N/A: Estoy en racha. Dos capítulos en menos de una hora :)

Disclaimer: este fandom no me perteneces blahblahblah no soy GRRM blahblahblah.

Aviso: Este fic participa en el Reto#92:El malo de la película, del foro Alas negras, palabras negras.

Capítulo 2: Hoy no.

-Hoy no. Hoy no. Hoy no.

Arya Stark repetía esas palabras una y otra vez mientras corría por los oscuros túneles de Desembarco del Rey que conocía tan bien. Estaba asustada, ¿por qué habían venido a buscarla soldados de los Lannister? ¿Dónde estaba su padre? ¿Qué estaba pasando? Aunque lo peor de todo era la sensación de que aquello que estaba haciendo era lo incorrecto. Debería haberse quedado y pelear con Syrio Forell. Se suponía que las clases eran para eso, ¿no? Para aprender a usar la espada y saber defenderse en ese tipo de situaciones. Sus inicios habían sido desastrosos, pero estaba mejorando notablemente, ya no le dolían ni la muñeca ni el brazo cuando sostenía la espada (solo por las noches), ya no era tan lenta (aunque seguía tropezando y besando el suelo más veces de las que le gustaría admitir).

Y la primera vez que se enfrentaba a una prueba de verdad, salía corriendo mientras su profesor se enfrentaba a los guardias y moría protegiéndola como una damisela en apuros. Algo que ella no quería ser, y sin embargo una vez que había empezado a correr no había podido parar. Por mucho que le latiera el corazón, por mucho que le costara respirar o tuviera flato, por mucho que tuviera una sensación de agonía encima, no era capaz de parar, dar media vuelta y pelear.

Por mucho que supiera que no era eso lo que hacían los soldados, su instinto de supervivencia era mayor.

Cuando tuvo a Aguja con ella se sintió algo mejor. Con una espada de verdad podría hacer algo más que correr, ¿verdad? Pero no se sintió mejor después de matar a ese niño gordo que había intentado matarle, ¿no se suponía que debía proteger a la gente antes de matarla? ¿Pero entonces que había de proteger su propia vida? Las cosas no estaban mejorando y su sensación de malestar no hacía más que crecer. Ella, que se jactaba de ser una orgullosa Stark, hija de Ned Stark, gran guerrero, señor de Invernalia y Mano del rey; sentía que correr no era la mejor forma de servir a su casa y defender lo que era suyo. Tampoco el marcharse de Desembarco del Rey disfrazada como un chico con Aguja como única compañera, ¿no debería vengar la muerte de su padre?

Odiaba esa sensación. Odiaba descubrir que en realidad era muy poca cosa y aún le quedaba mucho camino por recorrer. Odiaba ver que todos tenían razón al tratarla como una niña, porque en el fondo lo era; una chiquilla lejos de su hogar, lejos de todo lo que le era querido y conocido y lejos de ser lo bastante fuerte como para marcar la diferencia. No obstante en medio de esa nube de malestar, incomodidad y malos pensamientos con la que cargaba, se dio cuenta de un dato importante: seguía viva.

Había desbaratado los planes de la reina, con ayuda sí, pero el caso es que seguía viva y puede que con el tiempo y el entrenamiento adecuados, hubiera un día en el que pudiera marcar la diferencia. Hacer algo y no sentirse tan culpable. Pero aún quedaba mucho tiempo para que se cumpliera ese deseo, de momento lo único que podía hacer era seguir viviendo. Y esquivando a la muerte con la ayuda de dos palabras:

-Hoy no.

Lo dicho, estoy en racha 0:)
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