Akane la seductora

Akane-chica corre apurada por la malla mientras carga su maletín.

-Ranma no me despertó de nuevo. Lleva una semana evitándome… de hecho me evita desde que me beso. –la peli-azul se sonroja recordando eso, y agita su cabeza para sacar esas ideas.


Ranma está en el salón de clases, aún es temprano así que no llega el profesor.

-Ranma, ¿de nuevo llegando solo? –pregunta Hiroshi acercándose junto don Daisuke.

-¿Por qué ya no te vienes con tu prometida? –pregunta burlón Daisuke.

-No molesten. –Ranma ladea su rostro a un lado en un intento de ocultar su sonrojo. –no debí decirle eso mucho menos besarla, ahora no sé cómo mirarla a la cara y no puedo evitar huir de ella. –el pelinegro se pasa una mano por la cara viéndose exasperado y muy avergonzado. –es una gran ventaja que Tatsuha no se haya enterado o no me la acabo.


Akane está tomando su desayuno bajo la sombra de un árbol en uno de los patios de la escuela.

-Ranma estúpido. –piensa rencorosa porque no deja de evitarla, ni a los ojos la mira. –¿acaso se lamenta de haberme besado? ¿me beso como venganza por casi casarme con Mousse? –si, Tatsuha le contó todo, claro por una gran suma de dinero y es que ella tenía la duda de saber lo que paso y lo que impulso a Ranma a decirle todo eso. – ¡NO FUE MI CULPA! –grita furiosa porque siempre la culpe por todo lo que sus prometidos le hacen.

-¡Prometida!

A Akane casi se le sale un pedo del susto cuando de la nada aparece Mousse alado de ella, sonriéndole amigable.

-Aléjate Mousse… por tu culpa he tenido una semana de calamidades. –le dice con advertencia y entrecerrando los ojos a la vez que aleja su rostro de Mousse.

-Mousse quiere tener una cita con prometida. –le exige sin borrar su sonrisa.

-En la vida no siempre se obtiene lo que queremos. –responde indiferente, regresando su atención a su comida.

-No te conviene negarte. –Mousse borro su sonrisa y ahora un brillo travieso adorna sus ojos a la vez que mete su mano a la canasta que trajo consigo.

-No caeré en tus juegos. –le dice con fastidio.

Entonces se tensó cuando oye el chillido de un gato muy cerca. De forma robótica voltea viendo que Mousse agarra del pellejo a un pequeño gato.

-¿Verdad que tendrás una cita con Mousse? –pregunta pícaro.

-¡Si, si, tendré las citas que quieras pero aleja ese gato de mí! –grita llena de pavor.


-¿Dónde se habrá metido A-chan? –Ryoga camina por el patio de la escuela cargando un par de obentos y mira a todos lados en busca de su prometida.

-¡Si, si, tendré las citas que quieras pero aleja ese gato de mí!

Al oír la voz de su prometida decirle eso a quien sabe que fulano una vena se hincha en su frente a la vez que voltea donde escucho su voz.

-¡¿Cómo te atreves A…?! –no termina su frase al ver que ese tramposo de Mousse amenaza a su prometida con un gato, mas enojado se acerca a dónde están esos dos.

-¡Que felicidad! ¡Te aseguro nos divertiremos! –exclama emocionado Mousse, pero en eso le arrebatan el gato haciéndolo alzar la mirada viendo que es Ryoga quien lo sostiene.

-¡Dile que es conmigo con quien saldrás A-chan! –exige Ryoga colocándole cerca de la cara el gato a Akane.

-¡Si, si, haré lo que me pidas pero aléjalo! –grita al borde del llanto.

-¡No, saldrás conmigo Akane! –Mousse le arrebata el gato al pelinegro y ahora se lo restriega en la cara a Akane que chilla llena de terror.

-¡Saldrá conmigo! –Ryoga hace lo mismo después de arrebatarle el gato.

-¡No, conmigo!

-¡Conmigo!

-¡Que conmigo, imbécil!

-¡Solo hay una forma de resolver esto! – exclama Ryoga a la vez que suelta el gato el cual se fue directo a la cara de Akane, la cual rasguño ferozmente y salió huyendo, dejando a Akane tirada en el suelo de forma graciosa y en una especie de shock causada por su miedo.

