Capitulo 5. "Planes"
- Sera que... abandono su promesa... - dijo recordando que hace unas horas, Link le había prometido que daría su vida por proteger al castillo, pensando en ese momento, que todo lo que le había dicho era solo una mentira aunque a la vez deseando que estuviera equivocada.
- Princesa, ¿se encuentra bien? - dijo, sacando a la princesa de sus pensamientos.
- Si, estoy bien.
- Me pregunto a donde abra ido Link, solo se que en cuanto el enemigo ataco, ya no había rastro de el en ninguna parte, espero que nada malo le haya pasado.
- Si... yo también - agrego, susurrando lo ultimo para ella.
...
Después de aquella conversación con la sheikah, esta lo invito a entrar a su casa para luego sentarse en unas sillas, pues aun había algunas cosas que la sheikah quería revelarle a Link.
- Es un alivio al fin haberte encontrado. Desde el momento en que me entere de que tu alma estaba nuevamente presente en Hyrule me dedique a poder encontrarte pero no había tenido éxito, hasta ahora. Es un honor volver a encontrarme contigo héroe - dijo, sin cambiar en ningún momento su seria expresión y haciendo una reverencia ante el.
- Un momento, ¿dijo volver?, perdón, pero jamás le he visto en mi vida.
- En esta vida no, pero si en la pasada. Aun hay cosas que necesito contarte, así que necesito que pongas atención a lo que te voy a decir pero deberás saber que algunas cosa tendrás que saberlas por tu propia cuenta.
- Bien.
- En este momento deberás estarte preguntando porque has tenido que ser tu el héroe que mencionaban las antiguas leyendas ya olvidadas, a demás de que la oscuridad había sido erradicada de Hyrule, bueno eso se debe a que la oscuridad no fue eliminada del todo pues como ya sabes dos de los seres de la oscuridad han regresado y con esto el motivo de que vuelvas para cumplir con el mandato de las diosas
- ¿Entonces, yo ya estaba destinado a volver?
- Siempre lo has estado.
- ¿Pero porque? según la antigua leyenda el héroe elegido abandono Hyrule cuando este mas lo necesitaba.
- Estas aquí porque aparte de cumplir con tu destino también es necesario que arregles algunas cosas de tu pasado.
- ¿Cosas? ¿Qué clase de cosas?
- Eso es algo que solo tu puedes averiguar.
- ¿Como?
- Solo tienes que empezar a recordar tus vidas pasadas.
- ¿Y como voy a hacer eso?
- Con el tiempo lo recordaras. Me gustaría poder contarte mas cosas, pero por ahora, es momento de que regreses a Hyrule.
Así, antes de que Link pudiera articular una palabra, la sheikah se levanto de su silla y arrojo una pequeña bola de luz al suelo haciendo desaparecer al joven del lugar.
- No le digas a nadie - alcanzo a escuchar antes de desaparecer.
...
Cuando Link despertó vio que se encontraba en la pradera de Hyrule, pero para su mala suerte,por mas que miraba todo el lugar, no podía avistar el castillo, cosa que lo preocupo al no saber en que parte de la pradera se encontraba, o si había algún pueblo cercano en donde descansar.
Al verse perdido en aquel inmenso paisaje, Link no tuvo mas opción que empezar a caminar sin saber a donde lo llevarían sus pasos.
Duro unas cuantas horas caminando sin un rumbo fijo por la pradera, preguntándose si al menos se estaba acercando a un pueblo o una aldea, pues a medida que iba caminando, se iba haciendo también cada vez mas presente la luz del día y junto con esta, un inmenso calor que aria que las energías se le acabasen. Y así seria, de no ser porque justo cuando se iba a dar por vencido, como si se tratase de una ilusión, pudo avistar a no mas de medio kilómetro, el castillo de Hyrule.
Guiado por la emoción y usando las fuerzas que le quedaban, corrió hacia el castillo.
...
