Cap.10: Bajo tierra, en la superficie o sobre el cielo, te seguiré amado...

"La primera princesa era de una hermosura envidiable, cuerpo delgado y fino como de realeza, estatura media no baja, labios gruesos rosados y pecosos, y sus ojos... Sus ojos amatistas te quitaban el habla solo con verlos, a la distancia que estuvieran podían cumplir con ese cometido... Ella gozaba de su belleza, se jactaba de su belleza casi a diario...Pero hoy, todo eso a ella no le importó, justo en estos momentos tenía otra cosa más importante en su mente, justo ahora ella corría hacia lo que llamamos "su destino"...
Corría por el lugar espacioso en que se hallaba de una manera casi triunfante y sin una pisca de cansancio en su rostro, lloraba de una forma que casi podía rayar la línea de la locura y la cordura, y cada tanto miraba hacia atrás con el pánico impregnado en sus ojos, sin percatarse que ni siquiera su sombra la seguía por ese gran espacio vacío y sin saber explicar bien el porqué de las cosas que en esos momentos ocurrían, sus pisadas retumbaban en el piso una y otra vez, dejando un eco que la ensordecía cada vez mas.
Pero a pesar de ello, la primera princesa no detenía su andar y corría cada vez más rápido, corría desde hacia bastante tiempo y el cansancio de esa carrera aún no la invadía, corría con las lágrimas cayendo de sus ojos, el lila color de sus orbes se derramaba incesante al no encontrar fin a ese vacío, uno menos lejano, uno menos lúgubre, uno con algún final, no lo hallaba y no quería aceptarlo, y mantenía su paso firme para poder llegar donde moraba, quería y necesitaba ver su final lento y doloroso, pero no lo podía hallar, no lo lograba encontrar... La primera princesa paró en seco, y junto a ella sus pies... Sus ojos se mantenían fijos frente a ella, había encontrado eso que busco por tanto tiempo, ella no lo sabía, solo lo sentía, miro hacia el frente nuevamente y con su mano temblorosa cada vez más adelante, dudando sí es que debía abrir o no, la puerta"...

Pov Lukas

Bitacora del día de hoy... Tengo tres tipos de lagunas emocionales, las resueltas, las no tan resueltas y las definitivamente para nada resueltas...

Les dire que lo acontecido en estos cortos días no es tan divertido como (supongo) esperan, para comenzar todo este drama quiero que sepan dos cosas que son necesarias, primero se que algunas ya me odian y necesito que esten dispuestas a entender que aveces (ahora mismo) yo también lo hago, y segundo yo sigo más muerto que araña de pared y no saben cuánto me detesto por ser impulsivo y depresivo, en fin les cuento que mis días no han sido de lo más divertidos tampoco y me la he pasado recordando rostros, emociones, sentimientos, momentos y recuerdos que tengo de cada persona que ha llegado al lado de Aurora o Mathias para darles el pésame, no sabiendo que me lo dan inconcientemente a mí también... Hablo en serio cuando digo que mi cabeza está apunto de sufrir un colapso de información asombroso.

En la última semana he visto a mas personas que prostituta solicitada, muchas de las personas que en mis recuerdos se encuentran siendo una laguna emocional no son reconocidas en mi subconsciente hasta que muestran el rostro, hablan, hacen algún gesto característico, mencionan el porque me conocen y ¡Bam!, todos los recuerdos con ellos vuelven... y junto a ellos las emociones con las que me llenaron en vida.

En el transcurso de la semana decidí llamar "laguna emocional" a las personas que aparecen en los recuerdos y que aún no recuerdo, como el niño que suele aparecer en mis recuerdos con Aurora, en los de Mathias también aparece mucho, en los de Arthur uff y Vlad, en Vlad no tanto, pero incluso aparece en los de mis amigos no tan cercanos; él aún es una de las lagunas emocionales que me llama la atención...

Pero bueno, desde luego que ustedes no vinieron aquí por esas explicaciones sin sentido, yo se que la explicación que ustedes quieren es la que ocurrió luego de que los paramédicos me llevaron a la morgue en esa caótica mañana luego de que llegara Aurora, fue una mañana extrañamente loca, para ponernos en sintonía con lo que les describiré ahora debemos saber dos cosas (si, otras dos cosas), primero desde esa mañana hasta hoy ya han pasado tres días, ni más ni menos tres días de mi estúpida muerte voluntaria y bastante forzada (por mi), y segundo como anoche fue mi velorio sólo con amigos y familia, el día de hoy es mi funeral y entierro con todos los que querían salirse de su rutina.

Si, hoy es mi entierro. Hoy frente a toda esa gente sería el día en donde quedaría bajo tierra por y para siempre, hoy era la última vez que mis seres queridos podrían verme en carne y hueso antes de que me pudriera en la tierra y los gusanos se comieran mi cerebro y mi piel moriría y se secaria como esas momias que ponen en los museos para asustar a los niños de 7 años... Hoy me velarán y será mi última oportunidad para que puedan saber que estaré siempre con ellos, en sus corazones y en sus mentes…
Anoche, definitivamente anoche fue un momento demasiado exhaustivo para todos, no hablo al principio de la ceremonia, si no en todas las emociones que sentí en menos de tres míseras horas; Aurora me veló en el gimnasio de la escuela, el director se comunicó con ella apenas se entero de la desgracia y le ofreció el gimnasio para que los estudiantes pudieran despedirse, ella lo acepto sin rechinar, le agradeció el gesto y empezó con los preparativos para lo que ocurrió ayer, decidio poner el ataúd en el centro del lugar y frente a él sillas para las personas que quisieran ir, llegaron mis tías de Noruega el día antes de la "actividad" y la ayudaron a colocar todo en sus respectivos lugares; Siempre vi a una Aurora fría y sofisticada, pero, desde que me vio en esa alfombra, ella simplemente luce como una madre asustada, ella está aterrada, no veo el hielo que veo siempre, el día de hoy veo una Aurora más humana, una menos robot...

