Bueno, los personajes no me pertenecen, si no a su creador Masashi Kishimoto
Capítulo dedicado a Darcy Tattiana Contreras por su cumpleaños, espero te guste.
Aclaraciones: Sasuke y Hinata tendrían 16 años en la historia.
En la historia Sasuke no es una buena persona *Ni lo será*, ya que ya fue consumido por la oscuridad por ponerlo de alguna forma, por el momento no hará cosas buenas, sino todo lo contrario. Ya llegará la hora que pague sus crímenes, pero advierto que no será pronto.
ADVERTENCIAS
Lenguaje fuerte y vulgar, situaciones relacionadas a sexo, violación, tortura física y psicológica, así como violencia gráfica.
Helheim
Cada vez le costaba más seguirle el paso, sentía como la respiración se le cortaba y le costaba seguir respirando. Sin poder aguantar el ritmo, se detuvo, recargando su mano sobre una rama cercana, tratando de meter aire en sus pulmones.
− ¿Qué estás haciendo?
No pudo evitar brincar ante el tono hosco con el que el moreno le había hablado.
− L-Lo s-siento – Dijo aun recargada en el árbol – P-Pero no puedo r-respirar
Sasuke se acercó a ella con paso lento, viéndola fijamente mientras la chica bajaba la mirada algo sonrojada.
− ¿Hace cuánto? – Preguntó aun con voz molesta
Hinata se negó a verlo y desvió un poco su rostro, aun viendo al suelo, mientras daba un leve golpe con su dedo índice en la rama que aun sostenía.
− U-Una hora a-aproximadamente
Sasuke la tomo del cuello, sin apretarla, y la chica en automático llevó su mano que se agarraba a la rama a uno de los brazos del moreno, mientras la otra cubría su abdomen.
− ¿Por qué no me dijiste? – Espetó con el Sharingan activado
Ella tembló ante esos ojos.
− L-Lo s-s-siento – Musitó con el rostro pálido – N-No q-quería m-molestarlo
Sasuke la observó detalladamente, viendo la mano que cubría su vientre.
− Tsk
Hinata tembló con más fuerza.
− S-Solo d-debemos i-ir m-más l-lento – Pidió
Sasuke la jalo hacía él, haciéndola trastabillar y caer sobre su pecho, luego la abrazó de la cintura, mientras la chica aún seguía temblando por completo.
− N-No…
− Cállate – Espetó – Sujétate
Hinata se aferró a sus brazos al sentir el aire frío rodeándolos.
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Gai puso su mano sobre el hombro de Neji, el castaño lo miró unos momentos antes de bajar la mirada con culpa.
− Lo siento – Murmuro
El hombre dio un suspiró, esa pérdida le calaba en el alma, pero debía ser fuerte por sus alumnos.
− No fue tu culpa – Mintió – Son cosas que pasan
Neji aun miraba al suelo.
− Desobedecí mis órdenes, e hice que ellos también lo hicieron
Gai volvió a suspirar.
Podía ver a Shino y Kakashi ocuparse de todos los detalles concernientes al cuerpo de Lee, y en ese momento agradeció que la Hokage los hubiera mandado con él, ambos eran silenciosos y eficaces, no hacían preguntas incomodas, sabían que llegaría el momento de contestarlas, y les estaban dando su espacio.
− ¿Cómo está Tenten?
Neji tembló ligeramente, como si fuera a empezar a llorar.
− No me habla – Dijo con un murmullo
Gai lo miró unos segundos más, no encontraba las palabras para animarlo cuando él mismo no podía dejar de culparlo también.
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Entró con sigilo en la oficina, la doctora no estaba presente, y se tardaría en volver.
Algo no encajaba en el comportamiento de Sasuke y de Hinata, la insistencia del moreno a que ella permaneciera con él, haciendo lo que ella le pedía, incluso perdonando la vida de Neji, eso no encajaba con el Sasuke que todos conocían. No con el que mató a Sakura, a Chouji y a Lee.
Miró los expedientes, haciendo un esfuerzo por recordar la conversación con la doctora, no había llamado a Hinata por su nombre real.
−Miyumi Takumi – Dijo en voz baja recordando
Rebusco entre los expedientes hasta encontrar el que buscaba, abriendo y prendiendo la lamparilla de noche que estaba en la mesa.
