Inazuma eleven GO y sus personajes no son de mi propiedad, pertenecen a Level-5.
—Diálogos—
—Pensamientos—
"FlashBack"
0-0-0-0-0-0-0-0: Cambio de escenario
(*): Notas que dejare al final aclarando algo de ese párrafo.
Tema de hoy: Shindo ha ofendido a Akane de alguna manera, pero no se da cuenta.
(Canon/Romance/Fluff/¿Humor? X,D)
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:-:-:
.:.:Malentendidos:.:.
:-:-:
Existían muy pocas cosas que le hicieran sentir verdaderamente molesto, nervioso o desesperado, más que todo si estaban relacionadas con sus seres queridos o el deporte que tanto ama, Shindou se consideraba alguien inteligente y capaz de encontrarle lógica y solución a la mayoría de "problemas" por los cuales todo adolescente pasa. Excepto, por supuesto si es que no está enterado de cual demonios es el problema.
Así que en su situación actual, se podría decir que desesperado, desde luego que estaba, ¿Molesto? Quizás solo un poco, pero más que todo confundido… ¿Qué demonios había hecho para que Akane, su novia, optara por ignorarlo y esquivarlo por toda una semana? ¡Ya inclusive Kirino le había preguntado seriamente si habían tenido una pelea muy mala o algo por el estilo!
Cuando intentaba hablar con ella siempre estaba con sus amigas o con alguien y realmente no quería tocar aquel tema frente a otras personas, no respondía sus mensajes, e inventaba excusas como tener que estudiar para los exámenes –Que ya estaban en 3ro y estaban a reventar de tareas o pruebas- ya casi en estado de desesperación, eso sumándole la molestia de ver que aceptaba sin problemas ir a almorzar con el resto de personas, más aun con los chicos del club, no se consideraba celoso y realmente no lo era, pero ver como tu novia te evita pero acepta ir con otros chicos, pues sí que enervaría un poco a cualquiera.
Un día, específicamente el séptimo desde que toda esa locura inicio, no aguanto más e importándole poco el entrenamiento tomo de la muñeca a la chica nada más intento huir tras acabar las clases, arrastrándola sin escuchar sus quejas fuera del instituto, sabía que no podría montar un escándalo frente a tantos alumnos pues no estaba en ella, odiaba llamar la atención, otras cosa seria de camino a su casa que a donde tenía intenciones de llevarla, así que había calculado muy bien su plan indicándole al chofer de su casa que pocas veces solicitaba que esperara en el portón del Raimon nada más acabaran las clases, como era de esperarse estaba allí puntualmente agradeciéndole por lo bajo que abriera la puerta trasera del negro vehículo pues se le hizo mucho más fácil cargar a la chica –Que pocas intenciones tenia se subir- que se quejó con un sutil y adorable gritillo para luego depositarla con cuidado en el asiento de atrás. Dudo un poco de si subir junto a ella o en el asiento del copiloto, pero en vista de que la estaba prácticamente secuestrando, decidió ir a lo seguro y quedarse junto a ella, en plan para evitar que quisiera saltar del auto o algo por el estilo, no es que pensara que realmente pudiera hacerlo pero viendo la cantidad de comportamientos poco usuales por no decir imposibles para ella en esa semana prefirió prevenir, en todo caso la inmovilizaría para que no pudiera escapar.
La chica pese a resistirse todo el camino quedo más clamada una vez dentro del auto, quizás porque sabía que su novio realmente ya no la dejaría escapar con ninguna excusa que le inventara –Aparte que se sentía un poco mal y asustada de la seria expresión que tenía en el rostro- , así que en un incómodo silencio viajaron los pocos minutos en auto que tomaba el camino de la escuela a la enorme casa del futbolista, alguna vez había mencionada que por ello mismo prefería ir el solo.
Una vez estacionados el chico bajo y le ofreció la mano para ayudarle, quedaron estáticos unos segundos en lo que la mente de la pobre volvía a trabajar con lógica.
—Puedes venir por las buenas o te llevare por las malas — No se escuchaba enojado solo un tanto cansado por el pesado suspiro que dejo escapar, la de trenzas sabía que sí que era muy capaz de cargarla de nuevo esta vez todo el camino hacia la habitación del chico –Que es seguramente donde la llevaría para que no lo evitara- para horrase dicha vergüenza frente al personal que trabajaba en la casa y que no malinterpretaran tal escena decidió mejor tomar con timidez la mano de Shindou y seguirlo obedientemente, al contrario de lo que espero, el chico se aferró a su mano ya no en plan evitando que pudiera escapar, sino más bien como si necesitara tocarla de alguna manera muy urgentemente.