Ryoga salta sacando de su espalda su paraguas y Mousse lo imita sacando de quien sabe done un báculo. Ambos se miran retadores.

-¡Quien gane tendrá una cita con A-chan/Akane! –exclaman ambos lanzándose hacia el ataque.

Ranma que está escondido tras los arbustos suspira con pesadez, escucho todo y se acercó para ver la infidelidad de su prometida, luego vio como usan el gato para chantajearla y como ella es tan tonta caía con facilidad, se iba a ir dejándola con su desgracia por ser tan tonta como para ser manipulada así, pero simplemente no pudo.

Y ahora que la ve ahí tirada, en shock y toda rasguñada le dio algo de lastima, así que aprovechando que esos dos están enfocados en su pelea decidió acercarse, cargarla y llevársela de ahí para sanar sus heridas.


Al fin Ranma no la evita y le esta hablando, pero claro tiene que hacerlo para regañarla. No se cansa de hacerlo, aunque no quiera admitirlo prefiere que la regañe a que la evite.

Ambos se encuentran sentados sobre sus pies en el pasillo que conecta el patio trasero de la casa Saotome. Alado de Ranma está un pequeño botiquín que el pelinegro está usando para curar a su prometida.

-… enserio Akane, eres imposible. No puedo creer que te dejes manipular así por esos dos. –le dice con reproche mientras limpia sus heridas con un algodón con alcohol.

-¡No es mi culpa! –exclama indignada para después hacer una mueca de dolor ante lo fuerte que Ranma paso el algodón. –son unos idiotas que no entienden que no quiero salir con ellos y usan trucos estúpidos para conseguirlo…

-Tú eres aún más idiota y estúpida por caer en ellos. –le dice con reproche, dejándole de limpiar la cara y tomando la caja donde están las banditas, solo encontrando una.

-¡Se aprovechan de mi debilidad! –exclama indignada.

-¿Así que debo suponer que ninguno de ellos te gusta? –pregunta brusco colocándole de forma tosca la bandita sobre la nariz, sacándole un gemido de dolor.

-Los hombres son imbéciles. –dice con fastidio, frotando sus dedos donde le pusieron la bandita. –eres amable con ellos y piensan que les andas coqueteando. –Ranma le da un tic nervioso en la ceja derecha, sintiéndose ofendido. –les sonríes y malinterpretan la sonrisa. Son exasperantes y persistentes a la hora de acosarte, si fueran así en otras cosas serían más listos y habilidosos. –de pronto la bandita paso de estar amarrilla de en medio a tomar un color rosa. – también son varoniles, fuertes y amables… simplemente los hombres son perfectos.

-Akane. –Ranma la mira sorprendido por su cambio drástico de opinión.

-Entre todos ellos tu eres muy especial Ranma… eres el más guapo. –Akane lo mira enternecida y Ranma se sonroja.

-¿Hablas enserio? –pregunta sorprendido, no pensó que ella le diría algo así algún día, con lo orgullosa y prepotente que es.

-Si… no sé cómo nunca lo había notado, pero eres tan masculino y sexy. –Akane toma las manos de Ranma entre las suyas, sonrojándolo más, en su vida se imaginó que palabras así salieran de los labios quien pasa diciéndole menopausico.

-¡Aww! ¡Mira a los jóvenes enamorados! –se escucha la voz conmovida de Nodoka.

Ranma se tensó y voltea a la par que Akane viendo a sus padres al costado de ellos, mirándolos picaros, haciendo sonrojar más a Saotome de ser posible.

-¡La primavera ha llegado! –exclama conmovido Genma que llora como magdalena.

-¡Ranma tienes mi permiso a ir con todo con Akane! –Soun alza su pulgar en son de aprobación.

-¡No molesten! –exclama Ranma avergonzado.

-¿Y Akane-chan? –pregunta Nodoka al ya no verla haciendo que todos miren donde estaba viendo puntos marcar su silueta.


-¿Qué demonios me paso? ¿Por qué le dije eso? –Akane se encuentra en el patio delantero de la casa, muy sonrojada y con expresión de circunstancia.