Miyumi Takumi
Prueba positiva, 3 meses de embarazo
Casi dejo caer el expediente al leer esa nota, y lo apretó con manos temblorosas, eso podría explicarlo todo perfectamente.
El comportamiento de Hinata, la posesividad que Sasuke tenía sobre ella, la resistencia de la Hokage a que fueran tras ellos, ella debía saberlo, ella sabía que Hinata estaba embarazada, por eso les había pedido que llevaran a Neji de regreso.
Pero Neji no lo sabía, tampoco Hiashi Hyuga, estaba segura, de ser así ya hubiera mandado a medio clan tras ellos.
Siguió pasando las páginas de ese expediente, era su primer chequeo, y las cosas parecían ir normales, aunque se recomendaba mucho reposo para la mujer. Vio las notas de la doctora sin poder creerlo.
"El esposo luce muy preocupado, la paciente es muy tímida, por lo que todas las instrucciones se le dejaron a él. Se ha comprometido a seguir el tratamiento al pie de la letra."
"Aún es pronto para saber el sexo del niño, aunque es bastante obvio que desean que sea un varón"
"La paciente se muestra preocupada por el Kekkei Genkai que pueda manifestar el producto, aunque aún es pronto para saberlo a ciencia cierta"
"Horas después de partir han venido un par de ninjas de la hoja a preguntar por ellos, eso explica el comportamiento de la pareja y la preocupación de la paciente respecto al Kekkei Genkai, seguramente huyeron de las normas del clan Hyuga. Personalmente no creo que vuelvan a la aldea, y espero que logren escapar, se nota que el esposo de la paciente está muy entusiasmado con la idea de ser padre."
La última nota la dejo de piedra, sus manos temblaban tanto que el expediente cayo de sus manos, segundos después ella se dejó caer sobre sus rodillas con un nudo en el estómago. ¿Hinata se había casado con el Uchiha? ¿Lee, Chouji y Sakura habían muerto por eso?
Las lágrimas se empezaron a desbordar por sus ojos sin poder evitarlo y los cubrió con sus manos, ¿Toda la aldea pagaría por que Hinata hubiera deshonrado su clan?
Segundos después se levantó con decisión, las notas lo habían dicho perfectamente. Sasuke estaba muy emocionado con la idea de tener un hijo, ella se encargaría de vengar a Lee, a sus amigos, y le quitaría esa alegría, jamás la iba a disfrutar.
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− ¡Gai-Sensei!
El moreno saltó ante ese grito y salto de la cama, se movía de forma errática, ya que la noche anterior apenas y pudo dormir por todo el dolor que sentía. Corrió hacía la puerta para ver a Neji con un semblante pálido.
− ¡¿Qué pasa?! – Preguntó asustado
− Tenten desapareció – Dijo el castaño agitado – Aburame-San ya está buscando su rastro
Gai asintió tratando de despertarse por completo y salió corriendo tras él, viendo a Kakashi y Shino en la entrada de la posada.
− ¿Qué pasa? – Preguntó con temor
Shino lo miró fijamente.
− El rastro de Tenten va hacía la clínica de la aldea, de ahí se pierde en el camino por el bosque, aun podemos alcanzarla si nos damos prisa
Neji miró a Shino por unos segundos.
− ¿Qué buscaba en la clínica?
El de lentes ya empezaba a caminar hacía la entrada de la aldea.
− Posiblemente unas provisiones – Mintió – Hay que darnos prisa
Los demás lo siguieron con paso presuroso, pero el ninja de lentes se detuvo en la entrada.
− Creo que deberían escoltar el cuerpo a la aldea – Dijo con calma – Kakashi-Sensei y yo podemos ocuparnos
Gai miró al chico con duda.
− No voy a dejar sola a mi alumna – Casi espeto
Kakashi le miró conciliador.
− Creo que Shino se refiere a que están cansados – Dijo viendo a Neji – Será mejor dividirnos, puedes acompañarlo, y yo llevare a Neji de regresó junto con el cuerpo de… - Se detuvo al ver la cara de dolor de Gai – Su cuerpo
− Gracias – Musito Gai siguiendo a Shino
Neji no miró a Kakashi, si no que tenía el rostro gacho y los puños apretados, Kakashi le puso una mano sobre su hombro.
− Vamos – Dijo empujándolo levemente – Debemos irnos
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− Esta estable – Dijo la enfermera llevándolo hasta la cama donde Hinata estaba recostada – Más tarde se le dará el alta, le recomendamos que descanse, los primeros meses son los más difíciles
El moreno asintió, viendo a la sonrojada chica mirar su plato de comida.
