Inazuma eleven GO y sus personajes no son de mi propiedad, pertenecen a Level-5.
—Diálogos—
—Pensamientos—
"FlashBack"
0-0-0-0-0-0-0-0: Cambio de escenario
(*): Notas que dejare al final aclarando algo de ese párrafo.
Tema de hoy: Akane y Shindou en la playa.
(Canon/Romance/Fluff/Family)
Aviso: pequeñas referencias de conexión con el capítulo 30 de esta misma historia ywy
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:-:-:
.:.:Pequeñas vacaciones:.:.
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La brisa soplaba fresca, el olor a sal y la calidez de los últimos rayos de sol acariciaban gentilmente sus mejillas mientras disfrutaba tranquila de la paz y soledad en la que se encontraba.
¿Qué podía ser más relajantes que tomar una siesta enfrente de las bellas playas de Okinawa? Akane podría ser allí mismo la mujer más feliz del planeta, el lento vaivén de la mecedora donde se encontraba sentada, en la pequeña y relajante terraza de la casa de vacaciones que daba directo a una solitaria playa.
En ese mismo instante se retractaba totalmente de insistirle su esposo de no viajar en sus ya avanzados 7 meses de su segundo embarazo. No podía pedir nada más satisfactorio que el sonido de las olas y la tranquilidad de aquella casa vacacional que había alquilado el castaño.
Algo lejanas, ciertas risas una de ellas más infantil que la otra llamo toda su atención, y pese a que disfrutaba mucho de descansar como estaba no pudo evitar levantarse acercarse lentamente al lindo cuadro que hacían su esposo y su pequeña hija de casi 2 años jugando con la arena y un montón de conchas y caracolas que habían recolectado en las orillas y alrededores de la playa. Ver a Shindou ayudar a Utau a levantar como pudieran un gran montón de arena simulando ser una castillo o una fortaleza era algo que no cambiaría por nada, realmente quisiera ir corriendo a la casa a buscar su cámara para poder grabarlos y tomar las miles de fotos que merecía la escena. Solo que su prominente barriga en absoluto le dejaba hacer semejante esfuerzo, en definitiva en esta ocasión su embarazo era mucho más prominente, lo que se veía algo extraño en ella siendo tan bajita y delgada.
La dulce niña muy parecida a su padre pero con el color de sus ojos balbuceaba aun las palabras, algunas muy calaras por su constante uso y otras no tanto, claro que ellos de alguna manera le entendía perfectamente cuan trataba de hablar… Quizás eso les pasa a todos los padres, no estaba segura.
Siguió murándolos durante unos momentos más bastante embobada, el viento un era cálido pese a estarse poniendo el sol, la anaranjada luz los bañaba a ambos mientras decoraban el montículo, bueno más bien la pequeña se encargaba mientras su padre era un muy eficiente asistente, viéndola divertido y sonriente como trabajaba con notoria y divertidamente seria concentración. Se preguntó internamente si era posible estar tan feliz, tenía a su pequeña familia con ella en un precioso paraíso y dentro de un poco más de tiempo tendría de nuevo a un pequeño en sus brazos, agotándola con la constante atención que debía darle pero haciéndola inmensamente feliz, acarició inconscientemente su vientre, susurrándole al pequeño Kanade que prometía volver luego estando todos juntos para formar parte de un cuadro como ese en el futuro, en esta ocasión no tuvo corazón para dejar a su esposo con la intriga de lo que sería su segundo hijo, así que en cuanto pudieron revelaron el género que tendría su nuevo bebe, siendo esta vez un pequeño niño por lo que no tardaron en escoger un nombre.
En lo que ella desvariaba cierta pequeña se dio cuenta de su presencia a solo unos metros y rompiendo con la seriedad que había tenido durante toda su "obra" su cara se ilumino en una preciosa e infantil sonrisa que hacia siempre bailar del corazón de sus padres por la felicidad que la misma pequeña irradiaba.
— ¡Mamá! — Grito la niña sin contenerse y olvidando fácil mente su castillo y a su padre se levantó sacudiéndose torpemente toda la arena del vestidito ligero que tenía y corrió como pudo sin tropezarse por el inestable terreno de la arena hasta las piernas de su madre… Era tan pequeña aun que era imposible no sonreír mientras se la observaba, pues era muy adorable con su aun corta cabellara castaña oscura salvaje por los rizos que se le creaban.