Con el ataúd en el centro era fácil el ver a las personas que entraban al lugar, mi cajón fúnebre estaba abierto al público así que para poder ver qué ocurría mejor me senté en la tapa del ataúd justo encima de la placa identificatoria, pude ver como la gente pasaba, tocaba mi rostro y lloraba a lo lejos, pude recordar tantos rostros que mi cabeza estaba saturada por tanta información, me di cuenta que habían personas que no conocía, quizá curiosos de otros grados o los padres de los alumnos que iban en apoyo a la madre, también me di cuenta que los desconocidos en ocasiones podían ser familiares queridos por Aurora que jamás había visto o simplemente esos de los que si sabia pero jamás tuve la oportubidad de verlos, también habían muchos de mis compañeros de escuela, y los compañeros de trabajo de Aurora y Mathias, amigas de Aurora y sus maridos, cuando vi hacia donde estaba mi madre la vi rodeada de personas que ella quería, pero que no necesitaba, miraba su reloj impaciente y sus lágrimas escapaban por sus mejillas cada vez que dejaba de prestar atención a quien le hablara.

Cuando dieron las 22hrs en punto la gente empezó a irse, y como si fuera un relevo de turno los amigos cercanos a la familia comenzaron a llegar, despues de las 22hrs se acabó el circo, ahora era turno de la familia para despedirse, era una reunión privada para llorar sin la necesidad de tener aplausos, ahí, a las 22hrs en punto fue cuando llegó Arthur, como era de esperar el ingles llego puntualmente a la hora, entró con los ojos rojos que demostraban que no había dormido en días ya que no había parado de llorar, junto a él estaba Alfred, se veía un tanto incómodo por estar incluido en la familia, pero eso a Arthur apenas le importo, porque con solo poner un pie dentro del lugar, puso su vista en el cajón, tomo la mano de su novio y a paso decidido llegaron frente a mi cuerpo y ahí se quedó unos minutos, su mano apretaba la que lo sujetaba con cada vez más fuerza, sus ojos verdes estaban mirando mi frio rostro, cuando vi que mi mejor amigo comenzaría a llorar intenté acercarme a él, lo tome de la mano y juro por lo que sea que el ingles lo sintió, porque dirigió su mirada hacia arriba y suspiro pesado, miro al norteamericano a los ojos y le pidió a su novio un poco de privacidad, Alfred lo miro un segundo, estudiando la situación para saber si realmente convenía dejarlo solo, supongo que su debate mental salió positivo, porque asintió con la cabeza y le solto la mano con suavidad para luego besarle la frente, posterior a eso se dirigió donde estaba Mathias para brindarle apoyo; lo que pasó luego no tiene descripción, tras despachar a su novio, Arthur apartó su vista del norteamericano y me miro con cariño, acarició mi fría piel mientras sus ojos se llenaban de lágrimas tras la pérdida de su amigo, sonrio con tristeza y ordenó mi de ya por si ordenado cabello dejando espacio en la frente sobre el hueco de las cejas, cuando vio que ya había espacio volvió a sonreír diciendo -Maldicion idiota,esfuerzate un poco más, si incluso en vida estabas mas tieso que ahora- y luego sus ojos verdes empezaron a desbordarse, allí, se limpio su rostro y depósito un beso en mi frente, su acto me dejó sin palabras, su forma de despedirse me dejaron de piedra, casi pude sentir su beso en mi frente, un beso lleno de cariño, amor y un profundo respeto, luego el ingles volvio a acariciar mi cabello, me trato de idiota nuevamente y depósito un pequeño conejo bajo mis lo manos, me dijo que lo cuidara con mi vida y apretó mi mano, luego fue donde Aurora y se quedó junto a ella el resto de la velada; Estaba mirando a Aurora, cuando Arthur llegó con ella, pero mi vista fue a ese alguien que desocupo su silla justo cuando el inglés de sentó, se acercó a mi a paso lento y tembloroso, si no conociera a mi amigo diría que él no queria estar allí en esos momentos, y como lo conocía, definitivamente sabia que no me equivocaba; Vladimir me miraba desde arriba mientras tomaba a Dimitri de la mano y se aferraba a él definitivamente pidiendo ayuda, me miraba desde arriba y senti como me juzgaba y decía todo lo estúpido que fui solo con mirarme a la cara, no se atrevió a soltar una sola palabra, quizá tenía miedo de no escuchar la respuesta, Dimitri como era el lógico de ambos, siempre fue más consciente que mi amigo, y por eso no me asombro para nada el ver cómo le dijo que esperaría con "el viudo" y se acercaba a Mathias con la cabeza gacha, Vlad me miraba desde arriba y a diferencia de Arthur que se despidió con un beso y palabras suaves, él no se atrevió ni a hablar ni a tocarme, solo me miraba con sus ojos desbordando emociones, llantos de dolor y tristeza. Apretaba los puños como niño que al que están sermoneando, al punto que sus nudillos estaban blancos por la fuerza que empleaba, tenía unas ojeras aún más grandes que las del inglés y la cara tan demacrada que parecía que no había comido en meses, pero algo cambio en el rumano cuando luego de 10 minutos en que mi amigo llevaba en pie observándome vio que Dimitri iba por él para poder alejarlo del cajón y darle oportunidad a otra persona, Vlad puso una cara de pánico que realmente no me espere ver este día, probablemente él sabía que no sería capaz de acercarse de nuevo al ataúd, y allí, solo acerco un dedo y toco mi mejilla, justo en ese instante su cordura desapareció, sus ojos se llenaron aún más de lágrimas y se tiró a mi cuerpo inerte para poder abrazarlo mientras lloraba, veía toda la escena con debo admitirlo, un poco de terror, porque cuando Vlad se negó a soltarme cuando su novio se lo pidió, si tuvo que hacerlo cuando se lo pidió el mío; Allí de pie con un traje negro sin corbata se encontraba Mathias quién solo le pidió a Vlad un poco de espacio entre "Tu y él", Vlad agachó su mirada y para sorpresa de todos el danés miro al rumano y lo abrazo pidiéndole perdón por no saber cuidar a su amigo, Vlad estaba de piedra pero devolvió el abrazo diciendo que nadie tenía la culpa y que yo era el único en saber las razones, se separaron del abrazo y mi amigo dejo a Mathias ahí, viéndome con sus ojos azules que en más de una ocasión me hicieron el hombre más feliz de la tierra, lo dejo ahí parado viéndome mientras él fue a abrazar al inglés que por su parte consolaba a mi madre.