-¿Akane-chan? –Tofu atrás de la peli-azul le sonríe amigable y al instante la bandita de Akane volvió a ser rosa.

-Tofu. –Akane se voltea y camina hacia él mirándolo maravillada.

-¡Ahí estas Akane-chan! –exclama Nodoka acercándose por la parte de atrás de su hijo, sonriéndole ampliamente.

Akane ensancha los ojos como si hubiera salido de alguna clase de embrujo y salta al tejado, yéndose de ahí de tejado en tejado.

-Se fue. –comenta Tofu mirando extrañado por donde se fue al igual que Nodoka.

-No me dejo darle consejos de chicas. –dice con lamento, y es que ver que Akane ya está mostrando interés abierto por su retoño hace que desee aconsejarla, capaz ahora si quiere ser más femenina.


Akane salta, cayendo de pie en el parque. Se ha puesto una mano sobre la boca y sus ojos muestran mucha confusión.

-¿Qué mierda me está pasando? ¿Estuve a punto de coquetear con Tofu?

-¿Qué es mejor que venir a un día de campo con Cong?!: ¡que Cong me haya traído a un día de campo por iniciativa propia!

Ante esa voz conocida Akane voltea viendo sentados sobre una manta a Cong y Yin, con mucha comida en medio de ellos, pero la mirada de Akane no esta puesta en la chica, apenas y la nota. A quien mira maravillada es a Cong que aunque aparenta indiferencia tiene un ligero sonrojo en sus mejillas.

-Es tan apuesto. –murmura embobada.


-Di:…

-¡Ah!

Yin abre sus ojos teniendo su mano alzada donde sostiene los palillos con comida que pensaba meter a la boca de Cong, viendo que alado de Cong, muy pegada esta Akane guiando unos palillos con comida a la boca de él.

Cong mira a Akane como si le hubieran salido dos cabezas y Akane lo mira como si fuera su hombre soñado.

-Anda, abre la boca Cong. –le pide melosa Akane. – ¿o prefieres que te dé de comer con los dedos? –pregunta insinuante.

A Yin se le hincho una vena en la frente y a Cong se le sombreo la frente de azul.

-¡¿Qué se supone que haces?! –Yin aparece alado de Akane y la manda a volar de una patada.

-¡No tengo ni idea! –se oye el grito de Akane a la lejanía y la pareja la mira hasta que se pierde en el cielo.

-¿Qué se cree, esa idiota? ¡No tiene suficiente con Mousse y Ranma, ahora también quiere a mi hombre! –exclama indignada. – ¡ah! –exclama sorprendida cuando Cong de un ágil movimiento la hizo sentarse en sus piernas.

-No te exaltes, no es bueno en tu estado. –le dice tranquilo, y guiando un camarón empanizado que sostiene con los dedos a los labios de su esposa.

Yin sonrojada, abre la boca y sus ojos muestran emoción, adora ser consentida por Cong. En cuanto el pelinegro no le dio vueltas al comportamiento de Akane, esa es rara, y le vale mierda lo que haga mientras no los involucre.


Akane cae a la acera frente a una tienda departamental, su cara se estampo completamente en el pavimento. Rápidamente se pone de pie y se da palmadas en la cara, viéndose asustada y exasperada.

-¿Qué mierda estaba haciendo?... ¿le coqueteaba a Cong? –la cara de la peli-azul se sombrea de morado, viéndose asqueada. –ni aunque fuera el único hombre en el mundo haría eso estando en mis cinco cabales… es despreciable.

Justo en ese momento un grupo de chicos pasa alado de ella y su bandita volvió a ponerse rosa.

-Son tan perfectos. –murmura embelesada, siguiéndolos.


-Oye Mousse, ¿y si tomamos un descanso? –pregunta Ryoga notándose cansado, incluso se apoya de su sombrilla para mantenerse en pie.

-Buena idea. –Mousse también se oye y se ve cansado, se apoya de su báculo para mantenerse de pie. –además de nada sirve pelear si Akane no está aquí.

-Ciertamente. –ambos sueltan un profundo suspiro.

-¡Enserio son los chicos más apuestos que he visto en mi vida!

