La herida de Gaara no era grave pero si no lo dejaba pelear con toda su habilidad, de donde había venido esa técnica pensó. No pudo ser Sasuke que usaba todo el resto de su poder para mantener el esqueleto del susanoo y Kisame seguía pasándola mal contra los guardias de Mei. Solo quedaba Orochimaru pero que tenía que ganar él hiriéndolo… salvar a Sasuke? No lo entendía. A pesar de esta herida pudo manter al joven Uchiha al margen de la pelea en la arena. Son embargo, presenciar la muerte de tantos ninjas conocidos y amigos tan cerca de él lo estaba afectando. El mismo Sasuke había empezado a preocuparse, y no era por la muerte de sus compañeros. La sangre de su clan lo conectaba con Madara de cierta formar que hasta ese momento no había entendido, el poder de la leyenda Uchiha era tan grande que cada vez que mostraba sus habilidades sentía como su poder era succionado. Sasuke intentó en un principio evitarlo pero rápidamente entendió que no era rival y que lo único que podía hacer era huir de ahí, pero su orgullo se lo evitaba. Si tenía que morir sería ahí, peleando. Mei rápidamente cauterizó la herida de Gaara y regreso a su lugar para terminar con Kisame de una vez por todas y dejarlo todo contra Madara.

De pronto, una vez más esa energía sombría que había sentido cuando Guy peleó contra Madara volvió a aparecer.

Arena de combate

Hinata detuvo sus ataques y le dio una señal a Neji para que se detuviera. Madara no salía de los escombros pero se escuchaban sus alaridos. Nejituvo que desactivar su byakugan, no podía soportar lo que estaba viendo emanar del cuerpo de su enemigo. Hinata hizo lo mismo y retrocedió para ubicarse al lado de Naruto, este no se inmuto. La muerte de Guy y Kakashi no fue en vano y aunque los dos ya no estaban más su técnica seguía latente. Del estómago de Madara emanaba un humo purpura que lo estaba haciendo enloquecer, la imagen que el byakugan veía era la de los dos jounin, Kakashi y Guy, siendo torturados dentro del estómago del Dios de la Muerte y este a su vez empezaba a devorar a Madara desde adentro. Los dientes del Dios de la Muerte poco a poco empezaban a despedazar una figura de chakra similar a la de Madara.

Madara (pensando): creí que me había deshecho de esta técnica… nunca pensé que alguien tuviera este tipo de resolución. No me queda otra cosa que liberar la técnica que me mantuvo tanto tiempo con vida. No creo que deba preocuparme… aunque mejor aguantemos un poco más.

Madara hizo explotar las ruinas y salió caminando, se le notaba cansado y sudoroso, algo inimaginable hasta hace unos minutos. Pero cada paso que daba era más lento que el anterior, su mirada no estaba fija, se le veía distante.

Madara: ha llegado que sean útiles a la causa de Akatsuki!

El Uchiha hizo unos sellos y los anillos en las manos de Sasuke y Kisame empezaron a desintegrarse, convirtiéndose en polvo. Esto forma una pequeña nube que los empezó a cubrir y a asfixiarlos. Ambos ninjas perdieron el control de sus cuerpos y cayeron como si estuvieran muertos. Madara extendió cada mano hacia donde estaban aquellos dos ninja y los atrajo hacia su persona. Ambos seguían concientes pero inmóviles, ambos con expresiones distintas.

Sasuke sentía odio por lo que sucedia y por primera vez en mucho tiempo, Kisame sentía miedo. El tiburón no sentía que lo habían traicionado pero no podía pensar que tipo de infierno le esperaría al ser devorado por Madara.

Orochimaru (pensando): si no hubiera cambiado de cuerpo cuando me fui de Akatsuki yo también estaría como ellos.

Madara se apoderó de la energía vital de ambos ninja y apaciguo por el momento el hambre del Dios de la Muerte, más adelante lidiaría con esa molestia pensó. Los pocos minutos que habían pasado fueron fugaces para Neji y Hinata. Naruto seguía sin dar señales de vida, su mirada enfocada en el piso, un cuerpo que se mantenía por voluntad propia más que nada.

Madara: donde nos habíamos quedado?

Sin más enemigos que Madara en la arena de combate, dos mujeres se pusieron al frente de Madara. Mei y Tsunade cayeron desde el cielo levantando una gran nube de polvo, segundos después Ao y Choujiro cayeron a ambos extremos. El único que quedaba solo en las tribunas era Orochimaru. Tsunade no había superado su odio pero entendió que sus rencor podía esperar y más importante era detener a aquel monstruo, si ellos morían nadie podría salvar al mundo de esa amenaza.

Orochimaru (pensando): esto ha llegado mucho más lejos de lo que esperaba y con Sasuke ligado a la voluntad de Akatsuki su cuerpo no me sirve para nada. No tengo otra alternativa…

Al medio de las dos Kages cayó Orochimaru.

Orochimaru: el objetivo de mi vida tendrá que esperar, veamos cuales son mis límites. Después de hoy yo seré recordado como el mejor ninja de la historia.

Y mirando a Tsunade ambos asintieron… los viejos compañeros trabajarían juntos solo por esta vez. Orochimaru abrió la boca y la espada Kusanagi salió. Supongo que la reconces… como muy pocos en el mundo, la Serpiente atacó a Madara. Mei vio a sus guardaespaldas… no se necesitaron palabras.