Decir que vi tantos rostros que llenos de tristeza me llenaban la cabeza con los recuerdos más bellos y tristes que cualquier persona quisiera tener cualquier otro día menos en su propio velorio era poco, definitivamente hoy estaba sintiendo las mismas sensaciones vividas anoche, hoy a diferencia de ayer mi ataúd no estaba abierto, pero frente al cajón habían muchas flores y velas encendidas por gente que me quería, encendidas mientras mencionaban mi nombre, había una foto enorme que era del tiempo después de Mathias, lo sabía porque se podía ver una linda sonrisa sincera; cada vez que cerraba los ojos llegaban tantos recuerdos que se dividían en o ser tristes o ser felices, así, sin ningún punto medio, mi mente estaba hecha un torbellino de preguntas extrañas que ahora nadie podría contestar, recordé cosas que ya ni me imaginaba saber, mi primera palabra fue "Duende" y no "Mamá" como juraba Aurora cada vez que alguien le preguntaba, eso me dio un poco de risa ya que es algo que definitivamente haría ella, pero bueno, volviendo a los recuerdos, puedo testificar que vi recuerdos muy extraños, podían ser simples como mi primera bicicleta a esos que te dejan marcando ocupado, también estaban los recuerdos que tienen de mi los chicos de la escuela, no los chicos con los que yo hablaba, si no esos con los que nunca hable más que un par de monosílabos, ellos luego de varios recuerdos tomaron toda mi atención ya que vi momentos que ellos captaron en los que salgo tan opaco y triste, incluso verme asi llega a ser deprimente hasta para mi, eran los días que no conocía lo que era ser feliz con alguien que te ame y tampoco cuál era el motivo de sonreír sin motivo, y otros momentos en los que me nuestro tan rebosante de alegría que no parece que el Lukas opaco sea el mismo Lukas rebosante y lleno de vida, el que pertenece al tiempo en donde Mathias llego a mi vida… Los recuerdos me inundaban en lo más oscuro de mí ser y me daba temor el olvido… Me aterraba que Mathias se fuera a olvidar de mí…

Con eso en mente, intenté calmarme para poder seguir indagando en mi persona, pensé que nada más volvería a molestarme ya que lo peor ya había pasado, pero no saben cuanto me equivoque esta vez, supe que ahora mi mundo se desmoronaria cuando vi a un chico de más o menos cuatro años llegando a la parte del cementerio donde se realizaría la ceremonia con una mujer de la mano…

And I, I hate to see your heart break/ Y yo, odio ver tu corazón roto
I hate to see your eyes/ Odio ver tus ojos
Get darker as they close
/ oscurecerse mientras se cierran
But I've been there before/ Pero he estado allí antes

Ese niño inundo mi cabeza de inmediato, todos los recuerdos llegaron con tal intensidad que incluso dolía en sobre manera… Mi cabeza se empezó a volver loca de repente, me lleno de preguntas que ansiaban una respuesta, me preguntaba una y otra vez quién era ese chico y porque dolía tanto verlo, me estaban consumiendo tantas interrogantes, y de esa manera salto a mi cabeza una pregunta aún más peligrosa: ¿Se olvidaría de mí?, lo supe de inmediato, ese chico pequeño si se olvidaría de mi con los años que pasaran, no me conocería más que por fotos, o anécdotas aburridas contadas por las personas que me amaban cuando aún vivía, lo sé con claridad porque los niños olvidan tan rápido como aprenden cosas, sus recuerdos se van con la misma rapidez que la espuma que es llevada por las olas del mar, pero que ese niño me olvidara me dolía con solo pensarlo, mi cabeza estaba tan saturada de información que por poco se comportó como un computador antiguo, lento y saturado, comencé a buscar su nombre con ansias, comencé a tratar de saber quién era por los muchos recuerdos que invadían mi serenidad, ¿quién era ese niño?, ¿de dónde era que lo conocía?, ¿porque me dolería tanto que me olvidara?… Mi cabeza en esos instantes recibió un relámpago de información que me tiró al piso, cuando recobre el sentido nuevamente me di cuenta que ahora recordaba a ese pequeño, ¿Quién es?, mi cuerpo inerte me era inútil para poder abrazarlo, era Emil quien me consolaba a mí, mi querido medio hermano, el que con Mathias criábamos como a nuestro propio hijo, ese Emil, mi lindo protegido y familia, el que cuando tenía miedo llegaba a mi cuarto y me pedía dormir con él para poder protegerlo… El mismo Emil que cuando murió su gato paso dos días en el patio esperando a que volviera a casa junto a nosotros, el mismo que seguía echándole comida en un plato que siempre estaba lleno porque cuando volviera tendria hambre… El mismo Emil que estaba allí, parado y confundido por no saber dónde se encontraba y porque todos insistían en que era un funeral, uno que nadie lo había invitado… Claro, habían evitado por todos los medios contarle lo que pasaba, incluso los últimos dos días Aurora no lo había llevado a casa porque aún estaba sacando la mancha de sangre de la alfombra de mi cuarto, eso significaba entonces que mi muerte seria toda una sorpresa para él, cuando recién vi a Emil llegar al lugar donde harían mi velorio, venia de mano de Melody, nuestra vecina de la casa de al lado, es indudablemente la mejor amiga de Aurora y cuando supo de mi muerte, se ofreció para cuidar a Emil hasta el día del entierro, Aurora en esos minutos no lo pensó dos veces antes de tomar una decisión, guardo ropa de Emil en una mochila, juguetes e insistió que también dinero, le dijo a Emil que debía ser obediente, comerse toda la comida y le dio un beso en la frente, en ese instante Melody comenzó a cuidar a Emil hasta mi funeral, sin contestar las preguntas del pequeño islandés y evadiendo el tema de porque no podía volver a casa...