Ambos voltean y se les hincha una vena en la frente al ver a Akane caminar en medio de unos cinco tipos. Ella les sonríe y por lo que parece les coquetea.

-¡Akane!

-¡A-chan!

Ryoga y Mousse saltan frente a Akane haciéndola detener junto con sus acompañantes, los cuales huyeron despavoridos ante la mirada de locos asesinos que les dirigieron esos dos.

-¿Qué significa esto? –le pregunta celoso Ryoga.

-Si Akane, ¿qué haces saliendo con esos tipos?

-¡Mousse! ¡Ryoga!... tan apuestos y varoniles como siempre. –Akane les sonríe amigable, embobándolos.

-Akane, ¿tendrás una cita conmigo? –olvidando todo enojo y celos, Mousse acerca su rostro al de Akane, sonando emocionado.

-Claro. –Akane amplía su sonrisa.

-¿Cómo? ¡Sera conmigo con quien la tendrás! –exige Ryoga aventando a Mousse y ahora siendo él quien tiene el rostro muy cerca del de Akane.

-Por su puesto. –Akane no deja de sonreírles de esa forma que los emboba.

-¡No te entrometas Ryoga! –Mousse pega su mejilla con la de Ryoga e intenta empujarlo.

-Eres tu el que se entromete Mousse. –Ryoga hace presión no dejando que lo empuje y empujándolo en el proceso.

Ambos se fulminan con la mirada y se mandan rayitos a través de esta. Entonces ambos saltan hacia atrás y se ponen en guardia tomando sus armas de nuevo.

-¡El que gane saldrá con Akane! –exclaman ambos.

-¡¿Qué es eso?! –exclama Mousse apuntando algo atrás de Ryoga.

-¡¿Qué?! –el mencionado voltea justo cuando unas navajas son lanzadas hacia él por parte del Mousse, clavándolo junto con su ropa en el árbol. – ¡Hiciste trampa! –le reclama furioso, viéndolo saltar hacia Akane a quien tomo de la mano.

-En la guerra y en el amor todo se vale. –dice triunfante. – ¡vámonos, Akane! –dice comenzando a caminar con ella que se dejó llevar de lo más feliz.

-Maldito Mousse, esta me la pagaras. –dice rencoroso, pelando los dientes y mirando amenazante por donde se fue.


Cologane con la cara llena de golpes entra al baño de la casa Saotome.

-Estos muchachos de hoy en día, ya no respetan a las viejecitas. –dice indignada, y es que solo fue por su botín a la escuela y los hombres les dio por aventarle cosas cuando huía con su botín.

La anciana salta hacia el lavabo, abre la gaveta y saca el botiquín, cuando lo abre toma la caja de banditas viéndola vacía.

-Pero si estaba segura que quedaba una. –comenta confundida.


Sobre una pequeña balsa están sentados Akane y Mousse, el segundo es quien rema la balsa.

-Akane estoy tan feliz… siempre desee estar así contigo. –dice mirándola como idiota enamorado.

-Yo también lo estoy. Estar así con Mousse es como un sueño. –Akane le sonríe amigable.

-¡Akane! –Mousse se acerca dispuesto a besarlo.

Akane cerro sus ojos esperando el beso, pero de pronto ambos los abren. Akane salta hacia la orilla del lago justo cuando varios pañuelos rompen la balsa haciendo caer a Mousse al agua, convirtiéndolo en gato. En cuanto Akane cayo elegantemente de pie en la orilla del lago.

-¡¿Te encuentras bien Mousse?! –pregunta mirando hacia donde el gato manosea para salir.

-¡A-chan! –exclama Ryoga saliendo de entre las ramas de un árbol, tomando de la mano a Akane. – ¡tengamos nuestra cita! –exclama complacido.

-¡Claro! –dice comenzando a caminar a la par con él.

-Tú lo dijiste Mousse… en la guerra y en el amor todo se vale. –Ryoga mira por sobre su hombros hacia donde esta Mousse, dedicándole una sonrisa triunfante y el gato que logro colocarse sobre un trozo flotante de madera lo fulmina con la mirada.