— ¿Qué sucede Utau? — Pregunto tranquilamente, es cierto que a veces la inagotable energía de la pequeña la dejaba exhausta pero no la cambiaría por nada del mundo.
—Mira, mira un… Castio…— La nueva palabra aún se le complicaba, por lo que la niña apuntaba muy emocionada a u ubicación de antes.
—Castillo — Corrigió su padre que al verla correr tan tambaleante no dudo en ponerse de pie rápidamente para socorrerla de ser necesario, viendo que llego sana y salva con su madre solo se acercó lentamente a ambas aprovechando de pasó de cargar a la pequeña que gustosa acepto los brazos de su papá —Castillo de arena.
—Castillo de area — viendo el casi prefecto intento de la pequeña ambos rieron un poco.
—Es precioso — Asintió complacida — Deberíamos tomarte fotos con él.
—Ya está algo oscuro — Acoto Shindou señalando el atardecer, poco a poco la luz iba disminuyendo — Es mejor esperar a mañana y construir otro ¿Quiere hacer otro? —Pregunto dulcemente a la niña que con ímpetu asintió, le brillaban los ojitos.
—Muy bien, entonces vallamos rápido por un baño para que puedas dormir, que estas toda llena de arena — Señalo divertida la peli crema sacudiendo como podía un poco el cabello lleno de tierra de la niña, Utau vio con fastidio todo la suciedad que tenía encima.
— ¡Con mamá! — Señalo rotundamente la pequeña, esta vez se bañarían juntas y su palabra era siempre ley.
—Está bien, está bien — Extendió los brazos para cargarla ella viendo que se inclinaba lejos de los brazos del pianista buscando a su madre, este se la cedió con algo de recelo, estando ya con el embarazo tan avanzado no le hacía gracia que hiciera fuerzas cargando a Utau, pero era algo que no se podía evitar estando ella aun pequeña y acostumbrada a los mimos de su madre — Papá también necesita un baño — Señalo ella riendo y sacudiendo de igual forma esta vez el cabello de su esposo, quitando un poco de arena acumulada aunque era imposible que con eso fuera suficiente, habiendo estado un buen rato jugando ambos estaban complemente sucios por dicha tierra.
Shindou se encogió de hombros, a diferencia dela niña no s que le molestara en extremo la pegajoso arena.
—Nada que un buen baño no solucione — Todo se encaminaron de regreso a la casa donde se hospedaban puesto que empezaba a refrescar el ambiente, el castaño se abrazó a su mujer mientras caminaba, en espera de su reacción que no tardó en llegar.
—No, no, no te acerques estas todo lleno de arena — Tanto a hija como esposo le parecían muy graciosa la adversidad que tenía la peli cenizo con la arena, al parecer le incomodaba mucho. Ambos castaños no hicieron más que reír.
—Tienes cargada a una niña llena de pies a cabeza con lo mismo ¿Y me rechazas a mí? Me hieres mucho — A modo de reprimenda la se abrazó aún más a ella en lo que entraban en la casa. La pobre gimió de disgusto.
Entre risas la pequeña familia dejo tras de sí la preciosa puesta de sol para adentrarse en la casa. En definitiva no había sido mala idea esa pequeña escapada de vacaciones.
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Bonito pero raro XD no sabía que trama meterle así que solo es una bonita escena, mostrando de paso lo que para mí sería la familia perfecta de esto dos con 2 bendiciones ni más ni menos(? XD
Para los curiosos Kanade, el nombre del niño, vendría significando "Música" x,D no me maten pero tenían que combinar sus nombres si o si(? A parte el cómo suena el nombre me encanta XD me lo imagino si bien presido a su mama –CofCofTrapCofCof- y súper desinteresado de la vida :'v el pinche shota baddas no más –Yo y mi insana obsesión con los traps T.T-(?
Me despido que ya casi es 31 y aun me faltan escribir 2 ms C: -Cmatha- Ciaooo
ATT; Maria Violet. Bye Bye :,3