Mientras tanto el rey y la princesa se encontraban supervisado el entrenamiento de los caballeros, sin embargo la princesa no dejaba de pensar en Link pues inexplicablemente le preocupaba que algo malo le hubiera pasado durante la batalla pero también le entristecía pensar que aquella promesa que le había hecho la noche anterior simplemente la haya olvidado y que se hubiera ido para salvar su vida.
Pero luego fue sacada de sus pensamientos al ver que un caballero se había acercado a ella y a su padre diciéndoles que habían avistado a un joven acercarse al castillo, quien suponían se trataba de Link. El rey y la princesa al escuchar las palabras del soldado rápidamente se dirigieron a la entrada.
...
Cuando llegaron a la entrada vieron que efectivamente se trataba de Link quien se encontraba totalmente agotado casi al punto de desmallarse razón por la cual la princesa no pudo evitar preocuparse al verlo en ese estado.
Por otro lado Link se alegro al ver al ver al rey y a la princesa pero luego eso cambio cuando vio que el rey empezó a hablar seriamente con el capitán hasta que luego la princesa se acerco a ellos y después de unos segundos se dirigió a Link.
- Link.
- Princesa, ¿Qué sucede?.
- Link... mi padre... piensa despedirte.
- ¿Que? ¿porque?
- Porque... cuándo el brujo ataco no hubo ningún rastro de ti en toda la batalla.
Fue entonces que recordó que antes de haber llegado a la ciudad sheikah, un brujo y un montón de monstruos estaban apunto de tacar el castillo y justo cuando el brujo estaba buscando al héroe fue cuando repentinamente desapareció de la batalla.
- Link, ¿que te sucedió?
- Y-yo... fui secuestrado por unos bocoblins antes de que comenzara el ataque. Cuando me libre de ellos me di cuenta que me habían llevado lejos del castillo. Si no hubiera sido por aquello le juro que hubiera peleado por el castillo tal y como se lo he prometido.
La princesa, ciegamente confió en las palabras del joven pues no pudo evitar preocuparse por el estado en el que se encontraba suponiendo que se debía por lo dicho además de que confiaba en que no deshonraría su palabra.
- Esta bien Link, confío en tu palabra, se que nunca la deshonrarí retirarte le indicare a mi padre que te quedaras en el castillo.
- Gracias princesa.
Luego de eso, Link se retiro del lugar para ir a su habitación a descansar, pues aquella caminata de regreso se le había echo muy pesada además de que debido a que ya era casi medio día y el entrenamiento ya había comenzado por lo que no se le permitía que entrenase.
...
Unas horas antes, en el Patíbulo del Desierto el señor de los demonios se encontraba rondando por los pasillos del lugar esperando la llegada del brujo mientras recordaba con odio a aquella persona que fue la causante de que fuera encerrado siglos atrás.
- Juro que cuando nos volvamos a encontrar, las cosas serán diferentes maldito bastardo.
En eso, un portal comenzó a abrirse y lentamente se hizo presente ante el el brujo Vaati.
- He vuelto de mi misión.
- ¿Has conseguido tu objetivo?.
- No, el muy cobarde huyo cuando lo estaba buscando, pero lo raro, es que no pude averiguar por donde se fue. Es, como, si se hubiera desaparecido de repente.
- ¿Desaparecido dices?, no, ese maldito aun no sabe que es el elegido. No creo que allá sido capaz de desaparecer por si solo, algo o alguien debió ser el responsable.
- ¿Quién crees que haya sido?.
- No lo se, pero sea quien sea nos va a dar problemas si es capaz de hacer que ese maldito desaparezca.
- Bueno, al menos dime que tu si conseguiste tu objetivo.
- Ojala, esos ancianos son mas difíciles de interrogar que a un goron.
- Si, esos imbéciles creen que con ocultar la ubicación de la celda salvaran a su pueblo.
- Como sea, tarde o temprano encontraremos su ubicación y entonces Hyrule perecerá ante nuestro poder.
- (Al menos esta misión hace que olvide su vanides) - pensó para si mismo.
- Pero hay que darnos prisa, si seguimos así el estrés va a perjudicar mi belleza.