Sentados en el comedor viendo la televisión y comiendo galletas acompañadas con té están Ranma, Nodoka y Tofu, mientras Genma y Soun están jugando shoji.

-¿Cómo?... tu aquí viendo la televisión, mientras tu prometida coquetea con otros. –comenta Tatsuha apareciendo en la entrada en pose chula.

-¿De que hablas Tatsuha? –pregunta Ranma brusco y los demás lo miran curioso.

-Veras… mientras tenia una cita con Yang…

-¡No teníamos una cita, me obligaste a invitarte un helado! –de la nada aparece la peli-plata dándole un zape en la nuca que le inclino la cabeza hacia adelante.

-Como decía. –Tatsuha alza su rostro como si nada teniendo esa expresión de sabiondo con la que se carga siempre. –mientras comíamos nuestro helado vimos a Akane-chan coquetearle a un grupo de chicos.

-¿Akane-chan? –pregunta incrédula Nodoka.

-Seguro viste mal. –comenta divertido Genma.

-Si, es lo mas seguro. Mi hija es una borde para coquetear con chicos. –comenta Soun divertido.

-No vi mal, en verdad lo hacia ¿verdad Yang? –Tatsuha mira a su prometida.

-Si, a mi al principio me pareció que lo imaginaba, pero en verdad Akane se fue con un grupo de chicos a los que les sonreía y los halagaba. –comenta extrañada la peli-plata, ciertamente le pareció una actitud que no concuerda con la Akane que conoce.

-Se fueron a dirección al parque. –comenta Tatsuha.

Ranma molesto se pone de pie y corre hacia la salida de la casa.

-¡Te acompaño hijo, sino lo ven mis ojos no lo creo! –exclama Nodoka corriendo atrás de él.

-¡Nosotros también vamos, seguro es una mentira! –Soun y Genma también los siguen.

-¡Esto será divertido! –Tatsuha corre atrás de ellos, tomando de la mano a Yang y llevándosela a rastras.

-¡Oye déjame, ya te invite tu helado! –grita intentándose zafar.

Tofu los mira irse, se encoge de hombros y regresa su atención al televisor.


-Al fin tenemos una cita como es debido. –dice emocionado Ryoga que camina a la par que Akane siendo tomados de la mano.

-Son tan sensuales. –murmura Akane mirando embobada a unos chicos que juegan fut ball en las canchas alado de donde pasan.

-¿Eh? –Ryoga voltea y una vena se le hincha en la frente. – ¡A-chan! –exclama con reproche. – ¿Por qué miras a otros hombres cuando estas conmigo? –pregunta molesto.

-Solo los comparaba contigo, dándome cuenta que no hay nadie mejor para mí que Ryo-chan. –Akane la mira como idiota enamorada haciendo a Ryoga sonrojar. –tengo sed, iré por algo de tomar… ¡¿jugo de naranja para Ryo-chan, verdad?! –exclama soltándose del agarre y corriendo hacia donde vio una máquina de jugos.

-¡Si! –le grita mirando por donde se fue como el idiota enamorado que es. – A-chan. –la nombra conmovido, sintiendo que está en un sueño. – ¡espera!... ¡¿no debería ser yo quien compre las bebidas?! –exclama cayendo en cuenta de eso.

Akane toma la primer bebida que sale de la máquina, para después echar más dinero y comprar la segunda, pero cuando esta por meter la otra moneda esta se le cae, intenta recogerla pero alguien más la cogió, haciéndola alzar la mirada viendo a Ranma con expresión furiosa.

-¿Para quién es? –pregunta amenazante.

-Para ti Ranma. –Akane le sonríe amigable.

-¡No me engañes! –le grita molesto.

-No lo hago. –con su mano libre toma una de las manos de Ranma y lo mira como si fuera el amor de su vida, sonrojándolo. –para mí no hay nadie más que Ranma.

-¿E…enserio? –pregunta nervioso y Akane asintió.

-¡Akane, continuemos con nuestra cita! –de la nada aparece Mousse y la toma del brazo, jalándola hacia él.

-¿Cita? –Ranma se le hincha una vena en la frente.

-Si, teníamos una romántica cita y estábamos por besarnos antes de que algo nos interrumpiera. –le dice prepotente Mousse mirando con arrogancia a Ranma que se le hincho mas la vena en la frente.