Las tiernas caricias que le fue propinando por el dorso de su mano a largo del camino fueron lo suficientemente efectivas como para ignorar los comentarios de su novio hacia algunas jóvenes del personal de que no los molestaran por un rato. Llegaron a lo que seguro era una de las situaciones más incomodas en la vida para ambos, en el cuarto del pianista sentados frente a frente en los sillones con el mas sepulcral de los silencios, Shindou solo se dedicó a mirarla finamente y sin descaro, viendo la obvia incomodidad en la que se encontraba su novia. Un peso comenzó a instalarse en su pecho asentándose cada vez más, ella ni siquiera podía mirarlo la cara y eso de alguna manera le dolía, bastante.
— ¿Qué sucede? — Pregunto sin rodeos, desistiendo a dejarla iniciar por si sola — ¿Por qué razón llevas evitándome esto días? — Akane solo se dedicó a juguetear con sus dedos, avergonzada de repente por su comportamiento más que enfadado como pensó que estaría, sonaba dolido.
—Es tu culpa — Respondió sin ganas, victoria, eran las primeras palabras que le dirigía cara a cara en un par de días, pensó en lo patéticamente enamorado que debía estar como para que tres simples palabras lo hicieran de repente tan feliz y suspirar de alivio, al menos le dirigía la palabra.
—De acuerdo — Acepto con cautela, se sentía como si estuviera intentando acorralar o capturar a algo así como un conejito asustado, tenía que tener cuidado o podría volver a huir — ¿De qué tengo la culpa exactamente?
—Tu no quieres que este cerca — A modo de protección y detracción a partes iguales tomo uno de los cojines del sofá, abrasándolo un poco, era mullido y grande, perfecto para ese momento donde enserio ocupaba abrazar algo, de repente la estampa llorosa de su novia le hizo desear con todas sus fuerzas ser ese algo.
—Créeme que no puedes estar más lejos de la realidad — Tuvo que resistir el fuerte deseo de ir y abrazarla en ese preciso instante, pero tenía que resistir y asegurarse de que no rechazaría sus mimos, eso sí que lo dejaría muy mal emocionalmente.
—Pero tú lo dijiste — Le rebatió, dejándole una vista plena y en HD e sus lindo ojitos lloroso a punto de empezar a llorar quizás recordando eso de lo que lo acusaba, é mismo realmente trataba de recordar en si algún momento podría haber dejado escapar tal comentario estúpido. Ella viendo su confusión lo ayudo — Hace una semana estaba con Aoi-Chan, Midori-Chan y las nuevas managers de primero y segundo, estábamos enseñándoles el almacén y donde estaban guardados todos los equipos, junto a esa sala estaba una sala de juntas adema de que la puerta estaba abierta y entraste con Kirino-san y alguno chicos más, no me fije bien, solo pude prestar atención correctamente al momento en que dijiste que realmente preferirías que ya no me inmiscuyera tanto con el trabajo de manager — Como si de flashes se trataran a la mente le vino todo lo que guardo en su memoria sobre aquella tarde… En efecto sí que había pasado.
Akane al ver el rostro asombrado del chico solo pudo esconder el propio en su cojín para que no la viera reventar en llanto.
—T-Todas las chicas estaba allí y lo escucharon, q-que tú ya no querías que estuviera en el equipo, en esos momentos estaba muy sorprendida y d-dolida, pensando en por que ya no me querrías, me la pase insegura al siguiente día por eso te evite en un principio, pero al siguiente de ese las demás chicas empezaban a mi-mirarme con lastima, me molesto tan-tanto — Parecía que quera hacerse invisible, o que el sofá se la tragara, pues no dejaba de intentar hundirse mas y más, en un punto también había subido sus rodillas al mullido asiento para abrazarse. Siguió y siguió balbuceando un ratito mas sobre todo lo que había pasado esos días también, a media semana se había arrepentido de todo, y quería acercarse para disculparse pero el miedo por ser rechazada y que estuviera molesto con ella la acobardaba, o también de como Aoi y Midori querían ayudarla y la orillaban a hablar con él, pero la vergüenza terminaba ganando, una vez iniciado la chica ya no podía parar de soltar su palabrería, hasta que escucho la liguera risa de su novio.
Este intentaba contener las carcajadas a duras penas, indignando mas de ser posible a la pobre fotógrafa que solo comenzó a refunfuñar, antes d que ella decidiera huir, rápidamente el corrió a sentarse junto a ella y abrazarla, o bueno, al menos a la bolita humana que se había vuelto, este intento resistirse pero luego de una semana si haber tomado si quiera sus manos el calor de los brazos ajenos fue inexplicablemente efectivo para ablandarla, aun sin responder simplemente se dejó mimar en lo que el controlaba su risa.