- (Y, hable muy pronto) - pensó bajando la cabeza - Bueno, pero en todo cazo, como vamos a dar con la prisión si esos ancianos no van a hablar.
- No lo se, pero por lo mientras, hay que darle a Hyrule algo de lo lindo, mañana atacaremos de nuevo el castillo.
- Y solo espero que se maldito se atreva a combatir esta vez.
Una vez terminada la conversación, ambos se retiraron del lugar para prepararse para su siguiente ataque mientras que Grahim iba a vigilar nuevamente a los sabios.
...
Unas horas después de que Link había regresado al castillo, la princesa se encontraba en su habitación leyendo una vez mas el diario de la princesa de la época oscura, pues a partir de aquella parte donde el joven llamado Link se va nuevamente a su búsqueda va narrando a detalle la situación que se había vivido hasta el momento en que la catástrofe había comenzado.
Durante todo el tiempo que llevaba leyendo, la princesa no apartaba en ningún momento la mirada del libro, pues cada pagina que leía hacia que su interés por terminarlo fuera mayor ya que mencionaba como Hyrule cada vez mas se iba enfrentando a aquella crisis, pero algo que mas le llamo la atención fue ver que ahora en ningún momento volvió a mencionar al joven.
Al llegar la noche la princesa había terminado de leer el diario. Miro por la venta y al ver el cielo oscuro de la noche miro un reloj que tenia colgado en una pared, eran las 10:00. Cuando vio la hora que era llego a su mente que a esa hora tenia su entrenamiento con Link. Dejo el libro en la estantería, agarro su florete y rápidamente se dirigió al campo de entrenamiento donde supuso que ya se encontraba Link.
...
Al llegar vio que efectivamente ahí se encontraba Link entrenando con su espada además que estaba feliz de ver que a pesar de lo sucedido en la mañana a Link no se le había olvidado su entrenamiento con ella. Se acerco a el y lo saludo.
- Hola Link - hizo una reverencia.
- Hola princesa - le devolvió la reverencia - por un momento creí que se le había olvidado nuestro entrenamiento.
- Lo lamento me entretuve leyendo un libro, disculpa si te hice esperar.
- Descuide princesa, ¿lista para comenzar?.
- Si.
Dicho esto los dos jóvenes dieron inicio al entrenamiento. Desenvainaron sus armas y las colocaron una contra otra, se separaron y luego la princesa lanzo el primer ataque dando una estocada que fue esquivada por Link para luego este contraatacar con su espada.
Duraron alrededor de una hora así, dando y recibiendo ataques uno del otro pero procurando hacer el mínimo daño posible a su rival a pesar de que ninguno acertaba un golpe.
Al término de su entrenamiento los jóvenes se sentaron en una banca mientras conversaban sobre algunas cosas que ambos debían mejorar, como su resistencia, sus ataques, entre otras cosas. En ese momento Link se decidió a agradecerle a la princesa por haberle permitido continuar en la guardia a pesar de que se sentía culpable por mentirle solo para seguir ahí, pues sabia que por el hecho de haber desaparecido repentinamente de la batalla, otros lo considerarían un cobarde y lo echarían inmediatamente del castillo.
- Princesa.
- Si Link.
- Yo... solo quería agradecerle por permitirme continuar en el castillo a pesar de haber desaparecido en plena batalla contra el brujo, pues otros de seguro no hubieran dudado ni un segundo en echarme del castillo por eso, a demás de que creía que al a ver desaparecido de esa manera usted pensaría que había roto mi promesa.
- No hay de que Link, confió en ti y se que nunca deshonrarías tu palabra - dijo regalándole una sonrisa al joven.
- Pero ¿porque confía tanto en mi si apenas nos conocemos? - cuestiono el rubio, pues no se esperaba recibir tal confianza de parte de la princesa y menos por el hecho de que solo se conocían desde tres días.
- Bueno... tienes razón, solo nos conocemos tres días pero, durante esos días, me has demostrado razones para confiar en ti, como cuando nos conocimos, me habías salvado de aquellos bandidos y cuando supiste que soy la princesa, tu me ayudaste a volver al castillo en vez de secuestrarme o matarme... gracias - explico la princesa sin dejar de sonreírle a lo que Link también le sonrió.