Flashback

-Aurora, linda, escúchame -pausa- yo no sé qué tan difícil es, y mucho menos que se lo que sientes, pero para eso estoy aquí, para poder escucharte y llorar contigo - cuando Melody vio a Aurora en el piso del baño llorando, su corazón se oprimió en gran manera, y la abrazo de forma maternal para poder calmarla – Aurora, estoy aquí para ti – comenzó a acariciarle el cabello suavemente – Porque yo… yo soy tu amiga, ¿lo entiendes?, y eso significa que no te dejare sola por bastante tiempo más – Le decía mientras contenía el llanto que amenazaba a salir – Jamás lo hare… ¿Bueno?, yo jamás te dejare sola – repetía firmemente

-Mely… yo sé que fue mi culpa… yo fui la que discutió con él antes de esa tarde, yo discutí con él y por eso, el decidió esto, yo soy la responsable de todo esto... oh Mel... el me necesitaba…y yo – Aurora se contrajo en si misma por las lágrimas que no paraban de salir – soy una pésima madre, si solamente me hubiera tragado el orgullo de ese momento… si yo hubiera hablado con el, si yo hubiera insistido en saber que le ocurría, el… el aun seguiría aquí… aun estaría aquí conmigo, estaríamos jugando con Emil o estaríamos hablando de cómo está llevando su relación – Sus palabras eran gritos de desesperación silencioso, esos que gritan desde el alma- pero ya no puedo…

- No – le comenzó a acariciar el cabello de forma suave - no pienses eso linda – decía intentando sonar fuerte para regañar a su amiga – ¡Te prohíbo que pienses eso!, el debió tener sus razones más que claras para hacer esto, Lukas no era un niño estúpido… no te eches tú la culpa, ¡no puedes hacerlo!, nunca lo hagas – Le repetía Melody una y otra vez mientras intentaba no llorar, pero sus ojos cedían lentamente – Lukas… Lukas fue un chico muy bueno, y se lo demostró a todos este último tiempo, él siempre estuvo demostrándolo – hizo una pausa para poder pensar en cómo hablar lo que venía a continuación- Debemos agradecerle eso, y despedirlo bien, él lo merece – dijo secando las lágrimas de Aurora quien la miraba con pánico en sus ojos al escuchar sobre el enterrar a su único hijo– Yo cuidare a Emil, no quiero que vea a Lukas como está ahora – Dijo secando sus propias lagrimas – Quiero que lo vea y lo recuerde en paz… ¿Bueno?

- Gracias Mel… - Dijo aun en shock, mirando el lavabo – Emil si se quedara contigo, ve tu por mientras, yo los alcanzo luego… Está en el parque, se quedó jugando con León…

- Esta bien… Iré a por él, trata de cuidarte, veras a Emil en el funeral, vendré por la tarde a ver cómo te encuentras… y Aurora… - Aurora la vio y Melody le dijo – Trata de separar a ese chico de Lukas, no es sano para el… - y de esa manera se fue, Aurora volvió a la habitación, firmo los papeles y escucho el grito desgarrador de Mathias...

Fin Flashback

Cuando vi a Emil llegar de la mano de Melody al lugar donde se haría la ceremonia, mi cabeza grito en alarma.
Intente ir donde él estaba para evitarle la noticia, sus ojos que en esos momentos aún estaban llenos de vida y alegría cuando supieran que dentro de ese ataúd cerrado se encontraba su único hermano perderían cualquier atisbo de brillo que tuvieran, quería sacarlo de ahí para que no le dijeran, para que no supiera que mi cuerpo inerte ya no puede consolarlo, demonios, quería sacarlo de allí porque no quería que me recordara muerto, quería que si pensaba en mi pudiera pensarme lleno de vida, pero no podía sacarlo de alli. No podía tocarlo. Cuando el llego, Aurora estaba secando sus lágrimas y dando sus últimas palabras a los que allí se encontraban agradeciendo su tiempo en esos difíciles momentos, Emil al ver a Aurora llorar hizo lo que siempre hace, corrió donde ella para consolarla, se soltó como pudo de Melody y corrió donde estaba su madre querida, pidió que lo cargara, y ella, así lo hizo casi de inmediato.

- Tranquila mami, ya – Puso sus manitas en el rostro de Aurora para calmarla mientras le hacía cariño en el rostro marcado por las lágrimas – Todo estará bien… Ya veras, mañana te prepararemos el desayuno junto a Lu...

Y allí todo se destruyó, Aurora le dio una sonrisa suave y sus ojos no se contuvieron, abrazo a Emil y lo sentó en su regazo, allí, frente a expectadores desinteresados le dio la noticia de la forma más suave que encontro…

La segunda princesa estaba sentada en un vació silencioso recordando su pesar, su vestido se mantenía fijo, sin arrugas y sus largos cabellos plateados estaban tan relucientes que si fuera otro momento estaría igual de feliz que sorprendida, a pesar de tan grande y elegante vestido, ella era delgada y de estatura alta, lucia unos labios delgados y finos que serían felices si pudieran besar a su amado, y unos ojos amatistas que te quitaban el aliento a cualquier mortal, en vida se jactaba de ser la más hermosa de todas las mujeres, ahora sin saber bien donde se encontraba hubiera deseado no hacerlo nunca, se decía que quizá si no fuera así ella podría haber sido feliz con ese alguien que la amaba realmente, en esos minutos estaba en un obscuro y silencioso sitio, muy parecido al lugar de la primera princesa, pero singularmente y a comparación de esta misma, ella no lograba oír nada… No oía nada porque tampoco había nada, había solo un silencio, pero no era un silencio común, si no que era uno de esos silencios ensordecedores que te hacen pensar si el silencio es interno o externo a ti, se levantó del piso confundida por esa interrogante y se sacudió el polvo inexistente del lugar, miro seria a un punto en específico y comenzó a correr hacia ese lugar, llevaba tanto tiempo corriendo que había perdido el origen del tiempo, comenzó a desesperarse, ¿Por qué no escuchaba sus pasos al correr?, limpiaba sus ojos, ya que de ellos caían lagrimas que nublaban su vista y la volvía borrosa… Cuando se hartó de correr pensó en sentarse nuevamente, pero cuando lo iba a hacer vio una puerta, y su corazón no latiente casi se le fue… Comenzó a caminar, caminaba lentamente, sabía que el lugar donde iba era oscuro, no porque alguien se lo dijera, sino porque lo presentía, esa puerta, no sabía porque pero comenzaba a ser empujada por ella, se dejó llevar y cerró los ojos, se acercó y abrió la puerta con fuerza pensando que adentro estaba su amado, con ese sentimiento se dejó llevar y cuando abrió los ojos, la puerta se cerró junto con un grito desgarrador, su puerta no volvería a ser abierta jamás…

Pov Mathias

Aurora se llevó a Emil apenas este llego al cementerio, ¿Por qué?, porque Emil al saber que su hermano estaba dentro de ese cajon corrió donde estaba este, cuando el pequeño islandes llegó frente a ese enorme cajón de madera solo se dedicó a mirarlo, tocar suavemente su material y decir el nombre de su hermano, golpeaba el cajón como quien llama a una puerta, miraba nuevamente la magestuosidad que tenia en frente y lo llamaba nuevamente, al cabo de un rato Emil se dio cuenta que de nada servia, Lukas no le iba a contestar, sus ojos se llenaron de lágrimas y en ese minuto muchos de los presentes recordaron que Emil solo era un niño inocente que amaba a su hermano mayor, cuando -al fin- decidieron actuar con el niño fue cuando se puso a gritar que Luke no estaba muerto y que era un error, que su hermanito no estaba muerto porque él le había prometido ir a buscar haditas con él cuando volviera de su viaje, y que él no faltaba jamás a sus promesas.