− Gracias – Dijo a regañadientes y la enfermera les dejo solos – ¿Te sientes mejor?
La chica asintió, aun viendo su comida.
− S-Si – Susurro
− Entonces come
Hinata asintió con rapidez, llevando una cucharada a su boca con lentitud, realmente disfrutando la comida, hacía mucho tiempo que no podía comer como en esos momentos.
− Iré a rentar un cuarto – Dijo el moreno sobresaltándola un poco – No hagas nada estúpido
La chica asintió con la boca llena y vio al moreno salir de la habitación, casi dio un suspiro de alivio y volvió a su comida con felicidad, esas palabras significaban que dormirían sobre una cama, no en una cueva.
Parecía una tontería alegrarse por eso, pero de verdad necesitaba un descanso de toda esa situación.
Su corazón aún se oprimía al pensar en Neji y que debería odiarla como nunca, y nadie tenía la culpa más que ella, si hubiese puesto atención hubiera podido evitar esa pelea, ese encuentro y esas mentiras, pero ya no había vuelta atrás, ahora su primo creía que quería estar con Sasuke.
Se tomó el abdomen con ambas manos, sintiendo ese pequeño flujo de chacra que tantos dolores de cabeza les estaban dando, y aun no nacía, aunque aún le preocupaba el poder ocular que tendría, tenía que permanecer serena por el bien de su hijo.
Desecho todos sus pensamientos de golpe, por el momento se concentraría en comer, y disfrutar de ese pequeño momento de paz.
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− ¿Está segura de esto? – Preguntó Shizune
La rubia casi maldijo, quiso gritarle que no, que era lo último que quería, pero que no tenía otra opción.
− No sé qué más hacer
Shizune la miró y bajo la mirada.
− Si usted decidiera pelear con él, sé que le ganaría
Tsunade estuvo a punto de bufar.
− Pudo haber sido así en otro momento – Dijo apretando sus puños – Pero no después de lo de Hinata
Shizune la miró unos momentos, analizando sus palabras.
− ¿Creé que está enamorado de ella?
La rubia negó con la cabeza con rapidez.
− Casi puedo jurar que no, pero… tiene una fuerte obsesión por ella, que solo empeora con la sangre Uchiha en él
Shizune la miró con pesadez.
− Pero esto…
− ¡Lo sé! – Gritó la rubia, y luego bajo la mirada – Lo sé, sé que la estoy condenando, pero por el momento no tengo otra opción… tal vez cuando todo lo de Akatsuki pase… podamos… − No terminó sus palabras, esas decisiones que tenía que tomar, hacían mella en toda su alma – Si esto sigue así me quedaré sin ninjas – Dijo en un susurro – El clan Hyuga iniciara revuelta si se llega a saber… Todo…
Shizune puso su mano sobre el hombro de su maestra.
− Tiene mi apoyo – Dijo Shizune trayéndola de regresó a la realidad
La mujer la vio con dolor en su mirada, sus decisiones tal vez no fueran las mejores, pero no podía hacer nada más por el momento, tenía que proteger a la aldea, aunque eso implicara el sacrificio de una buena Kunoichi.
− Avísale a Ibiki que deberá partir en cuanto Gai regrese
La morena asintió, aun sin soltar a la Hokage.
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Miró al rubio con duda, desde hace días que lo había notado mirándolo detenidamente, pero no sabía que le pasaba por su cabeza.
− ¿Qué? – Dijo un poco brusco
El rubio se sentó en el sillón sin su permiso.
− Quiero respuestas
El Nara le vio con el ceño fruncido.
− ¿Respuestas de qué?
El rubio le miró fijamente.
− ¿Por qué el Teme se llevó a Hinata-Chan?
El Nara abrió los ojos por completo, con la boca seca, nunca había visto a Naruto tan serio como en esos momentos.
− ¿Por qué crees que se algo? – Preguntó molesto
El rubio aún conservaba la seriedad en su mirada, algo rara vez visto en él.
− Por qué te dejo vivir
El Nara no pudo ocultar la reacción de sorpresa.
− A ti también
El rubio hizo un chasquido con la lengua.