- No tiene porque agradecer princesa.
- Claro que si, si no hubiera sido por aquello, no quiero imaginarme lo que esos bandidos hubieran hecho conmigo. A demás, también quisiera agradecerte por ayudarme a entrenar con la espada, no se como podre pagártelo.
- No es necesario que me lo pague princesa, lo hago con gusto.
- Aun así gracias.
Luego de esas palabras, los jóvenes comenzaron a observar el cielo pero a diferencia de la princesa, quien miraba maravillada como las estrellas iluminaban aquel cielo oscuro, Link solo lo veía con nostalgia pues aquel momento del día era el que le hacia recordar con pesar aquel día en el que que había muerto su madre, recuerdo que no dejaba de invadir su mente cada día.
Luego de unos minutos había llegado ya el momento de que ambos se tenían que retirar pues el día de maña iba a ser pesado tanto para Link como para la princesa.
Se levantaron de la banca y se dirigieron a la puerta pero luego, sin fijarse por donde caminaba la princesa había tropezado pero en lugar de sentir el frío suelo de piedra sintió como los brazos de Link la agarraban de la cintura evitando su caída.
Sus cuerpos estaban a solo centímetros uno del otro, sus respiraciones chocaban entre si y sus labios casi al punto de rosarse, además que no podían evitar perderse en los ojos del otro, pues para ellos era algo atrayente pero a pesar de ello ninguno tenia idea del porque, simplemente, no podían evitarlo.
- L-Link - susurro inconscientemente.
- Z-Zelda - dijo de igual manera que la princesa pero sin darse cuenta de que la había llamado simplemente por su nombre en lugar de llamarla por su titulo.
Por su parte la princesa no pudo evitar sonrojarse al escuchar que el joven que tenia enfrente la había llamado solo por su nombre cosa que no la molesto en lo absoluto.
- Te-ten cuidado - añadió torpemente mientras trataba de salir de su trance.
- Lo siento, no me fije por donde caminaba - respondió evitando ver al joven para igual salir de aquel trance.
Se separaron y luego salieron del campo de entrenamiento para eventualmente despedirse e irse a sus aposentos.
...
Al llegar a su habitación, Link se echó sobre su cama tapándose la cara con las manos pensando en lo sucedido. Sentía como una serie de emociones y pensamientos desconocidos lo invadían. Por extrañas razones tenia el deseo de que aquello no hubiera terminado, de seguir deleitándose con mirar esos tan profundos ojos que parecía que en ellos ocultaba múltiples secretos los cuales tenia el deseo de conocer. Pero por otro lugar sentía como si no hubiera sido esa la primera ves que tenia dicho acercamiento con ella o como si aquello hubiera sido mas que solo haber evitado una caída de la princesa.
Después de sacar (difícilmente) aquellos pensamientos fue a tomar una ducha y luego irse a dormir.
...
A la mañana siguiente Link se encontraba en el campo de entrenamiento junto con otros soldados quienes eran un poco mayores de rango que el pues hasta el momento Link había sido el único recluta que tenían pero a pesar de eso demostraba perfectamente cada una de sus habilidades derrotando a la mayoría (por no decir que todos) de los oponentes que se le presentaban.
En ese momento mientras se enfrentaba a otro caballero la princesa quien se encontraba supervisando el entrenamiento de los caballeros no le quitaba ni un segundo la mirada de encima pues le atraía y a la vez le sorprendía ver la experiencia de Link con la espada además de que usaba técnicas que ni siquiera enseñaban a los reclutas.
Ajeno a la mirada de la princesa Link seguía combatiendo contra su oponente dando ataques rápidos que lograban confundir al soldado, hasta que decidido a terminar con su combate lanzando dos ataques verticales haciendo retroceder al oponente y luego dando un salto golpeo al caballero en la cabeza dejándolo tirado en el piso.