-¡A-chan, yo seré quien compre los refresco! –ahora es Ryoga quien aparece al otro lado de Akane y la toma del brazo, jalándola hacia él. – ¡sigamos con nuestra cita!

-¿Cita? –a Ranma ya lo rodea su aura de batalla.

-Si, íbamos tomados de la mano al caminar. –le presume Ryoga con arrogancia.

-¡A mi también me tomo de la mano! –exclama Mousse soltando a Akane y mirando amenazante a Ryoga. – ¡y me iba a besar!

-¡Al que iba a besar es a mi! –se defiende Ryoga también soltándose de Akane y fulminando con la mirada al chino.

-¡¿Qué significa esto Akane?! –pregunta furioso Ranma, solo viendo puntos marcando su silueta.

-¿Akane? –Mousse se muestra confundido al no verla.

-¿A-chan?

Los tres comienzan a buscarla mirando a todos lados.

-¡Tatsuha tengamos una cita!

Al oírla la ven frente a Tatsuha a quien toma de las manos y este la mira extrañado, mientras Yang atrás de él tiene una vena hinchada en la frente. Genma, Soun y Nodoka tienen la mandíbula desencajada y a los otros tres varones les rodea una intensa aura de batalla.

-¿Qué haces Akane/A-chan?! –gritan furiosos.

-¿Si? –Akane le sonríe de forma mas tierna a Tatsuha que sigue sacado de onda.

-¡Tu si que no pierdes el tiempo! –Yang le da una patada a Akane, lanzándola hacia atrás.

-¡No me imagine esto de ti Akane-chan! –Nodoka empieza a darle pisotones a Akane, sacándole gemidos de dolor. – ¡¿como puedes jugar con el corazón de mi niño así?! –grita sin dejarla de patear sin contemplación.

-Se lo merece. –Soun y Genma niegan con la cabeza.

-¡Jum! –Ryoga y Mousse se cruzan de brazos y ladean su rostro a lado contrario.

-Mira que eres celosita. –Tatsuha mira burlón a su prometida.

-¡No digas tonterías! –Yang ladea su rostro a lado contrario ocultando su sonrojo. – ¡solo defendía mi honor!

-Tal parece que no importo lo que te dije… a ti te valió Akane. –Ranma dolido da media vuelta y se aleja de ahí.


-¡Ranma hijo, sal! ¡Seguro algo raro le paso a Akane-chan, veras como mañana esta normal! –grita Nodoka al borde del llanto sin dejar de golpear la puerta de la habitación de su hijo, que se niega a responder y en especial a salir.

-Ya me contaron. –dice Cologane caminando hacia Nodoka, sonando divertida.

-Maestra. –Nodoka deja de tocar la puerta y la mira.

-Para mí que Akane al fin saco su verdadero ser. –dice deteniéndose frente a la castaña.

-¡No diga eso! –exclama aterrada.

-Dime donde está, iré a hablar con ella.

-Está en el dojo entrenando, pero no creo que deba molestarla.


-Akane. –la llama Cologane al abrir la puerta del dojo, el cual esta oscuras y al abrirse al puerta se filtró la luz de afuera dejando ver a Akane amarrada y amordazada tirada en el suelo. –ya me contaron pillína. –dice divertida, acercándose a donde esta ella, y cuando la volteo se sorprendió al verle la bandita en la nariz. – ¡esa es mi bandita!... con que tú la tenías. –una sonrisa traviesa adorna el rostro de la vieja. –si prometes que harás lo que te pida prometo soltarte.

Akane niega rápidamente justo cuando atrás de la vieja aparecen Ryoga y Mousse viéndose sombríos.

-Maestra. –la llaman tétricos, tensándola.


En el patio trasero se ve a Cologane amarrada como capullo de una cuerdda que cuelga de la rama de un árbol. Frente a ella Mousse y Ryoga mirándola amenazante.

-¡Suéltenme, parezco capullo de mariposa! –lloriquea.

-No hasta que nos diga lo que le pasa a Akane. –Mousse se cruza de brazos viéndose imponente.