Volvamos al punto medio de la desgracia, y con eso me refiero al acto que ocurrio antes de la llegada de Emil y después de la ceremonia en la capilla; todo partió cuando finalizando el velorio en la iglesia nos trasladamos hacia el cementerio, cuando llegamos a dicho lugar debiamos mover el cajón entre varios hombres -mayormente de la familia de Aurora y yo- desde el lugar donde nos estacionamos hasta el hoyo donde meteríamos a Luke para poder darle el entierro adecuado, estando ya en el cementerio un cura de poca monta que había sido prestado por la funeraria leyo unos pasajes de la Biblia que ni siquiera venian al caso, le dio sus condolencias a la madre y se fue a dar unas palabras a otro muerto. Debo admitirlo, en estos momentos ya no me podía ni siquiera mi cuerpo, el dolor por la pérdida aún me hacia malas jugadas en la piel. Cuando llegamos al lugar Aurora me entrego una flor que reconoci al instante, mire a los ojos de la mujer y ella solo bajo la cabeza, me apreto el hombro y siguio repartiendo una rama de brezos purpuras por persona presente y alli fue cuando mi cerebro quedo en "Off", no pude articular palabras y de mis ojos no cayo gota, acaricie el brezo cuando tuve que dejarlo sobre el ataúd, me quede con un petalo en los dedos y murmure un te amo que nunca más será respondido, mi cerebro no reaccionaba a nada mas, los presentes en la ceremonia estaban cada uno en sus propios mundos mirando o llorando, o hablando entre ellos, en sus propio mundo tan descolocados como estaba yo mismo, me puse a observar a los presentes y vi que Arthur miraba como los brezos púrpuras en sus manos se mojaban con la llovizna que acababa de aparecer, en vez de protegerse de la inminente lluvia, el ingles levanto la vista y miro el cielo que lloraba la muerte de su mejor amigo, observaba como las nubes despedian a un ser amado; por otro lado Vlad tenia un paraguas y hablaba con Aurora que sostenia otro, no escuchaba nada de lo que decian por la distancia en la que nos encontrabamos y por la lluvia que golpeaba el plastico de las sombrillas que tenian los presentes, pero a pesar de la lluvia podia ver claramente como el rumano miraba a Aurora como quien mira a su propia madre mientras llora, supe de inmediato cuando su tema de conversacion fue el islandes, porque el pelirojo miro hacia el niño y luego apuntaba donde estaba Emil, estaba sentado junto al ataud en el piso mojado, Aurora bajo la vista nuevamente y comenzo a secarse la cara con la manga del vestido, el rumano -quiza por la presion ypor no querer llorar nuevamente- saco un cigarrillo y comenzo a fumarlo lentamente, se despidio de la mujer y se acerco a su novio quien miraba como el rumano le extendia la mano para irse del cementerio; Aurora por su parte se acerco a su hijo pequeño y lo tomo en brazos, Emil entre sollozos y gritos fue fin llevado a casa, no tengo dudas de que el pequeño islandés pasaría días sin comer esperando que Luke bajara de su cuarto.
Después de que Aurora se fue del lugar, la gente comenzó a irse de dos en dos, de tres, e incluso por si solos, quedando poca gente en ese frio lugar… Yo estaba decidido ser el último en marcharme en honor a Lukas, al paso de los minutos estaba -casi- solo con el cuerpo de la persona que amaba con todo mi corazón en un cajón de entierro, para luego, cuando todos nos fuéramos ser enterrado por un trabajador del lugar y de esa forma perderlo para siempre, aun estaba tratando de secar esas lágrimas incesantes que surcaban por mis mejillas desde esa tarde que pensé que sería la más feliz en mucho tiempo, fue todo lo contrario, y cada vez que recordaba eso mi cabeza nuevamente se imaginaba a Luke en el piso, muerto, mis manos llenas de su tratando inútilmente de frenar la herida, mis mismo se mis mis uñ mi cabeza.

Mis lagrimas surgen nuevamente y mis manos vuelven a ser teñidas de rojo, mis ojos no paran de verlas de esa manera, saco una botellita de desinfectante de mi bolsillo del pantalon negro y me unto un poco en las manos para luego frotarlas hasta que me duele el frizz que se forma, a pesar de que se que el desinfectante hizo efecto aún así la sangre tiene un olor característico a azufre y un color tan rojo como lava brava... miro mis manos con la intención de limpiarlas nuevamente cuando una voz detrás de mí me interrumpio, me gire y en mi rostro se notó una gran sorpresa cuando encontré a dos chicas, ambas estaban vestidas para la ocasion; Yo sé que las había visto varias veces por el instituto cuando caminaba con Lukas por los pasillos, y de vez en cuando, este incluso paraba su caminar conmigo y las saludaba, pero nunca me fije realmente en ellas dos, nunca me importaron demasiado como para hacerlo realmente, Luke tampoco me las presento como sus amigas y yo jamás le pregunte, ahora me arrepentía un poco, quizá me falto más comunicación con él, una dijo mi nombre y admitió que estuvo esperando encontrarme, eso me sorprendió un poco pero decidí atender a su pedido.

- ¿Y porque me buscaban? – Intenté sonreírles, pero en vez de sonreír de vuelta, me dieron una cara de preocupación al ver mi rostro, y eso no me preocupo en absoluto, se que cualquiera se preocuparía por mi, llevaba la barba de casi una semana y mis ojos estaban unidos y húmedos por el sueño y las lágrimas, tenía unas ojeras enormes, prácticamente me veía como 15 años mayor y estaba aún más delgado que en mi mejor época, pero todo eso me dio igual, intente serenarme e incluso les volví a dar una sonrisa- ¿En qué puedo ayudarlas?