—Akane, me refería a que realmente desearía que ese trabajo ya no te absorbiera tanto ahora que hay más ayuda, de vez en cuando sales incluso más tarde que yo de los entrenamientos — Con delicadeza busco tomas las suaves mejillas de la chica, que interesada por el comentario presto más atención — Y no es porque no te quiera en el equipo tonta, adoro poder verte todo los días con tu cámara en los bancos, pero con lo ocupados que estamos con los exámenes me gustaría tener a mi novia para mí solo por lo menos unos momentos al día — El panista miro con satisfacción como la mueca de confusión de la joven fue mutando a comprensión, asombro y por ultimo vergüenza.
— Y eso solo pasaría luego de todas las clases y de los entrenamientos pues sé que lo fines de semana los usas para estudiar, te juro que incluso he pensado en simplemente secuestrarte por un rato y saltarnos las practicas, pero sería demasiado obvio si los dos faltamos el mismo día, solo conseguiría una charla incomoda por parte del entrenador o de Otonashi-sensei — En todo el momento que culmino de hablar la chica intenta huir de su mirada luciendo adorablemente avergonzada pero teniendo sus cálidas mejillas entre las manos no se lo permitía, para mayor bochorno de la pobre se aseguraba de mirar con lujo de dátele toda su carita avergonzada.
Tras un buen rato de lo que pareció ser una lucha interna titánica la joven consiguió a duras penas mirarlo.
—Y-Y-Yo… — Se sentía tan tonta, había mal interpretado horriblemente las palabras de su pareja simplemente basándose en las opciones de personas ajenas a ellos, cerro los ojos aterrada — ¿E-Estas molesto? — Se sentía idiota, pero era a todo lo que le llegaban las palabras luego de tan estresante semana y de vomitar todo lo que se había guardado hace nada.
Silencio. El más insoportable silencio de su vida fue lo que la recibió durante un minuto.
—Enserio, quiero estarlo… Debería estarlo, pero ahora mismo solo quiero que vengas aquí — Sin poder contener aun su sonrisa de idiota o la mueca de alivio infinito se ocupó de jalarla hacia sus brazos, recostando la cabeza en ese pequeño hombro donde le encantaba descansar, solo dios sabia cuan asustado se había sentido por el comportamiento de su novia, el pensar que quería terminar con el o que le había hecho algo terriblemente malo no lo había dejado dormir bien, además de que la pesadez en su pecho no desaparecía.
—Lo siento mucho — Murmuraba una y otra vez la pobre oji lila correspondiendo sin dudar al cariñoso abrazo, si algo había aprendido era que a Shindou parecían gustarle y hacerle mucha falta las muestras de cariño, así que privarlo una semana entera y sin justificación de ese tipo de contacto lo había dejado afectado, un muy largo rato después apenas y el chico la libero, pero claro que sin alejarse mucho y comenzando esparcir tiernos besitos por toda su mejilla.
Akane en su vida iba a estar más roja que en ese momento.
—No vuelvas a hacer semejante cosa por favor, estaba muy asustado pensando que te había hecho enojar o que ya no querías estar conmigo — Suspiro aliviado nuevamente, aun con ella en brazos por fin se había quitado de encima aquel peso que había estado cargando.
—Eso nunca va a pasar — Murmuro extremadamente cohibida — T-Te quiero — Shindou estaba en las nubes de nuevo, tal y como lo había estado cuando empezaron a salir, aspiro profundo tratando de calmarse y de paso disfrutando del perfume de ella.
—También te quiero — Le sonrió para luego dejarle un rápido besito en los labios.
Ya más tarde pensaría en como reprenderla por pensar en algo tan absurdo como que no la quería en el equipo, por el momento solo querría recuperar el tiempo perdido.
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ÑEEEEeeee no me convence Dx
Pero no se me ocurría nada más y tengo que actualizar y pues la azúcar siempre vende (? Ok no x,D ya hacía tiempo que no me pasaba lo de que no me gusta mucho un capi :''v quizás es buena señal? X,D
Prometo esforzarme más :,) tengo que escribir mucho para lograr llegar a los 50 capis antes de fin de año TuT –cmatha- (? Pero lo hare carajo ò,-,ó9 esta pareja lo vale *MegaCorazonzote*
Sin más que decir, espero que no lo odien tanto ;-; Ciao ciao
PD: PERDONEN si hay errores Dx pero me dio tanto asco que no pude leerlo bien, solo lo corregir por encimita, entonces me dirán "para que carajos lo publicas?" si no estuviera tan apretada con la reserva de capitulos no lo haría X,D mas de una vez en esta historia e descartado las ideas que no me convencían pero ahora no me puedo dar ese lujo ;A; No me maten plz -Se esconde de los tomatazos-(?
ATT: Maria Violet. Bye Bye ;w;
