Disclaimer: Ni Dragon Ball ni sus personajes me pertenecen, son obra exclusivamente de Akira Toriyama y Toei Animation, yo solo los uso para dar rienda suelta a mi imaginación.


Dia 3: Matrimonio.

— Estas hermosa amiga. — alabo Iresa arreglándole el velo, la morena solo sonrió algo avergonzada, ya era el momento. Iba a casarse.

Y esta vez no se equivocó al elegir a su pareja, Gohan era un hombre maravilloso, amable, atento, cariñoso, respetuoso, inteligente, serio, responsable, caballeroso… en fin, tenía tantas cualidades que ni sentándose toda una tarde a escribirlas acabaría.

Suspiro apesadumbrada recordando su anterior matrimonio, esperaba no desilusionarse.

— Videl, no pienses en Barry, ese idiota se va a arrepentir de haberte dejado; Gohan es diferente, no te preocupes.

— Te creeré Iresa, después de todo tú me lo presentaste. — dijo, luego una sonrisa apareció en su rostro.

Llegó la hora.

Cuando llegó a la iglesia vio al guapo hombre erguido, vestido con un traje color negro que le sentaba de maravilla, su cabello en punta le daba un aire extravagante, sonrió nerviosa, ¿Desde cuándo era tan cursi? Llego al altar del brazo de su padre quien miraba desconfiado a su prometido.

— Espero y tu si la valores niño, no hagas sufrir a mi hija o te las veras conmigo. — amenazó abiertamente sin importarle el lugar en donde se encontraba.

— No se preocupe señor Satán, yo amo a su hija más que a mi vida. — agarro la mano de su prometida y le sonrió, el progenitor suspiró rindiéndose.

— Hoy estamos aquí con el propósito de unir estas dos bellas almas que están destinadas a estar juntas, la señorita Videl y el joven Gohan, dos personas que se aman incondicionalmente, ¿Han venido aquí por libre consentimiento?

— Si padre. — respondieron con una sonrisa.

— ¿Prometen amarse y respetarse, estar en lo bueno y en lo malo, en la riqueza y en la pobreza, en la alegría y en la tristeza hasta que la muerte los separe? — pregunto de nuevo.

— Si padre.

— Joven Gohan, diga sus votos por favor.

— Yo Gohan, te tomo a ti Videl, como mi esposa, prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, amarte y respetarte todos los días de mi vida porque te amo.

— Señorita Videl, diga sus votos por favor.

— Yo Videl, te tomo a ti Gohan, como mi esposo, prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, amarte y respetarte todos los días de mi vida porque te amo.

— Con el poder que tengo y me confiere el señor, yo los declaro marido y mujer al venir hasta aquí y demostrar su amor frente a todos con devoción y sinceridad. Puede besar a la novia.

Ambos se acercaron al principio con timidez y luego con alegría, sellando sus labios con infinito amor, y en seguida la iglesia estallo en sonoros aplausos felicitando a la bella pareja.

Este matrimonio tenía un largo porvenir.


._.

Fin de la transmisión.