− Él la tenía – Dijo con calma – Tenía esa bandana que Ino hizo que se quitara en la muñeca – Apretó los puños – Sakura-Chan lo enfrentó, pero le dijo algo que la distrajo y…
Shikamaru pudo ver el dolor en la mirada del rubio, así como la culpa.
− No podías hacer nada – Dijo con calma – Sasuke…
Se detuvo de golpe, ¿Qué diría? ¿Sasuke tiene algo que proteger? Aunque en cierta forma así era, ese sentimiento era tan extraño, Sasuke protegiendo algo que había plantado por la fuerza. Cerró los ojos con fuerza y apretó los puños, recordando los sollozos y las suplicas de Hinata mientras él estaba ahí, tirado, sin poder hacer nada para ayudarla.
− No sé qué pueda ser – Mintió el Nara – Le sigo insistiendo a la Hokage que me deje ir tras ellos pero… dudo que después de lo de Lee
Naruto asintió bajando la cabeza.
− Le había prometido a Sakura-Chan que lo traería de regreso… pero…
− Lo sé
Ambos bajaron la mirada sin decir nada más, no tenían nada que comentar después de todo.
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Se recostó con calma sobre esa cama, Sasuke había salido, y ella podía estar tranquila por unos momentos. Escucho la puerta abrirse y vio al moreno entrar por ella con calma, lo miró unos segundos antes de acostarse con rapidez, dándole la espalda.
− Nos quedaremos unos días – Dijo Sasuke caminando hasta la cómoda y dejando una bolsa sobre ella
Hinata le miró de reojo, mientras veía al moreno caminar de un lado para el otro en esa habitación, dejando unas cosas por todos lados. Su cuerpo entero se tensó al sentir que se había sentado en la cama.
− Siéntate – Ordeno
La morena lo pensó por unos segundos y luego se sentó con lentitud, aun le daba la espalda.
Lo sintió moverse en la cama, pero ella se resistió a mirarlo.
− Gírate
Lo hizo a regañadientes, con la mirada gacha, temiendo todo lo que pudiera pasar después de esa noche en la que la había metido en un genjutsu.
− Mírame – Dijo molesto
Hinata apretó los puños, y luego levanto su mirada hacía él, aun con miedo, Sasuke la miraba fijamente, pero sus ojos aun eran negros.
− Tonta – Dijo jalándola del brazo
Hinata chilló cuando cayó sobre su pecho, sintiendo las manos de Sasuke levantarla de la cintura, haciendo que sus rodillas quedaran a cada lado de sus piernas, la chica apretó sus manos en los hombros del moreno, temblando levemente, pues podía sentir el miembro duro del moreno contra su intimidad.
− L-La d-doctora d-dijo q-qué t-tenía q-que…
Se interrumpió cuando Sasuke la tomo de la nuca y la beso, sobresaltándola por completo. El moreno mordisqueo sus labios y luego metió su lengua en su boca, moviéndola contra la de la morena, que apretó su agarre en sus hombros.
− Cállate – Dijo cuándo se separaron
Hinata lo dejo hacer cuando le quito la playera, aunque temblaba, Sasuke se estaba portando muy calmado.
Cerró los ojos y apretó los puños en sus hombros nuevamente cuando lo sintió empezar a lamer sus pechos, mordiéndolos levemente y chupándolos después, comenzó a jadear y se mordió sus labios, al menos no dolía.
− Baja – Le dijo el moreno moviéndose bajo ella – Haz lo que me gusta
Hinata lo miró con duda unos momentos, antes de sentir como el chico la empujaba hacía atrás levemente, dejando ver su miembro.
La morena apretó sus manos contra su pecho, viéndolo con temor, sabiendo lo que se le avecinaba después de eso.
Bajo lentamente su boca hacía el miembro de Sasuke, que comenzó a jadear y gemir, poniendo su mano sobre su cabeza y moviéndola contra él, Hinata se limitaba a mantener su boca abierta mientras el moreno la movía. Sasuke sonrió cuando la sintió presionar sus piernas con sus manos.
La separó y la volvió a poner sobre él, la chica apretó sus manos sobre sus hombros una vez más, el moreno le quitó el pantalón y lo arrojo a un lado de la cama, haciendo que la morena abriera las piernas. Hinata apretó sus manos sobre sus hombros una vez más cuando Sasuke la penetro con lentitud, Sasuke gimió en su oído y la subió y bajo de golpe.