-Algo me dice que usted es la causante de su raro comportamiento. –Ryoga la mira mas amenazante.

-Esta bien. –dice resignada. –hace unos años que me encontraba en china encontré una caja que contenía unas banditas. Al mezclarse con el calor corporal crean una sustancia que tiene un efecto parecido a una pócima de amor, y hará que te enamores de todo chico que veas cuando la traes puesta y harás todo lo que él te pida.

-¿Todo lo que él te pida? –esas palabras retumbaron en la cabeza de ambos.


Ranma abre la puerta del dojo, sosteniendo con una mano una bandeja con comida, se sorprendió al ver a Akane amarrada, tirada en el suelo.

-¡Akane! –rápidamente corre hacia ella, deja la comida a un lado y comienza a des amarrarla.

-Gracias. –le dice después de haber sido desamarrada, sobándose las muñecas, su tía le puso un apretado amarre en ellas.

-Quería preguntarte. –Ranma alza su rostro mostrándose serio y Akane lo mira a los ojos. – ¡tu en verdad amas a otro?... si es así yo estoy dispuesto a hacerme a un lado. –los ojos de Ranma muestran la tristeza y dolor que le esta causando decir esas palabras.

-Ranma…

Akane se ve interrumpida porque Mousse entro quebrando una de las paredes y tomando de la ropa a Akane se fue de ahí corriendo.

-¡¿Mousse a donde la llevas?! –exclama Ranma poniéndose de pie.

-¡Ese Mousse me gano! –exclama Ryoga llegando corriendo alado de Ranma. –tu también deberías moverte si quieres a A-chan para ti, Ranma. –dice mirándolo serio.

-¿De que hablas? –Ranma frunce el ceño.

-¡La bandita que trae A-chan hace que se comporte así, y hará todo lo que un hombre le pida! –grita corriendo por donde salio Mousse. – ¡espera Mousse, no te quedaras con ella!

-Con que es eso. –Ranma ensancha los ojos. – ¡esperen, no es justo para Akane, se están aprovechando de ella! –grita molesto, corriendo para alcanzarlos.


En el ultimo piso de un edificio de construcción Mousse suelta a Akane.

-Akane, ¿me amas? –pregunta meloso.

-Claro que si. –responde sin dudar.

-¿Firmarías esto para mi? –de entre su ropa saca un contrato de matrimonio y una pluma.

-Claro. –Akane sonríe tan ampliamente que sus ojos se cierran y esta por tomar la pluma que le extienden cuando un pañuelo la golpe, mandándola a volar. – ¡Ryo-chan! –exclama al verlo a un costado de ellos.

-¡No te entrometas! –Mousse lo mira amenazante.

-¡A-chan, firma esto para mi! –grita sacando también un contrato de matrimonio y corriendo hacia Akane, pero salta hacia atrás ante unas cuchillas que Mousse le lanzo y se clavaron delante de él.

-No lo permitiré.

Ambos se ponen en guardia, listos para pelear a muerte por su propósito.

-¡Ustedes si que no tienen dignidad! –exclama Ranma cayendo de pie al costado de ellos. –Akane no sabe lo que hace y ustedes no dejan de aprovecharse de esa clase de situaciones.

-¡En la guerra y en el amor todo se vale! –exclaman ambos lanzándose al ataque, con báculo y sombrilla en manos

-¡No voy a permitir que se sigan aprovechando de ella! –grita metiéndose en el ataque de ambos haciendo que lo golpeen en la espalda, mandándolo a volar hacia Akane que ensancho los ojos como él, yevandosela de encuentro y haciéndolos caer a ambos.

-¡A-chan/Akane! –exclaman los otros dos asomándose, viendo como caen sobre una montaña de arena.

En la caída Ranma cambio lugares para ser él el que quede abajo.

-¡Ranma! –exclama Akane alzando su rostro haciendo que se le caiga la bandita. – ¡Ranma! –lo llama preocupada, agitándolo.

-Akane… ¿estás bien? –Ranma abre con dificultad los ojos y le sonríe levemente.

-Bobo. –le dice sonriéndole levemente

-Lo se soy un bobo, no debería meterme pero no puedo dejar que se aprovechen de la situación. –dice ladeando la mirada a un lado.