En cuanto termino su combate sintió como si estuviera siendo observado por alguien. Rápidamente comenzó a buscar con la mirada hasta que sus ojos se posaron en la persona menos esperada pues en una de las paredes se encontraba la princesa quien al ver que había sido descubierta en su inconsciente acto simplemente se limito a sonreírle a lo que el joven algo dudoso le devolvió el gesto.
A Link no solo le sorprendía ver que era Zelda la que lo estaba observando sino que también que no se encontraba su padre con ella. En ese momento inevitablemente recordó aquel acercamiento que tuvo con la princesa la noche anterior, aunque no era el único pues al igual que el la princesa también comenzó a recordarlo, como sus cuerpos estaban tan cerca uno del otro tanto que hasta podía escuchar y sentir los latidos acelerados de su corazón, como sus respiraciones chocaban entre si, como se perdía en aquellos ojos azules del joven y como su labios estaban tan cerca casi como al punto de rosarse.
Se siguieron mirando por unos segundos hasta que luego se le había presentado otro combatiente a Link. El joven continuo con su entrenamiento mientras Zelda no paraba de observarlo, minutos después Link seguía y seguía venciendo a cualquier caballero que se enfrentaba. Luego un soldado se dirigió a ella informándole que su padre la había llamado a una reunión con el consejo y el capitán de la guardia. Ella solo asintió pero antes de irse miro una vez mas a Link quien seguía concentrado en su entrenamiento. Se volteo y siguió al soldado que la llevo hasta la sala de juntas.
...
Al llegar vio que ahí ya se encontraban el consejo el capitán y su padre. Se sentó en una silla y luego su padre hablo.
- Bueno, ahora que todos estamos aquí iré directo al grano. Los reuní aquí para discutir un asunto que probablemente muchos aquí presentes considerarían absurdo e incoherente, pero ayer, antes de que ocurriera el ataque el sabio de la luz me había comunicado por telepatía que... el héroe elegido esta en Hyrule, y como ya lo escuchamos del brujo, se encuentra en este mismo castillo.
- Mi rey, estamos conscientes de lo que el brujo supone afirmar, pero si así fuera, ¿Como sabremos que es cierto?
- Seria imposible que ese "héroe elegido por las diosas" este aquí pues como dice la leyenda Hyrule siempre se a valido así mismo.
- Tal ves la leyenda esta mal, tal vez haya alguna posibilidad de que el héroe elegido si exista.
- Y supongo que su plan es encontrar a dicho héroe ¿cierto? - intervino el capítan.
- Así es.
- Pero esto ya lo habíamos intentado una vez y no apareció.
- Pero esta vez sabemos que ahora se encuentra en Hyrule, puede que tengamos la oportunidad de encontrarlo - hablo ahora Zelda.
- Es cierto. Antes no sabíamos donde se encontraba, pero ahora lo sabemos y se encuentra en este mismo castillo.
- Y además esta es la única opción que nos queda, pues a medida que pasa el tiempo perdemos mas y mas soldados tras cada batalla y si seguimos así Hyrule caerá muy pronto. Así que, ¿que dicen?
- Bueno, viendo la situación supongo que sería lo mejor que podamos hacer.
- Entonces esta decidido, comenzaremos la búsqueda del héroe a partir de este momento.
- Bien, comenzaremos con buscar entre los soldados. Pueden retirarse.
Una vez terminada su reunión todos salieron de la sala a excepción del rey y el capitán quienes se habían quedado para discutir sobre el plan.
...
Mientras tanto, la princesa se encontraba recorriendo los pasillos del castillo pensado en el plan que se llevaría acabo para encontrar al héroe elegido. La princesa estaba tan sumergida en su pensamientos que sin darse cuenta había llegado a la entrada de los jardines del castillo. Se detuvo un momento y luego decidió entrar pero en cuanto abrió un poco la puerta pudo escuchar que desde el interior de los jardines alguien estaba entonando una canción aunque por el sonido se sabia que no provenía de un instrumento.
Entro lentamente al jardín mientras se deleitaba por la hermosa música que oía en aquel jardín. Confundida y llena de intriga se acerco con discreción para saber de quien eran tan hermosas notas...