- Mathias, mira… - Miro a su amiga y luego me miro a mí de vuelta - Me llamo Marta, y ella es Laura – la segunda me hizo una reverencia cordial al buen estilo victoriano, ambas se notaban cansadas, Marta traía gafas de sol para que no se vieran sus ojeras, pero era casi imposible – Sé que no nos conoces a más de lo que es un saludo y una despedida, pero… bueno, nosotras conocíamos a Lukas… Laura – le dio un pequeño codazo

- Mathias – decía Laura entre hipidos leves, pero bien marcados – Lukas… sé que sabes que él fue ayudante de biblioteca un tiempo, bueno, uno bastante largo, quizas debes creer que lo conozco super poco y estoy exagerando con mis lágrimas torrenciales, pero te equivocas; yo lo conozco desde primaria… Marta desde ahora… Me hice amiga de Lukas en la biblioteca, antes de que lo conocieras y comenzaran a salir, yo era ayudante, no voluntaria como el, así que me fue menos complicado hablarle – sus ojos se humedecieron bastante y las lágrimas comenzaron a caer nuevamente – lo conozco desde la primaria, pero en la biblioteca lo conocí realmente – comenzó a secarse las lágrimas con la manga del vestido

- Cuando lo vi por primera vez lo encontraba extraño– Continuo Marta un poco más seria y con los ojos pendientes en saber si lo escuchaba o no– Ese noruego era un dolor de cabeza, él no hablaba con nadie que no fueran Vlad o Arthur a menos que fuera por la ubicación de un libro que probablemente no estaba en su lugar, un día hasta me reprendió porque no tenía idea donde estaban los viajes de Gulliver y me dijo que si no me tomaba en serio ese trabajo, que la puerta era bastante ancha – rio un poco, pero sus ojos se empañaron de inmediato – yo… no sabría su nombre si no fuera porque estaba con una placa que lo decía…

- Nosotras… - dijo Laura suave, para de pronto sacar la voz – Conocíamos a Luke hacía muchos años, cuando lo vi por primera vez, era un chico callado, y rallaba lo simple y serio, cuando empezó a faltar a clase las primeras veces, empezó a correr el rumor de un presunto suicidio, aun estábamos en primaria; cuando llegábamos a la secundaria pude saber que había hecho amigos, pero sus faltas a clase no disminuyeron, seguía siendo el mismo chico frio y apartado del montón de la primaria, se inscribió de ayudante y en todo el momento en la biblioteca, no se quitaba los audífonos para hablar con nadie; pero aún recuerdo ese tiempo en que aparecía en biblioteca más distraído y se le notaba más feliz – suspiro, tomando aire nuevamente y volvió su mirada hacia abajo - un tiempo después, comenzó a saludarnos, y ya no usaba los audífonos, al tiempo, comía con nosotras, y en ocasiones bromeaba con nosotras, se veía más feliz, así que supusimos que algo bueno le ocurría, un día en el almuerzo nos dijo que comenzó a salir con alguien un poco ruidoso– Miro el piso llenándose de recuerdos en donde Lukas aparecía, las lágrimas surcaron nuevamente – Cuando te conoció, nosotras lo comenzamos a observar tanto que incluso el noto nuestra presencia y se hizo nuestro amigo y notamos que comenzó a cambiar, de una manera en donde Lu irradiaba alegría, claro… y bueno – dijo Marta tomando un poco de aire – él realmente te amo demasiado Mathias…

- Lu nos dejó esto – Marta extendió un sobre de papel que dentro guardaba un libro – No nos dejó literalmente a nosotras, pero suponemos que quería que te lo entreguemos; quizá no sepas que ese es el libro de la biblioteca de la escuela que Lukas leyó cuando recién te conoció, recuerdo que cuando acabo de leer, nos dijo que le gusto tanto que fue a la tienda y lo compro para tenerlo y leerlo cuando quisiera, pero frente a nosotras nunca más lo leyó y lo dejo abandonado en la oficina del bibliotecario del Gakuen, pero hace no muchos días él lo volvió a leer en la biblioteca y la verdad es que nos sorprendió bastante, hace unos días cuando llegamos a la escuela él estaba leyendo con los audífonos puestos, incluso le tomamos una foto donde sale todo concentrado en su labor, así estuvo todo el día, hasta que lom acabo, cuando acabo de leer nosotras estábamos ordenando todo para poder cerrar, se despidió de nosotras y nos dio las gracias, se fue, nosotras continuamos limpiando y lo vimos, estaba en la mesa de Lukas… Esto paso hace unos pocos días, para ser específicos, el viernes que paso, un día antes de su… muerte…

- Era de él, así que nosotras pensábamos devolvérselo apenas volviera a clases, ya que hace tiempo no lo tomaba y quizá quisiera tenerlo… pero eso nunca pasara verdad… - Dijo Laura dejando un tono de tristeza en el aire…

- Deberían haberle dado el libro a Aurora, ella es su madre, no yo merezco tenerlo, ¿no oyeron acaso cuando Aurora dijo que Luke no tenía a nadie más que a ella? - les dijo Mathias sin entender bien a lo que estas venían, pero lo que dijo fue pura cortesía, quería atesorar ese libro…

- Por eso mismo hablamos contigo ahora Mathias… Nosotras habíamos pensado dárselo a su madre antes que se marchara, dárselo no sería difícil ya que suponemos que está ansiosa por obtener respuestas… pero nosotras encontramos… Luke nos hizo encontrar… Math dentro del libro… -Dijo Laura al punto que ya rayaba el llanto

- Mathias… él, te dejo una nota en el libro, estaba como marcador de página… - Le dijo Marta – por eso, el libro te lo dejamos a ti… Porque tiene tu nombre, no el de Aurora…

Allí me entregaron el Libro, me dieron el pésame, miraron por última vez a Lukas y se fueron, lo abrí, me encontré que Luke había marcado una parte del libro con destacador verde, decía "Me enamoré de él, pero no me quedo con él por inercia, como si no hubiera nada más a mi disposición. Me quedo con él porque así lo decido todos los días al despertarme, todos los días que nos peleamos, nos mentimos o nos decepcionamos. Lo elijo a él una y otra vez, y él me elije a mí".