-Por esa razón eres único y especial para mi. –confiesa sonrojada.

-Akane. –Ranma la mira y la mirada de ambos se atrapa, poco a poco van acercando sus rostros.

-¡Oigan! –se oye la voz celosa de Ryoga.

-Hace rato que se te cayo la bandita Akane. –reclama con celos Mousse.

Ambos abren los ojos, Ranma nota que es verdad que ya no trae la bandita y Akane se toca verificando lo mismo. Como si quemaran se separan, sentándose alejado del otro y dándose la espalda.

-Con bandita o no A-chan es una coqueta. –Ryoga indignado comienza a alejarse.

-Si… es una aprovechada. –Mousse también indignado se aleja.

Los otros dos se quedan donde mismo sonrojados y con su corazón palpitar con fuerza.


Akane y Ranma van caminando por las oscuras calles dirigiéndose a casa. Ranma va unos pasos adelante, teniendo sus manos cruzadas tras la nuca y Akane tiene su cabeza inclinada hacia abajo.

-Sobre lo que paso…

-Ya lo se, seguramente aun eran efectos de la bandita… tu jamas dirías algo así. –la corta de forma brusca.

Akane aprieta con fuerza los puños…

-¡No! ¡En verdad pienso eso!

Ranma ensancha los ojos y se detiene de golpe.

-De mis prometidos tu eres el único que no quiere obligarme a estar contigo, por eso eres especial para mi—venga, él te pidió eligieras… no tengo que elegir nada. Y no soy ninguna cobarde.

-Akane. –Ranma la voltea a ver sorprendido y sonrojado.

-¡Tu me pediste que eligiera, no hay nada que elegir! –Akane se cruza de brazos y voltea su rostro a un lado. –para empezar a ninguno de ellos los considere mi prometido, solo te he considerado prometido a ti.

El silencio se instalo en ambos, ninguno sin saber que decir. Incluso Akane comenzó a jugar con sus dedos.

-¡¿No dirás nada?! –pregunta brusca, ella se confeso y él no dice nada, al menos que se burle o lo que sea para ella poder decir que no es verdad, pelearse y todo sea como antes.

-¡No se que decir! –exclama avergonzado, y eso si la enojo.

-¡Te acabo de decir que me gustas y no sabes que decir! –le grita indignada.

-¡No dijiste que te gusto! –le grita también indignado.

-¡Dije que te consideraba mi prometido, si no fueras un tonto lo entenderías! –Akane se acerca a él amenazante.

-¡Nunca eres clara por eso hay muchos malentendidos, la única bruta eres tu! –Ranma también se acerca amenazante a ella.

-¡No soy la única, tu también sales con tus paranoias e insultos!

-¡Tu con tus infidelidades y malos entendidos!

-¡Tonto!

-¡Mamarracho!

-¡Imbécil!

-¡Fea!

-¡Asqueroso!

Los dos se fueron acercando tanto que sin darse cuenta terminaron uniendo sus labios de forma brusca, entonces ensanchan los ojos y sonrojados se separan.

-¿Eso significa que somos prometidos de verdad? –pregunta ahora tímida Akane, jugando de nuevo con sus dedos.

-Siempre lo hemos sido ¿no? –Ranma sonrojado voltea su rostro a un lado.

-Sabes a lo que me refiero.

Ranma la mira de reojo, toda avergonzada como él, jugando nerviosa con sus dedos, y su corazón palpito tan fuerte que sintió se le saldría del pecho. La tomo de la barbilla alzándole el rostro y se inclinó, acercando su rostro al de ella.

-Si, lo somos. –le dice antes de volver a unir sus labios con los de ella por primera vez de forma tierna.

Ambos tienen sus ojos cerrados y mueven sus labios con torpeza, sus corazones palpitan en sincronía y no pensaron que besarse se sintiera tan bien. Al romper el beso ambos pegan sus frentes, su sonrojo no deja de adornar su rostro y se sonríen entre ellos de forma cómplice.

Continuará

Me es muy dificil escribir este fic sin sentir que hago a ranma muy nenita, no como el macho de pecho peludo que es jajajjajaja

espero les haya gustado

bexotes

kriss