tu apoyo incondicional. Te prometo que trataré de no ser tan coqueto y galante con mis fans porque sin duda tú siempre serás a quién le dedique todas mis canciones. Te amo bombon, y te amaré sin importar que el universo no sea infinito.

Los ojos de Serena se cristalizaron un poco pero ahora el turno de ella.

— Mi querido Seiya, no pude rechazar la mejor oferta de mi vida…dijo ella mientras sonreía pícaramente. Que más podía pedirle a la vida, hace muchos años que pedía un hombre guapo, que fuera cantante, que me pudiera mostrar el mundo y que respetara mis sueños….todos esbozaron una sonrisa por las palabras de Serena.

—Seiya, la verdad es que contigo aprendí a enfrentar mis miedos. Tampoco entiendo como fue que me enamoré de ti. Solo coincidimos en ese lugar mágico, en ese instante en el tiempo. Gracias por mostrarte tal y como eres, por mostrarme al Seiya de quién me enamore. Me enamoré de ti sin saber en que me metía….todos comenzaron a reír. —Pero no hay vuelta atrás, tendrás mi apoyo incondicional, y tus fans tendrán que soportarme porque ahora tendrás dos amores a quienes proteger y amar intensamente. Te amo Seiya, y ese día en el risco me di cuenta que nada podría opacar nuestra amor, ya que brillará por siempre como la Luna llena lo hace en los cielos oscuros. Te amo.

Serena y Seiya se abrazaron y miraron fijamente y se dieron un tierno beso, mientras los invitados aplaudían.

—Empezaremos con el Sr. Kou, por favor firme aquí y al final de todas estas hojas.

Serena miraba como Seiya firmaba sin dudar cada una de las actas. Sus ojos comenzaron a cristalizarse, su piel comenzaba a erizarse. Tocó su vientre para tranquilizarse. Cuando Seiya terminó la Jueza miró a Serena para indicarle con la mirada que de ella dependía si aceptaba o no al hombre que tenía a su lado.

—Es tu turno bombón…dijo Seiya dulcemente.

Ella lo miró y asintió con la cabeza. La música comenzó a sonar.

Serena tomó la pluma y miro las actas y comenzó a firmar. Una tras otra, su firma y la de Seiya estaban ahora impregnadas legalmente. El corazón de Serena comenzó a latir fuertemente. Cuando llegó a la última hoja ella se detuvo, cerró los ojos por unos segundos y se dio cuenta que no era un sueño. Firmó la última hoja y lo miró ahora nada ni nadie podía separarlos porque ellos se amarían por toda la eternidad.

—Serena Tsukino y Seiya Kou se han unido en matrimonio legal tal como estipulan las leyes de Japón. Enhorabuena Sra. y Sr. Kou….terminó de decir la jueza.

Todos en ese momento aplaudieron llenos de alegría. Serena y Seiya se abrazaron y se fundieron un largo y tierno beso. Mina, Ami y Lita corrieron a felicitarlos. Las lágrimas no dejaban de fluir entre los invitados. Sin duda, era el comienzo de algo mágico que podría destruirse si ellos no ponían todo su amor y entrega el uno con el otro.

Muchas gracias por leerme, y por sus comentarios.

cariños,

Zibo Kou.

El crédito de algunas de las frases que utilizo son parte de letra de la canción: Luis Miguel. (1996). Sueña [CD]. Walt Disney Music Company (Publishing), UBEM, ASCAP, PEDL, UMPI, and 8 Music Rights Societies.