− A-Abajo – Susurró la morena – P-Por f-favor
Sasuke la miró confundido, la morena tenía los ojos cerrados y los labios apretados.
− ¿Qué? – Dijo confundido
Hinata abrió los ojos, mirándolo con suplica.
− A-Así d-duele m-mucho – Gimió con lágrimas en los ojos – S-Si m-me p-pone…
Sasuke la besó, sobresaltándola, antes de darse la vuelta y dejarla en la cama bajo él.
− Tonta – Le dijo de nuevo
Hinata cerró los ojos, sintiendo los movimientos de Sasuke sobre ella, que aunque eran dolorosos, no lo eran tanto como estar arriba. Abrió sus piernas lo más que pudo, tratando de mitigar el dolor que el moreno le causaba.
− ¡L-Lento! – Dijo sobresaltada cuando lo sintió aumentar la velocidad
Sasuke la besó nuevamente, mordiendo su labio y sonriéndole con sorna.
− Puedo hacer lo mismo que la vez pasada – Dijo aun sonriendo
Hinata negó con la cabeza rápidamente.
− N-No – Dijo apretando su agarre en sus hombros
El moreno sonrió, paseando sus manos sobre su abdomen, antes de bajarla a su intimidad.
Hinata trató de cerrar los piernas, y luego clavo sus uñas en la espalda de Sasuke, mordiendo su cuello en un intento de detenerlo, cosa que solo hizo que Sasuke sonriera con malicia.
− ¡No!
Escucho el gritó de Hinata, pero no dejo de mover su mano sobre su clítoris, gimiendo cuando su miembro se deslizó con mayor facilidad al sentir la humedad de la morena.
Hinata lo jalo del cabello y aumento la presión en sus dientes, sacándole sangre a Sasuke, que solo gimió ante eso y se movió con más rapidez, aumentando también el movimiento de su mano.
Su otra mano fue hasta la pierna de la morena y la enredo en su cadera, sintiendo como está se removía contra él, en un intento de frenar ese orgasmo. Sasuke soltó su clítoris, y se movió con rapidez contra ella, que soltó el agarré de sus dientes y lo abrazó por el cuello, llorando quedamente. Se había asustado demasiado.
− Exagerada – Jadeo el moreno moviéndose con fuerza
Hinata simplemente se limitó a abrazarlo, aun con la pierna en la cadera de Sasuke, ya que cuando quiso bajarla el moreno la retuvo ahí.
Lo escucho gemir y luego sintió caliente dentro de ella, Sasuke se dejó caer sobre ella, que aún seguía abrazándolo.
Hinata llevó su mano hasta la herida del moreno, que aun sangraba, y la presiono con calma.
− Lo siento – Dijo en voz baja
Sasuke la miró con extrañeza, ¿Ella se disculpaba con él? Negó con la cabeza y se separó con calma mientras la besaba.
− Mañana nos vamos a casar – Dijo en su oído
Hinata se sentó de golpe y lo miró con pánico, el moreno la jalo del brazo e hizo que se acostara sobre su pecho.
− P-Pero…
− Cállate, no te lo estoy preguntando
Hinata lo miró con pánico una vez más, el moreno la ignoro, apretándola contra ella.
− No sé por qué haces tanto alboroto – Se quejó – Llevas a mi hijo
Hinata no dijo nada por unos segundos.
− ¿Sasuke-San? – Dijo con miedo
− ¿Qué?
Hinata guardo silencio por unos segundos, como buscando las palabras.
− ¿Nos vamos a quedar aquí?
Sasuke acaricio su espalda, causando un escalofrío de terror en la mujer.
− No – Dijo con calma – Pero ya tengo en mente el lugar donde nos quedaremos
Hinata ya no dijo nada más.
Y fin. Por ahora.
Helheim o Hel, es conocido como el reino de la muerte y se encuentra en la parte más profunda, oscura y lúgubre de Niflheim, uno de los nueve mundos del Yggdrasil, en la mitología nórdica. Estaba gobernado por Hela, monstruosa hija de Loki, y la entrada era custodiada por un perro conocido como Garm. Helheim y Niflheim suelen relacionarse como el mismo mundo, pero esto no es así: Niflheim es el reino del frío, el hielo y la oscuridad, principalmente, y, aunque también son propias en él, la muerte y la perdición, donde se dan estas dos últimas específicamente es en Helheim, la capital de la muerte *Nombre puesto por ElizaSher*