No sabía bien que debía hacer, el marcador que hablaban las chicas era un sobre, quizá fuera una nota… Automáticamente tenía dos opciones: leer la nota, o simplemente dejar las ultimas palabras de Luke intactas…. Pero mi amor al noruego me impidió dejar la nota sin leer, ¿era egoista el querer saber todo lo que Lukas quiso decirme antes de marcharse?, ¿deberia dejarlo?… abajo estaba la nota de Lukas que mencionaron las chicas…

Love, happens all the time/ Amor, pasa todo el tiempo
To people who aren't kind/ Con personas que no son buenas
And heroes who are blind/ Y héroes que son ciegos
Expecting perfect scripted movie scenes/ Esperando guiones de escenas perfectas
But what's an awkward silence mystery? /¿Pero qué es un extraño silencio misterioso?

"Mathias:

Math, sé que todo esto debe ser muy duro para ti, pero quiero que entiendas que no tienes la culpa de mi decisión, es más, es una decisión que como persona ya la había tomado hace algun tiempo atras, espero que sepas que en verdad te amo, te amo como un perro ama a su dueño, te amo como una persona ama al amor de su vida… y por eso, espero que vivas por siempre ¿está bien?…

Lukas"

La tercera princesa lloraba sola, estaba sentada en el piso, con la espalda pegada en la pared que tenía detrás de ella, había visto su vida ya y su conciencia la había dejado… Se daba cuenta que ahora mismo estaba más sola que nunca antes, pero ahora no tenía futuro y vagaba sola sin sentido, ella ya estaba dentro de esa tenebrosa puerta y nadie la acompañaba, sus cabellos eran plateados y le llegaban hasta la barbilla, ella era delgada y de estatura baja, lucia unos labios gruesos y unas margaritas en las mejillas, pero sus ojos amatistas eran su más hermosa cualidad física, nadie se podía resistir a ellos, ni su persona especial, ni familia, ni amigos, nadie… Ahora sola no sabía dónde estaban todos, no lo sabía, nadie sabía dónde estaba ella tampoco… ni siquiera ella… trato de salir de su puerta, pero nadie podía sacarla, y ella no tenía la fuerza suficiente para poder salir y volver al basto oscuro en el que estaba antes… comenzó a rodear la habitación en la que se encontraba, pero no tenía fin, comenzó a rodear la habitación corriendo, sus lágrimas se desbordaban y no sabía por qué… solo sabía que corría sin rumbo y fin…

Pov Lukas

For all the air that's in your lungs/ Para todo el aire que hay en tus pulmones
For all the joy that is to come/ Por toda la alegría que está por venir
For all the things that you're alive to feel/ Por todas las cosas que estás vivo para sentir
Just let the pain remind you hearts can heal/ Solo deja que el dolor te recuerde que los corazones sanan
Oh how were you to know?/Oh, ¿cómo lo sabes?

Debo admitirlo, esperaba una reaccion mas fuerte de Mathias, y su reaccion me dejo sin palabras, tan calmo, tan dolido; Yo me encontraba sobre mi ataud, sobre mi cuerpo inerte, viendo las reacciones de Mathias cuando Laura y Marta se les acercaron… Me senté en la tapa del ataúd y mire la escena hasta el final, "Así que ya cumplieron con su parte", pensé y por un instante me alegre, al menos ahora sabía que no había sido por su culpa… "Gracias chicas"… Rodee con mis piernas con mis brazos flacuchos y me quede espectante a lo que pasaria despues, miraba a las chicas irse dejando a mi novio ahi parado observarlas irse, para mí ellas habian hecho mas de lo que podria imaginar y me dio un remordimiento enorme el saber que ahora ya que puedo abrazarlas, y que ellas sabian que ahora yo ni siquiera existia.

La cuarta princesa se preguntaba a cada momento, ¿Porque corro hacia mi destino, si mi destino es lúgubre y oscuro? Su conciencia se había ido y solo le quedaba esperar para poder ver su cuerpo golpeado por la vida, miraba a la nada y volvía a preguntarse lo mismo, cada vez que se aburría se lo repetía nuevamente, así una y otra vez hasta que dejo de correr por esa senda triste, paro en seco y dirigió su mirada amatista hacia atrás, algo le oprimió el pecho, sintió una brisa de viento delante de ella y vio una luz que comenzó a guiarla hacia adelante, la cuarta princesa no tenía los cabellos plateados, eran más bien ceniza, ella era delgada y de estatura media alta, lucia unos labios delgados y llenos de elegancia, tenía ojos amatistas y un lunar en la comisura de la boca, miro nuevamente hacia atrás, ignorando la única luz que había visto en mucho tiempo, allí estaba la interrogante a su pregunta, ella no debe retroceder, debe avanzar y ver lo que le espera, pero tiene miedo, camina hasta atrás y de repente se sentó, frente a ella había una puerta. Ahora sabía que no iba a abrirla.

Pov Mathias

Mi mente volo lejos, muy lejos fuera de todo metro cuadrado cercano, mire el ataud tan mojado por la incesante lluvia fue cuando logre asumir que Lukas no despertaría y me besaría nunca más, mire a mi alrededor y me encontré solo, todos habían tenido que marcharse, mis lágrimas estaban acumuladas en mis ojos, pero yo no las permitiría salir, quería recordar a Lukas sin tener que llorar, la lluvia azotaba las flores y las lapidas de forma sutil, pero en montón, no pude parar de pensar lo cliché que era ese momento y eso me ayudo a calmar mi cabeza, lo agradecí tanto, sabía que cuando saliera del cementerio, mis lágrimas se confundirían con la lluvia y ya no se notarían más… Solo estaba yo, había llegado la hora de mi despedida, a solas con él, el amor de mi vida. Toque mi bolsillo, la nota seguia alli, la saque del bolsillo de la chaqueta y la desdoble, tome el petalo en mis dedos y comence a leer.

Pov Lukas

- ¿Sabéis algo pequeño noruego de ojos amatistas?, yo… no pensé que tendría que escribir algo como esto jamás – Dijo un Mathias al borde del llanto, se sobo la nariz con su manga y se acercó aún más a mi cuerpo inerte - Cuando te conocí pensé que jamás necesitaría hacerlo porque siendo viejos y arrugados serias tú el que se despidiera de mi tras haber sido tan idiota de atragantarme con un cereal– Dijo dando una sonrisa falsa – Me senté en una mesilla por casi 5 horas pensando en cómo puedo despedir a quien más quiero a mi lado pero, y casi tiro la toalla como tres veces… pero al comenzar a escribirlo, me di cuenta de la importancia que tienen estas palabras en estos momentos – metió su mano en su bolsillo y saco el broche en cruz que sujetaba mi cabello en vida– es importante porque estas palabras, son las últimas palabras que le podre decir a tu cuerpo - Hizo un leve suspiro lleno de frustración y volvió a decir - ¿Sabes algo mi amor? ¿Puedo decirte mi amor aun verdad?, sé que no me contestaras pero realmente necesito pensar que me escuchas– Dijo tras secar las lágrimas de sus ojos, luego acaricio mi rostro con sus manos húmedas y frías– Yo sigo pensando que aunque nacimos separados, en distintos países y con distintas lenguas y culturas, nosotros fuimos predestinados a amarnos y a estar juntos por el resto de nuestras vidas, tanto juntos como separados, sigo pensando que amo tus gestos, sigo pensando de que seguiré enamorado de ti, Lukas, te amare incluso después de que mi corazón se pudra en la tierra, ¡y maldición sí!, también sigo pensando que un balazo sería mucho más suave que tu desprecio – El cabello se le pegaba a la cara por la lluvia y la nota estaba tan mojada que dudo que pudiera entender algo de lo que dice, acaricio el petalo una vez mas y arrugo la nota para luego guardarla en el bolsillo de su pantalon– Pero esto, es infinitamente es peor que tu desprecio, realmente superaste todas las expectativas – dijo, de forma leve y directa, eso si hubiera estado vivo, quiza hasta me hubiera reido de la forma de como sono – Lukas… mi amor… nunca me canse de verte allí, leyendo, escribiendo, durmiendo, bebiendo café, observándome, sonrojándote cuando te descubría haciéndolo, y luego volver a buscarme con la mirada; Yo si te amo Lukas, y yo sé que tú a mí, no me digas lo contrario, porque no te creeré jamas… - dejo el petalo junto a los demas brezos purpuras y apretó el broche en sus manos y lo dejo junto a las flores, terminando de hacer eso acaricio el ataud y se separó de mí.

La quinta princesa fue la que peor la paso, ella estaba allí, y lo sabía, textura delgada casi desnutrida, su pelo era casi nulo y sus ojos gigantes amatistas llenos de terror a cada minuto, su vida encerrada en el sotano de la persona que luego del tiempo empezo a amar, una muerte en manos de su amado porque al parecer encontraria a otra persona y ahora estaba frente a sí misma, ella aparecio frente a la puerta y vio como su amado terminaba de partirle la cabeza, terminando con ella se sento a su lado y le pidio perdon... Su amado le pedia perdon, al fin, ella ya no podía ver su temor… Había pasado por negro y puerta en casi un segundo, había seguido la luz y se había encontrado, pero ella no lo sabía, y no podría haber descubierto nunca que, al abrir la puerta, la persona que estaba en el piso frio y sin vida era ella… pero como no sabía quién era, se quedó junto a ese cuerpo por siempre… y nunca supo que ella no se podría separar de ese cuerpo jamás sin al menos saber reconocerlo…

Pov Mathias

And I, I hate to see your heart break/ Y yo, odio ver tu corazón roto
I hate to see your eyes/ Odio ver tus ojos
Get darker as they close
/ oscurecerse mientras se cierran
But I've been there before/ Pero he estado allí antes

Cuando quite mi mano del ataud, lo vi, vi a un Lukas expectante ante mí... Solte lo que fuera que estuviera en mis manos y me separé por inercia, con un poco de miedo, cuando entendí que mi Luke seguía muerto seguí a ese Lukas que me veía con tristeza...

-Lu-Luke... ¿amor?, - aún llovía a cantaros, y el Luke fantasmal me miraba incrédulo... - ¿Eres mi Lukas?

- ¿Puedes verme? - Me dijo esa voz, sonaba despacio, casi ni se escuchaba nada... - ¿Puedes escucharme? - Cada vez su voz desaparecía más, Lukas al percatarse que le quedaba poco tiempo ante mi sólo dijo - Mathias lo siento muchísimo, yo... realmente te amé con todo mi corazón, no creas lo que te dije... mi corazón te pertenece por siempre... ¿está bien?, nunca lo dudes, por favor no me olvides jamás... pero... debes seguir con vida, no te des por vencido por mi estupidez… Por favor... Cuida a Emil…

Me regalo una bella sonrisa que lo único que hizo fue hacerme quedar en shock, el, aun allí sonriéndome, miro la puerta que estaba atrás de él y se esfumo, desapareció sin más… Asustado y con terror en las venas, corrí buscándolo por el lugar en donde había desaparecido para poder pedirle que se quedara, corrí incluso hasta salir afuera para seguir buscándolo, la lluvia me empapaba la ropa y el pelo, mojaban mi rostro y mi cuerpo, pero no me importó en lo más mínimo, solo me importaba encontrarlo, las frías gotas de la lluvia que caía, lluvia amarga y cruel, se mezclaban con mis lágrimas infinitas, cuando me di cuenta de que tal vez Lukas no volvería a mostrarse ante mí nunca más, mis piernas flaquearon y perdieron toda su fuerza, y caí de rodillas al piso... Mis lágrimas saladas se mezclaban con la lluvia sin sabor que caía del cielo, solo me hacían pensar que no podré seguir viviendo sin Lukas, ya estoy harto de creerme fuerte, me creí fuerte por demasiado tiempo, y todos saben que estoy muerto por dentro… Yo hice una promesa hace casi dos años atrás… y yo... planeó cumplirla y así estar con Lukas por siempre... Pero luego, un "debes seguir con vida" acompañado con un "No te des por vencido" nublaron mis pensamientos, dejando mi cabeza en shock por varios minutos que parecían cada vez más eternos… volví a llorar

Pov Lukas

¿Saben?, yo seguía frente a él, sólo que Mathias no pudo seguir viéndome más... Vi todo, cuando creyó que me había ido, y corrió buscándome por los alrededores, vi también cuando sus piernas flaquearon y cuando cayó al piso y lloro, y ahora, lo sigo viendo... Vi cuando dio ese grito desgarrador pidiendo que volviera, pidiendo volver con el... su "por lo que más quieras, vuelve conmigo" me llego hasta el alma... ¿Por lo que más quiero?, Él, es lo que más quiero... si pudiera volver con él, ya lo habría hecho... es más, es lo único que deseo en estos minutos..

- Entonces, ¿qué estás esperando? – Dijo una voz por detrás mío… cuando voltee, mi piel se erizo…

- Tú… Tú eres….

Continuará~